GUÍA DE CHICAS
CLUB DEL ENTRETENIMIENTO:
-Akaza Akari: Nuestra querida protagonista. Tercer año.
-Yoshikawa Chinatsu: Nuestra linda yandere. Tercer año.
-Segawa Hikari: Cabello marrón ondulado hasta los hombros. Ojos marrón claro. Primer año.
-Aoyama Kokoro: Pelo negro liso hasta un poco más abajo de los hombros. Ojos azules con un tono parecido al del pelo de Himawari. Primer año.
-Nakamura Hitomi: Exmiembro del Club de Música, igual que Hibiki. Se unió al Club del Entretenimiento solo para fastidiar a Nanami. Cabello marrón, un poco más oscuro que Hikari, liso, casi hasta la cintura. Ojos púrpura, similar a Akari. Segundo año.
-Mizuno Shinobu: Cabello rubio, aunque no tan amarillo como el de Kyouko, siendo más anaranjado, aunque sigue predominando el amarillo. Ojos de ese mismo color. Lleva una cola de caballo similar a la de Ayano, aunque llegándole solo a la mitad de su espalda. Es de la misma altura que Chinatsu. Primer año.
-Minami Sora: Cabello azul, más claro que el de Himawari pero más oscuro que el de Nanami. Su peinado es muy similar al de Mikan de To LOVE Ru, pero llevándolo completamente suelto. Segundo año.
CONSEJO ESTUDIANTIL:
-Hideki Nanami: Presidenta del consejo. Cabello azul claro, liso, hasta la cintura. Ojos verde claros. Segundo año.
-Umeki Tsubasa: Vicepresidenta del consejo. Una chica que va a la misma clase que Nanami. Cabello de color como una mezcla entre morado y rosa. Ojos marrón claro. Su tono de piel algo más claro que la media, aunque sin llegar a parecer pálida. Segundo año.
-Hiroki Hotaru: Es amiga de Himawari, Sakurako, Akari y Chinatsu. Sabe que existen Yui, Kyouko, Ayano y Chitose, pero nunca las ha visto. Cabello marrón claro, liso, hasta un palmo más abajo de los hombros. Primer año.
-Miyamoto Yukiko: Amiga de Hotaru, que va a su misma clase. Pelo castaño muy oscuro, casi negro, listo, hasta la mitad de su espalda. Ojos morados. Lleva gafas con los cristales rectangulares y bordes negros. Primer año.
-Sorato Hibiki: Llenó la plaza que quedó libre al destituir a Himawari. Tiene un corte de pelo igual que el de Yui, pero el color de este y el de sus ojos es igual que el de Kyouko. Segundo año.
OTRAS:
-Furutani Himawari: Expresidenta del consejo estudiantil. Fue destituida por Nanami con la aprobación unánime del resto del consejo. Desde entonces es la presidenta del consejo legítimo. Tercer año.
-Ohmuro Sakurako: Al destituir a Himawari, ella debió convertirse en presidenta, pero rechazó el cargo. Fue idea suya crear el consejo legítimo, del cual ella es presidenta suplente. Tercer año.
-Toshinou Kyouko: Fundadora del Club del Entretenimiento y exmiembro de este. Primer año de preparatoria.
-Funami Yui: Exmiembro del Club del Entretenimiento. Primer año de preparatoria.
-Sugiura Ayano: Expresidenta del consejo estudiantil, la anterior a Himawari. Primer año de preparatoria.
-Ikeda Chitose: Exmiembro del consejo estudiantil. Primer año de preparatoria.
Hikari había terminado su almuerzo, y como aún faltaba un rato para que empezaran las clases de la tarde, había decidido ir a ver a Akari.
–Hola, senpais. – Saludó Hikari, ya que, aunque había venido principalmente para ver a Akari, también estaban Chinatsu, Himawari y Sakurako. Y sorprendentemente también Hotaru.
–Hola, Hikari-chan. – Respondieron las demás.
