Capítulo 15: Hasta el fin del mundo
Roxy:
Me desperté al escuchar la puerta de mi habitación abrirse violentamente, pero seguí con los ojos cerrados intentando seguir durmiendo, me había pasado toda la noche llorando por lo que había dormido bastante poco y aún estaba cansada, sin previo aviso alguien me quito la sábana sin darme opción a sujetarla, seguí con los ojos cerrados y puse posición fetal.
- ¿Te vas a levantar de una vez? -pregunto Stella con tono de enfado
- No -dije sin abrir los ojos
- Tengo una sorpresa para ti -dijo sentándose a mi lado
- ¿Qué es? -pregunté abriendo un ojo
- Algo que te hará sentir mejor -dijo levantándose - Pero antes tienes que ducharte y ponerte ropa un poco más decente -
- Esta bien - dije mientras me ponía de pie
- Te espero en el pasillo -dijo saliendo por la puerta
Me tome mi tiempo en ducharme y vestirme, no tenía ganas de hacer nada pero sabía que Stella tenía la mejor de las intenciones, por lo que me despedí de Mirta y antes de salir al pasillo puse una sonrisa forzada para Stella, está me sonrió nada más me vio y me cogió de la mano tirando de mi por todo el pasillo, se veía muy ilusionada, llegamos al patio de la entrada y al ver que seguía tirando de mi, hice un movimiento para soltarme.
- Stella no tengo ganas de ir de compras -dije con tono de cansancio solo de pensarlo
- Esa no es la sorpresa -dijo mirándome con una sonrisa
- ¿Entonces cuál es? -pregunté con curiosidad - A ti solo hay tres cosas que te hagan poner esa sonrisa, ir de compras, Brandon y hablar de chicos -
- La sorpresa que te tengo... -dijo con una sonrisa de oreja a oreja
- Se encuentra ahí -dijo señalando a una parte del muro de la entrada
Me quedé congelada al verlo, por mi cabeza pasaron muchas posibilidades de lo que podía hacer en esa situación, salir corriendo y encerrarme en mi habitación para no salir nunca, correr hacia él para abrazarlo, correr hacia él para besarle, correr hacia él para golpearle, o hacer las tres opciones anteriores añadiéndoles al final la idea de salir corriendo y encerrarme a mi cuarto. Fui andando lentamente hacia el con cierto temor de la reacción que pudiera tener al verme.
Parecía que no se había percatado de mi presencia ya que tenía la mirada perdida y el rostro con una expresión triste, estaba apoyado en el muro con los brazos cruzados, no se percató de mi presencia hasta que estuve a su lado, era como estar viendo a un fantasma ya que me era imposible articular palabra, pude notar que éramos observados por Mirta y las Winx las cuales parecían estar animándome a hablara con el, cuando se dio cuenta mi presencia me miró por un segundo para luego mirar en otra dirección, se notaba que el estaba tan nervioso como yo así que tome aire y me dispuse a hablar.
- Hola -dije con una voz muy débil pues sentía que me iba a desmayar
- Hola -respondió tratando de no mirarme
- Por favor -dije intentando mirarle a los ojos - Mírame -
Sin decir nada volteo hacia mi.
