Todos los personajes utilizados en esta historia son propiedad de Rumiko Takahashi y son usados en esta narración con motivos de entretenimiento y sin fines de lucro.
El verano llegó a Nerima acompañado de una tormenta que inunda la ciudad, gotas resbalan por la ventana del cuarto de Akane Tendo, mientras otra tormenta de lágrimas escurren por sus mejillas y un triste susurro escapa con dolor - ¡Estúpido Ranma!, es un bobo y un maldito insensible. -
Dos años han pasado desde la llegada de Ranma a la casa de los Tendo que marcó el inicio del compromiso entre Ranma y Akane, durante ese tiempo los chicos han vivido muchas aventuras y peleas, pero a pesar de que el azabache finalmente declaró con furia su amor por la peliazul al creerla muerta durante la pelea con Safron en los estanques de Yusenkio, después de la boda fallida, las cosas tendieron a empeorar en lugar de mejorar, sus peleas infantiles e insultos ñoños regresaron, al igual que las molestas "prometidas" que parecian muy felices de que el casamiento se arruinara.
Acurrucada en su cama, la chica de ojos avellanados recuerda con furia lo ocurrido por la mañana en la escuela:
FLASBACK
En la clase de literatura se leyeron fragmento de diferentes obras para explicar la forma en que ha sido visto el amor en diferentes épocas, al final el maestro dejó un trabajo en pareja en el que tenían que escoger una novela y explicar porqué el concepto del amor era así en el período en que fue escrita, tras la salida del profesor, Yuka se voltea emocionada dirigiéndose a su compañera - ¡Ay Akane, que envidia te tengo, el trabajo te ha tocado hacerlo con tu prometido, debe ser muy romántico hacer esta tarea juntos, especialmente cuando estuvieron a punto de ser esposos!, cuantame, ¿Tú y Ranma ocupan esos momentos para besarse o abrazarse?, ¡hay que lindo debe ser eso!, ¿Cuándo van a casarse? - al escuchar lo que la chica dijo, a Akane se le subió el color hasta la orejas y titubiante intentó articular una oración, - ¡Yuka, que cosas dices!, nosotros no!... - la ojicafe trato de decir cuando un ring de bicicleta sonó cayendo sobre el artemarcialista y una burlona voz se oyó, - ¡Ranma nunca se casará con Akane!, ella es una chica violenta, nadie se fijaría en ella, si no fuera así, Ranma no hubiera dejado que la boda se cancelara! - Shampoo ríe mientras se abraza al azabache, - ¿que haces tu aquí y porque te metes en lo que no te importa? - Tendo replicó - ¡Ay Akane, si Ranma te quisiera ya te hubiera besado, pero tu eres a la única que jamas ha besado, ni tu a él, todo el tiempo están peleando! - la pelimorado contraataco mientra le lanzó un reto a Akane, - ¡si en este momento logras besar a Ranma o el te besa por su voluntad aceptaré que son prometidos y dejaré en paz a Ranma para siempre! - nerviosa Akane escucha lo que Shampoo le dice, - ¡dejará en paz a Ranma! - curiosa voltea a ver a su prometido pensando que si alguna vez grito que la amaba, el tal vez querría aceptar besarla, especialmente porque está era la oportunidad para que todas sus prometidas dejaran de acosarlo, pero el chico de inmediato gritó ardiendo en furia - Shampoo, ¿como se te ocurre semejante disparate?, ¡yo no voy a besar a ninguna de ustedes, menos a una marimacho tan poco femenina como Aka... ! - Ranma se calló dándose cuenta de lo que estaba diciendo, la china suelta una carcajada estrepitosa mientra lanza palabras como dagas, - lo ves, Akane, ¡tu eres a la última persona a la que Ranma podría amar! - ¡oye Shampoo, no espera, ¡eso no es lo que yo quize...! - el chico de la trenza trató de corregir con desesperación lo dicho anteriormente pero ya era demasiado tarde, lágrimas cayeron de los ojos de Akane mientras le replico con odio al azabache, - ¡eres un idiota Ranma Saotome!, ¡te odio! - y lo golpeó, el ojiazul enfadado se desquito gritando que nunca había tenido intensiones de casarse con una chica tan agresiva y fea, Akane se defendió mandándole a volar por los cielos y salió corriendo sin parar hasta llegar a su casa y se encerró en su cuarto todo el día.
