Disclaimer: Ninguno de los personajes de Inuyasha me pertenecen (a excepción de Kumiko).

Este es mi primer fic, así que os pido un poco de paciencia y comprensión .. Intentare actualizar el fic lo más pronto posible. Acepto reviews con criticas y vuestra opinión (y también sugerencias, por que no). Así que sin más os dejo con la historia.

PROLOGO

Llevaba horas y horas corriendo sin descanso, no tenía un rumbo fijo, solo sabía que debía encontrarle. Paró un momento, estaba cansada y debía pensar con calma, de nada servia seguir buscando sin ni siquiera tener una pista acerca de el. Buscó un lugar donde pasar la noche y allí se instalo, en una pequeña cueva.

Sola, así estaba: sola de nuevo, como cuando perdió a sus verdaderos padres siendo solo un bebe. Todo había sido destruido: su pueblo, su casa, sus amigos, su familia… Si tan solo hubiese estado allí podría haberles defendido de aquel ataque, pero esa mañana había salido al pueblo vecino en busca de telas para su madre. Al llegar cual fue su horro al descubrir su pueblo destrozado y presa de las llamas, corrió a su casa y allí encontró a su anciana madre moribunda:

-"Kumi…ha sido horrible…no-nosotros…"

-"Shh, no gaste fuerzas madre ¿Quién les hizo esto?" dijo con lagrimas en los ojos.

-"El…el buscaba tu piedra…, de-debes destruirla o…o también ira a por ti…"

Su piedra… ¿Cómo era posible que aquel fragmento de joya hubiese provocado todo eso? Hacia tres días que mientras paseaba por el bosque había visto algo brillante tras unos arbustos, al cogerlo vio que se trataba de un fragmento de lo que debía ser una joya hermosísima; le gusto tanto que la llevo consigo y se hizo una tobillera con ella. Ahora maldecía el día en que la había encontrado. ¿Tanto valor tenia para provocar semejante masacre? No pensaba deshacerse de ella, eso estaba claro, si la quería que fuese a buscarla, lo estaría esperando…

-"Juro que le encontrare y os vengare madre"

-"No… no quiero que… despiertes eso que has controlado durante tantos años…, no…no dejes que la venganza… te corrompa…"

-"No lo hará te lo prometo"

-"Kumi… te quiero…"

-"y yo…" pero ya había fallecido en sus brazos.

Ahora todos esos recuerdos, apenas recientes, la atormentaban y hacían que las lagrimas no parasen de salir de sus ojos. Durante todos sus años de vida se había comportado correctamente, pese a las desconfianzas que había suscitado entre los aldeanos, aun siendo una niña, debido a quien era; pero estos habían acabado aceptándola e incluso cogiendole cariño debido a su calidez y alegría, nadie habría dicho jamás que una criatura as llegase a ser tan pacifica. Pero eso se había acabado, al menos para el. Si quería descubrir lo era una autentica youkai furiosa y con ansias de venganza lo había conseguido y estas no se agotarían hasta que no acabara con el…

- Juro que te encontrare-dijo mientras cerraba los ojos.- Naraku…