Ruta Musical

Por Kary

Capitulo IV

Every heart

Kaoru parpadeó varias veces para que sus ojos se acostumbraran a la fuerte luz artificial que había en la habitación a la que había entrado; después de pasar tantas horas bajo la luz del sol y luego bajo la oscuridad de la noche le costó un poco pero lentamente las imágenes raras comenzaron a tomar forma.

Era una habitación pequeña y muy iluminada, con paredes blancas y algunos asientos que a Kaoru le recordaron a la sala de espera del hospital. Había varias cabinas con mostradores de vidrio donde estaban varias personas atendiendo a otros aspirantes como ella.

De las veinte cabinas sólo una estaba vacía y en ella estaba una mujer de ojos castaños y cabello negro que se veía cansada, a su izquierda había una puerta cerrada en la que entró el muchacho que había estado en frente de Tsubame, aunque ella ya no estaba.

- Siguiente – dijo la mujer y Kaoru se apresuró hasta ella apoyándose un poco en el mostrador – Por favor el carnet- pidió y Kaoru le entregó su carnet sintiendo que la guitarra en su espalda le estorbaba. La muchacha escribió algo en la computadora que tenía en frente – Nombre completo por favor- pidió.

- Kaoru Hayase Kamiya- dijo tiesamente Kaoru, la muchacha asintió escribiendo algo más en la computadora, luego le pegó un adhesivo verde a su carnet y se lo entregó.

- Por favor entre por la siguiente puerta y espere instrucciones- le dijo la muchacha amablemente.

- Arigatou- Kaoru agradeció y se acercó a la puerta abriéndola y entrando.

Era una habitación muy larga que tenía muchos cubículos pequeños unos frente a otros. Kaoru se sentó en una de las sillas que estaba vacía junto a otras veinte personas que también estaban esperando alguna indicación.

- Buenas noches – dijo un hombre alto y de ojos azules con el cabello castaño, tenía en sus manos una carpeta y varios bolígrafos en sus bolsillos. Al contrario de todo el mundo parecía fresco y muy despierto – Esta es la primera audición que presentarán ésta noche. Cada uno de estos cubículos tiene un micrófono que está directamente conectado con un sincronizador de sonido que evaluará sus voces parcialmente, es decir, no se emocionen mucho si pasan esta prueba porque no quiere decir nada esencial, ni que son buenos- el hombre sonrió como si dijese algo muy dulce y amable - La pantalla que tendrán al frente les indicará, luego de una señal cuando tienen que comenzar a cantar las notas y en que tono lo harán. Al finalizar, la máquina les entregará un comprobante de color rojo si fueron aceptados y de color azul si no lo fueron. Los que sean aceptados por favor pasen por la puerta negra que está al final del pasillo y guarden su comprobante, la puerta negra y no la puerta azul por favor. Los que no sean aceptados salgan por la puerta que está a mi derecha y dejen de soñar con ser artistas- el hombre volvió a sonreír y Kaoru pensó que tanta sinceridad apagaba un poco los ánimos.

Con un suspiro Kaoru entró en el cubículo que el hombre le indicó y miró expectante la pantalla negra mientras amoldaba el micrófono para su altura. Volvió a suspirar cansadamente, no había comenzado y ya quería que terminara.

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Cinco minutos después Kaoru pasó por la puerta negra que estaba al final del pasillo agarrando firmemente el papel rojo, casi hasta el punto de arrugarlo por completo. Con la suerte que tenía últimamente… tal vez terminaría tirándolo por algún lugar antes de que se lo pidieran.

La segunda prueba no fue tan fácil como Kaoru pensó en un principio. Cuando entró se consiguió con una habitación grande en la que había tres personas, una mujer con el cabello pintado de muchos colores, un hombre con un bigote gracioso y una mujer bastante mayor. Todos tenían carpetas negras en las que anotaban cosas constantemente.

La audición consistía en un simple y burdo karaoke, sólo que las canciones no eran conocidas y los participantes tenían que encontrar la musicalidad por ellos mismo. Al principio Kaoru se perdió pero terminó pasando alegremente por la tercera puerta tras superar la prueba con éxito.