Fin flasback
En la penumbra del cuarto Ranma pudo contemplar por la ventana el rostro melancólico de su prometida, sabía que había metido la pata hasta el fondo y que debía disculparse, pero por más intentos que hizo por hablar con la chica de ojos marrones el resultado fue negativo, Akane cerró con seguro su ventana y no bajó a cenar, Kasumi le llevó la comida a su habitación sabiendo que por ahora lo más prudente era dejarla sola, Nabiki sólo vio a Ranma con una cara de reproche mientras Soun y su padre lo repreprendiero por su comportamiento y después se fueron con una cara de absoluta desesperación por saber que su relación iba de mal en peor.
En su habitación Akane trataba de acomodar sus pensamientos y emociones, odiaba a Ranma tanto como lo amaba, pero esta vez se había pasado de la raya, la forma en que la había bateado en frente de todo el salón era humillante al igual que su falta de seguridad y valor para ir y besarlo como hacen las otras prometidas, y no por estar desesperada porque eso ocurriera, sino para demostrarles que ella también podía jugar tan sucio como ellas y ganarles, aunque fuera solo para verlas reventar del enojo tanto como a ella le hervir la sangre cuando sus rivales intentaban besar descaradamente a su prometido, especialmente Shampoo que era a quien más detestaba, pero le asustaba que esa acción terminará con un rechazo más por parte del chico de ojos celestes que sólo la pondría más triste y a sus contrincantes les permitiría burlarse más de ella.
Con calma pensó en sus rivales y en su proceder, Ukyo no perdía las oportunidades que se le presentaban para insinuarsele a Ranma, pero sus artimañas e intentos de conquista habían aminorado muchísimo desde que supo que Ranma había declarado su amor por Akane, de hecho ella era la única que se había tomado la molestia de preguntarle como se sentía por no haberse podido casar con Ranma, y a pesar de que después siguió intentando tener una oportunidad con el chico, lo cierto es que cuando Akane estaba con Ranma, la castaña jamás hacía algún tipo de insinuación, al contrario, parecía animarla a declarar su amor al azabache, eso confundía a la chica Tendo pero también le causaba alegría porque últimamente había forjado un tipo de amistad más estrecha con Ukyo, incluso entrenaban juntas algunos fines de semana en el dojo Tendo o aveces Akane visitaba a la castaña para recibir algunas clases de cocina que tanto falta le hacían, pero al final la peliazul terminaba desepcionada por siempre perder los duelos amistosos contra ella y saberse terrible para preparar comida.
Kodashi por su parte nunca dejó de ser un dolor de muelas, loca como toda la vida llegaba de la nada a la casa de la peliazul o a la preparatoria Furinkan vestida de novia gritando que Ranma no se había casado con Akane porque era a ella a quien amaba, - Ranma, mi amor, ¡ya estoy lista para ser tu esposa! - gritaba por todos lados y después llenaba la habitación o salón con un remolino de pétalos con algún tipo de sofnifero o sustancia que los hacia toser, adormilarse o cerrar los ojos por la comezón que causaban, todo para lograr acercarse a Ranma sin ser detenida y poder plantearle un beso sin que nadie pudiera hacer nada - ¡Ay como odio a esa mujer, como me gustaría que desapareciera! - se decía Akane hirviendo de rabia, para luego cambiar ese sentimiento por uno de tristeza y frustración al recordar como la última vez que se vieron y enojada por la actitud de la rosa negra, la menor de las Tendo le reclamo por los polvos pica pica que lanzó con su torbellino de pétalos, pero al querer acercarse para anfrentarla, Kodashi, aprovechándose de la inmensa picazón que la peliazul sentía, la envolvio en su listón de combate y la lanzó por la ventana hacia la alberca, teniendo que ser rescata como siempre por Ranma, que pudo liberarse del agarre de la señorita Kuno gracias a la afrenta de Akane.
