¡Hola! Espero que estén bien. Yo estoy feliz de subir un tercer capítulo. Agradecerles de todo corazón a todas esas personas que lean mi fic, pero en especial a UsagiPotter, arelli, Hermione Granger de Potter y Akemi-K. Nada de aquí es mío. Gracias de antemano, espero que lo disfruten...
ERES PARA MÍ.
Capítulo 3. ¡Otra no, por favor!
Esa noche Lily no durmió, pensaba y pensaba que hacer. Sabia que ella no podía llegar y plantarse frente a él y abrirle su corazón, tenia miedo, ella siempre lo había rechazado de fea manera y ahora ella no quería que le pasara lo mismo. Tenia que ser algo especial, original. De repente le llego una gran idea.
La mañana siguiente bajo a desayunar con unas grandes ojeras pero una enorme sonrisa, iba ultimando detalles de su plan que cuando pasó enfrente de él ni siquiera lo volteo a ver. James la vio de reojo, pero sus amigos no disimularon al voltearla a ver, después vieron a su amigo, el cual tenía reflejado en su rostro desilusión. Sirius no pudo más con esta situación, tenia que hacer algo por su amigo, y sabía muy bien que hacer, pero era conciente que él no debía darse cuanta.
Cuando acabaron de desayunar se levantaron para ir a clases. Sirius les dijo que fueran llendo que tenia que hablar con una chica. Sus amigos no le vieron nada de raro, pues se trataba de ni más ni menos del "Casanova" de la escuela. Así que se fueron dejando ahí a su amigo.
Sirius espero a que Lily pasara por su lado, la agarro del brazo por atrás y la hizo girar quedando frente a frente.
-Tenemos que hablar- dijo secamente. No espero contestación, la llevo fuera del comedor y caminaron al aula por un pasillo de los menos transitados, la abordo.
-Se puede que te traes con mi amigo- dijo un con un tono agresivo.
Ella abrió mucho los ojos esmeraldas de la impresión de que este abordara el tema tan bruscamente. Él viendo que no había respuesta volvió a hablar.
-¿Te gusta James o le quieres dar alas para luego ridiculizarlo frente toda la escuela como es tu costumbre?
-Si... no... digo... este...- Lily estaba tan roja como su cabello, estaba muy nerviosa. No sabia que decir, él la intimidaba mucho y más con aquella voz amenazante con la que le estaba hablando.
-Si o no, estás tratando de burlarte de mi- dijo Sirius más furioso.
Lily bajo la mirada, viendo más interesante sus zapatos que al muchacho que tenía frente y asintió lentamente con la cabeza y con voz baja.
-Si, James me gusta, no, no quiero ridiculizarlo- se puso aun más roja como si esto fuera posible, pero ya estaba hecho, ya lo había dicho, y con mucho más valor, clavo sus ojos verdes en los de él y con voz más firme dijo –no quiero que le digas nada por favor, no se que hacer, estoy confundida y no se lo que él sienta por mí.
La cara de Sirius se transformo de una de enojo a una de emoción.
-¡Estás loca o qué! Por supuesto que el sigue queriendo contigo, tienes que ir con él, decirle "James, quiero todo contigo, ¿quieres ser mi novio?" y darle un beso de película.
-No se donde oí eso- se dijo para si misma –no, yo quiero que sea algo especial y tengo una idea, y tu me puedes ayudar- dijo emocionada, con una hermosa sonrisa y un brillo especial en sus ojos verdes esmeralda.
Esa tarde, en un aula vacía, un grupo de muchachos ultimaban detalles para que el plan funcionara a las mil maravillas.
-Bien, ya todos saben lo que tienen que hacer, y la hora a la que deben estar- dijo una pelirroja entre feliz y nerviosa –no se, ¿no creen que sea...?
-No, es muy bonito, es algo que lo va a emocionar mucho- dijo Wendy a su amiga muy emocionada.
-Le va a gustar mucho, ya quiero ver su cara- dijo Remus también emocionado.
-No es por nada, pero después de seis años de desplantes tuyos, se merecía alga muy especial- dijo Sirius contento, pero sin poder olvidar como se ponía su amigo con cada rechazo, en verdad se ponía muy mal.
-Bien, el sábado... Dios, estoy muy nerviosa, bueno... este... ya saben
Sábado, 6:30 p.m.
En el cuarto de los chicos de séptimo, se encontraba James acostado en su cama con la vista perdida apuntando hacia el techo. Analizaba todo lo que había pasado entre él y Lily, no sabia que pensar con todo lo que había pasado esos últimos días, se sentía confundido. Para él, ella significaba mucho, y ella siempre lo había tratado tan mal. Como deseaba poder arrancarse ese sentimiento que lo hacia sentir bien y a la vez tan mal.
