Bueno, como podrán ver subí los dos capis de un solo golpe, pero es que tenía prisa y los terminé y como se supone tenía que mandarlos el viernes y no pude terminé este otro... espero que les guste, a mi en lo personal me agradó.

Muchas gracias por los reviews!

Advertencia: Yaoi... y personalidades cambiadas, creo que sería todo. Bueno, ahora los dejo en el fin.


Capitulo 5 : Nuevos acercamientos...

Ya ha pasado cerca de tres semanas desde que empecé a ir muy seguido a casa de Horokeu; hemos discutido bastante en ese tiempo y la verdad es que no me molesta, siento que se muestra esa parte de mi que nadie conoce y esa parte de él que no quiere dejar salir.

Es muy activo, y le agradan varios deportes, pasamos toda una tarde practicando distintos tipos de ellos ambos, son pocas las veces que me han vuelto a acompañar Yoh y Hao a visitarlo y como Anna no descuida ni cuida a nada mas que no sea su novio tampoco; Lyserg se la pasa con Hao y Tamao no ha vuelto a dirigirme la palabra, pues sigue con aquellas creencias de que lo que le estoy haciendo es malo.

También he tenido algunos problemas en casa por aceptar de buenas a primeras el viaje con mi aula, pero son mínimos, además el paseo será a un mes de que las clases finalicen y sepamos de antemano quienes serán los reprobados, entre los cuales en obvio que no estaré.

Mi amistad con ellos no ha avanzado en nada, solo somos conocidos, que tienen una apuesta, eso es lo que vuelve interesante esta situación, las circunstancias en las que se esta dando. Lo peor del caso es que si sigo yendo a su casa, todos van a empezar a pensar cosas que no son para nada ciertas... al menos no de ese tipo.

- Señor Tao, podría leer el siguiente fragmento... – eso me sacó de mi ensimismamiento y me di cuenta que no había leído nada y mucho menos sabía por que lugar en todo el texto íbamos.

- Es solo que... – todos rieron con un poco de burla cosa que me molesto bastante... pero tenían sus razones para hacerlo y dicho sea de paso Sylver se molestó bastante.

- Salga del salón y quédese de pie afuera hasta que haya terminado la lección de Psicología. – dijo la señorita que impartía esta clase una vez por semana, estoy empezando el colegio y ya estoy teniendo problemas...

Simplemente me levanté de mi asiento y abriendo la puerta salí cerrándola nuevamente tras de mi, estuve un aproximado de hora y media allí, la clase apenas estaba comenzando y no pude escuchar nada de lo que hablaron. Siempre me ha gustado esta clase, generalmente me divierte ver como esa mujer trata de entender a las personas cuando no puede siquiera entenderse ella misma.

Mucho menos entiende lo que trato de explicarle cada vez que toca el tema de mi personalidad, porque le gusta ponerme a mi como ejemplo de las personalidades complejas y difíciles; siempre esta diciendo que me falta mas ser abierto y hasta el año anterior tuve algunas citas con ella en su consultorio privado para tratarme, pero no logró nada.

Soy de las personas que piensan que esa clase de trabajos son inservibles, de nada sirve que traten de engañar a tu mente cuando esta está clara ante ti, y ellos solo logran confundirte mas de lo que te encuentras. Todos los psicólogos son iguales, no importa los métodos que traten de utilizar, ellos no pueden entenderte porque jamás han estado en tu situación.

- Ya puede volver a entrar señor Tao – me informó la mujer al salir del salón y mirarme con el rostro lleno de compasión ¿quién se cree? Ni siquiera tiene una posición como la mía, que esta socialmente sobre cualquiera de este salón...

Le volví el rostro y continué mi camino, me senté y traté de prestar atención durante el resto del día, mas me fue imposible hacerlo, mi mente divagaba por todos los lugares que podía y no se de que modo siempre tenía que llegar a Horo-Horo.

Las clases terminaron y como tantas veces me dirigí hoy a casa de Horo, la misa ya había terminado y se que estará allí, le gusta esperarme después de clases, al menos, se divierte, aunque sea fastidiándome.

- Ren! – me saluda de forma efusiva cuando me lo encuentro en el camino... ¿en el camino?

- Iba a verte. – le dije de forma algo resentida... y solo me sonrió. - ¿a dónde vas?

- Mi hermana me llamó esta mañana y va a venir a visitarme – respondió – tengo que ir a recogerla al aeropuerto ¿quieres venir? – dudé un segundo pero cuando me di cuenta ya me estaba arrastrando a su auto y me subió en él, parece que nunca se cansa de hablar, a pesar de que yo me mantenga en silencio sigue conversándome...

