MUNDOS DISTINTOS.

Capitulo 2: "Cambios, novedades y un suceso inesperado al inicio de curso"

-¡No puede ser tenia que tocarnos con ustedes!-exclamo un chico pelirrojo al ir subiendo al carruaje que les llevaría al colegio.

-¡Considérate afortunado, Weasel! Pocas veces podrás gozar con el privilegio de nuestra compañía-comento despectivamente el joven rubio tras oír la exclamación del pelirrojo, que enfureció notablemente por aquel comentario.

-¡Maldito hurón! Como te atreves…-empezó el chico pero una mano sobre su hombro le contuvo.

-¡Basta Ron! No hagas caso a Malfoy, en unos pocos minutos estaremos en el colegio y luego ya no tendremos que estar tan cerca-dijo con calma un chico de ojos verdes subiendo al carruaje, seguido por sus dos mejores amigos.

-¿Desde cuando te has vuelto tan aburrido, Potter?-dijo sarcástico Malfoy.

-¡No lo se, Malfoy! ¿Acaso no lo sabes tú? Después de todo ni mi vida, ni la de mis amigos gira en torno tuyo-dijo seriamente Potter observando fijamente al joven frente a el, quien no supo responder por lo que el breve viaje al colegio lo hicieron en completo silencio y al llegar a este la profesora McGonogall…

-Señores Potter, Malfoy y señorita Gragner, el director quiere verlos en su despacho antes de que vayan al comedor. Así que vayan; se conoce el camino señor Potter indiqueselo a sus compañeros y la contraseña es ¡Dulces de limón!-dijo la profesora yendo donde los de primer año.

-Por supuesto, vamos Hermione-dijo con calma el chico mientras ofrecía una mano a su amiga quien rápidamente le tomo entrelazando los dedos con los de su amigo.

-¿No piensas venir, Malfoy?-pregunto el chico deteniéndose al ver que el rubio no les seguía.

-¡Piérdete Potter! No necesito tu ayuda, yo puedo encontrar solo el camino-dijo arrogantemente el joven.

-¡Como quieras, Malfoy! Pero te advierto que ese no es el camino correcto-murmuro el chico al ver como el joven pretendía irse de largo, en lugar de doblar a la derecha como debía de ser, pero no dijo nada más ni siquiera cuando el otro joven les siguió.



Y así no tardaron en llegar frente a la estatua de un fénix y dándole la contraseña le permitió pasar.

-¡Hola Harry, señorita Gragner y señor Malfoy, sean bienvenidos!-saludo el profesor Dumblodore al verlos entrar.

-¡Hola profesor! ¿Por qué no mando a llamar?-pregunto curioso Harry.

-Les mandado llamar para informales que han sido nombrados prefectos de sus respectivas casas, debido a sus calificaciones, así como meritos propios-explico el profesor con una sonrisa.

-¿Prefectos? ¡Somos prefectos, que alegría Harry!-exclamo feliz Hermione abrazándose a su amigo, quien de inmediato devolvió el abrazo mientras intentaba tranquilizarla.

-¡Tranquila Mione! Tómalo con calma sabias que esto pasaría tarde o temprano ya que no hay nadie mejor que tu en todo Gryffindor, era justo que te nombrasen prefecta; así que ya no llores mas, sabes que no me gusta que lo hagas-dijo tiernamente Harry levantando el rostro de su amiga, secando con suavidad las lagrimas que por el mismo caían.

-¡Tienes razón, Harry! No debo llorar pero es que estoy tan contenta que no he podido evitarlo-dijo Hermione serenándose.

-¡Vaya que son cursis los Gryffindors!-exclamo despectivamente Malfoy tras ver aquella patética escena, que por extraño que fuese le producía una molestia que había comenzado desde que había visto has esos dos tomarse de la mano, aunque lo que mas le había afectado era el abrazo que la sangre sucia había dado a Potter y ¡El colmo! Este había devuelto, cuando había visto aquello sintió tanta rabia, tal deseo de arrancar a… ¡Potter! De los brazos de la sangre sucia y ser el, quien le abrazase dándose cuenta de que era absurdo ese raro sentir que no podía comprender muy bien y solo le confundía como durante su encuentro en el expreso.

-Profesor Dumblodore ¿Por qué no se nos informo por carta sobre esto? Es un tanto raro-dijo Harry con calma ignorando por completo al rubio aun cuando tenia una curiosa sensación que había empezado desde que le ofreció la mano a su amiga y que se había intensificado con el abrazo y que tenia que ver en mucho con la actitud del joven pues tenia la impresión de que estaba molesto y esa molestia seguía presente mientras aun abrazaba a su amiga. Seria que ¿Acaso Malfoy se sentiría atraído por ella?

