Capitulo 3 " verdades y chismes"

Todo el día Aome había evitado a Sesshomaru y a Inuyasha, había pasado unos momentos muy raros y vergonzosos un día anterior, Hatori y Lin estaban en ese momento jugando con la pelota en el jardín mientras ella estaba leyendo un libro bajo la sombra de un árbol, estaba tranquila, traía un traje veraniego, un vestido de flores amarillas y rojas, entonces escucho como los niños gritaban, era su padre quien se acercaba a ellos, Aome se extraño de ello y se puso de pie, esta vez no traía traje, estaba vestido de forma casual, pantalones blancos y una camisa azul cielo semiabierta, los niños se pusieron enfrente de el. " las clases hoy terminan temprano…vamos" los niños se despidieron de Aome con las manos, llevaban una sonrisa en el rostro y para sorpresa de Aome en lugar de tomar un chofer Sesshomaru tomo un auto de la cochera y los metió a ambos en la parte trasera del auto y después de unos minutos arranco y salió de la casa. Aome se había quedado sorprendida ¿A dónde los llevaba? Ni siquiera se lo había dicho, pero en realidad se alegraba por ambos niños, nunca salían con su padre y esta era una buena oportunidad para acercarse a el. La chica se puso de pie, al parecer el cielo estaba nublándose, el aire se estaba enfriando y la chica comenzaba a tener frió, comenzó a caminar cuando la tormenta comenzó, era bien sabido que por esos rumbos las tormentas eran largas y peligrosas, pero Aome no lo sabía, así que echo a correr para lograr llegar a la casa más seca, a lo lejos podía ver que la señora Kaede estaba en la puerta de la casa al parecer esperando que ella entrara. Aome seguía corriendo pero entonces se resbaló, el pasto estaba tan resbaloso que cayó de una pequeña colina, causándose algunas pequeñas heridas en brazos y en piernas, se levanto ya resignada a regresar mojada y tal vez enferma de gripa , así que caminaba lento, de cualquier forma no sabía por donde subir nuevamente.

" maldita sea…no hay nada que hacer cuando llueve… ¿Dónde estará esa niña tonta? No puedo olerla cerca…" Inuyasha estaba solo en su cuarto, viendo hacía la ventana, los días lluviosos eran lo peor para el, se aburría y después se ponía a pensar cosas estúpidas, pero si tal vez se ponía a molestar a esa chica nueva entonces podría pasar un buen rato, además era divertido verla enojar pero no la encontraba por ningún lado. Alguien toco la puerta, Kaede el ama de llaves era la que estaba ahí, se veía algo asustada.

- que quieres anciana?- pregunto Inuyasha malhumorado

- es la señorita Aome…me parece que esta allá afuera…

- no lo creo…no es tan tonta- dijo Inuyasha viendo hacía la ventana

- me pareció verla…yo solo quería informarle.

La anciana salió y dejo al chico con su soledad de nuevo. " no puede ser tan tonta ¿ o si?" pensó Inuyasha y entonces decidió salir a ver si podía oler algo, olfatear algo que le dijera donde estaba, no era que le importara pero tampoco era tan insensible como para dejarla afuera si es que estaba ahí. El hanyou apago su cigarro en un cenicero cerca de un mueble y salió de su habitación.

Cada vez sentía más frió y cada vez sentía que estaba más lejos de la casa, Aome se estaba dando por vencida, tarde o temprano dejaría de llover y entonces podría subir a la colina y regresar pero no veía el momento. Se sentó en medio de la nada bajo la fría y helada lluvia sintiendo como cada gota resbalaba por su piel y se erizaba por la baja temperatura, entonces viejas imágenes de su pasado regresaban, había sido un día como ese cuando inició todo, lo recordaba como si hubiera sido ayer y eso hacía que el pasado siguiera tan presente como para dejarle olvidarlo todo, su madre la había obligado a seguir adelante pero en realidad no sabía si podía seguir con esa farsa, le dolía aún tanto y sabía que era su culpa, que todo había sido por su culpa, y entonces sintió una mano en su hombro, se asusto tanto que dio un grito, volteo la cara y vio que era Inuyasha quien estaba bajo la lluvia, viéndola con extrañeza y algo sorprendido de encontrarla sentada bajo la lluvia como si nada.

