CAPITULO 10:

Finalmente, la verdad.

Vete, vete, vete antes que yo
pueda desatar
mis manos de estos harapos

Vete, vete, vete antes que yo
sienta confundir
mis ánimos con tu reflejo

Vete, vete, vete antes que yo
aprenda a hilar tu cabello
termine mi armadura

No
como podría adivinar
y no
como podría adivinar
y no sabía
y no sabía
cuanto puedo extrañar

Vete, vete, vete antes que yo
antes que yo
intente evitarlo

- Vete, Lucybell

RAPHAEL

¡Leo!

Fue como salir de golpe de un sueño.

Me escuché gritar en mi cabeza, casi al instante siguiente en que su cabeza fue a hundirse en el piso.

Pero no pude hablar, no pude moverme...

¿Pero qué mierda me habían hecho?.

Lo vi todo en cámara lenta sin poder detener nada.

Me impulsé hacia delante y tiré de mi con todas mis fuerzas...

Nada. Volví a intentarlo... el sudor me corría a chorros y apenas si había logrado moverme... Pero me había movido: de a poco comenzaba a recuperar el movimiento, de a poco a la vez.

Cada movimiento era un esfuerzo sobrehumano... con una espantosa lentitud...

Ambos hablaban entre ellos ahora, él gritaba... no podía entender lo que decían... no me importaba tampoco...

La levantó por el cuello... apenas si alcancé a ver su mano moverse hasta ella...

Iba a seguir con Sora, Leo no le importaba, era a ella a quien quería destruir... Leo sólo se cruzó en el camino... nunca tuvo nada que ver...

No tenía nada que hacer ahí, no debió estar ahí, nunca, maldita sea... ¿por qué mierda tenía que ser así¡todo esto es culpa de él!... lo odio por esto, lo odio por estar aquí, los odio a ambos por atreverse a mirarme a la cara después de lo hicieron¿cómo pudo¿en que mierda estaba pensando? Lo odio por hacerme sentir esto, los odio a los dos...

.- ¡Leo!.- Volví a gritar, pero no respondía... ¿cómo iba a hacerlo? Sus sesos estaban repartidos por el piso...

Estaba viendo su sangre manchar el piso, su propio cuerpo... con las manos todavía amarradas...

Lo sabía incluso sin acercarme más, era imposible que estuviera vivo... nadie viviría mucho después de un golpe como ese, y por la forma en que estaba ahí tirado, tan inmóvil...

Dios, no...que no sea verdad...

.- ¡Leo!- volví a llamar, rogando que me contestara.

Battou continuaba a su lado, lo había dejado ahí, perdiendo todo interés en él.

Ni siquiera se había vuelto a verlo otra vez, acabó con Leo sin darle mayor importancia a la cuestión...

Sus manos seguían atadas a su espalda... cuan indigno...

Cuan indigno para él.

Corrí hacía Battou le iba a perforar la garganta de lado a lado... me iba a embarrar con su sangre...

Iba a masticar su corazón y esperaba que estuviera vivo aún para verme hacerlo...

Un líquido caliente me bajó por las mejillas... grité... pero no sirvió... eso no hacía que la pelota en la garganta pasara...¿cómo pudo hacerme esto¿es que no bastaba con lo que había hecho ya?... no podía ser, no era verdad. Tal vez no fuera verdad...

Volvería la vista y estaría ahí, levantándose.

Tal vez sólo me estaba adelantando... tal vez sólo exageré...

Tal vez pudiera pensar en eso más tarde.

Battou apenas si me dirigió una mirada.

Soltó a Sora y se volvió por completo hacia mi.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca, me hizo a un lado con el brazo, sin el menor esfuerzo, mandándome a volar lejos.

Me acomodé en el aire, giré boca abajo y volví a estar frente a él. No esperé a que mis pies tocaran firme el piso antes de volver a lanzarme.

Le arrojé un sai contra la garganta. Dejó de mirarme un segundo, distraído por el objeto que volaba hacía él.