–Buenas, senpai. – Respondió Hotaru por su parte.
–¿Tú también has venido a pasar un rato con las senpais?
Hotaru asintió.
–Ahora que Himawari-chan y yo volvemos a ser amigas, podemos volver a estar las 5 juntas.
Las demás chicas sonrieron al ver a Hotaru tan feliz, y a Hikari le vinieron ganas de abrazarla. Pero de pronto vio algo que desvió totalmente su atención.
–¡Uwo! ¡Akari-senpai, ¿este es el pudin especial de Nanamori edición limitada?! – Exclamó al ver el postre que había traído Akari, que aún no había abierto.
–¿Eh? Ah, sí.
–¡Aaah, qué envidia! – Dijo Hikari. – Nunca he podido comprar ninguno. Siempre que voy al súper ya no quedan.
Akari, tras unos segundos, le dedicó una sonrisa a Hikari.
–Hikari-chan, ¿lo quieres?
–¿Eh? ¿En serio? – Se sorprendió Hikari. – Akari asintió. – ¡¿De… ¡¿De verdad me lo das?!
Akari volvió a asentir.
–Sí, yo ya lo he probado varias veces. Es mejor que lo pruebes tú antes de que se agoten.
Hikari sonrió muy feliz.
–¡Uwa! ¡Muchas gracias, Akari-senpai! ¡Voy a guardarlo en la nevera del club para comerlo esta tarde!
Hikari cogió el pudin y salió de la sala muy feliz. La chica iba dando saltitos y bailando mientras iba hacia la sala del club del entretenimiento, cantando una cancioncita sin sentido que se iba inventando sobre la marcha.
Akari-senpai, Akari-senpai Me encanta Akari-senpai Es la mejor senpai del mun… ¡Gah! ¡¿Q-Qué es esto?! – Exclamó al abrir la nevera al ver que estaba completamente llena de helado de ron con pasas.
Los compré ayer. – Dijo Kokoro sacando la cabeza desde la sala mientras se comía uno.
–¿Y aún dirás que no te gustan?
–¡No me gustan! ¡Los como porque tienen un sabor raro!
Hikari no sabía qué cara poner.
–¿Y ahora dónde pongo el pudin que me ha regalado Akari-senpai?
–Tranquila, ahora tendrás espacio. Pásame otro helado, que ya me he terminado este.
Hikari estaba flipando, pero al menos ahora tendría un espacio para colocar el pudin que le había regalado Akari.
Yuru Yuri: La nueva generación
La idea definitiva para cerrar el Club del Entretenimiento
Después de las clases, las chicas se dirigían cada una a su respectivo club. En el caso de las chicas del consejo estudiantil, a la sala de este. Como Nanami y Tsubasa estaban en la misma clase, se dirigieron hacia allí juntas. Sin embargo, Tsubasa andaba unos metros por detrás de Nanami, aún pensando en lo que sucedió el día anterior.
Al llegar a la sala, Nanami abrió la puerta, y tras entrar ella y Tsubasa, esta cerró la puerta. Nada más llegar a su sitio, Nanami se puso a mirar algunos papeles que tenía por allí, para poder tramitarlos lo antes posible. Tsubasa, que la miraba con algo de preocupación, tras unos segundos habló.
–Nanami… Sobre lo que ocurrió ayer…
–Sí, perdí los estribos. Esas chicas me pusieron de los nervios y me dejé llevar por la rabia. No debí haberlo hecho. No estuvo bien por mi parte. Debí haber mantenido la calma.
–B-Bueno, sí, pero no quería hablar sobre esto, sino sobre lo que dijiste.
–Ayer dije muchas cosas. – Dijo Nanami sin mirar a Tsubasa. – ¿A cuál te refieres?
–A que no somos amigas…
–Ah, eso.
Nanami seguía sin mirarla, prestando atención solo a los papeles que tenía delante.
–¿Lo dijiste en serio?