Pero todo aquello era nada si lo comparaba con lo que hacía la arpía de Shampoo, la china ya no se conformaba con meterse en la cama de su prometido, engañarlo con supuestos remedios para curar su maldición a cambio de obligarlo a tener una cita con ella o usar sin fin de productos mágicos para obligarlo a casarse con ella, ahora la pelimorado llegaba con gran frecuencia exigiéndole a Akane enfrentarse en un duelo para decidir quién se quedaría con Ranma, o haciendo lo de esa mañana, plantearle retos que sabía que no podía ganar.
La ojicafe estaba casada de esa situación, sabía que no podría vencer a la china o a Kodashi en combate y eso lo aprovechaban muy bien sus rivales; la chica Tendo ya no podía más con esa situacion, pero lo que mas la molestaba era que a pesar de que Ranma se veía y expresaba fastidiado con la actitud de las chicas, este no hacía nada para remediarlo, se preguntaba si realmente el azabache sentía algo por ella, no entendía porque la rescataba, porque le declaro su amor en aquellas pozas malditas ni porque mantenía el compromiso con ella si no tenía ningún interés en la relación, sentía que el era quien más feliz y beneficiado había salido con la cancelación de la boda y creía que si mantenía aquel compromiso era más por caballerosidad que por alguna clase de sentimiento hacia ella.
Abochornada, melancolica, enojada y frustrada paso horas pensando y revoloteando con estos pensamientos su cabeza, buscando una solución o respuesta, hasta que finalmente, aunque con dudas y reticencias decidió emprender un plan. - No puedo continuar de esta forma, ese cabeza dura de Ranma nunca resolverá nada, no se si es porque no siente nada por mi o porque simplemente es una bobo, pero no puedo esperar a que se decida o a que alguna de esas locas me intente matar, primero tengo que poner a esas maníacas en su lugar y después me ocuparé de Ranma, no pretendo seguir siendo la burla de nadie, pero, ¿cómo lo haré? - se preguntaba Akane con intriga, así estuvo un buen rato hasta que un ruido en el dojo la sacó de sus pensamientos, bajo con cautela hasta esa habitación llevando un bokken en las manos para defenderse por si acaso era necesario, lentamente abrió levemente la puerta corrediza y para su sorpresa pudo ver al maestro Happosai llegando de una de sus noches de coleccionista de ropa íntima femenina y preparándose para revisar su botín cuando de repente, de la parte que daba al patio apareció Ranma dándole un fuerte golpe en la cabeza - viejo libidinozo, ¡como se atreve a venir a esta casa con todas esas prendas robadas y encima haciendo tanto ruido, despertará a medio vecindario y si ven lo que ha robado tendremos serios problemas! - el chico estaba furico por no haber podido arreglar las cosas con Akane y más porque con todo ese alboroto que el anciono hacia, le resultaba peor tratar de conciliar el sueño que de por sí se le escapaba pensando en cómo arreglar las cosas con su prometida, pero cuando Ranma quizo atacar al maestro, el viejo solo alzó su pipa y mandó a Ranma hasta el otro lado de la casa, cayendo dentro del estanque - ¡Ya te dije que no me molestes muchachito, y menos cuando estoy acomodando mis tesoros, esto te enseñará a no meterte donde no te llaman - Happosai salió saltando con su tesoro a cuestas burlándose sinicamente del azabache - ¡maldito viejo asqueroso, ya me las pagará! - fue lo único que la pelirroja atinó a decir cuando pudo salir del agua. Akane con mucha perspicacia se percató de un detalle que era evidente pero al que pocas veces dio importancia, - "El maestro puede vencer a Ranma", ¡el podría entrenarme para volverme más fuerte que esas arpias! - la peliazul se dicia a la vez que rectificaba su descabellada idea - ¡no!, como puedo pensar eso, si le pidiera algo asi a ese viejo degenerado solo querria aprovecharse de mí y no me enseñaría nada, en que estoy pensando - cabisbaja Akane dio media vuelta y regreso a su alcoba para dormir un poco, ya era muy tarde y debía tratar de descansar, aunque fueran unas pocas horas pues temprano debía ir a la escuela.
