MUNDOS DISTINTOS.
Capitulo 10: Fiesta de cumpleaños y besos entregados.
-¿Lo odias, no es asi?-pregunto Dumblodore al ver el comportamiento de la joven.
-No tiene ni la menor idea; con tan solo nueve años aprendí a odiar a muchos, puesto que todo lo que amaba me fue a rebatado en un instante: mi familia, Sirius y Remus; no era justo que yo viviera sin James y sin Harry, metida en este colegio con usted, Severus y McGonogall, aprendí a odiar por no cumplir lo prometido, por decir que nada les pasaría a Harry, a James, mas sin embargo fueron incapaces de mantener su palabra siendo por eso que jamás me ha interesado estar dentro de la Orden del fénix puesto que quede muy decepcionada de la misma y de sus miembros-dijo Litzy seriamente mientras sacaba un pergamino de su túnica.
-Sino crees en la Orden ¿Por qué nos muestras los planes de Voldemort?-pregunto curioso Dumblodore.
-¡Albus tiene razón! Además de que ¿Cómo puedes confiar en un mortifago? Podria tratarse muy bien de una trampa-dijo Severus friamente.
-¡Claro que no se trata de una trampa! Tom no me engañaría nunca puesto que ambos buscamos lo mismo, el fin de Voldemort, ya que también el Lord oscuro destruyo a su familia, es un sentimiento de venganza el que nos mueve a los dos por eso es que me ha informado de estos planes, ya que no desea que Harry corra peligro y por ende yo; le preocupa sinceramente lo que pudiese ocurrirme- a diferencia de otros que conozco-asi que veamos lo que vamos hacer con estos planes-dijo la chica desplegando el pergamino, poniendo al tanto de los mismos a todos los presentes, quienes tomaron las medidas adecuadas para evitar el éxito de aquellos planes que seria el día de Halloween.
Luego de eso y algunas horas mas tarde, se realizo la tan esperada fiesta de cumpleaños de la Prof. Evans para la cual el gran hall fue decorado y hechizado con varios motivos mitológicos combinándose asi diversas entidades míticas, como eran columnas griegas y romanas, arabescas árabes, pirámides egipcias, templos chinos y nórdicos, etc., que impresionaban a los concurrentes a la reunión...
-¡Que extraño se ve el hall!-exclamo Ron sorprendido viendo desde la puerta el interior del lugar.
-Pero hay que admitir que se ve hermoso y espectacular con tan diversos temas mitológicos-dijo Hermione encantada por lo que veía.
-¡Tienes razón, Mione! Pero mejor entremos y felicitemos a la Prof. Evans-dijo sonriendo Harry mientras entraba junto a sus amigos al gran hall pero al hacerlo...
-¿Qué le sucedió a nuestra ropa?-pregunto Hermione, al notar como ahora los tres lucían ropas muy diferentes a las túnicas que llevan con anterioridad, percatándose de que todos en el salón también vestían de diferente manera a las tradicionales túnicas.
-¿Qué puede significar este cambio?-cuestiono Ron observando su ropa, la cual era una especie de saco peludo sujeto a la cintura con un grueso cinto, un pantalón de lana y botas de piel amarradas con cintas entrecruzadas.
-¡No lo se Ron!-respondió Hermione, por primera vez desconociendo la respuesta por el cambio, viendo que su ropa era una especie de túnica-vestido de color crema pálido, largo hasta los pies que estaban calzados con unas sandalias a juego con la ropa, además de llevar una especie de armadura sobre el pecho, brazaletes en ambos brazos y un casco en la cabeza, asi como un escudo y lanza-en miniatura- sobre el brazalete izquierdo y una pequeña figura alada en el derecho.
En cambio Harry vestía a su vez un chaleco negro con pequeñísimas incrustaciones de plata en el frente, quedando descubierto buena parte de su torso y abdomen, apreciándose asi lo musculoso que estaba, llevaba también un pantalón negro de piel tan ajustado y ceñido que no dejaba mucho a la imaginación, moldeándosele un precioso y tentador trasero, viéndose mas apuesto que nunca antes.
-¡Vaya Harry, luces genial!-exclamo Hermione impresionada por la apariencia del chico, con un ligero rubor en las mejillas.
-¡Muchas gracias, Mione! Tu también te ves divina-respondió un poco avergonzado Harry pues se sentía algo incomodo con aquellas ropas pues no le pasaban desapercibidas las miradas de admiración que le lanzaban por igual chicos y chicas de todas las casas.
-¡Vaya contigo Harry! En verdad que no estas acostumbrado a que te admiren y eso que a James le encantaba atraer la atención de todo el mundo ¿verdad Remus?-dijo repentinamente Litzy acercándose junto con Severus, Remus y Sirius hasta donde estaba el trío dorado.
-¡Asi es, Litzy!-respondió Remus que vestía una túnica de seda azul añil con un cinto negro en la cintura, un pantalón negro de algodón y botines negros de piel y un arpa sujeta del cinto.
-¿Qué es todo esto? Ya que por lo que veo también están disfrazados-dijo Harry confundido al ver no solo a Remus, sino también a Severus, Sirius y la misma profesora llevaban diferentes ropas.
