Hola a todos! Las historias siguen, estamos en pleno auge, esta historia la hice tras leer a natsuri1416 y lo que se viene los dejará sin aliento, quién será el protagonista es un misterio, pero adelante, lean que lo espíritus no están con ustedes, por ahora, y sin más qué decir… COMENZAMOS!

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Capítulo 24.
No asustes a los niños.

Lila estaba molesta, se había ofrecido a cuidar a esos pequeños demonios pero al final se había hartado de ellos. Mayormente de Manon, la chiquilla la comparaba con Marinette a cada momento y traía consigo una horrible muñeca de Ladybug que no soltaba por nada del mundo.

Que si Marinette bocadillos.

Que si Marinette jugaba con ella.

Que si Marinette le daba tontas muñecas.

Blah, blah, blah. Estaba harta.

Entonces sonrió, sabía qué hacer con esa pequeña impertinente.
-Niños, basta. ¿Es que no saben lo que les pasa a los niños ruidosos y malcriados?
-No. ¿Qué les pasa?- preguntó Noel y Lila dedicó una mirada maliciosa a Manon.
-Vengan y se los contaré...
Marinette, Alya y Nino llegaban al departamento de la morena.
-Siento haber interrumpido su cita.
-No te preocupes, perdóname a mí por no devolverte tus apuntes, Marinette.- se disculpó Alya.
-¿Y con quien dejaron a los niños? Me dijiste que estarías con ellos.
-Bueno... Le pedí a alguien más que me hiciera el favor.- al abrir encontraron las luces apagadas y escucharon la voz de Lila tenue en la oscuridad.
-Y entonces el monstruo al atrapar a esa niñita grosera y de coletas, le arrancó una a una sus extremidades para al fin comérsela entera. Y mientras más gritaba mejor era su sabor para el monstruo que al terminar tomó la muñeca de la niña.- Noel, Etta y Ella estaban fascinados, pero Manon estaba llorando de miedo abrazando su muñeca de Ladybug que Lila le quitó a Manon y tomando la cabeza a punto de hacer una atrocidad.- Y le arrancó la cabeza….
Las luces se encendieron, todos gritaron y Marinette vio furiosa a Lila.
-¿Que rayos les estas contando?
-¡MARINEEEEEETTE!- Manon se aferró a Marinette llorando.- Lila me dijo que por ser mala seré comida por un monstruo.
-¿Eso le contaste?- Marinette estaba furiosa pero Lila puso su mejor cara de inocente.
-Nada más estaba contando una pequeña historia de miedo. Etta, Ella y Noel no están llorando.
-Calma, Mari.- intentó calmarla Nino.- Sólo era una simple historia.
-No. Manon está aterrada. Y no me parece bien una historia de ese tipo para un niño.
-Oh, lo siento tanto.- se quejó apesumbrada Lila.- No sabía que Manon fuese tan asustadiza.
-¡Es una bebé!- se burló Noel y las gemelas se rieron, pero al ver la expresión de Marinette se callaron, ya que Marinette era muy buen niñera con ellas y no querían que se enojase.
-Marinette, tranquila. No la culpes.- intentó justificar Alya.- No pasa nada.- pero Marinette la fulminó con la mirada.
-La próxima vez que no puedas cuidarla llámame. Te lo juro, Alya...- Marinette le arrancó la muñeca a Lila y se fue molesta sin los apuntes. No importando si Alya la llamó varias veces, los dos amigos se miraron apenados pero Lila fingió consternación.
-Oh, cielos. No quería causar problemas.- al menos se había desecho de esa pequeña plaga, ya los otros eran más fáciles de tratar...

Alya y Nino se fueron a su cita, aunque Alya intentó llamar a Marinette para disculparse pero no recibiría respuesta esa noche. Lila pidió pizza, los enanos comieron y se fueron a ver televisión. Lila estaba mirando su celular de forma desinteresada, poniendo de vez en cuando comentarios mordaces sobre lo egoístas que eran Ladybug y Chat Noir al no entregar sus joyas a Hawk Moth y que ya no hubiesen akumatizados, cuando unas risitas de afuera la hicieron ver por la ventana. Al asomarse, vio del otro lado de la acera a Manon Chamack jugando en unas jardineras, riendo y tonteando con su muñeca. Era imposible no reconocerla, y más porque llevaba esa tonta muñeca de Ladybug.
-Oh, esto se pondrá bueno. Ya quisiera ver la cara que pondrá Marinette cuando la regañen por su idiotez.- fue a la lista de contactos que Alya le había dejado, el teléfono de Nadja Chamack estaba primero en la lista. Llamó sin demora y esperó hasta que contestó.
-¿Diga?
-Hola. Perdone, no me conoce pero me llamo Lila y necesito decirle que su hija Manon está sola en medio de la ciudad, aterrada y sin rastro de su niñera Marinette.
-Disculpe, pero creo que esta confundida.
-¡No, se lo juro! La estoy viendo y está sola y llorando en la calle la pobrecita, mientras que su niñera la abandonó de forma cruel e inhumana.
-Mira jovencita, no sé quién eres. Pero estoy con mi hija y su niñera.- reclamó molesta mientras cargaba a su hija saliendo de la panadería, Manon se veía feliz tras haber pasado un buen rato con Marinette.- Espera, ¿no fuiste la que le contó esa horrible historia a mi hija?
-Eh... ¡Numero equivocado!- colgó y miró de nuevo por la ventana.

Manon ya no estaba.
-¿Dónde te metiste pequeña plaga?- preguntó mirando por la ventana. Sin notar como detrás de ella, una pequeña niña idéntica a Manon la miraba con unos refulgentes ojos amarillos.
-No deberías asustar a los niños, o ellos te asustaran.- Lila se giró pero no había nadie allí. Fue a donde los niños que seguían viendo televisión.
-Ho-Hora de dormir.
-/ ¿Pero es lo más interesante?/- se quejaron las gemelas.
-¡No importa! ¡A la cama, ahora!- les gritó con los nervios crispados y después de que se fueran corriendo encendió todas las luces.- Estúpida Manon, estúpida Marinette. Ya me las pagaran, esto seguro fue cosa suya.- escuchó risas y se encogió en su asiento, apagando el televisor sin notar la sombra oscura sentada a su lado observándola.

…

Y… espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer, dejen review, nada de tomatazos, y sin más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!