En eso entro su Sirius fingiendo seriedad, sentías que en cualquier momento soltaría una gran carcajada, pero sabía que eso podía arruinar todo. Fue hasta la cama de su amigo.
-James, ¿en que estas pensando? O mejor dicho ¿en quien piensas?
-Emm... nada. ¿Qué haces?- pregunto James un poco sorprendido, no se había dado cuenta cuando había entrado al cuarto.
-Yo... nada, ¡Ahh! Mira, ten me dieron esto para ti- le dijo como no dándole mucha importancia, ofreciéndole un sobre.
-¿Qué es?- dijo sin muchos ánimos.
-No se, pero me dijeron que era urgente.
James agarro la nota sin muchas ganas. La abrió y la leyó.
-¿Quién te dio esto?- pregunto curioso.
-¿Qué dice?- pregunto ignorando la pregunta hecha por su amigo.
Hola James:
Te preguntaras quien soy, solo te puedo decirte que pronto lo sabrás. Soy una personita que esta locamente enamorada de ti, por favor ve al salón en desuso del tercer piso.
Atte.
L
-¿Vas a ir?- pregunto Sirius, aguantándose las ganas de reírse y decirle quien era.
-No, creo que no, a de ser una de las chicas del Club de Fans que siempre anda tras de mi, No, gracias.
-Vamos James, no pierdes nada, si quieres yo voy contigo y si se pone pesada te ayudo.
Como no queriendo, se levanto, su amigo ya se iba a ir con él.
-No Sirius, yo voy solo, gracias.
Abandono el cuarto dirigiéndose al lugar de la cita, volvió a leer el recado y se percato de algo.
-L, ¿Quién será L, puede ser Linda o Lizzy o Lulú.
Iba pensando posibles candidatas, cuando llego al aula abrió la puerta, estaba vacía, nadie estaba.
-¿Cómo no lo pensé antes? Es una broma de Sirius- ya se iba cuando es un pupitre cerca de la puerta había un sobre, se dirigió hacia el, lo abrió –debe ser una broma- dijo muy serio.
James:
No es una broma. Sabes, todo entre tu y yo a sido tan raro, tan distinto, ¿y sabes por qué? Porque es especial. Ven al lugar donde por primera vez me pediste salir de las mil veces que lo has hecho.
Atte.
Li
-Dios, no puede ser ella, debo estar soñando, si mal no recuerdo la primera vez que la invite fue a finales de segundo, enfrente de toda la escuela, si es ella debe ser en...
James salio corriendo, en su mente se volvía a revivir esa escena. James se había subido a la mesa enfrente de una niña de cabellos rojos cereza y ojos verdes y gritándole decía que el era su futuro y que la esperaba en el lago en la tarde, y como aquella pelirroja se paraba de su asiento y le comenzaba a gritar que jamás saldría con él y salía corriendo.
Llego al gran comedor casi sin aliento, abrió las grandes puertas con cautela, asomo la cabeza y en la, esa de Gryffindor, en ese mismo lugar estaba un sobre. Se acerco a ella y tomo el sobre, lo abrió lentamente.
James:
No te impacientes por favor, te acuerdas aquel primer beso que me robaste en tercero, ve ahí.
Atte.
Lil
Claro que se acordaba de ese beso, ¿no podía ser? Debían ser sus amigos jugándole una broma, ya se los imaginaba riéndose a carcajadas a sus costillas. Se sentó a analizar todo, estaba cansado tanto física como mentalmente. ¿Y si en verdad era ella? No perdía nada, solo se ganaría unas cuantas burlas de su amigo.
Se levanto decidido, pero no corrió, llego al vestíbulo, se paro, suspiro, se paso la mano inconscientemente para despeinarlo. Siguió su camino, salio a los terrenos del colegio en dirección al lago. Era una vista hermosa, se miraba muy bonito el cielo lleno de estrellas. A su mente acudió ese momento, ella estaba sentada bajo un árbol enfrente del lago mirando el atardecer, él llego, se sentó a su lado, cuando ella le iba a empezar a gritar, la agarro por sorpresa, le dio un baso rápido y salio corriendo como si en ello dependiera su vida, y así era. Sonrió, abajo del mismo árbol había un sobre más.
-Un sobre más y me muero, ¿Qué esta pasando? ¿Dónde esta Lily?- dijo ya desesperado. Agarro el sobre, sacó la nota y la leyó.
James:
No se que más decirte, solo que vengas a ese lugar tan especial, en el cual me dijiste te amo, enfrente de toda la escuela en quinto.
Atte.
Lily.
Espero que les haya gustado este tercer capítulo, el que sigue será el desenlace ¿habrá otra carta? Nooo. ¿Cuál será la sorpresa? Espero que me dejen comentario por favor, pues con ellos me permitirán que mejore.