Bueno, aquí les dejo el 3º cápitulo, más corto que el anterior, dejenme reviews sirve para incentivarse..jejeje.. Bueno recuerdo que Nada de esto me pertenece (exceptuando la historia) y que todo es de Jk Rowling y la WB. Dedicados a familia y amigos...
3º Capitulo: De vuelta a Hogwarts
Harry despertó muy temprano, todavía estaba oscuro, pero la cicatriz ardía demasiado, de nuevo ese sueño. Pero ahora el bastón tomaba forma, parecía un cetro con una piedra color esmeralda en la punta, y mientras todos se postraban una chica estaba agonizando a un costado, el pelo castaño oscuro y liso le tapaba la cara. Harry ya no estaba seguro de que esto sólo fuera un sueño.
Se levantó y abrió la ventana de su pieza. Ron todavía dormía, fue al cuarto de baño y se dio una larga ducha de agua helada, su cuerpo estaba afiebrado. Porque su vida tenía que ser así, él no la pidió, sólo lo destinaron a eso. Y tenía que sufrir. Sin padres, sin padrino. Decidió ir a ver al hipogrifo, tal vez eso lo alegraría, el pobre animal estaba tan triste como él, más que mal había sido todo un compañero para Sirius. Al entrar en la habitación se llevó una sorpresa, Ginny estaba sentada acariciando a Buckbeack.
Ginny¿Qué haces aquí?- preguntó el chico
Bueno no podía dormir, y necesitaba hablar contigo, supuse que te encontraría aquí.-contesto- Además nadie puede molestar, todos duermen- sonrió tímidamente.
Bueno, yo ya te dije, que lo sentía, por que tu estás con Dean y el es mi amigo, no puedo hacerle esto- dijo Harry sentándose al lado de la pelirroja.
Yo tampoco quiero hacerle daño, le rompería el corazón- dijo- Pero romperé el mío, si no le hago caso. Harry tu me gustas mucho, desde siempre-dijo y bajo la cabeza, una pequeña lagrima había logrado escapara de su ojo- Pero a ti te gusta Cho y yo no podía quedarme atrás tenía que continuar. ¿Entiendes?
Si lo se, por lo mismo no te puedo prometer absolutamente nada- Ginny lo miraba de una manera, que sólo quería besarla, pero antes estaba Dean.
Ahora Ginny fue la que se acercó, pero Harry no podía, se paró abruptamente espantando a Buckbeack
No, no puede ser. Lo siento- le dijo
Pero Harry, mira nadie lo sabr�, hasta que llegué el momento de terminar con Dean lo haré. Ahora no puedo, pero por favor. Yo te gusto, tu me gustas, que hay de malo con eso- respondió la chica
Que tú tienes novio-dijo sarcásticamente
Ginny se abalanzó y lo besó, Harry también lo hizo, le gustaba estar con ella, no era como con Cho, esto era más serio y menos superficial. Se quedaron abrazados al lado de Buckbeack hasta que amaneció. Luego harry bajó y se puso a leer El Profeta. Ninguna novedad, nada sobre Fudge, ni Voldemort. Eso lo asustaba, Voldemort debe estar planeando algo.
Me impresionas Colagusano, realmente, seguro que se te ocurrió a ti- preguntó Voldemort
Si… Si mi señor- respondió cabizbajo
Reconstruimos la casa y nadie puede notarlo, sólo los mortifagos, y estamos libres de todo, nadie se le ocurrirá que estamos aquí.- En eso una figura encapuchada entró a la antigua habitación de los Potter- ¿Me traes la poción?
Si, mi señor tenebroso- Bellatrix salió debajo de la capucha y en su mano llevaba un frasco- Aquí esta el Veritaserum
Dáselo -dijo con voz silbante – Ahora, necesito saber cual es su plan, o si sabe algo.
Bellatrix se acercó a un Cornelius, andrajoso y sucio, amarrado por cuerdas invisibles, el hombre estaba demasiado débil como para resistirse a tomarse la poción, ninguna tortura había funcionado, esto tendría que ayudar. Voldemort se acercó.
Bueno Fudge, tienes algún plan o algún secreto que quieras decirnos, respecto a Harry Potter y la profecía- dijo
Si- respondió secamente- Una nueva profecía ha aparecido, en realidad se ha descubierto, porque es milenaria, hace poco registramos el departamento de misterios-decía como una grabadora monótonamente- Sólo Dumbledore y Remus la oyeron, a mi me contaron sólo un poco.
Que te dijeron- preguntó Voldemort impaciente
Una chica, le otorgará el poder a Harry Potter, el poder de alguien legendario, no se quien. Eso permitirá que puedas batallar con él como un igual. Pero de conseguirlo tú, tendrás poder para destruir el mundo. – La cara de Voldemort se estiró, estaba sonriendo. Colagusano se llegó a asustar.
