Resumen: Por fin comienza el esperado Festival Deportivo, y con él
¡La infame batalla del puesto!
Todo sale tan mal como se esperaba.
Notes:Por razones de "¡Este capítulo se ha vuelto enorme!" Terminamos cortándolo en dos porque además del trabajo de escribirlo, todavía tenemos que traducirlo a dos idiomas y nuestro eqipo actual somos principalmente yo (Tsuki) y Jon, no podemos permitirnos capítulos tan largos.
En este obtuvimos la ayuda de Sayumii para inglés y Escritoriginal para español, por lo que terminó con 10,000 palabras. Si desea capítulos más largos, considere unirse a nosotros como traductor o beta.
Gracias otra vez Escri por la ayuda!
Target 413 - Tierra en Llamas.
- ¡¿Cómo no te acuerdas?! - Fue el grito de Enma, que en sí mismo ya era inusual, viniendo del retraído chico.
Se habían despertado muy temprano ese día, incluso antes que Nana, lo que los obligó a comer algo preparado con anticipación del refrigerador. La joven matriarca se sentiría muy decepcionada al saber que el grupo se perdería el desayuno, y más aún al saber que los estudiantes se irían antes de que ella terminara la comida para el festival, pero Bianchi ya había garantizado que daría todo a Gokudera y Yamamoto cuando ellos llegaran, ya que Reborn había sacado a patadas al inútil dúo de la cama junto con el amanecer y les había informado de que iban a ir temprano a Namimori Chuugaku a ver a Shamal, lo que había dejado a Tsuna confundido y provocado el interrogatorio de Enma.
- Eso dije, recuerdo vagamente despertarme e ir al baño, y eso es todo. - Se limitó a decir el moreno revolviendo un vaso de agua en su mano. - No recuerdo haber vomitado ni nada parecido. - Se estremeció ligeramente. - Tal como lo dices, parece que fue horrible, pero si ni siquiera lo recuerdo, no puede haber sido tan malo, ¿no?
El pelirrojo se limitó a seguir mirando al otro, como si le hubiera crecido una segunda cabeza.
-…No estás mintiendo diciendo que no puedes recordar por qué estás avergonzado, ¿verdad? - Preguntó el otro jefe, con una ligera suspecha.
Pero la respuesta vino de Reborn antes de que Tsuna pudiera siquiera abrir la boca.
- Inútil-Tsuna no es un buen mentiroso incluso si tu vida dependiera de ello. - El asesino estaba contra el fregadero, usando a Leon como un taburete para hacer su propio café, habiendo rechazado caballerescamente la sugerencia de Bianchi de hacerlo.
Así que la asesina solamente estaba en la mesa haciéndoles compañía, asegurándoles que esperaría a Nana para comer el desayuno, para que ella no se sintiera tan triste.
- ¡Reborn! - Exclamó el moreno avergonzado por el comentario contrario, tomando una porción de arroz de ayer de la arrocera que su madre siempre dejaba disponible en la mesa. -…Pero creo que tienes razón.
-…Creo que es mejor que te quedes en casa hoy. - Sugirió Shimon, viendo como el Vongola se levantaba y se dirigía al refrigerador y le ofrecía una porción de Natto a su amigo.
- En serio, no es para tanto Enma. - Lo tranquilizó. - Y créeme, será peor si no voy.
La Tierra aún no parecía convencida, pero su siguiente argumento murió cuando se dio cuenta de que su amigo había vuelto a sentarse y comer solamente arroz.
- Tsuna. - Nombró sabiendo que su amigo era un desastre en la cocina tanto como él. - ¡Hay mucho Natto, podemos compartir!
El otro, conocido por comer de todo, puso una extraña cara de asco.
No me gusta el Natto...
- Pero es bueno para la salud.
- ¡Enma, no me estoy muriendo! - Dijo exasperado. - Además, estoy acostumbrado, la mayoría de las mañanas Lambo, Reborn e incluso Bianchi suelen robarme las salchichas, el bacon y los huevos y, de todos modos, acabo comiendo sólo arroz. - Lo dijo en un tono sombrío.
- Pero...
- Estás llegando a la edad adulta, Tsuna. - Llamó Bianchi, apoyando el rostro en la mano y estudiando al más pequeño. - Ya es hora de que aprendas a cocinar por ti mismo y no dependas sólo de Mamá. - Esto hizo que el menor se sonrojara, pero no dijo nada y siguió comiendo. - Puedo enseñarte si quieres, después de todo, soy tu tutora doméstica de cocina y artes*.
- ¡N-no! ¡Gracias! - Se apresuró a contestar, dejando su comida y agitando las manos histéricamente. - Además, mi madre no me deja acercarme a la estufa…
- Tch. - La italiana volvió la cara, tapándose la boca y tratando de ocultar un arranque de risa.
- ¡No te rías! - Estaba avergonzado. - ¡UCH! - Exclamó cuando Reborn le dio una patada en la nuca, casi haciendole caer de cara sobre su plato.
- Nos vamos en cinco minutos, será mejor que hayas terminado tu comida para entonces, Inútil-Tsuna. - Amenazó el Hitman saltando a su asiento con su propia ración en la mano y una taza de café.
El moreno se iba a quejar como de costumbre, pero cambió de opinión cuando, al levantar la vista, notó que junto a su arroz había ahora un huevo frito y dos salchichas.
Era la primera vez que su tutor cocinaba algo para él en los casi dos años que vivían juntos, y aunque era algo tan sencillo, tuvo que admitir que era simplemente maravilloso.
- ¡Gracias, Reborn!
- Sólo come.
- ¡Aaah! ¡Está tan bueno!
- Claro que sí. No acepto nada menos que la excelencia.
- Ah … yo también quiero…
- Hazlo tú mismo.
Tsuna se rió entre dientes, compartiendo una salchicha con su amigo, por su parte, Bianchi se limitó a sonreír mientras observaba toda la interacción, centrado sobre todo en el gesto de su amante unilateral.
-.-.-.-.-
Tsuna, Enma y Reborn habían llegado a la escuela, más temprano de lo habitual, el primero aún se sentía un poco cansado de la noche anterior, aunque no recordaba qué había pasado exactamente, imaginaba que era por el nerviosismo de volver a pasar por esa infame competencia. Pero esta vez sería diferente, esta vez estaba con Enma, nada podía salir mal, ¿verdad?
Sí, tal vez.
- La enfermería está por aquí, Enma. - Dijo Tsuna guiando a su amigo y a su tutor por los pasillos vacíos, hacia donde solía estar el doctor, el pelirrojo a su vez se impresionó al ver como aparentemente el moreno sabía de memoria donde estaba cada rincón de la escuela, mientras que él apenas recordaba el camino al baño en ese edificio simplemente gigantesco, cuyo tamaño era al menos el doble de su antigua escuela.
Una parte de él se preguntaba si su amigo venía a menudo a la enfermería, aunque sinceramente prefería no saberlo.
Toc toc.
- ¡Doctor Shamal! ¿Estás ahí? - Se oyeron más golpes. - Creo que hemos llegado demasiado temprano. - Comentó, rascándose la nuca por las molestias. - Volvamos aquí más tarde, ¿de acuerdo? - Insistió, claramente no quería ir a una consulta, y mucho menos con ESTE médico.
- No te preocupes, conozco una forma efectiva de averiguar si está ahí. - El Hitman se bajó el fedora. Shimon, antes preocupado por su amigo, no pudo evitar sentir curiosidad por lo que iba a hacer el bebé.
Tsuna por su parte, al no gustarle las palabras que escuchó del Sol, instintivamente se lanzó hacia la Tierra, protegiéndola del repentino puñetazo que Reborn dió a una pared de la enfermería, abriendo un agujero en ella y provocando un sonido caótico en la escuela hasta ahora silenciosa.
- ¡¿QUÉ DEMONIOS ES ESO?! - La voz asustada y chillona del médico fue fácilmente reconocida por los tres. - ¡Reborn! ¡Enano despreciable, debería haber sabido que eras tú! ¡No fue suficiente que me llamaras a las tres de la mañana mientras me divertía con la nueva profesora! - Refunfuñó Shamal levantándose de una de las camas de la enfermería con un aspecto completamente desaliñado, sólo entonces se percató de la presencia de los dos adolescentes que se levantaban de los escombros, un sorprendido Enma, y un aún más cansado Tsuna, ambos completamente sonrojados por el comentario del adulto. - Ehem, quiero decir, mientras me divertía atendiendo a los enfermos, como hacen los buenos médicos, claro. - Mintió descaradamente. - Y si escucho cualquier otro rumor en la escuela, los mataré a ambos.
Al final de sus palabras, el mafioso se levantó de la cama en la que había estado "durmiendo", que claramente no debía ser utilizada de esta manera.
Al menos eso pensó Enma al ver el deplorable estado en que se encontraba el médico de la escuela, mientras se tapaba la nariz por el hedor a bebidas, cigarrillos y otras cosas que desprendia el adulto, que le recordaba irremediablemente a Julie.
- Hola Shamal, ¿cómo estás? - Reborn se limitó a decir mientras se quitaba el polvo del traje, sin importarle lo más mínimo si algún profesor, que casualmente ya estaba en la escuela, se había enterado o no. Y mucho menos alguien del Comité de Disciplina.
- No me vengas con "cómo estás" gnomo de jardín, ¿Sabes cuánto cuesta reconstruir una pared? ¡¿Una maldita pared?! Es casi la mitad de mi sueldo, porque mi sueldo en esta escuela no es ni de lejos el mejor, si me preguntas, y antes de que digas nada, Sr. Sabeloto, sepa que todavía estoy trabajando aquí solo por ti.! – Este comentario en particular llamó la atención de Tsuna.