Siendo, en el caso de, Severus un atuendo completamente negro desde la ropa hasta la especie de armadura y capa que llevaba puesto, que le hacían lucir bastante bien; Sirius por su parte llevaba un chaleco amarillo de algodón abierto, como el de Harry aunque menos que este, que mostraba su torso, unos pantalones cruzados por varias tiras de piel de color café y botas del mismo estilo y un par de brazaletes en los antebrazos que le hacían verse muy atractivo y en cuanto a Litzy, ella llevaba una túnica-vestido muy similar al de Hermione pero con algunas diferencias como eran el color ya que era de un azul muy claro, asi mismo caía a la altura de los hombros dejándolos descubiertos, llevaba también un tocado de flores silvestres entrelazadas en su corto cabello, un collar de margaritas, un cinturón de verdes helechos y zapatillas blancas con cintas entrecruzadas que subían hasta la mitad de sus piernas.
-¿Te acuerdas que mencione que me gustaba mucho la mitología?-Harry asintió- Pues convencí al profesor Dumblodore de que permitiera celebrar mi cumpleaños con tal tema, además de encantar la puerta del hall para que al entrar las ropas de los invitados cambiaran por las de un ser mítico, es por eso que tu y tus amigos, asi como los demás, han cambiado de ropa, pero ya se darán cuenta conforme avance la fiesta y ahora vayan a divertirse-dijo Litzy sonriendo a los chicos.
-Solo por curiosidad ¿Quién se supone que soy?-pregunto Harry extrañado.
-¡Ares, el dios de la guerra, un dios oscuro!-respondió Litzy guiñándole un ojo al chico, mientras les hacia gestos de despedida, asi se marcharon, tras colocar sus obsequios en un mesa arreglada para tal propósito fueron en busca de comida y tras servirse de comer, buscaron donde sentarse pues al estar el comedor cambiado, no había sillas sino mas bien una infinidad de posibilidades; separándose en la búsqueda quedando asi Harry sentado junto a Draco Malfoy, puesto que fue el primer sitio desocupado que encontró, quien lucia un traje completamente blanco, exactamente igual al suyo excepto que los adornos eran dorados, no plateados y el pantalón y chaleco eran de seda, no de piel, quedando también su pecho descubierto.
-¡Me sorprendes, Potter! ¿Cómo puedes sentarte sin romper esos pantalones tan ajustados? Que son bastante atrevidos y dudo mucho que sean tu estilo-dijo Draco burlón al ver al chico sentarse a su lado, recurriendo a la burla debido a que no había podido evitar que el corazón le latiera apurado al ver lo bien que se veía el chico.
-¡No tengo la menor idea, Malfoy! Y por curiosidad, en ningún momento creas que te hago conversación, ¿Quién se supone que eres tu?-pregunto Harry intentando mostrarse indiferente, aun cuando por dentro se sentía impresionadísimo al ver lo apuesto y magnifico que lucia el otro joven con su atuendo que le hacia verse espectacular.
-De acuerdo a la profesora Evans: soy Apolo dios de las bellas artes y hasta de la paz, un dios de luz; algo que considero bastante tonto pero que se le va hacer ¿Quién eres tu?-devolvió la pregunta Draco al ojiverde.
-¡mmm, asi que Apolo! Es curioso ya que se supone que soy Ares, dios de la guerra, un dios oscuro-respondió Harry con calma, mientras comía su cena, ignorando al rubio, lo cual le resultaba muy difícil en especial por que no podía dejar de pensar que era una extraña coincidencia que incluso como seres mitológicos eran tan opuestos y tan parecidos como siempre lo habían sido.
-Resulta curioso ver a Harry y a Malfoy juntos y sin insultos de por medio-comento Remus observando a los dos chicos, desde otro extremo del comedor junto a Litzy, Sirius y Severus.
-¡Eso es cierto, Remus! Probablemente están intentando de asimilar sus aspectos por que ¿Cuándo verás a los chicos más guapos de gryffindor y slytherin con tales ropas? Ya que una cosa es que haya encantado la puerta para el cambio de imagen pero ha sido la magia quien eligió tales ropas para ellos y hay que admitir que ambos lucen fantásticos, aunque Harry luce mucho mas tentador que nunca con esa ropa, luciendo casi como un pecado y a muchos les gustaría ser pecador; en cambio Malfoy es mas como un sueño irreal, algo sagrado y purificante y la mayoría desearía ser purificado por tan bello sueño y lo mas extraño es que Harry tiene un aire de inocencia que Malfoy no posee resultando irónico que la magia vistiera al primero de pecado y al segundo de pureza-dijo Litzy observando a los dos jóvenes con atención.
-¡Interesante observación, Litzy!-comento el Prof. Dumblodore acercándose a los profesores junto a la profesora McGonogall, quien no lucia muy feliz.
-Profesora Evans puede saberse ¿Quién le concedió permiso para traer cervezas de mantequilla a esta ridícula fiesta?-pregunto imperiosa la profesora.
-¡Dumblodore! Estuvo de acuerdo en que podía haber cervezas de mantequilla y Snuffles y Remus me ayudaron a traerlas desde Hosmeade, profesora y si me disculpan iré a dar una vuelta, después de todo es una fiesta-dijo la chica con tranquilidad mientras se daba media vuelta para regresar al bullicio del lugar, pero en el instante en que lo hizo...
-¿Qué significa eso?-dijo escandalizada McGonogall al ver un tatuaje sobre el hombro izquierdo de la joven que se había quedado paralizada ante la pregunta que pronto entendió al darse cuenta de que señalaba hacia su espalda.
-¡OH genial!-pensó Litzy suspirando internamente.