A la mañana siguiente el día aparento empezar tranquilo, todos se sentaron a desayunar sin grandes contratiempos, Akane seguía sin dirigirle la palabra a Ranma y se disponía a salir primero para no tener que hablar con él, pero cuando se preparaba para marcharse el timbre de la casa se escucho y segundos después Kasumi anunció con alegría (como era siempre su actitud) la llegada de Shampoo en compañía de su abuela, - ¡Ay no, ya vamos de nuevo con mas problemas! - se dijo Akane sabiendo que el día se había arruinado. - Ni hao, Ranma - la China saludo con entusiasmo al ajiazual y corrío a abrazarlo, pero Ranma en cuanto escucho el anuncio que Kasumi hizo tembló de terror y se preparo para resistirse y alejarse del abrazo de la chica, - ¡perdon que nos presentemos de esta forma tan inoportuna! - inquirió la anciana, - hay cosas serias que debo hablar con ustedes, Genma y Soun - ambos hombres se acercaron con curiosidad y recelo para escuchar lo que la mujer tenía que decir, estaban tan metidos en el tema que no escucharon que Nodoka iba llegando a la casa mientras la abuela comenzaba a hablar, - ya han pasado algunos meses desde que la boda de Ranma y Akane se suspendió y en ese tiempo no han dado indicios de mejorar, al contrario, parecen más infantiles que antes, ayer llegó una carta de la tribu amazonica a la que pertenecemos para advertirle a mi nieta que el tiempo de plazo para cumplir con su deber y casarse con Ranma se está acabando, si no cumple con su deber en ese plazo, representantes de la tribu vendrán para castigar a Shampoo y para obligar a Ranma a cumplir con su compromiso - dijo la abuela con extrema seriedad, - ¡qué! - fue el grito que se oyó al unísono - ¡eso no puede ser, usted está mintiendo, nuevamente, está usando un truco para obligarme a casarme con su nieta, yo no pertenezco a su tribu, no tengo porque seguir sus reglas - Ranma bocifero con enojo, - ¡Exacto, Ranma no tiene porque obedecer sus reglas y nadie puede obligarlo a nad...! - Akane comenzó a reclamar, pero al recordar su enojo hacia el chico de trenza se quedó callada al tiempo que fue interrumpida por la abuela que la veía con una risa altiva, - pues si no quieres que las amazonas se presenten por la fuerza, tu eres la única que puede evitarlo, ya que tu eres el único impedimento para que mi nieta se case con mi yerno, si tu compromiso con el no existiera, Shampoo no tendría que esperar su respuesta, así que la única forma decidir esto sin que ella intervengan es que aceptes el reto que Shampoo te ha lanzado desde hace días y según el resultado acabar con todo esto, pero siempre huyes al desafío, ¿será acaso que tienes miedo de perder con mi nieta? - rio con sorna la anciana, haciéndole sentir a Akane una afrenta terrible que no podía pasar por alto - ¡Miedo, yo!, claro que no tengo miedo, es solo que no entiendo porque debo pelear por Ranma ni porque debo verme involucrada en esta estupidez, pero ya que estan tan interesadas en este enfrentamiento voy a aceptarlo, pero con la promesa de que si gano se termine todo esto de una vez - La pelo azul refunfuño con tono desafiante. - ¡Acaso estas loca!, como vas a enfrentarte a Shampoo, deja de hacer tonterías, no necesito que hagas nada, yo me encargaré solo de todas las amazonas que vengan - Ranma se dirigió a Akane para tratar de hacerla entrar en razón, - ¡tu callete, todo esto es por tu culpa, si no te costará tanto poner las cosas en claro nada de esto estaría pasando, además no lo estoy haciendo por ti, ¡fenómeno!, lo hago por mi, estoy harta de que todas quieran pisotearme, dejame en paz, yo puedo arreglar mis asuntos - Akane estaba decidida a terminar con esa situación de una vez por todas y nadie iba a evitarlo.
