Hola amigos, una vez soy Yuzu Araki
De nueva cuenta traigo otro one shot para Madoka Mágica pero esta vez poniendo como protagonista a nuestra lancera pelirroja glotona favorita y esta vez sobre su punto de vista acerca de su crush en esos últimos momentos de vida y que al final de cuentas logró lo imposible.
Bueno, ya explicado esto, comencemos…
Espero que lo disfruten
Yuzu y fuera
PD: Kyosaya es amor, Kyosaya es vida…
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¿Por qué estaba asustada? Nada asustaba a Kyoko Sakura. Nada. Se suponía que yo era la valiente, la líder... Y en todo caso, pongo miedo en los corazones de otras personas. No es el mío.
Y lo extraño de todo esto fue que ni siquiera estaba realmente asustada. No tenía miedo de ser derribada ese día. Estaba más que dispuesta si esa espada quería atravesar mi corazón en cualquier momento. Creo que lo que más me aterrorizó... fue que ella estuviera sola. Nadie quiere estar solo. Nadie.
Durante mucho tiempo pensé que era la respuesta. Si hiciera lo mío, no necesitaría compartir. Podría ser mi propia persona. Nadie confiaría en mí y yo no tendría que depender de ellos. Durante quince años casi lo seguí. No tenía amigos, me volví fuerte y tomé lo que quería. Me había acostumbrado tanto a ese estilo de vida que cuando conocí a Sayaka, todo en lo que ella creía era... estúpido.
Pero luego me recordó lo que solía ser.
Cuentos para dormir del caballero tímido y fuerte que salva a la bella princesa encerrada en una torre. El Reino se regocijaría y el villano se quedaría solo. Así es como se suponía que acababan las historias. Ese fue un final feliz. Érase una vez yo creía en esos. Pensé que todos tenían un cuento de hadas.
Entonces, cuando hice ese contrato... cuando lo hice todo, pensé que estaba haciendo lo correcto. Pero al final, todo lo que provocó fue una tragedia. Así que abandoné los pensamientos tontos de castillos y familias felices, porque ese día me di cuenta de que no existían.
No esperaba que una chica torpe de secundaria con cabello azul viniera y cambiara eso. No lo era, honestamente. Ella era solo otra novata que quería cambiar el mundo con sus espadas y su actitud audaz. Lo había visto un millón de veces antes, y no pensaba que fuera algo nuevo o emocionante. La asumí sin pensarlo dos veces.
Pero... no lo sé. Algo cambió. Vi algo en ella que me hizo recordar todas las razones por las que me convertí en lo que soy. Amor y magia. Finales felices y sonrisas. Me hizo saber que había mucho más en ser una chica mágica que solo pelear, y después me di cuenta de que todos los días volvía a tener una sonrisa en mis labios.
Sin embargo, la misma persona que me ayudó a salir de un pozo oscuro cayó en uno. Supongo que podrías llamarlo destino, pero no había forma de que fuera sola. Lamenté todo lo que dije sobre ella, cada comentario sobre su estúpida vida amorosa. Ojalá pudiera haberlos recuperado a todos y poner la carga sobre mi propia espalda. Era lo suficientemente fuerte, podría haberlo manejado.
Pero ella no. Ella era demasiado frágil. Ella se rompió... y bueno, ya saben el resto.
Sé lo que se siente estar en tu propio mundo. Es solitario. Hace frío. No tienes a nadie que te dé una palmada en el hombro cuando tengas ganas de llorar. Y yo no quería eso para ella. Si tenía que ir, yo iría con ella.
Algunos pueden llamarme loca por hacer lo que hice. Pero mientras mis dedos temblorosos lanzaban mi gema del alma al aire, cada segundo una nueva ola de alivio me golpeaba. ¿Y para cuando todo explotó y se puso negro?
Tuve un sueño feliz…