- ¿ que haces aquí?

- me perdí- dijo Aome levantándose

- lo imagine… ¿te duele?- dijo Inuyasha al ver sus heridas

- no- mintió Aome

- mentirosa- dijo Inuyasha

- ¡ no estoy mintiendo?- dijo Aome a la defensiva

- mira yo se que…- Inuyasha trato de decir algo pero un fuerte viento amenazo con empujarlos, el entonces se cubrió con un brazo y se planto bien en el suelo y al ver que Aome tenía problemas la tomo del brazo y sin darse cuenta su gorra voló, trató de tomarla pero era muy tarde. El viento se detuvo y Aome pudo abrir los ojos y lo primero que vio fue a Inuyasha, sin gorra y algo muy extraño tenía en la cabeza, orejitas de perro.

- tienes…orejas…-dijo Aome sorprendida

- puedo explicarlo yo…- dijo Inuyasha nervioso

- son lindas- dijo Aome acercándose a acariciarlas

- suelta! No son de juguete!- dijo el dando un paso atrás

- pero son lindas- dijo Aome

- ¿no te interesa saber por que tengo orejas?- dijo Inuyasha sorprendido

- si…es verdad es muy raro…. Pero prefiero secarme primero…siento que va a ser una larga historia

- en realidad es algo muy simple- dijo Inuyasha simplemente

- ¿a si?

- mi familia en el pasado eran demonios, youkai, pero por ser el último en la familia…el segundo hijo…soy el de menor poder…soy una mitad debido a que la sangre de demonio ha comenzado a extinguirse en la familia… mi hermano aún es un demonio completo…y siempre me lo reprocha…es un maldito….- dijo Inuyasha, después se hinco- sube

- no lo haré… que pena!- dijo Aome

- hazlo o te subiré quieras o no- dijo Inuyasha impaciente

- no podrás!- dijo Aome tercamente

- se te olvida lo que te acabo de decir

- ¿Qué?

- soy mitad demonio…¿recuerdas tonta?

- si pero también eres humano… y en realidad me tiene sin cuidado que seas mitad demonio…

- ah si? Ya lo veremos…

Inuyasha tomo a Aome de las piernas y la levanto como costal para cargarla, Aome pataleaba molesta y gritando " bájame!...bájame te digo o lo lamentarás!" decía la humana, el hanyou solo reía ignorando las advertencias de la humana cuando sintió como encajaba sus dientes en su espalda, dio un pequeño grito de dolor y la soltó por reflejo, Aome calló al suelo pero fue doloroso, dio un grito e Inuyasha de inmediato volteo a verla y se rió " tonta…fue tu culpa" dijo pero entonces se dio cuenta que Aome estaba hablando en serio, en verdad le había dolido el golpe. " ¿aome?...¿te duele mucho? …ven apóyate en mi hombro…te cargaré" Inuyasha se veía realmente preocupado, se había dejado llevar por el juego con la mocosa y ahora esta estaba herida, Aome solo se recargo en el hombro de Inuyasha y sonrió débilmente pero este no lo noto, estaba concentrado en hacerla sentir lo menos incomoda. " ¿te encuentras bien?" le preguntó el hanyou a la humana que había guardado silencio en todo el camino de regreso. " lo lamento Inuyasha…no quise causarte problemas…no es mi deber como maestra… es una vergüenza" dijo Aome bajando la cabeza, Inuyasha rió y entonces vio la triste mirada que tenía la chica, en realidad no estaba pensando en lo reciente tenía la mente en otro lado. " no es para tanto" dijo el chico.

Finalmente habían llegado a ala casa, Aome estaba mojada y algo avergonzada por todo, en realidad había estado pensando en lo que le había dicho Inuyasha, era un hanyou…no se lo esperaba, pero en realidad para su sorpresa no le importaba nada, era un ser vivo de cualquier forma, con sentimientos, era un hombre, no le caía muy bien pero por escasos minutos había sido otro, sincero, divertido e incluso atento, había sido extraño pero al llegar a la mansión y cuando la dejo en el sofá lo único que hizo fue " Kaede esta herida atiéndela" y salió de la habitación sin decir nada más.

