MI VIDA GRACIAS A TI.
Cap.V Tengo que decirte adiós
Los rayos del Sol de la mañana consiguieron despertar a Matt justo en la misma posición donde se había dejado caer tras la discusión con Sora. Deseaba que todo fuera un horrible sueño, pero por desgracia descubrió que la pesadilla era real. Por más cuidadoso que habían sido en su relación, la arpía de Sora lo había descubierto y ahora le chantajeaba con destruir a Tai y con él lo que más amaba. Si quería proteger a su koi debería acceder a la petición de Sora por más descabellada que fuera. De nuevo el horrible dolor de cabeza le martilleaba la cabeza, sumiéndolo más en su angustiante depresión.
Tenía que pensar con claridad y frialdad si quería que Sora le dejase en paz, pero conociéndola eso no iba a ser nada fácil, ella sabía que tenía la sartén por el mango. Con apatía Matt se levantó de la cama vistiendo la misma ropa de ayer y se acercó a las ventanas con la intención de correrlas para dejar a oscuras la habitación y así menguar su malestar, lo único que podía hacer por ahora era esperar la llamada de su ex y mantenerse lo más alejado posible de Tai, no iba a darla la oportunidad a Sora conseguir más pruebas contra ellos.
La tranquilidad de su casa pareció reconfortarle pero pronto el teléfono comenzó a sonar, sin ganas se acercó para comprobar el propietario de la llamada, descubriendo que era Tai. Por un momento estuvo tentado de responder pero al final desistió y así estuvo toda la mañana.
Tai llamaba y llamaba sin recibir ninguna respuesta de su pareja, llevaba más de tres horas intentando comunicarse con él pero por mucho que llamaba a su casa y al móvil no podía contactar con él.
¿Dónde estás Matt? – se dijo a si mismo preocupado mientras miraba como su hijo jugaba en parque que le había comprado para que jugase en casa, rodeado de muñecos - Aki cariño – llamó para la atención de su hijo - ¿quieres ir a dar un paseo?
Tiiiiiiiiii – respondió Aki que le miró sonriéndole mientras daba palmitas asintiendo con alegría.
Pues está dicho – dijo decidido Tai recogiendo a Aki del parque – iremos a ver a papa Matt.
Tiiiiiiiiiii papa Maaaaaaaaaaa – respondió Aki aplaudiendo y riendo.
Unos veinte minutos después Tai llevaba la casa de Matt con Aki en brazos. Tai llamó insistentemente a la puerta de Matt, parecía que allí no había nadie, pero el coche de Matt estaba mal aparcado cerca de la entrada.
Matt fue despertado de forma brusca por el sonido del timbre de su puerta, quiso ignorar la puerta pero dada la insistencia se asomó por la ventana para ver de quien se trataba. Su corazón se aceleró al reconocer el coche de Tai aparcado en la entrada de su casa, ya que desde su ventana no podía ver el acceso de la entrada. Con más conciencia se obligó a desoír los insistentes golpes de la puerta hasta que la voz de Tai le llegó con claridad.
Matt, sé que estás aquí, tu coche te delata, por favor ábreme la puerta, necesitamos hablar – le rogaba Tai desde detrás de su puerta mientras golpeaba con una de sus manos la puerta de Matt mientras que con la otra sujetaba a Aki.
Papa Maaaaaaaaaaa – perecía llamar también el pequeño Aki a la pareja de su padre.
Por favor Matt abre la puerta – le pidió el castaño – si no me abres de diré a Aki que te funda el timbre de la puerta – le amenazó sonriendo Tai al ver como el pequeño Aki pulsaba el timbre con su pequeño dedito.
Maaaaaaaaaaaaaaa Maaaaaaaaaaaaaaaa, puetaaaaaaaaa Maaaaaaaaa – gritaba el pequeño Aki.
Los ruegos tanto de Tai como del pequeño Aki conmovieron a Matt, convenciéndole de abrir la puerta sin estar muy convencido de hacer lo correcto.
¿Qué... que haces aquí? – preguntó Matt nada más abrir la puerta.
Uff, menos mal – suspiró aliviado Tai al ver a Matt – pensé que tendría que derribar la puerta – le comentó al entrar en la casa – valla parece que no te alegras de verme – dijo desilusionado Tai.
Maaaaaa Maaaaa – llamó Aki estirando sus bracitos hacia Matt.
Hola pequeñín – saludó Matt cogiendo en brazos a Aki mientras Tai dejaba la bolsa de las cosas de Aki en el salón de Matt – hola Tai, no digas eso claro que me alegro de verte.
¿Entonces porque no me has respondido a mis llamadas, llevo llamándote desde ayer por la tarde – preguntó preocupado Tai.
Desconecté el teléfono – mintió Matt dándole la espalda a Tai para no mentirle a la cara – estaba muy cansado y quería descansar, lo siento. ¿Cómo es que está aquí?
Quería verte además que ayer te fuiste sin darme tiempo a explicarte nada – le comentó sentándose junto a Matt que se había sentado con Aki sobre sus piernas.
No es necesario que me des explicaciones, a demás necesitabas privacidad para hablar con tu familia – le dijo Matt.
¿Olvidas que tú también eres mi familia? – le recordó molesto Tai – lamento todas las estupideces que dijo la madre de Lena, ella es así, lamento si te ofendió – dijo apenado.
No te preocupes, por lo que veo conseguiste quedarte con Aki – dijo sonriendo al ver como Aki jugaba con algunos mechones de su largo cabello rubio – Aki es un niño encantador – le dijo a Tai mientras hacía cosquillas a Aki.
Sí se parece a su madre – comentó acercándose a ellos para acariciar la cara de su hijo y para depositar un beso en su cabecita – es igual de cariñoso que ella.
En eso creo que es igual que tú – le comentó Matt dulcemente – tienes suerte de tenerlo por eso...
No solo por eso tengo suerte Matt – le dijo mirándolo fijamente – tengo a Aki y te tengo a ti – le dijo acercándose más a Matt hasta poder besarle con pasión.
Durante varios minutos se estuvieron besando ardientemente bajo la atenta mirada del pequeño Aki, el pequeño los miraba interesante levantando las manitas para tocar la cara de su padre y la de Matt.
Paaaaaaaaaaaapaaaaaaaaaaaaa – protestó Aki al verse ignorado por los adultos.
Jeje - se rió Tai abrazando a Aki y a Matt – parece que mi niño le molestó que no le prestáramos atención, jeje.
Creo que no deberíamos hacer eso delante del niño – dijo sonrojado Matt al ver como Aki se tocaba los labios y hacía morritos intentando besar a su padre.
Jajaja, creo que tienes razón pero me resulta muy difícil no poder besarte cuando estás a mi lado. Por cierto, jeje ¿tienes algo que hacer el resto del día? – preguntó Tai jugando con el pequeño que se abrazaba a Matt para escapar de las cosquillas de su padre.
No tenía pensado en salir, no estoy de humor. ¿Por qué lo pregustas? – preguntó curioso mientras sonreía por las ocurrencias de Aki.
Coquillaaaaaaaaaaass nooooooooo – gritaba Aki intentando escapar de su padre.
Quería invitarte a salir pero veo que no aceptarás, sobretodo sabiendo como están las cosas, por eso... ¿no te importará que pasemos el resto del día contigo? – preguntó haciendo un puchero que arrancó una sonrisa a Matt.
A salir será mejor que no pero a que os quedéis, sería de mal anfitrión deciros que no – dijo Matt.
