Disclaimer: Nada de esto me pertenece, bla, bla, bla..
Aquí esta mi 14º cápitulo, espero que les guste está algo emocionante.. Por favor promocionen el fic, quiero hartos RR!
Dedicado a todos uds.. Y els agradezco a quiene me han escrito.. Bye!
Disfruten la lectura
Capitulo 14: De compras en Hogsmeade
La navidad se acercaba al castillo, poco a poco los diferentes motivos aparecían por los pasillos. El Gran Comedor estaba visiblemente adornado, hileras de árboles se divisaban en las orillas del salón. Con pelotas rojas, doradas, verdes y azules, de todos los tamaños habidos y por haber.
Los fantasmas andaban por los pasillos cantando villancicos, e instando a las jóvenes parejas a besarse bajos los muérdagos. La nieve falsa ensuciaba n todos antes de las clases, los alumnos parecían como que hubieran estado horas bajo la nieve. Dumbledore si que amaba las festividades. Y al parecer últimamente a Snape también le gustaban.
Sus extraños comportamientos se le hacían evidentes a todo el colegio. Incluyendo a los Slytherins. Harry y Ron notaron de igual manera, que Hermione y Francis algo sabían. Pero cada vez que comenzaban a tocar el tema ellas cambiaban de conversación.
La relación Harry – Francis se mantuvo escondida incluso para sus amigos, sólo ellos dos lo sabían. Ambos se quedaban hasta tarde en la Sala Común, por los "deberes" y se iban tarde a la cama, después de conversar largas horas.
Todo casi se había venido abajo, en una clase de Pociones. Madame Pomfrey estaba enseñando los antídotos y el tratamiento para los que lograban salvarse de un ataque de vampiro. Los alumnos estaban muy atentos a lo que la profesora hablaba. Pero Harry y Francis estaban conversando y con la mano tomada bajo la mesa.
Ron y Hermione miraban a ambos un poco sospechosos. Ron sabía que Francis no podía estar con Harry por su seguridad, sólo no sabía el motivo, y últimamente ambos chicos estaban bastante amigos.
Señorita Francis, podría decirme ¿Qué hay que darle a los atacados por vampiros?- la chica no sabía la respuesta, rápidamente alguien más respondió.
Se les debe suministrar por las primeras 48 horas jugo de ajo con agua bendita cada 45 minutos. Después se dan el resto de los tratamientos, entre ellos las sesiones con crucifijos y madera.
15 puntos para Gryffindor-agregó la profesora- Pero la pregunta iba dirigida a la señorita Lake.
¿Verdad?-respondió Hermione haciendo se la ingenua- Le juro que escuche Señorita Granger.
Bueno será.
Gracias- Francis había dado la vuelta
De nada, pero que te ocurre.
Nada, sólo fue un despiste.
Pueden salir-dijo la profesora al sonar la campana- Quiero que para vuelta de vacaciones, me traigan un ensayo de 60 centímetros con la realización del jugo de ajo con agua bendita y sus materiales, lo prepararán a la clase siguiente a esa.
Y todos salieron de las frías mazmorras.
¡Harry!-el chico borró la sonrisa que llevaba al oír ese nombre, se dio la vuelta.
Cho…
Mi niño, tengo malas noticias.
¿Qué ocurre?
Se que prometí pasar las vacaciones de navidad contigo, pero mis padres están algo tensos, ya que trabajan en el ministerio y toso el asunto sobre Quien-Tú-Sabes, los tiene mal- hacía tiempo que Harry no recordaba a Voldemort- la cosa que pasaremos las fiestas en China con mi abuela.- Harry tenía problemas para disimular su felicidad.
¿De verdad?
Si, lo siento amor.- lo miró a los ojos y dijo apuntando disimuladamente con la cabeza a Francis- ¿Ella se quedará aquí?
¿Francis? No creo-respondió haciéndose el tonto.
Eso espero. Bueno me tengo que ir, debo arreglar mis cosas, partimos pasado mañana.-y con un fugaz beso se fue del pasillo, no sin antes darle una mirada llena de odio a Francis.
¿Qué ocurre?-preguntó Hermione al acercarse
Cho se va para las vacaciones navideñas.
