Hola a todos! Seguimos asustando, y todavía muchas historias que contar tenemos. ¿Quién será el protagonista de esta historia? Todos lo conocen, y es hora que el villano tenga un buen susto. Ahora sí, y esperando que a futura ya haya especial de Hallloween de Miraculous. ¡QUE NOS LA DEBEN!... COMENZAMOS!

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Capítulo 27.
Despedida.

Esa noche Gabriel Agreste estaba trabajando noche debido a los pendientes por culpa de su doble vida. ¿Quién diría que ser un villano le generaría tanto trabajo?
-¿Padre?- Adrien le miraba desde la puerta.
-Puedes irte a dormir, Adrien.
-Ya es tarde. Si no te cuidas podrías enfermar como Natalie.- la preocupación de su hijo era notoria, y Natalie no estaría por unos días debido a "estar enferma".
-No lo haré. Ahora, ve a dormir, mañana tienes clases.
-Bien. Buenas noches, padre.- Adrien se fue adormir sin ver a su padre suspirar sintiendo el cansancio adueñarse de él. Comenzó a apagar su computadora y por un segundo le pareció ver de reojo a una mujer de cabellos oscuros en medio de su oficina. Alzó la vista y no había nadie. Se quitó los lentes y cerró sus ojos pasando por el puente de su nariz su pulgar e índice en un suave masaje.
-Mejor voy a acostarme o esto me pasara factura…

Se fue a su gran cuarto comenzando su meticulosa rutina de limpieza, duchándose y vistiéndose con un pijama de seda color morado, se cepilló los dientes, usó hilo dental, y al comenzar a hacer gárgaras, vio algo pasar a su derecha por el reflejo. Por reflejo escupió por el susto al espejo y se giró para ver quien había osado entrar. Pero no había nadie. Salió del baño buscando en su habitación pero estaba vacía.
-Nooroo.- el kwami estaba escondido bajo las almohadas muy asustado.
-Allí, allí.- señaló a la puerta de donde pudo ver parte de una larga cabellera negra desaparecer. Corrió hacia este y Nooroo le siguió. Llegó a las escaleras donde desde allí vio a una mujer de largo y fino cabello negros, pálida como la nieve vistiendo un vestido de noche color negro sin mangas. La mujer le daba la espalda.
-¡Quieta ahí! No sé quién eres o cómo entraste aquí. Pero voy a llamar a la policía ahora mismo.- habló con voz firme y sin miedo, pero esta no le hizo el mínimo caso, sino que giró su cabeza hacia el estudio, y en un movimiento completamente antinatural estaba en la puerta de este abriendo la puerta. Por un segundo se había quedado helado ante ese extraño caminar.
-¡Quieta allí!- la mujer volvió a ignorarlo y entró al estudio.

Gabriel corrió presa del pánico activando la seguridad. Las alarmas se activaron.

Desde su cuarto, Adrien se despertó sobresaltado y hasta Plagg no sabía qué hacer.
-¡Nos atacan! ¡Vienen a por mi queso! ¡Muerte antes que el entregar camembert!
-¡¿Qué ocurre?!- Adrien no podía imaginarse la razón de activar la seguridad.

Gabriel abrió la puerta de su estudio y vio con horror la entrada de su guarida abierta.
-Emilie... ¡Nooroo, Transfórmame!
Hawk Moth llegó a su guarida veloz sin importarle nada más que la seguridad de su esposa. No le importó romper la puerta del santuario. Porque la imagen de esa mujer enfrente de la capsula de su amada le heló la sangre al verla poner su mano sobre esta.
-¡No toques a mi esposa!
Estaba dispuesto a deshacerse de esa intrusa, desenvainó su daga dispuesta a herir, pero fue como si pasara el aire, un aire helado que lo envolvió y al volverse no había nadie. El villano miró a todos lados, pero el lugar estaba vacío… Dos frías manos aparecieron desde atrás a los costados de su rostro y sin preverlo sintió como las uñas de esa mujer se clavaban con fuerza en su carne y lo giraba casi desnucándolo, encontrando un rostro destrozado y ensangrentado cuya boca abierta, con dientes faltantes y colgantes, y el único ojo visible que casi estaba fuera de su cuenca, lo miraba fijamente antes de exclamar un sonido gutural mientras el aroma a sangre lo envolvía por completo...

