Drem yol lok un Nuevo capítulo ha llegado en el último vimos como los peleadores lograban su primera victoria contra los Onderianos derrotando a Aela en una batalla, podrán mantener su nueva situación o los Onderianos contraatacaran.
CAPITULO 30: Mayday
Una nave vestal aterrizo cerca de una cueva en el páramo helado de Valhala, sus ocupantes amparados por la oscuridad entraron a la boca de la cueva atravesando una puerta metálica.
Detrás de ella había una pequeña habitación dentro de la cueva con algunas máquinas bastante sofisticadas.
- Es increíble que montaran esto en tan poco tiempo – dijo Runo impresionada
- Creo que eso no es lo importante en este momento – dijo Mylene tratando de apresurar un poco las cosas
- Mylene tiene razón – dijo Keith – Debemos contarles algo sumamente importante –
Keith les conto cada palabra desde su llegada al planeta y su encuentro contra Aela y el resultado de su enfrentamiento contra ella.
- Increíble – dijo Marucho
- Quiere decir, tenemos una oportunidad – celebro Julie
- Sin embargo… - dijo Keith interrumpió – Aunque los derrotamos, lo hicimos gracias al uso del armamento prototipo de Helios –
- Por lo que pude ver eso los tomo por sorpresa – dijo Helios – Parece que no sabían de la existencia del armamento –
- Dicho esto tenemos una ventaja sobre ellos – dijo Keith
- ¿La cuestión es cómo aprovecharla?, antes de que ellos se adapten – dijo Shun pensativo
- Quizás sea hora de que ataquemos con más fuerza – dijo Runo
- Sera arriesgado – dijo Gorem
- Pero con los armamentos, tendríamos una posibilidad – dijo Mira
- ¿Pero dónde atacar? – dijo Marucho
- Para eso podemos usar esta base – sugirió Keith – Y así localizar el siguiente pasó de los Onderianos –
- Finalmente, podremos darles donde más les duele – gruño Runo
- Exactamente – dijo Keith
- Preparémonos y tengamos listo todo en caso de partir – dijo Shun
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Eran primeras horas de la mañana en Onderon cuando Kendra y Aela llegaron al planeta luego de su larga estancia en una de las colonias.
- ¿Y bien Kislev? – cómo va nuestro proyecto secreto
- Avanza lentamente majestad, pero lo tendré listo antes de que lo vayamos a necesitar – dijo Kislev
- Mas te vale doctora, por su bien – dijo Kendra
Kislev se tensó de arriba abajo.
- Se lo juro majestad – dijo Kislev
Kendra la observo con una mirada algo severa.
- También necesito que averigües todo lo que puedas sobre ese armamento que usaron los peleadores - dijo Kendra - Retírate
Mientras Kislev salía de la habitación Malygos salto al hombro de Kendra.
- Un retraso molesto sin duda – dijo el bakugan
- Y con toda razón debemos estar preparados, Beryl planea algo el punto es donde y cuando – dijo Kendra
- Nuestros sensores no han detectado nada – dijo Aela
- Si pero no estás viendo más alla de todo – dijo Kendra – Eres más lista que eso Aela, Beryl ataco la tierra y sea lo que sea que halla en ese disco de memoria la obligo a arriesgar todo –
Aela se sintió bastante interesada en el asunto pero prefirió guardarse lo que quería decir.
Kendra suspiro con pesadez antes de sentarse en la silla frente a su escritorio, la enfurecía no saber nada pero ahora mismo no quería perder la cabeza fría.
- Majestad no hemos podido encontrar a la princesa Kayla – resoplo un sirviente algo cansado al entrar a la habitación
- ¿Cómo es eso de que no saben dónde esta? – dijo Kendra con notable confusión
- No la encontramos por ninguna parte – dijo con voz temblorosa
Aela y Kendra intercambiaron miradas pero la peleadora Pyrus la desvió casi unos segundos después.
