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HERMANOS
por Liluel Azul
Capítulo 8
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Flash back
Una gran boda. El hijo mayor de una de las familias más nobles de toda Rusia está contrayendo nupcias.
Se puede ver el orgullo en los ojos de Anastasia, su hijo primogénito, Alexander Ivanov está haciendo bien las cosas, pues ha elegido como esposa a alguien perteneciente a su misma clase. Y juntos son el vivo retrato de la clase alta.
Por ello mismo muchos hombres poderosos no sólo de Rusia, sino también del extranjero se dieron cita en este evento que resonará en todas las páginas de sociales.
Mientras, Natasha Ivanov, la hermana pequeña, de tan sólo 16 años juega con las otras chicas de su edad. Viste un vestido rosa pálido y una corona de flores. Ahora misma parece un hada y sonríe y juega como si no conociera la palabra dolor.
La flecha del travieso cupido le ha dado, pues nada más alzó la vista y entre la multitud de invitados ha visto a un hombre que le ha robado el aliento.
Debe de tener unos 40 años, aun así, el corazón late presa de una nueva emoción, la sangre se agolpa en sus mejillas y las piernas le tiemblan pues aquel hombre la mira fijamente y le sonríe.
Cuando pregunta quien es aquel, le responden que es un rico empresario japonés, de nombre Mitsumasa Kido. Dueño y presidente de la fundación Graude, una de las más poderosas de toda Asia.
La fiesta avanza y ellos siguen en el intercambio de miradas. Mitsumasa da el primer paso. Se acerca a ella y comienzan a platicar. Incluso la saca a bailar y la joven se siente soñada. Más Kido consiente del mundo de apariencias en sociedad, rápidamente familiariza con la madre de la joven. Más pareciera que habla con ella que con Natasha.
Cada palabra que sale de la boca de Mitsumasa, hace que el corazón de la joven se enamore más y más. Habla de cosas altruistas, de cómo usa el poder de la fundación Graude para cosas de beneficencia. De cómo le gustaría hacer negocios con los Ivanov y proponer proyectos para las zonas más pobres de Rusia.
Habló de su época de soldado cuando presto servicio militar en su nación y de lo importante que es proteger a los débiles.
Natasha lo escuchaba encantada por el amor, su madre Anastasia, lo hacía por interés y protocolo. Después de todo hacer negocios con la fundación Graude los elevaba aún más en posición.
Jamás pensó que aquel hombre estaba enamorando su pequeña hija. Pues la joven había sido educada bajo las más estrictas normas religiosas. Anastasia era exageradamente devota, había sido criada con firmeza en cuanto a su posición de dama de sociedad. Y de un modo más rígido había criado a Natasha. Aun así esta era una niña que todavía no pensaba en los novios y si lo hacía, su madre debía escogerlo primero.
Siempre obediente, jamás había desobedecido una orden de su madre, siempre pedía su consejo. Pero ese día el amor la había cegado.
Las semanas pasaron. Natasha seguía siendo la misma risueña de siempre. Amaba la vida y era un sol para su familia y para quien la viera. Unos días de pronto estuvo muy triste y a todos los intrigó, pero después volvió a ser la misma dichosa chica, que irradiaba felicidad. De hecho más que nunca. Ella era un sol de alegría.
Le ocultó a todos que se seguía viendo con Mitsumasa, de hecho su tristeza se debía a que él volvió a Japón y su posterior regocijo fue a causa de que tenía un niño en el vientre.
Ella era feliz, soñando despierta, cantando canciones. Pero los meses pasaron y ya no pudo ocultar más el embarazo.
Anastasia estalló en ira, al ver su honra ultrajada. Se llenó de vergüenza y humillación. Casi mato a golpes a Natasha y de milagro el bebe se salvó. Lo había ocultado tan bien que cuando la llevó a abortar ya no pudo por lo avanzado del embarazo. Buscaba al culpable para meterlo a la cárcel por violación y es que Natasha seguía siendo una niña ante la ley.
Maldijo desde lo más profundo de sus entrañas al culpable.
Natasha se había vuelto una vergüenza, recibía insultos y golpes de su madre. Aun así, cuando estaba sola sonreía y abrazando su vientre hablaba con ese niño que para ella era su máxima alegría.
Hasta le había puesto un nombre. Yuki, que significa nieve en japonés.
Faltaba sólo un mes para que naciera, cuando Natasha escuchó de su madre que el destino de ese niño era parar a un orfanato. La joven lloró y suplicó a su madre para conservarlo.