Yo también-agregó Ron
¿Te vas?-dijo Hermione preocupada
Mi padre quiere que pasemos las navidades en la nueva casa. Pero no te preocupes, los invitó a todos.
No puedo ir-Francis sonrió de manera melancólica
Prefiero quedarme aquí-agregó Harry. Hermione se acercó a su amigo y le susurro: No creo que sea buena idea.
No te preocupes, pásenlo bien, ya habrá tiempo de conocer la mansión.
Vamos Herm, tenemos que arreglar las maletas.- la chica tomó la mano de su novio, su mirada demostraba preocupación. Ambos se marcharon.
¿Porque se preocupa tanto?
No lo sé-dijo algo nerviosa.
Vamos, se hace tarde, ya es hora de almorzar.
…………………..
Poco a poco el castillo fue vaciándose, dejando a muy pocos alumnos para las festividades. Este año en Gryffindor, sólo Harry y Francis pasarían las navidades en el colegio.
¿Quién más se quedará este año?
Ustedes dos, creo que Justin, dos niños más de Ravenclaw y tres de Hufflepuff. En Slytherin todos se van- respondió Hermione
¿Y profesores?
Todos-agregó la prefecta- Ocupan las vacaciones para hacer las planificaciones.
Ah…-Francis siguió ojeando su ejemplar de Corazón de Bruja.
¡Ron! Apúrate llegaremos tarde-Hermione gritaba hacia las escaleras.
Ya voy, ya voy-una voz se acercaba, Ron bajaba con un maleta del segundo piso.- ¿Y Ginny?
Ya se fue, debe estar camino a Hogsmeade.
Entonces vamos- Ron se acercó a Harry que venía bajando del cuarto de chicos.- Nos vemos Harry- y le estrecho la mano- Adiós Francis.-se despidió y su novia hizo lo mismo.
La pareja desapareció por el cuadro de la dama gorda, ya nadie quedaba en la sala común.
¿Qué hacemos?-preguntó el chico
¿Tienes algo preparado?
No, pero dime que quieres hacer.
Haber… ¡Vamos a las cocinas!
Buena idea-tomó la mano de la chica y se la llevó rumbo a los pisos inferiores.
Llegaron al cuadro con la frutera y le hicieron cosquillas a la pera, una puerta apareció delante de sus ojos, al abrir decenas de elfos se acercaron para servirles comida. Dobby apareció con una calceta a rayas azules y otra con unos lunares, uno de los gorros que Hermione había tejido el año anterior y un par de guantes. El resto de los elfos estaban muy abrigados también.
¿Y Winky?
El profesor Dumbledore ha dejado que vaya a ver a sus amos al cementerio.
Dobby¿Tienes algo para que comamos?
Porque no lo dijo antes señor.-Dobby chasqueó sus dedos y muchos elfos se les acercaron llevándoles de todo tipo de comida. El chico buscó una bolsa y comenzó a guardarlos.
¿El señor Harry Potter no se quedará aquí?
Acabo de recordar que debo hacer algo demasiado importante-se despidió de los elfos- Vamos-le dijo a la chica.
Corrieron a la sala común, Harry subió las escaleras, y al rato bajo con el mapa del merodeador y su capa de invisibilidad.
Iremos a Hogsmeade, ve a abrigarte y trae dinero si es que quieres comprar algo. Debo hacer las compras navideñas.
Esta bien, ya vuelvo.
En diez minutos ambos estaban frente a la estatua de la bruja tuerta.
"Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas"-el mapa comenzó a mostrar los pasadizos de Hogwarts.- ¿Ves? Aquí estamos: Harry James Potter y…
El mapa mostraba dos puntitos con sus respectivos letreros a un lado. El de Harry y el de…
¿Merlín¿Que ocurre?
Tal vez se averió
No lo creo, siempre ha funcionado.
O como nunca lo has utilizado conmigo, tal vez se cruzó con algo, y no funciona.
Pero, porque Merlín.
¿Qué voy a saber yo? Vamos que se hace tarde.
Esta bien-Harry retiró su vista del mapa un poco turbado y apunto la estatua- Dissendium.
Ambos bajaron por el pasadizo y caminaron hasta llegar al sótano de Honeydukes.
¿Qué quieres hacer primero?
Vamos a la librería.
Suenas como Hermione.
Tengo que comprar unas cosas que me falta-respondió la chica
Está bien.
