Drem yol lok, bienvenidos sean a un nuevo capítulo del poder de las sombras, disfrutadlo.

Bakugan no me pertenece solo la trama y algunos personajes.

CAPITULO 4: DESPUES DEL DESASTRE

Los sonidos de gente hablando por todos lados, así como el rechinar de las camillas y el olor a desinfectado invadían el ambiente de un lado a otro.

Las enfermeras paseándose de un lado a otro de una sala de emergencias sumamente concurrida, un pelinegro con una venda, y con una bolsa de suero inyectada en su brazo derecho, avanzaba por donde podía entre la avalancha de personas.

Estaba sofocándose entre tanta gente y le costaba avanzar debido a las heridas que tenía.

Finalmente, casi milagrosamente logro hallar un camino, y pudo llegar a su destino, abrió la puerta de la habitación y se encontró con dos caras amigas.

- ¡Shun! – dijo feliz un rubio

- Hola Marucho – dijo Shun

- No sabía que estabas en este hospital – dijo Marucho que tenía un brazo roto

- Me trajeron aquí apenas me encontraron – dijo Shun sentándose – Pero no me dejaron ver a nadie hasta que estuviera estable, he despertado y vuelto a desmallarme muchas veces, ¿Cuánto tiempo ha pasado? –

- Desde el ataque, unos 10 días – dijo Marucho

- ¿Cómo esta Runo? – dijo viendo a la peliazul que estaba recostada en la cama con oxígeno y con los ojos cerrados.

- Es fuera de peligro según los médicos – dijo Marucho – Dicen que puede despertar en cualquier momento –

- ¿Ay alguien más? – pregunto el azabache

- Había – dijo Marucho de manera sombría y Shun lo miro preocupado – Gunz y el equipo Anubias no lo lograron -

- Rayos – dijo Shun cayendo al suelo – Debí haber sido más fuerte –

- Shun no te culpes, hicimos lo que pudimos – dijo Marucho

- Cuando Dan murió prometí que sería más fuerte para protegerlos a todos, pero creo que falle – dijo Shun

- Shun, hiciste todo lo que pudiste, nos cogieron desprevenidos, pero no lo volverán a hacer – dijo Marucho

(-)

Dan sintió como el aire se vio cortado mientras esquivaba un puñetazo de Kayla que le paso a muy pocos metros de su cara.

Y es porque Kayla le había dicho que hoy le debía demostrar que tal era como guerrero y no como peleador, por lo que ahora ambos estaban en una habitación circular pequeña, que parecía un lugar donde se peleaba.

Kayla no daba ningún tipo de cuartel, pero Dan para sorpresa de la pelinegra se defendía bastante bien, por lo menos más de lo que ella esperaba, Kayla ya le había dado varios golpes sumamente dolorosos en el estómago, pero cada golpe que fuera hacia algún lugar que lo hiciera caer sean las piernas o la cara Dan había logrado esquivarlos.

Realmente a Dan le había servido tener un amigo ninja la mitad de su vida, y aunque en un principio le había reprochado a Shun por tantas veces que lo había obligado a acompañarlo en sus entrenamientos de ninja, pero ahora con Kayla paseando sus golpes mus cerca de su cabeza, definitivamente se lo agradecería, aunque no lo volviera a ver nunca.

Muy cerca de allí, Drago y Dragoth observaban a su compañeros practicar, se podría decir que aunque se mantenían distantes ahora había cierto respeto como oponentes, no había desprecio.

Dan junto sus manos frente a su cabeza y detuvo el gancho derecho de Kayla, el dolor le recorrió ambos brazos pero nada que no pudiera soportar y aprovechando que Kayla había bajado un poco la guardia Dan contraataco.

El golpe no fue certero ni fue en un lugar precisamente vulnerable, pero vasto para que la pelinegra volviera a ponerse en guardia y retrocediera un poco.

- Te juzgue mal Kuso, te defiendes bastante bien – dijo Kayla

- Has estado más amable últimamente princesa – dijo Dan escupiendo un poco sin bajar la guardia

- Yo solo digo la verdad, a veces – dijo Kayla – Y en estos momentos digo lo que veo –

- ¿Aunque no sé por qué hacemos esto? – dijo Dan confundido – No son los bakugan los que pelean -

- Ah esos crees – dijo Kayla con una sonrisa maliciosa – Permíteme responderte de la manera más practica posible –

Kayla se lanzó al ataque mientras Dan estaba desprevenido, lo derribo y con gran rapidez agarro el brazo derecho del castaño mientras inmovilizaba el resto del cuerpo de Dan sentándose sobre.