Sólo tengo que conseguir a la chica, y quitarle lo que sea el poder¿verdad? Tu sabes donde se encuentra- preguntó Voldemort ansioso
No y no, es más difícil de lo que parece. Prácticamente nadie sabe donde la chica se encuentra o quien es. Tampoco se que es el arma, pero lo que si se, es que sólo bajo la voluntad de la portadora podrás conseguirlo y ella no está de tu lado.- dijo serenamente como hipnotizado
Mátenlo, no sabe nada más, y arrójenlo al sótano- Bellatrix lanzó el Avada Kedrava hacia Fudge y lo hizo desaparecer.
Dumbledore no confía en él, que mal- dijo- ¿Quién y que ser�? Eso debemos averiguarlo, pero estoy seguro, que si Dumbledore sabe, la tiene en Hogwarts. Envía una lechuza a nuestros espías. Diles que averigüen todo lo que puedan. ¿Entiendes?- Bellatrix asintió y salió de la habitación
Sólo es cosa de tiempo, el plan de Dumbledore no funcionará averiguaré quien es esa chica.
Todos los chicos ya habían llegado a la estación King Cross, nuevamente Arthur había conseguido autos del ministerio. Uno a uno disimuladamente cruzaron el portal al andén 9 ¾. Ginny y Harry entraron juntos, pero Dean había aparecido besando a su novia. Ela no podía hacer nada más, miraba a Harry de reojo, pero él no mostraba signos de nada, pero por dentro hervía en celos, busco un compartimiento vació y dejó sus cosas junto a Ron y Hermione. Bajaron y se despidieron de todos. Los gemelos les dieron a todos un paquete con un poco de bromas, le dijeron a su madre que eran aperitivos para el viaje, mientras les guiñaban los ojos a los chicos. El tren comenzó a avanzar, los chicos de se subieron rápidamente y se despidieron de Molly, mientras los gemelos les daban cupones para su tienda. Luego de que Harry les diera los galeones, comenzaron a invertir y a crear y consiguieron un buen puesto en Hogsmeade. Habían ido a visitarlo durante las vacaciones, y era una tienda muy grande y bella. Les iba muy bien, Harry pensó que lo que hizo fue lo mejor.
Entraron a la cabina y una pelirroja ya estaba ahí sentada, mirando fijamente el paisaje. Hermione se adelantó.
Bueno, Ron, tenemos que ir al vagón de los prefectos, vana a darnos las instrucciones-le dijo
Ve tú, luego me cuentas- dijo el chico entrando
No, necesito que vayas, luego volveremos- lo tomó del brazo y lo arrastro. Harry entró y se sentó al frente, bajó la persiana en la ventana de la puerta antes.
Pensé que te irías con Dean- dijo el chico de pelo color azabache mirándola fijamente. Ella lo miró a los ojos
Le avise que me iría con ustedes- respondió- Harry lo siento mucho, no quiero que esto sea así ¿comprendes? Pero tu en verdad me gustas- la chica se paró y se sentó a su lado, le acarició la mano y le di un beso.
Ginny¡para! Se que no es tu intención pero estás jugando con los dos, lo siento- y salió de la cabina, dejando a la chica llorando. Caminó hasta llegar al último vagón donde se encontraban los baúles y otras cosas, se sentó entremedio de un par de cajas y se quedó dormido.
Ron, Harry no aparece-le dijo Hermione preocupada- Discutió con Ginny y se largó de ahí
Que le hizo a mi hermana-dijo Ron serio
Nada, más bien, al parecer Ginny le hizo algo a él- Ron pareció calmarse un poco
Debe estar por ahí, el sabe cuidarse
Pero no es seguro para él andar solo- decía Hermione mientras tomaba un carruaje junto a Ron, Neville y Luna, sin dejar de ver por la ventanilla.
Harry había despertado apenas el tren había parado. Bajo rápidamente y se fue caminando hacia Honeydukes, no tenía ánimos de ver a nadie, la cabeza le dolía y tomó el atajo. Llegó a Hogwarts, pero había un problema, no sabía la nueva contraseña. Los prefectos pasaban diciéndolas, pero el no había visto a Ron ni a Hermione, tenía hambre así que se dirigió a la cocina, ahí Lobby le daría todo lo que quisiera. Estaba bajando las escaleras hacia el pasillo del retrato del frutero, pero una chica salía de ahí con un plato de comida, Harry la siguió, pero había desaparecido en una esquina.