- Busquen mejor – dijo Kendra
- Si majestad – dijo el sirviente saliendo rápidamente
- Aela ve a descansar te necesitare lista para la próxima batalla – dijo Kendra
- Con todo respeto preferiría… - empezó a decir la pelinegra
- Aela – Interrumpió Kendra con una mirada significativa – No es una sugerencia –
- Si majestad – dijo Aela saliendo
- Tiene 23 y tengo que volver a darle órdenes – suspiro Kendra
- Esa batalla realmente fue un revés para ella – dijo Malygos
- Del que se va a tener que levantar – dijo Kendra – Vamos a un abismo y más le vale recuperarse –
- Tiene la razón mi reina – dijo Malygos
Kendra se levantó y dio un par de vueltas por la habitación y observo el horizonte con suma seriedad.
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Muy alejados de allí y un poco aislados de los sucesos que pasaban en la habitación de Kendra, Kayla apenas llegaba a su habitación después de haberse quedado hasta muy tarde con el castaño luego de regresar del lago.
- Bien – suspiro con tranquilidad al cerciorarse que la habitación estuviese sin señales de su hermana
La pelinegra tomo un par de cosas como su lanzador y comunicador de la mesa en la pequeña sala de estar y palideció al ver que su comunicador tenia gran cantidad de mensajes y lo que podría ser el equivalente Onderiano a una llamada perdida.
- Rayos – grito Kayla
La pelinegra salió como alma que lleva el diablo y corrió tanto como pudo con las pocas esperanzas de que fuera cual fuera la razón no la colgaran de las orejas.
Corrió tanto como pudo que apenas si se dio cuenta que paso al lado de Kaysa.
- ¿Esa no era Kayla? – dijo Jador confundido
- Sip – dijo Kaysa sin darle importancia
- No deberíamos seguirla – dijo Jador
- Que Dragoth lo haga – dijo Kaysa cansada – La busque toda la noche y solo ahora aparece –
Dragoth rodo los ojos y voló tan rápido como pudo para alcanzar a Kayla.
- ¿No tienes curiosidad de saber dónde ha estado? – dijo Jador
- Por supuesto que la tengo, nunca actúa así – dijo Kaysa – Pero no pienso desgastarme por ahora, ya lo averiguare luego –
Ya mucho más lejos Kayla y unos segundos después Dragoth llegaron ante la puerta que daba al despacho de Kendra.
La pelinegra trago saliva al tiempo que Dragoth se posaba en su hombro, con pulso algo tembloroso toco la puerta dos veces.
- Pase – dijo Kendra al otro lado
Como si tratara de evitar que algo se rompiera Kayla entro con cautela tratando de recuperar una apariencia más firme antes de que su madre le hablara.
Kendra se giró para observar a su hija de pie frente a ella.
- ¿Dónde estabas? – Dijo Kendra con severidad – Te han estado buscando toda la mañana –
Kayla trago en seco mientras trataba de encontrar alguna palabra que pudiera convencer a su madre sin embargo un faro de esperanza se ilumino cuando Kendra volvió a tomar la palabra…
- No importa por ahora, hay asuntos más importantes que atender – dijo Kendra – Toma asiento –
La pelinegra obedeció con seriedad al ver que su madre parecía no tener interés en el asunto anteriormente tratado.
- Te pude decir esto por comunicador pero considero que en persona es más adecuado – dijo Kendra – Aela fue derrotada en una batalla contra Helios en Valhala –
Kayla abrió los ojos con absoluto estupor al escuchar esas palabras, Aela después de su madre era la peleadora más poderosa y quizás la más brutal que conocía.
- ¿Cómo? – fue lo único que pudo decir
- La derrotaron usando algo llamado armamento – dijo Kendra – Pero no te traje aquí solo para decirte eso –
- Veras Aela no solo no está feliz con esta derrota si no también decidió hacer un tipo de penitencia y por lo tanto por su propia cuenta renuncio a todos sus títulos –
Si antes estaba estupefacta ahora pensaba que todo esto era una locura, tuvo intención de responder inmediatamente pero su madre la acallo.
