Cap 10: El gimnasio del rayo.
Saludos! Si, volvemos (al fin) con esta historia. Tenía muchas ganas de retomarla, pero el problema era el de siempre, el tiempo. Bastante con tener tiempo para escribir de vez en cuando, como para tenerlo para hacerlo de continuo. Por suerte, puedo retomarla ahora. Como ya visteis, a diferencia de (No) tengo miedo, esta obra fue solo pausada, no eliminada, y todo se debe a que aquí sí que quiero seguir escribiendo. Sobre las obras de evangelion… lo siento, ya tengo bastante con un horrible final a paliar (el de kishimoto) como para añadirle el de Anno… si quieren cargarse sus obras por dinero, yo no voy gastar un solo segundo de mi tiempo en solventarlo. Así que aquí veréis un final, de (No) tengo miedo no veréis nunca más nada en mi perfil… lo siento. Bueno, paso a los reviews, a ver cuántos de los valientes que seguían este fic siguen activos.
Uzumaki albert: buenas amigo! Que tal te va todo? Espero que bien! Me alegra que te guste y espero seguir leyéndote, un saludo!
Max arti: hola de nuevo! Sigues por aquí en fanfiction o ya te mudaste? Bueno, me alegro que te guste este fic y te reconozco que has atinado un poco con cierta mujer de pelo blanco, pero… digamos que es más complejo de lo que planteas xD espero seguir leyéndote, un saludo!
Murderleo: buenas! Muchísimas gracias, y si, no todos se saben los nombres de los pokemon, y eso que he procurado centrarme en los 150 originales (más Giritina, que me hace gracia xD). En fin, nos leemos, un saludo!
Fernando senpai: Saludos! Gracias por leerme, y si, pobre kurama, es un infierno el que está pasando xD y a que no te esperabas a Orochimaru de pokemon? Pues espera a ver al sexto xD Un saludo, nos leemos!
-aaaaaaaaa- personaje humano hablando
-aaaaaaaaa- personaje humano pensando
-aaaaaaaaa- personaje sobrenatural hablando
-aaaaaaaaa- personaje sobrenatural pensando
RENUNCIA DE DERECHOS: ¿os imagináis que fuese el propietario de los derechos sobre pokemon y Naruto? En lugar de leer esto en una web, lo estaríais leyendo en libros encuadernados en oro, con un grupo de actores escenificando las mejores escenas en cada una de vuestras casas. Como sólo soy un escritor aficionado, os aclararé que estos universos no me pertenecen, sólo esta historia.
Cuando empezó esta aventura para ser maestro pokemon, poca gente creyó en Naruto uzumaki. Puede que Hiruzen Sarutobi, cuyo ojo clínico había visto un cierto potencial en el chiquillo; o Jiraiya el sannin, que sabía que su ahijado tenía una voluntad de hierro; o Tsunade senju, que siempre apostaba por su nieto oficioso. Incluiría también a sus padres, pero en su caso habían accedido más por verle feliz que por ver un auténtico potencial como entrenador pokemon… si hubiese sido por Kushina Uzumaki, su bebé no se alejaría ni un metro de ella… Bueno, el caso es que pocos se imaginaban a Naruto progresando adecuadamente en su meta de ser el mejor maestro pokemon de la historia, menos aún si el prodigioso Sasuke Uchiha se había propuesto lo mismo. Pero ahí estaba Naruto Uzumaki namikaze, con tres medallas en el bolsillo y no uno, si no cinco pokemon de alto nivel, CINCO. Todo un logro, aunque fuese el equipo pokemon más extraño del continente: un zorro con nueve colas y la expresión de hastío más grande del mundo, un mapache psicótico con sobrepeso, un escarabajo de siete colas con complejo de caballero, una babosa de seis colas con narcolepsia y, el más extraño de todos…
-Por el amor de kami, ¡esto es un secuestro!- exclamó desesperadamente un hombre de aspecto andrógino, de largo pelo negro y piel antinaturalmente pálida, mientras seguía al resto de la comitiva, que se debatía entre ignorarlo o compadecerlo.- Que yo no soy un pokemon, ¡soy un ser humano! Orochimaru el sannin traidor, para más señas, ¡Tenéis que creerme!- rogó, agitando al escarabajo de siete colas.
-Y dale señor, ¡que yo no le conozco! Que los únicos malos de Naruto con los que compartí escena fueron el fanático religioso y ese grimoso de los hilos…
-¡pero tienes que haber oído hablar de mi! Soy el villano más famoso de la serie junto a Madara y Pain, ¿no te sueno? El científico loco obsesionado con la inmortalidad, que invoca serpientes y es un poco lolicon…- intentó describirse, mirándolo con los ojos entrecerrados Kurama.
