La Luz y La Oscuridad
Capitulo 14
-¡Esto es más grave de los que pensé querido mió!- exclamo sorprendida Galadriel – Ni nuestra magia ha sido suficiente para mantener, no digamos alejada, pero por lo menos a raya este mal-
-En verdad Galadriel que no entiendo, Sauron pudo haber matado fácilmente a Elladan y Elrohir, en cambio los ha dejado vivir- contesto igual de alarmado Celeborn.
Thranduil solo guardaba silencio.
-Nuestros valientes Elladan y Elrohir- suspiro Galadriel – No saben cuan cerca estuvieron de conocer a Mandos.
-Lo que no entiendo – dijo por fin Thranduil - ¿Es como se ha dejado herir por esos dos?-
-Algo lo ha distraído, no dudo de sus verdaderas intenciones- dijo Galadriel
-Pero si eso es verdad, pudo haber matado fácilmente a los gemelos y llevarse a Legolas. En cambio lo ha dejado en el bosque solo y a estos ilesos – contesto Thranduil – es como si esperara algo… algo que solo Legolas puede darle, no entiendo-
- Es su Luz la que desea…dime Thranduil¿Te ha contado Legolas que paso esa tarde?- pregunto Galadriel preocupada.
-No, no ha querido hablar del tema. Y yo no lo he obligado, parece tan… perdido¡Oh! Valar, temo perderlo Galadriel-
-No desesperes Thranduil. Te ruego que se queden aquí el tiempo que sea necesario. El tiempo que necesite Legolas para regresar a nosotros. Por favor, considera esta petición que te hago- rogó Galadriel.
-En verdad que quería partir a mi Reino lo antes posible. Pero estamos cerca, demasiado cerca de Mordor- contesto Thranduil- Galadriel¿Hay algo que no sepa aun¿Algo que no me hayas dicho, ahora no veo diferencia entre quedarnos aquí o partir a mi Reino-
Galadriel desvió la mirada –Te he dicho todo lo que se querido amigo, suposiciones son todo lo que tengo ahora-
-mmm-
-El resto de la comunidad partirá pronto- interrumpió el silencio Celeborn- aun no es seguro que Aragorn vaya, aunque ha prestado juramento, su amistad para con Legolas es mas grande, tendremos una reunión mañana para decidir todo sobre el asunto-
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-¡Olvídalo, no te dejare solo mientras esa cosa anda rondando los alrededores!- grito Aragorn –Me quedares aquí, justamente aquí -
-Pero Aragorn- reclamo Legolas desde su cama - debes partir con los Hobbits, la misión es más importante que mis problemas-
-¿Llamas problemas a esta aterradora situación?- rió Aragorn – de veras Legolas, si no te conociera mejor, pensaría que deseas estar solo con esa cosa-
-…-
-Lo siento, no he querido decir eso, perdona- se disculpo rápidamente Aragorn al ver la tristeza en los ojos del elfo.
-No tienes por que Estel, no es nada- contesto Legolas- además no me quedare solo, mi Adar se quedara conmigo, los gemelos no partirán todavía a Rivendell, y esta Haldir también para acompañarme. Y no olvidemos que ya no soy un elfito- bromeo forzadamente Legolas al final.
-Elfito o no, no me gusta la idea de dejarte atrás- suspiro Aragorn sentándose en el borde de la cama- Gimli y Boromir pueden ir con Frodo. De todo modos, el enemigo parecer estar mas interesado en otras cosas que recuperar el anillo-
-El dijo… que eso era una distracción… que en verdad no le interesa el anillo…pero no podemos estar seguros¿verdad?-
-¿El te dijo eso?- pregunto Aragorn acariciando una hebra del cabello de Legolas.
Legolas afirmo con la cabeza – El dijo que yo le ayudaría en sus verdaderos propósitos, pero…-
-¿Si?- Aragorn inclino más el cabeza, interesado más en esos ojos que en la respuesta del elfo.
-Yo no quiero, en verdad que no quiero Estel¿entiendes?...pero creo que no podré evitarlo… -
-No puede obligarte Legolas, no mientras yo este a tu lado- murmuro Aragorn buscando los labios del elfo.
-No pensaras igual después…- murmuro pasmado Legolas, hundiéndose mas en la mullida almohada para huir de esos labios.
-¡Que esta pasando aquí?- exclamo Elladan tan alto que Aragorn cayo al suelo.
-Legolas¿Cómo te sientes esta mañana?- pregunto Elrohir sin prestar atención a sus hermanos.
-Bien, gracias Elrohir -Contesto Legolas con un rubor que hizo a Elrohir sonreír más.
-Te he traído algo de comer. Soy el único que se preocupa por tu salud. Estos dos solo se la pasan molestando y asediándote¿verdad?- continuo Elrohir lanzando una mirada de reproche a Estel que seguía en el suelo y a Elladan burlándose de el. Elrohir termino de colocar la bandeja en el regazo de Legolas.
-Gracias Ro, pero en verdad no tengo mucho apetito esta mañana- dijo Legolas al mirar la comida, una sensación en su estomago buscaba salida, y no para bien.