¿¡Solo por eso! – exclamó sorprendido y algo ofendido.
Claro que no tonto, jeje. Estaría encantado de que os quedéis – le dijo besando fugaz mente a Tai.
Aki al ver como su padre era besado por Tai, parpadeó sorprendido y una vez que se separaron se puso de pie sobre Matt para acercarse a él y plantarlo un beso en los labios como había visto hacer a su padre, con total naturalidad mientras se reía.
¡Oye peque! – exclamó Tai a su hijo – eso solo lo puedo hacer yo, jeje – se rió viendo como Matt se sonrojaba sin saber que hacer y Aki aplaudía contento por su osadía.
Jejeje papa Maaaaa besooooooooooooo – rió Aki aferrándose al cuello del rubio – Papa Maa mío.
¿Cómo que tuyo? – preguntó haciéndose el molesto el abogado con su hijo – de eso nada. Papa Matt es mío, ahora verás – aseguró Tai lanzándose a hacerle cosquilla a sus dos amores.
¿Papa Matt? –preguntó el cantante sorprendido por como lo habían llamado.
Je sí – se rió Tai – yo le dije que desde tú serías su nuevo papá, ¿te molesta? – le preguntó a Matt.
No en absoluto – le sonrió – para mí será un tremendo placer tener un hijo tan encantador como su padre – le respondió acariciándole - ¿no habrá ningún problema con eso?.
No lo creo, además de momento es un secreto entre los tres ¿verdad Aki? – le preguntó a su hijo haciéndole cosquillas en la barriga.
Tiiiiiiiii secretooooooooooooo – repetía eufórico Aki.
Eso es Jajaja – se rió Tai.
Te quiero Tai, no lo dudes jamás – le confesó sin pensarlo Matt muy seriamente.
Y lo a ti Matt, te quiero mucho – le respondió besándolo de nuevo.
El resto de la tarde pasó entre risas y juegos, los problemas quedaron a un lado para poder disfrutar de una tarde familiar. Tai preparó la cena mientras Matt le daba de cenar a Aki, para acostarlo poco después en la cama del cantante, mientras ellos cenaban con tranquilidad. Durante la cena no se tocó el tema de Sora, no querían arruinar la velada. Sin darse cuenta ya era más de media noche, así que para no despertar al pequeño Aki, Tai se quedó a dormir compartiendo cama con su koi y su retoño.
El resto del fin de semana también lo pasaron juntos en la gran casa de vocalista de los Teenwolves, bañándose en la piscina climatizada y jugando con Aki, en pocas palabras disfrutando del poco tiempo que tenían como una familia de lo más normal. El cantante rubio pudo constatar, aunque eso no era muy difícil de entender, ya que él mismo, en las pocas horas que había convivido con el pequeñín, ya le había cogido en gran estima.
A media tarde Tai tuvo que despedirse de Matt ya que no tardarían en ir a buscar a Aki a su apartamento, prometiéndose llamarse durante la semana.
Con la nueva semana, el trabajo se intensificó para tanto los chicos de Teenwolves como para Tai Yagami, que después de separarse de su hijo se dedicó al arduo trabajo, que en un intento de reunir toda la información que necesitaba para su caso se mantuvo inverso entre papeles, solo para emerger de vez en cuando para hablar con el hombre del cual estaba enamorado perdidamente.
Los ensayos de la mini gira de Navidad dieron su inicio, por el momento todo iba sobre ruedas, el repertorio de canciones ya estaba cerrado al igual que el vestuario. Las entrevistas fueron canceladas para esas fechas a excepción del programa de televisión que fue del todo imposible el eludir.
El escándalo de la supuesta infidelidad de Matt Ishida no remitió con el trascurso de los días, cada día surgía una nueva polémica sobre el asunto siendo incentivada por Sora quien aportaba cada vez más detalles del amante desconocido de Matt, pero debitando descaradamente aportar su nombre para mantener a la opinión pública y a los programas de televisión enganchados.
Por otro lado Sora no se puso en contacto con Matt haciéndole saber lo que quería parta mantener el secreto de Tai y eso desconcertaba al cantante ya que con cada hora y día que pasaba, la presión mediática lo acorralaba más y se acercaban cada vez más al momento de identificar al supuesto amante del cantante más famoso de Rock de todo Japón.
A un día de la entrevista del programa Stars & Fame, todas las alarmas se dispararon para Matt debido a un amplio reportaje que salió en las revistas del corazón.
¡¡Matt! – gritó Beni entrando en la sala de ensayos con varias revistas en las manos – Matt problemas y serio – aseguró el pelirrojo tirando las revistas sobre la mesa de la zona de descanso, donde en esos momentos Matt estaba tomándose un té frío, para mostrarles numerosas portadas con el mismo tema principal en ellas.
Qué ocurre Beni, ¿qué este escándalo? – le preguntó a su amigo sin prestar atención a lo que le enseñaba para seguir bebiendo tranquilamente.
¡Mira! – le dijo señalando las portadas.
¡¡Mierda! – gritó Matt al darse cuenta – pero... ¿cómo? ¿Cuando? – logró articular palabra Matt.
Eso deberías saberlo tú – le reprochó Beni – debiste de tener cuidado, le lo advirtió Ian, mierda Matt ¿en qué estabais pensando? – se preocupó Beni.
Mierda, mierda, mierda – se angustió Matt – no nos dimos cuenta Beni te lo juro, a demás éstas fotos son de hacer tiempo te lo prometo... son de la noche que cenamos los cuatro en tu casa y Tai me acompañó a casa – dijo mirando la foto de la portada de la primera revista donde él y Tai se despedían fogosamente en la puerta de la casa del cantante, estando Tai despaldas al objetivo de la cámara, como sucedía en todas las fotos, por extraña coincidencia. En otra se veía a través de la ventana del dormitorio de Matt a ellos ligeritos de ropa y prodigándose atenciones. Todas las fotos eran muy parecidas en contenido, tratándose de ellos dos en actitudes más que evidentes, solo cambiando el escenario en cuestión, pero todas tenían un denominador común, la clara identificación del Matt Ishida y la dudosa del acompañante.
Al menos agradece que en las fotos no se aprecie casi a Tai, de lo contrario, adiós a la custodia de Aki, me pregunto porque han salido a la luz estas fotos tan malas, seguramente tiene que haber fotos mejores para publicarlas... – comentó Beni desconcertado.
Creo saber porque – aseguró el rubio mirando a su amigo – pondría mi mano en el fuego a que la responsable de estas fotos es Sora..
¿Sora? ¿Cómo puedes saberlo? – le preguntó a su amigo rubio – me parece que me estoy perdiendo algo importante ¿verdad Matt?.
Así es... lo siento Beni no os lo conté porque no quería preocuparos más.
Mierda Matt, ya estamos con lo mismo – exclamó molesto – ¿cómo te lo tengo que decir? Joder Matt somos amigos, ¿qué es lo que ha pasado que no me has contado?.
Hacer unos días, el viernes para ser más precisos, Sora me llamó...
¿Qué quería? – preguntó poniéndose cada vez más molesto imaginándose lo que la bruja de la ex de su amigo le abría dicho.
Me llamó para proponerme un trato Beni – le contó seriamente.
¿Un trato? ¿Qué tipo de trato? – le preguntó Beni.
