Los personajes son de clamp.

FIC

-------------------- FLOR DE CEREZO DE CRISTAL---------------------

(Card Captor Sakura)

El día comenzaba, era un sábado y apenas salían los primeros rayos del sol. Un señor alto de cabello castaño claro, color de piel clara se acomodaba sus lentes para bajar hacia la sala y preparar su material de trabajo, para después ir a hacer el desayuno. Al reunir su material, lo hizo sin hacer mucho ruido para no despertar a sus 2 hijos, si, el tenia 2 hijos, pero desafortunadamente era viudo, su esposa había muerto hace ya 13 años, vio el retrato de su difunta esposa y sonrió un poco recordándola. Después de esto se dirigió a la cocina y preparó el desayuno, puso una canastita con pan dulce en la mesa del comedor y puso lo necesario para el desayuno.

En eso se escucho el reloj de la sala que marcaba las 9:00 a.m. y en ese momento se escucho también que bajaban las escaleras por tal sonido Fujitaka giro para cerciorarse que quien bajaba era alguno de sus 2 hijos. Si, efectivamente era un joven alto, ojos color café oscuro, cabello castaño oscuro y de piel morena clara, el cual llevaba unos jeans azules, una camisa blanca un poco ajustada al cuerpo (Realmente se veía bastante atractivo) y saludo a su padre.

-Buenos días papá- dijo el joven que terminaba de bajar las escaleras.

- Buenos días hijo, ¿Como amaneciste hoy?- Contestó y preguntó al mismo tiempo.

-Bien papá gracias, ¿Te ayudo en algo papá?-

-Si, podrías despertar a tu hermana y avisarle que el desayuno esta listo- Dijo aceptando la proposición de su hijo y con una sonrisa calidad en su rostro.

-De acuerdo- Contestó

Touya subió las escaleras y se dirigió a la habitación de su hermana, la cual el la llamaba "Monstruo". Tocó la puerta y después la abrió y vio a su hermana que aún dormía y la movió un poco para que despertara.

-Vamos Monstruo ya despierta, no es tiempo de que los "Monstruos sigan invernando- Dijo touya con una risa burlona.

-¡No soy ningún Monstruo, ya te lo he dicho hermano!- Dijo una joven castaña dueña

de unos hermosos ojos color esmeralda, realmente eran hermosos, parecían dos piedras preciosas los cuales tallo un poco para después abrir sus dos bellas esmeraldas y recibir los rayos del sol que anunciaban que ya era hora de despertar.

-No quería despertar aún hermano, además hoy es sábado, no es día de madrugar para ir a clases- dijo sakura levantándose de la rica y suave cama, que realmente no quería levantarse pero tuvo que hacerlo.

-Papá me pidió que te despertara y te avisara que el desayuno esta listo- Dijo touya saliendo de la habitación de sakura-

-Esta bien hermano, gracias- Dijo sakura con una sonrisa.

Después de unos cuantos minutos se vistió y bajo al comedor donde la esperaban Fujitaka y Touya. Sakura llevaba puesta una blusa rosa con cuello tipo V y en el cuello una gargantilla que tenía una flor de cerezo, unos jeans azules con un dibujo de una flor estampado y en los bordes del dibujo tenia unos cuantos brillitos, también llevaba unos tenis rositas que eran muy cómodos. Y se sentó en la silla correspondiente para desayunar.

-Bueno días hija, ¿como dormiste anoche?- Pregunto su padre sonriente como siempre.

-Muy bien papá gracias, ¿y tu?- Contestó

-También bien gracias-

-Pues como no iba a dormir bien, si hasta mi habitación se escuchaban los ronquidos de un Monstruo cercano a mi habitación- Dijo Touya burlonamente.

-Yo no ronco hermano, y si es que escuchaste ronquidos, tal vez fuiste tu mismo jajaja- Contestó la castaña en forma de defensa y riéndose por tal comentario.