- Pensé que nunca volvería a verte -dije poniendo lenta y cariñosamente mi mano sobre su mejilla
- Siento mucho todo lo que hice, fui un imbécil -dijo con expresión triste - Debí creer en ti -
- Yo debí contarte lo de tus padres -dije comenzando a acariciar su mejilla - ¿Qué clase de novia le oculta esas cosas a su novio? -
- ¿Qué clase de novio te abandona diciéndote que no te quiere y que ojalá nunca te hubiera conocido? -dijo con los ojos llorosos - Soy un ser horrible, entendería que me odiaras -
- Jamás podría odiar al hombre de mi vida -dije con los ojos llorosos - Me hiciste mucho daño pero me hizo darme cuenta de algunas cosas -
- ¿Qué cosas? -pregunto acariciándome el pelo
- Que deberíamos ser solamente amigos -dije cogiendo la mano con la cual me acariciaba el pelo para hacer que se detuviera
- ¿Como? -pregunto con expresión muy sorprendida
- Nuestra relación no va a ningún lado -dije entre lágrimas - Míranos, solo nos hacemos daño -
- No tenemos nada en común -dije mientras me apartaba de el - No se lo que va a pasar en nuestras vidas pero creo que lo mejor es que seamos amigos y cada uno siga su camino -
- Roxy... -dijo soltando varias lágrimas - No hagas esto por favor, mi vida te pertenece, sin ti no tengo razón para vivir -
- Me hiciste mucho daño -dije comenzado a llorar - Dudo que pudiera volver a soportar ese dolor -
- Te juro que no volverá a pasar -dijo cogiéndome las manos, por su expresión se podía ver que estaba desesperado - Cometí un error lo sé, pero desde que me fui no e hecho otra cosa que no sea odiarme a mi mismo por hacerte eso, no podía ni ver mi reflejo sin darme asco -
- La decisión ya está tomada -dije mirándole a sus ojos los cuales se encontraban tan llenos de lágrimas como los míos - Es eso o no tener relación alguna -
- No puedo ser tu amigo Roxy -dijo soltando mis manos - El dolor sería demasiado para mi -
- ¿Qué dolor? -pregunté confundida
- El dolor de mirarte y saber que ya no eres mía -dijo mirándome a los ojos - sobre todo sabiendo que fue mi culpa el haberte perdido -
- La única persona en mi vida a la que e amado más que a mí propia vida -dijo sin dejar de mirarme - No podría estar a tu lado sabiendo que te perdí por mi culpa, sería como que me clavaran cien espadas en el corazón cada segundo -
- Fer... -dije aguantando las ganas que tenía que abrazarle
- Dame una oportunidad por favor, te prometo que no volveré a abandonarte -dijo arrodillándose - Mientras sea consciente y mi corazón lata, no me apartare de tu lado -
- Fer -dije antes de lanzarme a abrazarlo cayendo los dos al suelo - Promételo -
- Te prometo que no te abandonaré mientras sea consciente y mientras mi corazón lata -dijo poniendo su mano encima de la zona de su pecho en la que esta el corazón - Ya que la razón de que este lata, eres tú -
- Te quiero amor mío -dije comenzando a besarle en los labios
No se cuanto tiempo estuvimos besándonos, solo se que habría estado así por el resto de mi vida, besarle era como sentir que volvía a vivir.
- Ejem -dijo Stella la cual se encontraba a nuestro lado
- Siento interrumpir está escena tan bonita -dijo con una sonrisa - Pero Musa, Flora y yo también queremos abrazarle -
- ¿Me da permiso mi señora? -me pregunto Fernando después de ayudarme a levantarme
- Te doy permiso para abrazarlas -dije siguiéndole el juego
- Muchas gracias -dijo antes de que Flora, Stella y Musa se abalanzaran encima suya para abrazarlo
- Parad, me estáis haciendo cosquillas -dijo Fernando el cual se encontraba en el suelo debido a los movimientos de estas
- Este es tu castigo por haberte ido -dijo Musa mientras le hacía cosquillas
- Así aprenderás para la próxima que nunca debes abandonar a un grupo de mujeres vengativas -dijo Stella con una sonrisa mientras le seguía haciendo cosquillas
- La próxima vez no habrá piedad -dijo Flora haciéndole cosquillas
- Por favor parad -dijo Fernando el cual casi estaba llorando de la risa - Si seguís así acabaré haciéndome pis encima -
- Creo que ya ha tenido suficiente castigo por hoy -dije con una sonrisa
Dejaron de hacerle cosquillas y le ayudaron a levantarse, después de eso las abrazo una a una, se notaba que las había echado mucho de menos a las tres, después de abrazarlas fue a saludar a Layla, Mirta, Tecna y Bloom las cuales estaban un poco apartadas conmovidas por la escena de minutos antes, con Layla cocho sus puños, con Tecna choco sus manos, a Mirta le guiño un ojo y con Bloom se abrazo, después de eso vino hacia mí y me agarró de la cintura.
- Hasta el final del mundo... dijo acercando su rostro al mío - Siempre te querré -
- Hasta el final del mundo... -dije cuando nuestros labios estaban a centímetros de tocarse - Mi luz te guiará -
- Hasta el final del mundo... -dijo mirándome a los ojos - Te buscará mi amor -
- Hasta el final del mundo... -dije apunto de besarle - Te esperará mi amor -
- Hasta el final del mundo... -dije mientras nuestros labios se rozaban
- Tú amor me hará vivir -continuo lo que iba a decir yo
- Hasta el final del mundo... -dije con una sonrisa al imaginarme la escena tan ñoña que estábamos formando
- Y más halla del mundo -dijo rozando sus labios con los míos
- ¡Quieres besarla de una vez! -grito Stella
Dicho esto nos besamos, me abrazó por la cintura y yo le abracé por el cuello, el beso describió a la perfección nuestra relación desde el principio, empezó siendo intenso para luego volverse suave y lento para acabar siendo el beso más pasional que nos habíamos dado nunca, cuando dejamos de besarnos nos miramos a los ojos y sonreímos, nos abrazamos aún más para estar lo más cerca posible del otro.
