Hola, este fic se me ocurrió mientras la lluvia azotaba mi ventana en una noche fría de invierno…nah. Sólo se me ocurrió después de oír una canción con el mismo nombre. Espero que les guste.
Blablabla- tiempo real.
Blablabla- Recuerdos, flashback, etc.
Sin más el fic…
Tonight.
Tocó una vez más. La tercera. Es que no había nadie en esa casa? Por qué no podían simplemente abrirle la puerta? Era tan sencillo…
-Me voy mañana.
-Qué? Por qué?
-Ordenes de Saori.- dijo secamente el joven caballero.
Las nueve menos diez. Saori se enfadaría si perdían el avión. Y él no quería que ella se enojara. Cierto?
-Estas empapado.
-Olvide el paraguas.
-Te traeré una camisa seca.
-Necesitaba verte.- El la tomó de las manos, evitando que ella se diera la vuelta.
-Yo también.- dijo ella con cara de tristeza mientras bajaba la mirada.
Realmente se estaba enojando. Buscó el cosmos de aquel al que buscaba. Sí, estaba dentro de la casa; aunque tan débil que Seiya supuso que lo había hecho a propósito para que no lo encontraran. Esbozó una sonrisa.
-Entonces…
-Por que no te quedas?- le dijo esperanzadoramente.
-Tu sabes que no puedo.- Negó el joven rubio con la cabeza.- Juré proteger a…
-No. Me refiero…- Ella se ruborizó en extremo.- Por que no te quedas esta noche?
-…
-Ya sabe que estoy aquí.- Dijo Hyoga mientras escapaba al abrazo de su amada.- Seiya lo sabe.
-Entonces debes irte.- Le dijo Flare mientras le alcanzaba el pantalón.
-Yo no puedo ofrecerte nada a cambio.
-Lo sé.
-Ni dinero, ni lujos, nada.- El se alejó de ella.- Ni siquiera que sigamos juntos.
-Lo sé.- Ella lo besó en los labios, lenta, suavemente.
-Aún así quieres…?
-Sí.
-Flare, algún día te arrepentirás…
-Hyoga, es mi decisión. No te pido nada. No espero nada. Y no me voy a arrepentir.- dijo ella seriamente mientras le quitaba, botón a botón, la camisa.
-Hyoga, abre la puerta!- Seiya tocó con su puño una vez más, mientras alzaba un poco la voz. En medio de todo esto, el encontraba la situación algo divertida, por así decirlo.
-Vamos, vístete.- Flare le revolvió el cabello mientras él la abrazaba sin ganas de soltarla.
-Hueles delicioso.
-Hueles delicioso.- Dijo el mientras acariciaba su cuello con las yemas de sus dedos.
-Hyoga…- el empezó a desabotonarle tortuosamente despacio la blusa.
-Sí?
-Te ayudo?- dijo ella mientras se quitaba la blusa de un tirón.
-Sí…recuerdo que lo mencionaste ayer.
-A sí! Bueno, que quieres que te diga. Me tienes loco.
Luego posó sus níveas manos en la piel tersa del vientre de ella. Llegando a otro botón, un poco más abajo.
-Te amo.
-Yo también te amo.
La noche duró una eternidad. Ambos cuerpos se hicieron uno, mientras descubrían algo totalmente nuevo para los dos. Al amanecer, estaban exhaustos, pero tan felices como nunca. Hasta que llegó Seiya.
-Te voy a extrañar.- le dijo él a ella en el oído.
-Cuídate.- fue lo único que ella atinó a decirle, mientras le colocaba su bufanda alrededor del cuello.. No me olvides.
-Prometo que regresaré pronto.
-No hagas promesas que no puedas cumplir.- ella lo cayó con un beso en la boca. El último beso que le daría.
.-.-.-.-.
Espero que les allá gustado! Aunque nuevamente quedó algo cursi, a mi me encanta esta pareja y me gustó el resultado final.
Sí llegaron hasta aquí, déjenme un review! Se aceptan sugerencias y retos…
