Cursiva: Pensamientos

¿Y después?

Capítulo 5: Emociones

Ya habían pasado algunos días… 2 semanas, para ser exactos. Ambos jugadores habían vuelto a jugar luego de recuperarse de tremendos golpes en la cabeza. Y jugaban excelentemente. Hanamichi recuperó rápidamente su ritmo anterior. Incluso parece que mejoró un poco más. Y a todos se les hacía más raro aun que cualquier duda que tuviera le preguntase a Rukawa y éste, cada vez más amablemente, las resolviera. Pero así era mejor, los dos eran muy buenos y si se llevaban bien trabajarían en equipo y sacarían a Shohoku adelante.

Ryota ubicó al equipo de Ryonan para tener un partido de práctica, lo que ellos aceptaron. Llegó el día de la práctica. Hanamichi estaba muy emocionado, pues sería su primer partido que recordaba contra otro equipo. Extrañamente llegó puntual, por lo cual Rukawa estaba muy cansado y decidió tomar una pequeña siesta.

El entrenador Taoka saludó amablemente al profesor Anzai, como lo hizo Ryota con Sendoh.

-Sendoh, supongo que tú sabes lo de…

-Sí, el caso de Hanamichi. Ya se encargó Hikoichi de averiguar y avisarme y todo el equipo sabe, así que no te preocupes – dijo con su habitual sonrisa

-Muchas gracias – sonrió el capitán de Shohoku

De repente se escuchan unas risotadas. Ya se sabía de quién eran.

-¿Por qué te ríes, Sakuragi? – pregunta Rukawa molesto, despertándose por el ruido

-Es que mira a ese – apunta poco disimuladamente a Sendoh – tiene un peinado gracioso wajajaja

-Ese es…

-Soy Akira Sendoh, mucho gusto nuevamente, Hanamichi Sakuragi – le tiende la mano

-Hola Sendoh – le tiende la mano y luego se limpia las lágrimas que estaban en sus ojos de tanto reírse

-Discúlpalo, Sendoh – se acerca Mitsui -, ya sabes… no podía olvidarlo todo – dice divertido

-No te preocupes, Mitsui – dice sonriendo

-Nee Mitsui – dice Hanamichi – se te cayó esto – recoge del suelo una foto

-Esta billetera está mala – dice sacando su billetera del bolsillo

-¿Dónde sales tú?

-Acá – se apunta -. Fue de cuando salí MVP en la secundaria…

-Eras muy diferente –añade Hanamichi

-Sendoh, necesito las camisetas… - se acerca alguien de Ryonan, y luego de que el pelirrojo lo examina comienza a retorcerse de risa

-¿Qué pasa ahora, Sakuragi? – pregunta Sendoh

-Es que él – apunta al jugador que pidió las camisetas a Sendoh – se parece mucho a ti en la secundaria ¡wajajaja!

-¿Koshino? – pregunta Sendoh divertido

-¡Sakuragi! – dice Mitsui – ¡No es gracioso! – se sonroja levemente – Discúlpalo, Koshino, está un poco ansioso y nervioso

-No importa… - dice algo nervioso el aludido – Sendoh, las camisetas

-¡Uh, cierto! Nos vemos en el partido

Sendoh y Koshino se dirigen a los camarines para alistarse.

-Nosotros también deberíamos ir… ¡deja ya de reírte, Hanamichi!

-Bueno Kosh…. Mitsui… wajajaja

-Rukawa, ya despierta – le habla Mitsui al jugador, que dormía plácidamente

-¿Hm?

-Hay que alistarse, vamos a los camarines

-Hm… - se levanta hecho zombie

-Siempre es así – dice divertido el pelirrojo, dirigiéndose a los camarines

Ambos equipos se cambiaron y estuvieron listos. Por Shohoku jugarían Ryota, Rukawa, Sakuragi, Mitsui y Yasuda y por Ryonan jugarían Sendoh, Koshino, Uekusa, Fukuda y, para su fortuna, Hikoichi. Extraños equipos, pero al fin y al cabo era una práctica.

Comenzó el partido con el balón a favor de Shohoku. Luego de meter algunos puntos – quedando Ryonan con 10 y Shohoku con 8 – el balón llega a las manos de Hanamichi, que era marcado por Fukuda.

-No vas a pasar

-Claro que lo haré

Sakuragi le hace una finta y los deja a todos boquiabiertos. Esa finta… se la enseñó Rukawa… pensó Sendoh. Vio que Hanamichi se acercaba y dejó su marca de lado y fue a marcar al pelirrojo.

-Vamos a ver qué sabes hacer – dice Sendoh no muy sonriente

-No me asustas, puercoespín

-¿Cómo dices?