-Desayunemos tranquilamente por favor- Dijo Fujitaka al ver que comenzaría una discusión- "Creo que esto nunca cambiara"- Pensó

-Bueno papá… tengo que irme, gracias por el desayuno, quede de verme con yuki para ir a nuestro nuevo trabajo- Adiós papa, adiós Monstruo, cuidado, no le vayas a hacer daño a alguien con tus garras- Dijo Touya sabiendo que sakura se enfadaría.

-Adiós touya, suerte- Despidió Fujitaka.

-¡UUYY! cuando entenderá que no me llame Monstruo, además ya no soy una niña- Dijo algo enfadada.

-Calma hija, sabes como es tu hermano- dijo esto en un tono calido y tranquilizador para la joven.

-Si, tienes razón papá, discúlpame-

-Y dime hija, ¿tienes planeado salir hoy?-

-No papá, hoy es sábado y como es día de no ir a clases, pues no tengo planes, pero veré que hacer, o tal vez quieras que salgamos o hagamos algo juntos papá- dijo la joven

-Oh, me temo que no va a ser posible-

-¿Por que papá, ¿Pasa algo?- Pregunto extrañada.

-No, no pasa nada, es solo que tengo que ir a un curso- Contestó

-¿Curso, ¿de que?- Preguntó intrigada

-Bueno mira, el curso es para los maestros de la universidad, es un curso donde nosotros los maestros hacemos ejercicios o métodos para los alumnos y así encontrar una mejor forma de aprendizaje para los alumnos y así sea mas sencillos para ellos, también nos evalúan a nosotros- Explicó

Sakura asintió muy interesada en al explicación de su padre.

-Oh ya veo papá, entiendo, y ¿a que hora es?-

-Pues…- vio su reloj y vio que marcaba las 10:00 a.m.- oh, pues es a las 10:30 (a.m.), creo que me tengo que ir tengo que llegar a tiempo-

-Oh, esta bien papá que te vaya bien, ¡suerte!- dijo sakura dándole un beso de despedida en la mejilla, nos vemos después- siguió sakura haciendo una señal con la mano y diciendo- ¡Adiós!.

-Gracias hija, nos vemos en la noche diviértete- dijo a sakura y subió a su auto.

-Ahhh, Bueno veré que puedo hacer. ¡¡¡Ah! Ya se, llamaré a tomoyo para hacer algo juntas, ¡¡si! podremos hacer la cena para esta noche- dijo entusiasmada.

Tomó el teléfono y marcó el número de su amiga.

-Mansión Daidouji ¿con quien desea hablar?- Contestó un mayordomo (Realmente era una mansión grandísima, lujosa y por supuesto bellísima).

-Si, habla Sakura Kinomoto, se encuentra la señorita tomoyo daidouji?- Contestó la joven del otro lado del teléfono.

-Si, un momento por favor, enseguida se la comunico-

En la sala de la mansión Daidouji:

-Mamá, es realmente hermoso, le va a encantar- decía una joven dueña de unos ojos color amatista, con una linda y sedosa cabellera grisácea hasta la cintura, con un pequeño fleco peinado hacia un lado, llevaba puesto un vestido blanco un poco ajustado al cuerpo, el vestido era de manga corta y en los bordes de las mangas tenia un detalle de color azul, en el su cabellera llevaba un broche de un color azul en forma de flor que brillaba por el sol que entraba por un ventanal de la sala.

- Si, estoy de acuerdo contigo hija- Contestó su madre, ella era Sonomi Daidouji, la madre de tomoyo, ella era hermosa al igual que su hija, pero aunque físicamente eran distintas, en cuestión de gustos eran muy parecidas. Sonomi era una mujer de negocios, casi no pasaba tiempo en su hogar y tampoco con tomoyo, pero siempre que tenia día libre la pasaba con su hija, disfrutaban al máximo la compañía tanto de una como de la otra.

-Sabía que te iba a gustar hija, pero en ¿donde crees que sea conveniente que lo guardemos en este momento?- Preguntó la señora daidouji, ella llevaba puesto un traje sastre de saco y falda beige, como toda mujer de negocios, elegante como siempre, debajo de su saco llevaba una blusa roja de seda, y también traía unos zapatos de tacón color arena que hacia juego con su traje sastre, llevaba el cabello como siempre lo ha tenido el mismo corte de hace 7 años, pero diferente acomodo.

