Capítulo 2.

La cabaña tres se quedó en silencio y Percy se levantó. Salió corriendo al baño y se escuchó como bomitaba.

Al rato volvió un poco más pálido.

-¿Te encuentras bien? -Preguntó Will preocupado.

-Lleva así un par de semanas. -Comentó Jason. Si no fuera un tío, diría que está embarazado.

Will y Tritón lo miraron serios.

-¿Sabéis que algunos semidioses hombres pueden quedar embarazados verdad?

-Tritón si esto es una broma, no tiene ninguna gracia.

-Deja que te examine. -pidió Will.

percy suspiró y se tumbó boca arriba en la cama. Will le levantó la camiseta y le puso la mano en la tripa.

Unos segundos después, el rostro del hijo de Apolo palideció.

-Claramente esta es la suerte de percy Jackson. -Dijo Will. Si algo va mal, tened por seguro que irá mucho peor.

-¿Qué pasa Will? Me estás asustando. Y no hay muchas cosas que me asusten.

-percy no grites ¿vale? Pero estás embarazado.

El silencio llenó la cabaña y se mantuvo así durante al menos tres minutos.

Nico que no había dicho nada, empezó a reír histéricamente. Jason y Tritón le siguieron unos segundos después.

Percy se había quedado mirando a Will sin parpadear. Cuando asimiló la noticia, palideció más que Nico y también se echó a reír descontroladamente.

Cuando el shok pasó, todos estaban muy serios escepto Percy que estaba muy asustado.

-¿Qué voy a hacer? Si su mujer se enterara de que nos hemos acostado me fulminaría. Y si además supiera que... que... que y yo estoy e em emba embarazado...

Se tapó la cara con las manos y comenzó a temblar.

-Dioses voy a ser galleta de semidios.

-¿Galleta de semidios? -Preguntó Jason.

-Tienes razón. Voy a ser Percy el exsemidios. Porque ella se va a enterar y me va a fulminar después de torturarme y se reirá mientras lo hace y mi hijo... ¡Joder que voy a ser padre! ¿En qué cabeza cabe eso? Yo padre si no soy responsable ni de mí mismo. ¿Cómo voy a encargarme de un niño? Bueno si la diosa no me mata antes. Entonces no seré ni padre ni nada. Solo seré...

-percy vas a tener dos bebés. -Dijo Will dudoso.

-¿D dos? Peor me lo pones. Apuesto a que dejará que los niños nazcan para luego cargárselos delante de mí porque le caigo muy mal y se reirá y yo...

-Tío cállate. Eso es espantoso. -Comentó Nico.

-yo no dudo de que ella sea capaz de hacer eso. Seguramente lo haría porque está obsesionada con él. -Opinó Jason.

-Eso no ayuda compañero. -Comentó Tritón observando a su hermano.

-¿Y qué podemos hacer? -Preguntó Will. Nunca he conocido a un hombre embarazado y no sé que hacer para ayudar.

-Supongo que será muy parecido al de las mugeres. -Opinó Jason.

-ya pero no puedo preguntarle a nadie porque el único que sabe de esas cosas es mi padre y si le miento sobre por qué quiero saberlo, sabrá que no le digo la verdad.

-¿Y no hay nadie más que sepa sobre embarazos masculinos? -Preguntó Tritón.

-El único que conozco que sabe de ese tema está muerto.

-Pero tu novio es hijo de Hades y puede visitar a los muertos ¿no? -Cuestionó Jason.

-Pero a parte de eso, ¿Qué vamos a hacer con Percy? -Preguntó Nico. No puede quedarse en el campamento porque ella mandará a sus espías. Siempre los manda por si acaso.

-Deberíamos contárselo a papá. -Opinó Tritón. Él y yo podemos cuidarlo en el palacio y darle acceso a las personas que vayan a cuidarlo.

-Eso es una buena idea. -Comentó Jason.

-Dime quien es el que sabe del tema del embarazo masculino e iré a hablar con él. Le diré que lo escriba para no olvidar nada.

-Es mi hermano Lee Fletcher.