Despertó en su cama cubierto de sudor y sintiendo que iba a tener un infarto. Había sido una pesadilla. Fue a donde su estudio aun en pijama y todo estaba en perfecto orden. Minutos después se encontraba bajando las escaleras arreglándose las mangas, y su hijo estaba desayunando.
-Buenos días padre.
-Buenos días. ¿Ya tienes todo para la escuela?
-Sí. Pero no pude dormir ayer. ¿Sabes qué pasó con el sistema de seguridad?
-¿Qué quieres decir?
-Pues se activó de repente y minutos después la desactivaste. Salí y te vi subir las escaleras diciendo que fue una falla.
Estuvo a punto de abrir la boca pero sus labios permanecieron juntos. No sabía qué decirle a su hijo. No recordaba siquiera haberlo visto después de que le dijera buenas noches.
-Fue una falla. Llamaré para que vengan a revisarlo mientras estas en la escuela.
-Muy bien. Me había asustado que un ladrón hubiese entrado.- suspiro de alivio porque había estado a punto de salir como Chat Noir.- Padre, ¿qué tienes en la cara?
-¿Qué?
-Tienes un par de marcas a los lados. ¿Te has lastimado esta mañana?- tras esas palabras este se aclaró la garganta, logrando con éxito controlar su voz.
-Un accidente al afeitarme. Si ya terminaste debes irte o se te hará tarde.
-Claro. Con permiso.
Al momento que su hijo se marchó a la escuela, fue a su estudio y revisó por el reflejo de un plato de plata unos moretones alrededor de su rostro. Fue a revisar a su esposa sintiendo el alma en un hilo, pero todo estaba en orden. Suspiro de alivio al comprobar que ella estaba bien. Pero Nooroo logró notar algo. Un pedazo de papel, no, una foto casi oculta en la esquina de la capsula.
-Amo, mire.- Nooroo lo había tomado y lo mostró a su portador. Al ver la foto la tomó y se sorprendió al verla. En ella se veía a Emilie, tenía unos dieciocho, la reconocía porque ya la conocía de ese entonces, y sonreía a la cámara en una cafetería con un helado de fresa frente a ella; y a su lado estaba una mujer de espeso y largo cabello negro, ojos marrones y nariz aguileña, sonriendo a la cámara como Emilie.
-Olive.- salió de la guarida sin apartar los ojos de la fotografía para confusión de Nooroo.
Gabriel no dejaba de ver la foto. Olive había sido una amiga muy importante para Emilie, casi como su hermana. Incluso Emilie pidió que fuera madrina de Adrien. Nunca se habían llevado bien pero por Emilie se trataban de forma cordial y se toleraban. Sin embargo, tras la enfermedad y posterior desaparición de su esposa, perdieron contacto y ella se mudó a Alemania. Entonces...
-¿Por qué estaba esta foto allí?

-Quizás es un regalo.- dijo Nooroo para su total desconcierto y fue hacia su habitación buscando la avieja agenda de su esposa.
No sabría la verdad en las palabras del kwami hasta horas después. Cuando le informaran al intentar localizar a Olive, que esta había sufrido un accidente automovilístico a toda velocidad la noche pasada, sin usar cinturón de seguridad y posiblemente alcoholizada. No supo que decir. Mandó a pedir un arreglo de flores y sus condolencias, sin embargo, sintió un escalofrío al recordar el rostro de anoche. Pensando que quizás en sus últimos segundos, Olive había pensado en Emilie y sólo deseaba despedirse de la que era su mejor amiga.

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Y… espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer. Dejen review, nada de tomatazos, y por favor, mandemos nuestro apoyo y mejores deseos a Chile. Y sin más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!