-¿Es un tatuaje, verdad Litzy?-pregunto curioso Sirius acercándose a la espalda de la chica para poder observar mejor el dibujo que se trataba de uno bastante elaborado ya que hacia arriba y hacia afuera estaba plasmada una luna en cuarto creciente de un blanco purísimo, resplandeciente y casi "como si volara" hacia ella, un halcón de negro y oscuro plumaje que llevaba en el pico una rosa y un girasol, asi como enredadas entre las plumas flores de jazmín y en el "viento" hojas de limón, olivo, hierbabuena, menta y pino, llegando todos a la conclusión de que era un bello tatuaje.
-¡Si, es un tatuaje Sirius!-dijo Litzy como si nada, sin perder la tranquilidad.
-Vaya, vaya jamás creí encontrar una manera tan sencilla de deshacerme de usted, profesora Evans y pensar que usted ha sido quien me la ha proporcionado, cuando en el ministerio se enteren que ha hecho magia oscura por un tatuaje es probable que le envíen a Azkaban ¡Que pena!-dijo Minerva con fingida tristeza que no convenció a nadie en absoluto.
-Eso es algo que no tiene por que suceder Minerva, ya que podemos guardar el secreto pues posiblemente Litzy este arrepentida de haberse tatuado ¿no es cierto?-dijo Dumblodore con su penetrante mirada fija en la joven, que ni siquiera se inmuto ante eso.
-¡En absoluto! Yo quería este tatuaje y aun más, tras el trabajo que me costo realizarlo puesto que no es muy sencillo, mas bien es bastante elaborado; por mi Fudge se puede enterar, tiene mi permiso para decírselo, Prof. McGonogall; estaré encantada de mostrarlo pero también coméntele al señor Weasley; se por sus hijos que le fascinan las cosas de origen muggle por lo que estoy segura que le encantaría mi tatuaje-dijo Litzy con ironía y cinismo mientras una sonrisa cruzaba su rostro.
-¿A que te refieres con que a Arthur le encantaría?-pregunto Remus extrañado.
-¡Pues eso! ¿Quien no encontraría fascinante un tatuaje MUGGLE? Y vaya que tuve problemas para localizar un lugar que pudiera hacer este diseño-dijo Litzy ampliando aun mas su sonrisa ante la cara de consternación de McGonogall.
-¿Muggle? ¡Imposible!-exclamo McGonogall confusa.
-¡Muggle, exactamente! Cree que soy estupida como para no saber que esta prohibido usar magia por un tatuaje, sobretodo por que se tiene que usar magia oscura pero ¿para que hacerlo? cuando los muggles tienen maneras dolorosas-no hay duda de eso-de hacerlo; por lo que estoy muy orgullosa del resultado en vista de todo el tiempo que tuve que pasar con el ruido del aparato tatuador, ya que este diseño tiene todo lo que deseaba-dijo Litzy
-¡Maldita!-escupió rabiosa McGonogall mientras se marchaba de ahí, furiosa.
-¿En verdad es muggle o solo lo dijiste por molestar a Minerva?-pregunto Dumblodore curioso.
-Tiene mi palabra de que es muggle. No soy tan tonta como para no saber que la magia oscura esta prohibida, asi solo se trate de un tatuaje y ya que estos no están prohibidos si son muggles...pues ya vio el resultado. Ahora seguiré disfrutando de mi fiesta sobretodo ahora que ya fastidie aun mas a McGonogall y si se lo están preguntando solo diré que hacerme este tatuaje fue por que es una manera de representar a toda mi familia-dijo Litzy reintegrándose a la fiesta, de la cual disfruto como nunca antes, bailando con los presentes incluidos Severus y Malfoy aunque no lo hicieron con muchas ganas.
Y tras algunas horas mas, la fiesta concluyo, retirándose todos a sus respectivas casas donde no tardaron en dormir pero en algunos casos se cumplía con su deber...
-Parece que todos están ya en sus casas ¡Que bueno! Entonces es mejor que también vaya a descansar; en verdad estoy agotado tras esta fiesta, que estuvo muy divertida a pesar de que algunos se pasaron de tragos con la cerveza de mantequilla algo que jamás hubiera creído posible pero Crabbe y Goyle son prueba de que uno si puede emborracharse con ella-pensaba divertido Harry sonriendo al recordar el ridículo de aquel par de chicos durante la fiesta y tan ensimismado iba en sus recuerdos que no se percato de que había alguien bloqueándole el camino hasta que choco de frente contra esa persona que resulto ser...
-Zabini! ¿Qué hace fuera de su casa a estas horas? Es mejor que regrese a su habitación o tendré que darle una detención por vagabundear a deshoras-dijo seriamente Harry al ver con quien había chocado, separándose del otro chico.
-¡mmm, pero si es Potter, el delicioso y exquisito Potter!-susurro Zabini de forma sensual mientras se acercaba al chico quien lucia confundido por las palabras del slytherin y debido a eso no reacciono cuando el mismo lo empujo contra la pared del pasillo, atrapándolo entre ella y su cuerpo.
-¿Qué demonios crees que estas haciendo, Zabini? ¡Suéltame inmediatamente!-exclamo indignado Harry haciendo esfuerzos por soltarse del agarre del otro, especialmente al darse cuenta de que su aliento olía a licor, resultándole obvio que Goyle y Crabbe no habían sido los únicos en pasarse de tragos.
-¡Quieto, estupido gryffindor! Deja de estarte moviendo como si tuvieras comezón, no te haré nada malo-por el momento- solo quiero besarte y quizás luego te haga mío ¡Ahora quieto!-exclamo Zabini aplicando mayor fuerza a su agarre intentando inmovilizar al ojiverde que estaba pálido tras oír las palabras del slytherin.