Debo aceptar que se ve bastante lindo mientras habla, su simpatía sale a relucir, es la primera vez que conozco a alguien tan hablador...

- Falta mucho? – pregunté después de un rato, debo aceptar que casi siempre que voy a viajar fuera del país voy oyendo música o algo por el estilo, sin embargo en este momento no tengo nada por el estilo...

- No tanto... como una hora – dijo mirando su reloj y yo suspiré cansado y aburrido, quería escuchar algo, alguna clase de música, lo que sea...

- Puedo poner el radio? – y sin pedir permiso alguno lo encendí, me gusta la música variada que va desde las clásicas románticas hasta el rock...

- Ren, esa canción dice cosas raras... – comento el frunciendo un poco el ceño...

- Hace cuanto no escuchas música¿no te gusta el rock?

- Si, me gusta, pero... esa esta diciendo cosas contra... lo que creo y...

- Bueno ¿cambio? – pregunté, la verdad no es tan rara, no tan elevada de tono... pero quise complacerlo - ¿qué quieres que ponga?

- Lo que sea menos eso. – rápidamente comencé a cambiar y cuando llegué a una determinada canción que apenas si comenzaba me pidió que la dejase... de pronto comenzó a cantar la tonada, no es que me moleste mucho lo que hace, pero la letra de la canción, hizo que me sonrojara por lo que decía... ya que yo era el único que estaba junto a él en ese momento y la situación era algo parecida a la que vivimos diariamente... y lo peor es que me miró por unos instantes...

("La fuerza del corazón", Alejandro Sanz)

Mírame, en nada me consigo concentrar

Ando despistado todo lo hago mal

Soy un desastre y no se

Que esta pasando

Esto si era un problema mientras que Horo-Horo cantaba estaba mirándome por el rabillo del ojo, y por ahora no se que canción es la que esta cantando, es desesperante... mas por el hecho de que me estoy sonrojando y eso no me gusta.

Me gustas a rabiar yo te deseo,

me llegas a desesperar

Oh no, eso es imposible... ¿me estará diciendo eso a mi? Esta diciendo que me desea... es imposible, debo estar imaginando cosas, es solo la letra de la canción nada de eso pasa, si alguien desespera aquí a alguien es él.

Es tan grande lo que siento por ti

que tenerte no bastará

Me cansé, mi mente no funciona bien últimamente cuando me encuentro con él e inmediatamente tuve que hacer algo para que no notara que aquel sonrojo se estaba volviendo un tomate en mi cabeza...

- Y acaso esa no dice cosas que atenten contra tu creencia? – pregunté ocasionando que me mirara algo confundido.

- No que sepa, esa habla sobre amor...

Que es esto que me invita a vivir

que me da la ilusión

que será esa fuerza que a todos

nos une de dos en dos

- Si claro, esa canción solo dice deseo... no veo nada de amor en lo que dice.

- Pensamos muy diferente Ren.

Será la fuerza del corazón.

- Ves te lo dije, lo acaba de decir – señaló un momento después de que aquella estrofa fuese dicha.

- No es lo mismo.

- Si lo es... es un sinónimo.

- Por lo menos sabes lo que es un sinónimo...

- No soy tonto Ren. – bien, ya comenzamos a discutir y es que siempre me desespera... retiro lo dicho, me fastidia, no me desespera.

Hasta que

Te abrace y los cuerpos lleguen a estorbar

Tiemblo solo con la idea de rozar

Tus labios llenos, de besos nuevos

- Ves, a mí parecer esa canción solamente habla de tener sexo, el atractivo que aquella persona tiene es solo de índole sexual, lo acaba de decir.

- Volvemos a diferir... no lo pienso así.

No puedo dormir, tu robas mi tranquilidad

Alguien ha bordado tu cuerpo con hilos de mi ansiedad

De cinturón tus piernas cruzadas

En mi espalda un reloj

Donde tus dedos don las agujas que dan cuerda a este motor

Que es la fuerza del corazón

- ¿Y que demonios piensas entonces?

- Pienso en la posibilidad de que ese deseo sea algo más fuerte, que realmente su corazón sea quien esta mandando...

Y es la fuerza que lleva, que te embruja y que te llena

Que arrastra y que te acerca a Dios, es un sentimiento

Casi una obsesión, si la fuerza es del corazón

- Y realmente eso quisieras?

- Ren, no todas las cosas son fáciles cuando se esta enamorado...

- Y acaso alguna vez lo has estado?

- Pues si, y es por eso que no quiero volver a pasar por ello – me sorprendió esta respuesta y me subió un poco el coraje ¿entonces porque se quería hacer sacerdote?