- Dime Kuso, si te rompo el brazo, ¿Seguirías siendo capaz de lanzar a Drago a la batalla? – Dijo Kayla con una sonrisa divertida – Responde o te lo rompo de verdad –

- Creo que no – dijo Dan nervioso –

- Ahí tienes tu respuesta – dijo Kayla soltando el brazo del castaño mientras se levantaba – Normalmente peleamos contra oponentes que tienen bakugan, pero no todos van a jugar limpio y te pueden sacar ventaja –

Dan se levantó como pudo y se volvió a poner en guardia.

- Eres un humano muy extraño – dijo Kayla

- ¿A qué te refieres? – pregunto Dan confundido

- Siempre te levantas – dijo Kayla - Hoy te he derribado más de nueve veces y ayer fueron unas veinte, pero te levantas con la misma energía –

- ¿Y eso que tiene que ver? – pregunto Dan aun sin comprender

Antes de que Dan se diera cuenta Kayla ya lo había vuelto a derribar.

- Que la mayoría de especies, no ven a los humanos como algo más que simples esclavos – dijo Kayla – De hecho muchas de las abducciones que sufre tu especie son en realidad búsquedas de esclavos para diferentes especies –

- ¿Qué? – pregunto Dan nervioso

- Bueno para muchos ustedes son una especie fácil de someter, por lo que son el blanco perfecto – dijo Kayla – Pero como digo tu eres testarudo y rebelde –

- Pues técnicamente soy uno – dijo Dan

- O por favor Dan, no eres un esclavo – dijo Kayla divertida

- Y como llamas a esto – pregunto Dan tratando de liberarse

- ¿Llamémoslo? – Dijo Kayla pensativa – Voluntario obligado sin posibilidad de retiro –

- ¿Cuál es la diferencia? – pregunto Dan irónico liberándose del agarre de la pelinegra y volviéndose a levantar

- Que acá no te damos latigazos – dijo Kayla divertida lanzando otro golpe contra el castaño y reanudando la pelea.

- Son muy parecidos no crees – dijo Dragoth observándolos pelear

- Y que lo digas – dijo Drago

- Los escuche – dijeron ambos jóvenes molestos – Y no nos parecemos –

- Retiro lo dicho – dijo Drago – Son casi iguales –

Dragoth solo pudo asentir.

(-)

En un salón con un enorme trono blanco y que estaba decorado con tonos negros y que era el típico salón del trono que normalmente aparece en toda película o libro.

Kendra se encontraba leyendo una especie de informe que se proyectaba en una pantalla frente a ella, y no se veía muy feliz, todo lo contrario se veía furiosa.

- Esas alimañas se están burlando de mi liderazgo una vez más – dijo Kendra apagando la pantalla – Pero mi paciencia ya se acabó, creen que soy una reina derrotada y que los de Ephestus son más fuertes que yo, pero ya es hora de sacarlos de su error, no crees Aela –

- Así es madre, si me lo permites yo personalmente te traeré a ese traidor encadenado – dijo Aela

Kendra guardo silencio unos momentos, para después responder.

- Sé que eres perfectamente capaz de lograrlo querida – dijo Kendra – Pero si voy a demostrarle a esta patética galaxia que nadie me desafía y vive para contarlo entonces debo ir yo, descuida vendrás conmigo -

- Te agradezco por esto madre – dijo Aela

- Por ahora necesito que prepares las fuerzas de invasión – dijo Kendra levantándose del trono y bajando los escalones – Yo iré a asegurar uno de nuestros flancos –

- Entendido madre – dijo Aela

- Ah y por cierto, vamos a lanzar esto en dos días, quiero dejarles saborear el momento, al menos por unos días – dijo Kendra con maldad

- Entendido – dijo Aela

(-)

- Creo que es suficiente por hoy – dijo Kayla

Dan respiraba agitadamente, tenía varias partes de su cuerpo moradas pero se mantenía en pie, aunque seguía prefiriendo tener moretones que la mitad de su espalda quemada.

Aunque Kayla había dicho la verdad, ahora tenía una cicatriz muy pequeña en la espalda, y todo en una sola noche.