- No te preocupes, Shamal, puedes ponerlo en mi cuenta. - Interrumpió Reborn, dirigiendo a su amigo una mirada penetrante.
- Lo que sea, que se joda. Hey chico. - Al darse cuenta de que el mayor estaba hablando con él, el Vongola, que inusualmente prestaba atención a las quejas de Shamal, camino hacía el médico. - Métete en la cama antes de que cambie de opinión.
- Ah, todo bien. - Avergonzado, Tsuna se dirigió a la cama que antes estaba usando el mafioso, para total disgusto de Enma, quien no supo como advertir a su amigo sin destruir su inocencia.
El moreno, a su vez, se sentía sumamente incómodo al tener que acostarse en un lugar que apestaba a bebida, lo que le hacía tener malos recuerdos de su padre.
- Entonces, ¿Cómo te sientes? - El otro fue directo.
- Bien… Creo que solo estoy cansado por no haber dormido bien. Enma me dijo que me enfermé y vomité mucho al amanecer, pero eso no lo recuerdo muy bien, debí haber tenido una pesadilla o algo así. - Sin parecer realmente interesado, Shamal aprovechó la pausa para analizar la garganta de Tsuna con un palillo.
- No es que no tengas motivos para tener pesadillas horribles, tu vida apesta, si quieres mi opinión, por supuesto. - Se encogió de hombros, buscando algo en una pequeña mesa a su lado.
Enma se sintió realmente incómodo con el comentario, Reborn solo sonrió sádicamente, Tsuna suspiró sin negar nada.
- ¿Realmente no recuerdas nada, Tsuna? - Quería saber su amigo preocupado una vez más.
El Vongola reflexionó por un momento, claramente pensando en ello, mientras Shamal ponía un termómetro en su boca para que, sin poder hablar, el moreno comenzara a tararear, perdido en pensamientos y recuerdos.
Algo dentro de Reborn se retorció ante la melodía, la sensación helada en su pecho se volvió casi insoportable, creciendo en la forma de un presentimiento que rivalizaría con el de un Vongola.
- "Hay una canción que está grabada en mí memoria desde el día en que nací". - Una voz, olvidada hace mucho tiempo en los recuerdos del Hitman, parecía recitar junto con la melodía tarareada. - "¿Quieres escucharla? Comienza así: Tus lágrimas se derraman por los días que no volverán..."
Después de un rato, Shamal sacó el termómetro, frunciendo el ceño al ver el número marcado allí.
"...El cielo vespertino que contemplaste en naranja vivo arde..."
El médico lo apartó, luego tomó un otoscopio y comenzó a revisar los oídos del pequeño tarareante, que casi parecía estar en otro plano, sin siquiera darse cuenta de que ya podía hablar y responder a la pregunta de Enma.
"...Si tu ves tus propias fortalezas y debilidades, ahora..."
- Tsuna. - Solo Shamal pudo sentir realmente la tensión del otro asesino al nombrar a su alumno, deteniendo lo que estaba haciendo para mirar a su amigo con una ceja levantada. - ¿Dónde escuchaste esa melodía?
Esto hizo que el moreno mirara al tutor confundido, como si ni siquiera se hubiera dado cuenta de que estaba tarareando.
- ¿Qué melodía? - Preguntó, reforzando esa idea.
- Estabas tarareando, Tsuna. - Puso Enma cada vez más preocupado acercándose al otro.
- Oh, no me di cuenta. - Dijo simplemente. - Estaba tratando de recordar lo que había soñado y terminé distrayéndome.
Al ver que el Ex-Arcobaleno no compartiría el motivo de su molestia, después de haber bajado su fedora, lo que siempre hacía cuando quería quedarse con algo solo para si mismo, Shamal volvió a centrar su atención en el más pequeño, comenzando a medir los latidos de su corazón con un estetoscopio, todavía con el ceño fruncido.
Sintiendo la atmósfera pesada, Enma estaba casi al punto de necesitar que le atendieran también, tan nervioso estaba. Tsuna, a su vez, como un verdadero hijo de Sawada Nana, parecía completamente alejado de todo esto.
- ¿Necesitas ver algo más? - Preguntó avergonzado cuando el doctor finalmente se alejó.
- No. - Respondió secamente. - Estás con fiebre.
- ¡YO SABÍA! - Exclamó el pelirrojo - ¡Tsuna! ¡Tú necesitas descansar!
- ¡Pero estoy bien! - Reforzó volviéndose hacia su mejor amigo. - He estado mucho peor antes, no te preocupes.
- ¡¿De verdad crees que saber eso me dejaría menos preocupado?!
- Pero también tuve fiebre el año pasado, ahora que lo recuerdo… ¿Tal vez sea alérgico al día del deporte? - Sugirió intentando aliviar a su afligido compañero.
- ¿Qué? ¡¿Cómo asi?! ¡¿Y todavía participaste ?!
- Sí… - Lo puso con un aura oscura. - Desafortunadamente.
- ¡Pero eso no significa que tengas que volver a hacerlo!
- ¡Pero estoy realmente bien!
- ¡No, no lo está! - Insistió intentando que el otro volviera a acostarse. - Sé que solo estás haciendo esto por mí, ¡y no puedo dejarte!
- Incluso si no me dejas, dudo que los demás no me arrastren, eso es lo que pasó la última vez. - Añadió resignado el menor. - Y ya te lo dije, realmente no me siento mal, comparado con cómo me quedaba después de los entrenamientos de Reborn, ¡eso no es nada!
- Pero…! - Continuó buscando algo para discutir. - Si tus amigos supieran lo que pasó anoche, ¡dudo que permitirían!
- ¡Por favor, Enma, no les digas nada a los chicos! - Exclamó Tsuna exasperado, apartando las manos del otro. - En serio, no es para tanto, fue solo una pesadilla, no es como si fuera la primera.
- Bueno, no es como si fueras a morir por eso. - Shamal comenzó de nuevo, mirando el termómetro con disgusto, como si el inocente objeto lo hubiera ofendido. - Por lo que aprendí en mi último viaje, los Cielos tienden a tener una temperatura corporal más alta que otros, especialmente a medida que crecen, aunque sigo pensando que esta historia de llamas está sobrevalorada, si no tienes otro síntoma, no debe estar te pasando nada, tal vez solo sea la pubertad. - Y eso hizo que se formara una sonrisa inquietante en el rostro del más grande. - Cuando finalmente te confieses a la chica que te gusta, puedo darte algunos consejos, y tal vez incluso un-
- ¡HIIIEEE! ¡NO! ¡NO! No es necesario, me voy. - Sin pensarlo dos veces, Tsuna en un instante saltó de la cama, esquivó a Enma y salió de la enfermería por el agujero que había creado su tutor. - ¡Nos vemos en la competencia, Enma! - Y sin que él se diera cuenta, Reborn había saltado sobre su hombro, siguiendo así a su alumno sin decir nada.
- Ah... Nos vemos. - Fue todo lo que pudo decir, más preocupado aún, si eso era posible.
Shimon suspiró, luciendo de repente más cansado que su amigo.
Cuando Enma estaba a punto de salir de la enfermería, al menos usando la puerta, escuchó un zumbido cerca de su oído, dándose la vuelta a tiempo para ver un insecto con una extraña tromba con forma de tridente.
- ¡AH! ¡Alejese de mí! - Gritó el Guardián de la Tierra, saltando lejos de la criatura que nunca antes había visto, pero lógicamente esta siguió avanzando hacia él. - ¡¿Qué cosa es esa?! - Y con un movimiento rápido, el joven usó su gravedad como había aprendido en el entrenamiento del día anterior, en lugar de enfocarse en un cuerpo, más aún en un cuerpo tan pequeño como el de un insecto, controló la gravedad haciendo un gravitacional campo a su alrededor, creando suficiente presión alrededor del mosquito para aplastarlo en el aire.
- ¡Oye, pedazo de gente! ¡¿Por qué le hiciste esto a Alessandra?!* - Exclamó molesto el doctor que se acercaba. - ¿Sabes lo difícil que es criar estos trident mosquitos?
- ¡¿Eso era TUYO?! - Puso el pelirrojo, volviéndose hacia el médico, quien por un segundo se había olvidado que todavía estaba en la habitación. - ¡¿Qué quieres decir con Alessandra?!
- Deberías sentirte honrado, porque solo examino mujeres, sin embargo, me llamaste la atención, escuché que ustedes Shimon son un tipo único en el mercado. - Comentó deteniéndose junto al niño.
-...¿Te refieres a mi Llama de la Tierra? Espera ¡¿Reborn te mencionó sobre las llamas de mi familia?! - Preguntó Kozato preocupado.
- Chico, después de que arruinaste la Ceremonia de Sucesión de Vongola, ¿de verdad crees que sus llamas siguen siendo un secreto? - Se burló el doctor. - Es claro que no. - Lo expresó de forma sencilla, mirando directamente a los ojos opuestos, llevándose una mano pensativa a la barbilla. - Un montón de nuevos "elementos", como los han estado llamando la mafia. ¿Son diferentes de los elementos del Cielo? ¿Serán opuestos?
- ¿Por qué te interesaría eso? - Quiso saber el Shimon a la defensiva, dando un paso atrás instintivamente. - Eres médico, no un científico como ese bebé de pelo verde.