No sé como pero Sora sabe lo de mi relación con Tai, al parecer lleva tiempo sabiéndolo porque ha tenido tiempo de investigarlo, sabe lo del juicio por la custodia de Aki, por lo que me imagino que ha debido de contratar un investigador privado. Ella quiere chantajearme con hacer pública mi relación para hundir a Tai si no le doy lo que ella quiere como pago a su silencio, por eso fue aquel programa de entrevistas – le explicó Matt.
¿Y que es lo que quiere? – le preguntó Beni.
Todavía no lo sé... me dijo que me llamaría para hacérmelo saber – le respondió preocupado.
¿Entonces a que viene lo de las fotos? – le preguntó el pelirrojo confundido.
Supongo que para hacerme saber que ella tiene la situación controlada, quiere hacerme saber que en cualquier momento ella puede desenmascarar a Tai, por ahora ha hecho a conocer que me estoy viendo con un hombre, el destrozar la vida de Tai depende de que acepte o no las condiciones de Sora – le dijo Matt apartando las fotos de su vista – al principio dio a conocer que yo era gay, ahora lo prueba con estas fotos aunque no se pueda reconocer quien es mi amante, con esto ya ha ganado. El escándalo ya está servido.
Jamás pensé que esa maldita arpía fuera tan lista, te tendió una trampa de la cual no puedes escapar, ¿qué será lo que quiere? – se preguntó Beni más para si mismo que a Matt.
Supongo que dinero y alguna de mis posesiones – le dijo inexpresivamente – no lo sé del todo cierto pero quiero acabar de una vez por todas con esto, estoy cansado... le daré lo que quiera para que me deje en paz de una vez.
¿Y como puedes estar seguro de que después de que le des lo que quiere no te sigue chantajeando otra vez con lo mismo? – le preguntó Beni desconfiado de la ex del cantante.
Supongo que una vez halla pasado el juicio, ya no importará que se sepa. Ya no tendrá poder sobre mí. – le respondió tranquilamente.
Espero que así sea, por su propio bien – le dijo Beni molesto con la chica – creo que se está excediendo demasiado, solo espero que no le des todo lo que te pida, no te dejes presionar por ella, todo tiene un límite. Ahora será mejor que nos centremos en los conciertos, eso te distraerá un poco. Y espero que cuando te llame esa cerda me avises y me cuentes lo que te ha dicho, sea lo que sea Matt.
Tranquilo lo haré Beni, ahora regresemos con los demás chicos, deben preguntarse donde nos metimos – dijo sonriendo más aliviado.
Anda vallamos – animó Beni a su amigo.
El resto del día paso con relativa tranquilidad, al margen del nuevo bomb informativo de la prensa del corazón que supuso la edición de las fotos del cantante del grupo más de moda y su puesto amante. Durante todo el día no había otro tema de conversación, tanto en radio como en la televisión, incluso en la misma calle.
Por otro lado, Tai llamó a Matt para tranquilizarlo, asegurándolo que todo saldría bien. Le informó que su juicio sería en tres semanas, antes del periodo vacacional de Navidad. Esa misma noche quedaron para cenar en casa de Tai ya que seguramente la de Matt estaría vigilada.
El día del programa televisivo llegó para desgracia de los chicos que habían hecho hasta lo imposible para no ir, sabiendo lo que les esperaba. Tan solo faltaba una hora para salir en antena cuando el teléfono móvil de Matt sonaba en el camerino de los chicos de Teenwolves.
Matt es tu teléfono – informó Omi acercándolo el teléfono a su propietario.
¿El mío? Que raro – comentó el cantante mirando la información de la pantalla del móvil para saber de quien se trataba – mierda... ahora no.
¿Es Sora, Matt?´- preguntó Beni que se había acercado a su amigo.
Sí es ella... pero no quiero hablar con ella – le respondió cansado.
Si quieres contesto yo y le digo que estás ocupado o algo parecido – se ofreció Tk a su hermano, sabiendo que la relación que ahora tenía con la ex pareja de su hermano no era para nada buena.
Sí quieres la mandamos a paseo – se burló Izzy – sería un placer.
No creo que eso sea buena idea por ahora – respondió Beni – Matt sé que no quieres hablar con ella, pero creo que será mejor que lo hagas, no sabemos lo que podría ser capaz de hacer si se entera que la estás evitado, debes averiguar que es lo que quiere de una vez por todas – comentó a su amigo.
¿Matt ocurre algo? – preguntó a su hermano preocupado.
Ya te lo explicaré luego Tk – le respondió a su hermano – Beni tienes razón, será mejor que averigüe de una vez por todas lo que quiere – le dijo descolgando su teléfono Nokia por fin después de tantos pitidos.
¡Ya era hora Matt! – exclamó molesta Sora - ¿qué pasa es que no quieres hablar conmigo, jeje? – se burló la chica al otro lado del teléfono.
Estoy ocupado Sora, tengo que trabajar no como otras – le replicó molesto por el tono de burla de su ex.
Lo sé, lo sé, sé que dentro de casi una hora tienes una entrevista en el programa Stars & Fame, por eso te llamaba – le explicó.
Mejor no te pregunto como lo sabes – comentó Matt.
Je será mejor, bueno te llamaba por algo en concreto, ¿recuerdas lo que hablamos la última vez que llamé? – le recordó la chica.
Por desgracia si – le respondió cansado de tanta tontería - ¿qué es lo que quieres Sora? Quiero acabar de una vez por todas – le preguntó directamente.
Je, yo también lo quiero, no creas que me entusiasma hablar con un desviado sexual como tu – dijo despreciativamente Sora.
Vigila tu lengua Sora, no voy a permitir que me sigas insultado – le amenazó Matt.
No creas que estás en posición de exigir nada Matt. He estado pensado detenidamente en lo que podía conseguir y créeme que ya no hay nada que me interesa más que destrozarte la vida como lo hiciste conmigo. Sé que gustosamente me darás cualquier cosa que te pida, así que ya no tiene aliciente para mí – le comentó a Matt.
Entonces que es lo que quieres Sora, dilo de una maldita vez y déjame en paz – le exigió molesto.
Los chicos observaban la discusión sin interferir, sabiendo que Matt se enfurecía por momentos, sabían que las cosas se estaba poniendo feas.
Como bien te he dicho lo material ya no me atrae tanto pero no te creas que renunciaré a mi parte, bueno mejor dicho a lo que creo que me compensará por daños y prejuicios que ha sufrido mi imagen – le explicó Sora.
Dimo de una maldita vez Sora no estoy para juegos – exigió de nuevo Matt apretando los puños furioso.
Como quieras seré directa, quiero la casa de la playa, la casa de Tokio en la que vives ahora y la mitad del dinero de tu cuenta privada, el Mercedes y los dos caballos que tienes en Hokaido – le enumeró con tranquilidad Sora.
Con eso me dejarás tranquilo... si te doy lo que me pides no podrás acercarte más ni a Tai ni a su hijo ni a mí – le exigió Matt a su ex.
Creo que es un trato justo pero hay algo más, lo principal que tienes que hacer para que el trato esté completo, jeje – se rió la chica.
¿De que se trata? – preguntó Matt desconfiado.
Antes de decírtelo quiero preguntarte algo... ¿hasta donde estarás dispuesto a llegar para proteger a ese abogado maricón con el que sales? – le preguntó hirientemente a Matt.
Sora no sigas por eso camino porque no te lo consentiré, ya te lo he dicho antes – le amenazó Matt.
Responde Matt – exigió la chica.