Allí sintió como si entrará en un mundo diferente, era una habitación pequeña y llena de cámaras algo viejas, había algunos anuncios publicitarios amontonados en las esquinas y varios asientos de plástico que resaltaban por la luz blanca del lugar.

Kaoru esperó pacientemente parada mientras dejaba la guitarra a un lado, ésta no le había servido de nada y ya le estaba provocando dolor de espalda. De las veinte personas que llegaron con Kaoru a la primera prueba, únicamente cinco entraron con ella a la tercera y a pesar de que estas habían sido relativamente cortas, ya había pasado casi una hora y media entre espera y espera.

- Buenas noches- saludó una mujer entrando por una puerta que estaba cerrada. Era muy hermosa. Tenía el cabello castaño y rizado que le llegaba hasta el final de la espalda, sus ojos era grandes y verdes como aceitunas y tenía una piel pálida y cremosa. Llevaba puesta una camisa de botones blanca y una falda tres cuartos negra con unos zapatos de tacón alto, también negros. En sus manos llevaba una carpeta negra y alrededor de su oreja un apuntador pequeño que tenía un micrófono. Ella dijo algo suavemente y luego aparto el micrófono de su boca. Les sonrió.

- Mi nombre es Magdalia Amakusa y soy la asistente de producción de esta audición- dijo ella suavemente – Ustedes cinco han llegado hasta aquí, eso significa que son muy buenos en lo que hacen y tienen la posibilidad de ir aún más allá. Esta puerta los conducirá hacia su última prueba que será la decisiva, allí se encuentra un jurado especial que está conformado por personalidades importantes y conocidas, no solo por manejarse en éste medio sino también por sus grandes trayectorias.

Bien ahora los iré llamando uno a uno, solo tienen que entrar por está puerta y cantar la canción que escogieron. Los resultados no serán dados hasta mañana por la noche vía televisiva, los ganadores serán llamados por el personal para arreglar el papeleo – ella volvió a sonreír amablemente – Mucha suerte- dijo dándose media vuelta pero pareció acordarse de algo porque volvió a hablarles mientras acomodaba su micrófono y su apuntador – Oh lo olvidé. No pueden utilizar ningún tipo de pista ni de instrumento musical-

- ¿A capella?- preguntó una muchacha de ojos claros y figura corpulenta que estaba cerca de Kaoru.

- Claro- respondió la castaña y con una sonrisa desapareció por la puerta.

Kaoru suspiró cansadamente, tenía hambre y sueño y quería irse a casa… ¡Pero primero tenía que ganar ésta audición!

- Maiku Iki- dijo de ningún lugar la voz de la mujer llamada Magdalia. Un pelirrojo pequeño de no más de dieciséis años tragó ruidosamente y entre los saludos de sus otros cuatro compañeros atravesó la puerta.

-'Respira Kaoru'- se dijo la pelinegra cerrando los ojos y relajando los músculos cuando comenzó a formársele un hoyo en el estómago – 'Inhala… exhala… Todo va a estar bien… todo va a estar bien… Eres buena ¿verdad? Si no lo fueras no estarías aquí. ¿Por qué Otou-san no me ha llamado? ¡Kaoru baka! ¡No es momento de pensar eso! Inhala… exhala… No voy a poder utilizar mi guitarra, ¡ayy pobre de mí! ¡¿Por qué Misao siempre me convence de hacer este tipo de cosas?! ¡Voy a matarla! ¿Qué pensaría Ryoga si gano? ¿Y si pierdo? Hmm… el color de esta pared es horrible ¿Quién habrá decorado esta habitación? Deberían quitarle la licencia porque es un gr…'-

- ¡¡Hayase-san!!-

- ¡¿Qué?!- preguntó en un grito malhumorado.

- Es la segunda vez que la llaman- le dijo tranquilamente la muchacha de ojos claros, sin inmutarse por el grito de la pelinegra.

- Uh… - murmuró estúpidamente Kaoru sin entender como había pasado tan rápido el tiempo.

- ¿Cómo hizo para llegar hasta aquí? – preguntó la muchacha a nadie en especial mientras rodaba los ojos. Agarró a Kaoru por un brazo (no muy gentilmente), le dio su guitarra y la empujó por la puerta.