Ocupado en hacerlo a un lado, no vio el resto de mi que llegaba contra él.

El otro sai iba contra el pecho... pero atrapó mi muñeca y la quebró sin vacilar antes de que pudiera llegar a tocarlo.

El sai cayó al suelo.

Pateé su estómago, logrando que me soltara y tomando impulso para saltar hacia atrás y guardar distancia y cargar contra él otra vez...

Descargué todo mi peso contra su cuerpo, mis dos piernas contra su pecho...

Apenas si lo hice tambalear... era como darle a un muro de piedra.

Cuando mis pies volvieron a tocar tierra, una de mis manos colgaba a un lado como un trozo de trapo, la otra voló a su cara...

Lo golpeé una y otra vez con todo lo que me quedaba, hasta que su cara no fue más que un borrón...

Retrocedí jadeando... creo que me había partido un par de nudillos a esas alturas...

Mi respiración salía como un quejido largo y agudo.

Y él no tenía un solo rasguño...

Nada.

Sólo me había dejado golpearlo.

Me di un segundo para pensar mientras resoplaba, tratando de ignorar el dolor...

Y entonces fue cuando miré a mis pies.

El cuerpo de Leo estaba justo ahí, a mi lado... seguía espantosamente inmóvil... Lo miré sin querer, mis ojos casualmente se posaron sobre él.

Sentí un escalofrío en el cuerpo, una cosa helada que se revolvió en mi estómago.

No me di cuenta lo cerca que estaba.

Supongo que hasta entonces había estado tratando de no verlo...

Ahora no se podía evitar.

Parpadeé confundido... retrocedí estúpidamente asustado...

Era como si lo viera por primera vez...

Como si nunca en mi vida hubiera visto un cadáver.

Por un segundo pensé que se movería...

Por un segundo esperé a que se pusiera de pie...

Pero no lo hizo... estaba ahí...

Espantosamente inmóvil

No... no era cierto.

No era cierto, era estúpido, no tenía sentido...

.- No...

Pero era verdad.

Era real, lo estaba viendo.

Ni siquiera tenía que tocarlo...

Me dieron ganas de vomitar.

Me tambaleé y retrocedí...

Battou desapareció de mi mente por un instante... de pronto matarlo ya no parecía que iba a ser suficiente.

No podía ver... estaba mareado, apenas si me aguantaba en pie...

De pronto estaba insoportablemente débil, se me doblaban las rodillas...

.- No...- quise gritar, pero no salió nada... no salió nada de la garganta.

Dios mío... haz que no sea cierto... haz que vuelva a mirar y no sea cierto...

Esperé con la vista fija en él, esperando ver su cuerpo inflarse de aire...

Pero no.

Ya no estaba respirando.

Lo estaba mirando y no se movía.

Parpadeé tratando de enfocar la vista...

No podía perder en un segundo lo que había tenido toda la vida.

No tenía sentido. No debió terminar así, nunca debió tener nada que ver en esto.

¿Qué mierda había venido a hacer a este lugar!

¿Cómo pudo hacerme esto¿por qué no se levanta? lo odio, lo odio por hacerme esto...

¿No era suficiente con lo que había hecho ya...? todavía no le había dicho lo mucho que me había decepcionado, todavía no le había dado tiempo de inventar estúpidas excusas...

Todavía no me daba tiempo para perdonarlo...

Y se fue... cuando todavía lo odiaba más que nunca... ¿cómo pudo hacerme eso?...

.- ¡Leo!...

Grité otra vez...

Pero no pasó nada.

Me tomé la cabeza, a ver si así dejaba de girar y podía pensar.

.- Lo mataste...- balbuceé con los ojos pegados en el cuerpo que de seguro ya se estaba poniendo frío.

Estúpido de mi...

Estaba absurdamente perplejo.

Pensar que no quería verlo más y ahora daría cualquier cosa porque se moviera un poco...

Pensar que ahora cualquier cosa parecía tan fácil de perdonar.

De haberlo sabido... de haberlo sabido antes.

.- ¿Por qué?

