Una poción.

Holas! Bueno, aquí está el tercer capitulo de este fic. Nos vemos más abajo!

&&&&&&&

Bajó con prisa las escaleras. Ni Tomoka ni su abuela la habían despertado, quedando algo retrasada.

. Abuela¿Por qué no me despertaste? –preguntó, mientras se terminaba de poner la chaqueta verde característica de Seigaku.

. Por esto –dijo Sumire, mostrándole la mesa, con un gran desayuno.

. ¿Lo... lo preparaste tú? –preguntó asombrada... bueno, siendo sincera, su abuela no cocinaba muy bien coas que no fueran dulces, así que estaba bastante impresionada.

. No, no fui yo... fue Tomoka-chan. –dijo con una sonrisa Sumire. Al decir eso, apareció Tomoka, con un delantal, y una gran sonrisa.

. Espero que te guste, lo preparé en compensación por haberte dejado sola. –dijo con una sonrisa.

. Ohh... muchas gracias! –dijo dándole un abrazo. –bueno¡comamos!

&&&&&&&&

Ambas chicas entraron corriendo, sólo les quedaban cuatro minutos para llegar tarde, y aún debían correr desde la entrada hasta la sala en el tercer piso.

. Apúrate Tomoka, o vamos a llegar tarde. –gritaba Sakuno, que iba un poco más adelante que su amiga. Se le olvidaba que con tres años practicando tenis, su estado físico era mucho mejor que el de su amiga.

Cuando al fin llegó a la puerta de la sala, se agarró de la manilla desesperadamente, sin darse cuenta de quien venía corriendo frente a ella.

Un fuerte golpe se escuchó, quedando dos personas tiradas en el piso.

. ¿Qué significa esto señores Ryusaki y Echizen? –preguntó enojada la voz del profesor, al ver a ambos chicos en una posición tan comprometedora, en el suelo, toda la clase comenzó a hacer ruidos como "uuhhhh! Ryusaki y Echizen, debajo de un árbol, dándose besitos!" y muchas otras cosas más. Sakuno se encontraba sujetando a Ryoma por los hombros, sobre él, a centímetros de su rostro, mientras Ryoma que estaba recostado en el suelo, agarraba a Sakuno de la cintura.

. Lo... lo siento –dijo Sakuno, sonrojada hasta las orejas, colocándose de pie rápidamente.

. No... no importa. –dijo Ryoma, entrando de prisa a la sala. Oh, claro, no me importa... pensaba Ryoma, pero sabía que estaba sonrojado por completo.

. ¿Va a entrar señorita Ryusaki, o se va a quedar a fuera mirando a la pared? –dijo enojado el profesor.

. No, no –dijo entrando, mientras veía que Tomoka llegaba junto a ella.

. Dentro las dos, ahora!

. Hai. –dijeron ambas a la vez. Sakuno no pudo evitar ver como todos sus compañeras la miraban, con cierta envidia, y la gran mayoría murmuraba a su paso.

. Sakuno¿qué fue lo que pasó... por qué todos están murmurando? –preguntó Tomoka, una vez que se sentaron en sus puestos. Al decirle eso, volteó a ver a Ryoma, quien aún estaba un poco sonrojado después de haber tenido de esa forma a Sakuno.

. Pues... un accidente... choqué con Ryoma-kun, y digamos que fue algo... mmm... "avergonzante" y pues nos reto el profesor. –dijo Sakuno murmurando.

. Vaya... y dime ¿Cuándo vas a hablar con Gin-san?

. Pues creo que al almuerzo. Así podrá ser más relajado. –dijo con una sonrisa, sin percatarse de la expresión malévola que tenía en el rostro Tomoka.

&&&&&&

. Ryoma... ¿Qué pasó con Sakuno? –preguntó el chico de una sola ceja, o sea Horio.

. Sí ¿Qué significo todo eso allá afuera? –preguntó Kachirou.

. Pues, nada... fue un accidente. –dijo el chico escondiendo la cara entre los libros, ocultando su sonrojo. Aún no entendía bien como fue que terminó así, creía que ya sabía que era lo que sucedía con él... mismo. Debía reconocerlo, y era simplemente que se había... se había...

. NOO! –gritó en voz alta Ryoma, colocándose de pie, mientras todo el salón se volteaba a verlo. Se sonrojo un poco, pero lo pudo ocultar.

. Dígame señor Echizen¿mi clase resulta particularmente molesta que debe hacer cosas como esas? –preguntó enojado el profesor.

. Sí... o sea no. –estaba confundido, Sakuno también lo estaba mirando, y se ponía más nervioso. El profesor estaba al borde del colapso, así que con la voz más tranquila, pero temible, le dijo.

