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HERMANOS
por Liluel Azul
Capítulo 13
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Han pasado tres días desde el último encuentro de Hyoga con Adrik, días en que el rubio se la ha pasado encerrado en su cuarto. Para todos sus hermanos ha sido muy evidente que algo muy grave le sucedió pues está muy triste, además casi no duerme y ha perdido el apetito.
Shun ha intentado muchas veces hablar con él, y pese a la angustia en sus verdes ojos, Hyoga ha permanecido en silencio. Lo que se le hace raro. El rubio nunca ha tenido secretos con él. Siempre que ha tenido alguna angustia se desahogaba contándole sus penas. Desde lo culpable que se sintió por lo que pasó con Camus e Isaac, hasta lo mucho que ama a Eri y lo nervioso que lo ponía. Por ello el peliverde sabe muy bien que si hay una persona en la que Hyoga confía, esa persona es él. Pero es como si eso hubiera cambiado, hoy, hay un muro de silencio entre los dos.
También Saori se ha acercado, diciéndole que ella trataría de arreglar cualquier problema que tenga. Pero el silencio de Hyoga es impenetrable. La diosa hace de tripas corazón, al ver que el caballero del cisne no va hablar con ella, pero en su sabiduría sabe que no se pueden apresurar las cosas "las flores se abren cuando están listas, no antes" se dice cada que tiene ganas de interrogarlo. Así que cuando ese cisne esté listo cantara lo que tiene atorado en su corazón.
Entendiendo que no hay otra más que esperar, el Dragón Shiryu paraguas en mano, recorre las empapadas calles de Tokio. No ha parado de llover desde la madrugada por lo que las calles ya están anegadas. Sin embargo le es preciso lo que busca y aunque cada tienda que ha visitado se lo ha negado, su preocupación por su rubio cisne es el que lo hace seguir caminando pese a los inconvenientes. Así el empapado dragón entra a su décima tienda de hierbas chinas y por fin sus ojos se pueden alegrar al encontrar lo que tanto ha buscado con ahínco.
-¿Lo encontraste? –Le pregunta Seiya, apenas Shiryu pone un pie en casa.
-Sí. –Contesta triunfante el dragón, hubiera sido capaz de irse nadando a China con tal de conseguir esas hierbas.
Tras ponerse ropa seca, el pegaso y el dragón comienzan su faena en la cocina. El castaño se pone a preparar sándwiches de mermelada, cajeta y miel, mientras el pelinegro comienza a hacer la infusión de hierbas. Es un remedio chino para el insomnio, que le enseñó el anciano maestro. Cada que iba a enfrentar una batalla, el caballero del dragón se prepara su té para dormir, no importaba lo agobiante que fuera la lucha que iba a entablar el día siguiente, ni lo muy preocupado que estuviera por ello, ese té lo mandaba a dormir por varias horas. Por lo que siempre amanecía con la energía que te brinda un buen descanso.
Así que ahora que su querido cisne no puede dormir por lo que sea que aqueje su corazón, al menos puede prepararle este remedio.
Cuando entran a la habitación del cisne lo encuentran, con su biblia entre sus manos, sentado frente a la ventana de su habitación, contemplando la incesante lluvia de ese día, y ni siquiera voltea a ver al dragón que recorrió la inundada ciudad por él. Pero no importa que los ignore. Tienen un plan de acción perfectamente trazado para que coma y duerma como lo necesita.
-Conoces perfectamente las reglas, -Le dice Seiya en tono autoritario. –puedes ser todo lo depresivo que quieras, pero eso no te exime de comer.
Ante aquellas palabras, Hyoga por fin posa sus ojos en ellos. Realmente Seiya y Shiryu serán inflexibles con él. Sobretodo Seiya, siempre ha cargado con él y sus depresiones. Cuando era chico, por la muerte de su madre, después, el inmenso dolor que sintió por Camus e Isaac, y ahora le sale con esto. Su mirada baja y se esconde apenado.
Seiya deja la charola en la cama y abraza a su cisne.
-¡Ay Hyoga! Aunque seas así de tristón y gris yo te amo. Quien te manda tener un cuerpo tan tremendamente sexy. No puedo vivir sin ti.
Seiya esperaba que Hyoga clavara el puño en su cara, todo sonrojado y completamente incomodado por su tonto comentario. Pero la culpa es del rubio, es tan fácil sonrojarlo, que le es imposible no jugarle la travesura. Sin embargo no sucedió, ni siquiera se sonrojo, en su lugar Hyoga lo miró directamente a los ojos.
