N/A: Solo para recordarles Lyly es Jade, Cece es Lauren. Si alguien ya vio La Maldición de Hill House entiendo que pedo con la serie. Aun estoy llorando. ¿Quién vio La Maldición de Bly Manor? Siguió chillando como magdalena y si alguien quiere hablar solo los 13 años lésbicos que Viola se echó junto a Dani y Jamie manden mensajes o creen un grupo para chat.
Otra cosa, ya se vieron el video de Victoria Justice "Treat Myself" y quien está esperando con ansias el nuevo video de "Stay"
Capítulo 25
Tori estaba nerviosa, porque a pesar de que habian dicho que solo iba a ir a comprar cosas para preparar algo para Bella y para las chicas, solo iban a ser ella y Jade caminando por el supermercado, después de lo que paso con su primera cita y luego con la segunda Tori no sabía que iba a suceder en ese momento. ¿Era esa una cita? Siguió moviéndose por toda su habitación mientras se vestía, miró por la ventana y se dio cuenta que la piscina no estaba cubierta.
Luego de terminar de arreglarse bajo las escaleras en busca de Lauren. —Lauren, no dejes que Serena corra cerca de la piscina. Creo que Trina y las demás estuvieron usándola anoche y no la cubrieron.
Lauren solo hizo un sonido dándole a entender que la había escuchado. Se sentó en el sofá y Bella rápidamente se subió en el regazo de su dueña, mientras que Serena se sentaba a la lado de la morena y prendía la televisión.
—¿Qué verás? —Pregunto la morena mientras esperaba a que Jade estuviera lista.
—Cece dijo que quería ver algo de terror. Así que buscaré algo interesante.
Tori frunció el ceño ante eso. —¿Pero tú qué quieres ver?
Serena arrugó la nariz un poco. —Algo de terror.
—¿Por que?
Ahora fue el turno de Serena para fruncir el ceño, miró como Tori la observaba como si estuviera esperando por una respuesta.
—Son divertidas. —Dijo Serena mirando a Tori quien seguía sin comprender. —Es divertido como todos tratan de sobrevivir pero terminan haciendo algo tonto que provoca su muerte. Además, es como un juego, si te dicen no vayas a un lugar es lo primero que haces y por eso terminas muerta. Es divertido adivinar quién va a morir primero, Cece y Lyly me dijeron que tengo que ver el nivel de estupidez de cada personaje.
Tori miró hacia la escaleras y vio como Jade y Lauren simplemente sonreían ante lo que Serena acababa de decir. Si la morena era sincera aun no comprendía cómo era que esas tres se llevaban tan bien y como era posible que pudieran compartir esa clase de opinión.
—Nos vamos. —Dijo Jade dirigiéndose hacía la puerta. Tori hizo que Bella se bajara de su regazo y se levantara del sofá para seguir a Jade.
La morena estaba a punto de cerrar la puerta cuando Bella se puso a lloriquear provocando que Tori frunciera el ceño, trató de cerrarla nuevamente pero por los lloriqueos de Bella sabía que algo no estaba bien. Fueron segundos después que entendió lo que estaba pasando.
—Lo siento, Jade. —Dijo la morena dirigiéndose hacia la pelinegra detrás de ella. —Pero tendremos que llevar a Bella con nosotras. Espero que no sea una molestia.
Tori miró a Jade esperando por una respuesta pero se dio cuenta que Jade tenía su atención en Bella, quien solo estaba esperando a que le dijeran que podía ir con ellas.
—No hay problema. —Dijo Jade con una sonrisa. —La bola de pelos me cae bien.
Tori no pudo evitar sonreír al ver como Bella salió corriendo de la casa y casi se lanzaba sobre Jade, como si hubiera entendido lo que había pasado. Miro a Jade con ternura porque la pelinegra se puso en cuclillas y acariciaba la bola de pelos.
Se subieron al auto de Tori, la morena de vez en cuando miraba a Jade por el rabillo de su ojo. Mientras que Jade simplemente estaba disfrutando del momento.