. Por favor señor Echizen retírese del salón. Quédese fuera hasta que termine mi clase. –lentamente Ryoma caminó a través del pasillo, hasta llegar a la puerta y mirar de reojo a Sakuno. Luego salió dando un portazo.

-.-.-.-

. Te fijaste como te miró, Sakuno –le dijo emocionada Tomoka a su amiga.

. Sí, si lo vi. –dijo mientras un pequeño sonrojo cubría su rostro. –pero recuerda que se supone que ya no me interesa. –terminó por decir, recostándose en la mesa.

. Pero... –Tomoka sabía que su amiga insistiría con eso. –tú misma lo dijiste. "se supone". Y por lo que pareciera con ese sonrojo, es que no se supone nada. –Sakuno la miró con cara de " no entendí nada de lo que dijiste". Pero no le tomó atención y se recostó con más confianza en la mesa. El profesor estaba entusiasmado escribiendo en la pizarra, así que no se daría cuenta que estaba descansando un poco la vista.

Vaya, Ryoma... cada vez es sin duda más lindo. El chico ahora había crecido unos veinticinco centímetros, midiendo casi un metro ochenta. Y su musculatura se había desarrollado, no en exceso, pero si dándole un aspecto sumamente varonil. Nyaa, si no fuera por que simplemente ni se fija que existo, por que apenas si se dio cuenta de que ya no me hace clases, sería todo tan perfecto. Y es que aunque fuera una "pequeña" como le decía a veces su abuela, no podía dejar de pensar en Ryoma... en como la había sujetado por la cintura, y en cómo si hubiera estado sola, lo hubiera podido besar.

. Ahhh... –suspiró, mientras un grueso sonrojo cubría su rostro. El sólo imaginar que Ryoma la podía llegar a besar, hacía que le dieran escalofríos por toda la espalda, y que una sonrisa un tanto... tonta, se instalara en su cara.

. Vaya Señorita Ryusaki... –sonó la voz del profesor sobre su cabeza. –así que usted también considera aburrida mi clase. –y tomando su cuaderno, miró que no tenía nada copiado. –y veo que ni siquiera necesita tomar apuntes de mis clases, entonces no habrá problema en que salga afuera y se pierda mi clase. –terminó de decir el profesor, mientras le hacía un espacio para que saliera al pasillo. –y espero que no tenga una conducta inapropiada con el señor Echizen afuera. Ya fue suficiente con el espectáculo que dieron al llegar. – definitivamente este profesor necesita casarse pronto, está demasiado amargado. Pensó Sakuno, mientras salía de la sala.

&&&&&&

. ¿Y tú? –preguntó intrigado Ryoma, al ver salir del salón a Sakuno. Él sabía lo responsable que era ella, así que no se explicaba los motivos por los que la podrían haber echado.

. Etto... –un sonrojo cubrió su rostro. Si supiera que era por "soñar" con él. –pues... me quedé dormida. –dijo con una sonrisa nerviosa. Ryoma la quedó mirando fijamente. Ya no recordaba el tiempo desde que no veía, así, un sonrojo que fuera sólo para él, y que estuvieran los dos solos.

Ambos se quedaron mirando y recordaron al mismo tiempo la caída que sufrieron en la puerta. Un nuevo sonrojo cubrió a los dos rostros.

. Maldito profesor amargado, que me echa de la sala. –murmuró con ira Ryoma, distrayendo sus pensamientos de esa escena, que no lo dejaba en paz.

. Sí, supongo que le falta una esposa. –agregó Sakuno con una sonrisa. Ambos estaban apoyados en el marco de la ventana del pasillo. (imagínense que es como el colegio de Ranma, y que los pasillos tienen ventanas). Desde allí alcanzaba a ver parte de las canchas de tenis, el resto lo tapaban algunos árboles de cerezo, que de a poco empezaban a llenar de flores todos los sitios. (tengan en cuenta que están a fines de Marzo, y faltan algunos días para que sea abril). Ryoma estaba concentrado mirando las largas trenzas que tenía Sakuno, y como en las puntas se le retorcían levemente. Quería tocarlas. Quería saber si eran tan suaves como las imaginaba. Agradecía a Kami, que cuando le había dicho que se cortara el pelo, hace un montón de tiempo, no le haya hecho caso.