Era como de su porte, delgada y alta, usaba un uniforme de Hogwarts y su pelo castaño oscuro, liso y largo. Igual que la chica de su sueño. ¿Podría ser ella?
�¡POTTER¿Qué haces aquí?- la voz de Snape había interrumpido sus pensamientos- Tus compañeros no han llegado todavía, como es que ya estás en el colegio-dijo- Si el año ya hubiera empezado te habría quitado puntos, esta vez te salvaste-le dijo y se dio media vuelta.
Un alivio lo invadió, por poco Snape, lo descubre, se había salvado. De pronto miles de murmullos irrumpieron el silencio del vestíbulo, tenía que ir al Gran Comedor, entró en silencio y divisó a Ron y Hermione, al frente de ellos estaban Ginny y Dean. No estaba preparado aún, mejor sentarse con los de tercero, estaban bastante lejos de sus amigos. Esa cena no fue para nada grata, los chicos no paraban de hacer preguntas. Luego de un resumida selección. Once alumnos habían entrado a Gryffindor, ocho a Ravenclaw, siete a Hufflepuff y sólo 5 a Slytherin. La popularidad de esa casa había decaído con el regreso del Innombrable.
Apenas Dumbledore terminó con las indicaciones y advertencias, Harry partió a la sala común, se había conseguido la contraseña, con un chico de tercero.
-El honor y la valentía nos representan" – y la Dama Gorda di paso al joven muchacho. Sólo subió las escaleras y se estiró en su cama, no podía pesar en nadie más que en Ginny, pero de pronto recordó a la chica que había desaparecido. No estaba loco incluso había salido de la cocina, ella estaba ahí, pero quien era, que tenía que ver con Voldemort.
Al siguiente día Harry despertó mucho mejor, esa noche volvería a la cocina, y esperaría a que la chica saliera. Pero ahora tenía clase, bajo al Gran Comedor y se sentó con sus amigos, Ginny comprendió porque harry no se había sentado ahí y esta mañana estaba con sus compañeros bien lejos de Ron y Hermione.
¿Qué nos toca ahora?-dijo Harry sonriente
Pociones- dijo Ron desanimado
¿Por qué estas tan feliz Harry?-pregunto su amiga, mientras se servía té con leche
Bueno, es que ayer, ustedes deben saber lo que pasó, me vine por Honeydukes, entonces llegué antes que ustedes. La cosa que como no me sabía la contraseña no podía entrar a la sala común, entonces fui a la cocina porque tenía hambre, pero de pronto una chica iba saliendo de la cocina, y bueno resulta que vi a una muy parecida en un sueño, con Ustedes-ya-saben entonces, hoy la buscaré y averiguaré que se trae, así me despejaré, ya tengo todo un plan.- dijo el chico muy rápido
Pero no es una razón para emocionarse-dijo Ron
Bueno, como ya dije me mantendré libre y preocupado en otra cosa. Además creo que ella en verdad tiene que ver con Quien-Ustedes-Saben, Lugo les cuento- y el chico se preparó su desayuno, dejando confundidos a sus amigos.
Luego de una tediosa clase de pociones, los chicos tenían un bloque libre, así que fueron a la sala común. Harry los llevó a su habitación, cerró la puerta con cuidado y muy serio comenzó a contarles.
Bueno, hay alo respecto al año pasad, que no les he contado-dijo Harry
¿Qué ocurre?-preguntó Hermione
Bueno que existe una profecía sobre Voldemort y yo, está dice que el día de la batalla final, sólo uno sobrevivir�, y yo soy el único de destruirme, entienden. Por eso he estado algo distante y todo eso, he tenido que pensar mucho.
Porque no nos contaste antes-le dijo su amigo
Para no ponerlos en peligro, la cosa que últimamente he tenido estos extraños sueños y ahora estoy casi seguro que deben ser más bien como visiones.- una sombra oscureció su cara- Bueno la verdad es que en él Voldemort sale alzando una especie de cetro con una piedra color esmeralda, mientras mortifagos lo alaban y esa chica que vi aparece agonizando.- la chica se llevó la mano a la boca y Ron le acarició la espalda.- Y despierto cada vez más con más detalles y con fiebre y la cicatriz ardiendo.-dijo Harry con tono preocupado- Por eso quiero saber de ella, para ver si tiene más información, entienden- ambos amigos asintieron.- Ahora iré a dar un paseo haber si la encuentro- Y salió de la habitación
Caminaba por lo pasillos del colegio en busca de la persona que podría tener información sobre Voldemort, pero de pronto una mano le tomó el brazo y lo arrastró a una aula vacía.
¿Cho?-dijo Harry al reconocer a la chica que lo había arrastrado. Está estaba caminando de un lado a otro. Lo miró.