- No sabes de lo que hablas – le dije, y no se porque lo hice, solo sentí que me hirió diciendo que se había enamorado de otra persona... me dolió saber eso... inmediatamente comencé a subir el tono con el que conversábamos a mas de lo normal...

Es algo que te envía una descarga de energía

Que te va quitando la razón

Te hace tropezar, te crea confusión

Seguro que es la fuerza del corazón

Es la fuerza que te llena...

Me sentía tan lleno de rabia, no sabía porque, solo lo sentía, me levante un poco del asiento soltándome el cinturón, era una suerte que la auto pista estuviese despejada...

No puedo pensar, tendría que cuidarme mas...

No aguanté, cambié de inmediato la emisora y Horo me dirigió una mirada enojada desde su lugar, volví a poner música fuerte, me agradaba más que esas, al menos cuando estaba con él, pues me confundían pero el disgusto de Horo fue demasiado esta vez.

- Se podría saber que demonios estas haciendo? – vaya, un sacerdote maldiciendo, me hubiera gustado decírselo pero se enojaría más, así que me levanté de mi asiento.

- Quiero bajar. – dije pero no me escuchó, solo aceleró el auto mucho mas.

- Estamos a Kilómetros de tu casa, espérate a que regresemos.

- No quiero, voy a volver.

- Vuelve a sentarte y ponerte eso, es peligroso que vayas así.

- Tu no me mandas. –me tomó del brazo y comenzamos a forcejear, por minutos quitaba la vista del frente del auto para poner mas presión, tiene bastante fuerza pero tampoco soy un debilucho.

No dejaba de acelerar y para poderme manejar mejor también se quitó el cinturón y soltó el volante, eso me asustó bastante por lo me senté ligeramente y volví mi vista al frente...

- Horo-Horo! Cuidado!

Bien, no fue muy responsable por su parte soltar el volante y acelerar tanto, por lo que íbamos directo a otro auto que estaba bastante cerca, aquel comenzó a acelerar mas, como denotando que no teníamos control sobre el vehículo, lo que nos dio oportunidad para reaccionar, Horo me soltó y aun inclinado en mi dirección tomó el freno de mano y lo jaló, el auto chirrió las llantas y luego de varios metros logramos frenar de forma violenta...

El impactó de freno me envió hacia atrás y mi cabeza dio contra la puerta causándome algo de dolor pero, lo que mas me sorprendió fue lo que sucedió luego; el impacto no solo me empujo a mi, sino también a Horo quien ahora se encontraba encima mío... cabe mencionar que era una posición en la que cualquiera podría pensar lo que quisiera.

Me miró sorprendido y clavó su penetrante mirada en la mía, la desvió unos momentos al mismo tiempo que yo lo hice para ver la situación en la que quedamos... calló entre mis piernas, le amortigüe la caída, y aun está entre ellas... demasiado cerca uno del otro para nuestro gusto. Me volvió a mirar, deseaba que hiciese algo, no solo que se quedara así, quieto y asustado como un conejito, deseaba que me besara con pasión...

Podía sentir su respiración abanicar mi piel, estábamos a solo centímetros, y para ese entonces todo desapareció de mi mente... la apuesta, todo, no pensaba en nada que no fuese la sensación que podrían tener sus labios sobre los míos...

Pero no... justo cuando yo iba a aproximarme se apartó y me miró de forma divertida... que al inicio no entendí.

- ¿Vaya viaje? – dijo desconcertado, levantándose y volviendo a su asiento, luego esbozó una sonrisa y me dijo... – hay que repetirlo algún día.

Me volví a sentar, mas calmado y abroche mi cinturón... verdaderamente es peligroso ir sin estas cosas.

Pero desde ese momento algo me hizo sentir diferente el resto del tiempo que estuve con él; por primera vez en mi vida estaba experimentando lo que podía llamar celos, a pesar de que no lo aceptase.

Seguimos el camino al aeropuerto, otra cosa que me estaba consternando fue el porque me miraba de aquella manera, no solo mientras que íbamos en el automóvil y el cantaba sino mientras que se encontraba sobre mi, y por un momento juraría que sentí que le había despertado las hormonas al peli-azul...


Bien, es todo, espero no les moleste la canción, pero en lo personal a mi me gusta mucho... y si vemos las cosas entre esos dos uno siempre desespera al otro y así, entonces me pareció linda...

Bueno como no tengo tiempo no contesto reviews, pero que se sepa que los agradezco...

Gracias a: Zahia vlc, Armys, Horitazoldick…

Que me dejaron uno con su apoyo y otras cosas... pero en fin. Muchas gracias y ahí nos estamos viendo

Leo.