-Por el momento creo que sería mejor dejarlo en el estudio, para que sakura no lo vea hasta el momento indicado- dijo la amatista con una gran sonrisa de oreja a oreja y emocionada.

Entrando el mayordomo a la sala y dirigiéndose hacia la señora daidouji:

-Con su permiso señora daidouji, señorita la llaman por teléfono-

-¿Quién es?-

-La señorita Kinomoto-

-Ah! muchas gracias Franchesco, puedes retirarte-

-Gracias, con su permiso- dijo el mayordomo haciendo una reverencia para después salir de la sala.

- Hola Sakura!- Saludó tomoyo.

-Hola tomoyo ¿Cómo estas?-

-Bien gracias, ¿y tú?-

-También gracias, tomoyo hablaba para preguntarte algo-

-Eh, si, dime sakura ¿Qué pasa?- Contestó tomoyo preocupada.

-Solo para saber si tienes planes para esta tarde-

-Pues…- Y miró a su mama que le hacia señas de despedida- Un momento, permíteme sakura-

-Si, de acuerdo-

-Mamá ¿A dónde vas?-

-Oh! Recordé que tengo algo importante que hacer, saluda a sakura de mi parte, nos vemos después cariño- dijo sonomi para después salir de la sala.

- ¿Si, Hola Sakura ¿estas ahí?- Preguntó tomoyo algo apenada.

-Ah! si tomoyo, ¿Que pasó?-

-Nada, bueno sakura sobre, si tengo planes para esta tarde, pues no, no los tengo, si gustas puedes venir a visitarme y hacemos algo juntas- dijo tomoyo feliz.

- Si, Bueno te hablaba, principalmente para pasar la tarde juntas y cocinar algo para la cena ¿Qué te parece?-

-Claro amiga, entonces te espero aquí-

-Pues… en realidad tenia pensado que fuera aquí en mi casa pero…- Y fue interrumpida por tomoyo.

- De acuerdo sakura, ahí estaré-

- Esta bien, entonces aquí te espero-

-Si! estaré ahí a las 7:00- (p.m.)- ¿de acuerdo?-

-Si, pero mejor a las 6:00 – (p.m.)- para Salir un rato, ¿de acuerdo?-

-Si! entonces a las 6:00, hasta entonces sakura, bye, bye- Se despidió tomoyo.

- De acuerdo hasta entonces- Contestó Sakura para después colgar.

-Bueno, entonces ahora solo tendré que preparar la comida, para cuando lleguen mi papá y mi hermano.

En eso vio el refrigerador y había una nota que decía lo siguiente:

"Querida sakura:

Tu hermano y yo no llegaremos a comer, llegaremos por la noche, así que no estaremos por lo pronto en casa, cuídate y diviértete mucho, y come bien por favor".

Con cariño, Tu padre que te quiere:

Fujitaka.

-Oh! bueno entonces prepararé lo suficiente para mi, prepararé un filete de pollo y lo acompañaré con una ensalada riquísima- dijo entusiasmada y hambrienta.

Después de que sakura comió, puso un disco en el stereo, era música tranquila y relajante, escuchó música sentada en el sofá por un momento y subió a su habitación por una lista de cosas a comprar para la cena y algunas otras cosas para la casa, bajó y se quedó nuevamente en el sofá, pero esta vez recostada en él, y se dispuso a escuchar la música miró el techo por un momento y sentía los ojos pesados entonces los fue cerrando hasta quedarse dormida.

Ya eran las 5:00 (p.m.) y en la mansión daidouji:

Tomoyo se dirigió al estudio para llevar ahí la figura que era hermosa, la que llevó Sonomi ese mismo día y que le fascinó a tomoyo.

-Ahhh- suspiró- Tal y como se lo pedí a mi madre que lo quería, es realmente hermoso, espero que a sakura le guste, por que es especialmente para ella- sonrió la amatista.