–Yo siempre hablo en serio.
–Entonces… ¿De verdad no me consideras tu amiga?
–¿No te lo he dicho ya? – Dijo tranquilamente.
Tras unos segundos, Tsubasa siguió.
–Eso no fue lo único que dijiste. También dijiste que no tienes amigas y que no las necesitas.
–Así es. ¿Y qué?
–Nanami… ¿Qué te pasa?
Extrañada, ahora sí que Nanami la miró.
–¿Eh? ¿Qué quieres decir? No me pasa nada.
–No es verdad. Nadie a quien no le pasara nada diría eso. Todo el mundo necesita amigos, Nanami. Que digas eso significa que algo te pasó en primaria con tus amigos y por eso ahora no quieres tenerlos.
Nanami tardó unos segundos en contestar.
–¿Y qué pasaría si fuera así?
–Nanami, nos dijiste a Yukiko, Hotaru, Hibiki y a mí que si alguna vez necesitábamos algo estarías aquí para ayudarnos y que podíamos contar contigo. Esto funciona en ambas direcciones. Si te pasa algo puedes contar con nosotras, y en especial conmigo, para ayudarte. No te obligaré a contármelo si no quieres, pero quiero que sepas que si en cualquier momento necesitas hablar sobre algo, estaré aquí para ayudarte.
Nanami no dijo nada durante unos segundos. Finalmente, la chica solo cerró los ojos y alineó las hojas de papel que tenía en las manos dándoles dos suaves golpes con la mensa.
–Vale. Lo tendré en cuenta si algún día me pasa algo.
Nanami se dispuso a seguir revisando más papeles. Tsubasa iba a hacer lo mismo, pero decidió decir algo más.
–Por cierto, otra cosa.
–¿Sí? – Dijo Nanami mirándola.
–Yo sí que me considero tu amiga. – Eso extrañó y sorprendió un poco a la peliazul. – Me da igual que tú no me consideres tu amiga, yo sí que me considero la tuya.
Nanami miró a Tsubasa algo extrañada, que la miraba con determinación, extrañando aún más a Nanami.
–Si eso te hace feliz…
–La verdad es que sí.
–Entonces bien. – Respondió simplemente, para después seguir mirando papeles.
Un rato más tarde
–Bien, ahora que estamos todas aquí, tenemos que encontrar una forma de cerrar de una vez por todas el Club del Entretenimiento. El director no quiere hacer nada, así que nos toca a nosotras actuar.
Hibiki habló.
–¿Por qué no llevas el caso a la Asociación Estudiantil de Takaoka?
–Ya lo he hecho. – Respondió Nanami.
Al principio Hibiki se extrañó un poco, pero luego mostró una sonrisa algo burlona.
–Y se han reído de ti en tu cara, ¿no?
Nanami se molestó por ese comentario.
–Tú, no me hables así.
–¿Me vas a decir que no? La Asociación Estudiantil de Takaoka es superior al consejo estudiantil. Si dices que tenemos que hacer algo nosotras en vez de la AET, es que han pasado de ti.
Nanami, algo molesta, tardó unos segundos en contestar.
–… No se han reído, pero no han querido aceptarlo.
–¿Entonces por qué no vas a los tribunales? – Dijo en broma Hibiki.
–Aún no puedo hacerlo.
–¿Eh? ¿Aún? – Se extrañó Hibiki.
–No puedo ir a los tribunales si no agoto todas las vías anteriores. Y las vías anteriores son Asociación Estudiantil de Takaoka, la de Toyama y la nacional. Pero no puedo recurrir a la nacional si no recurro antes a la de Toyama. Y no puedo hacerlo ante esta si no recurro antes a la de Takaoka. Y la presidenta de esta ha rechazado hacer una conferencia extraordinaria, por lo que tendría que esperar a la próxima conferencia ordinaria para llevar esto a debatir. Y aún faltan varios meses para esto. No quiero ni puedo esperar tanto. Tenemos que encontrar algo para cerrar el Club del Entretenimiento ya mismo.
