Capitulo 25: Mil fragmentos de Luz de amor, el amor inmortal
Nooo…. – se hallaba tirado en el suelo de la habitación, con los ojos aguados, y con un monton de gemidos en su interior, tratando de salir precipitadamente – nooo…. – Cerro los ojos con furia, y alzo su cabeza al altisimo techo – Nooo!
Kagura y Kanna lo seguian viendo, Kagura con una sonrisa se satisfacción en su cara, Kanna, inexpresivamente. Inuyasha estaba destrozado. De sus dorados ojos brotaban miles de gruesas lágrimas de dolor y desesperacion. No pudo salvarla, le habia fallado…
Inuyasha: Ahome….Ahome… - repetia una y otra vez, en un suspiro de terrible melancolia, hundiendose en su propia depresion y culpabilidad. Su mano apretaba con fuerza su pecho, tratando de calmar aquella punzada que le oprimia el corazón. – Ahome, mi querida Ahome…
Fue cuando la pequeña piedra que se hallaba en la llave que colgaba de su cuello, dio un pequeño y rapido resplandor. Inuyasha se dio cuenta, y su llanto se corto, siendo reemplazado por una ira incontrolable, pero el dolor en su pecho no sano. Se paro del suelo con algo de dificultad, pero al lograrlo, se quedo mirando con odio a las ninfas del mal.
Inuyasha: mas les vale… - decia, avanzando lentamente hacia ellas, poniendose en posicion de ataque – como puedo recuperarla…
Kagura: Ja! Eso es imposible, bestia, una vez que alguien muere, no se puede volver a recuperar.
Inuyasha: se que hay una forma! Mas te vale que me la digas, Kagura!
Kanna: si hay una forma…
Kagura: Kanna!
Inuyasha: dimela…
Kanna: al otro lado de la habitación…esta el deposito de almas…si logras sacarla, la salvaras…
Inuyasha fue hacia una grieta de donde provenia un resplandor verde. Las dos ninfas lo siguieron. Inuyasha se quedo en el borde de un risco, donde abajo habia un mar verde de almas, almas de todos los seres que quedaron alli atrapados.
Mientras, en otra parte…
Miroku: ya casi llegamos
Kirara dio un rugido de advertencia, y Sango se volteo.
Sango: cuidado!
Esquivaron una bola de fuego. Se pararon, y a lo lejos vieron seis figuras acercandose a ellos a toda velocidad.
Sesshomaru: los siete guerreros…
Victoria: ahora son seis
Bankotsu: jajaja! Miren esto! Si son nada mas y nada menos que el dios de la media luna y la diosa de la guerra. Que tal, Sesshomaru y Victoria?
Jakotsu: Ahhh! Sesshomaru! Sigues tan apuesto como siempre!
Sesshomaru: malditos…supongo que ese miserable de Naraku los libero…
Renkotsu: que inteligente – decia, lanzandose al ataque, pero fue detenido por Bankotsu.
Bankotsu: ya sabes las ordenes de Naraku. Vamos!
Bankotsu, Renkotsu y Jakotsu salieron velozmente en dirección al Monte de las Animas. Sesshomaru lo iba a impedir, pero Kyokotsu le bloqueo el camino.
Suikotsu: ustedes pelearan contra nosotros!
Mukotsu y Suikotsu estaban peleando con Sango, Miroku y Kirara, mientras Kyokotsu peleaba contra Sesshomaru y Victoria.
Sango: Hiraikotsu!
Suikotsu: ya veran, humanos!
La pelea duro bastante, y todos estaban cansados, sobre todo Sango y Miroku, ya que eran humanos. Por otra parte, Sesshomaru estaba desesperado por ir tras los otros tres guerreros. Quien sabia que irian a hacer con su padre.
Sesshomaru: ya estoy harto de esto. – saco su espada, y con un solo movimiento, destruyo a Kyokotsu por completo. Luego, salio corriendo en dirección a la montaña.
Victoria se habia quedado a ayudar a Sango y a Miroku.
Sesshomaru: "padre…aguanta un poco mas…"
Sango: no podremos…
Miroku:….
Sango: excelencia?
Miroku estaba callado, como reflexionando algo. Veian como Victoria peleaba contra Mukotsu, destruyendolo finalmente con su alabarda.
Sango: excelencia, qu tiene?
Miroku se bajo de Kirara, poniendose frente a Sango, extendiendo su mano derecha.