. Me gustan –susurró suavemente, mientras se acercaba a Sakuno. Ella lo quedó mirando impresionada, no sabía a que se refería. Y un sonrojo cubrió sus mejillas. –se ven tan suaves. –pronunció con la voz levemente ronca. Hasta que al fin llegó junto a ella, la tenía presa entre la ventana, el pilar y su cuerpo. Podía ver como el sonrojo era más fuerte, y como la muchacha tenía la respiración entre cortada. Con lentitud subió la mano desde su bolsillo, hasta llegar a tocar la punta de una trenza.

. Ehhh... –no podía decir nada, su mente estaba en blanco, de lo único de lo que estaba completamente consciente era de esa mano que poco a poco subía por la trenza, llegando hasta su rostro.

. Sí, eran como las imaginaba... suaves, y delicadas... –la voz ronca hacía estremecer a Sakuno. Ryoma posó su vista en los labios, rosados, y no pudo evitar preguntarse si serían tan suaves como era el pelo de la dueña. Sakuno estaba petrificada, nunca pensó que Ryoma podría llegar a mirarla así. Hasta que una voz familiar interrumpió la escena.

. Vaya, Ryoma ¿qué haces afuera, no me digas que te portaste mal? –preguntó alegre Momoshiro, sin darse cuenta de la presencia de Sakuno, hasta encontrarse junto a ellos. -¿Qué... qué significa esto? –preguntó al borde del colapso, al ver a Sakuno, encerrada entre los brazos del actual capitán, y a los dos completamente sonrojados. Sabía que Sakuno estuvo un tiempo enamorada de Ryoma, pero no sabía que ellos dos tuvieran una relación seria... ni mucho menos secreta. –Oh... vaya, lo que es ser joven... –dijo con una sonrisa, mientras le desordenaba el pelo a Ryoma. –pero cosas como estas se hacen en algún lugar un poco más privado, imagínate que sale su profesor y los ve. Uhhh... eso llegaría hasta donde Sumire, y ahí sí que su secreto se sabría hasta en Chile. –dijo Momo riendo.

. Cállate –murmuró enojado Ryoma, ya tenía suficiente con que hubiera interrumpido el momento, como para que empezara a hablar tonteras. –mejor ándate, antes de que te obligue a dar cincuenta vueltas a las canchas, y a tomarte un jugo de Inui-sempai. – de algo le había servido, hacer caso de todos los consejos que le dio Tezuka, antes de irse.

. Está bien, está bien... pero hazme caso, llévala a algún lugar más privado, no querrás que todo el mundo se entere. –terminó de decir, mientras doblaba en la esquina. Sabía que Ryoma era perfectamente capaz de obligarlo a tomarse los jugos de Inui-sempai, y mientras pudiera, nada lo haría tomárselo... Nada.

.-.-.-.-.-.

. Yo... yo... etto –Sakuno no sabía que hacer o que decir. Ryoma había estado apunto de besarla, si no hubiera sido por Momo.

. No, no ha pasado nada. –dijo Ryoma, tratando de simular indiferencia. En eso sonó la campana, que marcaba el recreo, dejando salir a todos de los salones. Sakuno sabía que si lo miraba, no podría soportar y se largaría a llorar, como la vez cuando decidió dejar de amar a Ryoma...

&&&&&& Flash Back &&&&&&&

. Ryoma, no sabes como me gustas. –la voz de una muchacha se escuchó cerca de los vestidores de hombres, en las canchas de tenis. Los ojos de Sakuno se abrieron de la impresión. Alguien había tenido el valor para enfrentarse a Ryoma y decirle algo así. Los ojos de Sakuno se asomaron tímidamente a ver la escena, esperaba ver a la muchacha llorando, al saber que Ryoma la rechazaría, pero no... lo que vio la dejó impactada. La tipa estaba colgando del cuello de Ryoma, mientras le daba un beso.

. No... Ryoma... –la voz se le quebró... no esperaba que Ryoma fuera capaz de algo así... lo único que pudo hacer fue secarse las lágrimas que comenzaron a correr por su rostro, para salir corriendo del lugar.

. ¿qué te crees tú?. No me interesas en lo absoluto, menos aún una regalada como tú. –dijo Ryoma con crueldad, alejándola de su lado, para irse a buscar a Sakuno e ir a comprar las pelotas nuevas que necesitaban. Está claro que nunca la encontró, ni fueron a comprar juntos otra vez.

&&&&&& Fin Flash Back &&&&&&

. Sakuno¿Qué te ocurre? –preguntó preocupada Tomoka, al ver las lágrimas agolpadas en sus ojos.

. No... nada... salgamos de aquí mejor. –susurró tomándose de la mano de su mejor amiga.

.-.-.-.-.-.-.

Cuando llegaron bajo un árbol, algo alejado del resto de las personas Sakuno le contó lo que había ocurrido con Ryoma mientras estaban afuera.