- ¡Me parece muy bien! - la anciana sentenció, - el tiempo se acaba, pero tu puedes poner la fecha para el encuentro, eso será lo más justo, de todas formas el resultado será el mismo - la china espetó con acresentada seguridad, - ¡por mi esta bien! - Akane corroboró al tiempo que se escuchó la voz eufórica del maestro Happosai corriendo hacia la pelimorado, - ¡Shampoo hermosa, no pelees con Akanita por ese tonto de mi alumno, yo puedo querer a ambas! - cuando el anciano se disponía a abrazar a la chica, la abuela se interpuso atacandolo, - ¡Happi, no empieces, deja a mi nieta en paz! - el maestro triste se dirijo a Cologne - ¿porque siempre rompes mis ilusiones? - El maestro respondió el ataque de la anciana y de un solo golpe salió volando el bastón de la mujer, gracias a su experiencia y habilidad en combate la anciana no cayó en el ataque del viejo, pero sin su báculo no podía hacer mucho contra el anciano, enojado se marchó sin antes decir - ¡a ti no puedo atacarte, pero no vuelvas a provocarme! - Cologne lo vio con incredulidad y asombro, con algo de nerviosismo se dirigió a Akane para decirle que esperaban el anuncio de la fecha del combate y luego le pidió a su nieta que se marcharán.
Ranma no podía creer el atrevimiento de Akane, - ¡eres una tonta!, ¿como se te ocurre aceptar el reto de Shampoo? No necesito tu ayuda además puedes salir herida - la peliazul contesto sus reclamos y una lluvia de dimes y diretes comenzó: - ¡Ayyyy, ya te dije que no te metas, esta es mi pelea, no lo hago por ti, ademas, ¿cual es el problema?, ¿porque te preocupa tanto que me hieran?, ¿acaso te importo? - El semblante de Ranma se desencajo y buscaba palabras para responder sin quedar avergonzado con la respuesta - no, no... no es eso, eso solo que... Bueno verás... es que, si sales herida tu familia estará triste, no hay otra razón - la ira crecía en las palabras de Akane - ¡No te preocupes, ya se que no te interesó en lo más mínimo, pero descuida, lo hago por honor propio, si gano no voy a obligarte a nada, solo lo hago para que dejen de molestarme! - pero Ranma, tan torpe como siempre no sabia cuando cerrar su bocota - ¡Si claro, como si pudieras ganarles, entiende que no necesito tu ayuda! - una mueca de duda se dibujo en la cara de la chica - entonces, ¿lo que te preocupa es que pierda y tengas que casarte con shampoo? - esa pregunta guardaba una pequeña esperanza de recibir una mejor respuesta, pero como siempre, el azabache tenía que regarla, - ¡Lo que me molesta es que todos quieran decidir por mi y que encima tenga que soportar tus berrinches, pero si tanto quieres pelear ve y hazlo, quizá no sea tan malo tener que casarme con Shampoo en lugar de con tigo! - y la cólera se apoderó de la peli azul, - ¡Si tan poca confianza me tienes y no puedo recibir tu apoyo no se para que mantener el compromiso, ademas yo no soy la que no ha puesto las cosas en claro con ellas, si lo hubieras hecho nada de esto pasaría, en el fondo creo que Shampoo tiene razón, yo soy la última persona de la que podrías enemorarte, soy fea, débil, marimacho, pecho plano y no se que mas, pero ya no me importa, de todas formas cumpliré mi palabra de terminar esta rivalidad con tus novias, después puedes dar por terminado el compromiso y hacer lo que plazcas - los ojos de Akane ya se habían puestos rojos pero contuvo las lágrimas, se dio la vuelta y se marchó a la escuela, - ¡eres un idiota, te odio! - Ranma no sabía que hacer o decir, lo dicho por la chica de ojos avellanados era lo último que hubiera querido que Akane pensara, ella era la persona a la que más amaba en la vida, claro que le preocupaba que saliera herida en un combate sin sentido y por supuesto no pensaba que fuera fea, pero no entendía porque le costaba tanto aceptarlo y terminaba diciendo todo lo contrario, - ¡Akane, no espera, no me mal entiendas, yo nunca quise decir eso, no es verdad que eres la ultima...! - grito intentando detener a la joven pero ella se marchó sin siquiera prestarle atención, se sentía demasiado herida como para escuchar palabras, reclamos o disculpas, - ¿porque eres tan terca?, ¡si tan solo fueras más amable tal vez no me costaría tanto trabajo decirte lo que siento! - cabizbajo el azabache no tuvo mas remedio que ir tras ella y en el camino meditar lo que había pasado, nuevamente tenía que encontrar una forma de reconciliarse con Akane y de evitar que peleara, no podía arriesgarse a que saliera lastimada, el tenía que lidiar con esas amazonas y debía prepararse para ese momento.
