Hola a todos! He aquí una nueva historia, una nueva víctima del terror, ¿qué creen que ocurra? He visto el avance de Chat Blanc, un mundo destruido, Bunnix, estoy tan emocionada! Pero triste por verlo akumatizado. Así que bueno, agradeciendo a Thomas Astruc por tan espectacular trabajo… COMENZAMOS!

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Capítulo 28.
Tonada sombría.

Luka era conocido por coleccionar algunos objetos referentes a su pasión y modo de vida favorito: La música. Marinette había visto que tenía un par de guitarras acústicas que él mismo había decorado, cintas para guitarra, una selección antigua de discos, entre otras cosas. Había pensado hacerle un regalo pero no se decidía qué hacerle. Y ese mercadillo le daba multitud de ideas a escoger.
-Gracias por aceptar acompañarme, Marinette.
-Para mí es un placer. Me encanta venir a esta clase de lugares pero casi no tengo tiempo.
Por supuesto, usaba sus domingos para descansar y adelantar tareas y trabajos. Se había hecho un riguroso horario para no volver a tener algún tipo de problema en la escuela. Y más porque Lila podía usar la mínima cosa en su contra. Miró una cinta para guitarra que tenía el logo de Jagged Stone y supo que había encontrado lo que quería, bien podía agregar un par de elementos y ¡voila!
-Oye, Luka...- el joven estaba tan cerca de ella que no pudo evitar sonrojarse.- E-Esto, mira. ¿No te parece…?
El sonido de una guitarra al caer los sorprendió tanto que Marinette saltó de su lugar. Luka tomó la guitarra acústica y la examinó.

-No está rota.
-Está rota.- se quejó el tendero que estaba sentado, un hombre obeso con voz hosca.- Deben pagar por ella.
-¿Qué? ¿Está loco?- pregunto indignada Marinette.- No vamos a pagar si está bien.
-¿Es que estas ciega, mocosa? Esta rota.
-Ni siquiera la tocamos.
-Claro, ve con otro con ese cuento. Ustedes son los únicos aquí.- ella estaba dispuesta a seguir esa pelea pero la mano de Luka le detuvo.
-Supongo que quiere dinero a cambio de la guitarra.
-Por supuesto. ¿Qué más?
-Bien, veamos... Tiene razón, esta guitarra está rota.- los ojos de Marinette se abrieron grande por la sorpresa.
-Luka. Eso no es cierto.
-Tranquila, yo sé de esto. Mmm, el mástil está desviado, el lateral roto, y vaya, al parecer el puente esta flojo y las clavijas no están bien puestas. Creo que esto vale… un euro.- el tendero se levantó de su silla.
-No es verdad. Eso vale 35 euros.
-Uno. Está destrozada, ¿quién le compraría una guitarra destrozada? Un euro es ser benevolente.- el sujeto comenzó a alzar la voz.
-¡No vengas con estupideces, chico! ¡Me estás robando!- Luka ni siquiera se inmutó, sino que sonrió cuan serpiente.
-Bien, entonces podemos hablar con el oficial de por allí y explicarle la situación, seguro entenderá.- tras ver como palidecía en un segundo, supo que Luka había ganado.

Al regresar al Liberté, Marinette veía como Luka la estaba afinando. Era una guitarra con pésimos colores. Es decir, la cara era negra, el mástil de un ocre opaco, casi oscuro, y la boca y el puente rojos. Era un tanto perturbadora.
-¿Vas a pintarla?
-Sí. Los colores dan una mala sensación pero sigue siendo una guitarra que puedo usar.- al fin afinada, Luka la tocó, pero en vez de obtener una melodiosa gama de sonidos, estas eran extrañas y perturbadoras.- Mmm. Creo que necesita cuerdas nuevas.
-Lo bueno que tienes un montón.