—¿Qué es lo que compraremos? —Pregunto Tori al darse cuenta de que ella no sabía lo que Jade y Lauren tenían planeado para esa tarde.
—Serena y Lauren estaban hablando sobre un pastel de croquetas para la bola de pelos, unas galletas y muffins para nosotras. Lauren me mandara la lista de cosas que va a necesitar en unos momentos.
Tori solo asintió y siguió manejando sin saber a donde ir, en cualquier momento Jade le diría a donde tenían que ir. Manejo y se dio cuenta de la tranquilidad que había en el auto, como si estar al lado de Jade fue lo más natural del mundo. Miró por el retrovisor y vio a Bella simplemente descansar en el asiento trasero.
Le había dado muchas vueltas al asunto de porqué Jade no aceptó sus disculpas si después simplemente estaría en su casa la mayor parte del tiempo, si se iba a quedar a dormir, si iba a llevarse a Bella en los momentos en que se descuidaba de su mascota. Penso y penso pero nunca podía llegar a una respuesta, y seguía sin entender las pequeñas notas con las líneas que Jade le había dado.
Tori dejó salir un suspiro, Jade la confundía como nadie lo había hecho jamás. Jade, por su parte, podía ver como la morena se perdía en sus pensamientos y lo único que pedía era que la morena no perdiera el control del auto. Podía ver como Tori abría y cerraba la boca como si en algún momento fuera a decir algo pero luego se arrepentia.
—¿Por qué no aceptaste mis disculpas si después iba a estar la mayor parte del tiempo en mi casa? —Pregunto Tori con el ceño fruncido.
Jade sonrió un poco ante esa pregunta al ver que a la morena le había tomado mucho tiempo para hacer esa pregunta. —Si hubiera dicho que sí rápidamente donde estaba lo interesante.
—¿Entonces solo lo haces por la intriga?
—Empezamos bien y luego no. —Dijo Jade. —Dejaste de hablarme por una semana y lo entiendo, quiero decir, las noticias que recibiste ese día fueron grandes. De una manera sabia que ibas a reaccionar de esa manera pero si me molesto que me metieras en el medio cuando lo único que hice fue evitar que hicieras algo de lo que te arrepentirias despues.
—Lo se. —Suspiro Tori dándole una pequeña sonrisa a Jade.
—De una manera entendí que necesitabas tiempo para aclarar tus pensamientos y sentimientos, y te disculpaste lo cual fue un gran paso para ti.
Tori suspiro. —¿Por qué no te diste por vencida?
Esa era una pregunta que Jade no se esperaba en ese momento, arrugó la nariz un poco para luego ponerse a pensar cómo responder pero en ese momento su teléfono se iluminó. —Es un mensaje de Lauren con la lista de lo que necesitara.
—¿Hacia donde?
—Jewel Osco. —Dijo Jade sin dudarlo, la pelinegra sabía que aún no respondía a la pregunta de la morena y sabía que tarde o temprano tenía que hacerlo. —Lauren dice que Serena está un poco molesta contigo.
Tori frunció el ceño. —¿Por qué? ¿Qué hice?
Jade no pudo evitar reírse. —Porque no dejaste a Bella, ella ya tenía planes y los arruinaste.
Tori sonrió sin poder evitarlo, había notado como la pequeña pelinegra le había tomado cariño a su mascota y cada vez que podía se la pasaba abrazándola o dándole croquetas a escondidas de todos. Regina le había dicho que si se descuidaba Serena se iba a llevar a Bella uno de esos días.
—Dile que me disculpe pero esta vez no la podía dejar en la casa, pocas veces se pone de esa manera y cuando lo hace es por algo. —Dijo la morena mientras aparcaba su auto. —Bueno, llegamos. ¿Cuánto tiempo tardaremos?
—Tengo la lista, así que creo como unos 20 o 30 minutos. ¿Por qué?
—No dejan entrar animales a menos que sean animales de servicio. Tenemos que dejar a Bella en el auto, lo bueno que siempre tengo la llave de repuesto para dejar el auto encendido y con el aire acondicionado.