Haré cualquier cosa Sora, para mí lo principal es mantenerlo lo más alejado de ti posible, no permitiré que le hagas daño – le respondió decidido y muy seguro de si mismo.
Perfecto, jeje... entonces deberás dejar al abogadillo, rompe la relación con él si quieres protegerlo del escándalo, es lo único que le puede salvar ahora, si no lo haces haré saber a todo el mundo quien es el amante del cantante de Teenwolves, puede que consigas mantener a su amante contigo pero seguro que a su hijo no, jeje.
Pero... eso... no puedes pedirme eso, el no te ha hecho nada – tartamudeo pálido Matt sin creerse lo que le pedía en el trato – no tienes ya suficiente con desangrarme que además me pides eso... –
¿Matt que ocurre? – preguntó de repente Beni al ver como Matt se ponía pálido haciendo esfuerzos por mantenerse en calma.
¿Porque lo haces Sora? – preguntó Matt a Sora a la vez que levantaba la mano para hacer callar a Beni
Simple querido, tu destruiste mi forma de vida, ahora es mi turno de hacértelo a ti, tu eliges... me das lo que te pido y le dejas o hago que tu Tai pierda la custodia de su hijo para siempre, estoy convencida que al juez y a la su suegra le encantarán las fotos que tengo de vosotros, jeje. Tú decides, su hijo o tú – piénsatelo... pero hazlo rápido, deberás darme una respuesta la semana que viene, si quieres más pruebas para saber que lo haré sin remordimiento alguno puedo mandar más fotos a las revistas, jeje seguro que las revistas les encantará verte como ese abogadillo y tú os revolcáis en tu sofá – le amenazó su ex.
Eres despreciable, no entiendo como pude estar tan enamorado de ti, eres... eres – le habló con desprecio a la vez que intentaba digerir el nudo de su estómago.
Espero tu respuesta pronto y te aviso que aún tengo pruebas más jugosas que esas fotos tan malas que salieron hoy en la prensa pienso mandarlas el viernes que viene si no aceptas el trato, claro está, si lo haces, quiero los papeles de las propiedades que te pedí a mi nombre antes de que acabe la semana, preferiblemente para el jueves y que desalojes la casa de Tokio para el Viernes, me gustaría instarme el fin de semana, jajaja – le informó Sora satisfecha.
Te odio – le dijo colgando el teléfono sin esperar contestación de Sora.
Los siguientes minutos Matt se acercó a la silla más cercana para desplomarse sobre ella. Todos le miraban preocupados sin atreverse a acercarse, sabían que de un momento a otro Matt se desmoronaría sin poder evitarlo.
Matt hermano que... – quiso preguntar Tk.
No digas nada – le pidió casi en un susurro Matt controlando las ganas de llorar de frustración y rabia.
Matt... ¿qué ha sucedido? Tienes que decirlo no te quedes callado, nos estás preocupando – le preguntó Beni asustado por la palidez de Matt.
Nada, no ha pasado nada – aseguró Matt controlándose, debía de ser fuerte y no mostrarse débil sabiendo lo que se le venía encima. No podía decirles lo que le había pedido ya que intentaría disuadirle de aceptar el trato pero si quería proteger a tai debería cumplir con lo exigido. En el fondo de su corazón siempre había sabido que algo así sucedería tarde o temprano – solo lo que ya me imaginaba, me pide la casa de Tokio y la de la playa, el coche y la mitad del dinero. Es una sucia materialista – dijo con desprecio.
¿No hay nada más? – preguntó Beni sin creerse que fuera solo las casa y el dinero lo que quería Sora, por la reacción del cantante sabía que algo lo suficiente valioso para él le había pedido como pago a su silencio.
Solo es Beni – le aseguró Matt - ¿qué más me pediría, que le interesase? – le cuestionó a él y a sus amigos con una sonrisa falsa.
Tienes razón Matt, no sé que más querría.
Toc toc, llamaron a la puerta del camerino.
Chicos, 5 minutos y al plató – anunció el regidor del programa.
Matt ¿estás bien? – preguntó preocupado Izzy por su amigo.
Si tranquilo, solo estoy algo cabreado pero ya se me pasará – le respondió Matt para tranquilizar a sus amigos.
¿Seguro Matt? – volvió a preguntar Beni.
Sí colega, no te preocupes, ahora vallamos, quiero irme a casa y dormir un poco, estoy empezando a tener un horrible dolor de cabeza.
Venga será mejor que acabemos con toda esta pantomima – comentó Omi – luego Beni ya nos contará que pasa con la estúpida de Sora.
Tras salir del camerino, los chicos se dirigieron al plató del programa donde la presentadora ya estaba sentada en su sitio esperando al grupo musical más popular de Japón.
En los primeros minutos se formularon las preguntas de cortesía; sobre el nuevo disco, la mini gira de Navidad, nuevos proyectos, todo tipo de preguntas referente a su trabajo que los chicos respondían con una sonrisa. Pero como era de esperarse, el tema de las preguntas derivó a las vidas privadas de los componentes cosa de desagradó al grupo.
El primero en recibir la avalancha de preguntas indiscretas fue Beni, que muy diplomáticamente evitaba contestar.
Lamento no poder responder ese tipo de preguntas, pero como siempre he dicho, no hablo de mi vida privada – comentó Beni a la entrevistadora – como dije en su momento en el comunicado que dimos mi pareja y yo, seguimos muy enamorados el uno del otro, vivimos nuestra relación con intensidad y sinceramente. Lo único que puedo responder a todas esas preguntas es que si nos gustaría casarnos, pero aún no sabemos ni cuando ni como lo haremos.
Lo entendemos Yatsuda-san, pero el echo de que sea Ud. una persona famosa y conocer a tantas personas en su pasado es un poco difícil de creer..., no cree que las tentaciones de poder estar con otras personas pueda ser un impedimento para su relación – insinuó la reportera.
Eso sería un impedimento para cualquier pareja no solo en mi caso, el que sea gay no significa que tenga que ser un promiscuo que vaya detrás de cualquier par de pantalones, ese es un estereotipo poco acertado que la gente tiene de los gays. Yo amo a mi pareja y la respetaré y le será fiel hasta las últimas consecuencias, eso téngalo por seguro – le respondió molesto por las continuas insinuaciones de la prensa – antes fui algo promiscuo con mis relaciones lo reconozco, pero tanto mis antiguas parejas como yo, sabíamos que no eran relaciones sólidas ni duraderas. Ahora es diferente, con Ian es diferente, y con que él lo sepa tengo suficiente.
¿Entonces supongo que no responderá a ninguno a de mis otras preguntas? – insistió la reportera.
Creo que ya sabe la respuesta – ironizó Beni sonriendo con malicia.
Lo entiendo pero tiene que saber que debía intentarlo, jeje. Cambiando de componente del Grupo, Izzy-san, se especula que mantiene una relación con una de sus fans ¿es cierto? ¿Podría decirnos su nombre?
Jeje, veo que no se le escapa ni una, pues debo decir que sí, esos rumores son ciertos, hace más de tres meses que salgo con ella, su nombre es Yukina, y es una chica preciosa – respondió Izzy con una sonrisa orgullosa.
Su intención con la joven en cuestión va enserio ¿tienen intención de formalizar su relación y casarse? – preguntó curiosa.