Realmente se encontraba sorprendido, aunque para su desgracia, aunque había podido aguantar, todo cuerpo tiene su límite y finalmente cayó al suelo rendido.

- Si hubiera sabido que estabas en tus límites te hubiera derribado una vez más – dijo Kayla burlona

- Puedo hacer esto todo el día – dijo Dan

- Tengo mis dudas – dijo Kayla viendo a Dan echado en el suelo – Igual por hoy ya es suficiente –

- No es un poco temprano comparado con las otras veces – dijo Dan viendo que el sol aún no se ocultaba

- No solo debo entrenarte, si no también quien es uno de nuestros potenciales enemigos, sígueme – dijo Kayla

Dragoth se puso en el hombro de su compañera mientras esta se precipitaba hacia la salida, seguida por Dan que se movía algo más lento.

(-)

- Reina Kendra – dijo una voz femenina por una pantalla – A que debo este honor –

- Ahórrate las formalidades Beryl, tú sabes perfectamente para que llame – dijo Kendra

- Por supuesto, es una pena que una de tus colonias se halla rebelado – dijo Beryl

- Eso es un asunto del que yo me encargare – dijo Kendra con hostilidad – Pero si llego a descubrir que tuviste algo que ver con esto, sabes lo que significara –

- Descuida Kendra, que interés tendría yo en ese planeta – dijo Beryl insultada

- Espero que tus palabras sean ciertas – dijo Kendra cortando la comunicación

- Majestad con el debido respeto, ¿Por qué le aviso? – pregunto Malygos

- Si en verdad estuvo involucrada en esto, entonces los rebeldes estarán preparados, pero eso no importara mucho –

(-)

Kayla y Dan estaban caminando por un estrecho pasillo poco iluminado, finalmente salieron a un enorme jardín que estaba dentro de una cúpula de cristal, avanzaron unos cuantos pasos hasta que se pusieron al frente de una gigantesca estatua, de una mujer con armadura y un yelmo que le cubría su cara y portando una espada y levantando su puño.

- ¿Qué es esto? – pregunto Dan confundido

- Este es un monumento para todos los que participaron en la Guerra Intersolar –

- Guerra que… - pregunto Dan

- Veras Kuso, mientras tú y los peleadores se encontraban peleando con Naga en tu galaxia, acá estábamos en una guerra – dijo Kayla

- Un momento, ¿Esto es otra galaxia? – pregunto Dan

- Para ti seria la galaxia que llaman Andrómeda, y no interrumpas – dijo Kayla – Durante 5 años Onderon y sus colonias planetarias se pelearon contra el planeta Ephestus –

- Ya habíamos tenido algunas escaramuzas entre nosotros, pero esta era la primera vez que las cosas se fueron a mayores, ya que en esta ocasión peleamos con los mundos colonia que teníamos –

- ¿Este planeta tiene colonias? – pregunto Dan

- Así es, son 5 en total – dijo Kayla

- Sin embargo al 4 año de guerra llegamos a un punto muerto, nadie daba un avance y no había un claro ganador, entonces se encontró una solución –

- ¿Cuál? – pregunto el castaño confundido

- Un pacto de no agresión, ambos imperios nos prometíamos no declararnos la guerra y dejarnos actuar a nuestras anchas en zonas predefinidas para cada uno –

- ¿Entonces están en paz? –

- No Kuso, solo es el preludio de otra guerra, además la paz es aburrida – dijo Kayla

- Y, ¿Por qué me cuentas todo esto? – dijo Dan

- Porque si el infierno vuelve a desatarse, espero que no te tiemble la mano – dijo Kayla

- Tampoco es como que ustedes me dejen muchas opciones – dijo Dan

- Bueno, tú fuiste el que acepto – dijo Kayla yéndose del lugar

- Espera un momento princesa – dijo Dan

- ¿Qué quieres? – pregunto Kayla

Dan suspiro.

- Aun no sé cómo te llamas – dijo Dan simplemente

La pelinegra por poco si se cae de la impresión ya que esperaba una pregunta mucho más importante.

- ¿Solo era eso? – dijo Kayla con ganas de estrangularlo

- Si – dijo Dan simplemente

La pelinegra se giró mientras se retiraba para luego decir…

- Kayla, mi nombre es Kayla – dijo retirándose del lugar

- Un día de estos vas a hacer que te mate de verdad – dijo Drago

(-)

Aela entro una vez más a la habitación del trono y se inclinó levemente anta su madre que estaba sumamente pensativa.