El sol le molestaba los ojos, Hatori se despertó en su cama, estaba realmente feliz, ese día era fin de semana, vio a su hermana a su lado, aún estaba dormida, sin duda estaba cansada por el día anterior, su padre los había llevado a un parque de diversiones, no había hablado mucho pero los dejo subirse a todo mientras el fumaba un cigarro sentado en una banca, pero eso era suficiente para ellos. El pequeño se levanto y salió de su habitación, corrió por los pasillos hasta el cuarto de su padre, sin siquiera tocar entró y lo encontró aún en pijama, estaba de pie, hablando por celular, algo ya normal en el, al verlo entrar le hizo una seña de que guardara silencio por un momento, Hatori obedeció y después de que colgó el celular, se subió a la cama y comenzó a saltar " papi….papi… ¿te vas a quedar hoy con nosotros?" preguntó el pequeño feliz, Sesshomaru se acerco a la cama y lo tomo de la cintura y con gran facilidad lo cargo y lo bajo de la cama. " no lo se, ya veremos" dijo el youkai buscando en su armario su ropa, Hatori le jalo el pantalón a su padre para llamar la atención " papi… quiero ir a desayunar fuera!" le dijo el pequeño, Sesshomaru lo vio de reojo " avisa a tu hermana…saldremos a desayunar entonces" Hatori le dio una sonrisa enorme y salió corriendo del cuarto, pero su padre lo volvió a llamar " Hatori dile también a tu niñera…y a tu tío", Hatori asintió con la cabeza y siguió con su camino a su cuarto.

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"¿se me verá bien este vestido? Ah no lo se…. " Aome se encontraba decidiendo que ponerse cuando Hatori entró corriendo en su habitación, el niño parecía muy emocionado y tenía un brillo muy especial en sus ojos " mi padre dijo que iremos a desayunar!", Aome le sonrió y lo mandó a su cuarto para que se cambiara, parecía muy feliz de poder estar un momento más con su padre. La joven maestra decidió entonces ponerse algo más cómodo, unos jeans, una playera corta y una coleta de caballo, si iban a pasar todo el día fuera no había por que traer la ropa incomoda que tanto le molestaba.

Aome bajo las escaleras y vio en la puerta a Lin y a Hatori listos para salir con ropas lindas y unas amplias sonrisas en sus rostros, Inuyasha de un lado con cara de fastidio, su gorra habitual y en si un estilo completamente despreocupado, y finalmente Sesshomaru quien siempre impecable en su persona, con pantalones tipo casual, una playera tipo polo y un saco blanco, se veía muy apuesto. Aome se dio cuenta que la veía fijamente y esta se extraño de esto pero no dijo nada, termino de bajar las escaleras y entonces Inuyasha la tomo del brazo " ¿Qué estas haciendo ya vamonos me muere de hambre?" le dijo y la arrastró afuera donde ya el deportivo de Sesshomaru y otro coche los estaban esperando, los niños de inmediato subieron al auto más grande junto con Inuyasha y el chofer que los esperaba, y cuando Aome iba a subirse Sesshomaru la tomo del brazo y la sentó en asiento de copiloto de su deportivo " tu vienes conmigo" le dijo y Aome sin tener tiempo para reaccionar subió al auto.

Sesshomaru arranco enseguida, parecía siempre tan serio e impenetrable, Aome estaba nerviosa, ella nunca se imagino que tendría que ir también, se había puesto esas fachas solo para descansar un poco y ahora estaba obligada a usar esa ropa en un desayuno en un restaurante que ella desconocía, entonces se puso más nerviosa, sumada a la alta velocidad que llevaban y a que el auto había girado a la derecha y el otro móvil se había seguido derecho.

- ¿A dónde vamos?- pregunto la joven algo nerviosa

- tuve que desviarme

- no veo el por que

- tu eres el por que

- ¿yo?- dijo la joven más nerviosa, a que se refería con eso.

De repente se detuvieron en una avenida muy transitada, Sesshomaru se bajo del auto sin decir nada y se detuvo en la puerta de una tienda de ropa fina "¿Qué estas esperando?" le dijo en un tono frío e impaciente, Aome se bajo del auto algo confundida y siguió al hombre, lo veía con detenimiento, hace apenas unos momentos se había dado cuenta que era un demonio, y para su sorpresa no le importaba, además parecía haber algo en el que le decía que en el fondo no era como aparentaba ser.