-Pero no has comido bien desde que llegaste- reclamo Elladan acercándose a la cama- estas muy pálido y delgado –
-Pero…-
-Vamos, solo un poco- insistieron lo gemelos a coro.
Legolas trato, en verdad trato de mostrar su mejor cara. Con una leve sonrisa, paso un pequeño bocado, luego otro. Animado, trato otro acompañado de dulce jugo de frutas.
Grave error.
Pronto sintió de nuevo esa sensación desagradable en su estomago. Empujando la bandeja a Estel, se incorporo rápidamente de la cama, lo que le costo un dolor de cabeza punzante en la frente y un vértigo que solo acentuó su malestar, recobrando el balance, se apresuro ágilmente al privado anexo que servia como cuarto de baño.
Tan rápido había pasado todo, que los tres hermanos solo se quedaron mirándose unos a otros, preguntándose que había pasado. No fue hasta que escucharon un molesto estomago desahogarse que todos reaccionaron preocupados.
-Mello nin¿te sientes bien?- pregunto Aragorn del otro lado de la puerta. Otro desahogo fue su respuesta.
-Elladan, ve por la Dama Galadriel- apresuro Aragorn, no moviéndose de la puerta,- Y procura que venga sola-
Entendiendo las palabras de su hermano, Elladan solo asintió con la cabeza.
Elrohir mientras tanto, busco un par de toallitas y abrió mas las ligeras cortinas.
Cuando Galadriel llego, ya Legolas se hallaba en la cama. Elrohir le murmuraba dulces palabras mientras refrescaba su frente con tollas húmedas. Aragorn le acercaba un poco de agua.
- Veo que eres muy querido mi Príncipe- dijo Galadriel al pie de la cama del elfo.
- Mucho mi Señora, y no es ninguna molestia ayudar a un amigo- respondió Aragorn.
- Se ha sentido tan mal, que no ha tolerado ninguno bocado esta mañana abuela- continuo Elrohir.
- Eso me ha dicho tu hermano. Ahora os ruego que me dejen sola con el Príncipe- ordeno Galadriel.
No atreviéndose a contradecir a la Dama, Aragorn y Elrohir solo se despidieron con la mirada de Legolas y abandonaron silenciosamente el flet.
Legolas, que ya se había recuperado de su abrupto malestar, miro nerviosamente mientras Galadriel se acercaba para sentarse a su lado.
-Es poco común que un elfo sufra de este tipo de malestares- comenzó Galadriel mientras posaba sus penetrantes ojos en Legolas.
- Fue… fue por un leve mareo… - comenzó a decir Legolas - … me ha pasado desde que llegue… no he comido bien desde entonces-
- Son pocas las causas por la que un elfo sufre de estos malestares- continuo Galadriel – Y estoy segura que no sufres envenenamiento-
Legolas sintió que su corazón le daba un vuelco en el pecho. - ¡Oh, Valar, ella lo sabe, lo sabe…! - Trato de sostener la mirada de Galadriel, esperando que continuara.
Al ver que Legolas no decía nada, Galadriel continuo –Thranduil no lo sabe mi pequeño y no tiene por que saberlo nunca-
-Mi Señora, no entiendo…-
-Lo que digo mi querido Legolas, es que aun estamos a tiempo de ayudarte a resolver este "asunto"-
Legolas trato de ahogar las lagrimas que ya reñían por salir¿insinuaba Galadriel lo que el creía?-
Tu Adar te ha hablado de la Profecía¿no es así?- dijo Galadriel levantándose del lecho.
-Así es, pero aun no…-
-Sabes lo que esta dice, sabes que lo que llevas en tus entrañas puede representar el fin… – interrumpió Galadriel enérgicamente- …el fin de Arda-
-¡No!- respondió Legolas, atreviéndose a levantar la voz – Yo solo siento calidez y luz, mi bebe no puede representar el fin…-
-¿Cómo lo sabes?- respondió Galadriel -¿Cómo puedes estar tan seguro sabiendo quien es su progenitor? Créeme pequeño, Sauron no ha dejado nada al azar. Este bebe solo traerá destrucción y caos a la Tierra Media. ¿Quieres ser la causa de este sufrimiento? Aun estamos a tiempo Legolas, nadie tiene por que enterarse. Podrás partir a tu Reino con tu Adar- insistió Galadriel acercándose de nuevo a la cama.
-Lo que yo quiero mi Señora, es tener a mi bebe. Nada ni nadie me lo quitara, no lo permitiré…- respondió Legolas cobrando valor, se trataba de su bebe, y no iba a ceder a la atroz acción que proponía la Dama.
-¿No has pensado en tu Reino, en aquellos que te aman?- volvió a abordar Galadriel -¿No lo entiendes Legolas, Sauron solo te ha utilizado, no le importas tu ni tu bebe, solo le interesa la Luz de tu Fëar y el bebe es solo el medio –
-No es verdad…- comenzó a decir Legolas al borde del llanto- el me ha dicho que…-
-¿Qué te ama?- completo burlonamente Galadriel la frase – ¿Y en verdad le has creído mi pequeño Legolas? Mentiras, el Oscuro solo usa mentiras para lograr sus objetivos ¡No puedes… no podemos permitir eso!-
Legolas se sentía perdido. Podía llamar a Sauron ahora… podía. Seguro Galadriel no era rival para el… El no permitiría que le arrebatasen la decisión, el derecho de tener lo que poco a poco se había convertido en lo mas importante para el.