Es muy pronto para hablar de matrimonio, pero no me importaría casarme en un futuro – respondió con sinceridad – me he propuesto sentar la cabeza de una vez y Yukina es la mujer ideal. Supongo que tendrá más preguntas sensacionalistas que hacerme, pero comparto las mismas ideas que Beni, así que solo responderé preguntas referentes a mi trabajo como cantante, lo siento, pero no responderé nada más referente a mi vida personal, ya le di una exclusiva., no podrá quejarse.
Valla pues su que te veo enamorado y ya me imaginaba que había tenido demasiado suerte en contestarme, así que no me queda otra que intentar que sus compañeros me respondan a algunas preguntas. Kusanagi Omi y Tk Ishida, a vosotros no se os conoce ningún romance reconocido, ¿compartís vuestros éxitos con alguien especial? – le preguntó a los dos chicos.
Por mi parte estos soltero y sin compromiso, jeje – se rió Omi – aún no he encontrado a la mujer de mi vida, así que ¿alguna candidata? - bromeó el batería provocando las risas y suspiros del público presente.
Pues yo creo estar en la misma situación que Omi – aseguró avergonzado Tk – creo que no tengo tanta suerte como mis demás compañeros, jeje – se rió – pero no me preocupa mucho eso, aún soy joven y tengo esperanzas, jeje.
Seguro que así será, según el ranking de los grupos musicales de hoy en día, los Teenwolves va en el número 1, además tengo constancia que eres uno de los jóvenes músicos más deseados de la farándula, jeje.
No creo que sea para tanto, jeje – respondió Tk.
Llegados a este punto y en vista de que no es voy a poder sacar nada más, jeje. Creo que nuestra audiencia está deseando saber sobre el nuevo escándalo protagonizado por el señor Matt Ishida. Ishida-san ¿qué nos puede decir sobre las fotos publicadas ayer en todas las revistas del corazón?
Ya me imaginaba yo que se haría mención a eso – dijo molesto – pues que quiere que le diga, creo que las fotos lo dicen todo – respondió observando como los chicos le miraban sorprendidos.
¡¡¿Entonces no desmiente que tiene una aventura con un hombre! – exclamó sorprendida la periodista – ¡reconoce que es gay!.
¡¡Matt! – llamó la atención de Beni a su amigo.
Tranquilo Beni, a estas alturas ya es inútil intentar desmentir algo así, tarde o temprano se sabrá. No sé si se me puede considerar gay o no ya que solo me interesa un hombre, jamás he sentido lo que siento por otro hombre, la verdad... los demás hombres no me llaman la atención, así que no sé si considerarme gay o no – respondió con tranquilidad Matt.
Entonces nos podrás decir quien es tu nueva pareja, ¿dejaste a tu ex novia por ese chico? – preguntó la reportera.
Quiero que una cosa quede clara, yo no dejé a Sora por estar con él, eso quedó claro en el juicio y lo repetiré tantas veces como sea necesario. Yo rompí con Sora por una serie de desavenencias que desembocó en la ruptura, esos problemas solo nos incumbe a ella y a mí y no voy a entrar en detalles. Yo conocí a mi actual pareja, meses después de nuestra ruptura, así que para entonces ni siquiera la conocía así que no se me puede atribuir ninguna infidelidad, jamás lo fui y jamás lo seré. Y sobre respecto a quien es, no voy a decirlo. Mi pareja quiere discreción y privacidad y yo voy hacer todo lo posible para que así sea – le aseguró Matt con seriedad – así que me gustaría que lo dejasen al margen. Nunca me he negado a responder a las preguntas de la prensa y me gustaría que siguiera así, solo espero que respeten mi petición. Si todo evoluciona favorablemente llegará el momento que lo presentaré como mi pareja, pero hasta que llegue ese momento, espero que se mantengan al margen – pidió lo más naturalmente posible.
Eso es muy bonito de su parte Ishida-san, pero en los tiempos que vivimos es algo difícil, eres una persona pública y la gente querrá conocer a tu pareja. Tarde o temprano se sabrá. ¿Por qué ocultarlo?
El motivo es totalmente privado, así que no insista más. No voy a permitir que inmiscuíais a mi pareja, utilizaré todos los medios posibles para que eso no suceda, incluso recurriré a los tribunales si hace falta – amenazó Matt molesto.
¿Eso fue una amenaza? – preguntó sorprendida la reportera.
Más que una amenaza es una recomendación para todos los medios. Preguntarme, seguirme a mi pero dejar en paz a los que están conmigo.
Si me permites hacerte una sugerencia eso solo va a suscitar más los rumores, la gente buscará más, ya se barajan a varios candidatos como posibles amantes tuyos. Según los datos que tenemos, y por los que Sora-san contó en la última entrevista que le hicieron, el joven en cuestión, está dentro de tu ámbito más cercano, estuvo en tu juicio por la separación de bienes con tu ex, es un joven de constitución esbelta un poco más alto que tú, cabello oscuro y se le ha visto vistiendo traje de ejecutivo por lo que suponemos que desempeña un trabajo bien remunerado, así que no puede ser un fan del grupo. El circulo de posibilidades se va cerrando – comentaba la reportera.
Eso no es asunto vuestro, no entiendo el interés es saber quien es – dijo molesto.
Pero es que... intentó rebatir la reportera.
ya es suficiente – interrumpió Beni – hemos venido a hablar de nuestra gira y de nuestro álbum así que si no hay más preguntas sobre eso, me temo que esta entrevista ya ha acabo. Entenderá señorita que somos hombres ocupado y tenemos mucho ensayos por hacer antes de la gira de Navidad, así que le agradecería que fuera al grano, ya le hemos dicho que no responderemos más preguntas personales – le comentó a la reportera molesta, tanto con ella como con Matt.
Pero la gente quiere saber – insistió la reportera.
Si sigue insistiendo nos veremos obligados a levantarnos e irnos – aseguró Omi, igual de molesto.
Como quieran – claudicó la periodista.
En la siguiente hora de entrevista, las preguntas ya se basaron en todo lo referente a la gira y al álbum que habían lanzado ese año. La tensión parecía que había desaparecido, aunque la procesión iba por dentro, al menos en el caso de Matt, que no paraba de dar vueltas a la exigencia que le había exigido Sora para mantener alejado a Tai de la prensa.
La entrevista terminó para alivio de los cinco chicos que se dirigieron al camerino para cambiarse y regresar a los estudios.
¡¡¿Te has vuelto loco! – preguntó exaltado Beni a Matt - ¿cómo se te ocurre admitir que tienes una relación con un hombre? Es que quieres que todo el mundo se entere de quien es – le preguntó furioso.
Tarde o temprano lo sabrían – intentó disculparse Matt, la presión que estaba sintiendo le estaba sobrepasando, tenía ganas de chillar, golpear, llorar, pero no podía dejarse llevar, nadie podía enterarse de lo que le estaba pasando.
Era preferible más tarde que temprano Matt... ¿qué te está pasando? Con lo que acabas de decir van a poner más empeño en descubrir quien es ¡¿no lo entiendes! ¡Vas a perderlo!.
¡¡¡CREES QUE NO LO SÉ! – estalló Matt – crees que no sé que todo ha estado mal desde un principio – gritaba Matt intentando controlar las ganas de llorar.
Matt – llamó Tk para tranquilizar a su hermano.
¡¡Déjame! No necesita la lástima de nadie. ¡Mierda, mierda! – maldecía Matt mientras intentaba calmarse – de todas maneras voy a perderlo de igual forma – comentó en voz baja pero que todos pudieron oírlo igual.