-¡Suéltame Zabini, suéltame!-decía desesperado Harry renovando frenéticamente sus esfuerzos por liberarse consiguiendo solo hacerse daño pues el agarre del otro era muy fuerte.
-¡Estupido e idiota gryffindor, Inmovilus!-exclamo Blaise lanzando un hechizo inmovilizador sobre Harry, que no dejaba de gritar que le soltara pero fue bruscamente silenciado por unos labios que se presionaron con fuerza y brutalidad sobre los suyos provocándole un agudo dolor en especial cuando se negó a permitirle paso a una lengua extraña al interior de su boca.
-¡Tenias que ser gryffindor, Potter! Obstinado como solo ellos saben serlo, pero no me importa,, ya que eso lo hace aun mas interesante ¿no lo crees asi?-dijo Blaise sensualmente tras liberar los lastimados labios del chicos, para a continuación bajar con sensuales besos por el cuello del ojiverde, mientras sus manos exploraban por entre el pijama, el cuerpo del mismo.
-¡DEJAME EN PAZ ZABINI, SUELTAME!-gritaba desesperado Harry, sintiéndose impotente por no poder detener aquel idiota que empezaba a tomarse demasiadas libertades con su cuerpo, desabrochando los botones de su pijama pero antes de que avanzara mas...
-¡Repulsor!-exclamo la voz de Draco, que venia de hacer su ronda y había sido atraído por los gritos del chico gryffindor y al encontrarse con aquella escena, una rabia lo invadió y por eso ataco a Zabini, estrellándolo contra una pared haciéndolo perder la conciencia, mientras Harry palidecía ante esto, no sabiendo que pensar ante el hecho de que Malfoy lo había rescatado.
-¡Finite incantatem!-murmuro Draco señalando a Harry, liberándolo de la inmovilización, quien al sentirse libre se deslizo lentamente por la pared hasta caer al suelo totalmente anonadado por lo sucedido.
-¿Estas bien, Potter?-pregunto Draco suavemente acercándose al chico, tras comprobar que Blaise estuviera bien aunque inconsciente.
-¿Por qué?-fue todo lo que Harry dijo al ver acercarse al rubio quien lucia confundido por la pregunta del moreno.
-¡No lo se, Potter! No se por que Blaise se ha comportado de esta forma, tal vez se debe a que le resultas atrayente; quizás no te has dado cuenta pero eres un chico muy guapo y con el atuendo que has usado esta noche todo el mundo se dio cuenta de lo atractivo que eres, chico-dijo Draco con suavidad ofreciendo su mano al otro para ayudarlo a levantarse, sorprendiéndose al ver como Harry la tomaba, entrelazando los dedos y no solo eso, sino que antes de soltarle dio un gentil beso en el dorso de la misma.
-¡POTTER!-exclamo Draco al sentir los labios del chico en su mano.
-¡No me refería a eso, Malfoy! Suelo no prestar atención a muchas cosas pero esta noche no me paso desapercibido que chicas y chicos por igual, no dejaron de observarme durante toda la fiesta; cuando pregunte ¿Por qué? Me refería a ti ¿Por qué me ayudaste en contra de Zabini?-dijo Harry sin miedo, solo con ternura en la voz.
-Por que contrario a lo que puedas pensar, no me gustan las injusticias ni que se aprovechen de quien no puede defenderse-respondió Draco perdido en la tierna mirada del ojiverde asi como su aroma a hierbabuena, por lo que sin darse cuenta de lo que hacia beso con suavidad la mejilla del moreno.
-¡MALFOY!-susurro Harry al sentir la suave caricia del rubio, sonrojándose sin poderlo evitar.
-¿Te he ofendido, Potter?-pregunto Draco viendo a los ojos del chico, lo que no le resultaba difícil pues se llevaban pocos centímetros de diferencia, dándose cuenta de que en los ojos de Harry había sorpresa, confusión pero no ofensa, ni siquiera molestia como cabria esperar.
-¡No, No lo has hecho, Malfoy! Pero me gustaría que...-dijo Harry perdido en el aroma del rubio, ese aroma a suave menta inglesa asi como en el brillo exquisito de esos ojos de plata, pasando sin darse cuenta la punta de su lengua por encima de sus labios atrayendo la mirada del joven hacia estos.
-¡Comprendo Potter!-susurro Draco antes de tomar los labios del chico con un suave y exquisito beso sin lastimarlo mas por el contrario parecía que quería curar el daño causado por Zabini, para lo cual paso con gentileza la punta de su lengua solo por encima, probando el sabor de aquellos tiernos labios sin intentar entrar al interior de esa boca, por lo que se sorprendió cuando la misma se abrió permitiéndole paso, deleitándose con la calidez y sabor a hierbabuena de la misma, al mismo tiempo que el chico exploraba por su cuenta su interior, mezclándose la menta y hierbabuena en ese suave, exquisito y apasionado beso.
CONTINUARA...
Notas de la autora: Otro capitulo arriba que espero les agrade como los anteriores, háganme saber sus comentarios en sus reviews, son mi pago.
En cuanto a los disfraces son asi:
Ron es un vikingo, Hermione es la diosa Athena, Remus es Orfeo, Sirius es Hércules, Severus es Hades, Litzy es Persefone, Dumblodore es Merlín y McGonogall es Hera. Creo que esas son algunas de las dudas que pueden tener, si surgen mas háganmelas saber en sus comentarios y como anteriormente dije sigo dejando pistas.