Hibiki estaba flipando viendo que Nanami de verdad estaba dispuesta a llegar a los tribunales. Yukiko habló.
–Será difícil, ya que tienen el apoyo del consejo legítimo, y de momento ya les han reconocido más de un tercio de las alumnas.
–Entonces, para cerrar el Club del Entretenimiento necesitamos neutralizar el consejo ilegítimo de Furutani-senpai.
–Neutralizar… Hablas como si fueras una supervillana. – Dijo Hibiki.
Nanami decidió simplemente ignorar el comentario.
–Los carteles que hicimos, no solo no ayudaron, sino que provocaron un efecto Streisand.
–¿Qué es eso? – Preguntó Hotaru.
–Resumiendo, que hemos conseguido el efecto contrario. Así que, ¿se os ocurre algo que pueda funcionar?
Las chicas se pusieron a pensar. Tras casi medio minuto, Tsubasa tuvo una idea.
–¿Y si hacemos un referéndum? – Sugirió, llamando la atención de las demás.
–¿Un referéndum? – Repitió Hibiki.
Tsubasa asintió.
–Podemos preguntar a las alumnas si quieren que el Club del Entretenimiento siga existiendo o no.
–No. – Dijo Nanami, haciendo que Tsubasa la mirara, algo sorprendida.
–¿Por qué no?
–Porque estás poniendo a debate una cosa prohibida. El Club del Entretenimiento no cumple con los requisitos para ser admitido como club oficial, así que debe ser clausurado. No hay que preguntar eso.
–¿Y si la mayoría de las alumnas decide que sí que quiere que siga existiendo?
–¿Y si la mayoría de la gente decide que es legal que los hombres puedan maltratar a las mujeres?
–¿En serio vas a comparar eso? – Se sorprendió Tsubasa. – El Club del Entretenimiento no hace daño a nadie con su existencia.
–Pero va contra las normas, y las normas están para cumplirse.
–Sabes que las normas se pueden cambiar, ¿verdad? – Dijo Tsubasa. – La homosexualidad era ilegal. También que las mujeres pudiéramos votar. O que pudiéramos ser militares. En cambio, la esclavitud era legal. El apartheid también, y quemar mujeres acusadas de brujería. Las leyes cambian para adaptarse a la sociedad, Nanami. Si la mayoría de alumnas de esta escuela deciden que quieren que el Club del Entretenimiento siga existiendo, deberíamos respetarlo.
–Pero entonces esto no es una idea para cerrar el Club del Entretenimiento.
–Sí si las alumnas votan eso.
–Pero también pueden votar que siga existiendo.
–Exactamente lo mismo que votamos nosotras. Y te recuerdo que destituimos a Furutani-senpai por no permitir una votación. Negándote a hacer un referéndum estás haciendo lo mismo que ella.
–¡E-Eso fue diferente! – Exclamó Nanami.
–¿En qué?
–Las normas dicen que el consejo estudiantil debe poder votar cualquier tema, no que las alumnas puedan hacerlo. Ellas nos escogen a nosotras para ser sus representantes.
–Con eso estás admitiendo que las representamos a ellas. ¿Entonces qué tiene de malo preguntarles?
Nanami tardó unos segundos en contestar.
–¿Y si sale que sí?
–Entonces deberemos aceptarlo como buenas demócratas que somos. De todas formas, si tú estás tan convencida de que estás haciendo lo correcto, no deberías tener ningún problema para convencer a las estudiantes para que voten cerrar el club, ¿no? – Nanami no sabía qué decir. La chica se puso a pensar seriamente sobre esto. – Además, mira el lado positivo. Salga lo que salga se resolverá el conflicto.
Nanami no sabía qué responder. Tsubasa la había dejado sin argumentos. No había nada que pudiera decir en contra, así que tras pensar unos segundos, Nanami suspiró.
–Está bien, haremos el referéndum.