Y sin saber por que pero tal pensamiento le hizo daño en especial por que no sabia si era por que Malfoy gustara de Hermione o por que ella pudiese hacerle caso y abandonarlos a el y Ron o tal vez sentía dolor por que había esperado que quien le gustase al joven fuese el… ¡Harry Potter!, pero este pensamiento le oculto en lo mas profundo de su corazón puesto que no tenia ningún sentido.

-¡Tienes razón, Harry! Debió informárseles en una carta pero por algunos detalles, eso no fue posible; ahora vayamos al comedor o de lo contrario no podrán comenzar con la selección-dijo el director dirigiéndose a la puerta de su despacho siendo seguido por los chicos.

-¿A que detalles se refiere, profesor?-pregunto Hermione separándose de Harry y emparejándose al profesor.

-No tienen importancia, señorita Gragner-dijo amablemente el anciano.

-¡Por supuesto que tienen importancia, profesor! Y de verdad me gustaría saber esos detalles-insistió la chica haciendo sonreír al anciano por su insistencia. Dejando atrás a Harry y Malfoy que no tenían ninguna prisa en alcanzarles.

-¡Vaya con Mione, si que puede ser insistente cuando se empeña en algo!-comento Harry para si aunque con voz un tanto alta al ver como su amiga seguía queriendo saber aquellos detalles.

-¡Tienes toda la razón, Potter! Realmente puede ser muy molesta Gragner-dijo Malfoy confundido por la mirada sorprendida que Harry le lanzo de reojo.

-¡Esta bien señorita Gragner, usted gana! Las razones por las que no se les envió los avisos fueron: uno, en el caso de Harry, por los Dursley`s pues ya resulta problemático con la carta de cada curso como para enviar otra; dos, con usted, fue por que tengo entendido que salio de vacaciones a Bulgaria por invitación del joven Víctor Krum y también tengo entendido que sus amigos no lo saben y tres, con el señor Malfoy, eso fue personal puesto que no quise aumentar el ego de Malfoy padre-dijo amablemente el profesor notando el ligero rubor de la chica que desde ese instante guardo silencio.

-¿Qué es lo que me esta pasando con Potter? ¿Por qué me siento tan confundido, cada vez que sus ojos esmeraldas me miran? Pero sobretodo ¿Por qué no he podido dejar de notar que ha cambiado bastante? Reconozco que se ve muy atractivo ¿Pero que demonios estoy pensando?-pensaba confuso Malfoy mientras observaba la espalda, puesto que ahora le separaban del otro chico como tres pasos estado detrás del mismo, de su rival que como ya había notado había crecido mucho por lo cual se notaba que de aquel chico enclenque y delgaducho de cinco años atrás había quedado en el olvido, ya que el chico ahora media 1.70 o 1.72 metros con lo que su cuerpo se había desarrollado, apreciándose bajo la túnica sus anchos hombros, su fuerte espalda, siendo muy atrayente su cuerpo aunque no solo este, sino también su rostro que también había cambiado pues ya no era mas el de un niño, por el contrario era ya el de un adolescente pues sus rasgos eran mas cincelados aun cuando existían rasgos que no cambiaban como aquella varicilla respingada y que quedaba perfecta con el resto de su cara, con esos labios rojos tan firmes, tan suaves que invitaban a ser probados y esas mejillas altas, sonrojadas siempre que le daban un aspecto de ternura e inocencia que tan bien le iban al chico pero lo mejor de su cara eran sus ojos verdes como las esmeraldas, aunque nunca había visto ninguna que tuviese su brillo y color como las del chico, tan llenos de vida, de esperanza, de calidez y extrañamente ahora de tristeza pero aun así seguían siendo hermosos, aun cuando se encontraran detrás de esas horribles gafas y que sin embargo le iban muy bien, ¡Demonios! ¿Es que acaso no había nada que pudiera criticarle? Se reprochaba Malfoy tras llegar a la conclusión de que el otro chico era simplemente perfecto.

Y mientras Malfoy llegaba aquella conclusión se hubiera sorprendido si hubiese podido leer los pensamientos de Harry.