Miraba a Battou quien me veía sin verme... sin expresión alguna.

Eso fue lo último que pude decir y ni siquiera sé si llegué a pronunciarlo...

Tenía los dientes tan apretados que no estoy seguro de haber sido capaz de hablar.

Tenía que sacarlo de ahí, llevarme a Leo de ese lugar... sacarlo de ahí...

Battou no dijo nada.

Me golpeé la frente con la mano que aún podía mover...

Una lluvia de gotitas cayó de mi cara...

Me volví a tambalear... pero esta vez afirmé las piernas en lo sólido...

Perdía mi tiempo en pedir explicaciones... el tipo era un asesino...

Bien.

Yo también.

.- Ruega a Dios misericordia por tu alma...- le digo mientras me preparo. Él sonríe.

.- Sería inútil.- contesta, mientras se vuelve completamente hacia mi, esperándome.

Nunca pensé que sería yo quien tendría que vengarlo...

¿Y ella?.

Ella está ahí, mirando, con los ojos abiertos de par en par... mirándome sorprendida...

Cómo si no entendiera nada.

Ojalá no estuviera aquí. Ojalá no fuera ella... duele demasiado que sea ella, que haya sido quien llevó las cosas hasta este punto, incluso si me lo tenía merecido.

Porque tal vez me merecía que me cagara... porque hasta el engaño y la traición podíamos quedar parejos...

Hasta ahí quedábamos a mano en faltas.

Pero esto es demasiado...

Leo no.

En la peor de sus faltas no se merecía esto.

Ni yo, en la peor de las mías, me merecía perderlo.

Me doy un segundo para mirarla... quiero que sepa que la culpo por todo...

Que no voy a perdonar nada.

Era mejor cuando yo era el malo de la historia... era más fácil de soportar...

Más que tener que odiarla.

Pero tengo que hacerlo, después de todo esto tengo qué...

¿Qué otra alternativa tengo¿qué otra me deja?.

Es lo único que me queda por hacer.

Esto era lo que quería hacerme... así era como iba a terminar todo en su cabeza... no lo hizo con sus manos pero así fue como lo planeó...

Y dijo que me amaba.

Lo peor es que le creo... le creo porque debe ser verdad...

Es inevitable, alguien debía salir herido y ella tenía la opción de elegir.

Es por eso que le creo... al menos no me eligió a mi.

Es demasiado, no lo vale... es más de lo que puedo soportar.

.- Perdóname...- me dijo, casi sin voz, con los ojos rojos, la cara mojada...

No lo vale, no.

Lo pensé entonces mientras la veía con mi hermano... y estoy seguro ahora, no lo vale.

Hasta antes de esto, podría haberla perdonado. La habría dejado, pero sin guardarle ningún rencor.

Ahora, la historia es distinta... ahora no puedo dejarlo así, sin un castigo.

.- Perdóname...- repitió.

Cada vez que lo dice me hace despreciarla más... me hace desear matarla yo mismo.

Por obligarme a odiarla...

.- Perdóname...

Quiero a Leo de vuelta ¿puedes hacer eso?

¿Por qué sigo mirándola?

Por mucho daño que quiera hacerle... por mucho que quiera hacerle pagar por esto, aún así no es más fácil dar media vuelta.

No es más fácil dejar de mirarla.

¿Por qué?

No importa, no puedo pensar en eso ahora, tengo que odiarla... y ella tiene que saberlo: no puedo perdonar.

No esto.

Sin una palabra, volví la cabeza a Battou...

Ella gritó como si le hubiera arrancado las entrañas.

Lo peor de todo es que tuve que hacer un enorme esfuerzo por no volver a mirarla.

No puedo volver la cabeza ahora... no lo vale... debo repetirlo, debo insistir en esto, no puedo seguir viéndola, no se merece nada y ella tiene que saberlo...

Es difícil... incluso viendo a Leo en el suelo...

Pero tengo qué... como sentí antes, cuando los vi juntos, como sentí cuando me decidí a librarme de ella... así es como debo sentir... ¿por qué ahora no es más fácil?.