- Ya está todo preparado – dijo Aela

- Perfecto, quiero a todos aquí mismo al alba, también a Kuso – dijo Kendra

- Entendido – dijo Aela - ¿Pero porque a Kuso? –

- Ya es hora de que me demuestre su lealtad – dijo Kendra

- Entendido – dijo Aela levantándose

- Por cierto, ¿Hay noticias de "Draken"? – pregunto Kendra

- Aun no, solo un mensaje que decía, "Estoy a la escucha" – dijo Aela

- Bien – dijo Kendra

(-)

La noche callo rápidamente sobre Onderon, y Dan había llegado a la habitación, se quitó la chaqueta que había llevado durante todo el conflicto contra los mechtogans y la observo.

Estaba hecha un desastre total, rota en muchos lados y rostizada en otros.

- Creo que vas a tener que conseguirte otra – dijo Drago

- ¿Qué hablas?, si esta perfecta – dijo Dan señalándola

- Esta horrible – dijo Drago

- Kuso – dijo Aela detrás de el

Dan se giró y vio a la Onderiana sosteniendo una caja plateada con una mirada seria.

- Toma – dijo lanzándole la caja – Ponte esto mañana –

- ¿Qué es? – pregunto Dan agarrando la caja

- Algo que necesitaras mañana, mi madre quiere que estés preparado al amanecer, Kayla te dirá los detalles – dijo Aela retirándose

- ¿Qué es esto? – se preguntó Dan abriendo la caja

- Bueno, creo que ya tienes algo que ponerte – dijo Drago

(-)

Kayla se encontraba en su habitación mientras se pasaba un trapo que parecía tener un líquido rojo por su hombro derecho.

A diferencia de los humanos, si un Onderiano recibía un golpe fuerte, su piel se tornaba de color rojo, Kayla se veía en mejor estado que Dan, ya que ese era el único punto en el que su piel se tornaba roja.

Unos minutos después Kaysa entro a la habitación.

- ¿Qué te paso? – dijo viendo el rojo en su hombro

- Solo digamos, que Kuso me tomo desprevenida, pero yo lo deje peor – dijo Kayla divertida

- Bueno eso va mucho contigo – dijo Kaysa divertida mientras cambiaba su ropa por un camisón blanco

- Creo que es bastante diferente a los humanos con los que peleamos – dijo Kayla echándose finalmente en su cama.

- Logro empatarte – dijo Kaysa haciendo lo mismo – Y eso no se logra fácilmente –

- Bueno, ya vera la próxima vez, trapeare el suelo con el – dijo Kayla

Las palabras de la pelinegra fueron interrumpidas por la entrada de Aela en la habitación.

- ¿Qué fue lo que te paso? – pregunto Aela algo preocupada

- Nada, solo estaba practicando – dijo Kayla

- Bueno a Kuso lo dejaste peor – dijo Aela – Por cierto, mama pidió que estemos todas al alba en el trono, también dijo que lleves a Kuso –

- ¿Para qué lo quiere? – pregunto Kaysa

- Ya lo verán – dijo Aela – Descansen –

(-)

Mientras tanto en la tierra, a Shun le habían quitado el suero y ahora estaba completamente curado y llevando sus ropas de siempre.

- ¿Sabemos quién hizo esto? – pregunto Shun

- Llame a Keith y a Ren, dijeron que estarán investigando – dijo Marucho

- ¿Qué estarán investigando? – dijo una voz débilmente

- ¡Runo! – dijeron ambos al darse cuenta que la peli azul estaba despertando

- Hola chicos – dijo Runo casi en un susurro

- ¿Cómo te sientes? – pregunto Shun mientras Marucho salía a llamar al medico

- Algo aturdida – dijo Runo – Y me duele todo el cuerpo, ¿Qué fue lo que paso? –

- Te cayo un edificio encima – dijo Shun – Recuerdas algo –

- Solo recuerdo un dragón negro enorme, yo y tigrera lo enfrentamos – dijo Runo abriendo los ojos – Un momento, ¿Dónde está Tigrera? –

- Descuida Runo, estoy acá – dijo la bakugan haos abriéndose

Runo suspiro con alivio, definitivamente era un alivio para ella el hecho de que su compañera estuviera con vida.