Capitulo 10: Fiesta de cumpleaños y besos entregados.
-¿Lo odias, no es asi?-pregunto Dumblodore al ver el comportamiento de la joven.
-No tiene ni la menor idea; con tan solo nueve años aprendí a odiar a muchos, puesto que todo lo que amaba me fue a rebatado en un instante: mi familia, Sirius y Remus; no era justo que yo viviera sin James y sin Harry, metida en este colegio con usted, Severus y McGonogall, aprendí a odiar por no cumplir lo prometido, por decir que nada les pasaría a Harry, a James, mas sin embargo fueron incapaces de mantener su palabra siendo por eso que jamás me ha interesado estar dentro de la Orden del fénix puesto que quede muy decepcionada de la misma y de sus miembros-dijo Litzy seriamente mientras sacaba un pergamino de su túnica.
-Sino crees en la Orden ¿Por qué nos muestras los planes de Voldemort?-pregunto curioso Dumblodore.
-¡Albus tiene razón! Además de que ¿Cómo puedes confiar en un mortifago? Podria tratarse muy bien de una trampa-dijo Severus friamente.
-¡Claro que no se trata de una trampa! Tom no me engañaría nunca puesto que ambos buscamos lo mismo, el fin de Voldemort, ya que también el Lord oscuro destruyo a su familia, es un sentimiento de venganza el que nos mueve a los dos por eso es que me ha informado de estos planes, ya que no desea que Harry corra peligro y por ende yo; le preocupa sinceramente lo que pudiese ocurrirme- a diferencia de otros que conozco-asi que veamos lo que vamos hacer con estos planes-dijo la chica desplegando el pergamino, poniendo al tanto de los mismos a todos los presentes, quienes tomaron las medidas adecuadas para evitar el éxito de aquellos planes que seria el día de Halloween.
Luego de eso y algunas horas mas tarde, se realizo la tan esperada fiesta de cumpleaños de la Prof. Evans para la cual el gran hall fue decorado y hechizado con varios motivos mitológicos combinándose asi diversas entidades míticas, como eran columnas griegas y romanas, arabescas árabes, pirámides egipcias, templos chinos y nórdicos, etc., que impresionaban a los concurrentes a la reunión...
-¡Que extraño se ve el hall!-exclamo Ron sorprendido viendo desde la puerta el interior del lugar.
-Pero hay que admitir que se ve hermoso y espectacular con tan diversos temas mitológicos-dijo Hermione encantada por lo que veía.
-¡Tienes razón, Mione! Pero mejor entremos y felicitemos a la Prof. Evans-dijo sonriendo Harry mientras entraba junto a sus amigos al gran hall pero al hacerlo...
-¿Qué le sucedió a nuestra ropa?-pregunto Hermione, al notar como ahora los tres lucían ropas muy diferentes a las túnicas que llevan con anterioridad, percatándose de que todos en el salón también vestían de diferente manera a las tradicionales túnicas.
-¿Qué puede significar este cambio?-cuestiono Ron observando su ropa, la cual era una especie de saco peludo sujeto a la cintura con un grueso cinto, un pantalón de lana y botas de piel amarradas con cintas entrecruzadas.
-¡No lo se Ron!-respondió Hermione, por primera vez desconociendo la respuesta por el cambio, viendo que su ropa era una especie de túnica-vestido de color crema pálido, largo hasta los pies que estaban calzados con unas sandalias a juego con la ropa, además de llevar una especie de armadura sobre el pecho, brazaletes en ambos brazos y un casco en la cabeza, asi como un escudo y lanza-en miniatura- sobre el brazalete izquierdo y una pequeña figura alada en el derecho.
En cambio Harry vestía a su vez un chaleco negro con pequeñísimas incrustaciones de plata en el frente, quedando descubierto buena parte de su torso y abdomen, apreciándose asi lo musculoso que estaba, llevaba también un pantalón negro de piel tan ajustado y ceñido que no dejaba mucho a la imaginación, moldeándosele un precioso y tentador trasero, viéndose mas apuesto que nunca antes.
-¡Vaya Harry, luces genial!-exclamo Hermione impresionada por la apariencia del chico, con un ligero rubor en las mejillas.
-¡Muchas gracias, Mione! Tu también te ves divina-respondió un poco avergonzado Harry pues se sentía algo incomodo con aquellas ropas pues no le pasaban desapercibidas las miradas de admiración que le lanzaban por igual chicos y chicas de todas las casas.
-¡Vaya contigo Harry! En verdad que no estas acostumbrado a que te admiren y eso que a James le encantaba atraer la atención de todo el mundo ¿verdad Remus?-dijo repentinamente Litzy acercándose junto con Severus, Remus y Sirius hasta donde estaba el trío dorado.
-¡Asi es, Litzy!-respondió Remus que vestía una túnica de seda azul añil con un cinto negro en la cintura, un pantalón negro de algodón y botines negros de piel y un arpa sujeta del cinto.
-¿Qué es todo esto? Ya que por lo que veo también están disfrazados-dijo Harry confundido al ver no solo a Remus, sino también a Severus, Sirius y la misma profesora llevaban diferentes ropas.
