Capitulo 3: La verdadera Hermione.
Harry miraba al mapa del merodeador y al rostro de su amigo simultáneamente, con cara de asombro. Ron a su vez también miraba a Harry con la boca abierta. Se esperaban que en el mapa apareciera cualquier nombre menos el que figuraba: H. Granger. Se quedaron como petrificados, era imposible. Eso significaba que era Hermione la que había humillado a Neville la que ahora estaba en el pasillo con Malfoy, a punto de...
-¡Quítale las manos de encima!- el grito de Ron había sacado a Harry de sus ensoñaciones, se dirigía hacia el Slytherin con paso decidido. Hermione lo observaba con asombro, Draco estaba ya sobre ella, la tenía acorralada contra la pared. Harry no supo que hacer, aun sostenía el mapa y seguía mirando incrédulo las etiquetas con los nombres, ahora la que ponía Wesley se acercaba rápidamente a Malfoy.
- ¿No te han dicho los pobretones de tus padres que espiar es de mala educación? – el rubio reaccionó unos segundos después de escuchar el grito de Ron, pues no esperaba que nadie hubiera presenciado aquella escena con Granger.
"Acaba de cometer un gran error", Harry sabía que en esos momentos estimular el enfado de su amigo no era para nada una elección inteligente. De hecho, nada más pronunciar estas palabras Ron levantó el puño y lo descargó contra la delicada cara de Draco. Aquel quedó tendido en el suelo, aparentemente inconsciente. Pero para cuando Ron se estaba acercando a Hermione, cualquiera sabe para qué, incorporó medio cuerpo y agarró fuertemente las piernas de su oponente haciéndolo caer bruscamente. Ahora los dos rodaban en el suelo, por turnos uno encima golpeando al adversario, hasta que el otro conseguía arrebatarle la posición. Harry observaba a Hermione, al principio parecía divertida, pero de repente empezó a temblar fuertemente y miró a Harry suplicante.
-¡Por favor! – le gritó, entonces ocurrió algo inverosímil, Hermione cayó al suelo. En ese momento la pelea terminó. Draco y Ron se habían quedado tan sorprendidos como Harry, que había salido corriendo en dirección a la chica para comprobar que le había pasado. Estaba tendida en el suelo, inconsciente.
-¿Ves lo que has logrado, hurón? – a Ron le sangraba el labio, aunque la pinta de Malfoy no era mucho mejor. Tenía un ojo morado y estaba muy despeinado, algo insólito en él. Para el asombro de los muchachos Draco parecía realmente preocupado. Miraba a Hermione extrañado de aquel repentino desvanecimiento. Luego su expresión cambió totalmente a la indiferencia, la que era habitual en su cara y se incorporó.
-Bueno, no es mi problema lo que le ocurra a esa- y se marchó cojeando por el pasillo antes de que Ron tomara de nuevo represalias por sus últimas palabras.
- ¿Qué ocurrió? ¿Tú lo viste, no?
- Bueno, no estoy seguro. Hermione estaba ahí mirando como peleabais – eludió la parte de la cara de satisfacción que estaba mostrando- y de repente empezó a temblar extrañamente. Entonces me suplicó y cayó al suelo. Esto me parece muy extraño.
La chica seguía tendida en el suelo, Harry la tomó por la mano para ver si reaccionaba. Entonces la manga acampanada de la túnica se deslizo hacia atrás y dejó a la vista en su brazo un gran moratón. Ron también lo vio .
-Se lo habrá hecho el desgraciado de Malfoy – le dijo a su amigo.
- Bueno Ron, ella no parecía muy reacia a ese encuentro – Harry intentó decirlo con la mayor delicadeza posible, el estado del pelirrojo era aún muy agitado. Por el modo de comportarse de la chica últimamente no le hubiera extrañado nada que hubiera sido precisamente ella la que hubiera provocado la situación.
En ese momento se despertó, y al verlos dirigió una cara de desagrado a Ron, como si el fuera el culpable de aquella situación sin embargo cuando miró a Harry le dedicó una sonrisa.
- Em, ¿Qué me ha pasado?