- Espero no interrumpir – dijo la voz de un muchacho, llevaba una bata blanca con una insignia que decía voluntario, su cabello era color negro y sus ojos color morado – Solo debo hacer unos seguimientos de rutina, o si quieren vengo en otro momento – dijo amablemente

- Claro no hay problema – dijo Runo

El joven se acercó y comenzó a hacer cosas como tomar la presión de la peli azul y otras cosas de rutina.

Shun lo observaba con desconfianza, simplemente algo de él no le daba buena espina, y finalmente lo vio, sus ojos eran distintos, su iris tenía dos niveles, el exterior era común de un color morado más claro, pero el nivel inferior antes de la córnea era diferente, sus bordes tenían picos que daban la apariencia de un engranaje, y su color era más oscuro, y Shun recordó donde había visto un patrón como este, la persona que lo ataco, recordaba los fríos ojos color verde.

- Eres uno de ellos – dijo Shun poniéndose en guardia – Runo aléjate de el –

- Rayos – dijo el pelinegro

Lo siguiente pasó muy rápido como para relatarlo bien, el muchacho lanzo su bata a la cara del ninja cegándolo por escasos 3 segundos, que el pelinegro de ojos morados aprovecho para salir rápidamente de la habitación.

Shun salió a tratar de perseguirlo, pero el ojimorado se había perdido entre el concurrido pasillo.

- Rayos – dijo Shun

Mientras tanto el pelinegro ya había salido del hospital.

- Eso estuvo cerca – dijo con seriedad

- Demasiado cerca, debiste haber usado el disfraz – regaño un bakugan de su hombro

- No pensé que esto pudiera pasar –

- ¿Qué haremos ahora Dageron? – pregunto el bakugan

- Volvemos a Onderon, Alduin –

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Dan estaba saliendo del baño de la habitación y observo la caja plateada sobre la cama.

Rápidamente se vistió, tenía un pantalón negro con toques de camuflaje y un par de botas militares.

También ahora tenía una chaqueta color rojo que algo parecido a placas negras muy flexibles pegadas a ella, era muy larga y le bajaba un poco más debajo de la cintura, llevaba loa guantes negros de siempre, y una camisa blanca debajo de la chaqueta, además de sus gafas.

- Esto es inusualmente cómodo – dijo Dan

La puerta se abrió muy rápidamente y Kayla apareció frente a él.

- ¿Y eso? – pregunto viendo al castaño con extrañes

- No sé, tu hermana me lo dio anoche – dijo Dan

- Bueno no perdamos tiempo, mi madre nos espera –

Caminaron rápidamente por los pasillos hasta entrar en el salón del trono, en el mismo Kayla, Kaysa, Ange, Lin y Dan se inclinaron ante Kendra mientras Aela permanecía a su lado de pie.

- Les tengo noticias, una de nuestras colonias se rebeló hoy contra mi mando – dijo Kendra

Dan permaneció confundido, Kayla y Kaysa prestaron atención y Ange apretó los dientes.

- Pero son muy tontos si creen que me voy a quedar sin hacer nada, yo y Aela iremos en una misión para aplastarlos, ustedes permanecerán aquí, excepto tu Kuso – dijo Kendra

- ¿Yo? – pregunto Dan confundido

- Vendrás con nosotras y me vas a demostrar tu lealtad, seguirás todas mis órdenes, ¿espero no tengas problemas? – dijo Kendra

- No majestad – dijo Dan

- Perfecto, Kayla queridas estarás a cargo mientras no estoy – dijo Kendra

- Si madre –

- Muy bien, que comience el espectáculo – dijo Kendra

CONTINUARA…

Y ese fue el cuarto capítulo, que originalmente se subiría el miércoles, pero me quede sin internet, en fin espero que les haya gustado, ahora los comentarios.

DragoViking: Me alegra que la batalla te haya gustado y Runo sigue viva y también Marucho, espero que te haya gustado el capítulo.

Haku: Bueno menos mal no me equivoque con lo del respeto mutuo, por supuesto Dan ya no es un niño y la presencia de Kayla ya genera cierta tensión entre ellos y no es tensión de enojo si no lo otro ya su relación ira evolucionando.

Ahora Kendra considera a Runo un peligro ya que desconoce cierta información que se desvelara luego.

Y sin nada más que decir este fue Ultimatespartan despidiéndose.