El día en la escuela pasó lentamente, Akane evitaba a Ranma a toda costa y este trataba de acercarsele sin mayor éxito, a la hora de salida Tendo se apresuró a recoger sus cosas y se marchó con Yuka lo más rápido que pudo para no toparse con Ranma, después se separó de su amiga y corrio sin detenerse para llegar a casa antes que su prometido, Ranma finalmente llegó a casa bastante molesto, no sabía que más hacer para acercarse a ella, pero ya se había cansado de intentarlo, por lo pronto debía pensar en un buen plan para encargarse de las amazonas y evitar que Akane peleara, más tarde la peli azul bajo un rato a entrenar al dojo, se cercioro de que todos estuvieran dormidos y comenzó a practicar, pero el ejercicio no duró mucho, la melancolía y la duda no se apartaba de su mente, ahora que haría, debía vencer a Shampoo y no sabía ni por dónde comenzar, el maestro era una gran opción para entrenar, podía vencer a Ranma y a la abuela de Shampoo pero era la persona menos confiable en la faz de la Tierra, además la última discusión con su prometido le pesaban profundamente, se preguntaba si valdría la pena luchar contra la china, lo más seguro era que a Ranma ni le importaba eso, a fin de cuestas Shampoo no le había dicho una mentira, el no podría enamorarse de alguien tan poco femenina y débil.
Sumida en sus pensamientos y sentada en una esquina del dojo Akane no se dio cuenta cuando el maestro Happosai llegó, ¡Akane linda, dame un besito, mira te traje este regalo! - la chica solo lo apartó con una mano sin hacer aspavientos ni prestarle atención, -¡ah que bien, me alegro por usted! - fue lo único que dijo, después se quedó sentada en la misma posición y con el mismo semblante triste, el maestro no podía creerlo, el ragalo era un sostén con bordados, en cualquier otro momento la joven hubiera sacado un mazo para golpearlo o ya hubiera gritado, pero ahora ni si quiera lo veía, algo no estaba bien y tenía que saber que era - ¡Akane, ¿te encuentras bien?, ¿porque estás en este lugar a esta hora?, ya deberías estar dormida, no se supone que mañana tienes escuela - tras un breve silencio la chica respondió - ¡ah si, pero no puedo dormir, no se preocupe, usted vaya a descansar! - la respuesta fue tan vacía que el hombresito quedó boquiabierto, - ¡acaso estas preocupada por el duelo con Shampoo? - los ojos de Akane se abrieron algo confusos, - ¡Si, un poco, pero no se preocupe, ya encontraré la forma de ganarle, vaya a descansar - insistía la piliazul, - ¡yo se como puedes vencerla! - el maestro respondió para captar su atención, - ¡si claro, no lo dudo, ahora me dirá que quiere que modele ese sostén para que me diga el secreto, no gracias, ya hayare la forma! - la expresión del anciano cambió - ¡dime Akane, ¿porque estás tan interesada en vencer a esa chica, es por Ranma? - Tendo quedó sorprendida por la pregunta - si, no, es decir, no realmente no... ¡lo que pasa es