- No lo sé, te has desmayado de repente. –le contestó el moreno.
- ¿Te encuentras bien? – dijo el otro con gesto preocupado.
- Si, Wesley -aquello fue como un insulto para él- aunque quizás eso no sea de tu agrado ya me encuentro perfectamente.
La mejillas de Ron se empezaron a poner del color de su pelo, así le pagaba su preocupación y el altercado con el hurón. Cuando Harry le había dado la teoría de la poción multijugos el muchacho encontró la razón a el comportamiento vergonzoso de su amiga, pero el mapa del merodeador no mentía. Ya en cuarto había demostrado su eficacia y ahora el consuelo de que aquella que actuaba de una manera propia de los Slytherin no era su amiga se había desvanecido; tenía que admitir que realmente no conocía a Hermione Granger tanto como el pensaba. Si no quería su compañía por supuesto que no se iba a rebajar, así que se marchó haciendo grandes esfuerzos por no exteriorizar lo que sentía en aquellos momentos.
Harry imaginó lo que debía estar sintiendo su amigo en aquellos momentos. Si a alguien le importaba Hermione más incluso que a él mismo, esa persona sin duda era Ron. A pesar de su desmesurado orgullo y de su empeño en disimularlo, Ron no dejaba que nadie se metiera con la Gryffindor y era capaz de liarse a puñetazos, como acababa de demostrar, por protegerla. Ahora Hermione se lo pagaba con aquella actitud que ninguno de los dos hubiera esperado ni en el más absurdo de sus sueños. Ella había demostrado en múltiples ocasiones su fidelidad y jamás les había fallado, pero debían asumirlo, aquella persona tan extraña a sus ojos no era otra que Hermione Granger, y la hipótesis de la poción multijugos era errónea.
- Si ya te encuentras bien, tengo cosas que hacer – se excusó.
- ¡Por supuesto!, hasta luego entonces- se quedó allí observando como Harry partía.
Cuando llegó a la sala común había un gran revuelo. Alguien había recibido una lechuza con uno de los sombreros sin cabeza de los gemelos Wesley, que habían creado un catalogo especial de artículos por encargo a precios especiales para alumnos de Hogwarts. Todos carcajeaban cuando alguien se lo puso a Neville, pero los de primero parecían especialmente divertidos con el asombroso invento ya que nunca lo habían visto. Parecía que allí se encontraban todos lo Gryffindor, todos menos Ron y por supuesto tampoco estaba Hermione.
-¡Harry!- a pesar de que no veía su cabeza supo que quien lo había llamado era Neville. Este se quitó el sombrero y lo pasó a Ginny que se lo puso para regocijo de los demás, y se aproximó a Harry.- ¿Sabes que le pasa a Ron? Lo llamé cuando entro en la sala, y me mandó... Bueno, se puso muy grosero.
- Tengo una idea de lo que puede ocurrirle. Está en la habitación ¿no?
- Si, subió como una escopeta –le dijo señalando a las escaleras y luego volvió con los demás.
Harry se dirigió a la habitación de los chicos con pesadumbre, imaginaba lo que le esperaba, y aunque él no estaba de muy buen humor tenía el deber de animar a su amigo. Estaba todo a oscuras, así que después de cerrar la puerta dio la orden para que las luces se prendieran. La habitación estaba aparentemente vacía, Ron debía estar en el baño así que se sentó en su cama esperándolo en su cama. Tardaba bastante así que Harry se recostó.
Estaba en una habitación muy desagradable, tenía un cierto parecido con la clase de pociones. En el centro había alguien tendido en el suelo, estaba bastante oscuro así que desde donde él se encontraba no se distinguía quien era. Miró a su alrededor intentando encontrar alguna pista de donde se hallaba, pero sin resultado. Se aproximó hacia la figura que yacía en el suelo poco a poco, como si temiera que hubiera alguien acechándolo desde las sombras. Cuando alcanzó a ver de quien se trataba sus se agachó para ayudarla.
-¡Hermione, despierta!- ella no reaccionaba. -¡Hermione!