-Tú si me conoces.- rio entre dientes, dejó la guitarra a un lado y bajaron a su camarote. Luka revisó una caja donde al fin encontró las cuerdas que buscaba.
-¿Luka?- la voz de Juleka se escuchó a su espalda.
-Hola Juleka.- saludó Marinette notando que Juleka parecía desconcertada.- ¿Estas bien?
-Sí, yo... pensé que Luka estaba arriba.- Luka respondió.
-No. Estaba buscando unas cuerdas para una nueva guitarra que traje. ¿Qué pasa Jule?
-Escuche que alguien tocaba. Sonaba horrible.- Luka y Marinette se miraron a la vez.
Los tres subieron a la cubierta. Y para sorpresa de Luka y Marinette, la guitarra estaba apoyada de pie. Marinette estaba segura que la había dejado recostada sobre el asiento. A Luka no le hizo gracia eso.
-De seguro ese tipo nos siguió e intenta asustarnos.
-¿Qué tipo?- preguntó Juleka.
-Ya te explicaré. Marinette, te acompaño a casa.
-No te preocupes, puedo irme sola.
-Esta vez insisto. No quiero que vayas sola por ahí esta vez.- Marinette asintió, podía sentir la tensión de Luka y decidió que bien podía calmarlo en el camino. Cosa que funcionó hasta que la dejó en su casa…

Esa noche Luka no estaba de humor, mucho menos la capitana que al enterarse de lo ocurrido dijo que permanecería en vigilancia esa noche. Pero no sólo eso lo tenía de mal humor, sino que era la guitarra en sí. Tocó unas notas y el extraño y horrible sonido de las cuerdas retumbó.
-Suena como si estrangularas a alguien.- comentó Juleka desde la entrada de su cuarto.- ¿No le ibas a cambiar las cuerdas?
-Lo hice, tres veces. No lo entiendo, Jule.
-Tal vez el problema sea la guitarra. Quién sabe.
-Lo dejaré por hoy. ¿Vamos a cenar?
-Para eso venía.
Luka dejó la guitarra y cenó con su familia en la cubierta del barco. Después de eso se dio una ducha, se puso su ropa para dormir y se sumergió en un profundo sueño. En sus sueños podía alcanzar a una inalcanzable chica de coletas. Tan dulce y linda envuelta en esa melodía que intentaba componer pero que se le escapaba de las manos al despertar. Era tan hermosa, un ángel, pero de repente un horrible sonido inundó el lugar volviéndolo oscuro, eran esa guitarra, pero era un sonido caótico, con tintes oscuros, que hicieron estremecer su interior, y al volver a Marinette lo aterrorizó ver que estaba en su lugar un cadáver cuya piel se derretía y caía al suelo en pedazos putrefactos.
-¡MARINETTE!- desesperado intento acercarse para hacer lo que fuera para salvarla, pero cayó en un oscuro agujero rodeado por un halo rojo, cayendo en un espeso liquido oscuro mientras esa melodía seguía sonando cada vez peor hasta que salió a la superficie cubierto de rojo, y gritó con fuerza...

Despertó sobresaltado y cubierto de sudor, tenía ganas de vomitar, pero entonces notó a Juleka en pijama, verlo pálida desde la puerta. No pudo preguntar qué hacía allí cuando se paralizó al escuchar claramente una cuerda sonar en una deforme nota de Re, lentamente movió su cabeza y tras unos segundos un lento y pesado Do sonó de esa guitarra.
Más furioso que asustado tomó ese instrumento. Lo llevo a cubierta y sin pensarlo la azotó en el suelo una y otra vez hasta que las propias astillas se partieron y con una rodilla rompió el mástil en dos.
-¡Luka!- su madre lo había intentado llamar pero hasta ahora no la había escuchado. Este soltó lo que quedaba del instrumento y su madre le abrazó asustada de su reacción.
-La destruyó... mi melodía perfecta.
-Ya, ya... No digas nada.- por el momento no preguntaría, su hijo temblaba entre sollozos y por alguna razón Juleka se unió a ese abrazó dejándola por completo confundida. Sin embargo, cuando tirara la guitarra a la basura, estaría segura de escuchar una extraña nota de Sol salir de esa bolsa de basura donde reposaban los restos de esa guitarra.

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Y…. espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer, faltan más historias que contar. Así que dejen review, nada de tomatazos, y sin más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!