Se fueron a la tienda y compraron unos metros de pergamino y algunas plumas.
¿Qué le compramos a los chicos?
Yo te ayudo con el regalo de Herm y tú con el de Ron
Me parece justo. No soy muy buena eligiendo regalos para chicas.
En el último paseo vi una tienda con libros muy antiguos, creo que podremos encontrar algo para Hermione-dijo Francis. Los chicos se metieron por unos callejones, hasta llegar a un negocio, que le hizo recordar a Harry Ollivanders.
"Ramose" unas letras muy sucias se veían encima de la puerta, no había ventanas. Entraron, y un timbre se escuchó en la habitación.
Bienvenidos a nuestra tienda. Soy Eratos ¿En que puedo ayudarles?- un viejo salió detrás de unas cortinas a un costado de la tienda.
Queremos comprar un par de libros para una amiga. Quisiéramos algo de ayuda.
¿Van en Hogwarts?
Así es-intervino Harry
¿Gryffindor?
¿Cómo lo sabe?
Porque tu eres Harry Potter-respondió apuntando su cicatriz- Y si acierto con lo que estoy pensando, buscan un libro para Hermione Granger.
Eso es correcto
La señorita Granger, siempre viene a comprar libros antiguos. Tengo una de sus listas por aquí. Nos hemos comunicado vía lechuza, ella investiga, me los pide y los pasa a buscar.
Entonces eso es perfecto. ¡Nos podrá decir que libros quiere Hermione!-dijo Harry emocionado.
Por supuesto. Su amiga se ha interesado mucho últimamente en la lectura medieval. Más que nada en los escritos de Merlín.
Harry miró a Francis, había demasiadas coincidencias. La chica no le dirigió la vista y se acercó a unos estantes y se puso a leer algunos manuscritos.
Pero el Antiguo Egipto se destaca entre sus pedidos. Compren uno y uno. Aquí tengo a "Argonáutica" escrito por Apolonio de Rodas. Y "Merlín, más que un hechicero" Anónimo.
Yo me llevó este-Francis tomó el de Merlín y lo pagó.
Entonces yo compraré este-Harry le pasó el dinero al hombre.-Muchas gracias.
Gracias a ustedes.- y el hombre desapareció tras las cortinas.
Vamos, todavía tengo que comprarle ese regalo a Ron-Francis se llevó a Harry de la mano.
¿Francis¿No te parece extraño que el mapa te haya nombrado como Merlín y Hermione este investigando sobre ello?
No
¿Pero es que tanta coincidencia?
Merlín es alguien muy común. Ya llegamos- estaban en la tienda de Quidditch.
Escobas en una esquina, accesorios en el otro costado, un estante con libros y un mueble con recuerdos del último mundial.
¿Qué le gustaría a Ron?-preguntó la chica
Cualquier cosa de los Chudley Cannons.
¿Chudley Cannons?
Es un equipo de Inglaterra
¡Ah! Mira ahí hay algo- Harry tomó un póster con el equipo volando.
Ya lo tiene.
Menos mal que vine contigo o si no me hubiera equivocado. ¿Y esto que te parece?
Eso jamás lo he visto en su habitación-Francis llevaba en su mano el uniforma completo de los Chudley Cannons. Harry se acercó a verlo- Pero es demasiado caro.
Lo compramos a medias ¿De acuerdo?
Esta bien- y salieron con una bolsa más.
Sólo me faltas tú y Dobby-dijo Harry sacando la cuenta.- Tendremos que separarnos. ¿Nos encontramos en Las Tres Escobas?
Está bien
Harry camino y camino buscando el regalo perfecto. Había muchas tiendas con regalos para chicas, pero no para chicas como Francis. Había maquillajes y ropa, todo para alguien como… ¡Cho! Se le había olvidado por completo su novia, entró rápidamente a la primera que encontró y compró un set de maquillaje mágico y una suscripción para la revista Corazón de Bruja por todo un año. Eso la dejaría tranquila. Al salir su búsqueda finalizó. Una joyería.
La tienda era preciosa, completamente de cristal, a excepción de las paredes que era hecha de espejos. Entró y s mirada se depositó una piedrecilla color verde, el mismo verde que tenía el collar de Francis.
¿Disculpe?
Hola señor. En que puedo servirle.