Siendo, en el caso de, Severus un atuendo completamente negro desde la ropa hasta la especie de armadura y capa que llevaba puesto, que le hacían lucir bastante bien; Sirius por su parte llevaba un chaleco amarillo de algodón abierto, como el de Harry aunque menos que este, que mostraba su torso, unos pantalones cruzados por varias tiras de piel de color café y botas del mismo estilo y un par de brazaletes en los antebrazos que le hacían verse muy atractivo y en cuanto a Litzy, ella llevaba una túnica-vestido muy similar al de Hermione pero con algunas diferencias como eran el color ya que era de un azul muy claro, asi mismo caía a la altura de los hombros dejándolos descubiertos, llevaba también un tocado de flores silvestres entrelazadas en su corto cabello, un collar de margaritas, un cinturón de verdes helechos y zapatillas blancas con cintas entrecruzadas que subían hasta la mitad de sus piernas.
-¿Te acuerdas que mencione que me gustaba mucho la mitología?-Harry asintió- Pues convencí al profesor Dumblodore de que permitiera celebrar mi cumpleaños con tal tema, además de encantar la puerta del hall para que al entrar las ropas de los invitados cambiaran por las de un ser mítico, es por eso que tu y tus amigos, asi como los demás, han cambiado de ropa, pero ya se darán cuenta conforme avance la fiesta y ahora vayan a divertirse-dijo Litzy sonriendo a los chicos.
-Solo por curiosidad ¿Quién se supone que soy?-pregunto Harry extrañado.
-¡Ares, el dios de la guerra, un dios oscuro!-respondió Litzy guiñándole un ojo al chico, mientras les hacia gestos de despedida, asi se marcharon, tras colocar sus obsequios en un mesa arreglada para tal propósito fueron en busca de comida y tras servirse de comer, buscaron donde sentarse pues al estar el comedor cambiado, no había sillas sino mas bien una infinidad de posibilidades; separándose en la búsqueda quedando asi Harry sentado junto a Draco Malfoy, puesto que fue el primer sitio desocupado que encontró, quien lucia un traje completamente blanco, exactamente igual al suyo excepto que los adornos eran dorados, no plateados y el pantalón y chaleco eran de seda, no de piel, quedando también su pecho descubierto.
-¡Me sorprendes, Potter! ¿Cómo puedes sentarte sin romper esos pantalones tan ajustados? Que son bastante atrevidos y dudo mucho que sean tu estilo-dijo Draco burlón al ver al chico sentarse a su lado, recurriendo a la burla debido a que no había podido evitar que el corazón le latiera apurado al ver lo bien que se veía el chico.
-¡No tengo la menor idea, Malfoy! Y por curiosidad, en ningún momento creas que te hago conversación, ¿Quién se supone que eres tu?-pregunto Harry intentando mostrarse indiferente, aun cuando por dentro se sentía impresionadísimo al ver lo apuesto y magnifico que lucia el otro joven con su atuendo que le hacia verse espectacular.
-De acuerdo a la profesora Evans: soy Apolo dios de las bellas artes y hasta de la paz, un dios de luz; algo que considero bastante tonto pero que se le va hacer ¿Quién eres tu?-devolvió la pregunta Draco al ojiverde.
-¡mmm, asi que Apolo! Es curioso ya que se supone que soy Ares, dios de la guerra, un dios oscuro-respondió Harry con calma, mientras comía su cena, ignorando al rubio, lo cual le resultaba muy difícil en especial por que no podía dejar de pensar que era una extraña coincidencia que incluso como seres mitológicos eran tan opuestos y tan parecidos como siempre lo habían sido.
-Resulta curioso ver a Harry y a Malfoy juntos y sin insultos de por medio-comento Remus observando a los dos chicos, desde otro extremo del comedor junto a Litzy, Sirius y Severus.
-¡Eso es cierto, Remus! Probablemente están intentando de asimilar sus aspectos por que ¿Cuándo verás a los chicos más guapos de gryffindor y slytherin con tales ropas? Ya que una cosa es que haya encantado la puerta para el cambio de imagen pero ha sido la magia quien eligió tales ropas para ellos y hay que admitir que ambos lucen fantásticos, aunque Harry luce mucho mas tentador que nunca con esa ropa, luciendo casi como un pecado y a muchos les gustaría ser pecador; en cambio Malfoy es mas como un sueño irreal, algo sagrado y purificante y la mayoría desearía ser purificado por tan bello sueño y lo mas extraño es que Harry tiene un aire de inocencia que Malfoy no posee resultando irónico que la magia vistiera al primero de pecado y al segundo de pureza-dijo Litzy observando a los dos jóvenes con atención.
-¡Interesante observación, Litzy!-comento el Prof. Dumblodore acercándose a los profesores junto a la profesora McGonogall, quien no lucia muy feliz.
-Profesora Evans puede saberse ¿Quién le concedió permiso para traer cervezas de mantequilla a esta ridícula fiesta?-pregunto imperiosa la profesora.
-¡Dumblodore! Estuvo de acuerdo en que podía haber cervezas de mantequilla y Snuffles y Remus me ayudaron a traerlas desde Hosmeade, profesora y si me disculpan iré a dar una vuelta, después de todo es una fiesta-dijo la chica con tranquilidad mientras se daba media vuelta para regresar al bullicio del lugar, pero en el instante en que lo hizo...
-¿Qué significa eso?-dijo escandalizada McGonogall al ver un tatuaje sobre el hombro izquierdo de la joven que se había quedado paralizada ante la pregunta que pronto entendió al darse cuenta de que señalaba hacia su espalda.
-¡OH genial!-pensó Litzy suspirando internamente.
