Un pequeño añadido.

………………………………Once años después…………………………

-Venga chicos o sino no llegareis.- decía un pelirrojo, a dos niños que corrían con unos carritos llenos de cosas muy raras.

Eran un niño y una niña de la misma edad los dos, la chica tenía los ojos azules y el pelo, rubio, mientras que su primo tenía el pelo rojizo, de ojos azules también.

Ron iba acompañado por Draco que llevaban a sus hijos a coger el expreso de Howarts, detrás de ellos venían sus respectivas mujeres, una con una niña de siete años, de edad de ojos grises, y pelo rubio platino como su padre, y la otra llevaba en brazos a un niño de pelo rojizo y ojos azules tanto como su hermana y sus padres.

Ron se acerco a su hija y le dijo:

-Nada de trastadas ya sabes lo que te dijo tu madre.-

-Que si papa lo que tu digas.- dijo la chica de once años mientras que ella y su primo sonreían por lo bajo.

-Y tú Marck nada de vuestras típicas bromas.- dijo Ginny refiriéndose a su hijo.

-Si mama.- dijo el chico.

-¿Oye cuando llegaran estos?-

-Pues como no corran se quedan en tierra.- dijo un hombre de la misma edad de los otros dos detrás de ellos.

-Neville hola.-

-Hola chicos, os presento a Nathan, es mi hijo, empieza este año en Howarts.- dijo este sonriendo.

-Bien callado que te lo tenías no, no lo dijiste en tus cartas.- dijo Ron.

-Bueno, es que quería que fuera una sorpresa para ustedes.- dijo este.

-¿Te quedas ya en Londres?-

-Por supuesto, me dieron el traslado por completo.- dijo este sonriendo.

-Bueno chicos lo mejor será que vayáis subiendo al tren.- dijo Draco.

-Pero y Lily.- pregunto dijo el hijo de Draco buscando a la hija de sus madrina.

Draco miro a su hijo y recibió un codazo de Ron que le dijo:

-Al final los Potter y los Malfoy se acaban emparejando ¿qué te apuestas?- dijo este sonriendo.

-Ya me empareje con los Weasley, con los Potter no es tan degradante.- dijo este sonriendo de lado, y mirando a su mujer, a la persona que más quería en este mundo que por cosas del destino o saber de quien había acabado siendo una Weasley, la única Weasley de su generación.

-Oye ¿a qué esperan para subir al tren, Lily los esta esperando allí.- escucharon la voz de Hermione desde el otro lado de la estación llamándoles.

Ron se giró para encontrarse con sus dos mejores amigos, Lily era mayor que los otros por tres meses, pero todos se llevaban muy bien pues la diferencia era tan mínima que no se notaba en nada.

Un hombre de pelo totalmente desordenado, y ojos verdes que tenían un brillo que nunca antes había tenido, iba andando abrazado a una mujer de pelo castaño, no tan enmarañado como antes, y una sonrisa en su rostro mientras que de su mano un niño de ocho años iba cogido de la mano de su madre.

El chico tenía el color de pelo de su madre, y los ojos de su padre, también le había tocado tener el defecto de la vista y llevaba unas gafas tras los que ocultaba sus ojos verdes.

Al llegar donde ellos, todos se pusieron a hablar, y vieron como el tren se alejaba de ellos, mientras que sus hijos se asomaban y decían adiós.

-Potter, hiciste lo que te dijimos.-

-¿Por quien me tomas?- dijo este mirando significativamente a Hermione.

-Te pillo.- dijo Ron.

-Hubiese sido más fácil si ustedes lo hubiesen echo yo me quede con la más lista.- dijo Harry.

-El año que viene ya nos encargamos nosotros.- dijo Ron.

Cada uno se fue a su casa, y Harry al llegar cogió a Hermione de la cintura, y dijo:

-¿Qué edad tiene Jon?-

-Ocho, ¿por qué?-

-Me quedan todavía tres años.- dijo este un poco fastidiado.

-¿Para qué?-

-Para que nada me impida estar contigo a todas horas del día.- dijo este mientras la besaba.

Se separaron y Harry se fue con su hijo al jardín a jugar con las escobas, aunque para su mala suerte la que había salido a él en el quidich había sido Lily, a Jon le gustaba más estudiar.

Estaba dando una vuelta por el jardín cuando escucho la voz de Hermione.

-Dime.- dijo este.

-¿Dónde esta el mapa del merodeador y la capa de invisibilidad?- pregunto con voz melosa, harry no se atrevió a contestarle.

Llamaban a la puerta y Ron fue a abrir, le resultaba raro que llamaran al medido día, fue a abrir, y se encontró con su mejor amigo.

-¿Me dejas comer hoy aquí?-

-¿Qué paso?-

-Pues que Hermione ya se enteró de que me salí con la mía.- dijo este.

-¿Qué quieres decir?-

-No creerías en serio que no les iba a dar la capa y el mapa a nuestros inocentes hijos ¿verdad?-

-Así que al final si se los llevaron, bien hecho Potter.- escucho la voz de Draco que también estaba allí.

Todos se echaron a reír, y Harry pensó que nunca en la vida se hubiera imaginado que su historia sería así, pues había aprovechado por completo esa segunda oportunidad, y todavía lo seguía haciendo, pues era lo mejor que le podrían haber dado nunca.

Sobre todo sus dos hijos y la que en una ocasión fue su mejor amiga, y ahora era su amiga, su amante su mujer y una de las cosas más importantes de su vida.

……………………………Fin……………………

Y esta es la historia y así se la he contado, espero que os haya gustado, buybuy y hasta otra.

Lo de buybuy no esta mal escrito es que es mi forma personal de despedirme, es que en más de una ocasión me han dicho que se escribe de otra forma y no es que es personalmente mía.

Por cierto me deje un pequeño fragmento de la historia olvidado:

Hermione estaba rodeada de un montón de libros Harry se le acercó justo cuando esta se levantaba feliz de su asiento.

-¿Qué te pasa hermione?-

-Que ya resolví una duda.- dijo esta.

-¿A qué te refieres?-

-A que me acorde de que cuando te fui a buscar a ese espacio fuimos solo con nuestras almas, sin embargo nuestras varitas estaban con nosotros, y bueno no sabía como era eso posible.-

-Podrías haberme preguntado.- dijo el chico.

-Ya pero sabes que me gusta más resolverlo por mi cuenta, así que escucha, el motivo, es que en realidad esa barita era una forma en la que se representaba nuestra magia, es decir que en realidad no es que nuestra varita tuviera alma sino que nuestra magia creo una varita para poder ser utilizada en ese espacio.- dijo esta feliz de haber resuelto el único misterio que le quedaba por resolver.

-Nunca cambiaras.- dijo Harry.

-Por supuesto que no.- dijo esta sonriendo abiertamente.

Ahora si este es el final.