Bueno buscó algo para una chica, quiero que lleve ese piedra-respondió apuntando la esmeralda.
Podemos hacer anillos, aros, collares, pulseras, relojes…
Un anillo.
¿Compromiso?
No, no, no… No… Sólo es un regalo para la chica que me gusta, nada más.
En ese caso-la bruja sacó la piedra y la puso dentro de una cajita dorada de forma circular. Cerró los ojos y apunto con la varita, mientras susurraba unas palabras. La cajita tembló por unos segundos y la chica la abrió.
¿Qué le parece?
De adentro salió una anillo dorado con una curva en forma de S, en el medio la piedra color verde y otras dos color blanco más pequeñas a cada lado.
Está precioso, lo llevo. ¿Cuánto es?
10 galeones-la cantidad ni siquiera fue escuchada por el chico, sacó el dinero y lo guardo, en la misma cajita que fue creado.
Minutos después estaba llegando a las Tres Escobas, Francis ya estaba ahí bebiendo una cerveza de mantequilla.
¿Y como te fue?
Muy bien, aunque me costó encontrar tu regalo-dijo Harry
Lo siento-el chico sonrió
Hace mucho frío, pero que tal ¿Si salimos a las afueras del pueblo?
Me parece una excelente idea
Los chicos salieron de Las Tres Escobas, hicieron que les guardarán las compras en la taberna y fueron camino a la casa de los gritos. Encontraron un trozo de tierra que no estaba cubierto por nieve. Ambos se apoyaron en el tronco mientras conversaban animadamente de Quidditch.
De pronto un sonido como "plin" los hizo reaccionar. Dirigieron su mirada al camino por el cual pasaban los carruajes hacia Hogwarts.
Ahí se encontraban Peter Pettigrew y Bellatrix Lestrange.
¡No puede ser!-Harry dijo en un susurro- Ven-sacó su capa y se cubrieron quedando completamente invisibles.
Colagusano. Ven acá-decía un fría voz- El señor dijo que se encontraban por aquí.
No puede ser-repitió el chico- Como Voldemort sabe donde estamos si la cicatriz no me ha dolido.
Temo que has perdido tu conexión directa con él. Pero él no contigo-agregó Francis.
Lestrange, vamos, no los veo por aquí.- y ambos se fueron del camino internándose en el bosque.
Eso estuvo cerca-Harry se puso de pie y ambos salieron de su escondite, mientras entraban al camino para volver rápidamente al colegio.
Tratemos de apurarnos, no quiero cruzarme con e- pero no alcanzo a terminar la frase algo ya la había golpeado.
Dieron vuelta rápidamente y los dos mortifagos estaban de pie apuntando con la varita.
Tal vez me detuviste en el campo de Quidditch, pero no ahora-decía Bellatrix
Déjala en paz, ella no tiene nada que ver. Ustedes me quieren a mí.
Potter, hace bastante tiempo haz sido segundo blanco. Es a ella a quien queremos.
No pienso ayudarlos-gritó Francis
Querida, vendrás con nosotros a la fuerza, si no quieres cooperar. Peter aprésala.
¡No!-Harry se puso por delante
Harry, por favor no seas intrometido-Colagusano se acercaba más al ojiverde.
Siempre me arrepiento de no haberte matado en tercer año.
¡Ay chico! Ahorremos saliva y deja que me lleve a la chica.
Nunca- Harry la miró- Desaparece, nos vemos en el castillo.
No pienso dejarte solo
No te preo- nuevamente no pudieron terminar, Harry fue impulsado contra un árbol, quedó tumbado en el suelo.
¡Harry!- la habían hecho enojar- ¡Volare!
Unos troncos habían volado por los aires atacando a los magos oscuros cuando Francis había levantado sus manos.
--¡Crucio!
--¡Protego!
Veo que ocupas bastante ese hechizo jovencita
Sirve bastante
Pero no para él-apuntando a Harry- ¡Crucio!
Francis corrió. Pero cayó al suelo cuando uno de los troncos la golpeó en la cabeza. Tomó el palo con la mano.
Portus- musitó mientras tomaba a Harry de la muñeca, el chico tiritaba en el suelo tras la maldición. Tomó el tronco y sintió como la tiraban desde su ombligo. Apareció en las puertas del castillo.