-¡Harry!- Ron lo sujetaba por los hombros, su pelo estaba mojado y estaba empapando a Harry, llevaba una toalla enrollada en la cintura - ¿Qué te pasa Harry? – la cicatriz le ardía intensamente, a pesar de que Voldemort estaba ahora libre y en plenas facultades hacía tanto tiempo que no le ardía de aquella manera que se había olvidado un poco de ella. Se incorporó, el dolor se había aliviado. Miró a su amigo que mostraba un gesto de preocupación.
- ¿Otro de tus sueños? –le interrogó- ¿Por qué gritabas el nombre de Hermione?, te oí desde las duchas.
- La vi tendida en el suelo, estaba en un sitio tenebroso...- se llevó la mano a la marca infringida por la mano del señor oscuro, ya casi se le había pasado.
- ¿Qué crees que significa? – el rostro de Harry se entristeció con los recuerdos – Quizás no signifique nada, solo que Voldemort me quiere manipular. –no pudo evitar dejar escapar unas lagrimas.
No es muy largo, pero es lo más que pude
GABRIELA DE BLACK: Gracias, espero terminarlo (que si, que si, que lo termino) aunque me parece que será mas largo de lo que en un principio había planeado. Respecto a mi personaje favorito creo que es Ron (aunque es difícil decidirme) pero me encanta el carácter del pelirrojo y su buen corazón. No te pregunto el tuyo porque salta a la vista por tu Nick
KIOMI : Jeje, se que soy mala. Lo dejé así intrigante para haceros sufrir un poco. Ah, y soy de España, más concretamente de las Islas Canarias.
OPHELIA DAKKER : Ya ves quien era ¿a que no lo esperabas?, o a lo mejor si. Espero que te haya gustado el giro que toman las cosas, pero si no te gusta yo no tengo la culpa!! Son los personajes que hacen lo que les da la gana y como no les pago se revelan jajaja.
HERMIGINNY13 : Pues finalmente viste que Hermione era Hermione :P ¿te decepcionó?
Gracias por los reviews, espero más pronto y no tardaré en subir el proximo capitulo, no lo prometo pues citando a Rowling "cada vez que prometo algo tiendo a romper la promesa".
Harry miraba al mapa del merodeador y al rostro de su amigo simultáneamente, con cara de asombro. Ron a su vez también miraba a Harry con la boca abierta. Se esperaban que en el mapa apareciera cualquier nombre menos el que figuraba: H. Granger. Se quedaron como petrificados, era imposible. Eso significaba que era Hermione la que había humillado a Neville la que ahora estaba en el pasillo con Malfoy, a punto de...
-¡Quítale las manos de encima!- el grito de Ron había sacado a Harry de sus ensoñaciones, se dirigía hacia el Slytherin con paso decidido. Hermione lo observaba con asombro, Draco estaba ya sobre ella, la tenía acorralada contra la pared. Harry no supo que hacer, aun sostenía el mapa y seguía mirando incrédulo las etiquetas con los nombres, ahora la que ponía Wesley se acercaba rápidamente a Malfoy.
- ¿No te han dicho los pobretones de tus padres que espiar es de mala educación? – el rubio reaccionó unos segundos después de escuchar el grito de Ron, pues no esperaba que nadie hubiera presenciado aquella escena con Granger.
"Acaba de cometer un gran error", Harry sabía que en esos momentos estimular el enfado de su amigo no era para nada una elección inteligente. De hecho, nada más pronunciar estas palabras Ron levantó el puño y lo descargó contra la delicada cara de Draco. Aquel quedó tendido en el suelo, aparentemente inconsciente. Pero para cuando Ron se estaba acercando a Hermione, cualquiera sabe para qué, incorporó medio cuerpo y agarró fuertemente las piernas de su oponente haciéndolo caer bruscamente. Ahora los dos rodaban en el suelo, por turnos uno encima golpeando al adversario, hasta que el otro conseguía arrebatarle la posición. Harry observaba a Hermione, al principio parecía divertida, pero de repente empezó a temblar fuertemente y miró a Harry suplicante.