Miroku: "espero que funcione"
Quito las perlas azules de su mano, cuando un viento muy fuerte comenzo a sentirse. Nunca usaba su agujero negro de no ser muy necesario, siempre tenia miedo de cometer un error, pero ahora no tenia mas remedio. Sango miraba con miedo pero al mismo tiempo con fascinacion aquel ataque especial del joven monje. Era un agujero en su mano, que lo succionaba todo. Miroku estaba tratando de succionar a Suikotsu, y lo habia logrado, no sin antes que Suikotsu tomara una de las botellas de veneno de Mukotsu, haciendo que a la final, Miroku sufriera un dolor desde su mano.
Sango: Miroku!
Miroku: ah….Sango… - y se desplomo en el suelo. Sango salio corriendo hacia el, tumbandose a su lado.
Sango: Miroku! Miroku, respondeme! No puedes morir, no puedes dejarme sola!
Miroku: me encanta que…me digas Miroku…
Sango: pero, que dices? – se puso roja
Miroku: Sango…ah…hay algo que…nunca te dije…
Sango: no hables, por favor no hables…
Miroku: si no lo hago ahora…dime cuando, amor mio?
Sango abrio los ojos de la sorpresa. Victoria estaba observandolo todo, quedando enternecida con la confesion del joven monje. Por otro lado, noto el sufrimiento de la joven guerrera, asi que hizo su deber como diosa.
Sango: Miroku… - tomo su rostro entre sus manos – yo…tambien te amo…
Justo cuando Miroku cerraba lentamente sus ojos, Sango lo beso tiernamente, mostrando los sentimientos que desde hacia tiempo guardaba. Fue cuando algo la impresiono; Miroku le correspondia. Pero, como era posible?
Miroku tambien estaba sorprendido, y ambos se separaron lentamente contemplandose. Luego, Miroku se volteo hacia Victoria, quien sonrio. Sango fue a abrazarla llorando de la felicidad.
Sango: gracias! Muchas gracias!
Victoria: no tienes por que agradecerme… hice solo mi deber…
Miroku: si, pero nos devolviste la vida a ambos…
Victoria volvio a sonreir.
Victoria: no hay tiempo. Hay que alcanzar a Sesshomaru en la montaña. Naraku ya debe de haber llegado, haciendo sus fechorias.
Sesshomaru: cuidado!
Inutaishou: Sesshomaru!
Sesshomaru devolvio uno de los ataques que Bankotsu le habia lanzado a su padre. Inutaishou, y los demas habitantes del monte de las Animas estaban sorprendidos por lo que acababa de ocurrir. Inutaishou se volteo hacia una figura oscura que sobrevolaba los cielos sobre un corcel negro alado.
Inutaishou: tu…
Naraku: si, yo, a quien mas esperabas?
Inutaishou: crees que me venceras tan facilmente?
Naraku: pues…tengo a los tres mejores guerreros de los siente… - Bankotsu, Jakotsu y Renkotsu se prepararon para pelear – y esto… - alzo la ennegrecida perla, la cual lanzo varios rayos, atrapando en una carcel de luz a todas las ninfas, guardianes, diosas y dioses, excepto a Inutaishou. – Para ti, tengo algo mejor… - Lo hundio en una montaña de hielo mezclado con fuego, cubriendolo poco a poco.
Sesshomaru: padre!
Inutaishou: lucha, hijo!
Sesshomaru, quien estaba algo cansado, comenzo a luchar contra los guerreros, cuando un Boomerang gigante salio de la nada, lastimando a Renkotsu. Sango, Miroku, Kirara y Victoria habia llegado para ayudar a Sesshomaru.
Naraku: jajaja! Esto si que es divertido…
Kagura: entonces Inuyasha, ya decidiste lo que vas a hacer?
Inuyasha seguia observando el mar de almas, buscando algo con afan, y lo encontro. En el otro lado del mar, estaba la fragil alma de su dulce Ahome, con los ojos cerrados, como en un sueño eterno. Inuyasha queria seguir a su corazon, y su mente le decia que era lo correcto, y salto al mar de almas.