- Por lo tanto mientras Aela recupera lo que ella considera su honor perdido tú deberás suplir su puesto en la línea –
- ¿Por qué?, ¿Porque la dejaste hacer esto? – dijo Kayla con un ligero temblor
- A mí tampoco me pareció una idea muy buena, pero tú hermana la tomo por su cuenta – dijo Kendra con severidad – Lo único que nos demuestra este ataque es que los peleadores están más que comprometidos en derrotarnos y por eso hay que encargarnos de esas amenazas –
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Rugidos y un olor bastante fuerte era lo que percibían las dos ephestianas al entrar a la enorme habitación que contenía una gran cantidad de bestias de diferentes planetas algunas enormes como un elefante y otras bastante más pequeñas que parecían inofensivas pero se les notaba agresivas y es que desde su más reciente derrota en Catachan Beryl había decidido que su castigo seria alimentar a todas las bestias, tarea quizás no tan peligrosa a juzgar por los campos de fuerza que las separaban pero nunca se sabe.
Aria retrocedió con molestia cuando una bestia choco contra el campo de fuerza y saca una parte de su brazo con garras.
- Oye, cuida lo que haces – dijo Aria lanzando un enorme pedazo de carne hacia detrás del campo de fuerza
En contraste con Aria, Artemisia parecía llevar su castigo en un silencio mientras solo miraba hacia el frente y el único que parecía pensar que algo no era normal fue Scila, pero Artemisia reconociendo las intenciones de su compañero le dijo una mirada que claramente decía "aun no".
- Demonios me quede sin nada, vuelvo en un momento – dijo Aria
Justo cuando Aria se fue, Scila se decidió a hablar.
- Reconozco esa mirada – dijo Scila
- Que bien me conoces – dijo Artemisia
- ¿Y bien? – dijo Scila
- Más poderosos de lo que pensé, y más peligrosos – dijo Artemisia
- ¿El dragonoid? –
- Y Kuso – dijo Artemisia – Creo que ese humano nos va a causar muchos quebraderos de cabeza –
- Que quieres hacer – dijo Scila
- Sacarlo del camino – dijo Artemisia
Scila silbo con frialdad.
- Apuntas alto compañera – dijo Scila – Pero sabes que es simple decirlo, hacerlo oh eso es algo completamente distinto –
- Se me ocurrirá algo – dijo con simpleza
- ¿Y la reina?, ¿y un poco menos importante Aria? – dijo Scila
- Si eso podría ser un problema, Aria es caso perdido pero mi madre se dará cuenta tarde o temprano y ahí tendrá que ver que menospreciarme fue un error – dijo Artemisia
- Solo una cosa más – dijo Scila - ¿Y si no lo conseguimos? –
Artemisia hizo una pausa – Lo conseguiremos – dijo Finalmente
Artemisia alimento a la última criatura del pasillo cuando se percató que su comunicador se encendía mostrando varias letras, la pelinegra las leyó con lentitud.
- Interesante – dijo Artemisia – Creo que los peleadores no han dicho su última palabra tampoco –
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Con el rostro un poco pálido Dan observaba el planeta al que se acercaban, no sabía porque pero algo de todo esto no le daba un buen augurio, todo había sido tan rápido y no con el planeamiento metódico al que los Onderianos lo tenían acostumbrado pero prefirió no hacerle ninguna pregunta a la claramente irritada Aela que estaba en el puente de mando.
Aela observo el extraño planeta con vegetación color azul y grandes océanos en un holograma dentro de la nave, la peleadora Pyrus se levantó y se acercó hacia el panel de control del holograma, casi inmediatamente las demás hijas de Kendra y la emperatriz misma aparecieron también en hologramas.