-Ya… lolicon… en el código penal os llaman de otra forma a los lolicones…- el sannin iba a recordarle al biju de nueve colas que ellos sí que habían luchado en la serie original, pero el zorro fue más rápido.- A mi no me mires, que bastante con que haya hecho caso al gaki y no te haya matado por intentar hacerle lo que fuese que le ibas a hacer con ese disfraz de peter pan…- Orochimaru intentó buscar el apoyo de alguien más, pero nadie parecía muy por la labor. La babosa de seis colas incluso se mostró confundida.
-Disculpe, pero… ¿está seguro de que no es usted un pokemon? Es que no parece muy humano con esa piel blanca… y esos ojos amarillos de pupila rasgada… y… y eso de vomitarse a sí mismo y estirarse hasta cualquier límite…- el sannin se mostró claramente ofendido por ese comentario.
-Oh, YA ESTAMOS CON EL RACISMO. Si mi padre ya me lo advirtió… a ver, ¿le preguntarías a un afroamericano si es un pokemon porque "tiene la piel oscura y la capacidad de correr más y mejor"? ¿No? ¡Pues conmigo lo mismo! Que además bastante tengo con lo mío… no puedo ir a la playa porque me quemo, y en el colegio hacían como que me hablaban en parsel para reírse de mi…- rememoró con amargura, para luego mirar de soslayo al rubio y volver a dirigirse al resto de cautivos.- Pero, ¿le habéis explicado que no somos pokemon? ¡Que este chiquillo es un monstruo esclavista!- Naruto procedió de inmediato a defenderse.
-Eh eh eh, a mi no me insultes, que yo soy el bueno en esta historia… Si yo también creía que eras un ser humano, ero sannin me habló de vuestras aventuras como equipo 7, pero… te capturé con una pokeball, así que ya me dirás qué eres si no eres un pokemon…- argumentó, entrando en un cortocircuito mental el sannin mientras los biju se daban en la frente por la obviedad que eran incapaz de percibir sus compañeros ningen.
-A… a ver, que tu argumento es lógico, una pokeball solo captura pokemon, pe… pero… ¡que no soy un pokemon, en serio! ¿Seguro que no era una "sanninball" o algo así?- Naruto negó, suspirando marcadamente el biju de nueve colas.
-Es una pokeball, como la mía y la del resto… está claro que las pokeball están mal, ya he enviado una carta a Nintendo para...- Shukaku se hubiese tirado en este momento de los pelos si tuviese alguno.
-Y dale desde el segundo capítulo de este fic absurdo… ¡KURAMA, QUE NO TE VAN A RESPONDER, QUE PASAN DE NOSOTROS! Que has enviado ya una decena de cartas, alguna hasta con un vídeo de testimonio en blanco y negro y música de violín para intentar dar pena, en plan vídeo de ONG sobre un país en guerra…- Orochimaru palideció aún más al oír eso último.
-Un momento, ¿estáis usando el servicio postal de konoha para demostrar que no sois pokemon? QUE SON UN PUTO DESASTRE. Yo me suscribí hace una década al anuario de uniformes escolares del continente, ¡y anteayer me llegó el primer número!- un comentario que debería haber generado una bonita camaradería entre los "pokemon" de Naruto uzumaki generó, en cambio, un tenso e incómodo silencio, todo por lo perturbador que era esa suscripción del sannin… Por suerte, justo en ese momento llegaron a su destino, evitando seguir con esta incómoda conversación.
-¿hola?- preguntó el rubio ante el mostrador de entrada a la aldea, un mostrador aparentemente vacío, al menos hasta que dos guardias con un aspecto un tanto extraño salieron a recibirle desde las estancias interiores.
-Ohhh… oh, vi… visitas… ¡Taeko! ¡Ha venido alguien!- exclamó uno de los guardias con lágrimas en sus ojos, mientras su compañero miraba al grupo como si fuese un barco de rescate y él un náufrago.
-Ya… ¡ya lo he visto! Intenta no parecer desesperado, ¡que no podemos permitirnos espantarlos! Bien… ¡Bienvenidos a Kumo, un lugar idílico donde vivir y abierto a cualquier viajero e inmigrante! Vi… vienen a asentarse en nuestra gran aldea y formar una familia, ¿no?- preguntó con tal tinte de desesperación en su voz que el uzumaki, los biju y hasta Orochimaru dieron un paso atrás con miedo.
