Harry Potter pertenece a JK Rowling.

Star Wars pertenece a George Lucas (y a Disney)

Harén de Harry.

HP: Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil y Susan Bones.

SW: Aayla Secura, Ahsoka Tano y Maris Blood.

Star Wars: The Age of Fifth Empire

206: Uno de sus pilares de poder.

Padme y Anakin, se infiltraron en el planeta Muunilist, apodado como el Prestamista, era el mundo templado de ricos minerales y era el hogar de los Muuns y la sede del Clan Bancario InterGaláctico. Estaba ubicado en el Corredor Braxant. Era un miembro de la Confederación de Sistemas Independientes bajo el mando del Presidente San Hill.

Las ciudades del planeta Muunilist, era mayoritariamente habitadas, obviamente por la raza que daba nombre al planeta, los Muun. Se trataba de humanoides altos y demacrados con cuerpos delgados y cabezas alargadas con cráneos sin pelo. También tenían un color de piel blanca/rosa pálida con un tono gris, muy probablemente debido a que a la gran mayoría de las especies no les gustaba viajar, incluso sobre el planeta, y por lo general se quedaban en casa. Los Muuns también tenían orejas pequeñas en el centro de los lados de la cabeza. Además, tenían narices chatas y bocas delgadas. Tenían los brazos y las piernas largas, haciendo que pareciesen muy demacrados. También tenían cinturas muy delgadas y dedos largos y delgados. Los miembros de la especie también tenían tres corazones, un corazón normal y dos que eran controlados conscientemente, un rasgo que a menudo se utilizaba para aumentar el flujo sanguíneo en las bajas temperaturas.

Anakin y Padme, se infiltraron en la ciudad, mientras buscaban toda clase de información, gracias a los bares y restaurantes. Pero tendrían que esperar hasta la noche.

— "No es fácil, realizar esta clase de espionaje, ¿eh?" —susurró Anakin sonriente.

— "Creería que usted, maestro Jedi, disfrutaba de la acción, en el frente de batalla" —susurró ella.

—"Cuando Palpatine caiga, entonces podremos tener mucho tiempo para nosotros" —susurró Anakin, mientras agachaba la cabeza. — "Tiempo, para pasarlo junto a los niños"

Anakin y Padme, prestaron atención. Pero no escucharon nada, que fuera realmente útil.

Salieron de allí, y fueron a su hotel. Cuando llegó el mediodía, fueron a almorzar, y cuando llegó la noche, buscaron algo de información de los Muun, preguntándoles por los mejores bares de la ciudad. No era solo una pregunta, por hacer turismo, sino porque tarde o temprano, alguien haría caer una dirección en los barrios rojos.

En los lugares más oscuros de la ciudad de Hardian.

En los lugares dónde pululaban las prostitutas y los bares para criminales.

Sería en ese tipo de lugares, donde usarían unos auriculares especiales, para escuchar las voces de los comensales, que estaban más lejos de las mesas, en las que ellos estaban sentados.

Después de todo: tendría más sentido, que te sientes en la parte más alejada, si es que te interesaba hablar sobre algo... ilegal.

Gracias a las visitas, a ese tipo de lugares, a lo largo de cuatro y cinco días, pudieron enterarse, de dónde podrían encontrar al Virrey Gunray y a los otros Neimoidianos, junto a algunos otros seguidores de Palpatine, quienes podrían estar en esa misma ciudad.

Se dirigieron a una estación de metro subterráneo, abandonado.

Allí, encontraron al Virrey Gunray, a varios Neimoidianos y varios Muun, además de algunos humanos, a quienes Padme reconoció, como algunos de los ancianos a quienes Palpatine solía pedir consejos, pero desconocía si acaso ellos llegaron a tener, algún tipo de puesto oficial dentro del gobierno republicano de Palpatine, cuando este era el Canciller. Como Sim Aloo, Janus Greejatus, Sly Moore. Además de Kren Blista-Vanee, el barón Ragez D'Asta y Alec Pradeux.

Pero rápidamente, notaron, que, en las pantallas holográficas, todos ellos, estaban trabajando para el Imperio.

Padme suspiró, miró a su esposo y a ambos les corrieron lagrimas por los ojos, se colocaron sus capuchas de capas negras, mientras que ingresaban a gran velocidad al lugar, empuñando sus Sables de Luz; y asesinando a todos los presentes, antes de que pudieran hacer nada, ni tampoco pudieran empuñar sus armas láser, para intentar defenderse.

Ahora, uno de los pilares de poder de Palpatine, acababa de caer.