Ese segundo de distracción le sirvió a Hanamichi para pasarlo. Es que Sendoh se asombró que le dijera así. Pero lo más asombroso fue lo siguiente: Hanamichi dribleó y llegó a la zona de dos puntos. Luego dio un paso atrás – quedando en la zona de 3 puntos - y lanzó. Todos quedaron estáticos, viendo cómo el balón caía y encestaba, dejando el partido 11 a 10 a favor de Shohoku.

-¡Sa… Sakuragi! – se acerca Mitsui - ¿Dónde aprendiste esa jugada!

-No… no lo sé, yo… yo la hice y…

-Es que no cualquiera haría eso en un partido… dime dónde la viste

-¡No lo sé¡Creo haberla visto alguna vez! Pero nadie me la ha enseñado… ¡Y qué importa¡Encesté!

Pero nadie reaccionaba. Hanamichi acaba de hacer una jugada sensacional y más encima hizo un tiro de 3 puntos, como nunca había hecho. Esa jugada la hice yo… ¡cómo su subconsciente pudo recordarla y hacerla! No es una jugada cualquiera… además él nunca había hecho un tiro de tres puntos, con suerte hacía de dos…

El único que atinó a hacer algo era el profesor Anzai, quien aplaudía y reía con su clásica risa. Y luego lo siguió Ayako, quien le hacía porras al pelirrojo.

-¡Es imposibleeeeee! – decía como un histérico y apuntando a Hanamichi el entrenador Taoka - ¡Hanamichi Sakuragi nunca había hecho un tiro de 3 puntos¡Menos uno como ese¡Y recién perdió la memoria, cómo puede recordar una jugada así!

Rukawa, que acababa de salir de su repentino asombro toma el balón y se lo lanza a Hikoichi.

-¿Puedes continuar el partido?

-¿Ah? Eh… hai – asiente a la vez con la cabeza

Los jugadores toman posición y continúan el partido. Taoka no salía de su asombro y enojo a la vez. A ese muchacho le están enseñando jugadas… esa finta la hace Rukawa… y esta jugada de ahora la hace Mitsui… creo que el profesor Anzai nota algún talento oculto en el muchacho, y parece que ahora con la pérdida de memoria está más dócil y ha aprovechado esto a su favor… al menos por un tiempo le va a servir. Lo que no sabía Taoka era que ninguna de las dos jugadas se las habían enseñado a Sakuragi.

El primer tiempo finalizó 38 a 33 a favor de Shohoku. Anzai los felicitaba a todos, y todos felicitaban a Sakuragi por sus excelentes jugada. El panorama no era tan alegre en Ryonan.

-¡Sakuragi los está dejando como unos idiotas a todos¡Sendoh no puede ser que te haya pasado!

-Le recuerdo que él no está en primer año, entrenador

-¡Pero tú eres mil veces mejor¡Y él perdió la memoria! Él dijo que esas jugadas no se las habían enseñado, puede que más adelante salga con otras jugadas… hay que tener cuidado con eso… las marcas seguirán iguales… ¡y por favor concéntrense¡No me dejen en ridículo!

-¡Hai! – respondieron todos enérgicamente

Salieron a jugar nuevamente. El balón pasó a manos de Yasuda. Hábilmente, corrió y pasó junto a Ryota, dejándole el balón a éste.

-¡Vamos, equipo¡Hagamos una linda canasta!

Dribleó rápidamente y le pasó el balón a Mitsui. Iba a lanzar pero pasó el balón a Rukawa. Rukawa estaba muy bien marcado por Sendoh, y el moreno notó que sus demás compañeros igual. Vio que Hanamichi se libró de Fukuda, sin embargo no le pasó el balón.

-¿Qué pasó, Rukawa? Tu amigo está libre

-No es mi amigo

-Y cómo… si le enseñaste todas esas jugadas

-Yo no le he enseñado nada. Nadie le hace clases especiales a él. Él lo hizo todo sólo

-No te creo

-No me creas. Y tampoco creas esto

Tomó el balón y comenzó a buscar. Encontró a Sakuragi y le pasó el balón. Hanamichi se acerca al aro y hace un slam dunk. Nadie lo podía creer.

-Rukawa… - dice Ryota mirando a Rukawa – le pasó el balón… a Hanamichi – dice mirando al pelirrojo -… no puede ser… ¡GENIAL¡HERMOSA JUGADA, EQUIPO¡SIGAMOS ASÍ Y GANAREMOS!

Todos se comienzan a animar, mientras Ryonan estaba más preocupado que animado.

-¡Vamos, muchachos! – dice Sendoh, que llevaba el balón - ¡Podemos alcanzarlos rápidamente!

Cosa que nunca pasó y el partido terminó 89 a 78 a favor de Shohoku. Ryonan se despidió y se fue, decepcionado. Sobre todo Taoka. En cambio en Shohoku todo era fiesta.

-¡Hanamichi Sakuragi, jugaste excelentemente! – felicita Ayako, golpeándole la espalda con su abanico al jugador

-¡Gracias, Ayako!