-Ahí! Muero de ganas por ver la cara de sakura cuando se lo entregue- dijo tomoyo entusiasmada e ilusionada y con estrellitas en los ojos imaginándose ese momento. (Jajaja, imagínensela).

La figura a la que se refería tomoyo era el regalo de sakura para su cumpleaños, que seria dentro de dos meses pero lo preparó con tiempo por que era algo especial para su amiga. El regalo era: una figura de cristal en forma de una flor de cerezo y abajo decía el nombre de su amiga. Era real y verdaderamente hermoso, eso era lo que realmente se puede decir Arte y era especial, algo justamente para su prima y mejor amiga sakura que ella era como una hermana, la hermana que nunca tuvo.

La vio por última vez para después taparla con una manta para que no estuviera al intemperie, así no se ensuciaría. Buscó entre un cajón del escritorio y encontró una cajita donde había lápices y lapiceras, la abrió y saco una lapicera, abrió otro cajón del mismo escritorio y sacó una hoja en forma de cuadro que es para dejar notas, y empezó a escribir lo siguiente:

Mamá:

Salí a la casa de sakura donde prepararemos la cena, vuelvo hasta tarde, prometo traerte algo especial.

Tu hija que te quiere:

Tomoyo

-Franchesco- decía tomoyo- Saldré a visitar a sakura, ¿Crees que puedas llevarme?-

-Por supuesto señorita, con mucho gusto- Respondió Franchesco.

-Gracias-

-Franchesco ¿Crees que mi madre vea la nota que le deje sobre el escritorio del estudio?- Preguntó la joven.

-Estoy seguro que si señorita, ¿Por qué la pregunta?- contestó

-Por que mi madre casi siempre esta ocupada y no pasa mucho tiempo en casa ni conmigo, la mayoría del tiempo se la pasa trabajando- dijo con algo de tristeza, y recordando uno de esos días de su infancia en los que tomoyo esperaba a su mamá hasta muy tarde y siempre se quedaba dormida, y no veía a su mamá hasta el día siguiente.

-No se preocupe señorita, su madre la quiere muchísimo y es lo más importante para la señora daidouji, usted es su mundo entero, solo que la señora trabaja muy duro para que usted este orgullosa de ella y nunca le falte nada- le explicaba el mayordomo.

-Si tienes razón, "Pero nunca me ha faltado nada"- dijo en voz muy baja.-"Solo me falta estar con ella mas tiempo, dinero nunca nos ha faltado, el dinero nunca ha sido problema, ella trabaja mucho por que es muy trabajadora y responsable, si, eso es lo que pasa- pensó tomoyo.

-Si, tal vez en realidad es eso- dijo tomoyo en voz alta.

-¿Si, señorita ¿Me decía algo?- preguntó franchesco.

-¿Eh…? No, nada, solo pensaba en voz alta-

-Oh, disculpe-

-No hay de que preocuparse-

-Bueno hemos llegado señorita- dijo franchesco avisando a tomoyo.

-Si, muchas gracias franchesco- dijo agradecida la joven

-¿Se le ofrece algo más señorita?-

-No, gracias franchesco, puedes volver a casa, yo llamaré cuando este lista ¿De acuerdo?-

-De acuerdo señorita, que tenga buen día- dijo haciendo una reverencia y al mismo tiempo se despedía.

-Muchas gracias igualmente-

La bella joven amatista, tocó el timbre y esperó a que su amiga le abriera la puerta.

-Ding dong… ding dong- se escuchaba el timbre en la casa de los Kinomoto.

Sakura apenas despertaba de su sueño, pero no recordó sus planes para esa tarde, se quedó completamente dormida y escuchó el timbre y vio el reloj que marcaba las 6:00 (p.m.), pero no hizo mucho caso y repitió la hora en voz alta.

-Hmm, son las 6:00, vaya que bien, como que tenia algo que hacer pero…, Ah tomoyo, es verdad lo había olvidado el timbre que escuche es el de aquí el de la casa, no del sueño, debe ser tomoyo ahí no! que tonta soy- decía una sakura algo asustada.

