Nota. En este capítulo se hace referencia al 4x03 de "Momentos furtivos"
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6X07 EL INTERMEDIARIO
"¿No deberíamos estar hablando de cómo tu lindo culo va a sacarnos de aquí?"
"Eso quisieras. Mira alrededor. Todas las armas te apuntan a ti"
(Michael Kosina y Emily)
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Emily se sentó frente a Morgan, y dejó dos cafés sobre la mesita entre ambos. Derek había estado especialmente silencioso durante el vuelo de regreso desde Indiana, y Emily sospechaba el motivo.
— Si no me lo cuentas, acabarás explotando…— Lo alentó ella finalmente.
Morgan se limitó a dirigirle una mirada culpable.
— No es nada… Sólo estoy cansado.
Ella asintió, aunque no lo creyó ni por un segundo.
— De acuerdo… Supongo que ese cansancio no tiene nada que ver con que fuera yo quien llevara la negociación…
— Fue idea mía, Emily— Le recordó Derek— E hiciste lo que tenías que hacer… Ambos lo hicimos… Confiamos en el perfil. Michael Kosina no iba a disparar contra ti… Así que todo está bien.
Así que aquello era lo que le estaba molestando, reflexionó Emily. Morgan luchaba consigo mismo para contener sus sentimientos por ella en el trabajo. Al parecer, la razón y los sentimientos iban en direcciones opuestas cuando se trataba de su seguridad.
— ¿Entonces? ¿Cuál es el problema?— Le preguntó igualmente. Tenía la esperanza de que él verbalizara en voz alta sus miedos.
Morgan suspiró, e hizo un gesto de negación.
— Supongo que yo soy el problema…— Admitió Derek, resignado— Tan pronto Michael disparó a Chris, me cuestioné la decisión… Podría haber disparado contra ti, Emily. ¿Y si sólo te puse en esa posición para demostrarme a mí mismo que podemos trabajar juntos?
— Derek, todos estuvieron de acuerdo en que yo fuera quien negociara… Era la mejor opción, lo sabes… Fue una decisión acertada— Se detuvo un momento, tratando de encontrarle sentido a sus miedos— ¿Esto es por lo del caso de Ohio?— Emily aún recordaba claramente la inquietud de Morgan después de que James Thomas tratara de matarla. De eso ya hacía alrededor de un mes pero al parecer, Morgan no lo había olvidado.
— No lo sé… Tal vez— Vaciló él, negándose a reconocer lo evidente.
— El perfil era totalmente diferente— Señaló Emily— Y tú no estuviste de acuerdo con aquello… La decisión fue mía y Hotch lo apoyó. Tú lo respetaste, y estuviste ahí para asegurarte de que no me ocurriera nada, como siempre has hecho desde que comenzamos a trabajar juntos— Tomó su mano, suavemente— Derek, si no confiamos el uno en el otro en el trabajo no habrá forma de que consigamos que lo nuestro funcione.
Derek lo sabía, pero era difícil atenerse a la razón cuando su miedo a perderla era mayor a cualquier lógica.
— Confío en ti…— Dijo él— No confío en ellos— Recalcó refiriéndose a los sudes.
Emily resopló dramáticamente.
— Sí, supongo que ese hábito de dejar cadáveres a su paso no ayuda con la confianza. ¿Por qué nunca encontraremos asesinos en serie que no asesinen a nadie? Harían nuestro trabajo definitivamente más sencillo.
Morgan negó con la cabeza, conteniendo una sonrisa.
— No creas que no me doy cuenta de lo que intentas hacer.
Ella se enderezó y cogió la taza de café. Le dirigió una mirada distraída mientras tomaba un sorbo.
— ¿Funciona?
Aquella pregunta le trajo algún recuerdo a Morgan bastante agradable no mucho tiempo atrás. Algo relacionado con un callejón en San Francisco que había sido el reinicio de su relación. No tenía nada que ver con el tema sobre el que hablaban, pero en cualquier caso lo hizo sonreír.
— No estoy seguro de si es buena idea volver a ponerte en peligro de nuevo sólo para comprobarlo.
Ella entornó los ojos, dejando la taza de café sobre la mesa.
— El peligro me persigue Morgan, no es necesario que hagas nada.
