Una corto fanfic Sonamy melodramático que quise hacer hace mucho tiempo, con que lo tengo todo pensado hasta el final. En un principio quería hacerlo one-shot pero como no la tengo completa del todo y ya quería subir algo pues eso, puede que sea dos o tres capítulos en total como mucho, será cortito.

Como te dije antes cariño, te lo dedico a tí ^w^ se lo dedico a mi linda tata Amy Rose FanGirl que quiero un montón como pedacito de cielo y todos los Sonamy fans también.

Ojala les guste

Amanecía de nuevo en los verdosos prados de Mobius. El sol que asomaba tímidamente a través de las altas y onduladas colinas, acariciaba con sus extensos rayos de luz los muros blancos de una pequeña casa en medio de tal explanada. Rojizo carmín es el tejado que cubre sus muros y coronando, como vela en su barco, una rígida y erguida chimenea. Un alargado sendero de tierra fina salía del camino principal serpenteando hasta la puerta de la pequeña construcción, y delante de esta, yacía un cartel de madera ovalado donde se leía con letras redondeadas, haciendo embellecer las palabras, "Casa de Amy Rose".

Amy Rose, una rosada eriza de mirada esmeralda, su piel era de un tono blanquecino pero puro como la nieve virgen. En ese mismo momento se encontraba sentada al borde de su cama con su corto y azulado vestido de noche. Tenía la mirada perdida, cabizbaja, sus tres largos flequillos tapaban su delicado rostro. Se quedó largo rato con un modo pensativo y frustrante. Apoyando sus manos también al borde de la cama finalmente deja soltar un largo suspiro hondo y pesado.

- No puedo más - hace una breve pausa - será mejor que me vaya...

Acto seguido, se levanta, se dirige a su ropero y se viste con su indumentaria característica: un vestido rojizo con un detalle blanco al final de la vestimenta y con el cuello del mismo color, sin mangas; unas botas que complementaban con el vestido, rojas con una línea blanca central en el medio; sus dos guantes blancos con un brazalete dorado en forma de anillo en cada muñeca, y una diadema roja del mismo color de su ropa.

Después de ello, coge su bandolera anaranjada con estampados estrellados color nieve y se la cruza por el hombro. Se acerca a su mesilla de noche, abre el primer cajón y mete su pequeño diario rosado pastel con su pequeño bolígrafo especial, especial para ella, ya que representaba a la persona que ella amaba. La base tubular del bolígrafo era de un color azul cielo clarillo, la parte opuesta al puntero, que se accionaba mediante un pulsador, tenía forma de anillo clavado alrededor del pulsador de su color dorado característico, y en lo alto del pulsador, había una pequeña figura de un erizo azul ultramar con una pose de triunfo y una sonrisa que despedía seguridad y alegría en sí mismo. Y también, enganchado al anillo dorado, salía un pequeño cordel con la silueta de la cabeza del mismo erizo de la figurita. Se queda mirando a ese erizo tan especial para ella como dije antes, ya que ese pequeño puercoespín que representaba esa figurilla, era en realidad el ser que amaba tanto. Sonic es su nombre, es un héroe conocido en todo Mobius, no solo por frustrar los malvados planes de la villanía que se presentaba en su planeta sino también por su gran habilidad incomparable de correr a la velocidad del sonido. "El ser más rápido del mundo" era conocido, puesto que no se veía que nadie más pudiera quitarle tal asombroso y semejante título.

Nuestra protagonista rosada besa la cabecita de la pequeña figurilla del bolígrafo y lo guarda en la bandolera junto a su diario rosa. Se encamina hacia la puerta sin desayunar ni comer nada, abre la puerta y mira detrás suyo, para su mirada en todo el salón extrañando los recuerdos que vivió allí con sus amigos: como Cream que venía habitualmente a su casa y se entretenían jugando o lléndose de compras y se probaban las cosas en su habitación; alguna que otra vez también le visitaba Tails, para probar inventos, pasar el rato con ella y algunas veces preguntaba por Sonic, si se encontraba con ella, pero Amy siempre contestaba lo mismo "No, aquí no está" ¿Cómo iba a estar él en su casa? si apenas iba allí a verla, solo una vez se pasó por su casa y no exactamente para una visita.

FLASHBACK

Amy se encontraba sentada en el sofá viendo una revista de moda y de corazón, pues ella adora el tema del amor, cuando vio a Sonic pasar cerca de su casa. Se levantó y se acercó a la ventana, estab fuera, alrededor de su casa con aires de estar buscando algo. La rosada sale al exterior toda emocionada por ver a su amado erizo cerca de su terreno de vida.

- Hola Sonic - se acerca a él sonriente.

- ¿Mmm? Ah, hola Amy - se da la vuelta mirándola.

- ¿Qué haces aquí? ¿Has venido a visitarme? - pregunta lo último con bastante alegría.