Corrió hacia la puerta rápidamente para no hacer esperar más a su amiga y prima.

-Ah! Hola tomoyo, disculpa por no abrir enseguida- dijo sakura muy apenada.

-No te preocupes sakura, todo esta bien- dijo tomoyo sonriente.

-Y dime ¿Tenías mucho rato esperando?- Preguntó sakura más apenada.

-No, era la 3ª vez que timbraba, además no te preocupes de verdad esta bien, cálmate- dijo riéndose.

-Disculpa por haberte hecho esperar, pero es que me quede dormida- y vio a su amiga que se estaba riendo- Un momento… de que te ríes tomoyo?- Preguntó confundida.

-Es que…- y se rió de nuevo- Mira!- y apunto hacia la cabeza de sakura y se rió de nuevo.

-Eh…?- Sakura no entendía nada.

Se dirigió hacia un espejo que estaba en la sala y vio que tenia el cabello alborotado, se veía algo chistosa con el cabello así, parecía como si un remolino hubiera pasado sobre su cabeza. Y sakura también se rió al verse así.

-Ah! jajá jajá es que me dormí en el sofá- explicó para después cepillarse su linda y castaña cabellera.-Listo, así esta mejor-

Tomoyo solo asintió y sonrió en forma de afirmación.

-Y bien, ¿Deseas algo de tomar tomoyo?- Preguntó sakura cortésmente.

-Agua estaría bien gracias- Contestó

-De acuerdo ahora vuelvo-

Sakura entró a la cocina y sirvió un vaso con agua para después salir hacia la sala y dárselo a tomoyo.

-Aquí tienes tomoyo-

-Gracias sakura- le dijo sonriente.

- Y bien ¿pensaste en algo para la cena sakura?- Preguntó tomoyo después de terminar de darle el primer sorbo al vaso con agua-

- Pues…, En realidad…Este… Mmm, tal vez tallarines y por supuesto un postre, ¿Que te parece?- dijo sakura

-Me parece bien- Contestó- ¿Tienes lo necesario?-

-Casi, solo falta comprar los fideos y un poco de chocolate semi-amargo para el postre, y… algunas cosas que hacen falta en la cocina- Terminó de decir sakura

-Muy bien, entonces ¡¡Manos a la obra, vayamos a comprar lo necesario- dijo tomoyo entusiasmada.

-Si¡¡.- contestó sakura, buscando su lista de cosas a comprar, pero no la encontraba y dirigió su mirada hacia una mesita que estaba al lado del sofá.- Ahí estas te encontré!-

- ¿Me decías algo sakura?- Preguntó tomoyo desde la puerta principal

-Eh, no vamos ¡-

Ya en la calle rumbo a su destino donde comprarían lo necesario, iban platicando sobre los bocadillos para la cena, pasaron por un parque, donde sakura vio a un chico dueño de unos hermosos color ámbar, con el cabello color miel, pero un poco más oscuro, era muy atractivo. ( N/A: ¡¡¡Todo un galán, jeje, como me gustaría haber estado ahí!).

El llevaba puesto una camisa color azul marino con un pantalón color caqui y unos zapatos cafés, (N/A: Se veía guapísimo!), un chico ideal.

La mirada esmeralda y ámbar se cruzaron por primera vez y sakura solo le regalo una sonrisa, (N/A: típico en ella jejeje ya saben), y siguió su camino, pero el solo volteo hacia otro lado y se portó indiferente y frío ante esa mirada de aquella bella chica y no le dio interés y siguió su camino.

-Entremos- dijo sakura para hacer reaccionar a su amiga.

Pero tomoyo no hacia caso al ver a una niña sola con un globo en la mano, pero en ese momento llegó una mujer bien parecida y tomó la mano de la niña y caminaron juntas evidentemente era su madre.