que antes siempre fui lo suficientemente fuerte para defenderme de quien me molestaba, podía acabar con un batallón de chicos en la escuela, pero después, cuando Ranma apareció todo cambió, fueron apareciendo enemigos más fuertes pero también aparecieron esas chicas que con gran facilidad han podido vencerme a pesar de pasar toda mi vida entrenando, luego de que me comprometieron sin preguntar mi opinión esas chicas llegan a amenazarme y enfrentarme por algo que yo no decidí, recibo burlas de parte de ellas y hasta de Ranma y quiero que eso acabe! - Akane respondió con sinceridad, - ya veo, y si Ranma es quien te ha traído esos problemas ¿porque simplemente no te alejas de el? - la pregunta dejo anonadada a la chica a tal grado que no pudo contestar nada - ¡ahora entiendo! Y si lo amas porque nunca se lo has dicho en lugar de pelear - la pregunta cayó como un balde de agua fria, - ¡porque Ranma no siente lo mismo! - por primera vez Akane fue confrontada directamente respecto a sus sentimientos y por primera vez había tenido que admitir su amor por el azabache, esas preguntas en ese momento no daban opción a escapar, - ¿y cómo estás tan segura?, ¿porque no se lo dices y evitas la pelea con Shampoo? - cuestionó el anciono y la cara de Akane cambió de expresión, - ¡¿acaso cree que no lo he intentado?!, pero siempre que trato el me insulta o aparece alguna de esas locas recordandome lo débil y fea que soy, o simplemente me coibo porque se que la respuesta siempre será negativa, aun así tengo que pelear con Shampoo, demostrarles que no soy esa chica a la que siempre hay que salvar! - el maestro suspiro - ¿Sabes lo que está en juego si pierdes verdad? - Akane lo miró atenta - ¡claro que lo sé y tengo miedo, pero estoy harta de que eso ocurra, prefiero intentar y fallar que vivir siempre con la humillación de los demás, si pierdo al menos sabre que caí mirando al sol, y si Ranma no me ama no puedo hacer nada pero sabre que lo intente y perdí en lugar de perder escondida como cobarde! - el maestro la miró fijamente y la hizo oirlo con extrema atención - ¡yo voy a entrenarte para el duelo con Shampoo, pero a cambio debes prometerme que si sales victoriosa te casaras con Ranma sin poner objesion ni pero alguno, si vas a enfrentarte a la amazona por tu honor y por ese chico entonces reclamaras tu premio - Akane quedó perpleja, lo que el maestro decía era totalmente nuevo para ella, ese anciano nunca era así de serio ni le interesaba ayudar a nadie - ¿pero si Ranma no quiere no puedo obligarlo? - el viejo refunfuño, - ¡te dije que sin peros, si aceptas el trato aceptaras esa condicion y después te diré el porqué, si no estas dispuesta a aceptarla entonces no hay trato! - la condición era algo totalmente inesperada para ella pero no tenía otra opción para vencer a la china, su compromiso estaba en juego pero su honor lo estaba más y no podía permitir que fuera pisoteado.