No pudo convencerla con suplicas, así que comenzó a discutir con Anastasia. Sólo muerta le iban a arrancar a ese niño. La desobediencia de su hija la alteró, la discusión fue subiendo de tono y caminó a las escaleras dándola por terminada. Ese niño sería abandonado en un orfanato, pues eso había decretado. Aun así Natasha salió tras ella. La tomó del brazo para detenerla y seguir hablando, cuando en un movimiento lleno de furia, Anastasia empujó a su hija y esta cayó por las escaleras.
Natasha despertó varios días después. Cuando se dio cuenta que su hijo ya no se encontraba en su vientre interrogó a su madre.
-Murió. -Respondió secamente.
Y Natasha se ahogó en un mar de llanto. Sin ganas de vivir su madre la metió a un internado en una escuela manejada por monjas.
Por casi 2 años estuvo ahí, muerta en vida. Llorando por su bebe. Y de pronto la felicidad volvió a ella.
Basto una salida, una tarde, un descuido de las monjas para que ella se les escapara y se reencontrara con Mitsumasa y otra vez, sucedió.
Después de eso, ella intentaba escaparse por todos los medios y no lo conseguía. Aun así las monjas le dijeron a su madre que ya no podían hacerse responsables de ella, debido a su afán de escaparse.
Así que Anastasia la sacó de aquel internado y la llevó a casa. Natasha se sentía enloquecer, y accidentalmente por boca de un par de sirvientas chismosas se enteró que su hermano tenía un hijo de la edad que debería tener el suyo.
Era demasiada la coincidencia. Con lágrimas en los ojos demandaba saber si ese niño era el suyo y las negativas de Anastasia no la convencían.
Cuando se dio cuenta que de nuevo estaba esperando, no lo pensó dos veces tomó sus cosas y al primer descuido de su madre se escapó.
Fueron meses muy duros para Natasha, meses en los que tuvo que mendigar en las calles y a vivir de la caridad. Aun así la buena fortuna le sonrió y encontró un albergue en donde esconderse y traer al mundo al segundo niño al que nombro Hyoga. Glaciar en japonés.
De cuando en cuando llamaba a casa, movida por la necesidad de saber si el otro niño era suyo. Una de esas veces, fue su hermano quien respondió.
-Ya me entere que trajiste al mundo a un pequeño. Natasha se razonable y entrégamelo. Si lo encuentra mamá lo dejará abandonado en un orfanato, pero si me lo das a mí llevara una vida de lujos y comodidades. Lo criare como si fuera mío. Lo amare como si fuera mío.
-Nadie me lo va a quitar.
-Con sólo saber que existe supe que lo quería. Natasha cuando mamá los encuentre lo desaparecerá y lo perderemos los dos. Conmigo tendrá una familia.
-Tiene una conmigo. Tenía un hermano que se llamó Yuki. Y que ahora llamas Adrik. ¿Verdad?
-… quiero a ese niño, ya hasta pensé en un nombre. Luka. Ya hasta sueño con tenerlo entre mis brazos, apuesto que se llevara bien con Adrik.
-Se llama Hyoga y Adrik se llamó Yuki.
-¿Qué quieres que te diga Natasha? vas a querer quitármelo.
-Es mi hijo, ustedes me lo arrebataron. Se llama Yuki.
-Es mío Natasha y soy capaz de morir por él. No tienes idea de lo tuve que hacer para conseguirlo. Ella lo dejo abandonado en un orfanato. Casi vendí mi alma al diablo y tuve que sobornar a media Rusia para encontrarlo. Adrik es mío ¿Qué le puedes dar tú? Sólo hambre y frío. Pobreza. Contigo será un bastardo. Se razonable y entrégame a Luka. Mamá te busca y yo también. Crees poder escapar por siempre.
-Se llama Hyoga. Y jamás lo vas a ver. Así la vida se me vaya, pero ni tú ni mi madre jamás lo van a ver. Jamás lo van a tener.
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Notas de la autora
Vaya esto parece un guión de telenovela. Me habré volado el argumento de "El derecho de nacer". Tal vez y lo que le falta a este drama.
Por mucho que me reviente la historia de que todos son hermanos y que el maldito Kido sedujo a un montón de mujeres, lo cierto es que en el manga, Natasha adora a Mitsumasa y le habla con amor y devoción a Hyoga sobre su padre. Al grado que le dice que desea que sea como él, un hombre bueno y comprometido con la justicia.
Pobrecito de mi Hyoga cuando supo la verdad y lo peor es que fue, cuando aún era pequeño y se acababa de quedar huérfano. Ikki cuando lo supo –el día de su prueba por la armadura del fénix- enloqueció y se volvió malvado y hasta quería matar a Shun por tener la sangre de ese maldito Kido. Seiya también dijo "no, no puedo ser hijo de ese maldito" Shiryu y el dulce Shun dieron el grito en el cielo al enterarse.