Sesshomaru hablaba con la encargada que momentos después trajo un vestido hermoso en tela fina y er estilo veraniego, con un par de hermosas zapatillas, Aome lo vio con detenimiento y después vio al que se supone que era su jefe, tenía un expresión de impaciencia " póntelo, no hay mucho tiempo" le dijo, Aome se quedo extrañada pero la señorita la jalo a un probador para que se pusiera la ropa recién adquirida.

Pocos minutos después Aome salió del probador, se veía realmente diferente con ese tipo de ropa, Sesshomaru la vio por unos instantes y después entrego un cheque en la caja y se quedo de pie esperando a que la mujer lo alcanzará, esta iba un poco sonrojada, había causado tantos problemas, pero entonces el demonio se detuvo en frente del auto y le abrió la puerta para que ella entrará, la chica se sorprendió con esto pero parecía ya ser algo natural para el, y cuando hubo subido el al carro arrancó de inmediato.

- te queda bien- le dijo el secamente a la chica de la nada, como si ella le hubiera preguntado algo.

- ¿así lo cree Sesshomaru-sama?- le dijo sorprendida la chica

- Sesshomaru.

-¿Qué?

- que no me llames Sesshomaru-sama simplemente Sesshomaru ¿entendido?- le dijo a ella sin verla siquiera, era más bien una orden y no una petición amistosa como se pudiera pensar

- esta bien…Sesshomaru- dijo Aome aún algo sorprendida del comportamiento de ese hombre

Muy pronto llegaron a un restaurante, Aome podía ver como mucha gente acudía a ese lugar, había autos lujosos en el estacionamiento, aunque en el auto en el que ella viajaba no se quedaba atrás, un porshe color rojo, Sesshomaru parecía ya estar acostumbrado a ese lugar, bajo del auto y un muchacho con chaleco rojo le ayudo a Aome a bajar del auto, Sesshomaru le dio las llaves del auto al valet parking " vamos" le dijo a Aome que veía con atención como Sesshomaru volteo a ambos lados como si estuviera buscando algo pero ella no podía ver nada.

Inuyasha estaba fastidiado, encima de tener que usar esa horrible boina o gorra tenía que esperar a su hermana y a la maldita niñera, entonces los vio llegar y vio el cambio de ropa de Aome, "lo suponía" dijo sin sorprenderse el hanyou que veía a sus sobrinos jugar con los cubiertos, Hatori estaba jugando con el cuchillo y Lin con el tenedor " hey ustedes deténganse" les dijo Inuyasha que les quito los cubiertos a la fuerza, los niños iban a hacer berrinche cuando la voz de su padre los detuvo " paren de llorar" les dijo y ellos simplemente guardaron silencio. Aome se sentó después de que Sesshomaru le abrió la silla para que se sentará, ella se sonrojo levemente y vio la carta que estaba en frente de ella, había tantas cosas que no conocía que empezaba a pensar que no había sido buena idea ir a ese lugar.

- ¿Qué no sabes que son las cosas?- le dijo Inuyasha al ver su cara de incógnita

- eso no te interesa- le dijo Aome fingiendo saber los significados de la carta del menú.

- bah…allá tu…si te traen caracoles o algo así no me digas después- le dijo Inuyasha

- ¿caracoles? – dijo Aome con asco

- ¡¿caracoles! Que asco! –dijo Lin

- que divertido!- dijo Hatori

- ¿ya decidieron?- dijo Aome cambiando de tema.

- es que no se que son las cosas….todo se ve muy raro- dijo Hatori rascándose la cabeza

- ¿desean ordenar?- dijo un mesero

Inuyasha pidió primero y Sesshomaru pidió enseguida, que también lo hizo por sus dos hijos y al último quedaba Aome que pedía ayuda a gritos para que alguien pidiera por ella, pero nadie lo hizo así que pidió lo primero en la lista rogando que fuera algo agradable.

Momentos después sirvieron la cena y para sorpresa de Aome su platillo era una clase pollo con verduras y un extraño puré, respiro aliviada y después comenzaron a comer. El desayuno transcurrió entre regaños a los gemelos, miradas de furia por parte de Inuyasha a sus sobrinos y la suprema indiferencia de Sesshomaru que de vez en cuando veía hacía la ventana en busca de algo que Aome no sabía que era.

