10º Cap. – El cómplice
Después del encuentro inesperado con Serika, los tres llegan al cine. Sólo hay dos películas: una de amor y la otra de comedia.
- ¡La de amor, la de amor! – insistió Serika.
- ¿Qué hacemos? ¿Cuál quieres ver, Sato-san?
- Pues…me da igual. Vamos a ver entonces la de amor.
Compraron las entradas y buscaron asiento en la sala. Estaba prácticamente vacía. Se pusieron en tres asientos de delante. Serika insistió en ponerse al lado de Takagi y Sato se puso al otro lado.
Comenzó la película. Era el típico drama romántico de la chica enamorada de un soldado que debe partir a la guerra. Serika estaba atenta a la película y de vez en cuando decía algo sobre ésta o insultaba al soldado.
Sin embargo, tanto Takagi como Sato se aburrían. La película no les llamaba para nada la atención. Ambos, además, tenían la cabeza en otro sitio. Pensaban el uno en el otro. En cómo habría sido su cita si no hubiera irrumpido Serika y en sus posibles avances.
Al final, Sato se decidió a salir para despejarse un poco.
- Takagi-kun, voy a comprar unas bebidas. Quédate aquí con Serika.
- No, no. Mejor te acompaño. Yo también quería salir un rato. No se dará apenas cuenta con lo concentrada que está en la película.
Salieron los dos del cine, en principio en busca de una máquina de refrescos.
- Takagi-kun, para serte sincera, me estaba aburriendo. Esa película no es nada emocionante.
- Jajaja. Yo también.
Sato se quedó mirando la carita que se le había quedado a Takagi después de sonreír y pensó que era adorable. Quizá ahora era el momento de explicarle sus sentimientos.
Parece que ambos pensaron lo mismo al mismo tiempo porque ambos dijeron el nombre del otro al unísono. Después se rieron.
- Primero tú, Sato.
- Vaya…Bueno, a ver…como empiezo…
Sato se comenzó a sonrojar y las palabras no le salían.
Me parece que no seré capaz de decirlo. ¿Por qué me cuesta tanto decírselo?
- Dime, te escucho.
- Jeje. Pues…
Sato paró de hablar y respiró hondo.
- Me temo que me estoy enamorando de ti.
Cuando terminó la frase, que le costó unos 5 minutos hasta que la dijo, se sonrojó a más no poder y agachó la cabeza así que no vio la cara de Takagi.
Él estaba bastante sorprendido y rojo.
Con timidez y suavidad Takagi le levantó la barbilla con los dedos y le miró a los ojos y se sonrojó.
Es preciosa…Pero ¿qué estoy haciendo? Ya no controlo mis movimientos…
Sato le miró y se sonrojó aún más. Lenta y tímidamente Takagi acercó su cara a la de ella y le dio un tierno beso.
Cuando sus rostros se separaron, Sato le miró sorprendida. Estaba preguntándose por el motivo de aquel beso tan repentino. Siendo sincera, le había gustado.
Takagi, de repente fue consciente de lo que había hecho, se puso muy rojo y comenzó a excusarse y hablar como pudo…
- Esto…siento haber sido tan brusco…la verdad es que yo también estoy enamorándome de ti.
- ¿Probamos suerte? ¿Salimos juntos? Creo que podría salir muy bien…
- ¡Estoy de acuerdo! Yo también tengo buenas vibraciones.
Ambos se miraron y se sonrieron dulcemente. Tímidamente Takagi buscó la mano de Sato. Se cogieron de la mano y volvieron hacia el cine. En la salida ya les estaba esperando Serika, agitando enérgicamente la mano. Pareció sorprendida al verles.
- Jo, habéis tardado mucho. ¿Qué estabais haciendo?
- Nos hemos entretenido. Lo sentimos. Nosotros vamos a cenar fuera, si quieres puedes ir a casa. Volveré después de cenar, ¿de acuerdo?
- ¿No puedo ir con vosotros?
Sato le lanzó una mirada fulminante. Eso quería decir que no.
Finalmente, Serika se fue de la vista de los dos pero siguió espiándolos. Notó que estaban más cercanos los dos. ¿Qué habría pasado mientras ella les esperaba?
Entonces una silueta se le acercó a la chica por detrás. Serika se asustó cuando una mano se puso en su hombro.
- Jaja, no te asustes.
- ¿? ¿Quién es usted?
- Ah, lo siento. Olvidaba presentarme. Soy Shiratori, compañero de trabajo de Takagi-kun y Sato-san. He visto que hasta hace un rato estabas con ellos.
- ¿También está enamorado de Sato-san?
- Sí, raro es quien no lo esté en nuestro cuartel. Bueno, al grano. He visto que conoces a Takagi-kun desde hace tiempo y que tenéis una relación cercana. Creo que podríamos aliarnos, por los intereses comunes. Yo quiero que Sato-san sea mi prometida y tú puedes conseguir a Takagi-kun. ¿Qué te parece?
- ¡Genial! Trato hecho.
Así se cerró el trato entre Serika y Shiratori por conseguir el amor de Takagi y Sato, respectivamente. Takagi y Sato, ajenos a lo que se cuece alrededor, están felices por la nueva relación que han comenzado.
¿Podrán Serika y Shiratori romper ese lazo que se acaba de formar entre la pareja? ¿Sobrevivirá su amor?
Lo sabréis en el próximo capítulo.
Fin capítulo 10.
¡Hola a todos los lectores de este fanfic! Como siempre, me disculpo por la larga demora en escribir el siguiente capítulo (esta ha sido bastante larga) pero la verdad es que la universidad me ha absorbido más de lo que pensaba y después empecé a trabajar así que apenas he tenido tiempo para escribir. La verdad es que pensaba poner éste como capítulo final pero he desistido porque creo que todavía puedo añadir alguna cosa más. Probablemente no haya más que uno o dos capítulos más para finalizar el fanfic y, después, me estoy planteando hacer una especie de epílogo. Ya veremos. De todas formas, la idea es acabar este fanfic este año, por fin (que ya toca). Mil disculpas a los seguidores de este fic, de verdad. Pero seguro que lo acabo.
Bueno, en este capítulo, por fin comienza la relación entre Takagi y Sato. Creo que fue un poco precipitada pero creo que ya tocaba entrar en acción. ¿Os ha gustado este capítulo?
Pues nada, gracias por el apoyo y seguid hasta el final. Hasta la próxima.