Les recomiendo mi fic "El elegido para ser el caballero del cisne" Capítulos 1 y sobretodo el 5 dedicado a ese momento en el que supieron la verdad.
Por otro lado voy a darle una ovación de pie a Adrik por ser oficialmente el personaje más odiado que he creado, eres al primero al que todo mundo quiere ver muerto. Inat ya anuncio que te va a perseguir con un tanque, Sakura opina que te deben surtir con una buena dosis de bofetadas, Smily quiere que Ikki haga correr tu sangre y Fabiola te piensa poner en el asador.
Adrik: Uno que se esfuerza.
Hyoga: Felicidades niisan. (T_T)
Cierto, te siguen Ion y Tatsumi de "¿Quiénes somos?" –bueno a Tatsumi no lo cree yo - que se llevan el segundo lugar, por la tortura y daños psicológicos que hicieron vivir a mi amado Hyoga.
Hyoga: Ah… todavía tengo pesadillas de tanto que me martirizaron.
Tatsumi: Gracias, gracias, me encanta ser villano.
Ion: Hyoga, no voy a rendirme hasta lograr mis objetivos, volveré a tenerte en una jaula hermoso cisne.
Hyoga: Este… Seiya defiéndeme.
Increíble, todos sienten rabia, Alyshaluz opina que deben castrar a Ion, y otros quieren matar a Tatsumi, pero aun así no han recibido tantas amenazas de muerte como Adrik. Y eso que sólo abofeteó a Hyoga, en cambio estos lo torturaron y feo. Por otro lado Princesa Melon y Lebalbel que pasa con ustedes, nadie los ha amenazado de muerte.
Princesa Melón: (De Aya entre ángeles y caballeros) Oye, sólo llevo un capítulo de aparición, además yo sólo quiero matar a Hyoga para llevarme su alma al infierno y así casarme con él. Quiero que sea mi real consorte. Y serás mi esposo dulzura.
Hyoga: Ya te dije que no me quiero casar contigo. Seiya di algo.
Seiya: ¿Qué nos ofreces de dote?
Hyoga: ¡Seiya!
Y tú Lebalbel, has atosigado a Hyoga, lo has golpeado, secuestrado, casi matado, lo tienes atrapado en una ilusión de pesadillas y nadie ha dicho algo contra ti.
Lebalbel: (De la saga de Azul) Yo sólo odio a Hyoga. Con toda mi alma y por toda la eternidad, ya llevo dos vidas odiándolo, soñando que se lo comen mis serpientes. Ya logre matarlo una vez, esta haré que sea definitivo y su alma nunca volverá a renacer. Princesa Melón: Oye, con mi futuro esposo no te metas.
Lebalbel: Cásate con él y llévatelo al infierno estoy de acuerdo. Como decía, no tengo ningún problema con Shun, hasta me caería bien si no fuera por su insistencia de proteger a Hyoga. Creo que por eso nadie la trae conmigo, como yo no tengo odios contra Shun nadie me dice nada por más que martirice al rubio. En cambio Adrik odia a Shun.
Adrik: Cierto lo odio.
Lebalbel: Además a diferencia del debilucho este, yo soy muy poderoso. Shun y su cadenita no fueron capaces de detenerme e impedir que me llevara a Hyoga. Casi se orina en los pantalones de todo el miedo que le provoque y así ni siquiera tuve necesidad de golpearlo.
Ikki: No hay necesidad de que Shun se ensucie las manos, yo ya te puse en mi lista negra. Sé que yo sí puedo destruirte.
Lebalbel: Dudo que puedas. En fin, mientras no golpee a Shun, nadie me declarara la guerra y como el pelos verdes me tiene miedo, dudo que pueda reunir el valor para enfrentarse a mí.
Tal vez tengas razón, aunque por tus declaraciones creo que más de una ya se enchilo y clama por tu sangre. En todo caso este fue un hábil comercial para promocionar mis otros fics gracias por leer.
En el próximo capítulo seguiremos con estos back flash del pasado de Hyoga y Adrik, y las andanzas de Natasha, por ahora ya saben de quien en el capítulo 4, Natasha andaba huyendo, para que no le quitaran a Hyoga, pues su hermano Alexander era quien la perseguía. Como le habían quitado a Adrik, Hyoga nunca supo de su existencia hasta ahora.
Hyoga: Pobrecita de mi madre, lo que debió sufrir.
Adrik: Mi único padre es Alexander Ivanov, reniego de la sangre Kido. Maldita sea la hora en que mi madre conoció a ese tipejo.