–Es lo mejor. – Dijo Tsubasa.
–Hotaru, has hecho las paces con Furutani-senpai, ¿verdad?
–Ah… Sí.
–Bien. Tú serás nuestro enlace con el consejo ilegítimo y el Club del Entretenimiento.
Eso sorprendió un poco a Hotaru.
–¿Enlace?
–Sí. Alguien que tenga buenas relaciones tanto con el consejo ilegítimo como con el Club del Entretenimiento como con el consejo estudiantil. Además… Para que el resultado sea reconocido por todas las alumnas, es mejor que tanto la pregunta que formulemos como las respuestas sean acordadas con el consejo ilegítimo. Así nadie podrá cuestionar la validez de la votación. Hotaru.
–¿S-Sí?
–Ve a ver a Furutani-senpai y dile que vamos a hacer el referéndum. Pregúntale si quiere acordar la pregunta y las respuestas.
–¡S-Sí!
Dicho esto, Hotaru salió de la sala algo nerviosa, puesto que pensaba que el puesto de "enlace" era muy importante, recayendo un gran peso sobre ella. En realidad era simplemente una mensajera, pero ella creía que ese puesto era muy importante.
–Las demás. Quiero que preparéis una batería de argumentos para cerrar el Club del Entretenimiento. Tenemos que ganar este referéndum como sea. – Dijo Nanami con determinación, sorprendiendo un poco a Tsubasa, Hibiki y Yukiko, por la forma en la que lo dijo. Se notaba que realmente quería ganar.
Consejo legítimo
Hotaru llamó a la puerta.
–Adelante. – Dijo Himawari, tras lo que Hotaru entró. – Hola, Hotaru-chan. ¿Qué te trae por aquí?
–Algo muy importante. – Dijo seria, más de lo que debería, sorprendiendo un poco a Hima y Saku.
–¿Qu-Qué ocurre?
–Hideki-senpai ha decidido hacer un referéndum para que las alumnas decidan si el Club del Entretenimiento debe seguir existiendo o no.
Eso las sorprendió aún más.
–¿Un referéndum? – Dijo sorprendida Himawari.
Hotaru asintió.
–Y como sabe que muchas alumnas te reconocen a ti como presidenta legítima, está dispuesta a acordar contigo la pregunta, para que el resultado sea reconocido por todas.
Himawari tardó unos segundos en contestar, pues eso la había tomado completamente por sorpresa (al igual que a Sakurako)
–E-Espera un momento, a ver si lo he entendido bien. ¿Hideki-san hará un referéndum para cerrar el Club del Entretenimiento? – Hotaru asintió. – ¿Y quiere acordar conmigo la pregunta?
–Eso mismo.
La peliazul parpadeó un par de veces, aún sorprendida. Después miró a Sakurako.
–Eso no es habitual en ella.
Sakurako asintió.
–Supongo que quiere asegurarse que el resultado sea aceptado por todas las alumnas. – Dijo Hotaru.
Tras unos segundos, Himawari habló.
–Entonces si no acepto acordar la pregunta, no será reconocido por todas, ¿no?
–Puede ser, pero eso te dejaría en mala posición. – Dijo Hotaru, extrañando a Himawari.
–¿Por qué dices eso?
–Porque ella ha decidido dar la voz a las estudiantes, dejando que ellas decidan. Si no aceptas, Hideki-senpai te podrá acusar de estar en contra de la democracia por no querer que voten.
Eso molestó tanto a Himawari como a Sakurako, que se quejó.
–Menudo morro. Ella, que destituyó a Himawari, no puede hablar de democracia.
La peliazul siguió.
–Ya, pero la verdad es que tiene razón. Creo que Hideki-san ha estado hábil aquí.
–Creo que deberías aceptar su oferta y acordar la pregunta. – Sugirió Hotaru.
–Sí… Creo que no tengo otro remedio. – Se resignó Himawari. – ¿Cuándo será el referéndum?