Jade sabía que no podía hacer nada esta vez, no si quería poder comprar todo sin que llamaran a seguridad. Suspiro y asintió, esperaba mientras veía como la morena hablaba con Bella y luego bajaba del auto y ponerle llave.
Por el rabillo de su ojo noto que alguien las estaba siguiendo y Jade no pudo evitar rodar los ojos al saber que era un paparazzi, sabía que eso iría a pasar por todo el problema en el que ella y Lauren se metieron en el concierto y el que muchos supieran que tres de las mejores empresarias estuvieron en el lugar de los hecho ponía a todas en el ojo del huracán.
—No te vayas a asustar. —Le susurro Jade a Tori al oído. Noto como la morena temblaba ante la cercanía y Jade simplemente sonrió antes de tomar la mano de Tori y entrar en el lugar. —Pero un paparazzi nos está siguiendo.
Tori tomo unos de los carritos y empezaron a buscar las cosas que Lauren les había pedido. —¿No estas acostumbrada a ellos? —Pregunto Tori enarcando una ceja.
Jade rodó los ojos. —Lo estoy, lo decía por ti.
—Estoy acostumbrada a ellos. —Dijo Tori mirando en los estantes y tomar las cosas para hornear. —Y creo que ahora que tú y Lauren están en mi vida supongo que tengo que acostumbrarme a verlos más seguido, ¿no es así?
Jade sonrió y se encogió de hombros. —Que te puedo decir, todos quieren nuestra atención.
Tori miró a Jade y noto la confianza con la que pelinegra hablaba, era como si nada pudiera quitar esa confianza que tenía en sí misma. En un momento de descuido Jade había desaparecido y la morena miró a todos lados, dejó salir un suspiro y siguió con las compras.
Entre tanta caminata por todos los pasillos se paró frente al pequeño espacio que tenía para las flores y cayó en cuenta que no le había dado nada a Jade el día anterior y ese día. Miro de flor en flor tratando de ver cuál era la flor indicada para ese dia, Jade sin duda le había dejado confundida nuevamente pero le fascinó ver la sonrisa que esta le había dado en diferentes ocasiones.
—Pobre chica. —Escuchó Tori a sus espaldas pero decidió seguir buscando la flor correcta para Jade.
—Comprando flores para nadie. —Escucho otra voz decir.
—En lugar de dejar que su novio le compre flores.
Tori levantó la mirada y se dio cuenta de que ella era la única mirando las flores, sin duda alguna esas mujeres estaban hablando de ella. La morena trató de no rodar los ojos ante eso.
Tori decidió ignorar a las mujeres, cuando encontró la flor que describia lo que sentía en ese momento para con Jade, sonrió. Escuchó unos cuantos comentarios más sobre las mujeres pero solo rodo los ojos, fue hacía la cajera y pagó todo sin esperar a que Jade llegara.
Hizo todo en su poder para poder esconder la flor de la vista de Jade, le mandó un mensaje a Jade dejándole saber que la estaba esperando en el auto, en lo que esperaba hizo un pedido a su cafetería favorita, ahora sabía que tipo de café era el preferido de Jade porque Cat y Camila se lo habian dicho en una de sus pequeñas charlas cuando estaba en la cocina.
Tori espero y espero a que Jade saliera de la tienda pero al parecer la pelinegra estaba buscando algo, se puso a jugar con su teléfono mientras que escuchaba música y Bella dormía en el asiento trasero. No sabía cuánto tiempo pasó, estaba por llamar a Jade cuando alguien tocó la ventana del asiento del pasajero y vio que era Jade.
—Lamento la espera. —Dijo Jade subiendo al auto.
—¿Encontraste lo que buscabas? —Pregunto la morena con curiosidad.
—No estaba en esa tienda. —Dijo Jade con una pequeña sonrisa en el rostro. —Estaba en la joyería.
—Oh. —Fue lo único que salió de la boca de la manera.