Tenía la cabeza apoyada en su pecho y el en mi hombro, podía escuchar a la perfección los latidos de su corazón, cerré los ojos para disfrutar más del momento ya que me sentía como nunca en ese abrazo, si por mí fuera me habría quedado así para siempre pero el momento fue interrumpido por el rugido de mi estómago, con las prisas había olvida desayunar.
- Vaya -dijo mirándome con una sonrisa - Si que me has echado de menos -
- Como no lo puedes imaginar -dije sintiéndome avergonzada por lo ocurrido
- Vamos a desayunar -dijo cogiéndome la mano
- Si -dije dedicándole mi mejor sonrisa
Fuimos con las Winx y Mirta, cuando entramos al comedor pude ver la cara de terror del chef al ver a Fernando, eso me hizo soltar una carcajada, llegamos a la única mesa que estaba vacía, nos sentamos y al instante apareció nuestro desayuno delante nuestra, me sorprendí al ver la montaña de comida que se encontraba delante de Fernando, me miró y sonrió antes de empezar a devorarlo todo, ambos hacíamos un esfuerzo para desayunar sin soltar la mano del otro, solamente nos soltamos en algún momento de auténtica necesidad, como cuando Fernando quiso abrir el barril que le trajo del chef o cuando yo tuve que coger el tazón de Cola cao para beberlo, cada vez que uno soltaba la mano del otro rápidamente era mirado por el otro.
Cuando terminamos de desayunar nos dirigimos al cuarto de las Winx, fuimos interceptados por Griselda la cual nos dijo que Faragonda quería vernos en su despacho a las Winx, a Fernando y a mi, nos despedimos de Mirta y fuimos lo más rápido posible al despacho de Faragonda.
- Adelante -dijo Faragonda instantes después de que Fernando llamara a la puerta
- Buenos días directora Faragonda -dijimos todos a la vez
- Me alegro de tu vuelta Fernando -dijo mirándole con una sonrisa
- Me alegro de estar de vuelta -dijo acariciando mi mano
- Ahora que lo pienso -dijo Faragonda con expresión pensativa - Tu casa ya está preparada -
- ¿Enserio? -pregunto con una sonrisa
- Si -dijo entregándole una llave - Griselda te está esperando fuera para mostrártela -
- Gracias -dijo cogiendo las llaves y saliendo por la puerta
- ¿Qué era lo que quería de nosotras? -pregunto Bloom cuando Fernando cerro la puerta
- Seguirme -dijo Faragonda saliendo por la puerta
Andamos por los pasillos hasta que llegamos a la puerta del salón de reuniones de Alfea, Faragonda abrió la puerta y pudimos ver que todas las hadas y profesores estaban ahí, las Winx se sentaron junto a los demás profesores y yo fui a sentarme junto a Mirta la cual me había guardado un sitio a su lado, al rato llegaron Griselda y Fernando que eran los últimos que faltaban, nada más llegar me dedico una sonrisa y fue a sentarse con las Winx, Faragonda se posicionó en el centro de la sala donde todos los presentes podían verla y oírla.