-Esto… no… venía a desafiar al líder del gimnasio del rayo…- el guardia mostró un gesto de tristeza tal que a Naruto le dieron ganas de darle ánimos, aunque su compañero pareció más insistente.
-¿Y no desearía antes yacer con algunas de nuestras mujeres? Tenemos decenas en edad fértil y solteras, listas para darle una noche de placer a cambio de poder gestar nuevos niños para Kumo, ¡puedo presentárselas y usted elige, sin compromiso!- un visiblemente incómodo Naruto mantuvo las distancias.
-Emmm… no gracias, no me veo todavía como padre… es que tengo novia… y… y trece años…
-¡Por favor, yazca con algunas de ellas, por amor de kami!- imploró, intentando saltar el mostrador para arrodillarse frente al rubio, mientras los biju, el sannin y el rubio se miraban entre ellos con confusión. El que más curado estaba de espantos dentro del grupo (obviamente kurama) pudo actuar antes de que la cosa pasase a mayores.
-¡Que te ha dicho que no, pedazo de lunático!
Tras ese incómodo momento, el grupo obtuvo al fin las indicaciones para llegar al citado gimnasio… aunque eso no solventó las dudas del equipo. Al parecer, la desesperación del dueto de guardias por atraer gente a Kumo era fundada: Kumo tenía graves problemas de población. Teóricamente, Kumogakure no sato era una de las cinco grandes aldeas shinobi, una aldea ligeramente más pequeña que Konoha o Kiri, pero aún así con una extensión enorme y un buen número de habitantes. Pero, en la práctica… ni un alma por las calles salvo algún transeúnte solitario, ningún ruido, edificios cerrados… Y no estaban en mal estado, la aldea estaba limpia y bien mantenida, pero le faltaba población por todos lados. Quizás más de la mitad de los edificios que vieron estaban sin habitantes, y no era cosa de las afueras, incluso los barrios centrales y comerciales estaban casi desiertos. En cambio, lo que abundaban eran gatos callejeros: tranquilamente contaron varias decenas sólo en la calle que estaban transitando, todos ellos haciendo su día a día sin molestar a nadie, aunque mirándoles con algo de suspicacia. Por supuesto, el grupo de Naruto comenzó a hacerse preguntas.
-Joder… Kaa chan me advirtió de que tuviese cuidado aquí, que al parecer intentaron secuestrarla de niña, pero… visto lo visto, me pregunto si no lo hicieron por necesidad dattebayo…- murmuró un impactado Naruto, asintiendo Orochimaru con el mismo asombro.
-Si, Naruto kun… lo cierto es que había leído sobre los problemas de población de Kumo, pero no creí que fuesen tan serios… por lo que sé, últimamente sus números han bajado drásticamente…
-¿Alguna guerra?- preguntó Saiken, negando el sannin.
-No, ni tampoco epidemias o éxodos. Simplemente, una altísima tasa de mortalidad… Bueno, quizás podremos enterarnos de algo más tras ganar la medalla, ahí está el gimnasio…
En efecto, frente a ellos tenían el gimnasio del rayo. Un imponente edificio de tres plantas, dotado de los mejores servicios, perfectamente pintado y mantenido… pero casi vacío. Normalmente, un gimnasio pokemon solía tener mínimo una decena de subalternos del líder, una decena de entrenadores que eliminan la morralla para que el líder del gimnasio solo se enfrente a los entrenadores de mejor nivel. Pero, en este caso, sólo estaba el líder, el líder rodeado también de mínimo una docena de gatos callejeros, que hacían su vida indiferentes a lo que ocurría alrededor… lo cual no implicaba que la tarea fuese a ser mucho más fácil. Killer Bee, como se hacía llamar, era un excelente entrenador pokemon, un legendario luchador con un físico intimidante, dos metros de piel morena y puro músculo, con un largo pelo rubio peinado hacia atrás y unas gafas de sol que impedían ver sus ojos. Su fama en todo el continente era bien merecida: ni una derrota, salvo una reciente contra Sasuke uchiha por "exigencias del guion", como habían explicado en su página web… Naruto estaba quizás ante su reto más difícil, seguro que ese hombre era un rival imposible, un auténtico portento y ejemplo de poder, un…
-Escúchame, chiquillo rubio… ¡Si quieres la medalla ganar, contra mi pokemon y mis rimas tendrás que pelear!- rapeó. Si, exacto, rapeó, con poses de gangsta y todo, marcando ritmos y con un grupo de coristas salido de ninguna parte haciendo los fondos. El que todo el grupo de Naruto se quedase en silencio, con un fondo de cielo oscuro y esos cuervos que les llevaban siguiendo ya meses graznando, indicaba que la rima no había sido muy buena.