. ¿Qué! –la cara de asombro de Tomoka no podía ser mayor. Realmente a Ryoma si se le podía aplicar su propia frase en el amor... Ryoma mada mada dane. Pensaba enojada Tomoka... ¡cómo podía tener tan poco tacto en las palabras alguien que era tan bueno en otras cosas? Se preguntaba Tomoka... –pero... –dijo algo más relajada. –no has pensado, que solo fueron los nervios... después de todo, ayer tu le gritaste, pero sólo fueron los nervios. –dijo Tomoka, tratando de que su amiga no se resintiera más con el príncipe, o sino no los podría juntar.

. Puede ser... pero por ahora... no lo quiero ver en lo más absoluto... –dijo cerrando los ojos con determinación.

. Etto... creo que va a ser algo difícil. –dijo nerviosa Tomoka.

. ¿Por qué? –preguntó Sakuno, intuyendo que había algo malo...

. El profesor dio un trabajo en parejas, y no me dejo ser contigo, dijo que como los dos estaban fuera serían los dos juntos. Y ahora yo tengo que ser con Kachirou. –dijo Tomoka, esperando el grito de su amiga.

. ¡QUÉ! Como voy a ser yo con Ryoma! Eso no puede ser... –sollozaba Sakuno, sabía que si la obligaban a estar tiempo con Ryoma no podría evitarlo y haría todo lo que él dijera, y no podría resistir sufrir algo como lo de hoy otra vez.

. Relájate... ¿Qué tan malo puede llegar a ser? –dijo inocente Tomoka, pero no agregó nada al ver la cara de "cállate o te mato" de Sakuno.

&&&&&&

El resto de las horas pasaron en absoluta normalidad, si se puede considerar normal, que el salón este con un ambiente tan denso que se corta con cuchillo, pero eso duró hasta la hora del almuerzo.

. Ven, vamos a almorzar –dijo Sakuno algo más animada que antes, mientras tomaba su almuerzo.

. Si, espérame afuera un momento, tengo que decirle algo a... a Kachirou y ya voy. –le dijo Tomoka, dándose la vuelta para dirigirse al fondo del salón. Al ver como Sakuno salía de la sala se dirigió hacía un chico de ojos casi ámbar.

. Hola Ryoma –dijo con una sonrisa Tomoka. –necesito decirte algo.

. Espérenme en la puerta –les dijo Ryoma a sus amigos. –está bien, dime. –dijo cerrando los ojos con indiferencia.

. Si te interesa un poco Sakuno –dijo Tomoka emocionada al ver que ahora el chico si le tomaba atención –entonces síguenos desde lejos... –pero en eso Tomoka pensó que lo mejor sería que no pareciera tan importante. –en realidad, mejor no nos sigas, no es algo de mucha importancia... Sí, en realidad no nos sigas, es mejor así, ella ya me contó lo que pasó, y creo que mejor no nos sigas... sí –ya estaba por salir de la sala, cuando se volteó a ver al chico que estaba perplejo con toda las cosas que la chica de coletas le dijo. –Ryoma... definitivamente mada mada dane. –le dijo mientras salía. (encontré que Tomoka se está pareciendo cada vez más a Ibu Shinji o.O)

&&&&&&

. Vamos Tomoka, debemos encontrar a Gin-kun antes de tener que entrar de nuevo a clases. –dijo Sakuno, corriendo, para llegar a las canchas de tenis. Era el último lugar que les faltaba por buscar, y el que parecía más obvio donde podría estar quien aspiraba al título de capitán de Seigaku que tenía Echizen.

. Ahí está –dijo Tomoka, señalando al chico que golpeaba una pelota contra una pared con fuerza. Siempre al mismo lugar. Igual a Ryoma. No pudo evitar comparar Sakuno.

. Ho... hola. –dijo Sakuno con timidez. Gin desvió la vista hacia Sakuno, mientras la pelota se devolvía, pero con maestría pudo detenerla sin mirar, y comenzar a rebotarla con la misma raqueta.

. Hola. –murmuró mirándola atentamente. Estaba algo sonrojada, de seguro andaba corriendo.

. Sakuno, te esperaré allá. –dijo Tomoka corriendo hacia una pared y dando la vuelta, chocando de frente con un chico que se encontraba agachado mirando a la pareja que ahora estaba sola. –Ryoma. –murmuró asombrada, no esperaba verlo así, espiando a Sakuno.

. Shhh. –dijo Ryoma, tratando de oír algo de lo que hablaba Sakuno con Gin. Con rapidez Tomoka se colocó junto a Ryoma, espiando a Sakuno y a Gin.