Kaoru se tambaleó aún perdida de pensamiento.

- ¿Tú eres Kaoru Hayase?- preguntó Magdalia acercándose apresuradamente, Kaoru asintió – Que bueno, creí que me había confundido, vamos que ahora estamos retrazados- Ella comenzó a hablar por el micrófono mientras Kaoru la siguió por el estrecho pasillo, era corto y angosto y ella podía ver la puerta que parecía gritarle cruelmente cosas que no entendía.

- '¡¡Kami-sama!! ¡No estoy lista, no, no, no! ¿Qué voy a cantar? ¡¿Qué voy a hacer?! ¡¡No quiero, no quiero!!' –

De repente el estómago de Kaoru comenzó a sentirse cómico y la cabeza comenzó a palpitarle.

- Muy bien Hayase-san, ahora solo entre. Puede dejarme su guitarra y yo se la entregaré cuando salga- dijo Magdalia distraídamente mientras anotaba algo en su carpeta.

Kaoru quiso retroceder pero de repente estaba dentro de una nueva habitación mucho más grande.

Era una especie de teatro pequeño y de paredes azules, quizá utilizado para convenciones no muy importantes. Era muy iluminado y al estar parada allí Kaoru se sintió de repente muy vertiginosa y con náuseas.

- Oyasumi ka, Kaoru Hayase puedes empezar- dijo la voz de una mujer y Kaoru la vio sintiendo el corazón correrle a mil por hora.

Enfrente de ella, sentados en las butacas rojas estaban cinco personas viéndola fijamente. De las cinco Kaoru solo conocía a tres. La primera era la mujer que había visto por la televisión aquella tarde en la tienda de electrodomésticos junto a Misao.

Tenía el cabello impecablemente liso, largo y negro noche. Su piel era pálida pero estaba exquisitamente maquillada con sombra lila y rubor. Sus ojos pequeños y afilados eran de un color almendrado, y sus labios llevaban un color rosado casi natural. Su elegancia le recordó al instante su nombre a Kaoru. Megumi Takani la miró fijamente.

La otra persona que reconoció Kaoru entre el jurado fue a Kanryuu Takeda.

Él era un reconocido productor que se dedicaba principalmente a la producción de telenovelas. Kaoru lo recordó porque hacía un par de años había sido acusado de fraude, explotación y malversación de bienes ajenos. Había sido un gran escándalo a nivel nacional pero finalmente fue declarado inocente y nadie volvió a hablar de aquél episodio.

Tenía un rostro alargado y unos ojos finos, un cabello color de arena y estaba vestido con traje y corbata.

Al otro hombre ella lo conocía simplemente porque había quedado grabado en su mente.

Kenshin Himura la reconoció también.

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- 'Creo que me equivoqué de puerta' pensó Misao mordiéndose una uña nerviosamente mientras miraba a su alrededor. Había seguido bien las instrucciones. Había pasado la primera prueba, para eso tenía el papelito rojo que lo comprobaba. Y había entrado por la puerta correcta al final del pasillo, la puerta azul había dicho aquél hombre ¿verdad? La puerta azul era la correcta y la negra la incorrecta ¿Verdad? Ella no estaba equivocada… ni confundida…ni perdida…

Bueno. Tal vez un poquito nada más.

Misao se arrodilló de golpe llevándose las manos a la cabeza y golpeándosela mientras se gritaba por su propia estupidez.

- ¡¡Misao baka!! ¡¡BAKA!! ¡¡BAKA!! ¡¡BAKAAAA!!- gritó cerrando los ojos tratando de pensar con claridad. Pero no había ninguna.