-¿Es una broma no?- preguntó un cansado kurama, pero la expresión de hastío de las bailarinas de bee, una mujer rubia de pelo corto con los pechos más grandes que el biju, en sus milenios de existencia, había visto; otra más alta de pelo blanco, tez morena y cuerpo curvilíneo; y una joven pelirroja de piel morena y gesto de enfado, le indicó que no lo era. El kiuby suspiró con fuerza, armándose de paciencia.- Estupendo, otro demente… ¡Cachorro! Si por casualidad se tropieza en una de sus poses ridículas, se cae encima de una de tus pokeball y acaba atrapado como nosotros, lo envías con el viejo mono eh, que este viaje ya es lo suficientemente ridículo sin un hilo musical…- amenazó, asintiendo Naruto con vehemencia. El biju se dispuso en pose de combate, preparándose Bee para elegir su pokemon.
-Gyuki, amigo, ¡la elección está contigo!- exclamó para convocar a su pokemon. Y todos los biju presentes abrieron sus ojos como platos.
-¿Azrael Ka'limah chernenogh Mammon Andrialfo? Los ocho tentáculos de la corrupción, sumo diácono de la decadencia, aquel que te deja subir a lo más alto para que saborees las mieles de la victoria y luego dejarte caer en tu…- preguntó, o más bien describió, Shukaku, rascándose la nuca nervioso el biju pulpo-toro de ocho colas mientras Chomei interrumpía la descripción del una cola de una colleja. No estaban para presentaciones, viendo el gruñido de kurama nada más aparecer el ocho colas.
-Esto… si, hola chicos… veo que no soy el único que ha acabado en una de esas pokeball ¿eh? Jejeje…- intentó romper el hielo el biju, aunque el gesto de puro rencor de kurama le indicaba que iba a tener que dar explicaciones.
-¿otro de los nuestros de mascota de un líder de gimnasio? No me digas más: en lugar de obedecer mis órdenes de destruir a la humanidad, estabas flotando en el mar como una puta bolsa de plástico hasta que te encontraste una pokeball llevada a la deriva y dijiste "Eh, ¿por qué no la toco y me dejo esclavizar? Seguro que a mi hermano de nueve colas le va a encantar…"- inquirió el kiuby, deseando una respuesta afirmativa y no tener otro hermano traidor como songoku. Sin embargo, el que su hermano negase apurado le indicó que estaba equivocado.
-¡No, no! Te lo juro, yo cumplí con el plan: con mis decenas de metros de altura, salí del mar dispuesto a borrar la aldea del rayo de la faz de la tierra como castigo contra la humanidad por su ambición desmedida, ¡pero Lillith no apareció para atacar desde tierra y no pude en solitario contra sus decenas de miles de shinobi! Acabaron lanzándome una pokeball y terminé así, de pokemon de un líder de gimnasio…- explicó, gruñendo kurama al cielo mientras Naruto arqueaba una ceja.
-Esto, ¿lillith?
-Si, nuestra hermana, la emperatriz de la lujuria desatada y señora del arenero, una gata de dos colas hecha de fuego azul…- explicó Saiken.- Lo cierto es que es la más voluble de nosotros, me extraña que Gyuki se fiase de ella para atacar kumo…- por supuesto, mientras todos hablaban, killer bee estaba a lo suyo.
-Gyuki, ¡usa tu tentáculo para dar un buen espectáculo!- ordenó, frunciendo el ceño Chomei… sus rimas eran cada vez peores. Kurama iba a rugir que dejase de darle órdenes a su único hermano leal, pero un golpe le hizo centrarse en otro rival.
-Aagghh, ¿Qué se supone que haces Azrael? ¿Me acabas de golpear con uno de tus apéndices deformes a la orden de este miserable ningen?- rugió furioso el zorro, sudando frío Gyuki.
-Entiéndeme hermano, ¡si no lo hago me mete en la pokeball! Y tiene hilo musical con sus canciones… ¡si sus rimas os parecen malas de primeras, imaginaos en bucle durante horas!- todos los allí presentes sintieron un escalofrío… santo kami, eso era tortura, hasta Orochimaru tuvo que admitir que Naruto era mil veces más amable que ese individuo de piel morena.
-Rápido kurama, ¡usa danza de la lluvia!- kurama miró con horror al rubio.