El sólo hecho de ser consciente de que probablemente Emily tuviera razón, le provocó un escalofrío. Demasiados ejemplos, Cyrus, su accidente de coche, aquella vez en que un crío la apuntó con un arma… Morgan recordaba cada una de esas ocasiones en las que su vida corrió peligro al margen de las más recientes.
Aun así, había una que había quedado grabada en su mente con meridiana claridad.
— ¿Recuerdas cuando Cyrus te golpeó?
Emily asintió. ¿Cómo olvidarlo? Ni la paliza de Cyrus ni cómo Morgan cuidó después de ella.
— Fuiste muy dulce aquel día…Cuidaste de mí.
Sí, Morgan lo había hecho a pesar de las reticencias de Emily. Estaba realmente inquieto por cómo Emily había quedado después de aquella paliza.
— Lo escuchamos todo, ¿recuerdas?... Te estaba golpeando y tú no hacías más que decir que lo podías soportar.
Emily lo miró intrigada.
— Os hablaba a vosotros— Dijo, aunque asumía que eso ya lo sabía Morgan.
— Rossi se dio cuenta enseguida, igual que Hotch… — Se inclinó un poco hacia adelante y rozó el dorso de su mano con sus dedos — Y yo en lo único en que pensaba era en lo que le haría cuando lo tuviera delante…
— Derek, tu disparo estuvo justificado— Señaló ella, desconcertada— Sabíamos que intentaría volar todo el edificio, Cyrus no tenía intención de salir de allí con vida y tenía planeado no ser el único.
Emily lo leyó en sus ojos. Morgan se cuestionaba si lo habría dejado salir con vida si hubiera tenido opción. Emily estaba segura de que lo habría hecho, pese a sus dudas. No habría trasgredido sus principios sólo por venganza. Derek era impulsivo, pero no de esa manera.
— Aquel día me di cuenta realmente de lo fuerte que eres. No es que no lo supiera… Pero aquel día me lo demostraste a mí y a todos… Nos confirmaste la clase de persona que eres. Te sacrificaste por Reid a riesgo de perder tu propia vida.
A partir de esa confesión, a Emily le resultó sencillo establecer las conexiones.
— Dejarte llevar por las emociones no te hace ser más débil, Morgan. Desear matar a Cyrus no significa que llegado el momento lo habrías hecho aunque no hubieras tenido un motivo, al igual que sentir miedo de que me ocurra algo no implica que tus decisiones respecto a mí en el trabajo, no sean correctas. Deberías confiar más en ti mismo, Derek, porque todos en este equipo lo hacen.
— Es más difícil cuando se trata de ti…— Admitió él.
Ella sonrió.
— ¿Y crees que a mí me resulta fácil saber que eres capaz de conducir una ambulancia llena de explosivos por medio de una ciudad?— Preguntó sorprendida— Para tu información, sólo lo disimulo mejor.
De cómo Emily compartimentaba, sabía bastante Morgan, aunque sospechaba que aún le quedaba mucho por descubrir de ella. En cualquier caso, lo cierto era que hablar de ello lo había aliviado en gran medida.
—Al menos saqué algo bueno de todo aquello… ¿Quién habría dicho que gracias a Cyrus acabarías durmiendo entre mis brazos? Esa fue una noche especial, sin duda— Añadió guiñándole un ojo.
Emily tuvo que contener la risa. Aquella noche en que Morgan se había empeñado en llevarla a casa, había acabado dormida con él en el sofá mientras veían una película de Star Wars. Y sí, la noche había sido especial, de hecho, mucho más especial de lo que Morgan sospechaba.
— ¿Sabías que ese día era mi cumpleaños?— Le reveló Emily. No recordaba que alguna vez se lo hubiera mencionado, y justo aquella ocasión le parecía la correcta.
Derek la miró atónito.
— ¿En serio? ¿Por qué no me lo dijiste?
— No lo sé… Supongo que el dolor que sentía en cada parte de mi cuerpo me distrajo— Bromeó ella— Pero fue un detalle muy bonito por tu parte, aunque no lo supieras. No lo olvidaré nunca— Añadió en un susurro.
Morgan deseó tomar su rostro y besarla, pero en medio del jet, aquello era imposible, así que simplemente se conformó con una mirada silenciosa mientras contaba los minutos para llegar a casa.
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