- Err... ehehehe... la verdad es que no... - sonríe nervioso, a lo que Amy cambia a una cara de desilusión - estoy buscando una esmeralda del caos.

- Aaah... pues - con algo de esperanza - si quieres puedo ayudarte a buscar la esme... - no acaba la frase cuando se oye una voz agudilla.

- ¡Sonic! ¡He encontrado la esmeralda! - viene corriendo un pequeño zorrillo amarillento con una gran gema verdosa en su mano.

- ¡Oh, genial Tails! - muestra su sonrisa característica el erizo azul, dando la espalda a Amy. Esta, agacha ña cabeza sin mucho ánimo . gracias por mostrar tu ayuda Amy, pero ya la hemos encontrado - se vuelve de nuevo a ella.

- Bueno... - alza la cabeza otra vez - puedes quedarte al menos a merendar conmigo, estoy haciendo galletas - vuelve a retomar su energía de antes expresándole una agradable sonrisa.

- Ammm... gracias pero Tails y yo tenemos prisa - intenta escaquearse de su invitación.

- Solo será un momento, por favor, quédate - suplica tomándole las manos.

Ese movimiento solo hizo que Sonic se pusiera más nervioso de lo que estaba, solo tenerla cerca de él empezaba a palpitarle rápidamente el corazón.

- Lo siento... pero ahora no puedo quedarme... - aparta poco a poco sus manos de ella.

- Solo por esta vez

- No, no puedo Amy, me tengo que ir - responde agitado y rápidamente se aparta de ella para echar a correr y perderse en la infinita llanura.

- ¡Sonic..! - mira cómo se va.

Tails se acerca por detrás de ella y le pone una mano en su espalda.

- Si quieres se las puedo llevar yo - intenta animarla el pequeño zorrito.

Amy fija su mirada en él y con algo de tristeza.

- Gracias Tails, ahora te las traigo.

Seguramente, va a la cocina, saca las galletas recién hechas del horno, las mete en una pequeña bolsa y se la da a Tails. El pequeño aroma que resplandecía de la bolsa llegó a la naricilla del zorro de dos colas.

- Mmmm~ - cierra los ojos concentrándose en el dulce olor - huelen muy bien.

- Tienen virutas de chocolate, les gustará mucho.

- ¿Puedo? - señalando la bolsa.

- Claro.

El chiquillo sin contenerse tomó una galleta y la probó.

- Mmmm~ - mastica y traga - está deliciosa - sonríe - seguro que a Sonic le gustarán.

- Seguro - cierra los ojos sonriendo como su amigo - a él siempre le gusta todo lo que hago.

Tails asiente levemente.

- Bueno, voy a alcanzar a Sonic - pone en movimiento sus dos colas y se alza un poco - ya nos veremos.

- Está bien, hasta luego Tails.

- Hasta luego.

Se va volando tan rápido como puede en la dirección donde se fue Sonic. La eriza se queda mirando el horizonte con mirada melancólica y deprimida. No había podido ayudar a Sonic, no había podido convencerle para que se quede a merendar, ni si quiera había podido darle las galletas que había hecho ella misma... se fue de ella sin más, como todo el mundo piensa y ella también lo estaba considerando "Huyó de mí". Se le hizo un gran pesar oír esas palabras en su cabeza, bajó la mirada que se le hizo sombría al instante para solo dejarse ver la comisura de sus labios torciéndose lentamente hacia abajo. Una lágrima recorre con debilidad sus finas mejillas, llega a la punta de su barbilla, vacila con unos pequeños movimientos y cae a la hierba fresca del prado. Se da la vuelta, camina con desgana hacia su casa y con mucha delicadeza entra y cierra la puerta.

FIN DEL FLASHBACK

Muchos recuerdos pasaban por su cabeza cuando se quedó mirando el salón. Fiestas, reuniones en grupo, juegos, comidas, meriendas, muchos ratos libres, amigos, sola... Escapa un suspiro pesado de su boca, sola sobretodo se sentía cuando no había nadie, sin contar cuando paraban los numerosos planes de Eggman, en ese sentido claramente no se sentía sola ya que estaba con ellos pero cuando no había problemas a la vista y todo se calmaba, todo se volvía normal pero a ella no le importaba mientras estuviera con sus amigos y con su amado Sonic. Aunque este último no pasaba tanto tiempo con ella como Amy querría, sobretodo a solas. Eso le hacía sentir triste y muy miserable, deseaba mucho estar con él, lo amaba, sentía que el erizo azul era parte de ella, de su vida, de su corazón, le necesitaba para vivir...

Agacha su cabeza tan sombría como la última vez que vio a Sonic y cierra la puerta para no volver más a abrirla.

Espero que les haya gustado lo poco que he hecho hasta ahora.

Dejen reviews si lo leyeron y les gustó please n.n que ya sé que narro fatal pero me gusta su comentarios

Te quiero tatita