Todo esto es su culpa... que ahora tenga que odiarla, es todo su culpa... la detesto por eso...

Lo sé... sé todo eso, pero aún así no lo estoy logrando.

¿Por qué? No se lo merece... no lo entiendo... No puedo querer abrazarla ahora.

Ella planeó todo esto... ella nos trajo hasta aquí.

Se merece que la odie y eso haré.

Al menos nunca lo sabrá. Al menos nunca sabrá...

Lo mucho que me está costando no volver la cabeza ahora.

SORA

Las lagrimas se me congelaron en los ojos...

Me quedé callada y el mundo hizo silencio conmigo...

Finalmente, la verdad.

Él nunca lloró por mi.

Jamás lo vi así.

Así es que...

Así es cómo se ve cuando alguien le importa.

Por un minuto, me dan ganas de ser el cuerpo en el suelo, porque tiene más de él de lo que yo jamás podría.

Acabo de darme cuenta, justo en este instante...

Por fin se acabó.

Por fin la verdad.

Cuando dio vuelta la cabeza. Cuando dejó de verme...

Sólo fue un segundo, todo este tiempo y sólo un segundo fue suficiente...

Siempre tuve miedo, todo siempre fue tan frágil, siempre a punto de romperse en cualquier momento...

Y todo este tiempo no tuvo ningún sentido¿cómo podría tener miedo de perder algo que jamás tuve?...

Ya ni siquiera tiene sentido llorar... ni esperar o desear...

No queda ni espacio ni fuerza...

Solo nada.

La última esperanza empieza a sonar ridícula y patética, porque es una mentira en la que ya no se cree.

¿y después?

Después nada.

Podría haber seguido así, viendo lo que no está ahí...

Pero en ese sólo gesto mi cabeza por fin despertó.

Porque nunca va a llorar así por mi ni sufrirá así por mi...

Todo este tiempo, y al final la verdad no alcanza a llenar una sola línea.

No me quiere.

Eso es todo. Y con eso es suficiente.

Destruí a Battou... él a Leo... y él a Raph...

Y Raph a mi.

Efecto dominó...

Cuando todas las fichas terminen por fin de caerse, el silencio aquí va a ser espantoso.

¿y después?

Después nada.

.-

No sé si hubo algo

Que me haya soñar

En un instante todo

Se vuelve realidad...

Los pájaros de fuego

Se vuelven contra mi

Me secan y me encienden

Negándome a seguir.

Vacío

rodeado

llorando por un siglo

Todo lo que veo

no lo verás jamás

extraño y condenado

a no mirar atrás...

los templos que vomitan

los rezos del dolor

hacen reír al cielo

y al mal que hay en ti señor...

vacío

rodeado

llorando por un siglo...

Pájaros de fuego, Los Tres.

.-

Hola, gracias por sintonizarnos nuevamente fieles comensales.

Samarita... gracias por tus belicosos comentarios, pero tranquila, baja ese sartén, no desates tu furia aún, aún queda esperanza... (en verdad no sé, a lo mejor termina como tragedia griega donde todos se mueren al final, jejeje)

O a lo mejor Leo se venga de la malvada mujer que lo utilizó... o a lo mejor solo se enamora más, porque es muy capaz el muy pelotudo...

Pero es inevitable, porque los tipos buenos siempre se las sufren todas.

Naoko, si la verdad es que matar a Leo se está convirtiendo en deporte... ¿por qué¿por qué hago que Leo pase tantas calamidades, porque no puede tener un final feliz? No sé...

A lo mejor la próxima vez hago que la pase mejor, que se vaya de parranda y despierte con un par de rubias pechugonas al otro día, solo para compensarle el mal rato.

Felicidades por lo de tu UNAM, yo aquí creo me merezco un diez, pero la nota máxima es el siete, hasta ahí nomás llegamos.

Pd.¡me di cuenta que tienes muchas historias que no había visto! Claro, con tanto tiempo fuera ni había visto la página, así que a ver cuando mando al diablo todo lo demás y me siento a leer...