- Bien nuestro ataque se desarrollara en 3 fases – dijo Kendra
- Fase uno equipos de ataque saldrán de las naves principales y desembarcaran cerca de centros de comunicaciones y cortando sus nexos – dijo Kendra
- Fase dos, naves de asalto y de ataque destruirán defensas importantes – continuo Kendra – Fase tres, invasión a gran escala para asegurar el planeta –
Dan y Dageron intercambiaron miradas de sospecha entre ellos aquí había gato encerrado.
- Vallan a sus naves y no fallen – dijo Kendra
La comunicación fue cortada de golpe.
- Ya la escucharon, vallan a su nave – dijo Aela con frialdad
Ninguno de los dos quiso contradecir esto y se dirigieron rápidamente a la salida.
- Esta enojada – dijo Dan
- Es normal en ella – dijo Dageron
- Tampoco te gusta este plan, ¿no es así? – dijo Dan
- No – dijo secamente el pelinegro – Esta va a salir muy mal –
- Yo tengo el presentimiento de que somos la carnada – dijo Drago
- ¿En qué sentido? – dijo Alduin
- Piénsenlo, cuando asaltamos la luna rebelde destruyeron sus defensas con las naves, cuando atacamos ese planeta desértico nos infiltramos durante días en una cueva, aquí quieren que bajemos y peleemos –
- Dicho de esa forma tendría sentido por desesperación – dijo Dageron – pero lo de ¿carnada qué? –
- Con este plan quieren que nos tardemos resolviendo todo – dijo Drago
Los 4 se miraron lo que decía Drago parecía tener sentido, pero aún faltaba una pregunta final en todo este asunto.
- ¿Una carnada para qué? – dijo Dan
- ¿O para quién? – dijo Alduin
Ninguno de los dos quiso seguirle dando vueltas al asunto, después de todo por mucho que lo pensaran eso no estaba en sus manos, el camino al hangar fue silencioso salvo por lo que decían la mayoría de pilotos y demás soldados dentro del hangar.
El comunicador de Dan emitió un ligero sonido y el castaño se apartó un poco del grupo y puso el pequeño aparato en su oreja.
- ¿Hola? – dijo Dan
- ¿No es mi terrícola favorito? – dijo una voz
Dan rodo los ojos.
- Hola Kayla – dijo Dan
- Quería desearte suerte, aunque sé que no la necesitas – dijo Kayla
- Si tú lo dices – dijo Dan sin estar plenamente convencido
- ¿Sucede algo? – pregunto Kayla confundida
Dan dudo unos momentos.
- Solo algo tenso nada más – dijo Dan – ¿Y tú? –
- Aburrida aquí en la sala de mando, no tienes idea de lo que daría por bajar a pelear –
- Estoy seguro que eso no es lo que te detiene – dijo Dan con ironía divertida
- Si, no depende de mí – dijo Kayla
El sonido de una alarma se hizo presente en el hangar, para Dan se oyó como uno de los peores sonidos que había escuchado en mucho tiempo.
- Creo que esa es mi llamada – dijo Dan
- Dan, cuídate si – dijo Kayla
- Cuenta con ello – dijo Dan con calma antes de colgar
El castaño inhalo profundo, 4 meses habían pasado ya desde que todo comenzó, dio un par de pasos hasta entrar a la nave de transporte llena de Onderianos, las puertas se cerraron y pudo sentir como la nave se sacudía mientras despegaba y en medio del viaje el castaño prefirió volver a sumirse en sus pensamientos.
Su corazón estaba latiendo más rápido de lo normal mientras sentía como la nave seguía bajando a la superficie del planeta, pero su cabeza se sumió una vez más en lo que probablemente estuvieran haciendo sus amigos los peleadores, no era tonto era cuestión de tiempo antes de que volvieran y cuando eso pasara ¿Que haría?.
Suspiro con pesadez.
- Estas pensando en los peleadores cierto Dan – pregunto Drago
- Si, volverán – dijo Dan
- Lo sé – dijo Drago – Quizás más pronto de lo que creemos –
Dan se quedó en silencio y vio como Drago se acercaba a su oído.