–Aún no ha puesto fecha, pero dado que quiere poner fin a esto lo antes posible, creo que será la semana que viene.
–Ya veo… – Himawari suspiró. – Muy bien, voy a hablar con ella. Sakurako, quedas al mando del consejo legítimo.
–¡Sí! – Respondió efusivamente.
–Bien, yo voy a informar de esto al Club del Entretenimiento. – Dijo Hotaru.
Dicho esto, las dos chicas salieron del aula, cada una en direcciones diferentes.
Club del Entretenimiento
Las chicas tenían problemas para sentarse alrededor de la mesa. Ni siquiera había cojines para todas. Desde que se unió Hitomi, solo habían encontrado uno de más para ella, pero no había para Shinobu y Sora.
–Parece que vamos a tener que comprar nuevos cojines. – Dijo Chinatsu.
Hitomi siguió.
–Además, vamos a tener que encontrar otra forma de sentarnos. Ahora que somos 7 no podemos estar una a cada lado de la mesa.
Shinobu continuó.
–Pero tampoco podemos sentarnos dos a cada lado. Somos 7, por lo que una se sentaría sola.
Hikari sugirió algo.
–Bueno, como Akari-senpai es la presidenta, puede ocupar el puesto de presidenta de mesa, sentándose ella sola.
–¿Eh? – Se sorprendió Akari. – N-No quiero eso. Aunque me hayáis nombrado presidenta, eso es solo algo simbólico. No quiero tener más importancia que el resto.
Eso llamó la atención de Chinatsu.
–Akari-chan, ¿pero tú no querías precisamente destacar?
–B-Bueno, sí, pero no de esta forma. Es decir, en el Club del Entretenimiento todas somos igual de importantes. No quiero destacar por estar por encima de las demás.
Hikari habló de nuevo.
–Akari-senpai, si no quieres sentarte sola, yo me siento contigo.
–¿De verdad? – Preguntó Akari, a lo que Hikari asintió feliz.
–De todas formas, eso no resuelve el problema. – Dijo Hitomi. – Una de nosotras tendrá que seguir sentándose sola.
Sora alzó una mano, llamando la atención de las demás.
–Esto… Si queréis, yo me siento sola. Me gusta estar sola.
–¿De verdad? – Preguntó Akari.
Sora asintió.
–Bien. Entonces ya está decidido. – Dijo Hitomi.
Shinobu se dirigió a su amiga.
–Sora-chan, eres una antisocial.
–No, soy asocial. Es diferente.
Kokoro se dio cuenta de algo.
–Una pregunta. ¿Sora-senpai y tú os conocíais desde antes?
Shinobu se sorprendió de que lo supiera.
–Sí. ¿Cómo lo has sabido?
–Es que me ha llamado la atención que le llames Sora-chan aun siendo un año mayor que tú. Después de recordado que Hotaru-chan también llama así a Akari-senpai aunque esta es dos años mayor que ella, así que por eso lo he pensado.
Shinobu sonrió.
–Buena deducción. Sí, Sora-chan y yo somos amigas desde primaria. Ella estaba sola en un rincón del patio, así que me acerqué a hablar con ella. – Shinobu miró a Sora. – ¿Recuerdas lo que me dijiste, Sora-chan?
–Déjame sola.
–Pero no la dejé y ahora somos amigas. – Dijo con una exagerada sonrisa, guiñando el ojo y alzando el pulgar, haciendo que a las demás les saliera una gotita de sudor en la sien.
En ese momento entró Hotaru.
–Chicas, tengo que deciros algo importante. – Dijo, sorprendiendo a las demás.
–¿Qué ocurre, Hotaru-chan? – Preguntó Akari.
–Hideki-senpai ha decidido que va a hacer un referéndum para que las estudiantes decidan si quieren que el Club del Entretenimiento debe seguir existiendo o no.
Eso las sorprendió aún más.
–¿Un referéndum? – Repitió Hitomi.