Kanna: si logras recuperarla, tendras su alma…
Kagura: pero si es demasiado tarde, morira…
Inuyasha nadaba en camara lenta, como si le costara demasiado avanzar unos pocos centimetros mas hacia la imagen de Ahome. Mientras mas avanzaba, mas envejecia, su cuerpo se debilitaba, pero su alma seguia con aquella hambre de triunfo. Kagura tomo un hilo negro, lo contemplo por un rato, y luego lo estiro lo mas que pudo. Kanna tomo unas tijeras grandes de acero, viendo que tuvieran buen filo.
Inuyasha nadaba y nadaba, pero parecia que no avanzara nada, pero en verdad si, poco a poco, se fue acercando al alma de Ahome. Kanna acercaba las tijeras al hilo, mientras Inuyasha estiraba la mano tratando de alcanzar aquella imagen frente a el, pero algo extraño paso. Sintio como su corazon le dio un vuelco produciendole una emocion extraña, y una voz en su mente: "Te amo…". Justo cuando toco aquella alma, ésta se partio en mil fragmentos.
En el Monte de las Animas, Naraku seguia disfrutando del espectaculo, cuando algo sorprendente paso; la perla de Shikon se escapo de sus manos, alzandose en el cielo. Su color negruzco paso a su estado original, uno violeta brillante. En eso, la perla tiembla un poco, y comienza a desprender un brillo encegador, y, seguidamente, se rompre en mil fragmentos, los cuales salen disparados hacia todas las direcciones de la region del Sengoku.
Naraku: la perla de Shikon…
Sango: que…que fue lo que paso?
Kanna seguia acercando las tijeras al hilo, y justo las iba a cortar cuando…
Kagura: ehh? Que pasa?
Kanna: no se puede cortar el hilo…
Kagura: Kanna…mira…
El hilo, antes negro, ahora brillaba de color plateado intenso. Fue cuando vieron salir del mar de almas la figura de Inuyasha, pero estaba diferente; su cuerpo estaba siendo rodeado por un aura plateada, totalmente celestial. Inuyasha levanto su mirada, viendolas con ira, pero algo mas calmado.
Kagura: pero…si eres un dios!
Inuyasha: asi es…preparense ninfas del mal…nunca jamas atraparan las almas de los inocentes para encarcelarlas en el inframundo…
Con sus garras, hizo la señal de garras de acero, pero éstas eran plateadas, y Kanna y Kagura no podian moverse por cuestion de segundos, cuando fueron completamente destruidas. Inuyasha se quedo mirando su aura.
Inuyasha: y ahora…a rescatar mi corazon…
Y salio corriendo de aquel lugar, hacia donde deberia estar.
Shippou: Ahome…
Myoga: no….esto es imposible, esto no deberia pasar…
Shippou: eh…? Inuyasha?
Myoga: Amo Inuyasha? Es…es un dios!
Inuyasha habia llegado a donde se encontraban Shippou y Myoga, y el cadaver de Ahome. Se arrodillo ante su querida amiga, aquella que…
Inuyasha: ….siempre me comprendio, siempre me apoyo, y siempre me quiso por lo que soy… - la tomo en brazos, como arruyandola – Ahome yo… - acercaba su rostro poco a poco al de ella - …tambien…te…te amo… - dijo dulcemente, rozando sus labios con los de ella, y dandole un dulce beso. De la nada, comenzaron a aparecer miles de fragmentos de luz, los cuales se unian al pecho de Ahome en una luz violeta, y finalmente, penetrando en ella. Ahome dio un respingo, correspondiendo dulcemente aquel beso del amor de su vida. Shippou y Myoga estaban embobados por lo que acababa de suceder. Inuyasha y Ahome se siguieron besando por un rato mas, cuando se separaron lentamente.Ambos se sonrieron con dulzura. Inuyasha la abrazo protectora y desesperadamente – Ahome, estas viva! Estas viva!
Ahome: nunca podria abandonarte, amor mio…
Inuyasha: Ahome…me di cuenta…muy tarde, perdoname, te hice mucho daño, no supe cuidar tu corazon, por favor, perdoname…
Ahome: Shhh – le puso un dedo sobre sus labios, tratando de calmarlo – Inuyasha, me amas, y eso es todo lo que importa. Y mi corazon siempre fue tuyo, desde que te conoci…
Inuyasha: estoy feliz de hacer vuelto a recuperar al amor de mi vida, y a mi corazon – le dijo, abrazandola dulcemente. – nuestro amor es para siempre…
Ambos se encontraban abrazandose al otro, con todo el amor del mundo.
Inuyasha y Ahome: nuestro amor es Inmortal…