-¿Es un tatuaje, verdad Litzy?-pregunto curioso Sirius acercándose a la espalda de la chica para poder observar mejor el dibujo que se trataba de uno bastante elaborado ya que hacia arriba y hacia afuera estaba plasmada una luna en cuarto creciente de un blanco purísimo, resplandeciente y casi "como si volara" hacia ella, un halcón de negro y oscuro plumaje que llevaba en el pico una rosa y un girasol, asi como enredadas entre las plumas flores de jazmín y en el "viento" hojas de limón, olivo, hierbabuena, menta y pino, llegando todos a la conclusión de que era un bello tatuaje.
-¡Si, es un tatuaje Sirius!-dijo Litzy como si nada, sin perder la tranquilidad.
-Vaya, vaya jamás creí encontrar una manera tan sencilla de deshacerme de usted, profesora Evans y pensar que usted ha sido quien me la ha proporcionado, cuando en el ministerio se enteren que ha hecho magia oscura por un tatuaje es probable que le envíen a Azkaban ¡Que pena!-dijo Minerva con fingida tristeza que no convenció a nadie en absoluto.
-Eso es algo que no tiene por que suceder Minerva, ya que podemos guardar el secreto pues posiblemente Litzy este arrepentida de haberse tatuado ¿no es cierto?-dijo Dumblodore con su penetrante mirada fija en la joven, que ni siquiera se inmuto ante eso.
-¡En absoluto! Yo quería este tatuaje y aun más, tras el trabajo que me costo realizarlo puesto que no es muy sencillo, mas bien es bastante elaborado; por mi Fudge se puede enterar, tiene mi permiso para decírselo, Prof. McGonogall; estaré encantada de mostrarlo pero también coméntele al señor Weasley; se por sus hijos que le fascinan las cosas de origen muggle por lo que estoy segura que le encantaría mi tatuaje-dijo Litzy con ironía y cinismo mientras una sonrisa cruzaba su rostro.
-¿A que te refieres con que a Arthur le encantaría?-pregunto Remus extrañado.
-¡Pues eso! ¿Quien no encontraría fascinante un tatuaje MUGGLE? Y vaya que tuve problemas para localizar un lugar que pudiera hacer este diseño-dijo Litzy ampliando aun mas su sonrisa ante la cara de consternación de McGonogall.
-¿Muggle? ¡Imposible!-exclamo McGonogall confusa.
-¡Muggle, exactamente! Cree que soy estupida como para no saber que esta prohibido usar magia por un tatuaje, sobretodo por que se tiene que usar magia oscura pero ¿para que hacerlo? cuando los muggles tienen maneras dolorosas-no hay duda de eso-de hacerlo; por lo que estoy muy orgullosa del resultado en vista de todo el tiempo que tuve que pasar con el ruido del aparato tatuador, ya que este diseño tiene todo lo que deseaba-dijo Litzy
-¡Maldita!-escupió rabiosa McGonogall mientras se marchaba de ahí, furiosa.
-¿En verdad es muggle o solo lo dijiste por molestar a Minerva?-pregunto Dumblodore curioso.
-Tiene mi palabra de que es muggle. No soy tan tonta como para no saber que la magia oscura esta prohibida, asi solo se trate de un tatuaje y ya que estos no están prohibidos si son muggles...pues ya vio el resultado. Ahora seguiré disfrutando de mi fiesta sobretodo ahora que ya fastidie aun mas a McGonogall y si se lo están preguntando solo diré que hacerme este tatuaje fue por que es una manera de representar a toda mi familia-dijo Litzy reintegrándose a la fiesta, de la cual disfruto como nunca antes, bailando con los presentes incluidos Severus y Malfoy aunque no lo hicieron con muchas ganas.
Y tras algunas horas mas, la fiesta concluyo, retirándose todos a sus respectivas casas donde no tardaron en dormir pero en algunos casos se cumplía con su deber...
-Parece que todos están ya en sus casas ¡Que bueno! Entonces es mejor que también vaya a descansar; en verdad estoy agotado tras esta fiesta, que estuvo muy divertida a pesar de que algunos se pasaron de tragos con la cerveza de mantequilla algo que jamás hubiera creído posible pero Crabbe y Goyle son prueba de que uno si puede emborracharse con ella-pensaba divertido Harry sonriendo al recordar el ridículo de aquel par de chicos durante la fiesta y tan ensimismado iba en sus recuerdos que no se percato de que había alguien bloqueándole el camino hasta que choco de frente contra esa persona que resulto ser...
-Zabini! ¿Qué hace fuera de su casa a estas horas? Es mejor que regrese a su habitación o tendré que darle una detención por vagabundear a deshoras-dijo seriamente Harry al ver con quien había chocado, separándose del otro chico.
-¡mmm, pero si es Potter, el delicioso y exquisito Potter!-susurro Zabini de forma sensual mientras se acercaba al chico quien lucia confundido por las palabras del slytherin y debido a eso no reacciono cuando el mismo lo empujo contra la pared del pasillo, atrapándolo entre ella y su cuerpo.
-¿Qué demonios crees que estas haciendo, Zabini? ¡Suéltame inmediatamente!-exclamo indignado Harry haciendo esfuerzos por soltarse del agarre del otro, especialmente al darse cuenta de que su aliento olía a licor, resultándole obvio que Goyle y Crabbe no habían sido los únicos en pasarse de tragos.
-¡Quieto, estupido gryffindor! Deja de estarte moviendo como si tuvieras comezón, no te haré nada malo-por el momento- solo quiero besarte y quizás luego te haga mío ¡Ahora quieto!-exclamo Zabini aplicando mayor fuerza a su agarre intentando inmovilizar al ojiverde que estaba pálido tras oír las palabras del slytherin.