-¿Qué? ¿Otra vez con eso como hiciste en el gimnasio del agua con la pelochicle? ¡Que es un puto pulpo, el agua le sienta bien! Y no creo que quieras una cita con este maromo…
-Pero es también un toro, ¡y los toros nadan regular, que lo vi en un documental!
-No es el caso cachorro, ¡como metas agua aquí no lo vence ni Saiken! ¡Déjame usar arañazo!
-No kurama, ¡Danza de la lluvia! Que es un duelo difícil y necesitamos nivelar las stats…- si el biju ya estaba reticente, el ver la sonrisa cruel de Shukaku le hizo volver a negarse con vehemencia.- Joder kurama, ¡confía en mí!
-Parece que no tienes nivel, ¿por qué no vuelves cuando crezcas unos centímetros… esto… Maribel?- se burló Bee, sudando Naruto ante la más que probable humillación que se le venía encima por la desobediencia de su pokemon principal. Aunque alguien tenía algo más que decir…
-Kami santo, y calificaban mis experimentos como crímenes contra la humanidad y no a estas rimas…- repuso Orochimaru.- Naruto kun, déjame a mi encargarme de ese pokemon… así podremos abrazarnos cuando gane e ir a celebrarlo a un sitio más privado…- Naruto palideció ante esta sugerencia, entrando su frangirl número 1 al rescate.
-Déjame esto a mi, Naruto kun, sé cómo convencer a Kurama…- susurró Chomei al uzumaki, para después hablar en voz alta.- Naruto kun, mejor mándale otro ataque… a Kurama le da vergüenza decirlo, pero no quiere bailar contra nuestro hermano de ocho colas, por eso de que siempre ha bailado peor que él…
-¿Cómo? ¿Que yo bailo peor que ese engendro mitad cuernos y mitad tentáculos? ¿De dónde has sacado esa ridiculez?- rugió un furioso kurama, arqueando sus hombros Chomei.
-Es lo que se dice, por eso de que te niegas a bailar… que no pasa nada eh, hay cosas peores que bailar peor que el zopenco de nuestro hermano de ocho colas… tener claustrofobia por ejemplo…
-Eh, hermanos, que yo no os he insult…- intentó defenderse Gyuki, pero Kurama ya estaba furioso y no le dejó terminar.
-¿Se dice eso de mi, el grandioso rey de los biju?- Esto fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del biju de nueve colas.- ¿Quieres un duelo de baile? Bien, pedazo de inútil, ¡pues habrá duelo! DENTRO MÚSICA.
-Killer Bee nunca rechaza un duelo musical, ¡adelante, mi grupo orquestal!- rapeó su rival, comenzando un duelo de danzas de la lluvia.
Hilo musical: Freestyler- Bomfunk MC's
Mientras la música comenzaba a sonar, el biju de nueve colas sacó de kami sabe dónde una gorra de rapero y abrigos amplios llenos de colores, y empezó uno de sus pasos de baile conocidos. Y, para asombro de todos, acostumbrados a sus desganados bailes de los capítulos anteriores, esta vez se lo tomó en serio. Naruto abrió los ojos con asombro nada más ver a Kurama girar sobre si mismo usando sus colas, para luego caer al suelo y dar vueltas en un impresionante paso de baile de breakdance. Al ritmo de la música, movía patas y colas con tal fluidez que incluso las coristas de Bee se unieron a su baile, todo mientras el rapero comenzaba a improvisar rimas al ritmo del legendario zorro bailarín y creaba el espectáculo más impresionante que había visto kumo en décadas. Un paso de baile del robot, un moonwalker de Michael Jackson, ¡incluso un windmill usando solo su cabeza como soporte en el suelo! Todo mientras el pobre Gyuki era vapuleado al intentar seguirlo con pasos claramente desacompasados y anticuados, y el gimnasio se inundaba de lluvia. La mandíbula de Naruto estuvo a un paso de impactar contra el suelo de la que veía todo esto, por supuesto, y el chiquillo se giró hacia Chomei, que miraba todo satisfecha.
-Esto… muchas gracias Chomei… lo… lo cierto es que nunca le había visto bailar así dattebayo…- explicó el rubio de la que la tapaba con su chaqueta para que el agua de lluvia no empapase sus alas, asintiendo en agradecimiento la biju de siete colas.
-Es que Kurama siempre ha sido un gran bailarín, creo que por eso es afín a la danza de la lluvia… De niño era bastante problemático, se unía a bandas para cometer crímenes y se estaba echando a perder, al menos hasta que encontró su vocación en el baile y pudo salir de esa mala vida entre notas musicales y coreografías espectaculares…- Naruto abrió los ojos con más asombro.