Este edificio era enorme… pasaría días para encontrar la salida y se moriría de hambre y de frío, perdería su oportunidad de ganar la audición y Kaoru la perdería también porque estaría muy ocupada organizando brigadas de búsqueda con la policía secreta de su padre. Y pasarían días, semanas y años y ella estaría todavía buscando la salida mientras se alimentaba de hojas de papel y ratas. Y su pobre madre sería condenada a vivir por siempre con el idiota de su hermano que nunca se casaría ni tendría hijos ¡¡Ella nunca se casaría por que iba a morirse encerrada!! Y todos sus esfuerzos estudiando y ensayando estarían perdidos porque si algún día salía ya estaría declarada muerta por el gobier…

Alguien carraspeó fuertemente. Tal vez no se moriría al final…

Misao levantó la vista y se encontró con unas piernas largas en unos pantalones formales negros, subió la vista más y vio un torso bien formado envuelto en una camisa azul noche de botones. Subió la cabeza aún más y si no fuera por lo que vio hubiese gritado de dolor al tener la cabeza en esa posición.

- ¿Qué está haciendo?- preguntó el hombre que tenía parado enfrente con una voz seca y fría.

Misao no respondió. Estaba muy ocupada viendo maravillada a aquél hombre muchísimo más alto que ella desde la posición en la que se encontraba. Era pálido y de finos ojos azules como el cielo, tenía un rostro elegante y un poco alargado, unos labios finos y un cabello corto y negro azabache.

Él dijo algo nuevamente pero Misao parpadeó sin entender. De repente ella captó que no era nada sexy una muchacha en cuclillas, despeinada, sucia y murmurando locuras. Se paró de golpe y mostró una enorme sonrisa luminosa. Aún parada el hombre era tres cabezas más alto que ella.

- Gomen nasai. Mi nombre es Misao Makimachi – dijo Misao sonriendo tontamente – Estoy haciendo una audición pero creo que me equivoqué de puerta y me perdí-

El hombre alzó una ceja – Sígame por favor –

- Arigatou gozaimashita… - dijo Misao haciendo una pausa intencional, tal vez así él le diría su nombre.

- Aoshi Shinomori – dijo secamente el hombre dándose la vuelta y caminando. Misao celebró alegremente hacía sus adentros, él no parecía ser mayor de veinticinco años.

- Muchas gracias de nuevo Aoshi-sama- dijo Misao alegremente alcanzándolo y caminando a su lado.

Al final… tal vez no había sido tan malo equivocarse de puerta.

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Kaoru mordió su labio inferior nerviosamente una y otra vez sintiéndose tonta y fuera de lugar y muy, MUY frustrada.

- '¡¡Kami-sama es él, es él!! Y es parte del jurado y… ¡Oh Kami-sama! ¡Yo lo golpeé y le grité y le dije…! ¡Genial Kaoru puedes empezar a reunir para el pasaje a Hiroshima! ¡¡Tonta!! ¡¡Baka!! ¡Puedes olvidarte de todo ahora! ¡¿Por qué no te das media vuelta de una vez y omites la vergüenza?! ¡¡Kami-sama ¿Por qué todo me sale mal?!! No puedo creer la suerte que ten…'

- ¿Pasa algo malo Hayase-san?- preguntó la única otra mujer en el jurado. Tenía el cabello alborotado de un color castaño oscuro, era largo pero lo utilizaba en un lazo extraño con un adorno verde sobre su cabeza, así que se veía mucho más corto. Sus ojos eran de un castaño oscuro e irradiaban astucia y malhumor mezclado con cansancio.

Kaoru negó con la cabeza evitando mirar al pelirrojo mientras tragaba pesadamente al pensar en él.

- Entonces comienza a cantar jovencita, no tenemos toda la noche para ti- dijo otro hombre que estaba sentado al lado de Megumi Takani. Kaoru tampoco supo quien era, pero al verlo un escalofrío le recorrió la espina. Tenía una piel morena como si se hubiese quemado bajo el sol por muchas horas y muchos días, y un par de ojos rojos que la miraron escrutadora y malignamente.

Kaoru asintió apenada y se acercó al micrófono que estaba en el centro de escenario, lo sacó de su base porque así sería más fácil, respiró hondo… una vez… dos veces…

- 'Vamos Kaoru, tú puedes. Recuerda no puedes volver a casa sin nada. Este hombre no va ha hacer nada malo contra ti sólo por un pequeño y minúsculo percance ¿verdad? Ahora canta… canta… ¿Qué iba a cantar? ¡¿Qué iba a cantar?!'