—No encontré lo que buscaba, supongo que me tomará tiempo.
—¿Puedo saber que es? Digo, de esa manera podré ayudarte a buscar.
Jade sonrió pero sabía que tenía que declinar. —No, necesito buscarlo sola pero gracias por ofrecerte.
Tori asintió y le dio una pequeña sonrisa. —¿Ahora hacia dónde?
—Quiero café. —Dijo Jade con seriedad.
Tori se rio ante eso pero sabía hacía donde ir y sabía que su orden iba a estar lista cuando ellas llegaran. Jade miró los nombres de las calles y se dio cuenta que la morena la estaba llevando a la cafetería donde ella la había arrastrado cuando estaba tratando de escapar de una pelea.
Llegaron a la cafetería y Tori dejó salir a Bella mientras que Jade abría la puerta del lugar, vio como Bella simplemente se iba a la mesa que siempre usaban cuando iban al lugar. Jade simplemente siguió a la bola de pelos hacía la mesa y se sentó, Tori fue hacía la cajera y rápidamente le dieron su orden
Jade entrecerró los ojos al ver lo rápido que le había dado todo a la morena. —Tu dueña tenía todo esto planeado. —Dijo Jade mirando a la bola de pelos a su lado quien solo movía la cola de un lado a otro. —Me pregunto cuándo tendrá el valor de pedir que salga con ella en una cita. Las últimas dos fueron mi idea. Siempre que salimos todas están presentes y siempre termina siendo mi idea.
Tori llegó a la mesa y vio como Jade rápidamente dejó de hablar con Bella. Prefirió no decir nada y simplemente disfrutar el hecho que ella y Jade estaban juntas en su cafetería favorita.
Jade tomo su café y se dio cuenta del pequeño mensaje en ese "Sonrisa de angel" ante eso Jade no pudo evitar sonrojarse provocando que Tori la viera con ternura al ver tal reacción ante esas simples palabras.
Tori en ese momento sacó la flor que había comprado y se la dio a Jade quien estaba sorprendida ante las pequeñas sorpresas de la morena, por un momento había pensado que tenía que esperar un poco más.
—¿Qué tipo de flor es? —pregunto Jade tomando la roja flor con una pequeña sonrisa en el rostro.
—Clave. —Dijo Tori sin poder evitar sonreír al ver que la pelinegra estaba feliz. —Tendrás que buscar el significado por ti misma.
Jade miró a Tori con una ceja enarcada dándose cuenta de que esta vez la morena no le iba a decir lo que significan, que esta vez ella tendría que investigar por sí sola, mientras que Tori esperaría por una reacción de su parte.
—Haciendo me trabajar. —Dijo Jade enarcando una ceja.
—Tu también me haces trabajar al tratar de entender qué es lo que quieres decirme con esas notas.
Jade sonrió aún más antes de sacar una nota de sus pantalones y dársela a la morena quien no pudo ocultar su cara de sorpresa.
"Nada volverá a ser igual…" (7)
Tori frunció el ceño después de leer dos veces la línea y cuando miró a Jade esta tenía una sonrisa socarrona en el rostro. Nota el número y ahora sabía que tenía que tener cuidado como unía las piezas.
—¿Solo eso? —Pregunto la morena.
—Nuevamente, si te doy todo de una sola vez donde quedaría el interés, el misterio.
—Hay algo detrás de todas estas notas, ¿verdad?
Jade solo asintió. —De la misma manera que hay un mensaje detrás de cada flor que me has dado, hay un mensaje detrás de cada nota que has recibido.
Tori sonrió un poco ante la similitud que ambas tenían, dando pequeñas pistas que las llevarían hacía un mensaje.
—¿Cuántas líneas serán?
—27 lineas en total.
—¿Por que 27?
—Te lo diré cuando llegue el momento.
Tori asintió lentamente. —¿Cuál es tu película favorita? —Pregunto Tori antes de tomar un sorbo de su café.
Ante esa pregunta Tori notó la enorme sonrisa aparecer en el rostro de la pelinegra.