- Esta bien, usted gana, ¿ahora que debo hacer? - la peliazul suspiro, - la próxima semana comienzan las vacaciones de verano y vendrás con migo a entrenar a la montaña, ¡si quieres mejorar debes entrenar fuera de este dojo! - Akane no podía creer lo que escuchaba, - ¡queeee!, ¿como pretende que yo vaya sola con usted a entrenar a la montaña?, ¡ahhh soy una idiota!, ¿cómo se me pudo si quiera ocurrir que me ayudaría?, ¡lo único que quiere es aprovecharse de la situación viejo mañoso! - el enfado de la chica de ojos marrones podía verse a leguas y estaba a punto de golpear al maestro cuando esté le hizo una propuesta para que creyera en sus palabras - ¡Yo no me quiero aprovechar de nada, reconozco que tengo una debilidad por las mujeres hermosas y jóvenes como tú, pero también reconozco mi deber para con mis alumnos y tu eres una heredera de mi escuela de combate, además yo se que a veces me cuesta comportarme bien con las mujeres sensuales, es que es tan difícil, pero por eso nunca pensé en que fueramos solos los dos, aunque sería algo hermoso! - los ojos del maestro brillaban solo de imaginar aquello, pero después recupera la seriedad y continua platicando su plan a la joven, - mi idea desde el principio es que alguien te acompañe para garantizar que siempre esté bajo control y que tu estés segura - Akane no podía creer lo que escuchaba, realmente el viejo había pensado en ayudarla y era sincero, por un instante se sintió mal por pensar que se quería aprovechar de ella aunque las dudas aún no desaparecían - maestro, si lo que está diciendo es verdad, ¡discúlpeme por dudar de usted!, pero aún asi ¿quien cree que pueda acompañarme?, papá dudo que quiera, Nabiki jamás aceptaría, Kasumi debe estar aquí para mantener la casa en orden, además si Ranma se entera nunca me dejaría ir y el tío Genmma sería como no llevar a nadie - la voz de Akane se quebró un poco ante la desfavorable situación hasta que una voz familiar intervino - ¡yo te acompañaré, Akane, me encargaré de que el maestro no intente propasarse con tigo y vigilarse que tu entrenamiento se lleve acabo - Nodoka entro al dojo y sonrió, - cuando llegue a la casa la abuela de Shampoo platicaba con ustedes acerca de las amazonas y la pelea con Akane, estaban tan ensimismado con el asunto que nadie notó mi llegada, tambien pude ver tu pelea con mi hijo y he escuchado todo tu platica con el maestro, estoy de acuerdo en que vayas a entrenar para ganarle a esa chica china - el rostro de la peli azul se iluminó, la madre de Ranma era una persona encantadora que siempre la apoyaba y protegía, en cierta forma le recordaba a su madre, impulsivamente corrió a abrazarla y agradecerle por acompañarla, - iré con tigo pero tambien tengo algunas condiciones a cambio - Akane no sabía si alegrarse o deprimirse por eso, pero no tenía más opción que escuchar de lo que se trataba, esperaba no fuera nada comprometedor, - igual que el maestro quiero que prometas que si ganas te cáscaras con mi hijo sin poner objecio - que mas daba, ya había prometido eso al maestro así que la chica asintió con la cabeza, - y prometeme que harás las pases con Ranma, entiendo bien porque estás enojada con el y te apoyo, el no debió comportarse de esa forma, te prometo hablar con el al respecto, pero si quieres que el no sospeche de tu entrenamiento secreto con el maestro, será mejor que actúes natural y mantengas una relación tranquila, acepta que el se disculpe, yo se que mi hijo es torpe para estas cosas pero dejalo que te de una explicación - la idea no era muy del agrado de la Tendo, pero no habiendo otra opción y sabiendo que en parte tenía razón no le quedó más que aceptar la petición.
-perfecto, ya todo está arreglado, la señora Saotome irá con nosotros, tu mantendrás una relación amigable con ranma por esta semana para evitar sospechas y yo me encargaré de que Ranma y Genmma se vayan a entrenar fuera de la ciudad para garantizar que nuestro plan sea un éxito - el anciano concluyó aquella platica y los tres se fueron a dormir dispuestos a llevar a cabo lo acordado.
¡Acompañanos en el siguiente capítulo!
Espero les esté gustando esta historia, mi experiencia no es mucha pero me estoy animando a escribir, esta es la primera historia que me animo a publicar para alguna actividad dentro de los grupos de fans de Ranma, que mejor fecha que la dinámica de febrero para estrenarse con una historia sobre Ranma y Akane.
Leo sus sugerencias y comentarios, nos vemos en el próximo capítulo para saber el desenlace de la historia, será una narrativa muy corta, al ser de las primeras veces que escribo prefiero algo corto y seguro. Saludos a tod@s.