¿Pero si Galadriel tenia razón¿Si su bebe no nacía con la luz de los Eldar¿Estaba destinado a ser el instrumento de Sauron?
Si, podía llamarlo ahora, el detendría a Galadriel de seguir diciendo todas esas atrocidades…
Pero el no vendría… a menos que el enfrentara su corazón…y este no era un buen momento…
Viendo la duda en los ojos del Príncipe, ignorando el porque, Galadriel creyó ganar terreno.
-Dime Legolas, en tu reciente encuentro con Sauron¿Qué te ha dicho¿Te ha prometido algo¿Mas mentiras?-
Legolas sintió de nuevo el malestar en su estomago, pero esta vez no debido a su estado, sino a las retorcidas palabras que escuchaba, las claras intenciones de estas.
-Mi señora, nada se me ha prometido, sino el respeto a la vida de mis amigos, de mis seres amados y este bosque que usted gentilmente protege. Se me ha prometido tanto mi seguridad como la de mi bebe…-
-Inocente Príncipe¿Y le has creído semejantes…?-
-Prueba es que la vida de Elladan y Elrohir no fueron tomadas- interrumpió Legolas sutilmente – Y estos bosques no han sido arrasados por el fuego y por la sombras-
-Eso no demuestra nada- respondió Galadriel un poco airada, ignoraba el hecho que sus bosques habían estado tan cerca del desastre -Son artimañas del enemigo para confundirte-
-No niego que Sauron es cruel y desalmado, que me ha engañado y lastimado antes y que sus intenciones no me son claras, - respondió sereno Legolas –pero de algo estoy seguro mi Señora , y es el hecho que yo deseo a este bebe-
-Olvidas algo Legolas- dijo Galadriel jugándose la ultima carta – Tu Rey y Ada, Thranduil…-
Legolas palideció.
-¿En verdad crees que tu Adar permitirá que lo conserves cuando se entere? Piénsalo Legolas, eres su único hijo, el Príncipe Heredero al trono, lo avergonzarías…-
Miles de veces Legolas se había hecho la misma pregunta¿Cómo reaccionaria su Ada¿Con furia¿Decepción¿Vergüenza? Y otras miles se había respondido. Talvez todas. Pero escucharlo de otra persona era doloroso.
Si Thranduil se ponía del lado de Galadriel… no había modo de luchar a los dos…
-Aragorn te quiere mucho Legolas, talvez demasiado, Haldir, y mis nietos también te estiman, les destrozaría saber esto…-
Legolas tomo una decisión. Si la vida de su bebe dependía de quedarse solo, así seria. No daría más dolor a sus seres queridos. Pero ni por ellos entregaría a su bebe.
-Mi Señora, os lo ruego, dejadme tener a mi bebe, en verdad lo es todo para mi…-
-Lo siento Legolas, pero he tomado mi decisión-
-¿Pero que hay de mi decisión, de mi derecho a elegir?- replico Legolas enfurecido.
-No estas en condiciones de elegir, lo que esta en juego aquí es el destino de Arda. No podemos correr riesgos. El anillo debe ser destruido, y el caos no puede nacer - respondió fríamente Galadriel –Alguien debe decidir…-
-¿Riesgos¿es decir que hay una oportunidad que mi bebe sea un elfito normal?- pregunto Legolas impresionado, incorporándose un poco de la cama.
Galadriel no contesto por unos momentos.
-Hay una posibilidad, pero es muy remota…por favor Legolas, piensa en tus amigos, en tu Ada…piensa en los bosques que tanto amaba tu Nana…-
Una oportunidad, es todo lo que Legolas pedía, una oportunidad…
-Por favor mi Señora, comprenda que no quiero renunciar a el sabiendo que hay una probabilidad…sabiendo que hay una esperanza…-
-Alguien tiene que decidir, lo siento Legolas- respondió Galadriel ignorando las suplicas del elfo- lo haremos esta noche…-
Legolas sentía ya las lagrimas salir desesperadas. Tenía tan poco tiempo. Y en el estado en que se encontraba, dudaba poder siquiera huir. Ni pensar en pedir ayuda a Aragorn o los demás.
-Por favor mi Señora, le ruego que reconsidere… es de mi bebe de quien estamos hablando… no puedo permitir esto… es cruel…es…es… un crimen…
-Alguien tiene que pensar en las consecuencias…- comenzó a responder Galadriel exasperada.
-¡Y ese alguien no eres tu Galadriel! – Resonó una voz en todo el flet, Galadriel y Legolas giraron sobresaltados a la figura que en esos momentos entraba –Y no te atrevas a suplicar una vez mas Legolas-
-¡Thranduil!-
-¡Si te atreves a tocar a mi hijo maldita bruja noldor, te partiré en dos el corazón con mis propias manos!-