-¡Por favor! – le gritó, entonces ocurrió algo inverosímil, Hermione cayó al suelo. En ese momento la pelea terminó. Draco y Ron se habían quedado tan sorprendidos como Harry, que había salido corriendo en dirección a la chica para comprobar que le había pasado. Estaba tendida en el suelo, inconsciente.
-¿Ves lo que has logrado, hurón? – a Ron le sangraba el labio, aunque la pinta de Malfoy no era mucho mejor. Tenía un ojo morado y estaba muy despeinado, algo insólito en él. Para el asombro de los muchachos Draco parecía realmente preocupado. Miraba a Hermione extrañado de aquel repentino desvanecimiento. Luego su expresión cambió totalmente a la indiferencia, la que era habitual en su cara y se incorporó.
-Bueno, no es mi problema lo que le ocurra a esa- y se marchó cojeando por el pasillo antes de que Ron tomara de nuevo represalias por sus últimas palabras.
- ¿Qué ocurrió? ¿Tú lo viste, no?
- Bueno, no estoy seguro. Hermione estaba ahí mirando como peleabais – eludió la parte de la cara de satisfacción que estaba mostrando- y de repente empezó a temblar extrañamente. Entonces me suplicó y cayó al suelo. Esto me parece muy extraño.
La chica seguía tendida en el suelo, Harry la tomó por la mano para ver si reaccionaba. Entonces la manga acampanada de la túnica se deslizo hacia atrás y dejó a la vista en su brazo un gran moratón. Ron también lo vio .
-Se lo habrá hecho el desgraciado de Malfoy – le dijo a su amigo.
- Bueno Ron, ella no parecía muy reacia a ese encuentro – Harry intentó decirlo con la mayor delicadeza posible, el estado del pelirrojo era aún muy agitado. Por el modo de comportarse de la chica últimamente no le hubiera extrañado nada que hubiera sido precisamente ella la que hubiera provocado la situación.
En ese momento se despertó, y al verlos dirigió una cara de desagrado a Ron, como si el fuera el culpable de aquella situación sin embargo cuando miró a Harry le dedicó una sonrisa.
- Em, ¿Qué me ha pasado?
- No lo sé, te has desmayado de repente. –le contestó el moreno.
- ¿Te encuentras bien? – dijo el otro con gesto preocupado.
- Si, Wesley -aquello fue como un insulto para él- aunque quizás eso no sea de tu agrado ya me encuentro perfectamente.
La mejillas de Ron se empezaron a poner del color de su pelo, así le pagaba su preocupación y el altercado con el hurón. Cuando Harry le había dado la teoría de la poción multijugos el muchacho encontró la razón a el comportamiento vergonzoso de su amiga, pero el mapa del merodeador no mentía. Ya en cuarto había demostrado su eficacia y ahora el consuelo de que aquella que actuaba de una manera propia de los Slytherin no era su amiga se había desvanecido; tenía que admitir que realmente no conocía a Hermione Granger tanto como el pensaba. Si no quería su compañía por supuesto que no se iba a rebajar, así que se marchó haciendo grandes esfuerzos por no exteriorizar lo que sentía en aquellos momentos.
Harry imaginó lo que debía estar sintiendo su amigo en aquellos momentos. Si a alguien le importaba Hermione más incluso que a él mismo, esa persona sin duda era Ron. A pesar de su desmesurado orgullo y de su empeño en disimularlo, Ron no dejaba que nadie se metiera con la Gryffindor y era capaz de liarse a puñetazos, como acababa de demostrar, por protegerla. Ahora Hermione se lo pagaba con aquella actitud que ninguno de los dos hubiera esperado ni en el más absurdo de sus sueños. Ella había demostrado en múltiples ocasiones su fidelidad y jamás les había fallado, pero debían asumirlo, aquella persona tan extraña a sus ojos no era otra que Hermione Granger, y la hipótesis de la poción multijugos era errónea.
- Si ya te encuentras bien, tengo cosas que hacer – se excusó.
- ¡Por supuesto!, hasta luego entonces- se quedó allí observando como Harry partía.