Tomoyo miró con nostalgia esa escena y recordó algo de su infancia:

-----------------------------Flash back--------------------

-Franchesco, ¿Por que no viene mamá a pasear con nosotros?- Preguntó la pequeña.

-La señora daidouji, no pudo venir con nosotros puesto que tiene bastante trabajo, pero tal vez la señora venga con usted a pasear la próxima vez señorita- dijo sonriente franchesco.

Tomoyo veía a los demás niños con sus padres y se sentía triste de que su madre no estuviera a su lado.

La pequeña miró a su alrededor y los demás niños empezaban a irse con sus padres a casa y ella volteo a su lado y ahí estaba Franchesco, un amigo que estaba siempre cuidándola y que siempre estaba con ella.

-Mamá- susurro la pequeña y miro hacia el cielo.

-Es hora de volver a casa señorita- Dijo franchesco mirando a la pequeña.

-Si- contestó tomoyo mirando y tomando la mano de su fiel amigo y mayordomo franchesco.

----------------------------- Fin del flash back-----------------------

-Tomoyo, tomoyo, ¿Estas bien, ¿Pasa algo?- Preguntó la castaña preocupada por su amiga.

-Eh? ah! si claro, perdón sakura entremos- contestó tomoyo reaccionando.

Compraron lo necesario y fueron a casa de sakura. Cocinaron lo que habían planeado, cenaron y tomoyo habló a su casa para que Franchesco fuera por ella, mientras sakura limpiaba la mesa del comedor.

-Bueno sakura- suspiró un poco- me la pase muy bien muchas gracias-

-No hay de que, yo también me la pase muy bien- dijo sonriente.

Después de unos cuantos minutos se escuchó que tocaban el timbre.

-Bien creo que es franchesco- dijo tomoyo dirigiéndose a la puerta principal.

-Si, de acuerdo- contestó sakura yendo tras de su amiga.

-Adiós, sakura nos vemos el lunes en la preparatoria, gracias por la cena-

-Si, nos veremos hasta entonces, y no te preocupes, mas bien gracias a ti que viniste y me ayudaste con la cena- dijo esto agitando la mano en señal de despedida- Que pases buenas noches-

Tomoyo subió al auto e hizo lo mismo que sakura, agitó la mano y el auto arrancó.

El lunes por la mañana en casa de los Kinomoto. (Bueno en realidad en la habitación de sakura).

Timbró el reloj despertador dando a conocer a su dueña que tenía que despertar.

-Ring…Ring…, son las seis horas con treinta minutos- decía el reloj.

-Mmm, oh un ratito más, solo 5 min.- y lo apagó y se quedó dormida por un rato más.

-Monstruo, vamos despierta, ¿No piensas ir a clases o que?- Dijo touya con su típico tono.

Abrió la puerta al no recibir respuesta de su hermana.

-Ah¡¡- suspiro- Lo siento monstruo, pero tengo que hacerlo- dijo touya con una risita divertida y se acercó un poco a ella como si fuera a susurrarle algo al oído.

-¡¡Auxilio!Un incendio! todo se quema ahhhhhh!- gritó y comenzó a mover la silla para hacer un poco más de ruido.

La joven se despertó sobresaltada y muy alarmada.

-¿Qué,¿Cómo, ¿Cuándo, ¿Dónde, Ahhh!- Pegó el brinco bastante asustada, al oír a su hermano con tremendo grito.

-Jajajajajaja- Touya se reía a carcajada suelta.

-¡¡¡Uyyy hermano!- gritó asustada y enfadada a la vez.

-Sabía que con eso era más que suficiente- dijo burlonamente saliendo de la habitación.

-Me asustaste ¡¡¡Tonto!- le reprochó- Me las pagarás ya verás- dijo enfadada.

-Ja, vamos mejor agradece que te desperté, ya es tarde y no despertabas monstruo- dijo touya desde la puerta. –Vamos date prisa si no llegaremos tarde-

-Ah, es verdad faltan 10 min. A las 7:00 (a.m.), ¡¡oh no, me quedé dormida de nuevo, Ah, ¿Donde esta mi uniforme, ¿Donde esta, ¿Donde esta¡¡, ahh, te encontré- Suspiró aliviada, se vistió apuradísima y salió de su habitación echando polvo de tan rápido que iba, bajó las escaleras y se despidió de su padre para después irse corriendo lo mas rápido posible para llegar a tiempo.