Hotaru asintió. Después Kokoro siguió.
–¿Pero no dijo que estaba dispuesta a llegar a los tribunales? ¿Por qué ahora quiere hacer un referéndum?
–Se ve que no puede acudir a los tribunales por algo de agotar las vías anteriores o algo así. No lo he entendido muy bien.
Shinobu habló.
–¿Entonces la decisión final será de las alumnas, no de Hideki-senpai?
–Exacto. Eso significa que tendréis que intentar convencer a la mayor cantidad de alumnas posibles para que voten a favor de que el Club del Entretenimiento siga existiendo. El consejo estudiantil hará lo contrario, intentar convencerlas que el club debe ser clausurado.
Las chicas estaban un poco sorprendidas. Hikari decidió preguntar.
–¿Y cuánto tiempo tenemos?
–Aún no hay fecha, pero lo más probable es que sea la semana que viene, para intentar acabar con todo esto lo antes posible.
–Entonces tenemos que ponernos a preparar ya los argumentos. – Dijo Akari con determinación. Las demás asintieron de igual forma. – Tenemos que conseguir que la mayoría de la escuela nos apoye. Si perdemos se acabó el Club del Entretenimiento.
–No perderemos. – Dijo Shinobu.
–Exacto. – Añadió Hitomi.
Chinatsu asintió.
–Vamos a ganar.
Hikari, Kokoro y Sora también asintieron.
Por su parte, tras un buen rato, y con la mediación de Tsubasa, Hibiki y Yukiko, Nanami y Himawari consiguieron llegar a un acuerdo. No fue fácil, ya que Himawari y Nanami no se llevaban nada bien. Menos después de que el día anterior Himawari animara a las chicas del Club del Entretenimiento a rechazar su acuerdo para poner fin al conflicto de manera civilizada. Pero finalmente consiguieron llegar a un acuerdo. El referéndum se celebraría la semana siguiente, para dar tiempo a ambas partes a preparar argumentos para defender sus posturas. La pregunta sería:
"¿Quieres que el Club del Entretenimiento siga existiendo o quieres que el Club del Entretenimiento sea clausurado?"
Con las respuestas:
"Quiero que el Club del Entretenimiento siga existiendo" y "Quiero que el Club del Entretenimiento sea clausurado"
Decidieron que no fuera una pregunta con una respuesta de sí o no porque para eso la pregunta tendría que haber sido "¿Quieres que el Club del Entretenimiento siga existiendo?" o "¿Quieres que el Club del Entretenimiento sea clausurado?" dando prioridad a una de las dos opciones en la pregunta. Poniendo las dos opciones en la pregunta se aseguraban de que esta fuera totalmente imparcial.
La urna estaría en la sala de profesores, "lugar neutral", y donde siempre habría un profesor para asegurarse de que no se cometieran irregularidades. Se podría votar desde las 7 de la mañana hasta las 7 de la tarde, momento en el que se realizaría el escrutinio. Las chicas del consejo estudiantil, del consejo legítimo y del Club del Entretenimiento estarían presentes durante este, e incluso podrían contribuir, para que así fuera más rápido.
También acordaron que viniera una profesora como observadora, para comprobar que todo el proceso se hiciese de forma correcta y transparente. Himawari propuso a Nishigaki Nana, a lo que Nanami no puso ningún impedimento. Seguramente porque no conocía su relación con las chicas del Club del Entretenimiento. De haberlo sabido, seguramente se habría opuesto.
Con todo eso acordado, el día siguiente empezaría la campaña, pudiendo colgar papeles y carteles en lugares indicados y en las puertas de cada club, y hablar con las alumnas para convencerlas de que votaran lo que ellas querían. Esta duraría hasta el día anterior al referéndum.
Las chicas de ambos bandos iban a tener que esforzarse para conseguir convencer a las estudiantes de la escuela que votaran la opción que ellas querían. Les esperaba una semana dura.