-¡Y tú igual, Rukawa¡Semejante jugada que hiciste con Sakuragi!

-Felicitaciones, muchachos – dice Anzai muy contento – han mejorado el nivel

-¡Gracias, profesor! – contestan todos muy animados

Se fueron algunos a celebrar, como siempre lo hacían desde este año. Hanamichi obligó a Rukawa a quedarse.

-Hanamichi¿cómo aprendiste esas jugadas? – pregunta Ryota

-No lo sé, yo las hice

-¿Estás haciendo algún entrenamiento… "especial"? – pregunta Ayako con una sonrisa picarona y mirando a Rukawa

-No, ninguno

-¿Lo hacen los fines de semana?

-No entrenamos juntos – dice Rukawa algo molesto

-Qué tiene que entrenen, Rukawa – dice Ayako -, no por eso vamos a verte de otro modo…

-¡No entrenamos juntos! – se para de la mesa indignado – ¿Cómo no entiendes lo que te estoy diciendo?

-No tienes para qué hablarle así, Rukawa – dice Ryota molesto

-Me voy, nunca tuve nada que hacer aquí – toma su chaqueta

-¡Claro que tienes que hacer aquí! – le dice Mitsui - ¡Somos un equipo!

-Sí… somos un equipo… en la cancha, no fuera de ella. No me interesa compartir con ustedes fuera de la cancha. Yo vengo a jugar basketball, no a hacer vida social

-Rukawa…

El moreno toma su chaqueta y sale apresuradamente del lugar. El ambiente quedó demasiado denso. Luego de un rato, Hanamichi decidió ir tras él, y aunque sus compañeros le dijeron que no anduviera sólo, el pelirrojo hizo caso omiso y se fue.


Estaba recostado en el sillón, con sus ojos zorrunos examinaba el lugar. Luego los cerró.

No quiero involucrarme con nadie, no quiero tener que depender de los demás para sentirme anímicamente bien… hasta hace un tiempo el basketball llenaba mi vida completamente… ahora siento un vacío… algo me falta… desde que… desde que Sakuragi perdió la memoria he tenido que convivir con él, y esto ha conllevado a que tenga que convivir más con los demás… diablos¿qué hacía yo en un restaurant de comida rápida con Shohoku¿qué hacía yo almorzando con Yohei Mito y Sakuragi? Estoy empezando a querer cosas… cosas que yo antes no quería, ya no estoy seguro de lo que estoy haciendo… ya no estoy sintiéndome bien, estoy sintiéndome… solo…

Puso su brazo en sus ojos, para tratar de evitar lo que iba a suceder. Siente las llaves pasando por la cerradura.

-¿Quién te trajo? – pregunta en la misma posición

-Nadie

-Eres un do'aho

-¿Y a ti qué te importa lo que yo haga o deje de hacer¿Por qué te molestaste tanto allá¿Por qué no quisiste conversar un rato con los demás¿Por qué nunca cuentas nada de ti¿Por qué no te dejas abrir a los demás¿Por qué te gusta tanto estar solo?

-¡ESO A TI NO TE IMPORTA! – se pone de pie y lo mira con sus ojos brillantes, sin importarle nada

-Rukawa…

-¡Deja de hacerme preguntas¡Sabes que no te voy a contestar ninguna¡Todo esto que me está pasando es tu culpa!

-¡No es cierto! – toma a Rukawa por el cuello de la polera que traía - ¡Esto es porque tú has querido que sea así¡Estás así porque te creaste un mundo aparte, una burbuja¡Y afuera habemos miles de agujas que están pinchándola¡No puedes estar así para siempre¡La gente no puede vivir sola¡Y el hecho de convivir con cualquier persona rompe tus esquemas¡Y lo que te está pasando es lo que le pasa a cualquier persona sensata, con sentimientos¡Bienvenido a la realidad, Rukawa!

El zorro miraba al pelirrojo con sorpresa. Nunca se imaginó que Hanamichi dijera cosas así, cosas que le pudieran llegar. Rukawa no sabía qué hacer, estaba muy llevado a sus emociones. Pensaba con el corazón y no con la razón. Se suelta de las manos de Sakuragi y se sienta en el sillón, con los codos en las rodillas y las manos en la frente, con la cabeza gacha.