Seiya sonrió con ternura, ese patito de verdad necesita escuchar que lo aman. ¿Pues qué será lo que le pasó?
-Tú sabes que me bastó con verte para quererte y saber que eres mi hermano para amarte.
Nuevamente Hyoga bajo la mirada, ocultándose completamente tras su fleco. Por lo que les fue imposible saber que expresión puso. Shiryu posó su mano en el hombro tratando de confortarlo y es que le tomó un momento al rubio para poner en orden sus emociones.
Hyoga se acomoda en la alfombra dejando su libro a un lado, y en cuanto Seiya y Shiryu hacen lo mismo toma uno de los sándwiches, también observa el té, sabe perfectamente para que es, pero piensa que lo mejor es darles gusto. Además necesita dormir, pero por más que ha tratado no puede.
-Es muy amargo. –Se quejó Hyoga al darle el primer sorbo.
-No importa tómatelo todo. –Dijo Seiya. A veces tiene que ser firme con este cisne.
-Sí es amargo, -Dijo Shiryu tratando de suavizar las cosas. –Por eso Seiya te hizo los sándwiches de miel.
-Y de cajeta y de mermelada.
Hyoga se tomó todo el té, y comió bastantes sándwiches para que la dulzura le quitara la amargura de la boca. Verlo comer fue una alegría para Seiya y Shiryu, que se la pasaron hablando del clima tan lluvioso, animando a Hyoga a unirse a la conversación aunque este contestó con puros monosílabos.
En cuanto el cisne soltó el primer bostezo, sintieron que podían cantar victoria. De inmediato Seiya se levantó con toda intención de ayudarlo a meterse en su cama. Hyoga se dejó hacer por la voluntad de Seiya, El té es muy efectivo y no tardara en caer profundamente dormido.
Mientras, Shiryu tomó el libro que Hyoga dejó en el suelo, pasando sus dedos por la fina cubierta de pasta dura y grabados dorados. Esta biblia fue un regalo de Saori, y la joven no reparó en gastos ni en el tiempo que invirtió en buscarla. Por lo que es realmente excepcional. Por ello no se parece a la otra biblia que Hyoga tiene, la cual posee una rudimentaria pasta de cartón ya muy maltratada por el uso constante. Además aquella está en ruso y esta está en japonés.
Cualquiera cae rendido ante la exquisitez de esté encuadernado, hasta antes de que Saori se lo regalara a Hyoga, ni Seiya ni él habían tenido la curiosidad por leer la biblia, ahora en cambio, cada que la tienen en sus manos tienen que leer aunque sea un poco, prácticamente es un imán, porque hasta Ikki se ha perdido ojeándolo.
-¿Quieres que te lea algo? –Le pregunta al rubio que ya está bajo las cobijas. Tras verlo asentir le pregunta –¿Algo en especial o cualquier parte?
-Donde está el separador.
-¿No saben cuál es el ayuno que me agrada? Romper las cadenas injustas, desatar las amarras del yugo, dejar libres a los oprimidos y romper toda clase de yugo.
Compartirás tu pan con el hambriento, los pobres sin techo entraran a tu casa, vestirás al que veas desnudo y no volverás la espalda a tu hermano.
Entonces tu luz surgirá como la aurora y tus heridas sanaran rápidamente. Tu recto obrar marchara delante de ti y la gloria de Yavé te seguirá por detrás. Entonces si llamas a Yavé, responderá. Cuando lo llames dirá "Aquí estoy"
Si en tu casa no hay más gente explotada, si apartas el gesto amenazante y las palabras perversas; si das al hambriento lo que deseas para ti y sacias al hombre oprimido, brillara tu luz en las tinieblas, y tu oscuridad se volverá como la claridad del medio día.
Yavé te confortara en cada momento, en los lugares desérticos te saciará. Él rejuvenecerá tus huesos y serás como huerto regado, cual manantial de agua inagotable.
Volverás a edificar sobre las ruinas antiguas y reconstruirás sobre los cimientos del pasado; y todos te llamaran: El que repara sus muros, el que arregla las casas en ruinas. (Isaías 58 6-10)
Shiryu dejo de leer en cuanto notó que Hyoga se había quedado dormido. Les era una alegría verlo descansar. No importa lo que le estuviera pasando, mientras lo tengan cerca lo podrán cuidar.