Lo siento Harry, por arruinar todo el año pasado-dijo la chica
No, lo siento yo, jamás debí aceptar algo contigo-dijo duramente
No digas eso-respondió, pero el chico ya había salido de la sala y seguía caminando sin rumbo.
Un viento congelado rozaba su cara, se subió el abrigo un poco. La cabaña de Hagrid estaba iluminada y emanaba humo por la chimenea, mientras que atrás una oscura y espesa neblina rodeaba al Bosque Prohibido. Harry tocó la puerta tres veces, en seguida los ladridos de Fang se escucharon desde adentro.
¡Cállate!- gritaba una gruesa y profunda voz desde adentro. De pronto un hombre que triplicaba su tamaño apareció detrás de una frondosa barba.- ¡Ah! Eras tu Harry, no te vi el primer día¿Llegaste en tren, supongo?
Si, es que tuve un problema y me bajé por la parte trasera del tren.- Hagrid y una seña para que pasara
¿Té?- el chico asintió, el semi-gigante se acercó a la cocina y tomó una tetera sirviendo el líquido en una taza enfrente del chico.
Y como estás Madame Maxime-preguntó Harry
¡Ah! Bueno- Hagrid se sonrojó- Ya somos pareja
¡Felicidades!-dijo el chico sonriente, viendo a su amigo más rojo que el pelo de Ron
Bueno, y supongo que a ti las chicas te lloverán-sentenció
El problema que a ninguna le puedo corresponder-dijo mientras tomaba el té
Bueno pero ya conocerás a la indicada¿o no?- el chico hizo una mueca con la cara
¿Y Ron y Hermione?-preguntó Hagrid
No se deben estar en la sala común-dijo- Salí porque estoy buscando a alguien.
¿A quien?
No lo sé, vi a una chica el otro día, se parecía a una que apareció en un sueño, creo que tiene que ver con Voldemort, pero desapareció a los segundos de haberla visto- dijo el chico. Hagrid demostraba su nerviosismo
Eh ¿una chica?... No era… ¿alumna?-dijo
Estaba con el uniforme pero nunca la había visto-respondió- Por casualidad sabes algo- dijo en tono de interrogación
¿Yo?...eh…nada…nada-dijo, miró a Harry- Bueno ahora tengo que ir a hacer la ronda, así que si me disculpas- sonrió y tomo la ballesta- Vamos Fang- y salió de la cabaña.
Harry guardó las cosas y salió, el lugar ya estaba oscuro. Entro al castillo, ya nadie se encontraba, si lo veían le bajarían puntos a su casa, así que mejor se apuraba, pero no antes de ir a ver a la cocina si la chica se encontraba, se quedó parado un buen tiempo en el pasillo, pero nada. Luego de aburrirse decidió ir a su sala común. La señora gorda estaba dormida, luego de despertarla y darle la contraseña, entró por el agujero en la pared. Por primera vez los veía, ahí, estaban sus dos mejores amigos besándose.
Ejem…Ejem…-dijo interrumpiendo, imitando a la cara de sapo de la Umbridge. Sus dos amigos tomaron un tono rojo fuego y se separaron bruscamente- Lo siento- dijo Harry
No te preocupes. ¿Y encontraste a la chica?-preguntó Hermione
No, pero fui a visitar a Hagrid, el y Madame Maxime, están igual que ustedes, ya son novios- los chicos sonrieron- Bueno, sigan en lo que estaban, yo no los molestó más-sonrió y subió a la habitación. Pero una pelirroja estaba apoyada dormida en la puerta de la habitación.
�¡Ginny!-dijo casi en un susurro, la chica se despertó-Ven aquí no es seguro hablar, la tomó de la mano y la llevó al baño.
La chica lo miró con profunda tristeza, tenía el borde de sus ojos rojos, había estado llorando.
Harry, en verdad lo siento mucho. Tienes razón he estad jugando con ambos. Espero que me perdones-dijo agachando la cabeza. Harry sabía lo que tenía que hacer.
Ginny, te quiero mucho, como amiga. Entiéndelo, lo siento si malinterpretaste- esas palabras le dolían mucho porque no eran verdad, pero más le dolía ver a Ginny sollozar- Yo fui el tonto, sólo olvídalo, por favor- se acercó y la abrazo.
Ginny sólo quería estar con él, pero no podía ¿Y Dean? No podía hacerlo sufrir, tendría que resignarse a sólo ser siendo amiga de Harry. Levantó su vista y le sonrió al chico de la cicatriz. Luego se soltó y bajo las escaleras con paso lento. Harry estaba muy deshecho, pero un poco más tranquilo. Se metió a la cama y durmió placidamente. Por fin ninguna pesadilla lo atormentaba.