- Entonces conociste a ese científico loco. - Miró al pequeño con disgusto. - Por favor, no me compares con ese excéntrico. Mi "interés", como tu lo llamaste, es puramente biológico y práctico. Puede que yo sea médico, pero también soy un asesino a sueldo, tengo que asegurarme de que estas cosas no se interpongan en mí camino caso tenga que tratar con un usuario experimentado. Hay algo que Verde y el resto de los locos parecen ignorar, pero que ejemplares como tú, los Vongola e incluso Giglio Nero y Cavallone son una prueba viviente, la idea de que este poder es principalmente biológico y hereditario. Apostaría cinco euros a que las Llamas del Cielo funcionan como un gen recesivo. No es como si tú entendieras de estas cosas. - Se encogió de hombros al ver la expresión confusa del niño. - Sinceramente, ¿Qué enseñan en las escuelas hoy en día?
-...¿Quieres decir que nuestro tipo de llama depende de nuestra familia y antepasados? - El muchacho luchó por entender, ignorando la pequeña ofensa.
- Pin pom. ¿Y no es eso obvio? Tú y Tsunayoshi no serían Tierra y Cielo si no fuera por la sangre que llevan en las venas, ¿verdad? - Ironizó. - No es que conozca bien los "Shimon", pero las otras familias que mencioné provienen de una larga historia de matrimonios arreglados, lo que favorecería los genes recesivos. Sin embargo, ustedes viviendo en una isla, no es como si tuvieran muchas opciones, ¿Verdad? - Eso molestó al pelirrojo por ser un punto algo sensible. - Me sorprende que no estén llenos de secuelas genéticas. De todos modos, chaval, es un resumen simple, pero funcional de lo que estaba tratando de decir.
Esto hizo que la mirada de brújula lo considerara por un momento antes de comentar.
- Entonces… ¿Es posible conocer el tipo de llama a través de la sangre?
Eso hizo que la sonrisa del doctor se ampliara.
- Con la sangre y con otras sustancias que salen de ti. Sin embargo, mis mosquitos prefieren la sangre. Entonces, para probar mi teoría, estoy tomando muestras de sangre de personas de diferentes llamas y probándolas con mis mosquitos. Entonces, si me permite. - Y sin esperar realmente una respuesta, Trident Shamal, con un movimiento de su mano, hizo que algo que se parecía mucho a una jeringa simplemente apareciera debajo de su manga, y así se acercó a la Tierra, tomándolo del brazo. - Solo quédate quieto, ni siquiera sentirás nada y se terminará rápidamente.
Sin embargo, antes de que pudiera acercar la aguja al chico, una llama roja explotó en la frente del mismo.
Al reconocer el modo Hyper, el Hitman inmediatamente retrocedió.
- Oye, cálmate, puede que no lo parezca, pero hago mi trabajo con gran excelencia, ¿Vale? Como dije, solo quiero entender más sobre este extraño linaje tuyo, una parte de mí todavía cree que estaba borracho cuando Reborn mencionó "Llama Glaciar" y todo eso. Si esto es tan surrealista como suena, es solo cuestión de tiempo antes de que ustedes sean perseguidos como animales exóticos para seren estudiados. - Terminó girando distraídamente su jeringa entre sus dedos.
- ¡Qué es justo lo que estás intentando hacer ahora!
Shamal suspiró y se echó el pelo hacia atrás casi con exasperación.
- Por eso no me gustan los niños y mucho menos los varones. - Murmuró con impaciencia. - Déjame aclarar de nuevo entonces. Ponerlos en jaulas, en un matadero o obligarlos a multiplicarse como conejos no es de mi incumbencia, no soy un Estraneo*.
- Te llamas médico, pero no haces bien tu trabajo, "Dr. Shamal". Si quieres mi opinión, por supuesto. - Parafraseó con disgusto. - ¿Qué fue eso hace poco? ¡¿Pubertad?! ¿En serio? Ni siquiera estabas tratando de ayudar a Tsuna, ¿Y ahora se te ocurrió esta historia de analizar mi sangre solo para "entenderla"? Tú mismo dijiste que eres un Hitman y quieres saber sobre las llamas para lidiar con ellas. No sé cómo Reborn puede confiar en ti, pero sé que yo no confío.
Con cada palabra que pronunciaba, Shamal se sentía cada vez más empujado contra la pared por una fuerza que no podía controlar, lo que hacía que su jeringa se rompiera en el proceso y varias cápsulas de mosquitos comenzaran a aplastarse bajo la presión.
Finalmente satisfecho, después de escuchar una tos seca salir de la boca del hombre mayor, el Shimon finalmente dejó el modo Hyper. Estaba a punto de salir de la enfermería cuando el otro, caído al suelo, aunque liberado de la gravedad, volvió a hablar.
- Esta cosa de las llamas realmente me cabrea, en mi época, los asesinos tenían que arreglárselas con sus propias habilidades. - Comentó en un tono demasiado casual para alguien que casi había sido aplastado, sacando su cigarrillo y mechero de su bata. - Pero sería ciego e inocente si no entendiera que este es el mundo en el que vivo ahora. Y tú debería saber mejor que nadie, Jefe Shimon, que en la mafia y en el mundo, quien tiene información tiene poder, téngalo en cuenta.
Encendiendo su cigarrillo, Shamal volvió su mirada hacia el agujero en la pared, pensando en cómo su amigo no había cambiado nada en todos estos años y, como siempre, desde que se conocieron, había estado rodeado por gente peligrosa. Su mirada se dirigió otra vez a Kozato.
- Antes de que te vayas chico, ¡Dile al maldito padre de ese mocoso que no me vuelva a llamar tan temprano por la mañana! ¡Me estaba divirtiendo como no me había divertido en mucho tiempo! Por primera vez el se-… Y con su rostro rivalizando con el color de su cabello, Enma se escapó antes de que el mayor pudiera seguir hablando, por el agujero que había dejado el Hitman. - Oh, niños. Odio los niños.
Aún en el pasillo, el chico de los ojos de brújula, sin embargo, ahora tenía demasiadas cosas atrapadas en su mente.
"¿Qué quiso decir con "Maldito padre"? ¿Qué tiene que ver Sawada Iemitsu con eso?" - Pensó, preguntándose si debería decirle esto a Tsuna o no, ya que su relación era horrible.
Por su parte, Shamal siguió fumando, yendo a sentarse en la cama de la enfermería, perdido en sus propios pensamientos.
- Je, entonces eso es lo que hace esta "Llama de la Tierra", ¿No es así Reborn? Es ver para creer, bastardo.
TUM
Y casi se atragantó con su tabaco cuando la puerta, que aún estaba cerrada, se abrió de una patada, revelando la figura verdaderamente lívida de Hibari Kyoya que miraba desde el fumador al enorme agujero en la pared.
- Cazzo…
-.-.-.-.-.-.-
Tsuna había estado caminando por los pasillos de la escuela durante un rato, sin una dirección específica, solo perdiendo el tiempo hasta que comenzara la competencia, después de todo, ni siquiera estaba interesado en participar en otros deportes como solían hacer otros anualmente.
Hasta que, luego de lo que le parecieron varios minutos de deambular, notó cómo su tutor, que había estado sobre su hombro todo este tiempo, había permanecido en silencio durante todo el recorrido.
- Uh… - Vaciló. - ¿Está bien, Reborn? - El repentino comentario del Cielo llamó la atención del Sol, que volvió su rostro hacia su alumno. - No has dicho nada desde que salimos de la enfermería.
- Tsuna. - Lo acabó por llamarlo. - ¿De verdad quieres participar?
- ¿Qué? ¿Cómo asi? ¡AII! - Se quejó al recibir otro golpe en la nuca, que no le había dolido tanto como debería.
- No responda una pregunta con otra pregunta. - Regañó el profesor, aún esperando la respuesta del más alto.
- Es solo que... ¡Es extraño! - Masajó el lugar adolorido mientras justificaba. - Desde que nos conocimos, creo que esta es la primera vez que me has dado la opción de si quiero o no participar en algo como esto. - Se rió avergonzado de su propio comentario.
Reborn no respondió, solo miró a su alumno por el rabillo del ojo con su expresión neutral.
- No… - El moreno de repente detuvo sus pasos, su expresión por un momento luciendo sombría. - En el penúltimo día de la Batalla de los Representantes, después de perder ante Jaeger, tu me habías dado la opción de dejar la pelea. - Suspiró, claramente no le gustaba el recordatorio. - Pero ahora es solo una competencia escolar, no creo que sea tan mortal como aquella vez. Entonces que me estes preguntando esto es extraño.
Realmente no hubo oportunidad de una respuesta cuando la pareja comenzó a escuchar los gritos emocionados que sabían que pertenecían a Ryohei, así que, temiendo que todos fueran mordidos hasta la muerte por el ruido, Tsuna reanudó su caminata apresurada hacia el exterior del escuela, viendo que, aunque todavía era relativamente temprano, si las amenazas de explosión y las risas eran algún indicio, sus tres amigos ya estaban reunidos en el lugar que habían quedado en el almorzo del día anterior, cerca del bebedero donde Lambo del futuro había aparecido por primera vez, pues ese lugar estaba a la mitad del camino de la cancha, y aun así, los gritos del Guardián del Sol lograron ser superiores a los de decenas y decenas de estudiantes que ya se encontraban en las inmediaciones.
En ese momento, el Hitman saltó desde el hombro de su estudiante al suelo, todavía luciendo taciturno.
- Reborn… - El Vongola parpadeó, finalmente pareciendo juntar las piezas dentro de su cabeza. - No estás preocupado conmigo participando en un campeonato escolar, ¿Verdad? - Preguntó con incredulidad frente a sus propias palabras y lo absurdo de las mismas. - ¡Fuíste tu mismo el que insististe en que yo participara en primer lugar!
Cuando el asesino parecía a punto de responder, el más pequeño, luciendo un poco emocionado, lo interrumpió.