—El Tijeretazo por supuesto. —Respondió Jade emocionada con el simple hecho de mencionar su película favorita.
—¿Por qué? —Pregunto la morena al ver la emoción de la pelinegra.
Jade se movió en su asiento preparándose para darle a la morena explicación, tomo un sorbo de su cafe. —Bueno, primero las escenas filmadas dan esa sensación de misterio el cual da indicio a que algo puede pasar en cualquier momento, luego tenemos el guión, cada línea deliberada con precisión y en el momento exacto. Los personajes, sus personalidades y en ese momento cuando los estas conociendo puedes deducir su nivel de estupidez lo cual te da a entender quién morirá primero. Por último, lo explícitas que son las muertes, ver la sangre y el horror en los rostros de los personajes es fascinante.
Tori no podía hacer más que ver a la pelinegra con sorpresa y con una sonrisa en el rostro ante la emoción con la que esta hablaba de su película favorita. Mientras Jade sigue explicando todo sobre la película, Tori no dejaba de ver a la pelinegra. Tan concentradas estaban en su mundo que no vieron como el paparazzi les tomaba fotos.
La dueña de la cafetería solo se rió al ver que las chicas estaban en su propio mundo, ella sabía quienes eran esas chicas, claro, después de ver las noticias todo el mundo lo sabía. Pero Tori había llegado a su cafetería hacía años atrás junto a su hermana y la cual ella había deducido la novia de la morena, luego llegó sola, días después con un cachorro y ahora iban dos veces que llegaba con la pelinegra.
Mientras atendió a otros clientes no podía evitar ver la atmósfera que las dos chicas habian creado en tan pocos minutos, era difícil no prestarles atención. Vio como la morena se levantaba y se dirigía hacía el baño, en ese momento aprovechó para acercarse a la mesa donde estaba la pelinegra.
Jade levantó la mirada de su café para encontrarse con una señora de edad frente a ella. —¿Desea algo? —Pregunto Jade con curiosidad.
—Quizás suene extraño. —Dijo la señora. —He visto a Tori venir aquí por años, con personas importantes para ella, a veces sola, con Bella. —Dijo mientras miraba a la bola de pelos. —Y ahora contigo, no la lastimes.
Jade enarco una ceja tratando de entender porque la señora estaría tan preocupada por la morena. —¿Por qué se preocupa tanto?
La señora se encogió de hombros. —Muchos creen que enamorarse es aceptar que saldrás herido, pero si alguien te ama no te lastima, si alguien te ama es honesto contigo en todo momento. Supongo que he visto mucho dolor en el rostro de ella durante años que ahora hay una nueva expresión me preocupa volver a verla herida y triste.
Jade asintió lentamente entendiendo lo que la señora estaba tratando de decirle, sonrió un poco. La señora se alejó de la mesa con una sonrisa en su rostro al ver que la pelinegra había entendido.
Tori se acercó a la mesa y dejó salir un suspiro. —Es hora de regresar.
Jade solo se levantó de la mesa y empezó a caminar hacia la salida, las dos no podían evitar sonreír ante la tranquilidad que tenían ante el simple hecho de estar juntas.
—¿Desde hace cuanto que vienes aquí? —Pregunto Jade subiendo al auto.
Tori frunció el ceño un poco dando a entender que estaba pensando. —Creo que hace siete años que encontré el lugar.
Jade asintió un poco empezando a entender porque la señora se le había acercado. Se preguntaba cuánto había visto esa señora, cuánto tiempo había observado y hablado con Tori para saber que había un cambio en los gestos de la morena.
—¿Cuál es tu película favorita? —Pregunto Jade dándose cuenta que la mayor parte del tiempo se la habian pasado hablando de su película favorita.
—No tengo una película favorita. —Dijo Tori encogiéndose de hombros.
—¿Por que no?
—No lo se, supongo que no he puesto mucha atención a las películas que las chicas me han hecho ver, a veces me aburren, otras veces me quedo dormida o simplemente me distraigo con con otra cosa.