- Es por Kayla, ¿cierto? – dijo Drago – Temes lo que pasara –
- No solo eso… Algo ha cambiado – dijo Dan en voz baja
Una sacudida más fuerte de lo normal los interrumpió de manera casi inmediata, y el castaño comenzó a sentir las explosiones alrededor de la nave, para él fue evidente que desde tierra estaban devolviendo el fuego.
- Creo que esto no estaba en los planes – dijo Drago
- Agárrense fuerte – dijo el piloto
Mientras las explosiones aumentaban Dan y Drago intercambiaron miradas hasta que una explosión más fuerte hizo tambalear.
- Perdimos el motor 1 –
- Esta mierda no va a aguantar – dijo el piloto una vez más antes de que la nave chocara.
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Kayla observo el planeta con impaciencia y algo de preocupación desde el puesto de mando de la nave nodriza, podía ver los destellos de plasma desde el puente y las transmisiones de las naves parecían no ayudar, tenía suerte de que todo el mundo estaba tan sumido en la invasión que no le prestaban mucha atención en ella, salvo por una persona bastante famosa por inmiscuirse en los asuntos de otros.
- Kayla, tengo algunas preguntas – dijo su gemela acercándose a sus espaldas
"Rayos, rayos, rayos" – pensó Kayla consecutivamente
- ¿Qué clase de preguntas? – dijo Kayla con seguridad tratando de ocultar su nerviosismo
- Donde diablos te estas metiendo estos días – dijo Kaysa
Lo sabía se dijo Kayla mentalmente.
- Solo… Solo quería relajarme – dijo Kayla
- ¿Relajarte? – dijo Kaysa decepcionada por esa respuesta
"En verdad piensa que voy a caer en ese truco tan estúpido" – se dijo Kaysa
- Si – dijo aparentando seguridad
- Kayla, no creerás de verdad que caeria en esa – dijo Kaysa con ironía divertida
Kayla trago saliva lo más disimuladamente que pudo.
Kaysa miro a su hermana con más sospecha.
- Dime la verdad Kayla, sabes que puedes confiar en mí – dijo Kaysa
Kayla parpadeo un poco y una vez más desvió su mirada hacia el planeta.
Su hermana quería hacer muchas más preguntas y por supuesto que hubiera sido así si no fuera por la alarma que sonó en el puente de mando.
- Nave saliendo de túnel dimensional majestad – anuncio una mujer en los controles de la nave
Kendra dejo de observar el mapa del planeta y se acercó más las ventanas del puente.
- Análisis – ordeno Kendra
- Es una nave vestal, viene a toda velocidad hacia nosotros – aviso uno de los pilotos
Kendra giro su mirada al ver la nave roja con una cuchilla verde encendida en su parte delantera, Kendra entrecerró sus ojos con agresividad al ver la nave vestal acercarse.
- Derriben esa nave – dijo con un grito autoritario
Pero fue demasiado tarde las cuchillas de energía chocaron con fuerza el casco de la nave onderiana y la sacudió con fuerza mientras seguía bajando hacia la superficie del planeta sin que las demás naves onderianas tuvieran tiempo para evitar que la nave vestal bajara a la superficie.
Kendra se levantó apoyándose en una barra de la cabina de mando con una ira fácilmente observable.
- Informe de daños – dijo Kendra
- 2 motores dañados y nuestro sistema de armas se encuentra deshabilitado –
Kendra rechino sus dientes.
- Que alguien busque a Kuso – dijo Kendra
- Majestad el humano bajo junto con el resto de las tropas – dijo un asistente
- ¿Qué? – rugió Kendra - ¿Quién lo ordeno? –
- Estaba en los registros, todos pensamos que había sido orden tuya – dijo Aela apareciendo vía holograma
Esto no solo no calmo a la monarca onderiana, cualquiera podía notar que estaba furiosa por lo que nadie se atrevía a decir palabra en la habitación.