- No, no. - Insistió, agitando sus manos frenéticamente, una sonrisa radiante formándose en sus labios. - ¡Por favor, no responda! Déjame creer que es eso. ¡Que estés preocupado por mí por una tontería, en lugar de estar intentando convertir mi vida en un caos es casi un sueño hecho realidad!
Y antes de que Hitman pudiera dispararle, o peor aún, por la indignación, corrió hacia sus amigos, sintiéndose repentinamente más motivado, mientras sin saberlo irradiaba una agradable calidez que hizo que sus guardianes se sintieran acogidos al verlo mientras exclamaban lo felices que estaban de que él participaría.
Por su parte, el Ex-Arcobaleno se quedó atrás con el ceño fruncido, recordando el estado en que se encontraba su alumno la noche anterior, el diagnóstico intencionalmente inexacto de Shamal, quien mintió frente a los adolescentes mientras enviaba miradas que indicaban que debían hablar más tarde, y si eso no fuera suficiente, estaba esa canción. Esa maldita canción, siempre heraldo de grandes desgracias.
-..."Tontería". - Parafraseó su alumno, frunciendo aún más el ceño, cubierto por su sombrero. -...¿Será realmente una tontería? - Preguntó a nadie en concreto.
Esperaba que ese fuera el caso, pero aún así no pudo evitar sentirse incómodo.
-.-.-.-.-.-.-
- ¡¿Qué?! ¿También estás en la competencia Rauji? - Preguntó el supuesto Jefe Shimon, aún recuperando el aliento en el vestuario masculino, encontrándose con su Guardián, de entre todas las personas, vistiendo la camiseta del líder del equipo C.
- ¿No escuchaste qué pasó? Después de que Adel te pusiera en la competencia, Koyo se quedo extremadamente enojado, así que hizo que todo el club de boxeo y el club de sumo votaran por mí como líder de esta estúpida competencia, sin embargo el premio es una buena cantidad de dinero, al menos para nosotros... - Puso el hombre corpulento, con una amplia sonrisa en el rostro. - ¡Podemos pagar el alquiler y quién sabe quede algo para unos caramelos!
- P-Pero, ¿Por qué Koyo lo hizo? Pensé que ustedes confiaban en mí… - La voz decepcionada de Kozato no pasó desapercibida para el otro.
- Sabes Enma, no es que no confiemos en tu habilidad ni nada de eso, pero necesitamos el dinero, mas no te preocupes, si no lo consigues, ganaré por los dos, está bien? - Terminó sus palabras extendiendo su mano con una sonrisa, proponiendo un apretón de manos por el honor de la deportividad, como el buen luchador de sumo que era, Enma, a su vez, extendió lentamente su mano en respuesta, dejándola apretar mientras respondía débilmente. - Le deseo suerte en la competencia, Jefe.
- Está bien, hasta entonces Rauji.
El pelirrojo, sin embargo, se quedó en su lugar, hasta que los segundos se prolongaron por minutos, y un movimiento afuera comenzó a indicar que podrían estar buscándolo, ya que era el líder del equipo A.
No que eso importe.
Ya no importaba, ni su propia familia creía en él, ¿por qué si mismo debería creer?
Al escuchar su nombre ser llamado por Osamu, se escondió intencionalmente en una ducha cerrando la puerta, pensando en una forma de escapar, con suerte el equipo A sería descalificado, y por lo tanto ni siquiera Tsuna tendría que participar estando enfermo.
Sí, seguro así era mejor, todo siempre era mejor cuando él no estaba allí.
Al escuchar pasos dentro del vestuario, contuvo la respiración y se concentró tanto como pudo para afectar la gravedad a su alrededor, flotando un poco, lo suficiente para que nadie viera sus zapatos debajo de la puerta.
Solo consideró tardíamente que los pasos que escuchó eran demasiado ligeros para ser de un estudiante de Chuugaku.
- Enma, sé que estás ahí, puedo sentir tu llama, ¿Qué crees que estás haciendo?
Su primera reacción fue congelarse, esperando lo peor, tal vez Adel, o incluso Koyo lo había encontrado, pero cuando procesó la voz de niño, la comprensión lo golpeó como un meteoro, aunque ya era demasiado tarde, ya que tentáculos se envolvieron alrededor de la puerta de la ducha, para luego arrancar la misma de sus bisagras, revelando la figura del Ex-Arcobaleno de la Nube.
- ¡S-skull! ¡¿Qué haces aquí?! - Quiso saber Enma, sorprendido, cayendo con el trasero al suelo cuando perdió el equilibrio.
- ¡¿Qué haces tú aquí?! No estaba pensando en huir, ¿verdad? - Espetó el más pequeño, señalando acusadoramente al adolescente. - No estabas pensando en rendirte, ¿Verdad? ¡No cuando el Gran Skull personalmente vino a ver esta batalla de postes mortal! - Exclamó egolatra como de costumbre, dándose una palmada en el pecho, luego se detuvo de repente, como si hubiera notado algo. - ¡Espera un poco! ¿Tú estas llorando?
- ¡N-no! - Negó, maldiciéndose por cómo se le quebró la voz. - Yo solo…
- Tus ojos están rojos, Enma.
- Mis ojos siempre están rojos, Skull.
Esto hizo que el doble resoplar mientras se quitaba el casco para mirar al chico más joven directamente a los ojos.
- Engañar a los ojos de la gente es el trabajo de los doble Enma, y tú lo haces fatal. - Declaró mientras su compañero se envolvía en el cuello opuesto. - ¡Entonces, comencemos de nuevo! Dile al Gran Skull, ¿por qué lloras?
E incapaz de contenerse por más tiempo, el joven rompió a llorar.
-.-.-.-.-.-.-.-
- ¿CÓMO QUE ESTÁN TODOS AQUÍ? - El grito de Tsuna resonó a través de la cancha abierta donde todos comenzaron a reunirse para el gran evento. La gente a su alrededor, sus compañeros del equipo A, simplemente ignoraron al chico escandaloso como de costumbre.
- ¡Así es! - Exclamó Yamamoto feliz, envolviendo un brazo alrededor del hombro de su jefe. - También me sorprendió ver a Lal Mirch junto a otros miembros de la familia de nuestros compañeros. Colonnello también debe estar por aquí. ¡Creo que todos vinieron a vernos, Tsuna!
- ¡¿POR QUÉ LOS ARCOBALEANOS VENIERON A VER UN FESTIVAL DE DEPORTES ESCOLARES ?! - La respuesta de su amigo no logró calmar su ánimo.
- Ex, Arcobalenos. - La corrección de Reborn hizo que Tsuna titubeara un poco. - Y no, no están todos aquí, Uni está con su familia en Italia, a igual que Mammon está con Varia, Fon ya está en Namimori, pero aún no lo he visto, ya Verde posiblemente debe estar por ahí, ese científico loco nunca se perdería una reunión de tanta gente de peso. - De todos los nombres mencionados, el que más llamó la atención de Tsuna fue precisamente el último. Se preguntaba si Mukuro también aparecería ya que el Ex-Arcobaleno del Trueno estaría allí, eso hizo que pasara un escalofrío por su espalda, deseando que no fuera el caso, lo último que quería era un Hibari enojado como el año pasado.
- Entonces… Solo vinieron a animarnos, ¿Verdad? - Tsuna intentó en vano tener algo de esperanza, aunque fuera mínima.
- En realidad no, como si vinieran a ver a un grupo de adolescentes en un festival deportivo. - Sonrió de lado Reborn, como era característico a la hora de planificar algo.
- HIIIE, ¿A qué te refieres? ¿Qué vinieron a hacer entonces?
- ¿No viste que el Mestre Colonnello ganó la competencia de tiro con arco usando un rifle? ¡Eso fue una locura! - Dijo el Guardián del Sol en éxtasis.
- Eso explica por qué un pulpo extraño ganó la competencia de natación. - Comprensión golpeó la Tormenta Explosiva en ese momento. - ¡Maldición! ¡Pensé que podría ser un A.M.N.I.!
- ¡¿Pero, cómo es posible?! ¡Ni siquiera son estudiantes! - El Cielo trató de pensar en alguna explicación para esta situación, pero pronto se rindió, en ese punto, ya no valía la pena cuestionarlo.
- Pero mira el lado positivo, Tsuna, ¡Gané una vez más en la carrera de 100 metros! Kaoru casi me pasa, pero me las arreglé para aguantar y ganar al final. - La genuina felicidad se notaba en la voz de la Lluvia.
- ¡Aaah, mierda! Lo siento Décimo, intenté ganar la competencia de Salta Salta de este año por ti*, pero cuando se trata de saltar, ¡Shittopi es imbatible! ¡Perdóname! - Con cada palabra hablada, Gokudera se golpeó la cabeza contra el suelo, mientras permanecía en la posición de dogeza*, al mismo tiempo que era reprendido por un desesperado Tsuna pidiéndole que se detuviera.
- ¡EL CABEZA DE PULPO ESTÁ CIERTO! ¡NADA MÁS QUE LA VICTORIA ESTÁ PERMITIDA! - Los gritos de un emocionado Ryohei llamaron la atención de todos, desde los que estaban fuera de esta reunión familiar en medio de la cancha abierta, hasta los que comenzaron a llenar las gradas hechas por el Comité Disciplinar este año debido a la gran cantidad de espectadores. - ¡Y por eso exactamente me disculpo con todos! Empaté con el imbécil de Aoba Koyo en la competencia de tira y afloja, era mi oportunidad de redimirme por lo que sucedió en aquella extraña isla, ¡Y fracasé extremadamente!
- ¿Tira y afloja? Pero, ¿Cómo funcionaría esto con tres equipos? - La duda vino de Kyoko quien se acercó al grupo para apoyar a todos mientras la competencia no comenzaba.