-¿Gragner? ¿Desde cuando dice su apellido sin ponerle lo de sangre sucia? Con que así están las cosas; a lo mejor si es cierto que le gusta Hermione, será mejor que no se lo diga ni a ella, ni a Ron; pues estoy seguro que ella se horrorizaría y el le buscaría pleito, consiguiendo bajarle puntos a nuestra casa. Pero por que me importa de repente llevarme en paz con Malfoy ¡Es absurdo! Aunque debo reconocer que ha cambiado mucho estas vacaciones ¿Será por eso que me preocupa el que pueda lastimar a Ron? Ya que reconozco que ha crecido muchísimo, lo mismo que a desarrollado músculos, antes era excesivamente delgado, en cambio ahora…-un pequeño suspiro escapa por entre sus labios, que el otro joven a escuchado muy bien-…¡parece un ángel! Pero que tonterías estoy pensando y sin embargo si que lo parece, aun cuando es muy pálido pero no hay duda de que ese tono es perfecto para el, también es muy apuesto pues con solo 16 años es muy alto con facilidad me llevara varios centímetros pues debe de rondar el 1.78 o 1.80 metros y luego esta su rostro con esos rasgos finos, delicados, esos labios rosa pálido que tan bien le sientan y que hacen que me pregunte ¿Cómo se verán tras ser besados: Seguirán igual o se llenaran de pasión? ¡Dios! ¿Cómo puedo pensar ESO con Malfoy? Mas sin embargo no puedo dejar de pensar que parece un ángel aunque sea en realidad un demonio-pensaba Harry sintiendo unas inmensas ganas de golpearse la cabeza para borrar esos extraños pensamientos, pero para su suerte habían llegado al comedor por lo que no le quedo mas remedio que irse a su lugar, junto a Ron que se sorprendió al ver las insignias de prefectos que sus amigos lucían. Y así comenzó la selección que fue bastante pareja para las cuatro casas.

Luego de la selección y una deliciosa cena, todos los alumnos se retiraron a sus casas para disfrutar de un merecido descanso antes del comienzo de clases del día siguiente. Y horas mas tarde…

-¡Vaya, vaya pero si es Potter! Que sorpresa encontrarte por aquí, el verte hace que me pregunte si estas dando este paseo ¿Por qué es tu deber como prefecto o tomas ese cargo como excusa para poder pasear sin problemas?-dijo burlón Malfoy al toparse con Harry al doblar una esquina.

-Y yo no puedo evitar preguntarme ¿Por qué te interesan mis motivos?-dijo irónico el chico con un brillo de audacia y seguridad en los ojos que nunca antes el joven le había visto.

-Vaya Potter, ese tono irónico no lo conocía en ti, resulta muy Slytherin teniendo en cuenta que eres un Gryffindor pero luego de oírte ¿Quizás el sombrero se equivoco al enviarte a la casa de los leones? Tal vez debiste estar en la casa de la serpiente- dijo Malfoy con arrogancia, notando un brillo de malacia en dichas esmeraldas que no supo interpretar aunque no tuvo tiempo de averiguar a que se debía pues la siguiente acción del chico le saco por completo de onda.

-¡No sabes cuanta razón tienes Malfoy! Yo puede ser un Slytherin-susurro gravemente Harry acercando sus labios al oído del rubio, rozando con su cabello la mejilla del otro joven que puedo percibir el olor a hierbabuena que el cuerpo del chico desprendía y este a su vez noto el olor a menta que el rubio poseía.

-¡Nos veremos, Malfoy!-se despidió Harry separándose del consternado joven, dirigiéndose a la torre de Gryffindor.

-¡Maldita sea! ¿Qué fue lo que me sucedió con Potter? ¡Demonios! Y lo peor de todo es que me gusto el tono grave de su voz, su olor a hierbabuena y su cabello rozando mi mejilla ¿Qué es lo que me esta pasando, que?-se preguntaba el joven mientras entraba en su habitación.

-¡Al fin llegas, Draco! Empezaba a creer que no terminarías nunca tu ronda nocturna, en serio que Millicent y tú se toman duramente eso de haber sido nombrados prefectos-sonó de repente y sensualmente la voz de Blaise Zabini.

-Blaise ¿Qué estas haciendo en mi habitación? Son casi las 2 de la mañana-pregunto curioso Draco mientras se deshacía de su túnica.

-¿Lo has olvidado? Olvidaste que me hiciste una promesa, Draco-respondió Blaise mientras se incorporaba del lecho, donde estaba, dejando verse mostrando que solo llevaba puesto el fino pantalón de su pijama ya que su torso estaba desnudo.

-¡Ahora comprendo! No he olvidado esa promesa y supongo que has venido hacerme cumplirla ¿No es así?-dijo Draco indiferentemente tornándose su actitud aun mas fría al sentir el roce de los labios de su compañero sobre los suyos.

-¡Eres elegantemente frió, Draco! Especialmente cuando se trata de sexo, te vuelve al momento en una estatua de hielo pero no importa conseguiré que ardas en pasión, mi príncipe de hielo-susurro Blaise volviéndolo a besar, empezando a despojarle de sus ropajes con rapidez pero al mismo tiempo con sensual calma.

-¡No soy tu nada, Blaise! Y que quede claro que nunca dije que lo seria; así mismo este encuentro es solamente sexual no conlleva ninguna otra interpretación, por lo que no creas en ningún momento que soy tuyo. Los Malfoy`s no le pertenecemos a nadie excepto a nosotros mismos-dijo fríamente el joven indiferente ante el hecho de que su compañero había conseguido desnudarle con rapidez, quedando solo con su ropa interior.