Llegando a la prepa y entrando a su respectivo salón.

-¡¡¡Hola sakura! por lo que veo, solo dormiste 5 min. de nuevo después de que timbró tu despertador ¿verdad?- rió tomoyo.

-¡Hola, jejeje, si solo 5 min.- dijo con una gotita en la cabeza.

-¿Ya viste a los nuevos compañeros de clase?- comentó tomoyo

-¿Nuevos, ¿Dónde?- dijo sakura sin entender nada.

-Ahí están- señaló tomoyo- "Al parecer todavía no despierta por completo, jijiji", -pensó.

Sakura giró un poco la cabeza para atrás, para ver lo que señalaba su amiga, y ahí estaba el chico que había visto el sábado por la tarde en el parque, el ambarino que les robaba suspiros a todas las chicas de la clase, junto con otro chico igual de atractivo, era guapísimo, era alto con cabello negro dueño de unos ojos color añil (índigo, o azul), era de piel blanca, con unos anteojos que le daban un toque interesante, eran guapísimos esos dos chicos, como unos galanes de ensueño.

Al lado del joven ambarino, se encontraba una bella joven de cabello negro, ojos color escarlata, delgada y de piel blanca, el cabello lo llevaba en una coleta y al igual que las chicas, los chicos observaban a esta hermosa chica.

-Ah! Hola, soy Kinomoto Sakura, mucho gusto-dijo saludando a sus nuevos compañeros de clase y con una gotita mas grande que la anterior.

-¡Hola! soy Hiragizawa Eriol, el gusto es mió- Contestó cortésmente el chico de ojos color índigo.

Sakura sonrió y respondió amablemente el saludo de mano de eriol.

Dirigió la mirada hacia los otros dos chicos, pero no hubo señales de nada, solo se mostraban indiferentes.

Hasta que la chica de ojos escarlata miró a la castaña y decidió saludarla al menos por educación ya que era nueva.

-Hola!. Li- Meiling, mucho gusto, él es mi primo Li-Shaoran- y le lanzó una mirada al ambarino.

-Ah, mucho gusto Li-Meiling y Li-Shaoran, bueno yo soy Kinomoto Sakura, y ella es mi amiga Daidouji Tomoyo, si gustan me pueden llamar por mi nombre- dijo amablemente. -Aunque en realidad, me parece que ya te he visto antes – dirigiéndose hacia el ambarino.

El ambarino solo tenía la vista perdida y no hacía caso a ningún comentario de la castaña, pero al escuchar lo último que había dicho, respondió- A mi no me parece, nunca te visto- Contestó aún con la mirada perdida en otro lado.

La castaña se incomodo por el comentario que había hecho, al parecer no había sido la mejor forma de romper el hielo.

-Lo siento, tal vez tengas razón, tal vez no eras tú, discúlpame por haberte confundido- dijo sakura tratando de corregirse.

-A sus lugares jóvenes por favor, la clase esta por comenzar- dijo el profesor entrando al aula, se sentó en su respectivo lugar y comenzó a nombrar lista.

Cuando terminó de nombrar lista: – Supe que hay alumnos nuevos, háganme favor de pasar al frente y decirme sus nombres completos y agregarlos a la lista- terminó de decir el profesor amablemente.

Y los 3 nuevos alumnos, se pusieron de pie y cada una le dio su respectivo nombre y volvieron a su lugar.

-De acuerdo, ¿ya nadie mas falta?- Preguntó- De acuerdo, entonces comencemos- y empezó a dar la clase.

-"Vaya es muy serio este chico y un poco raro, la chica me pareció amable y el otro chico me cayó muy bien"- Pensaba sakura, dirigió su mirada hacia tomoyo y sonrió.