- ¿Hayase-san?- preguntó nuevamente la mujer de cabello castaño golpeando molestamente su bolígrafo contra las hojas que había en la carpeta.

- Hai, Hai – dijo Kaoru respirando nuevamente para recuperar la calma –'Vamos Kaoru. Recuerda quien eres. Eres Kaoru Hayase Kamiya, la hija de Hajime Hayase y no te puedes rendir tan fácilmente. Eso sería algo que el lobo de Mibu jamás te perdonaría' Kaoru sonrió sintiéndose más confiada y decidida 'Voy a demostrarle al oh-gran-señor-sabelotodo que esta vez no tiene la razón'

- ¿Qué vas a cantar?- preguntó la mujer de cabello castaño.

- Every Heart de BoA- dijo Kaoru casi con timidez, cinco pares de ojos se volvieron a ella mirándola fijamente.

Kaoru carraspeó, respiró, cerró los ojos, suspiró e hizo lo que mejor sabía hacer. Cantar.

Su voz salió de sus labios suave y delicadamente, como una seda impecable e invisible que rodeó cada rincón y cada objeto a su alrededor. El recuerdo del ritmo de la canción hizo eco en su realidad y todo se fusionó.

Ikutsu namida o nagashitara

Every Heart sunao ni nareru darou

Dare ni omoi wo tsutaetara

Every Heart kokoro mitasareru no darou

Era divino poder internarse dentro del mundo que las letras y la música creaban, porque la llevaban a un lugar en donde todos sus problemas desaparecían. Sólo existía ella y la sensación cálida que se creaba en su pecho. Era sentir el vibrar de su garganta cuando llegaba a una nota alta en perfecta afinación y equilibrio, y era el poder terminar en una nota baja sin sonar mal.

Ahora Kaoru se sentía mejor de lo que se había sentido en días.

Nagai nagai yoru ni obieteita

Tooi hoshi ni inotteta

Meguru meguru toki no naka de

Bokutachi wa ai o sagashiteiru

Tsuyoku tsuyoku naritai kara

Kyou mo takai sora miageteiru

Los nervios terminaron de desaparecer de su estómago y Kaoru entendió que no importaba si no resultaba elegida, que en el fondo cantaba sólo porque le gustaba y lo seguiría haciendo así le dijesen que tenía la voz más desafinada y horrible del planeta.

Donna egao ni deaetara

Every Heart yume ni fumidaseru no

Hito wa kanashimi no mukou ni

Every Heart shiawase ukabete nemuru

Itsuka itsuka subete no tamashii ga

Yasuraka ni nareru you ni

Meguru meguru toki no naka de

Bokutachi wa ikite nanika wo shiru

Toki ni warai sukoshi naite

Kyou mo mata arukitsuzukete yuku

Osanai kioku no katasumi ni

Atataka na basho ga aru so sweeet

Hoshi tachi ga hanasu mirai wa

Itsumo kagayaite ita so shine

Kaoru respiró suavemente aún sin abrir sus ojos, así era más cómodo. Abrió la boca para cantar la última estrofa pero la voz de la mujer castaña no se lo permitió.

- ¿Perdón?- preguntó Kaoru medio desubicada y confundida. Sabía que le habían hablado pero no había escuchado con claridad. Odiaba que la interrumpieran cuando estaba inspirada.

- Dije que es suficiente- la mujer de cabello castaño la miró mientras anotaba algo en su carpeta.

- Oh- dijo Kaoru tontamente acomodando el micrófono y alejándose un poco sin saber que hacer. Magdalia estaba cerca de un camarógrafo (el cual Kaoru acababa de notar) pero hablaba como en otro mundo por medio de su micrófono-apuntador.

- Hayase-san, tiene una voz muy armónica- dijo la voz suave y tranquila del pelirrojo y a Kaoru el estómago (¿o fue el corazón?) le dio un vuelco de 180º.

- Yo diría más bien sensual- dijo Kanryuu Takeda con una mueca extraña.

- En todo caso, muchacha, eres material de calidad- le dijo el hombre de ojos rojos cruzando los brazos. Kaoru se sintió como un objeto sin vida ni opinión.