- Aoba y yo somos los líderes del comité organizador, así que simplemente excluimos al equipo B de participar. - La respuesta directa del boxeador apenas sorprendió a Tsuna, recordando lo que sucedió el año pasado*. - ¡Pero maldita sea! ¡Todavía no he perdonado a ese idiota por convencer a MI club de boxeo de escoger a ese "Sumo Shinu" como líder del Equipo C!
- ¿Espera un minuto, Shimon? ¿Cómo asi? - Eso llamó la atención del menor.
- ¿No lo sabías, Tsuna? Kaoru me dijo en el vestuario que ese tipo Aoba puso a ese tipo Ooyama como líder del Equipo C. - Simplemente dijo el espadachín.
- Shittopi me contó algo similar durante los preparativos para el Salta Salta. - Continuó el bomberman. - Me dijo que Suzuki Adelheid estaba tan enojada con Aoba por hacer esto, aún más sin preguntarle primero, que prohibió a todos los demás Shimon de participar en el evento del poste, pero no pudo detener a Ooyama porque yano había tiempo. - El Vongola sintió un mal presentimiento en su pecho cuando se enteró de esto. - Quiero decir, con la excepción de Kozato y el mismo Ooyama, que son los líderes, los demás no participarán. - Por otro lado al escuchar eso sintió una punzada de alivio. - Shittopi incluso estaba tratando de disfrazarse de hombre para apoyar a su Jefe, pero...Digamos que el bigote no era muy convincente.
"¿Por qué le harían eso a Enma? ¿No deberían ser una familia? ¿Y cómo no me enteré de esto? ¿Enma lo sabe? ¿Es por eso que no quería dejarme participar?" - Varias preguntas pasaron por la cabeza de Tsuna, quien estaba con una expresión más abatida que antes.
- ¿Pasó algo, Tsuna? Parece que estás triste. - La pregunta de Kyoko llamó su atención, haciéndole devolver la mirada.
- Oh, n-no, es solo que-
- GYAHAHAHA, ¡Inútil-Tsuna está triste porque mi sirviente golpeará a su inútil amigo! - Las burlas de Lambo casi molestaron al Cielo, quien pensó en contrarrestar, pero cambió de opinión cuando notó que el niño estaba solo.
- ¡Lambo! ¡¿Qué haces aquí?! - Cuestionó agachándose a la altura del niño, un poco tenso por la atención que él estaba recibiendo de los demás alumnos.
- Bien, bien. - Respondió frotándose la nariz descuidadamente. - El Grande Lambo ya conoce el camino a la escuela de sus sirvientes. ¡El Grande Lambo no necesita la compañía de nadie!
Fue en ese instante que el Guardián del Trueno fue golpeado por una patada voladora de una nerviosa I-Pin.
- ¡Lambo, miente! Lambo vino con I-Pin, ¡casi termina solo en Kokuyo intentando llegar! - La joven quiso expresar su disgusto por la mentira con sus golpes, y no hay forma de expresarlo mejor que golpeando a Lambo.
- Oye, ¡buena patada I-Pin! - Felicitó a Gokudera haciendo que la joven se sonrojara levemente ante el cumplido.
- ¡FUE UNA PATADA EXTREMA!
- ¡Hermano! ¡No seas cruel! - Kyoko corrió a buscar al más pequeño.
- I-Pin. - Reborn, quien se subió al hombro de Yamamoto para observar mejor a todos, nombró a la joven que rápidamente se volvió hacia él. - ¿Ustedes vinieron con Fon?
Esto inmediatamente puso triste a la niña.
- No, el Mestre dijo que iba a visitar, pero I-Pin no lo encontró, Bianchi y Haru estaban ocupadas, así que vinimos solos.
Toda esta escena hizo que Tsuna se distrajera un poco, haciendo una nota mental para hablar de toda esta situación de Shimon con Enma más tarde, mientras trataba sin éxito, junto con Kyoko, detener el llanto del pequeño Trueno.
- ¡BUAAAAAA! TO-LE-RE! - Cuando empezó a llorar, el niño buscó en su cabello su bazuca de los diez años, siendo detenido por una figura femenina que acababa de llegar.
- Cálmate, no llores, está bien. - Chrome trató de calmar al niño mientras lo tomaba en sus brazos, sacudiéndolo de lado a lado como un completo bebé.
- Ahora que están todos aquí, busquemos a Enma, la competencia ya va-
- ¡BOOOOO!
- ¿Eh? Haru? ¿Por qué llevas esta cosa? - Tsuna preguntó no reaccionando como esperaba la joven.
- ¡No es una cosa! Es un Namahage, busqué este disfraz por toda mi casa, ¡incluso le pedí a la señorita Bianchi que me ayudara a encontrarlo! - Exclamó feliz, dando vueltas sobre sus pies con su traje amarillo peludo en forma de huevo, con una máscara roja, del mismo color que su larga cola y sus escamas proyectables. - ¡Haru está tan feliz de haberlo encontrado! - Sacudio feliz sus manos bajo grandes guantes marrones.
-...Al menos esta vez no trajo el cuchillo...* - Sawada suspiró aliviado, tratando de aferrarse a pequeñas victorias.
- Hola a todos, ¿Cómo está mi querido Reborn? - Llegó Bianchi, y en respuesta, el bebé saltó al hombro de su amante, quien fue recibido con una caricia en Leon.
- Me alegro de que se acordó de traer sus lentes esta vez… - Tsuna nuevamente aferrándose a las pequeñas esperanzas. - Pero Haru, ¿por qué estás vestida así…? - Aún no se había rendido de su pregunta.
- Bueno, ¿no es obvio? ¡Quiero asustar a todos los competidores de los equipos rivales! - Contestó Haru con una gran sonrisa en su rostro, que de todos modos no se podía ver gracias a su máscara.
- ¿Eres estúpida? - La gruesa pregunta de la Tormenta no pasó desapercibida para la colegiala de Midori, quien, sin embargo, simplemente la ignoró por completo.
- No digas eso Gokudera, piensa en el lado positivo, el disfraz puede que no te asuste, ¡pero seguro que todos lo encontrarán muy divertido! - El animado comentario de la Lluvia hizo que la chica disfrazada se sintiera aún más segura.
- No entendí para qué es eso, ¡pero creo que su ánimo esportivo es extremo!
- ¡Pero no es para animar, sino para asustar!
- Ah… ¡Pero tu espíritu sigue siendo extremo!
Haru decidió solamente aceptar.
- Creo que es lindo. - Dijo Chrome simplemente.
- ¡Gracias!... Pero se suponía que debía dar miedo. Creo...
- No te preocupes por eso, Haru, yo creo que te ves increíble. - Los cumplidos de su amiga Kyoko la animaron un poco.
- De todos modos, la competencia comenzará, busquemos-
- ¡Lo siento, chicos! - Gritó un Enma corriendo con un Skull sobre su cabeza, por alguna razón. - ¡Pero acabo de llegar! ¡AAAAAA! ¡¿QUÉ ES ESO?!
El susto del Shimon hizo que el doble de acción inmortal cayera de cabeza al suelo, provocando que se quejara con Enma para que fuera más cuidadoso.
Con eso, Haru tuvo más confianza en que su fantasía sería la clave del éxito.
- Qué pasó Enma, estábamos preocupados por ti. - Tsuna fue rápidamente a ayudar a su amigo a levantarse.
- Oh, no te preocupes por eso, estaba nervioso y necesitaba un poco de aire, hasta que Skull me encontró. - Los dichos de la Tierra no parecían haber convencido al Cielo, más aún por la seria expresión de la Nube.
- Enma, ¿Estás seguro?
- ¡ATENCIÓN A TODOS LOS EQUIPOS! ¡ATENCIÓN A TODOS LOS EQUIPOS! LA COMPETENCIA DEL POSTE EMPEZARÁ, TODOS LOS EQUIPOS SE DIRIJAN A SUS POSICIONES!
El repentino anuncio del altavoz hizo que todos los demás corrieran hacia el centro de la cancha, mientras que los no participantes se despedían y se dirigían a las gradas.
Finalmente, Reborn saltó de regreso al suelo, caminando entre la audiencia en busca de rostros familiares, Skull inconscientemente siguiendo al Hitman, curioso por saber qué iba a hacer.
Hasta que los dos encontraron a Lal Mirch sosteniendo a Colonnello en sus brazos, como un verdadero niño.
-.-.-.-.-.-.-.-
- Y CON ESO, DAMAS Y CABALLEROS, PADRES E HIJOS DE TODAS LAS EDADES, COMENZAMOS LA MUY ESPERADA Y RETRASADA BATALLA DEL POSTE, ESPERO QUE ESTÉN PREPARADOS, PORQUE ESTE AÑO PROMETE SER INOLVIDABLE !
- Espera, ¿Esa es la voz de Longchamp? No lo he visto desde la Ceremonia de Sucesión*. - Tsuna no sabía cómo reaccionar al escuchar la voz de su viejo "amigo", después de todo, la mayoría de sus recuerdos de Naito siempre involucraban mucho dolor y confusión, especialmente dolor.
- ¿Quién es este tipo Lonchan? Parece ser bastante extremo, tal vez lo invite al club de boxeo después de la competencia.
- No seas tonto Cabeza de Césped, lo viste en la Ceremonia, ¿no te acuerdas? - Y con un simple movimiento negativo de cabeza, continuó Gokudera. - Que sea, estudia en la misma clase que Décimo, pero es parte de una familia rival de los Vongola... Aunque ahora, desafortunadamente, somos aliados, pero no ha aparecido en clases desde el ataque de Varia a Namimori, nosotros esperabamos que estuviera muerto, pero aparentemente siguió estudiando a distancia, y ahora está narrando la competencia por ser el representante de nuestra clase, que nunca-
- ¡AHORA PRESENTAREMOS LOS EQUIPOS!