-Yo… yo me siento…

-Lo sé. No me lo digas, sé que te cuesta. Y sé por qué lo estás sintiendo, no por haber perdido la memoria soy un do'aho como me dices tú. No es malo que te sientas así, no porque los demás sepamos vamos a verte como fracasado o derrotado, si crees que es lo que podemos llegar a sentir al verte así. No podías estar así toda tu vida, no podías basar tu vida en el basketball… sí, el basketball no es necesario jugarlo con amigos, pero el día que no puedas jugar basketball, van a estar tus amigos para apoyarte y acompañarte y llenar ese vacío que te va a quedar

El do'aho tenía razón. Cómo le costaba a Rukawa aceptar eso. Qué difícil era verlo hablar cosas así y no golpeándolo ni tratándolo como basura, como lo hizo aquel día en que Rukawa lo golpeó en la cabeza. Rukawa sacó sus manos de la cara y se sentó derecho. No le importaba tener los ojos llenos de lágrimas y que Sakuragi lo viera. Le daba todo lo mismo. Sakuragi lo miró con tristeza. Rukawa sonrió. El pelirrojo quedó atónito, algo sintió en su corazón, sabía que esa sonrisa no era una sonrisa cualquiera, sentía que nadie podía haberlo hecho sonreír antes por algo importante y se sintió especial.

-Tienes razón – dijo el moreno, sonriendo -, por primera vez tienes toda la razón. Con esas simples palabras surgiste efecto en mí, en mi vida. Eso era lo que querías¿ahora estás contento¿estás feliz de que yo me sienta así¿de que me sienta dependiente de los demás¿de que necesite "amigos" para sentirme mejor?

-No por tener amigos vas a ser una persona dependiente de ellos

-Si tú no tienes amigos¿cómo te sentirías?

-No tan solo como tú

-¿Cómo estás tan seguro?

-Tengo familia. Una familia que me quiere y me apoya y yo la quiero y la apoyo. ¡Y también tendré las ganas de salir adelante¡Ganas que tú no tienes¡Sólo quieres quedarte ahí porque te vas a sentir débil¡Y no es así¡No por tenerle cariño a las demás personas y sentirte bien si las tienes a tu lado vas a ser débil¡Tampoco porque ahora estés así como estás¿Y sabes qué? Todo esto que te pasa… es por culpa de una sola cosa…

-Orgullo – dice Rukawa seguro, a lo que Hanamichi asiente -. Soy demasiado orgulloso y por eso me impido acercarme a los demás, por eso me impido decir cómo me siento… pero ya… ya no aguanto más¿entiendes? Es demasiada presión para mí… también soy una persona

-Lo sé… y todos lo sabemos… ¿o tú crees que para los demás no es raro que te la pases solo siempre?

Rukawa guardó silencio. Hanamichi lo mirada de pie frente a él. Rukawa volvió a ponerse en la anterior posición.

-Te debo estar pareciendo ridículo. Hablándote tantas cosas personales, siendo que antes lo único que hacíamos era insultarnos y golpearnos

-Sabes que las cosas cambiaron y que van a volver a ser iguales en cualquier momento. Entiéndeme a mí, no quiero hacer todo esto tan tedioso

-Lo único que has hecho en este tiempo es tratar de acercarte a mí para no ser como una carga y yo por orgullo te hacía el vacío. Lo siento

-No sientas nada – le dice, poniendo una mano en su hombro - ¿Ahora sí me prometes empezar de cero? – saca la mano del hombro de Rukawa y se la tiende, como hizo aquella vez en el hospital

Esta vez Rukawa no tarda tanto en responder. Le da la mano con mucha más firmeza. Hanamichi sonríe. Rukawa mira su reloj.

-Vamos

-¿A dónde?

-A jugar un poco… sé que venimos de un partido, pero siempre voy a esta hora a jugar…

-¿Me estás invitando? – Rukawa lo mira con sus ojos zorrunos de manera que Hanamichi se siente como un idiota – Ok, vamos…

Se alistaron y fueron a jugar. Rukawa le enseñó algunas cosas a Sakuragi, y a pesar de que el pelirrojo había mejorado su nivel, el zorro ganó lejos. Pero esta vez Sakuragi no comenzó a gritarle ni a insultarlo, sólo le dijo que había sido un buen partido con una sonrisa.

Rukawa lo sabía. Sabía que ahora empezaba una nueva parte en su vida. No sabía cómo iba a terminar, pero sabía que quería hacer de ese lapsus de tiempo algo grato para él y para los demás.

N/A: Sí, este capítulo fue el lado sensible de Hanamichi y Rukawa. Sobre todo de Rukawa. Es genial hacerlo sufrir. Pero me cuesta un poco ponerlo en ese plano, como es tan cerrado… pero pienso eso, que todos somos humanos y algún día las cosas nos afectan y no aguantamos y con quien sea que estemos explotamos. Respondiendo a los reviews…

Serenity Moon001: Si los caps se demoran es porque no me hacen reviews :( el fic lo tengo escrito completo... y gracias por tu revew!

Reiko noriko s.s.: Gracias por tu review... y no, no creo que ponga a Rukawa raro, lo pongo humano XD

Ya sé que hubo un review repetido, pero quería subir el cap. ¡Por favor, hagan reviews! TT ¡Nos vemos en el siguiente cap!