- Tienes buena voz- dijo Megumi Takani moviendo su cabeza y apartando el cabello de su rostro – Espera los resultados mañana-

Kaoru agradeció inclinándose mientras una sonrisa cruzó sus labios, Magdalia le hizo una seña y ella la siguió atravesando una puerta distinta a la anterior.

Lo último que Kaoru vio fue al pelirrojo que le dedicó una sonrisa amable.

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Misao entró alegre y confiadamente a su última prueba preguntándose cómo le habría ido a Kaoru.

Como se había perdido había quedado rezagada dos grupos detrás del suyo y tuvo que volver a realizar la primera prueba por 'seguridad', era estúpido en su opinión porque si pasaba la segunda prueba, era obvio que había pasado la primera.

Aoshi Shinomori la había llevado con una mujer de ojos verdes como aceitunas que era la asistente de producción. Magdalia Amakusa la había ayudado y había pedido disculpas en su nombre a todos los jueces de las pruebas, Misao había pasado todo el tiempo agradeciéndole a la joven mujer.

Aoshi por su parte la había dejado con ella y se había ido con una seca despedida. Ese hombre era raro. No hablaba prácticamente nada y cuando lo hacía era corto y conciso. Ella le había sacado cinco palabras como mucho y eso no le decía nada de nada de él. Y era una gran perdida porque era un hombre muy atractivo y misterioso.

Misao se preguntó cuánto más atractivo se vería si sonriera.

- Oyasumi nasai Makimachi-san – dijo un hombre que ella reconoció como Makoto Shishio. Era el dueño de la Industria más grande e importante de Importación de Petróleo en el Japón. Que hacía allí era un misterio para Misao.

Makoto Shishio la escrutó con sus ojos carmesíes y cruzó sus brazos haciéndole una seña al camarógrafo que comenzó a grabar con su cámara profesional.

- Oyasumi- dijo Misao inclinándose suavemente y viendo de reojo al resto del jurado y al camarógrafo.

Como había esperado, Megumi Takani estaba allí sentada en una butaca roja tomando agua como si fuera un arte. Misao al verla se preguntó cómo es que aún no se había casado.

También estaba la famosa cantautora Misanagi Sanada. Kanryuu Takeda parecía ligeramente dormido y aburrido.

Un hombre pelirrojo, que llevaba una cicatriz en la mejilla izquierda le trajo un viejo recuerdo a Misao pero ella no pudo identificarlo. Si supiera su nombre tal vez…

Si, bueno, ella leía mucha farándula. A veces…

- Ya puedes empezar - le dijo seca pero amablemente Megumi y Misao asintió alegremente sin muchos nervios… después de todo ella sabía lo que hacía - ¿Qué vas a cantar?- preguntó la mujer anotando algo.

- Ame de Moeko Matsushita- dijo Misao alegremente en el micrófono, cambiando su opción rápidamente. Esa canción era más apropiada en este momento.

- Puedes empezar- dijo el pelirrojo suavemente, casi con cansancio de repetir lo mismo cien mil veces en un día.

Misao sonrió, cerró lo ojos y repasó mentalmente el ritmo que tenía que llevar la canción que iba que cantar. Abrió su boca y su voz salió armoniosa y bonita de sus labios.

Hitotsu hitotsu kiete yuku am…-

¡¡PAST!! ¡¡PUM!! ¡¡PAST!!

- ¡¡Te encontré enana del demonio!! ¡¡Ahora puedes prepararte para morir!!-

El rostro de Misao se puso blanco como una hoja de papel… en realidad esto ella no se lo había esperado…


Nota de la autora:

Hmm si, me tarde mucho lo sé, perooo… no voy a explicarles el porque mis exámenes me asfixian y no me dejan hacer nada más que ahogarme en mi miseria, se aburrirían.

Se que el capitulo estuvo un poco flojo, pero tengo una buena noticia. La próxima semana termino mis parciales y comienzan las vacaciones navideñas, así que tendré tiempo de escribir más. Oh si, siento dejar este capitulo hasta aquí… :P

Misao-20: Hola amiga!! Jaja si las colas son unas de las peores cosas que pueden existir. Y Aoshi… pues… ¿Qué digo? .. Apareció…

Shadirjaja yo pensé lo mismo cuando lo escribí pero hay una pequeña diferencia, está vez Kaoru si lo quiso golpear, matar y mutilar :P

naoko L-K: Pues… concursante no es… ¿dueño? Quizá… ¡¡Gracias!!