¿Qué quieres decir con que lo perderás igual? Matt ¿qué está pasando? – preguntó alterado Beni - ¡cuéntanoslo maldita sea!.
Olvídalo – susurró Matt recogiendo sus cosas – me voy a casa dile a Seguru-san que me siento mal, hoy no iré a ensayar, lo siento chicos, ya nos veremos mañana – comunicó –Matt saliendo del camerino para ir a recoger su coche y dirigirse a su casa en la cual se encerró para el resto del día.
En casa de Ian y Beni.
Te digo que algo no anda bien Ian – aseguró Beni a su koi mientras los dos descansaban en la cama desnudos, después cenar y de su sesión de amor compartido.
¿Por qué crees eso? Sé que no estuvo muy acertado Matt al hacer esas declaraciones, pero no creo que sea para tanto. Es normal que se sienta presionado, recuerda lo que tuvimos que pasar nosotros hasta que lo hicimos oficial – le recordó Ian besando el cuello de Beni apartando algunos mechones del cuello de su koi para deleitarse de la piel salada debido el ejercicio que habían estado haciendo minutos antes.
Lo entiendo pero sé que hay algo más, y Matt no me lo ha querido decir, le conozco y sé que algo le está haciendo daño, no tengo un buen presentimiento Ian, esa cerda de Sora le ha dicho algo que le ha puesto en ese estado, antes de la entrevista no estaba así, ni siquiera estaba tan alterado cuando salieron las dichosas fotos – le explicó a Ian mientras disfrutaba de las caricias del otro pelirrojo.
Pues no me imagino que puede ser Beni, pero si quieres puede hablar mañana con Tai, a ver si él me dice algo al respecto – le sugirió Ian.
¿Lo harías? – preguntó esperanzado.
Claro que lo haré amor – le respondió besando apasionadamente a Beni – Matt también es mi amigo y sé que si algo le sucede a Matt repercutirá en Tai y no pretendo que nada estropee su relación. Después de muchos años, Tai ahora es feliz, haré todo lo posible para ayudarles, no te preocupes cariño – aseguró Ian.
Mmmm gracias, no sé como agradecerte lo que hacer – comentó Beni melosamente.
Mmmm, pues se me ocurre como puedes agradecérmelo, jeje – le sugirió apretando su cadera contra la de Beni, haciéndole notar como si miembro comenzada a despertar lentamente – puedo sugerirte varias cosas – le dijo lamiendo su cuello y zona de tras de la oreja de Beni, una de sus zonas más erógenas.
Atenderé a todas sus peticiones amor – ronroneó Beni acariciando la amplia espalda de Ian con sus manos hasta situarlas en sus redondas nalgas – por donde quiere mi amo que empiece.
Por donde mi esclavo sumiso desee – le propuso Ian complacido.
Beni consiguió tumbar a su koi sobre la cama dejándolo bajo su cuerpo sentado sobre su cadera, para poder tener mayor maniobralidad sujetándole de las muñecas sobre su cabeza a la vez que atacaba su cuello con leves mordiscos dejando la zona sonrojada.
Ahora te quedarás con los ojos cerrados y muy quietecito – ordenó con una sonrisa maliciosa.
¿Qué vas hacer? – preguntó Ian desconcertado al ver que Beni se levantaba de encima de él.
Shhhh, hazme caso, no voy a tardar, túmbate y cierra los ojos, no vale hacer trampa – le advirtió.
Esta bien – respondió haciendo lo que le había pedido.
No tardó ni dos minutos en llegar de nuevo al lado de su amante. Sé volvió a sentar sobre su cadera mientras repartía besos húmedos sobre su pecho, cuello y cara. Durante unos minutos se dedicó a saborear sus labios emprendiendo una lucha sin cuartel por hacerse el dueño de la misma. Sus labios recorriendo todo su rostro depositando dulces besos sobre ella, Ian solo cerraba los ojos disfrutando de las caricias mientras él mismo acariciaba la esbelta espalda y las redondas nalgas masajeándolas con deseo y cariño. Sin darse cuenta sintió como Beni le tapaba los ojos con un pañuelo anudándolo para impedirle que pudiera ver.
¿Pero que demonios...? ¿Qué significa esto Beni? – preguntó el pelirrojo de pelo corto a amante.
Shhhh no te preocupes, hoy estás en mis manos, tú relájate y disfruta, no haré nada que no te guste así que sé bueno y déjame hacer a mí – le pidió melosamente cerca de su oído.
Dios Beni eres increíble – tembló de anticipación Ian.
Beni siguió acariciando y besando el cuerpo de Ian a la vez que de forma ocasional ejercía cierta presión con su trasero sobre el miembro endurecido de Ian, propiciando el roce de sus zonas más sensibles. Lentamente Beni fue levantándole los brazos hasta situarlos sobre su cabeza como había hecho antes pero esta vez con ayuda de otro pañuelo se las sujetó al cabezal de la cama imposibilitándole que los pudiera mover. Ian intentó protestar pero una hábil caricia en cierta parte de su anatomía le hizo desistir.
La excitación cada iba más en aumento sobretodo para Ian que al no poder ver y solo sentir le aumentaba la morbosidad de la situación. Los jadeos de Ian ya eran audibles al igual que su dificultosa respiración. Beni descendió de los labios deseosos de Ian hacia su cuello y de allí hacía su fuerte pecho donde se entretuvo en sus pectorales, masajeándolos y besándolos para luego dedicarse en exclusividad a sus pezones arrancándoles gemido excitados.
Aaaahhhhh Beniiiiiii – jadeaba Ian.
Mientras su lengua torturaba los pechones alternándose del uno al otro, sus manos jugaban haciendo caricias enloquecedoras por todo su estómago y vientre, enredado sus dedos en el bello púvico sin llegar a tocar directamente su sensible sexo, solo toques insinuantes, que hacían enloquecer más al pelirrojo ejecutivo.
Beniiiii por Dios no me tortures más – pedía Ian entre gemido y gemido.
Haciendo caso omiso, Beni se dedicó a fondo a repartir más mordiscos por su pecho y vientre pero esta vez descendiendo muy lentamente hacia abajo hasta situarse justo en frente de su miembro. Su aliento cálido provocaba más escalofríos de los que podía soportar su amante, pero decidió torturarle un poco más. Pasando de largo de la zona más necesitada Beni se dedicó a besar la cara interna de los muslos para ir bajando hasta llegar a sus rodillas donde las dobló para mordisquear la cara interna de ellas, después siguió su camino hasta llegar a sus pies donde los mordisqueó lamiendo sus dedos uno a uno.
Mmmmm Beniiiiiiiiiiiiiiiii suéltame, dios esto es demasiado – jadeaba mientras forcejeaba para soltarse del agarre de sus muñecas – arghhhh Beniiiiiiiiiiii como me sigas torturando de esta manera te juro que arranco la cabecera para soltarme y verás como te pille, uffffff aaaahhhhhh Beniiii.
Jeje, lo siento pero no voy a dejarte, mmmm sabes que tienes un sabor adictivo – ronroneó Beni subiéndose sobre el cuerpo de Ian para frotarse contra él – eres condenadamente sexy, me dan ganas de comerte todo entero, mmmm – gruñó de placer al sentir su sexo duro contra el de Ian.
Mmmm pues hazlo ya maldita sea, dios me estás volviendo loco y ni siquiera me puedo mover para demostrarte cuanto de deseo – le confesó elevando su cadera para hacer mayor roce con el cuerpo del otro pelirrojo.