-De acuerdo. No puedo sacarlo del inframundo sin permiso de padre pero... bueno espero que con una lista te sirva.

Will le sonrió a su novio y le dio un suave beso en los labios.

-Gracias por ayudarme. No tenéis por qué hacerlo.

-Claro que tenemos que hacerlo. -Protestó Nico. Tú nos has ayudado a todos nosotros y además, somos amigos.

-Creo que estaría bien que tus amigos más cercanos lo supieran. Aunque confíes en ellos, hazles jurar por el río Estigio que no dirán nada y no se os ocurra hablar del tema fuera de esta cabaña. Aquí estáis seguros de que ella no pueda escucharos. También en las demás cabañas pero mejor prevenir. -Dijo Tritón.

-Yo voy a buscar a Leo, piper y Annabeth. -Comentó Jason.

-Yo voy a hablar con padre. A ver qué podemos hacer.

-Vuelvo enseguida. -Dijo Nico. Voy a hablar con Fletcher.

-Busca también a Michael Yew. Él también sabe del tema.

Nico asintió hacia su novio y se marchó con el viaje sombra.

-No salgáis de la cabaña. -Habló Tritón. Cuida a mi hermano hasta que vuelva.

El hijo de Apolo asintió de acuerdo.

-Hermanito no te preocupes todo saldrá bien.

Percy le dio un abrazo tembloroso a Tritón y el dios le acarició la cabeza a su hermano con ternura. Después se marchó.

Jason se despidió de Will y Percy y salió a buscar a los demás.

-Si Lee estuviera aquí, me hubiera clavado una flecha en el culo. -Se quejó Percy.

-Michael te la huviese clavado y lee tendría que sacártela.

-Dan miedo esos dos juntos.

-Les echo de menos.

-Yo también aunque no fueran mis hermanos.

Jason volvió quince minutos después.

-¿Qué pasa? -Preguntó Annabeth.

-Antes de contároslo, tenéis que jurar por el río Estigio que no diréis nada.

Leo, Annabeth y Piper hicieron el juramento.

percy con ayuda de Jason y Will les contó todo incluso donde habían ido Tritón y Nico.

-¡Voy a ser tío! -Vitoreó Leo encantado.

-¿Cómo se te ocurre? -Cuestionó su exnovia.

-Te ayudaré en todo lo que pueda. -Dijo Piper.

-Annabeth no le regañes. Bastante está pasando ya. -Pidió Jason.

-Además no es bueno que se estrese. Podría ser perjudicial para los bebés. -Secundó Will.

Annabeth suspiró.

-¿Y ahora qué? -Preguntó unos minutos después.

-Tenemos que esperar noticias de Tritón y de Nico. Y dependiendo de lo que nos digan, actuaremos. -Contó Jason.

-Cambiando de tema... Bueno Leo. ¿Qué tal con mi padre?

El mencionado se sonrojó.

-N no sé de q qué hablas.

-No puedes mentirme. Soy hijo del dios de la verdad.

-P pues... Me dedica muchos haicus. Y me besa cuando quiere.

-¿Y te gusta?

-No estás ayudando reina de la belleza.

-¿Quién ha dicho que trato de ayudar?

-em empieza a gustarme.

-¡Qué dulce!

Todos miraron a percy impresionados.

-¿Qué pasa? ¿No puedo dar mi opinión?

Unas lágrimas salieron de sus ojos verdes.

-Deben ser las hormonas. -Apuntó Annabeth.

-¿M me estás diciendo q que soy hormonal?

-Percy cálmate. -Dijo Annabeth.

-¿Jason la estás escuchando? ¡Es una insensible!

Se tiró a los brazos del hijo de Júpiter.

-¿Me abrazas Jasie por favor? Estoy muy triste.

El chico se quedó atónito.

-¿Jasie? ¿Tú tampoco me quieres?

-C claro que sí. Ven aquí amigo.

Percy sonrió entre lágrimas y dejó que el rubio le abrazara.

Los demás se miraban entre ellos sin saber qué decir.

Presentían que la espera se les haría muy larga.