-¡Suéltame Zabini, suéltame!-decía desesperado Harry renovando frenéticamente sus esfuerzos por liberarse consiguiendo solo hacerse daño pues el agarre del otro era muy fuerte.
-¡Estupido e idiota gryffindor, Inmovilus!-exclamo Blaise lanzando un hechizo inmovilizador sobre Harry, que no dejaba de gritar que le soltara pero fue bruscamente silenciado por unos labios que se presionaron con fuerza y brutalidad sobre los suyos provocándole un agudo dolor en especial cuando se negó a permitirle paso a una lengua extraña al interior de su boca.
-¡Tenias que ser gryffindor, Potter! Obstinado como solo ellos saben serlo, pero no me importa,, ya que eso lo hace aun mas interesante ¿no lo crees asi?-dijo Blaise sensualmente tras liberar los lastimados labios del chicos, para a continuación bajar con sensuales besos por el cuello del ojiverde, mientras sus manos exploraban por entre el pijama, el cuerpo del mismo.
-¡DEJAME EN PAZ ZABINI, SUELTAME!-gritaba desesperado Harry, sintiéndose impotente por no poder detener aquel idiota que empezaba a tomarse demasiadas libertades con su cuerpo, desabrochando los botones de su pijama pero antes de que avanzara mas...
-¡Repulsor!-exclamo la voz de Draco, que venia de hacer su ronda y había sido atraído por los gritos del chico gryffindor y al encontrarse con aquella escena, una rabia lo invadió y por eso ataco a Zabini, estrellándolo contra una pared haciéndolo perder la conciencia, mientras Harry palidecía ante esto, no sabiendo que pensar ante el hecho de que Malfoy lo había rescatado.
-¡Finite incantatem!-murmuro Draco señalando a Harry, liberándolo de la inmovilización, quien al sentirse libre se deslizo lentamente por la pared hasta caer al suelo totalmente anonadado por lo sucedido.
-¿Estas bien, Potter?-pregunto Draco suavemente acercándose al chico, tras comprobar que Blaise estuviera bien aunque inconsciente.
-¿Por qué?-fue todo lo que Harry dijo al ver acercarse al rubio quien lucia confundido por la pregunta del moreno.
-¡No lo se, Potter! No se por que Blaise se ha comportado de esta forma, tal vez se debe a que le resultas atrayente; quizás no te has dado cuenta pero eres un chico muy guapo y con el atuendo que has usado esta noche todo el mundo se dio cuenta de lo atractivo que eres, chico-dijo Draco con suavidad ofreciendo su mano al otro para ayudarlo a levantarse, sorprendiéndose al ver como Harry la tomaba, entrelazando los dedos y no solo eso, sino que antes de soltarle dio un gentil beso en el dorso de la misma.
-¡POTTER!-exclamo Draco al sentir los labios del chico en su mano.
-¡No me refería a eso, Malfoy! Suelo no prestar atención a muchas cosas pero esta noche no me paso desapercibido que chicas y chicos por igual, no dejaron de observarme durante toda la fiesta; cuando pregunte ¿Por qué? Me refería a ti ¿Por qué me ayudaste en contra de Zabini?-dijo Harry sin miedo, solo con ternura en la voz.
-Por que contrario a lo que puedas pensar, no me gustan las injusticias ni que se aprovechen de quien no puede defenderse-respondió Draco perdido en la tierna mirada del ojiverde asi como su aroma a hierbabuena, por lo que sin darse cuenta de lo que hacia beso con suavidad la mejilla del moreno.
-¡MALFOY!-susurro Harry al sentir la suave caricia del rubio, sonrojándose sin poderlo evitar.
-¿Te he ofendido, Potter?-pregunto Draco viendo a los ojos del chico, lo que no le resultaba difícil pues se llevaban pocos centímetros de diferencia, dándose cuenta de que en los ojos de Harry había sorpresa, confusión pero no ofensa, ni siquiera molestia como cabria esperar.
-¡No, No lo has hecho, Malfoy! Pero me gustaría que...-dijo Harry perdido en el aroma del rubio, ese aroma a suave menta inglesa asi como en el brillo exquisito de esos ojos de plata, pasando sin darse cuenta la punta de su lengua por encima de sus labios atrayendo la mirada del joven hacia estos.
-¡Comprendo Potter!-susurro Draco antes de tomar los labios del chico con un suave y exquisito beso sin lastimarlo mas por el contrario parecía que quería curar el daño causado por Zabini, para lo cual paso con gentileza la punta de su lengua solo por encima, probando el sabor de aquellos tiernos labios sin intentar entrar al interior de esa boca, por lo que se sorprendió cuando la misma se abrió permitiéndole paso, deleitándose con la calidez y sabor a hierbabuena de la misma, al mismo tiempo que el chico exploraba por su cuenta su interior, mezclándose la menta y hierbabuena en ese suave, exquisito y apasionado beso.
CONTINUARA...
Notas de la autora: Otro capitulo arriba que espero les agrade como los anteriores, háganme saber sus comentarios en sus reviews, son mi pago.
En cuanto a los disfraces son asi:
Ron es un vikingo, Hermione es la diosa Athena, Remus es Orfeo, Sirius es Hércules, Severus es Hades, Litzy es Persefone, Dumblodore es Merlín y McGonogall es Hera. Creo que esas son algunas de las dudas que pueden tener, si surgen mas háganmelas saber en sus comentarios y como anteriormente dije sigo dejando pistas.