Aahhhh yo también te... te deseo mmmm, pero hoy mando yo, yo seré quien te demuestre cuanto de deseo, ooohhhh – jadeó.
Beni volvió a alejarse de los labios de Ian pero esta vez guiado por su propia excitación decidió que ya había torturado suficiente a su koi. Con una de sus manos sujetó el miembro húmedo de Ian para masturbarlo lentamente a la vez que masajeaba sus testículos. Ian jadeaba ya sin control, pero un gran estremecimiento le recorrió el cuerpo cuando sintió la húmeda caricia de su boca abarcar todo su sexo. Beni lamía con desesperación toda la longitud del mismo, primero lentamente pero rápidamente consiguió un ritmo enloquecedor. El guitarrista al identificar los temblores previos al clímax disminuyó el ritmo desoyendo las protestas de su pareja. Su boca abandonó su sexo pero no sus manos que seguía prodigándole atenciones pero más sutiles, era tal su excitación que no notó como Beni le cubría el miembro de lubricante, ni de cómo Beni se situaba sobre él para proporcionarle mayor acceso a su cuerpo. Solo podía dejarse llevar por el placer que sentía mientras se aferraba al pañuelo que le sujetaba a la cabecera. Una nueva sacudida de placer le golpeó con fuerza al notar como su sexo se encababa de forma perfecta en el interior del pelirrojo de larga cabellera de una sola estocada.
Aaaaahhhhh Beniiiiiii Diossssssssssssssssssssss siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii – gritó de placer Ian.
Oooohhhhhhh Iaaaannnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn – gimió también al ser invadido su cuerpo, tuvo que apoyarse sobre el fuerte pecho de Ian para no desplomarse por la intensa sensación.
Tras unos segundos en los cuales Beni se acostumbró a la intrusión, comenzó a moverse lentamente de arriba abajo, deslizándose con dolorosa lentitud. El guitarrista se inclinó un poco para poder devorar la boca sedienta de Ian, saboreando cada recóndito lugar de aquella boca, acallando los jadeos y gemidos de cada uno en la boca del otro.
Ahhhhh siiiii Beni suéltame por favor – le suplicó al romper el ardiente beso – déjame acariciarte y quiero verte, mmmmm.
Aahahhhh, nooooo aún no voy a soltarte oohhhhh – jadeaba Beni mientras se auto penetraba endemoniadamente – a... ahora mando yooooooo.
Vale... tú mandas pero déjame verte al menos ahhhhh – le pidió entre gemidos.
No sé... – le respondió, de pronto una sonrisa perversa se le dibujó en la cara al ocurrírsele una idea para torturar más a su pareja – como te has... mmmmm portado bien te concederé tu... tu petición aahhh – le informó sin dejar de moverse.
Con algo de dificultad por no querer dejar de moverse sobre las caderas de Ian, Beni se inclinó un poco hasta llegar con sus dedos el pañuelo que impedía ver a Ian y con una lentitud desesperante se la fue deslizando por su rostro hasta dejársela alrededor del cuello.
Al abrir los ojos Ian, no supo decir s hubiera preferido seguir sin ver nada que ver aquella escena no apta para cardiacos. Beni se movía con una sensualidad hipnótica inclinado un poco hacia atrás lo suficiente para que le fuera posible moverse por la longitud de sexo, su cuerpo estaba perlado de sudor dándole una sensación brillante, sus largos cabellos se le pegaba al pecho y a la cara aunque la mayor parte los tenía pegados a su espalda. Beni se mordía los labios intentado acallar parte de los gemidos provocando que fuera Ian quien gimiera al verle. Una de las manos de Beni se acariciaba el pecho y el vientre mientras que la otra mano traviesa se masturbaba al mismo ritmo que las penetraciones. Todo el conjunto era perversamente excitante pero lo que le llevó a la perdición fue ver los ojos marrones llenos de deseo y amor clavados en los suyos sin romper el contacto visual ni por un segundo.
Diosssss Beni ahhhhhhh – gimió más fuerte.
Sin poderse controlar y gracias a la ayuda que te da la desesperación, Ian dio un fuerte tirón del pañuelo que le sujetaba las muñecas, provocando que la madera de la cual estaba sujeto crujiera y se rompiera liberando a su prisionero.
¡¡Iannnn! Te has vuelto loco – exclamó sorprendido Beni viendo como Ian se liberaba de su agarre.
Sí estoy loco pero por tu culpa – le respondió sonriéndole con perversión – ahora verás, jeje – se rió.
Con un rápido movimiento y sin permitir salirse de su cuerpo Ian acostó a Beni sobre la cama para ser ahora él quien dominara la situación. Beni intentó protestar pero Ian no se lo permitió inmovilizándolo con su cuerpo más pesado y fornido que el de Beni. La intensidad de las penetraciones se hicieron más rápidas y profundas siendo ahora Beni quien gemía sin control, las fuertes manos sujetaban la cadera de Beni para guiar sus envistes sin hacerle daño, mientras una nueva lucha por la posesión de sus bocas los mantenía ocupados, alargado el placer del momento. Beni se aferró a la amplia espalda Ian mientras su cadera subía al encuentro de la de Ian en una baile de placer y desenfreno. Para sentir una mayor contacto entre sus cuerpos, Beni rodeó con sus piernas la cintura de Ian.
Ahhhh Iannnn no aguanto más ahhhhh – jadeaba mientras se sujetaba de las sábanas para no arañar a Ian como había pasado en alguno ocasión al perder el control de si mismo.
Uffff Beni, yo... no me falta mucho a mí tampoco, venga... córrete, ahora venga Beni siiii oohhhh Beniiiiiii – gritó derramándose en el interior de Beni.
Síiiii Ian yo también me corrooooooooooooooo siiiiiiiiiii – eyaculó al mismo tiempo Beni entre ambo cuerpos, cayendo rendido sobre la cama.
Ufff Beni ha sido increíble – le aseguró besando sus labios para luego acomodarse a su lado para abrazarle satisfecho.
Jeje tienes razón eso a sido increíble, sabía que te iba a gustar – le comento mientras le besaba el pecho.
Sí me ha encantado pero debo decirte que esto no es apto para cardiacos, jeje me has puesto malo, mira lo que me has hecho hacer – le dijo señalando el cabezal roto – me debes una cama nueva.
Eres un bruto, esto no consistían en romper la cama, la culpa es tuya, a mi no me culpes, jeje. ¿Te has hecho daño? – le preguntó mirándole las muñecas enrojecidas.
No te preocupes, solo están algo coloradas, pero tranquilo, la próxima vez serás tú quien esté atado y yo el que te torture, jeje – le advirtió.
Malo – dijo Beni haciendo un puchero.
Jeje mira quien fue hablar, ahora a dormir que te estás cayendo de sueño – le dijo acurrucando a Beni contra su cuerpo para cubrirse luego con las sábanas. Poco después ambos cayeron dormidos hasta el día siguiente.
En casa de Matt.
Matt se había encerrado en su habitación, con la única compañía de la foto instantánea que había sacado el fin de semana anterior, en la cual Matt observaba con dolor y angustia. En ella salía Matt siendo abrazado por Tai por la cintura, el pequeño Aki jugaba en sus brazos mientras sonreía a su padre, todos sentados en el sofá de su casa. Sus ojos negados en lágrimas no se despegaban de aquella foto familiar que hubiera deseado pertenecer para siempre, pero que ahora sabía que no podría ser jamás.