-¿Cómo puedes decir eso? Prometiste que…-comenzó Blaise pero fue interrumpido por la voz del otro joven.

-¡No te confundas Zabini! Yo prometí que dejaría que me poseyeras en mi primera vez, mas nunca prometí que seria tuyo como pareces creer, además sabes tan bien como yo que este encuentro fue organizado por mi padre debido a que ya tengo la edad adecuada para tener alguna experiencia de este tipo, por lo que se te eligió a ti, solo por que Lucius pensó que con un chico no se involucrarían absurdos sentimentalismos como suele suceder con una chica mas el hecho de que no estuve de acuerdo en tener que hacerlo con alguno de sus conocidos puesto que todos son ya mayores; por lo que no olvides cual es tu posición en todo esto: tomaras mi cuerpo, me darás la experiencia que Lucius quiere y te marcharas una vez que todo termine y después no me molestaras mas si es que yo no le permito ¿Comprendido?-dijo cínico Draco despojándose de la ultima prenda que le cubría, recostándose a continuación en la cama, esperando que el otro joven se reuniera con el.

-¡Vaya! Con esas frías palabras pareces insinuar que no soy mejor que una prostituta ¿No es así? Bien, acepto las reglas de este juego: una vez que te haga mío, me marchare; pero antes responderme una curiosidad: ¿Existe algo que te excite, que despierte tu pasión y rompa tu frialdad? Lo pregunto por que es obvio que dejaras que sea yo quien haga todo el trabajo pues no pareces muy interesado en terminar con tu frialdad-dijo Blaise al tiempo que se desnudaba, reuniéndose con el otro joven, besándolo en los labios, continuando con su cuello, hombros, etc. Mientras sus manos acariciaban la entrepierna del mismo, sonriendo al sentir como el miembro de su compañero reaccionaba ante sus caricias, a pesar de saber que se trataba mas de algo mecánico que de una verdadera excitación.

-¿Existe algo que despierte mi pasión? Jamás lo había pensado antes ¿Hay algo que desee por mi y para mi? ¡No lo creo! Después de todo siendo un Malfoy todo lo que alguna vez he deseado me ha sido concedido, no hay nada que no fuese así- se decía el joven ajeno a las caricias de su amante, mientras aparecía en su mente el recuerdo de un chico de 11 años, de negro cabello alborotado e increíbles ojos verdes que rechazaba su ofrecimiento de amistad, seguido por otro recuerdo aquel de cuando caminaba por el pasillo rumbo al comedor y había comprendido que el chico era realmente perfecto pero sobretodo recordó el estremecimiento que sintió al escuchar su suave suspiro que había pensado parecía la respuesta a las caricias de un amante- ¿Así que si hay algo que deseo? Aunque lo deseo ¿Por qué rehusó mi amistad o por algo mas? No se cual sea la respuesta correcta, pero por extraño que parezca si existe algo que despierta mi deseo: unos ojos esmeraldas mas brillantes y atrayentes que ninguna joya ¡Eso es lo que deseo, lo que me apasiona!- pensaba Draco mientras se tensaba ante la inesperada sensación de dolor que le invadió ante la intrusión de Blaise quien marcaba un fuerte ritmo queriendo profundizar las penetraciones.

-¡mmm, Draco, mmm!-musitaba enfebrecido Blaise liberándose dentro del pálido cuerpo para luego desplomarse sobre el mismo tras alcanzar su clímax, intentando regular nuevamente su respiración.

-¡Ahora vete, Blaise! Ya nada tienes que hacer aquí-exclamo Draco empujando del cuerpo de su compañero, quitándoselo de encima y tras hacerlo se cubrió con rapidez con la sabana.

Al darse cuenta de la actitud del joven, de inmediato Zabini se vistió y se retiro de la habitación, asegurándole al joven que nadie sabría de tal encuentro, mientras Draco solamente asentía y al verlo salir…

-¡Idiota! Como lo desprecio por dejarse manipular por mi padre, pero me odio mas a mi mismo por no poder enfrentarme en contra de el y así elegir mi propia vida y no tener que seguir viviendo en esta soledad. Esta ha sido la peor experiencia de mi corta vida, jamás me había sentido tan humillado, ni siquiera con los castigos de Lucius-pensaba furioso Draco mientras algunas silenciosas lágrimas resbalaban por sus mejillas.

Y al día siguiente…

CONTINUARA…

Notas de Autora: Segundo capitulo, por fin. Espero les guste tanto como a mi, haganme saber sus sugerencias o criticas con sus reviews, se los agradecere mucho. El tercer capitulo sera "Dia de clases problemático" y trata del primer dia de clases y lo que puede suceder en una normal clase de pociones.