A la mañana siguiente Seiya entró al cuarto del ruso, llevándole el desayuno, pero en lugar de encontrar al cisne halló a Andromeda, el peliverde tenía en brazos el grueso abrigo que Hyoga usa en Siberia.
Hyoga se había ido otra vez, sin avisarle a ninguno, fue muy cuidadoso de que nadie lo viera.
-Hyoga se sabe cuidar, es muy fuerte. –Comentó Seiya al ver la angustia en los ojos de Shun.
-Eso ya lo sé, pero… eso se lo está llevando poco a poco. Siento que en cualquier momento ya no va a volver.
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Notas de la autora
Las flores se abren cuando están listas no antes, es un dialogo que escuche en "Liga de la justicia Ilimitada". Es muy acertado pues cuantas veces algo o alguien nos desespera y queremos hablen de lo que les pasa o ya tengan el valor de enfrentar el problema.
Contestando comentarios desde hace varios capítulos Hyoga me está viendo feo porque todas lo regañan en este fic. Claro les causa pena que sufra tanto pero lo regañan por inactivo, crédulo, zonzo, etc, etc, pero las flores se abren cuando están listas y no antes XD, tendrás que esperar para que te dé el micrófono. Así que estén al pendiente del capítulo 14 donde Hyoga va a revelar que pasa por su cabeza.
Ahora Adrik responderá a algunos comentarios:
-Querida Alyshaluz Que bueno que me apoyes, les are sentir a todos mi venganza. Muajajajajajajajaja. Smily, no me compares con ese pollo, yo quiero a mi hermano y lo quiero conmigo, soy egoísta, no lo quiero compartir, yo no llegue para después desaparecerme. Sakura, es mejor tener pelos de elote que pelos de pasto. Además si hay alguien zonzo ese es Shun por andar saliendo con June.
-¡Oye! –Se queja Shun.
-Pregúntale a ella y me dará la razón. Es zonzo salir con June.
-Intrepid Q gracias por apoyar al fic. Gracias por entender que estoy un poco deschavetado por los traumas de la infancia.
-Deschavetado es poco. –Pone en evidencia Ikki.
-Asalea, la autora también está algo mal de la cabeza, mira que sus favoritos son los bronces en especial Hyoga y Seiya, habiendo tanto caballero dorado y se inclina por Seiya, eso si es tener malos gustos, pero aquí me tocó vivir. En fin, va a echar un vistazo al fic que le recomiendas. Delian, soy malo muajajajajaja
-Mimbi sin comentarios de mi parte.
Querida Mimbi, a mí me gusta más que Kido sea el padre de todos los huérfanos, porque siento que es la base de las personalidad de Hyoga en el manga, Hyoga lo sabe desde niño y no siente odio por Kido. El único momento que habla de él lo reconoce como su padre. Guarda el secreto y no lo hubiera revelado jamás, no porque le avergonzara sino por no causar dolor a Seiya y los demás. Sin Kido como su padre no hay una razón para que Hyoga se una al grupo de Seiya, pues de los 5 es el más desapegado de Atena, enfrentó a los caballeros dorados por sus hermanos, tan es así que se lo dice a Milo, en esos bellos discursos que se echó en su casa y donde revela que está luchando porque ellos logren su objetivo. Hasta cuando Camus lo derrota en Libra, el último pensamiento de Hyoga va dirigido a un recuerdo de su madre hablándole de su padre. Y son escenas maravillosas que me frustran por no estar en el anime.
Y creo que también el proceder de Ikki no se entiende sin la sangre de Mitsumasa corriendo por sus venas, pues no fue por Atena, ni por su causa, y mucho menos como guerrero que defiende la justicia, que llegó a salvar al herido Seiya cuando se lanzó al barranco con Saori en brazos. Fue porque Seiya es su hermano pues no había tenido tiempo de formar lazos de amistad. Para eso tendría que convivir con ellos y sabemos que eso va más allá de sus capacidades.
El odio de Ikki sólo se entiende por Mitsumasa Kido pues no hay otra razón por la que hubiera querido matar a Shun. Pues nunca culpó a Shun por haber cambiado de lugares.
Recomendando fics, unos de mis ultra mega favoritos son "Notas de un piano" "El regreso" "Como siempre" de Natharell. La primera autora de la que me enamore que fue inspiración para publicar mis propios fics y ojala algún día llegue a tener un fic tan bueno como esos. "Como siempre" se me hace la cumbre de la perfección en cuanto al cisnecito. Ese si es Hyoga.