- Estudiantes Y profesores de Alfea -dijo Faragonda alzando la voz - Me temo que nos enfrentamos a una nueva amenaza -
- Mi compañero Saladino me a informado de la muerte de un especialista esta misma noche -dijo Faragonda manteniendo un semblante serio - Lo encontraron en el bosque sin una sola gota de sangre y con el mordisco característico de los vampiros -
- ¿Quién era el especialista? -pregunto alguien entre el publico
- Su nombre era Jared -dijo Faragonda permaneció muy seria, se notaba que era un asunto de máxima importancia - Pero si hay alguien que puede darnos más información sobre estos es Fernando -
- Gracias Faragonda -dijo Fernando colocándose en el centro de la sala - Estos vampiros no se parecen en nada a cualquiera que hayáis visto antes -
- Tienen un alfa, el cual tiene la capacidad de transformarse en un ser mitad murciélago mitad hombre -dijo con mirada sería - Solo buscan beber la mayor cantidad de sangre posible, no esperéis piedad por parte suya, pues piedad no habéis de recibir -
- Son más poderosos que los vampiros promedios -dijo mirándome levemente, pero fue suficiente para hacerme sonreír, no puedo evitarlo, esta tan guapo cuando esta serio - Pero también son más vulnerables al sol, por lo que desde hoy la barrera será bajada nada más anochezca -
- Además, desde hoy queda completamente prohibido ir al bosque -dijo Faragonda colocándose a su lado - Si alguna ve algo extraño que no dude en decírnoslo ya que esto es un tema muy serio y puede haber vidas en juego -
Terminada la reunión cada uno se fue a su cuarto, intenté buscar a Fernando pero Flora me dijo que ya se había ido a su nueva casa por lo que decidí dejarle un rato, me fui con Mirta y nos pusimos a charlar en nuestra habitación, después de un rato pensé en ir a ver la nueva casa de Fernando por lo que me despedí de Mirta y fue en su busca.
Descubrí que su casa estaba en la torre derecha de Alfea, había que subir unas escaleras de caracol para llegar ante una puerta, llamé y espere a que me abriera, tardo poco en abrirme y dejarme pasar, quedé impresionada al ver lo grande que era por dentro, era una única habitación la cual contaba con tres sofás y dos sillones de un tamaño considerable, tenía dos grandes ventanales los cuales contaban con terrazas que dejaban una perfecta vista del patio trasero y del patio de la entrada, una de sus paredes era una enorme estantería la cual se encontraba aún vacía y por último una enorme cama matrimonial pero solamente tenía una enorme almohada la cual llegaba de un extremo a otro de la cama.
- Si quieres podemos estrenarla -dijo con una sonrisa mientras me desnudaba con- la mirada
- Nada me gustaría más dije tumbándome en esta de manera sexy
- Dios - dijo acercándose a mi lentamente - Como he te echado de menos -
Lo hicimos durante al menos tres horas y cuando terminamos me acomode en su pecho con intención de dormir, pensé en llamar a Mirta para decirle que hoy no iba a ir a dormir a nuestra habitación pero supuse que ya sabría que no iría, así que cerré los ojos y comencé a dormir.
Me desperté al sentir que alguien me levantaba para colocarme sobre la cama, abrí los ojos y vi a Fernando poniéndose rápidamente la ropa, por un momento pensé que estaba soñando pero acabe desperezándome dándome cuenta que no era un sueño, comencé a escuchar murmullos provenientes de fuera por lo que decidí levantarme.
- ¿Qué está pasando? -pregunté con miedo
- Los vampiros -dijo mientras se ponía las zapatillas
- ¿Qué pasa con ellos? -pregunté mientras comenzaba a vestirme
- Están en la barrera -dijo terminando de vestirse
- Vamos -dijo dándome la mano cuando termine de vestirme
Nada más salir al pasillo me di cuenta que todo el mundo estaba despierto y todos se dirigían a la plaza de la entrada, una vez llegamos a la plaza fuimos junto con las Winx las cuales estaban con Faragonda, de camino hacia ellas me percate de que en la entrada fuera de la barrera había un montón de sujetos a los cuales no se les veía ya que llevaban unas capuchas las cuales no dejaban verles las caras, llegamos junto a las Winx las cuales se veían muy preocupadas.
- Están por todas partes -dijo Tecna mirando un holograma de Alfea en el que se veían múltiples puntos de color rojo alrededor de la barrera
- ¿Qué vamos a hacer? -pregunto Layla mirando a Faragonda
- Tranquilas -dijo Faragonda con tono tranquilizador - De momento no están golpeando la barrera -
- Parece que estén esperando algo -dijo Stella visiblemente confundida
- O a alguien -dijo Fernando mirando a los que se encontraban en la zona de la entrada
- Creo que me buscan a mi -dijo con tono muy serio
- ¿Por que? -pregunté bastante alarmada por sus palabras
- Cuando encontramos a Fernando estábamos siendo atacadas por tres de ellos -dijo Musa mirándome
- Fernando acabo con los tres -dijo Flora mirándole
- Tendría sentido que te estén buscando -dijo Faragonda mirándole - Estarán buscando venganza -
- ¿Confiáis en mi? -pregunto mirándonos a las Winx y a mi
- Si -respondimos a la vez
- Dejarme ir a hablar con ellos -dijo mirando a Faragonda
- Ve -dijo Faragonda con la mirada decidía