.-.--.

. Etto... bueno, yo... te buscaba para darte la dirección de mi casa. –dijo Sakuno algo nerviosa.

. Está bien. –dijo Gin mirándola.

. Ahh.. sí toma aquí está. –dijo pasándole una hoja doblada. Para Ryoma que estaba lejos y no escuchaba nada parecía como si le entregara una carta.

. Arrggg, demonios. –mascullaba con ira Ryoma. –maldito Gin.

. Gracias –dijo Gin, guardándola en un bolsillo.

. Entonces iras mañana a las dos ¿Cierto? –preguntó Sakuno.

. Sí, ya te lo dije ayer. –dijo Gin, dándose vuelta para seguir golpeando la pelota.

. Bueno, nos vemos. –dijo Sakuno retrocediendo un paso. –adiós. –dijo sacudiendo la mano, a lo que Gin se dio vuelta respondiéndole el gesto.

.-.-.

O.O Tomoka y Ryoma se encontraban en igual estado. Cada uno más impresionado al ver el gesto amable que le dedicó Gin a Sakuno.

. Nyaa no me lo creo! Mi amiga es tratada amablemente por Gin Akutsu! –gritaba emocionada Tomoka, sólo para lograr sacar algunos celos al ojos gatunos.

. ¿Qué demonios fue todo eso? –murmuraba enojado Ryoma. -¿por qué ella le dio una carta¿por qué él es tan amable con ella? –no toleraba que las sonrisas y los sonrojos que siempre eran para él, ahora los recibiera otro chico, y menos alguien como Gin. La ira lo dominaba por completo, por qué le dolía tanto ver que Sakuno se alejaba de él.

. Ryoma. –dijo Tomoka algo preocupada al ver el rostro tan enojado del chico. –Ryoma... relájate, no digas nada... –le decía la chica... quería evitar a toda costa alguna pelea entre los dos. - ¿te contó Kachirou que serás pareja de Sakuno en el trabajo de Biología? –preguntó Tomoka para distraerlo, lográndolo casi por completo.

. No, no me había dicho nada. –dijo asombrado. Quizá todavía tenía oportunidad de que Sakuno no se alejara de él.

. Volví –sonó alegre la voz de Sakuno, interrumpiendo la conversación de Tomoka y Ryoma. -¿Qué haces aquí Ryoma? –preguntó totalmente seria Sakuno.

. Me estaba preguntando por ti. –dijo Tomoka evitando una pelea. –era acerca del trabajo de biología que tienen que hacer juntos.

. Sí, eso –dijo Ryoma mirándola fijamente con las miradas que les dedicaba comúnmente a sus rivales en la cancha.

. Bueno, lo vemos el fin de semana. –dijo Sakuno retirando la vista, algo sonrojada. Nunca le podría ganar a Ryoma en una pelea de miradas. Menos aún, si esos ojos casi ámbar aún le provocaban cosas en el fondo del corazón. –me llamas... –pero no alcanzó a terminar, cuando vio que Ryoma había salido corriendo del lugar. –Ryoma... –susurró.

. Mmm, como que el príncipe Ryoma se emocionó con todo esto. –dijo ocultando una sonrisa Tomoka. Una parte de su plan ya estaba hecha.

&&&&&& continuará &&&&&&&

bueno, aquí está el tercer capítulo de este fic... jejeje espero que les haya gustado. Lo que es a mí... hubo varias partes que me encantaron... jejeje. Ahora les quisiera pedir un favor... ¿cuándo Ryoma juega contra Gin en el torneo de Kantou (creo) Nanjiroh lo ve jugar, o al menos ve a Gin?. Les pregunto, por que es una información que necesito para el próximo capítulo...

ahora les respondo a los rws:

Hibari T: Jajajaja gracias por tu rw, me sube el animo que me digan que les gusta…. Ahora respecto a Gin…. ADORO A LOS MALOS! Me encanta eso que sea tan malo, y luego empieze a cambiar…. Ejjeje por eso como que trata de ser buieno…. Jejejej bueno, mil besos y gracias de nuevo por tu rw

Cecilia: jejeje gracias por decirme que te gustaron los dos capis, me alegra que te gusten…. Dale, espero que te guste este también, y me dejas tu comentario para ver. Besos!

bueno, muchas gracias por el apoyo, aunque falto un solo rw para que fueran diez… no me queda más que esperar, que de seguro ahora me llegan los diez… por que quiero diez rws de nuevo... y bueno... nos vemos el próximo viernes!

Atte. Piri-chan.anti-kikio