Narwen Weasley: ¡¡Gracias!! Espero que te guste este capitulo!!

Mer ¡¡Perdón!! Bueno a Kaoru le fue bien, y Misao está más que confiada…

Demi-san: jaja sigue adulándome…

Megu-chan1: jajaja ¿Reina de la tensión? ¿Yooo? ¡Que va! Si no mira este capitulo :P

kaoru himura: Sip. Mucho romance ¡¡Gracias!!

Kaoru Himura14: Siii. Dime si te gusto el capitulo. ¡¡Gracias!!

Hitokiri Himura 20: No te preocupes, Kenshin va a aparecer más de ahora en adelante.

mikomi shinomori:¡Gracias! ¿Y este también te gusto? Espero que si…

Serenity jajaja si se van a ver MUCHAS veces más ¡Gracias!

Mari::. Jaja gracias!!

maquinita potter: jeje si bueno Kaoru a veces puede ser algo rara :P

Y-Yukiko-Y: jajaja ¿no es genial el suspenso? :P jajaja gracias por notificarme mi error ya lo arreglé, lo que pasó fue que en un principio era un perro y no un gato :P jaja si, aparecerá pronto el pequeño Sano.

KaOrA-FGV-16: jajaja gracias!! Me encanta que te guste, pues yo creo que les irá bien.

Baire¡¡GRACIAS!!

gaby (hyatt: jeje pues ya se vieron, un poquito :P

Dark-Anna-Sujimotto: ya apareció!! Pero pronto habrá más interacción entre ellos :P

Kaoru-Hino: Sip, Habrá mucho kk

Cristy-girl: jeje prometo que de ahora en adelante saldrá más Aoshi y todos los personajes masculinos que tanto amamos :D

Sumire-chan: ¡gracias! Pues si ya cantó después de tanto trauma.

Aquí les pongo la traducción de la canción que cantó Kaoru. Es Every Hear de BoA. Escúchenla es uno de los endings de Inuyasha.

Cada Corazón

Cuantas lágrimas debo llorar…

Cada corazón, ¿será posible convertirlo gentilmente?

Si expreso mis pensamientos a alguien…

Cada corazón, ¿podrá mi corazón estar satisfecho?

En la larga, larga noche tenia miedo,

Así que le recé a una estrella lejana.

En los tiempos que van alrededor y alrededor,

Estamos buscando el amor,

Porque queremos ser más fuertes, fuertes,

Inclusive hoy, alzamos nuestros ojos al gran cielo.

¿Que clase de cara sonriente debo conocer?

Cada corazón, ¿en orden de seguir mi sueño?

Personas, al otro lado de la tristeza…

Cada Corazón, y como en una celda sé feliz.

Siempre, siempre, como si todos los espíritus…

Pudieran volverse tranquilos.

En los tiempos que van alrededor y alrededor,

Vivimos y sabemos ciertas cosas,

A veces sonreímos y lloramos un poco,

Hoy, continuaremos la caminata de nuevo.

En las esquinas de los recuerdos infantiles,

Hay un lugar especial, muy dulce,

Del futuro las estrellas hablan,

Siempre brillando, tanto brillo…

En los tiempos que van alrededor y alrededor,

Estamos buscando el amor,

Porque queremos ser más fuertes, fuertes,

Inclusive hoy, alzamos nuestros ojos al gran cielo.

En los tiempos que van alrededor y alrededor,

Vivimos y sabemos ciertas cosas,

A veces sonreímos y lloramos un poco,

Hoy, continuaremos la caminata de nuevo.

¡¡Gracias por sus mensajes!! Me encanta leerlos y me hacen muy feliz. Espero que me digan que les pareció este capitulo porque de aquí en adelante las cosas comienzan a mejorar. ¡¡GRACIAS!!

Kary

Ja ne