- DEJAME TERMINAR DE PRESENTARTE, ¡IMBECIL!
- G-gokudera, no creo que pueda escucharte...
- PRIMERO, EQUIPO C, LIDERADO POR OOYAMA RAUJI, EL ESTUDIANTE GIGANTE TRASLADO DE LA ESCUELA... ¡NO SÉ EL NOMBRE! LOS ESTUDIANTES QUE LUCHAN POR ÉL ESTÁN COMPUESTOS POR EL CLUB DE BOXEO, EL CLUB SUMO Y VARIOS OTROS... ¡QUE NO SÉ DE DÓNDE SON!
- Será fácil. - Dijo simplemente la Montaña, sentándose en lo alto del poste con tanta fuerza que este simplemente se había hundido en el suelo, un detalle que dejó a todos de su equipo aliviados al no tener que soportar todo ese peso.
- Y EN EL OTRO LADO, TENEMOS EL EQUIPO B, COMPUESTO PRINCIPALMENTE POR LOS VARIOS MIEMBROS DEL CLUB KENDO, LIDERADO POR MOCHIDA KENSUKE, ¡NUNCA ME GUSTÓ ESTE TIPO!
- ¡Nadie preguntó! - La puerilidad de su veterano todavía impresionaba a Tsuna.
- Y POR ÚLTIMO PERO NO MENOS IMPORTANTE, POSIBLEMENTE TENEMOS LA SORPRESA DEL AÑO, EL LÍDER DEL EQUIPO A, KOZATO ENMA, EL ESTUDIANTE TRASLADO DE LA ESCUELA QUE AÚN NO RECUERDO EL NOMBRE! ¡PERO NO SÓLO ESO MI GENTE, LOS QUE FORMAN SU EQUIPO NO SON NADIE MÁS, NADIE MENOS QUE YAMAMOTO TAKESHI, CAPITÁN DEL CLUB DE BÉISBOL, SASAGAWA RYOHEI, CAPITÁN DEL CLUB DE BOXEO, ¡Y GOKUDERA HAYATO, UN AMIGO DE SAWADA TSUNAYOSHI! - Esas últimas palabras irritaron profundamente la Tormenta, quien recordó por qué odiaba a este tipo. - ¡OYEEEEE! SAWADA! ¡ESTOY DE TU LADO, PERO NO DEJE QUE NADIE LO SEPA!
- Eh… Gracias, creo. - Dijo Tsuna en palabras tan bajas que solo él escuchó.
- Está bien amigos, voy a subir, deséame-
- ¡Espere! - El grito repentino de Tsuna llamó la atención de sus Guardianes. - A-Antes de que subas, ¿qué tal si hacemos..."Eso"?
Un gran brillo apareció en los ojos de Ryohei comprendiendo de inmediato a que se referia, ni siquiera podía recordar la última vez que lo habían hecho, y era aún mejor que el pedido viniera de su hermanito. Yamamoto esbozó una simple sonrisa de satisfacción. A su vez, Gokudera, que siempre pensó que eso era ridículo, por alguna razón queria participar.
- ¿Eso? - Repitió el confundido Shimon.
- Mira, Enma, es como un ánimo de equipo. - Y con eso dicho, los cuatro entraron en la posición habitual, pero esta vez con un espacio extra para Enma, que inmediatamente entró en la formación, rojo como un tomate. - Chicos, todos juntos en tres, ¿Vale? Uno, dos, tres…
- ¡ENMA, FIGHT! - Y todos los Vongola dijeron al unísono.
Y este simple y vergonzoso acto de camaradería, llenó a Enma de una determinación que nunca antes había experimentado, sintiendo realmente cómo esas personas lo apoyaban.
- ¡C-chicos! Subiré ahora, ¡Ganaremos! - Aunque tartamudeando, el Jefe Shimon mostró una voluntad mucho mayor que antes. Y con eso, Kozato subió al poste extremadamente rápido, una hazaña que dejó impresionados a todos los equipos, excepto a los que conocían su capacidad de gravedad.
- MUY BIEN CHICOS, CON TODOS LOS LÍDERES DE EQUIPO LISTOS, QUE COMIENCE LA BATALLA.
Como era de esperar, el caos era inevitable, la confusión general por parte de todos los equipos era el factor principal en esta pelea, amigo contra amigo, enemigo contra enemigo, amigo contra enemigo, nadie estaba a salvo de ser golpeado en la boca.
Al menos eso es lo que pensó Tsuna, notando la forma en que el Equipo B lo atacaba a él, el Cielo se había dado cuenta de cuál era el plan de Mochida, quería terminar con él de una vez por todas, aparentemente su enojo por haber sido humillado hace casi dos años aún no había sido superado.
- ¡Maldito seas! ¡Esta es una competencia de todos contra todos! ¡Si te enfocas en nosotros, lucharemos! - Exclamó el fumador, mientras golpeaba y pateaba a todo el que se le acercaba al Décimo, que se encontraba más cerca del poste.
- ¡Espera Gokudera! - Gritó también Yamamoto, menos agresivo que su amigo. - Si nos centramos en el Equipo B, ¡no quedaran muchos para luchar contra el Equipo C! - Al escuchar estas palabras, Gokudera notó lo bien dividido que estaba el Equipo C, algunos miembros del club de boxeo estaban peleando contra los remanentes del Equipo B, mientras que otros del club de sumo defendían a su líder con todo su espíritu.
- ¡Tengo un plan! - Los gritos de Ryohei, seguidos de dos ganchos que les había dado a los miembros del club de kendo que habían logrado infiltrarse rápidamente, llamaron la atención del dúo. - ¡Yamamoto! ¡Gokudera! Síguenme hasta la victoria, conozco un camino a través de esta defensa. - Y sin esperar a que ambos respondieran, el boxeador corrió hacia el poste del Equipo C, golpeando a cualquiera que se interpusiera en su camino y enviándolo a volar.
- ¡Suena divertido, vamos! - La Lluvia siguió emocionada al Sol, despejando el camino de una manera mucho más educada que sus dos amigos, noqueando a sus oponentes con golpes bien dirigidos en sus puntos vitales. Lo que no era necesariamente mucho mejor...
- Maldita sea, ¿por qué siempre actúan así? Necesitamos proteger a Déc-, ¡Quero decir a Kozato! ¿Verdad, Décimo? - Dijo Gokudera sin dejar de atacar, notando como parecía que su amigo se había congelado en su lugar. - ¿Décimo?
- Oh, lo siento, me distraje por un momento. - Habló rascándose la nuca, esquivando por poco algunos golpes.
- ¡¿Qué paso?! ¿No te sientes bien? - La preocupación en la voz de su Guardián no pasó desapercibida.
- ¡No no! Es solo que ... No sé, sentí una enorme confianza en la forma en que el hermanazo habló, siento que deberías ir con ellos. Y antes de que digas algo sobre Enma o sobre mí, recuerda, la gravedad es nuestra carta de triunfo, ¿No es así? - Finalmente, terminó sonriendo y nuevamente esquivando por poco algunos golpes y empujones más de su propio equipo, acabando por más de una vez golpeando sin querer su propio poste.
- Oh Décimo… ¡Está bien! ¡Estoy yendo! ¡Kozato, contamos contigo! - Las palabras que resonaban en la cabeza del delincuente sonaban como las de un verdadero Jefe de la Mafia.
"¿Quizás esto es la Hyper Intuición siendo utilizado en la práctica?" - pensó Hayato corriendo en la misma dirección que los demás Guardianes, pero sin dejar de atacar a cualquiera que se interpusiera en su camino, causando más de una contusión cerebral.
Al ver que los luchadores más fuertes del equipo A se habían alejado, el equipo de kendo, que se había retirado después de que Yamamoto había derrocado a sus titulares, disparó hacia el poste A, de esa vez centrándose principalmente en el líder y pasando directamente por Tsuna, uno de ellos incluso pisando en su cabeza, mientras él parecía cada vez más cansado.
Sin embargo, para sorpresa de los competidores, Enma, haciendo un movimiento en falso con las manos, empujaba a todo el que intentaba acercarse a él, haciendo que todos cayeran al suelo con un fuerte ruido.
- ¡¿Qué fue eso?!
- ¡No pude acercarme!
- ¡Es como si hubiera una barrera a su alrededor!
Las preguntas de todos hicieron sonreír con satisfacción tanto al Cielo como a la Tierra, al notar cómo Chrome desde lejos levantaba el pulgar en aprecio, un gesto que los dos Jefes repetíran.
Por otro lado...
- ¡Es el Capitán! ¡Viene con todo! - Los gritos generalizados de los miembros del club de boxeo eran una advertencia sobre cómo las tres estrellas de la equipo A atacaban y esquivavan a cualquier competidor.
- ¡USTEDES, TRAIDORES! ¡SALGAN DE LA FRENTE! - Y con sus gritos, los integrantes dudaron un momento, momento en que los Guardianes se apoderaron y derrotaron a todos los que habían resistido a los ataques del Equipo B, abriendo así el camino para el club de sumo, que en poco tiempo había abandonado su puesto de defensa. - AHORA, ¡SALTA!
Y tanto Tormenta como Lluvia, en un impulso, saltaron sobre los miembros del sumo, agarrando el poste y trepando rápidamente para llegar a la cima.
- ¡¿Y ahora Cabeza de Césped?! - Al llegar a la cima, Rauji intentó atacar a Ryohei con la palma abierta, un golpe que fue desviado por poco por el adolescente de peliblanco.