-Ahí va, ¿Cómo en la saga de Step up? ADORO ESAS PELÍCULAS.
-Y Kurama también Naruto kun, aunque no te lo reconocerá jamás…- ambos volvieron a ver el brutal espectáculo que seguía dando kurama, que ahora daba vueltas en el suelo usando sus patas delanteras mientras un DJ salido de la nada pinchaba tanto su disco que casi salía humo. Con un último movimiento, el biju de ocho colas no pudo más y cayó al empapado suelo, exhausto e incapaz de continuar, rugiendo al aire kurama con victoria.
-¡Yo soy Kurama, el zorro de nueve colas, Y TU ERES MI ZORRITA OBEDIENTE!- gritó al humillado Gyuki, para acto seguido lanzarse a abrazarlo las mujeres de la sala y aplaudir Killer Bee como un descosido.
-¡Bravo, BRAVO!- exclamó Killer bee, tan extasiado que incluso se olvidó de atender a su pokemon vencido.- Ha sido espectacular, ¡en serio! Vaya forma de moverte, de seguir el ritmo, de inspirar mi canción, BRAVO.
-Esto… ¿puede hablar sin sus rimas ridículas?- preguntó Shukaku, asintiendo el resto de compañeros, aunque a Killer bee le dio igual, tenía otro objetivo en mente.
-Chiquillo, necesito a tu zorro para mi concierto de esta noche, su baile y carisma son justo el empujón que necesito para dejar de ser líder de gimnasio y hacerme rapero, mi vocación desde niño… ¿Qué necesitas? ¿Dinero? ¿Mujeres? ¿El puesto de raikage? LO QUE NECESITES.
-Etto… si yo solo venía a por la medalla…- murmuró un abrumado Naruto, asintiendo el rapero.
-Toda tuya si Kurama baila esta noche en el concierto que voy a dar.- El rubio miró al zorro, que asintió haciéndose el desagradado. Lo cierto es que, mientras le dejasen elegir lo que bailase y le ahorrasen además luchar en más batallas pokemon, no tenía problema. Por supuesto, Killer Bee lo celebró con un salto.- ¡Perfecto! Ya veréis, será una gran fiesta, habrá música, alcohol, chicas, lo que sea que quiera vuestro amigo grimoso del pelo negro…- Expuso, aunque Naruto tenía otra cosa en mente.
-¿Habrá ramen?- Bee asintió con felicidad.
-Por supuesto, ¡Todo lo que necesite el entrenador de mi bailarín estrella! Hablaré con mi hermano y habrá tanto ramen que podríamos fundar una ciudad entera con ese plato.- la sola mención de una ciudad hecha de ramen hizo a Naruto babear.
-Ummm… raaaaaameeeeen…
La imaginación de Naruto estalló en una potente supernova. ¿Os lo imagináis? ¡Una ciudad hecha sólo de ramen! Con edificios con forma de platos llenos de fideos y de salsa de ramen, y con sus ingredientes asomando desde sus ventanas, llamando a Naruto para que se les comiese. Monumentos a los mejores platos de ramen, como el de cerdo, o a los cocineros legendarios de esa obra de arte culinaria. Abrirías el grifo de casa, ¡y saldría ramen! Qué demonios, no habría ni caminos ni carreteras, sólo gigantescas corrientes de ramen recién hecho, donde los transeúntes se subirían rumbo a donde fuesen, pudiendo comer todo el ramen que quieran hasta llegar a su destino. Las calles tendrían nombres de ingredientes, ¡y podrían estar hechos incluso de eso! La calle Shio, la avenida Menma, la plaza Narutomaki… oh, ¡y por supuesto habría el día del ramen! Y la gente iría con sus mascotas hechas de ramen a celebrarlo, ¡Perros hechos de fideos, gatos que se pudiesen sorber! Y en los bares no se serviría alcohol, se serviría ramen acompañado de…
-Naruto…- una voz se coló en su maravillosa fantasía, aunque no lo suficientemente alto como para impedir que Naruto se montase en su coche hecho de ramen, rumbo a su trabajo de maestro catador de ramen, que cumpliría en el museo del ramen, situado en la calle del ramen junto al hospital hecho de…- ¡NARUTO!- Rugió kurama de nuevo, ahora sí que sí despertando a Naruto, que parpadeó confuso unos instantes mientras los biju, Bee, las coristas y Orochimaru le miraban con una gota de sudor en sus nucas.