Rebe, darling, gracias por tus palabras. Si, me gusta mucho el doblaje mexicano como a cualquiera que se ve tantos monos como yo, después de un tiempo uno ya reconoce a los actores (de hecho, varios han venido aquí a Chile y siempre se los recibe bien por los fans, como Jesús Barrero que es uno de los grandes, o Patty Acevedo). Otro de los buenos es el argentino (vean Dave el bárbaro) y el venezolano (versión de Slayers para América Latina), aunque el chileno también ha mejorado bastante últimamente.

Y aquí, la serie de las tortugas del 2003 llegó solo hasta la segunda temporada y uno ahí, haciendo malabares para poder algún que otro capitulito.

Escribí una historia de Leo con una chica, pero aunque no se pelea con Raph, tampoco termina bien... a ver si le hacemos un final feliz para variar. (y, no sé, Rebeca suena bien¿ah? Quien sabe, jejejeje)

Eso.

Y yo creo que den más vienen más fics, así que vas a tener harto para leer, chiquilla.

¿y qué es esto?... una voz de trompeta celestial retumba en el cielo, las nubes se abren y una luz brilla y la voz dice: "Kskabell... si, a ti te hablo, no mires para atrás... levántate y camina" y así, desde las profundidades de la roca, asciende Ksk, todavía envuelta en su sudario (con cara de sueño y preguntando si hay café) y como para confirmar el milagro, va y le escribe un review a Medeah y le dice, "ve y esparce la noticia... la conexión ha sido restaurada... todos los fics serán actualizados. Amén".

¡Loas a Ksk!

La multitud enloquece, incluso algunos mueren de la emoción... otros aplastados por el gentío...

Oh... no puedo ver... las lagrimas... no me dejan escribir... ¿dónde estabas? Creí que me iba a quedar aquí sentada en la estación, con mis zapatitos de tacón y mi vestido de domingo...

Te mando un abrazo imaginario (imagínalo ahora ¡ya!)

Si, me fui, lo admito, el mundo real me arrastró inevitablemente y tuve que... ¡trabajar! Si, así es, pobre de mi...

Y ahora tengo que estudiar (no, si esta porquería no tiene fin)

Pero mientras...

Sora no estaba bien del mate, pero ¿quién lo está?... y si, Raph podría salvarla no más para tener donde caer de vez en cuando, porque peor es mascar lauchas, pero quizás la cosa no esté muy clara en su cabeza...

¡he vuelto! Y tu también¿ves? El mundo ya tiene sentido de nuevo...

No te queda otra que amarme otra vez.

Jejejeje

Ahí nos vemos y haber si le pones carbón a tu pc para que comiences con tus actualizaciones, que aquí todo el mundo preocupado ¡inconsciente! jejejejejeje

Besos.

El comentario inútil: y voy a seguir con esto, porque aunque usted no lo crea, tengo un millón de cosas inútiles que decir. ¿Les parecen atractivas las humanas a las tortugas?. Difícil decir. En una ocasión en uno de los números del cómic original (no me pregunten cual, please) Abril les exhibe a los chicos su nuevo estilo de cabello (lleno de rulos, típico de los ochenta pero espantoso hoy en día) y todos le dicen lo bien que se ve, pero Raph piensa "se ve bien, para ser una humana".

Analicemos esta frase¿significa que encuentran a los humanos feos? Posible, o sea, no tenemos caparazón... muchos dedos... pelo y la cara llena de apéndices (nariz, orejas, etc.)

De todas formas, de todos, Raph ha sido el único que ha tenido novia, o sea, tan fea no las debe encontrar. (aunque hay una historia por ahí donde Miguel tiene unas escaramuzas con una Triceratona, pero no me sé todo el cuento.

Eso. Lo dejo a la opinión de cada quien, aunque en el fondo no importa, porque cuando se trata de amor (del de verdad, del bueno, se entiende) lo de afuera es lo que menos importa.

Es en serio, créanme ¿de que se ríen?.

Gracias a todos los que leen esta historia.