- ¡YO NO SÉ! ¡AÚN NO HE PENSADO EN ESA PARTE!
- ¡SU GRANDE IDIOTAA! - Exclamó el chico de peliplateado, esquivando por poco otro golpe de sumo.
- ¡Yo lo sé! ¡Gokudera! ¡Sasagawa! ¡Sujétenle las piernas! - Al pensar en algo, Yamamoto agarró los dos brazos de Rauji por detrás, apoyándose en el caparazón de tortuga hecho con la Llama de la Montaña, estaba claro que no se rendiría tan fácilmente.
- ¡LISTO! - Exclamó el Sol.
- ¡ESTOY AGARRANDO! - La Tormenta siguió.
- ¡ES AHORA, JALEEEEEN! - Gritaba la Lluvia, concentrándose lo más posible para poder, incluso en pequeñas cantidades, convocar sus llamas en la punta de sus dedos, sin su collar Vongola o un anillo cualquiera, para poder usar el factor Tranquilidad en los brazos del Shimon, evitando así que el mismo contraataque, lo que estaba consumiendo mucha de su energía, pero un pequeño destello azul fue la respuesta de que estaba funcionando.
- ¡Déjanme ir! - Agitó las piernas una y otra vez, tratando de hacer que cayesen.
Lo que sucedió, pero no de la forma que esperaba Ooyama.
Los Guardianes, aplicando todas sus fuerzas para tirar de las piernas de la Montaña, lograron que Rauji cayera con fuerza hacia adelante, al suelo, una escena que no pasó desapercibida para el club de sumo, provocando que todos se fueran de ese lado en lugar de intentar aguantar su enorme capitan.
Y luego se escuchó un gran estallido en toda la escuela, que finalmente eliminó al líder del Equipo C.
Sin embargo, había un precio por la victoria, Rauji aterrizó justo encima de Ryohei y Gokudera, aplastándolos contra el suelo, mientras el enorme casco hecho de llama de la Montaña se estrellaba contra Yamamoto.
- Sí... Funcionó... Ja... Ja... De alguna manera. - El japonés jadeó, sintiendo dolor con cada risa que soltaba.
- Mierda… Recuérdame nunca volver a confiar en tu plan… - Se quejó el japonés-italiano, tratando infructuosamente salir de debajo de esa montaña literal. - ¡APÁRTATE DE MÍ!
- Dios mío… ESO FUE EXTREMO, ¡HAGAMOS OTRA VEZ!
- ¿Alguien te ha dicho alguna vez que eres raro? - Comentó Rauji tratando de levantarse sin éxito. - Ya no siento mis brazos por la llama de tu amigo, y mis piernas por lo que hiciste. Así que ... No puedo levantarme.
- ¿¡QUÉ!?
- ¡TIENE UN PESO EXTREEEMOOO ! Ah ... ¡Sin ofender!
- ¡NO! ¿¡Y EL DÉCIMO!?
- Pero teníamos que proteger a Enma, Gokudera.
- ¡NO ME IMPORTA ESE IDIOTA! ¡DÉEEEEECIMO! - Gritó mientras luchaba patéticamente.
Al darse cuenta de todos esos gritos y movimientos divertidos de Rauji, Lambo comenzó a luchar para liberarse de los brazos de Chrome, queriendo jugar también.
- Y CON ESO, DAMAS Y CABALLEROS, TENEMOS NUESTRA PRIMERA DERROTA GRACIAS A LOS AMIGOS DE SAWADA TSUNAYOSHI, ¡¿QUÉ HARÁ UN IDIOTA COMO MOCHIDA FRENTE A LA VENTAJA DEL EQUIPO A ?!
- ¡EL GRAN LAMBO QUIERE JUGAR TAMBIÉ! - Y luchando, logró soltar unas granadas, lo que por reflejo, hizo que Chrome lo soltara, solo para que el chico gritara de victoria saltando encima del muro que separaba las gradas de la competencia. - ¡HE GANADO!
- ¡No entres Lambo, es peligroso! - Exclamó Haru tratando de alcanzar al chico para luego atorarse con su cola. - ¡Aaay! ¡No!
- Espera, Haru, te ayudaré. - Ofreció Kyoko, que estaba sentada junto a su amiga.
- ¡No te preocupes por mí, Kyoko! - Puso dramáticamente la joven. - ¡La cola puede sueltar como la de una lagartija! ¡Ve por Lambo, él es más importante!
Kyoko asintió y trató de atrapar al más pequeño, quien simplemente la esquivó con un salto.
- ¡Lambo, no puedes! - Estaba tratando de razonar Sasagawa. Reborn y Bianchi habían dejado de ver la masacre para ver la interacción, pero no se ofrecieron a ayudar.
Lo que desconcertó a Skull, pero en realidad no conocía al chico como para hacer alguna cosa.
Lal y Colonnello, a su vez, ignoraron por completo la interacción, se manteniendo a ver la caída del equipo A y B.
- ¡Lambo, mal! - Exclamó I-Pin levantándose para ayudar, preparando su Gyoza Ken para atacarlo.
- ¡AAAH! ¡ESA COSA APESTOSA NOOOOO! - Y para defenderse, Lambo empezó a lanzar varias granadas en todas las direcciones, mientras la pequeña asesina lanzaba sus golpes de Gyoza al italiano que seguia gritando.
- ¡Yaaaay! - La china pateó a cada una de ellas lo más lejos que pudo, sin ni siquiera dejar que una golpeara las gradas, pero al hacer varios saltos en el aire llegó a tal distancia que casi podía tocar la azotea de la escuela.
Donde vio nada menos que a Hibari Kyoya, quien observaba la pelea del poste con ligero interés. Sus ojos se encontraron por un momento, en el cual el mayor solo levantó una ceja.
- ¡Y-yaaay! - Completamente avergonzada frente al moreno, el Pinzu Super Explosion inició su cuenta atrás mientras I-Pin, por primera vez, seguía lanzando sus fétidos golpes al azar a pesar de estar en modo Pinzu.
- Parece que I-Pin está mejorando, ahora logra usar su Gyoza Ken incluso durante la cuenta regresiva - Reborn comentó quien, al igual que Bianchi, ahora usaba una máscara de gas.
- ¡ESPERA UN POCO! ¿De dónde sacaron estas máscaras? - Quería saber Skull que volvía a ponerse el casco por si acaso.
Lo cual fue una gran decisión porque la china cayó directamente en sus brazos.
- ¿Qué es eso en su frente? - Quería saber la Nube.
- Muere por nosotros, Esclavo. - Y dicho esto, Reborn los pateó a ambos hacia el cielo, provocando una inmensa explosión de color morada.
Por otro lado…
Los Gyozan Ken sin rumbo habían golpeado a varios miembros del equipo de kendo, que comenzaron a pelear entre sí, así como a los desprevenidos miembros del equipo A que no tuvieron tiempo de reaccionar.
Como por ejemplo...
- ¡Tsuna! - Gritó Enma al ver desde arriba del poste, como Tsuna era golpeado directamente por un incontrolado de Gyoza, que ni siquiera parecía ver venir. Entonces, sin tiempo para defenderse cuando no estaba en modo Hyper, el olor entró en su nariz, lo que hizo que perdiera el control de sus movimientos y volara varios metros del suelo, solo para caer con un grito agudo, estallando con un ruido sordo en el suelo como un saco de patatas, sin moverse de nuevo después de eso. - Tsuna, ¡¿Estás bien?!
Los gritos del juego continuaron, como si el accidente no fuera importante para la gran multitud, pero no se podía decir lo mismo de la familia del moreno, que se inquietó cuando se hizo evidente que el menor había perdido el conocimiento, no hacia más ningún movimiento, se había desmayado a pocos metros del poste de su amigo.
- Eso es extraño. - Comentó Julie, él, Shitt-P y Adel comenzaron a acercarse al grupo Vongola en la primera fila de las gradas. Tenía un ojo morado y un corte en la boca por alguna razón. - Pensé que este chico era más resistente que eso por lo que presencié de su lucha contra aquel Fantasma del Infierno.
- Él es. - Fue la confirmación de Lal Mirch, que aunque en otro tiempo, aún tenía recuerdos de haber entrenado al hijo de su jefe. - Algo está mal.
- ¡OYEE!* ¡Este golpe fue extremadamente nada! - Se unió Colonnello. - He visto a Tsunayoshi pasar por cosas mucho peores, ¡incluso fuera del modo Hyper!
Inmediatamente, la mirada aprensiva de Bianchi se encontró con la sombría de Reborn.
Las chicas se miraron con inquietud, incluso Chrome levó una mano preocupada hacia su pecho, mientras Haru continuaba contra la pared divisora, ahora libre de su cola, buscando donde había terminado Lambo después de su pelea con I-Pin.
- ¿Qué significa eso, bebé? - En ese momento, para sorpresa de más de uno de los presentes, el presidente del Comité de Disciplina, tan conocido por odiar a las multitudes, volvió a estar presente en medio de la caótica batalla del poste luego de presenciar la Explosión Super Pinzu, el camino se abrió con cada paso que dio a través de las gradas, incluso sin tener que lanzar su mirada asesina a nadie precisamente, Kusakabe lo siguia desde unos pocos metros de distancia. - El pequeño animal no debía ser derribado solo con eso, incluso en su estado Herbívoro.
- Pensé que Fon estaría contigo, Hibari, ya que él está en Namimori. - Fue el único comentario que recibió del Hitman, quien observó atentamente como, temiendo que Tsuna terminara pisoteado, Ryohei y Gokudera unieron sus fuerzas para ayudar a Rauji a levantarse y Yamamoto luchaba por liberarse de la prisión de la Montaña, todo con la intención de correr al rescate de su jefe.