-Ah, lo siento, me distraje un poco pensando en esa ciudad hecha de ramen… ¿estábamos hablando del concierto de esta noche no?- Shukaku y Chomei tuvieron que agarrar al biju de nueve colas para que no cometiese un crimen de odio.
-¡ESO FUE HACE DOS HORAS!- rugió kurama, harto de ver a su mocoso estar fantaseando solo con esa ciudad hecha de ramen mientras todos le miraban incómodos y en silencio.
A pesar de que la fiesta no fue celebrada en una ciudad hecha de ramen, con aviones hechos de salsa miso con extra de cerdo como se había imaginado Naruto, lo cierto es que fue una gran fiesta, y el rubio pudo comer ramen hasta hartarse. Hubo un gran concierto celebrado por Killer bee, uno donde por primera vez no hubo abucheos y lanzamientos de sillas gracias a la asombrosa mezcla que hacían el rapero y kurama. E incluso pudieron gravar un buen videoclip, uno donde Killer bee cantaba mientras un grupo de atractivas féminas llamadas Mabui, Karui y Samui se dedicaban a bailar alrededor del carismático kurama, aunque Naruto se preguntó si a quien ponía los nombres en kumo le faltaba algo de imaginación… entre que los nombres de hombre eran solo letras sueltas, y que los de las mujeres eran variaciones del mismo… En fin, en ese instante, Killer bee cantaba otros de sus éxitos mientras la exigua pero enfervorizadla población de kumo saltaba al son de su música, todos intentando evitar pisar a la marea de gatos que habían acudido a curiosear atraídos por las luces y el ruido.
-¡Buenas noches kumo! Decidme… ¿qué es lo que más queréis ahora mismo?- preguntó Killer bee al público, oyéndose una voz entre todas las demás.
-¡La emancipación de la raza biju y nuestro reconocimiento como seres ajenos al mundo pokemon!- se desgañitó en gritar Shukaku entre los asistentes. Killer bee asintió un instante antes de hablar.
-¿He oído "Lose KillerBeeself"?
-NOOOOOO, ¡he dicho "La emancipación de la raza biju y nuestro reconocimiento como seres ajenos al mundo pokemon" maldito desgraciado!- a pesar de los gritos del shobi, Killer bee se dispuso a cantar su canción, tirándose de las lorzas el biju.- ¿Es que no me has oído? ¡He dicho la…!
-Déjalo ya Shukaku… si no te ha oído, es una pregunta retórica que se hace en los conciertos, al final el cantante toca lo que le apetece…- le intentó calmar Saiken, mientras el mapache luchaba por subir al escenario a gritar más cerca su fútil intento de escapar de esta horrible historia. En otro lugar del concierto, un desprevenido Naruto fue abordado por una chica, y eso a pesar de que estaba sorbiendo ramen de una forma nada sexy.
-Hola guapo, ¿Cómo te llamas?- el rubio casi se atraganta ante la despampanante mujer que se encontraba ante él. Una chica rubia de unos veinte años, de piel blanca, cuerpo curvilíneo y labios sensuales, peinada en una coleta larga, y vestida de manera tan provocadora que el rubio tardó unos instantes en responder.
-Etto… Na… Naruto…- balbuceó, completamente rojo. Esa ropa dejaba poco a la imaginación, y el que la chica se mordiese el labio y sonriese con lujuria nada más ver esa reacción del rubio… digamos que no ayudó mucho…
-Encantada Naruto, eres muy tierno, yo me llamo Yugito Nii, y me preguntaba… ¿por qué no vamos tú y yo a un sitio más apartado, solos, y te canto una de mis canciones favoritas? Se llama "el día que me olvidé hasta de mi nombre"…- a pesar de ser inocente como un niño de cinco años, era imposible que Naruto no pillase el segundo sentido a lo que acababa de ofrecerle esa mujer.
-Esto… es que tengo novia, y la quiero mucho… y… y mi kaa chan se enfadaría si…- No pudo terminar de excusarse, puesto que la fémina clavó sus ojos en los de Naruto, unos ojos de pupila rasgada y anormalmente grandes e hipnóticos.
-No les diremos nada… ven conmigo, naruto kun, nos lo pasaremos bien…- el rubio asintió con una sonrisa estúpida, incapaz de pensar en nada más que en esos ojos, dejándose llevar por la fémina. Gracias a Kami, alguien apareció antes de que un obnubilado Naruto perdiese su virginidad sin saberlo.