Snif, lo lamento tanto Tai, snif, todo a sido por mi culpa, no... no debí decir aquello por televisión, snif, yo... te amo demasiado para arrebatarte lo que tanto amas y has luchado por él. Perdóname por tener que dejarte, snif, es lo mejor snif. Amantes puedes encontrar en cualquier momento, eres una persona maravillosa, sé que podrás, pero... a un hijo no... Dios ¿por qué? ¿Por qué tiene que ser todo tan difícil? – lloraba amargamente Matt echo un ovillo sobre su cama con la fotografía en la mano – sabía que esto iba a pasar, siempre supe que al final tendrías que elegir entre Aki y yo. No quiero que por mi culpa, snif pierdas a Aki, lo siento lo único que lamento es no haber podido hacer el amor contigo, yo... yo tenía planes, yo te pedí tiempo para estar preparado y ahora que lo estoy, snif te tengo que dejar, lo siento mucho. Sé que me vas a odiar por esto pero Tai es lo mejor para ti, tengo que desaparecer de tu vida... perdóname, perdóname Tai.
Estirando la mano hacia la mesita de noche Matt cogió el teléfono móvil para marcar un número de teléfono que estaba memorizado. Tras unos timbre una voz femenina se oyó al otro lado de la línea.
Tú ganas – dijo brevemente Matt y lleno de dolor – has ganado... me has destruido por completo.
¿Matt? – preguntó Sora al reconocer la voz quejumbrosa del otro lado - ¿has aceptado? ¿Tanto le amas? ¿Vas a perderlo todo por él? – preguntó asombrada, pero esta vez sin burla ni desprecio, solo asombro e incredulidad.
Eso que más da ahora, tú jamás sabrás lo que uno puede hacer por amor, eres demasiada egoísta para que lo entiendas. Espero que cumplas tu palabra, para mediados de la semana que viene ya habré dejado la casa, solo te pido una cosa – dijo Matt sin poder disimular su angustia y dolor.
¿El que? – preguntó Sora, a pesar de que había conseguido lo que quería, no se sentía tan bien como ella había supuesto.
Que no digas nada de esto a nadie, destruye las fotos o lo que tengas, yo me iré de aquí en cuanto pueda, te haré llegar los papeles a donde tú quieras... no me llevaré muchas cosas de aquí así que lo que no quieras puedes tirarlo o venderlo me da igual – le informó Matt.
¿Vas a dejar la música? – preguntó sorprendida y un poco preocupada.
Ahora no puedo me he comprometido con la gira de Navidad, lo chicos no se merecen que les haga esa putada, pero luego de mis compromisos, no sé... puede que sea lo mejor para todos, yo... no quiero seguir con esto. Supongo que te sentirás de maravilla, je. Me has destruido como me dijiste, te felicito – le dijo a punto de llorar de nuevo.
Matt espera un momento yo... – quiso decirle Sora.
No digas nada, ya es demasiado tarde Sora, es mejor así... si no eres tú hubiera sido otro, así que ahora no te hagas la mártir. Solo espero que lo disfrutes – le dijo para después colgarle y apagar el teléfono.
Lo había decidido, lo dejaría todo en cuanto pudiera y se iría lejos de aquí, la música lo que tanto amaba le dio mucho a lo largo de su vida musical pero también le había quitado lo que más amaba ahora, no había sido capaz de proteger lo que más quería y ahora debía de alejarse de él para protegerlo. Y todo por ser alguien famoso y poder amar a quien quería.
A la mañana siguiente llamó a Seguru-san para informarle que no podría asistir a los ensayos, le había salido un asunto familiar de última hora y tenía que viajar imprevisto, le pidió que los chicos ensayaran sin él y que en cuanto pudiera se uniría a ellos. Seguru-san tubo que aceptar la excusa de Matt sin poder objetar nada, aún sabiendo que ese supuesto viaje no era cierto pero decidió darle el tiempo que supuestamente le estaba pidiendo.
Ese mismo Viernes Matt, contrató un discreto abogado el cual se encargaría de transferir sus propiedades a Sora en unos días. Por su cuento Matt empaquetó cuantas posesiones quería conservar no siendo muchas. Durante el fin de semana Tai se puso en contacto con él que haciendo un gran esfuerzo actuó como siempre para evitar que no sospechase nada, igual que con Seguru-san, Matt le dijo que había tenido que salir de improviso a visitar a un familiar lejano y que volvería en unos días.
Sin que nadie se enterara, Matt sacó su pocas pertenencias de la gran casa para guardarlas el un viejo local que alquiló lejos de miradas indiscretas, reservó una habitación de Hotel no muy lejos de los de los estudios de grabación a la cual se trasladó cuando ya no le quedaba nada más que guardar de la casa. Para el jueves siguiente los papeles de sus propiedades y la transacción del dinero ya estarían listos.
Por otro lado Beni y los demás no convencidos por la excusa oída de Seguru-san, se acercaron varias veces a la casa de Matt, pero al igual que el primer día que había ido, nadie les abrió las puertas, Matt no cogía el teléfono, había desaparecido, nadie sabía nada de él desde el Domingo, último día que Tai habló con Matt, desde entonces, el cantante de Teenwolves había desaparecido, cosa que preocupó a todos. Beni como último recuso acudió a Sora para preguntarle si sabía algo de él pero como le había pedido Matt, no dijo nada y se hizo la desentendida.
La desesperación comenzaba a ser presente en toda la discográfica, llevaba ya dos semanas sin aparecer Matt y el primer concierto estaba a dos días de celebrarse. Matt no se había puesto en contacto con nadie. Estaban a punto de avisar a las autoridades de la desaparición cundo una corta llamada del cantante a Yasako-sama les hizo desistir de ello.
¿Qué le ha dicho Yasako-sama? – preguntó angustiado Tk al querer saber de su hermano.
Matt-san está bien, así que no os preocupéis – informó para alivio de los chicos – lamenta no haber venido pero le han surgido un impedimento para ello y me ha dicho que os diga que estará sin falta en el concierto y que espera que halláis trabajado duro – informó el director general.
¿Pero que le ha pasado? ¿Dónde está? ¿Por qué no coge el teléfono? – preguntó preocupado Beni.
No me lo dijo Beni-san, pero me prometió una explicación a mí y a todos en cuanto llegara, solo me ha dicho que tiene sus motivos, nada más.
Pero esto es muy extraño – comentó Izzy – Matt no es de los que desaparecen porque sí.
Lo sé por eso no he podido enfadarme con él, sé que algo le está pasando, así que tendremos que esperar – dijo Yasako-sama con tranquilidad.
¿Dijo cuando vendría? – preguntó Omi.
No solo que no faltaría al concierto – respondió Yasako-sama.
Entonces solo queda esperarle, este me va oír – comentó Beni preocupado, durante esas semanas no había podido descubrir lo que le estaba pasando a su mejor amigo, ni siquiera tras hablar Ian con Tai no había podido sacar nada en claro y eso le preocupaba aún más
La noche antes del concierto, las 11 de la noche en el apartamento de Tai.
Ding Dong, se oyó puerta, Tai fue a abrir la puerta quedándose helado al ver frente a su puerta a Matt, que le miraba con una sonrisa algo triste y una expresión que no supo como descifrar.
¿Ma... Matt? – llamó asustado, alegre, preocupado y aliviado a la vez.
Tai... yo... lo siento – le dijo lanzándose a sus brazos para besarle desesperadamente.
Continuará...