- Luego lidiare con eso, ¿Dónde está ahora? – dijo Kendra
- Su nave al parecer fue derribada por el fuego antiaéreo hace unos minutos –
Kayla trato de no mostrar ningún tipo de emoción pero eso no evito que contuviera la respiración.
- Por supuesto – dijo Kendra con sarcasmo – Kayla, tú y Lara bajen al planeta inmediatamente, si Kuso está vivo encuéntrenlo antes que los peleadores.
Kayla asintió y salió del puente como alma que lleva el diablo del puente.
- Aela tú y el resto bajen e intercepten a los peleadores – dijo Kendra – Creo que sabes que hacer –
Aela trono sus dedos con placer.
- Si majestad – dijo Aela cortando la comunicación
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Vio a Mag Mel o eso pensó, el sueño era borroso, pero podía jurar que lo veía, luego escucho gritos…
El humo llenaba sus pulmones cuando finalmente recupero el conocimiento dentro de la nave, la cabina donde estaba en llamas y estas se acercaban a el peligrosamente, retiro una enorme pieza de metal que estaba sobre él y se levantó con dificultad.
- ¿Drago? – llamo temiendo lo peor
- Aquí estoy Dan – dijo Drago apareciendo en el bolsillo de su chaqueta negra.
- Quemaduras, disparos y ahora un choque – dijo Dan tratando de abrir la puerta de la nave - ¿Qué más nos puede pasar? –
- La puerta cedió y Dan corrió rápidamente fuera de la nave hacia las calles, estaban desiertas pero pudo ver gran cantidad de restos de naves destruidas.
- Creo que tenías razón – dijo Dan
Un golpeteo proveniente de una de las naves los interrumpió y el castaño no dudo ni 5 segundos y corrió hacia la nave, después de pelear con la puerta por unos 5 largos minutos logro abrirla.
- Gracias Dan – dijo Dageron mientras tosía arrodillado frente a la nave.
- No hay de que – dijo Dan ayudándolo a levantarse
- ¿Quedo alguien en la tuya? – dijo Dan
- No – dijo Dageron secamente – Este desembarco daba mala espina desde el inicio -
- ¿Qué hacemos? – dijo Drago
- Seguir hacia el nodo de comunicaciones es arriesgado sin refuerzos – dijo Dageron
- Destruir los cañones que nos derribaron suena como un buen punto para empezar – dijo Dan
- Si creo que si – dijo Dageron – Bien pensado –
- Empecemos a movernos, mientras más rápido acabemos con esas cosas, más rápido recibiremos ayuda – dijo Alduin
CONTINUARA…
Lo siento, solo puedo decir eso, me tome demasiado para esto, soy una persona inconsistente por lo que parece, de todas maneras les agradezco la paciencia y espero que les haya gustado por ahora respondamos los comentarios.
Camilo Navas: Así es, pero no deberán confiarse para la próxima que esta más cerca cada minuto y estarán a prueba una vez más, espero que te haya gustado el capítulo.
DragoViking: Y habrá más de ambos, en lo primero seguro y en lo segundo bueno quien sabe, eso ultimo dependerá si los peleadores son capaces de mantener el ritmo, espero que te haya gustado el capítulo.
Ra Bestial: Ya veremos creo que pronto tendremos esa respuesta, en cuanto Aela bueno fallo una vez y un segundo encuentro con ella va a ser mucho más difícil, y en cuanto a lo último solo asegurare que será algo entretenido de ver, espero que te haya gustado el capítulo.
Haku: Me alegra volver a leer una review tuya, no lo había mencionado pero tus comentarios en ocasiones me ayudaron bastante a la hora de mejorar la historia, por eso te agradezco, en cuanto a la relación de esos dos prefiero no comentar ya que perdería un poco la gracia, espero que te haya gustado el capítulo, y respecto a lo último si me declaro culpable tengo problemas con los nombres a veces y termino mezclando un par de cosas.
Y eso será todo por ahora espero que les haya gustado y que la espera no haya parecido tan larga y nos vemos en la próxima.