-eh tú, ¡Apártate de mi Naruto kun!- exclamó Orochimaru, para luego tomar a Naruto entre sus brazos y abrazarlo, dibujando un gesto de horror el rubio al darse cuenta de donde se encontraba ahora. Por suerte, apareció un salvador de su salvador. Chomei comenzó a golpear con sus alas al sannin, apartándole de Naruto.
-¡Apártate tú de naruto kun!- le gritó, asintiendo Naruto en un silencioso Gracias mientras el alboroto atraía al Quinto en discordia.
-¿Se puede saber qué haces ningen?- rugió kurama, interponiéndose entre la mujer y el rubio.- Que es un niño de trece años bastante limitado, ¡y ya tenemos bastante con un pedófilo en este capítulo!- se quejó, asintiendo un indignado Orochimaru, aunque la reacción de la fémina fue extraña.
-¿nyarlahothep en'ryleh angekok soggoth kalimá chernebogh?- preguntó Yugito, esta vez con un tono de voz radicalmente diferente, arqueando una ceja el biju. ¿Cómo sabia su auténtico nombre?- ¡Soy yo, tu hermana, Lillith! Espera, que dejo de usar a la ningen…- anunció, materializándose una gata de dos cosas hecha de fuego azul a la espalda de yugito, que sacudió su cabeza de inmediato y miró alrededor con confusión.- Anda Yugito chan, vete a divertirte con el tío Bee, que luego vuelvo y seguimos de caza…- la joven asintió medio ida, y vagó sin rumbo mientras el grupo de Naruto la miraba con una ceja arqueada, explicándose Lillith.- Es que la tengo sometida mentalmente para que me obedezca. Ella se cree mi entrenadora pokemon, pero yo soy un gato: los gatos no somos mascotas, TENEMOS MASCOTAS…- reponiéndose de la impresión, Kurama pudo preguntar lo evidente.
-Entonces no ayudaste al ocho colas a destruir kumo porque fuiste atrapada antes… eso lo explica tod…- La gata de dos colas no le permitió seguir hablando.
-¿Yo? ¿Capturada por una pokeball? Ni que fuese una inútil como nuestro hermano pulpo…- se burló, sin saber que el resto de sus hermanos también habían sido capturados.- No, realmente vi que tu plan de aniquilar a la humanidad no tenía futuro, así que revelé a Kumo nuestro ataque y ellos me dieron ese arenero y un nuevo hogar donde asentarme…- expuso, señalando un gigantesco arenero para gatos que descansaba en una esquina de la sala de conciertos, entrando kurama en cortocircuito al no saber si matarla en ese instante o hacerlo luego más lentamente por traidora.
-¡otra como Songoku! ¿Me estás diciendo que nos has traicionado por un puto arenero para gatos?- le recriminó Chomei, negando el Nibi.
-No, POR LA CAJA en la que venía el arenero, el arenero me da exactamente igual…- aclaró la gata, para luego seguir antes de que Kurama enseñase los dientes movido por la rabia.- Pero, antes de que me mates Nyarlahothep, te recuerdo que sigo en tu bando y cumpliendo tus órdenes, sólo que de manera más… creativa…- el que kurama arquease una ceja animó al biju de dos colas a explicarse.- Usando a mi entrenadora pokemon como títere, me he dedicado a seducir a cuanto hombre y mujer he podido en kumo para luego, cuando están indefensos después del coito, implantar mis huevos en mis víctimas y así crear mi propio ejército de demonios. Cada gato que habéis visto de camino es en realidad un demonio a mi servicio, demonios que están esperando a mi orden para arrasar kumo… lo podría haber hecho ya, pero creo que todavía puedo seducir al raikage y su escolta y reducir a su población a un cuarto en lugar de solo a la mitad, y así tendré más guerreros para cuando me ordenes ir a por el resto de naciones…- todos los allí presentes abrieron sus ojos con espanto, entendiendo ahora el motivo de los problemas poblacionales de Kumo, mientras decenas… no, cientos o incluso miles de gatos comenzaban a maullar y a mirar al grupo desde la oscuridad con sus ojos brillando en un antinatural amarillo, todo de la que la gata de dos colas reía de forma maniática.- HAHAHAAAA, MIRAD A MIS LINDOS BEBÉS DEMONIO…- Tanto kurama como el resto de biju, Naruto y Orochimaru tragaron hondo… joder, claramente era la más diabólica de los biju. Kumo estaba condenada, y puede que el resto del mundo.
Bueno, ya basta de humor absurdo, suficiente internet por hoy. Espero que is este gustando, en cuanto pueda pasamos al siguiente, donde naruto conseguirá su ultimo pokemon del equipo! un saludo