Cuando llegó a la sala común había un gran revuelo. Alguien había recibido una lechuza con uno de los sombreros sin cabeza de los gemelos Wesley, que habían creado un catalogo especial de artículos por encargo a precios especiales para alumnos de Hogwarts. Todos carcajeaban cuando alguien se lo puso a Neville, pero los de primero parecían especialmente divertidos con el asombroso invento ya que nunca lo habían visto. Parecía que allí se encontraban todos lo Gryffindor, todos menos Ron y por supuesto tampoco estaba Hermione.
-¡Harry!- a pesar de que no veía su cabeza supo que quien lo había llamado era Neville. Este se quitó el sombrero y lo pasó a Ginny que se lo puso para regocijo de los demás, y se aproximó a Harry.- ¿Sabes que le pasa a Ron? Lo llamé cuando entro en la sala, y me mandó... Bueno, se puso muy grosero.
- Tengo una idea de lo que puede ocurrirle. Está en la habitación ¿no?
- Si, subió como una escopeta –le dijo señalando a las escaleras y luego volvió con los demás.
Harry se dirigió a la habitación de los chicos con pesadumbre, imaginaba lo que le esperaba, y aunque él no estaba de muy buen humor tenía el deber de animar a su amigo. Estaba todo a oscuras, así que después de cerrar la puerta dio la orden para que las luces se prendieran. La habitación estaba aparentemente vacía, Ron debía estar en el baño así que se sentó en su cama esperándolo en su cama. Tardaba bastante así que Harry se recostó.
Estaba en una habitación muy desagradable, tenía un cierto parecido con la clase de pociones. En el centro había alguien tendido en el suelo, estaba bastante oscuro así que desde donde él se encontraba no se distinguía quien era. Miró a su alrededor intentando encontrar alguna pista de donde se hallaba, pero sin resultado. Se aproximó hacia la figura que yacía en el suelo poco a poco, como si temiera que hubiera alguien acechándolo desde las sombras. Cuando alcanzó a ver de quien se trataba sus se agachó para ayudarla.
-¡Hermione, despierta!- ella no reaccionaba. -¡Hermione!
-¡Harry!- Ron lo sujetaba por los hombros, su pelo estaba mojado y estaba empapando a Harry, llevaba una toalla enrollada en la cintura - ¿Qué te pasa Harry? – la cicatriz le ardía intensamente, a pesar de que Voldemort estaba ahora libre y en plenas facultades hacía tanto tiempo que no le ardía de aquella manera que se había olvidado un poco de ella. Se incorporó, el dolor se había aliviado. Miró a su amigo que mostraba un gesto de preocupación.
- ¿Otro de tus sueños? –le interrogó- ¿Por qué gritabas el nombre de Hermione?, te oí desde las duchas.
- La vi tendida en el suelo, estaba en un sitio tenebroso...- se llevó la mano a la marca infringida por la mano del señor oscuro, ya casi se le había pasado.
- ¿Qué crees que significa? – el rostro de Harry se entristeció con los recuerdos – Quizás no signifique nada, solo que Voldemort me quiere manipular. –no pudo evitar dejar escapar unas lagrimas.
No es muy largo, pero es lo más que pude
GABRIELA DE BLACK: Gracias, espero terminarlo (que si, que si, que lo termino) aunque me parece que será mas largo de lo que en un principio había planeado. Respecto a mi personaje favorito creo que es Ron (aunque es difícil decidirme) pero me encanta el carácter del pelirrojo y su buen corazón. No te pregunto el tuyo porque salta a la vista por tu Nick
KIOMI : Jeje, se que soy mala. Lo dejé así intrigante para haceros sufrir un poco. Ah, y soy de España, más concretamente de las Islas Canarias.
OPHELIA DAKKER : Ya ves quien era ¿a que no lo esperabas?, o a lo mejor si. Espero que te haya gustado el giro que toman las cosas, pero si no te gusta yo no tengo la culpa!! Son los personajes que hacen lo que les da la gana y como no les pago se revelan jajaja.
HERMIGINNY13 : Pues finalmente viste que Hermione era Hermione :P ¿te decepcionó?
Gracias por los reviews, espero más pronto y no tardaré en subir el proximo capitulo, no lo prometo pues citando a Rowling "cada vez que prometo algo tiendo a romper la promesa".
