Capítulo 8.

percy estaba en los jardines del palacio de su padre dando un paseo. Habían pasado dos semanas desde que se había enterado de su embarazo. El semidiós estaba recordando el momento en el cual Anfitrite se enteró de que esperaba dos bebés.

Flashback:

Poseidón, Tritón y Percy estaban en uno de los salones. habían citado a Anfitrite para hablar. Su padre le había dicho al semidiós que él y Tritón podrían darle la noticia a su mujer pero el semidiós no quería ni oír hablar del tema. Le dijo a su padre que quería estar presente y ni él ni Tritón pudieron convencerle de lo contrario.

Su hermano Tyson estaba con ellos. Percy le había dicho que sería tío y el cíclope había saltado dando palmas como loco. Había abrazado a su hermano con algo de fuerza y cuando el semidiós se quejó Tyson dijo:

-Es para que mis sobrinitos sientan también el abrazo.

Luego había sonreído y cogiendo a Percy de la mano, le llevó a dar un paseo con los hipocampos.

Anfitrite llegó al salón y observó fijamente al hijo de su marido. El semidiós se removió incómodo en su sitio.

-Mi reina. -Empezó Poseidón. -Percy va a quedarse aquí una temporada.

La nereida se encogió de hombros con indiferencia.

-Hay más madre. Has de jurar por el río Estigio que no dirás a nadie lo que vas a descubrir.

La mujer miró a su hijo y suspiró.

-Juro por el río Estigio que no comentaré nada de lo que descubra en este salón ni el motivo real de la visita de Perseus Jackson.

Poseidón sonrió satisfecho.

-¿Y bien? -Preguntó la nereida con impaciencia. Deseaba que se dieran prisa para poder largarse.

-¿Madre recuerdas la fiesta del Olimpo a la que asistieron los semidioses?

La reina asintió.

-Pues resulta que en esa fiesta, percy...

Entre Tritón y su padre fueron contándole a la nereida todo lo que había pasado.

Cuando acabaron la explicación, la mujer se puso de un espantoso tono verde.

-¡Ese Zeus me va a oír! ¿Cómo se atreve a aprovecharse de un niño?

Percy iba a protestar pero una mirada de su hermano le hizo desistir.

-¡Por todos los peces! Si Hera se entera...

Anfitrite palideció aún más.

Se acercó a Percy y lo abrazó.

-Pobre pobre niño. Tan joven...

Acarició con dulzura el vientre del atónito muchacho.

Después la reina se plantó delante de Poseidón y comenzó a hablar:

-Hay que decirles a los cíclopes que preparen cosas para los bebés. Cunas, juguetes... Hablaré con mis hermanas y algunas personas más para hacerles unos brazaletes protectores y uno para Percy por si Hera lo averigua no pueda hacerle daño ni a él ni a los bebés.

Tritón estaba mareado.

-Cuando Zeus se entere, querrá ver al chico y no descansará hasta hacerlo. Hay que mantenerlo aquí. Si tiene que salir del mar, siempre tiene que estar uno de nosotros con él. No sé qué dioses se enfadarán con la noticia.

Percy aún estaba asombrado. Tyson miraba a la nereida sonriendo.

la diosa se quedó pensando y después comenzó a dar vueltas por el salón.

-¡Su madre! -Chilló de repente.

-Tiene que enterarse.

-Cuando Sally se entere... Zeus va a querer salir corriendo. -Comentó Poseidón con sorna.

Anfítrite se acercó a Percy y le cogió del brazo.

-Vamos cariño. Tienes que descansar. pero antes... vamos a comer algo.

El semidiós la siguió dócilmente.

Fin flashback.

Anfítrite y él hablaban mucho. Sobre todo de la crianza y cuidado de los niños.

Percy sonrió y acarició delicadamente su vientre aún plano.

Al día siguiente, poseidón, Tritón y él irían a darle la noticia a su madre.

Echaba de menos a sus amigos del campamento mestizo pero ahora debía preocuparse por los niños que crecían dentro de él.

Sabía que no sería fácil pero saldría adelante por los bebés.

Le daba muchísimo miedo la perspectiva de la paternidad pero no se echaría atrás. Eran sus hijos y sabía que por ellos haría cualquier cosa.