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" Buenos días a todos" dijo Aome al día siguiente a las cocineras de la casa, las cuales la vieron con una sonrisa pícara y después le respondieron, una de ellas traía una revista en las manos, y veía la misma página una y otra vez y después vio a Aome, la chica estaba curiosa que era lo que había en esa revista que tanto les interesaba, pero en ese momento el señor de la casa entro en la cocina, cosa muy rara en las mañanas las cocineras se callaron y siguieron con sus labores como si nada. Sesshomaru se sentó en la barra a dos lugares de Aome y tomo la revista que había dejado la cocinera, vio por unos instantes la foto y después boto la revista, "patético" dijo y después se puso de pie después de enviarle a Aome una mirada furtiva sin que ella se diera cuenta y marcho.

Aome tomo la revista " por Kami pero si es mi foto!...soy yo…ayer en el restaurante, llegando con Sesshomaru… y esa también soy yo en la mesa…." Aome vio cada una de las fotos, no se había dado cuenta cuando se las habían tomado, " entonces es por eso que Sesshomaru me cambió de ropa…el lo sabía….por eso veía a las ventanas… lo hizo para evitarme una pena…¿o lo hizo para evitar ser visto con alguien con ropas como las mías?" pensaba Aome, no lo sabía pero nunca antes había aparecido en una revista, entonces leyó el encabezado. " un nuevo amor del empresario Sesshomaru, el día de ayer vimos por la mañana a Sesshomaru entrando con una nueva chica a un lujoso restaurante, primero entraron los gemelos del guapo empresario seguidos de su tío Inuyasha no menos apuesto que su hermano mayor, al parecer esta vez es en serio, se le vio a la nueva chica divirtiéndose con los niños…" Aome soltó la revista, aún no lo podía creer, ¡era su niñera! No la amante de su padre, tenía que arreglar todo en ese mismo instante.

La chica salió de la cocina directo a la oficina de Sesshomaru, el cual al entrar ni siquiera la vio, a pesar de que ya sabía del chisme. Inuyasha estaba sentado en la silla para invitados parecía haber estado hablando con Sesshomaru el cual veía para la ventana de pie.

- toma asiento- dijo el demonio en un tono de voz muy serio

- ¿Cómo puede ser que no le afecte lo del chisme? ¡yo no soy su amante!- dijo Aome indignada

- ¿amante? – dijo Inuyasha extrañado

- eso no te importa Inuyasha- dijo Sesshomaru

- ¡ mienten! – dijo Aome más indignada por la actitud de su jefe.

- son tonterías, si me preocupara por cada chisme que saliera no tendría tiempo para otras cosas- dijo Sesshomaru viendo a los ojos a la chica

- pero a mi me afecta!- dijo Aome

- ¿acaso eres una figura pública como para decir eso niña? – dijo Inuyasha en tono burlón

- ¡ no lo digo por eso!...¿que van a pensar mis padres de mi cuando la vean?

- que , que buen partido te conseguiste- dijo una voz femenina desde el fondo de la habitación, era la tal Kykio.

- ¿Qué haces aquí?- dijo Inuyasha viéndola con desprecio

- visitando a tu hermano

- déjanos solos- dijo Sesshomaru

- ya lo oíste Inuyasha, sal de…

- déjanos solos Kykio- finalizó Sesshomaru viendo de manera fría a la recién llegada que cerró la puerta de golpe. – así que ya lo sabes

- ¿ a que se refiere?- dijo una Aome bastante despistada

- que somos demonios.

- ah eso…- dijo Aome bajando la cabeza

- tarde o temprano lo sabrías… - dijo Sesshomaru- solo que no esperaba que tan pronto

- en verdad no me importa… yo no diré nada si eso es lo que le…digo lo que te molesta- dijo Aome enseguida

- no es solo eso…Hatori y Lin también tienen habilidades…quizás y es demasiado para una humana- dijo Inuyasha

- ¡no!...yo puedo con ellos, son buenos niños y creo que nos estamos entendiendo- dijo Aome sonriendo

- bien. – dijo secamente Sesshomaru que volvió a dar la espalda- espero y cumplas tu palabra

- así lo haré- afirmó Aome