- Escuché que el pequeño animal estuvo en la enfermería hoy. - Siguió a la Nube, para nada dispuesto a dejar que el otro cambiara de tema. - El "doctor" no colaboró en absoluto, pero las cámaras de seguridad me dieron toda la información que necesitaba.
Reborn no respondió de inmediato, aún sin apartar los ojos de su estudiante caído y sus guardianes que juntos comenzaron a liberarse mientras el capitán de sumo exclamaba con sorpresa*.
- Quién diría que te convertirías en un guardián tan preocupado, recuerdo que al principio solo querías tirar tu anillo. - Aún así, no revelaría información tan fácilmente.
- Sawada Tsunayoshi es un estudiante de Namimori Chuugaku*, y todo lo que sucede en esta escuela debe ser conocido por mí. - Respondió a la provocación sin cambiarse. - Aquí no pasa nada que yo no sepa.
- ¡BUAAAAAAAAAAAA! - El grito repentino, sin embargo, interrumpió la conversación, volviendo la atención de todos hacia el chico con traje de vaca que se paró entre lágrimas junto al pueste de Mochida.
- ¡¿Pero qué hace un niño aquí?! - Quiso saber el capitán de kendo, desconcertado.
- ¡AH! ¡LAMBO! - Exclamó Haru preocupada, aliviada de finalmente encontrarlo, saltando por encima del muro para proteger al niño indefenso de ese juego tan aterrador.
- ¡Haru! ¡Es peligroso! - Trató de alertar Kyoko también levantándose, pero su atlética amiga* ya estaba unos metros por delante.
- ¡OOOOOOOH! ¡PARECE QUE UN MONSTRUO ENTRÓ EN CAMPO! ¡¿ESTO ESTÁ SE VOLVIENDO YU-GI-OH?!* ¿QUÉ MÁS PUEDE SUCEDER EN ESTA BATALLA, SEÑORES? - Longchamp volvió a narrar súper emocionado, golpeando la mesa con la mano, dejando a más de un presente sordo con el eco del micrófono.
- Kusakabe. - Llamó al presidente que ahora parecía realmente irritado. - Entra y trae esa Pequeña Vaca, la Herbívora y el Pequeño Animal.
- Sí, seño- Sin embargo, el vicepresidente nunca pudo terminar su oración cuando, aún llorando, Lambo comenzó a sacarse su Bazooka de diez años del cabello, solo para ser confundido con una piedra por uno de los participantes del equipo B, quien no contuvo esfuerzos para defender su puesto, incluso si trampas fueran necesarias, por eso pateó la bendita "piedra" en la cabeza de Taniguchi del Equipo A, haciendo que el arma púrpura volara fuera del alcance del pequeño, ambos siendo lanzados en la dirección del equipo de Enma bajo el sonido de los gritos del niño.
- ¡SU DEGENERADO! ¿CÓMO LE OCURRE HERIR A UN NIÑO ASÍ? - Gritó Haru golpeando al estudiante que había lastimado a su protegido.
- ¡Aaaaah! ¡Realmente hay un monstruo aquí!
Y todo sucedió muy rápido.
El llanto del trueno se intensificó en su vuelo involuntario el cual pareció durar más de lo normal, debido a los remanentes de la fuerza de la gravedad que rodeaban la zona que Enma había utilizado para ahuyentar a todos los que intentaban acercarse a él, esto trajo al niño aún más pánico, lo que hizo que convocara varias chispas de sus llamas, golpeando a más de un desprevenido y, por lo tanto, eliminando a más de la mitad de los miembros restantes del equipo A y al menos un tercio del resto de Mochida, con la mayoría de los adolescentes restantes acostados en el suelo, la conocida bazuca morada siguió volando en un arco perfecto hacia el poste del Shimon restante, siendo atraída por su campo gravitacional.
- ¡¿Eso es una bazuca?! - Gritó Enma, asustado al ver ese extraño objeto para nada familiar. - ¡¿Cómo es que el niño ruidoso de la casa de Tsuna tenía ESO en su cabello?!
- ¡¿NO ERA PROHIBIDO LLEVAR ARMAS A ESTA COMPETENCIA?! - Gritó Longchamp, más emocionado que nunca. - CARAAAY, ESTOY EMPEZANDO A ARREPENTIRME DE NO PARTICIPAR EN ESTA EXPLOSIVA BATALLA!
- ¡Incluso si son falsos, esto es trampa! - Gritó el capitán del equipo de kendo.
- ¡Cuidado, Enma! - Fue la advertencia de Rauji, moviéndose demasiado en un intento de advertir a su jefe, cayendo de nuevo con un estrépito sobre el dúo Vongola. - ¡No dejes que te golpee!
- ¡DEJA DE MOVERTE, ANIMAL!
Sin mucho tiempo para pensar o procesar qué demonios estaba pasando, Shimon usó su gravedad para desviar el objeto, esforzándose por no parecer tan obvio, pero un traqueteo en su pueste ahora que la mayoría de los de su equipo habían caído, lo que le dio espacio al ataque del equipo B, hizo que perdiera el control, lanzándolo en la dirección opuesta a la prevista.
En otras palabras, hacia Tsuna.
Notes:
* Durante el capítulo 10 del manga, justo después de la primera aparición de Bianchi, Reborn le pidió que se convirtiera también en la tutora de Tsuna, en este caso, como tutora de cocina y artes. (No estamos seguros de si hace un buen trabajo ...)
* Aparentemente cada mosquito de Shamal tiene un nombre, específicamente el mosquito con la "enfermedad del ángel" se llama Ángela, considerando la cantidad de amoríos que tuvo el Doctor, especialmente en el manga, existe una alta posibilidad de que nombre a cada uno de sus mosquitos con el nombre de sus ex novias.
* La Familia Estraneo es la familia que experimentó con niños al comienzo del manga, Mukuro, Ken y Chikusa fueron los únicos que obtuvieron habilidades especiales y los únicos que aparentemente sobrevivieron, y en venganza la Niebla terminó destruyendo lo que quedaba de la familia, que ya había quedado bastante devastada después de que la mafia intentara borrarla debido a la creación de la "Possession Bullet", que irónicamente permitió que el mismísimo Mukuro los destruyera.
* Al comienzo del capítulo 18, Tsuna involuntariamente termina participando en la competencia de Salta Salta, y como de costumbre, termina en último lugar, sin embargo, Gokudera aparece consolándolo alegando que su jefe debe haberlo hecho a propósito, para salvaguardar sus fuerzas para el batalla del poste, por lo que este año Gokudera quería honrar a su jefe y ganar para él, o al menos intentarlo ...
* Dogeza es una posición de "etiqueta" tradicional japonesa que implica arrodillarse directamente en el suelo y postrarse mientras toca el mismo con la cabeza. Se usa para mostrar respeto a una persona de mayor estatus, como pedir perdón o pedirle a alguien un gran favor.
* Aún en el Capítulo 18, casi a la mitad, Ryohei hace que el Equipo B y el Equipo C se unan para luchar contra "su" Equipo A, porque según el Maestro Pao Pao: "Deshacerse de todos los enemigos a la vez es la forma más fácil de acabar con las cosas. "
* En el capítulo 59, Haru aparece por primera vez vestida como un Namahage con ganas de asustar a Tsuna (por razones ...). El disfraz original usualmente usa un cuchillo, y con Haru no sería diferente, excepto que la policía estaba presente en este capítulo y terminó llevándola al departamento de policía, ya que es contra la ley japonesa llevar un "arma". y lo peor de todo, Tsuna terminó siendo llevado también tan solo por estar cerca. Al final, debido a que obviamente era un cuchillo falso, los dos fueron liberados con solo una advertencia. (¡Y ese fue el segundo problema de nuestro Cielo con la policía!)
* Naito Longchamp es un personaje que solo apareció en el manga. Debido a que a nadie le gusta y es impopular, Amano simplemente lo excluyó de la historia, solo reaparece en el capítulo 295 como invitado de la Ceremonia de Sucesión, luego de lo cual desapareció nuevamente del manga. (Necesitamos personajes, lo siento)
* En japonés, el eslogan de Colonnello es "Kora", que es una forma bastante descortés de decir "Hey", "Hola" u "Ora", o cualquier otra interjección para llamar la atención.
* Según la Wiki de Reborn, el peso de Rauji no de 181 kg.
* Hibari usó esta misma excusa en Yamamoto dos veces, la primera vez en Arco Varia en el Capítulo 130, página 19, salvando a Yamamoto del veneno y diciendo que si iba a morir, que lo haga fuera de la escuela, y la segunda vez fue en el Arco Shimon en el capítulo 295, página 12, diciendo que morderia hasta la muerte al responsable del ataque a un estudiante en su escuela.
* En el capítulo 21, páginas 14 y 15, Haru comenta que iba a una competencia de gimnasia (¿artística?), Y luego Tsuna y Gokudera se sorprenden de que participe en un club de ese deporte, diciendo que es difícil de creer viniendo de Haru. . Claramente son idiotas porque ella es muy buena en eso y lo demostró varias veces al comienzo del anime / manga;
* En una entrevista de Haru Haru, más específicamente en el episodio 123, Basil se sorprende por cuánto ha cambiado los juegos de niños en Japón con el paso del tiempo, preguntando a Reborn cómo juegan los niños en estos días en el país asiático, y Reborn responde que juegan videojuegos y luchan duelos con cartas, incluso aparece jugando a Mother y Yu-Gi-Oh para ilustrar, así que sí, la referencia está bien ubicada y no será la única vez que hagamos referencia a Yu-Gi-Oh ;D
