La vida no ha sido buena contigo últimamente, Sakura. Oh, no.
Por supuesto, después de recibir el aviso de los informadores de Tsunade-sensei, no pudiste concentrarte en el entrenamiento, eh? La perspectiva de Kakashi-sensei regresando no hizo sino alterarte.
Y no te lo pudiste sacar de la cabeza, hasta que, oh, inteligentemente, decidiste visitar su apartamento en plena noche solo para recordar su olor.
Kakashi olía a manzanas. Eso era raro.
Hubiera preferido decir que su sensei tenía un olor parecido a su personalidad. Un olor profundo, a bosque… A hojas secas…
Pero, no. Kakashi olía a manzanas, y punto.
Cada vez que él se abalanzaba sobre ella en sus años más jóvenes para protegerla de algún peligro del que no confiaba podría salvarse -al contrario de Naruto y de Sasuke –podía aspirar de nuevo la frescura que irradiaba de sus ropas, de él mismo…
…
Ahem.
Regresando al tema…
Esa misma noche Kakashi había regresado. La había encontrado en su habitación. Y luego ella lo había golpeado. Y luego había llorado en su pecho (y, oh, ahí estaban las malditas manzanas de nuevo!). Y finalmente la habían mandado a dormir, como a una cría que por cierto no era. Y se había quedado con el remordimiento de Kakashi durmiendo en el sillón.
Y aún así, el (maldito) olor de su cama la había arrullado hasta que cayó profundamente dormida.
Tanto que se despertó tarde y la primera noticia de la mañana fue que ¡oh sorpresa! Se iba de viaje con su querido sensei a una aldea que no conocía, en una misión que le parecía ligeramente… suicida?
"Mierda" dijo entre dientes, arrebujándose en el chaleco que Kakashi le había dado para resguardarse del frío que azotaba eternamente la aldea.
Dejó sus pensamientos al sentir una gota helada caerle en un brazo. ¡Bien! Ahora estaba empezando a llover… Ya nada podía salir peor…
Gururururu…
Ooooops…
"Ten cuidado, Sakura" dijo una voz (demasiado conocida!) a su izquierda. Seguida por una suave risa. "Si tu estómago sigue sonando igual de fuerte, acabarán por descubrirnos."
Mierda. Mierda mierda mierda mierda…
"Claro, Kakashi-sensei"
Sigh.
Oh, no. Sakura, la vida no ha sido buena contigo.
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Saltaron de un árbol a otro sin dificultad, y el único problema que tuvieron fue cuando Sakura casi dio un chillido al quedar frente a frente con una gigantesca oruga.
Por suerte, la lluvia se había detenido.
Tenían hambre, y tenían frío. Finalmente, cuando estaban aproximadamente a 1 km de su objetivo, Kakashi se detuvo.
"Creo que por ahora podemos detenernos a descansar un poco" y la kunoichi dio un suspiro de gran alivio, haciéndolo sonreir. "Después de todo, no puedo seguir ignorando las quejas de tu estómago"
Urk!
La mirada fulminante que le lanzó a Kakashi no pareció tener mucho efecto, pues este solo se volvió a encender un pequeño fuego.
Al advertir, sin embargo, que la mirada furiosa se volvía lentamente en una de preocupación, sonrió.
"Descuida. Utilizaré un jutsu para que el humo no sea visible a ojos enemigos"
Eso lo explicaba todo.
Se sentaron, cansados, al lado del fuego. Bueno, al menos ella estaba cansada, y si Kakashi compartía el mismo sentimiento, no lo demostraba.
Sacó algo de pan y queso de su bolsa y se las dio a Sakura. Cuando tomó los alimentos, notó la frialdad de su mano.
"Kakashi-sensei…" se quitó el chaleco y se lo extendió. El ninja, sin embargo, solo sacudió la cabeza.
"Estoy bien" murmuró, y sonrió.
Y Sakura se sintió ridícula al sonrojarse.
Hubo un momento de incómodo silencio, que Kakashi finalmente rompió.
"Nos quedaremos a dormir aquí hoy" dijo con voz apagada "Creo que ninguno de los dos estamos en condiciones de seguir con el camino, y mucho menos tenemos la cantidad suficiente de chakra para disfrazarnos…"
"Hn. E-entonces…" tomó su mochila y la abrió.
Y la miró fijamente.
Oh, no.
"Creo que me olvidado del sleeping bag…"
Kakashi, que en ese momento ya estaba extendiendo el suyo, se detuvo en seco. Y suspiró.
"Está bien. Puedes usar el mío"
"P-pero… Y tú, Kakashi-sensei?"
"…Estaré bien"
Sakura parecía escandalizada.
"Te congelarás! Si ahora hace frío, imagínate la madrugada…"
Kakashi parecía ligeramente molesto.
"Qué propones?"
Y los dos tenían frío.
"B-bueno…" tragó saliva con cierta dificultad "Creo que los dos cabemos en un…"
Kakashi la miró claramente sorprendido. Luego se encogió de hombros. En situaciones normales no le hubiera molestado dormir en la rama de algún árbol o simplemente en el suelo, pero el frío arreciaba, y empezaba a soplar un viento helado. No dudaba que después de media noche la temperatura bajaría a menos cero grados centígrados.
"Está bien" dijo al fin, y Sakura dio un salto. Kakashi le sonrió.
"Descuida" murmuró mientras se metía dentro de la bolsa de dormir. En efecto, era grande, y ambos cabrían sin dificultad.
Después de dudar un momento, Sakura se arrebujó a su lado, y no pudo evitar dar un suspiro de contento. El calor del sleeping bag, con junto con la tibieza que desprendía el cuerpo de Kakashi la hicieron entrar en calor enseguida.
Y luego aspiró profundamente.
…
Oh, rayos.
Iba a ser una larga noche…
…
Y a pesar de ese pensamiento, cerró los ojos… y poco después cayó dormida.
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"Hrrrn…?" lentamente abrió los ojos, solo para encontrarse con la cara de su ex – maestro… desde bastante cerca. "Wua! Kakashi-sensei!"
El único ojo visible no dio señales de que su dueño hubiera despertado, y Sakura se relajó, apoyándose sobre sus antebrazos.
Todavía era temprano. Miró el sol y calculó… Quizás fueran las 8, aunque nunca se sabía… no con este clima.
Su mirada se dirigió nuevamente al rostro enmascarado de Kakashi. El cabello plateado, ya de por sí alborotado, le caía desordenadamente sobre los ojos –o al menos un ojo –y sintió el impulso de… de…
En cuanto se movió para tocarlo, tan solo para apartar algo de cabello de su rostro, y las pequeñas ramas debajo de ella se rompieron imperceptiblemente a la vez que su mano alcanzaba su frente…
Una kodachi fue presionada contra su garganta.
El único ojo visible, negro como el infierno, brilló con tal instinto asesino que Sakura empezó a sudar frío.
En cuanto Kakashi se dio cuenta de quién era el cuello que estaba a punto de cortar, apartó rápidamente el arma.
"Lo siento" se disculpó con voz ronca. Sakura solo asintió, aún asustada.
¿Qué rayos había aprendido Kakashi en su tiempo fuera de la aldea?
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Er… Este capítulo era necesario, a pesar de que no pasó nada demasiado interesante. En el próximo habrá mucha más acción… ¡Lo prometo !
Bye bye!
Review!