Dieron el timbre y el profesor terminó su clase y se retiró, después entró el siguiente profesor de la siguiente clase.

-Bien jóvenes, Muy buenos días tengan todos ustedes- dijo el amable profesor dándose cuenta que había alumnos nuevos.- Y bien jóvenes ustedes son…-

Se pusieron de pie los 3 jóvenes y se presentaron ante el maestro.

-Perfecto jóvenes y díganme ¿De donde son ustedes?

Los primos respondieron primero: - De hong kong, profesor- contestaron los 2 en coro.

-Y usted joven- prosiguió el profesor dirigiéndose a eriol.

-Yo soy de Inglaterra profesor- contestó aún de pie.

-Bienvenidos sean jóvenes, bien, comencemos la clase de hoy-

Todos asintieron y se dispusieron a poner atención a la clase. Después hubo un receso y salieron a desayunar, como era costumbre tomoyo y sakura se reunían pero esta vez estaban también con ellas los compañeros nuevos de la clase.

-Y bien ¿Qué es lo que acostumbraban hacer en su rato libre?- Preguntó la amable tomoyo.

Todos miraron a la chica y eriol contestó la pregunto de ella. Mientras que el ambarino pensaba: -"Es verdad es la misma chica que vi el sábado en el parque, ja bueno que mas da, ahora será mi compañera de clase, como si en verdad me importara"- Y miró a la chica de ojos esmeraldas y sakura sintió su mirada y lo vio pero shaoran solo se volteo a otro lado, ignorando esas miradas.

-Bien, pues yo en Inglaterra pasaba el tiempo con mi prima Nakuru y su mascota Spinel Sun, y 2 buenos amigos y solo platicábamos sobre algún tema poco interesante. Pero era un ambiente agradable- contestó Eriol regalándole una bella sonrisa a tomoyo.

-Oh ya veo- contestó la de ojos amatistas.

-Y Ustedes ¿Qué hacen en este rato libre?- Pregunto eriol.

-Pues… nosotras comemos un pequeño refrigerio, y platicamos por un rato mientras dan el timbre y pues hacemos muchas cosas juntas- Sonrió tomoyo.

-Oh entiendo, cosas de chicas- Sonrió pícaramente.

-Jajaja, si por así decirlo- dijo sakura con una gotita en la cabeza y recordó al mismo tiempo que iban también a ver a algunos chicos jugar fútbol.

-Ya veo- Dijo meiling- Nosotros hacíamos algo parecido en hong kong, pero a diferencia de ustedes nosotros íbamos a hacer algunos asuntos de la familia, verdad shaoran- dijo meiling, para que shaoran se incorporara a la platica, pero no lo hizo.

-Si- Respondió Shaoran secamente.

-"Uff, creo que mi primo no va a cambiar mucho viviendo aquí, pero al menos que este aquí con nosotros ya es un avance"- Pensó meiling.

Sonó el timbre de entrada a clases de nuevo y todos volvieron al aula. Escucharon la clase hicieron sus debidos apuntes, y anotaron su tarea, que era poco. Después todos salieron para ir a sus respectivos hogares, pero los 5 chicos se quedaron al último, pero después se fueron tomoyo y eriol por unos libros a la biblioteca y meiling iría a hablar con el director, mientras que sakura y shaoran se quedaron a recoger los libros que habían quedado y los guardaban en un locker que tenia el profesor, eso lo hicieron por ordenes de él mismo.

-Bien, creo que solo falta aquel libro- señaló sakura hacia una butaca- Me lo podrías pasara por favor- decía desde un banquito en el que ella estaba de pie para alcanzar el ultimo espacio de la primer división, giró un poco para tomar el libro que le pasaba el ambarino y colocarlo en su lugar, cuando lo hizo volteo para atrás para bajarse del banquito pero se tropezó con su otro pie, y callo encima de shaoran que estaba detrás de ella, pero por el tropiezo de sakura ahora sakura estaba encima de él, por accidente……

"Este es el primer capitulo de mi primer fic espero que les guste"

ATTE:

Katsumi00 (Carolina)

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