—Supongo que tengo una nueva menta. —Dijo Jade sacando su teléfono y empezando a buscar una lista de películas.
—Quieres ayudarme a encontrar una película que se convierta en mi favorita. —Dijo Tori mientras se estacionaba en el garaje de su casa.
—Por supuesto. —Respondió Jade mientras dejaba salir a Bella del auto. —Será divertido ver cuál género es tu favorito, pero si es romance te tiro por la ventana.
Tori solo se puso a reír ante eso, sabía que las primeras películas que Jade le haria ver serían de terror, misterio y asesinatos. Sabía que la pelinegra trataría de convencerla de que quizás una de esas películas podría ser su favorita.
—Buena suerte. —Dijo Tori bajando las bolsas del auto.
Jade enarco una ceja ante el reto que la morena le había dado. —Ya verás.
Ambas entraron en la casa y Jade frunció el ceño ante el silencio que había, sabía que era extraño porque Serena era una bola de energía que no se cansaba con tanta facilidad y que Lauren siempre se ponía a escuchar música cuando tenía casa sola.
Tori miró como Jade fruncía el ceño, no entendía porque pero depositó todas las bolas en la mesa de la cocina y fue cuando se dio cuenta del silencio.
—¿Dónde están Serena y Lauren? —Pregunto Tori mientras guardaba todo en sus respectivos lugares.
—Muertas, dormidas o salieron. —Dijo Jade encogiéndose de hombros.
Tori dejó de moverse para ver a Jade a los ojos, no podía creer lo que la pelinegra había dicho. —¡Jade! —Se quejó la morena.
—¡¿Que?! —Pregunto Jade tratando de no reírse ante la reacción de la morena.
Tori dejó salir un suspiro al ver que nada de lo que dijera iba a cambiar las cosas. Antes de que pudieran decir algo escucharon los gritos de Lauren y luego los gritos de Serena.
—Están vivas. —Dijo Jade.
Tori solo rodo los ojos y luego se puso a reír al ver que Serena estaba corriendo por la casa sin ropa mientras que Lauren la perseguía con una toalla. Jade se dio la vuelta para ver a Lauren amenazar a Serena con no permitirle comer galletas si no dejaba que la terminara de bañar.
—¡Lyly me dejara comer galletas! —Grito la pequeña mientras corría para que Lauren no la atrapara.
Lauren le dio una mirada a Jade para que esta le ayudará a atrapar al pequeño demonio que tenía por hermana, Jade rodó los ojos antes de empezar a seguir a Serena. Tori solo negó con la cabeza antes de seguir guardando las compras, le dio un vistazo a Bella quien se había quedado sentada en el sofá mientras miraba de un lado a otro, siguiendo los pasos de las pelinegras.
La puerta de la casa se abrió dejando ver a Regina y a Emma platicando, siendo seguidas por Lexa, Clarke, Lena y Kara.
Todas parecían estar teniendo una buena conversación la cual fue interrumpida cuando Jade y Lauren entraron a la casa por la puerta del patio, Lauren tenía a Serena en sus brazos envuelta en la toalla. Pero lo que causó que las demás se rieran fue que ambas pelinegras estaban empanadas.
—Ni una palabra. —Dijo Lauren antes de subir las escaleras mientras que Serena se reía.
Jade tenía el ceño tan fruncido que Tori por un momento pensó que el rostro de la pelinegra se quedaría de esa manera.
—¿Quiero saber qué fue lo que pasó? —Pregunto Regina cruzando los brazos sobre su pecho.
—¡Tu hija es un demonio! —Grito Jade antes de subir las escaleras.
Todas las mujeres se quedaron sorprendidas mientras que Emma no dejaba de reírse de haber visto el estado de las pelinegras.
—¿Tori? —Llamó Kara. —¿Te importaría decirnos que pasó para que ellas dos estuvieran en ese estado?
Tori se encogió de hombros mientras seguía moviéndose por la cocina, todas las recién llegadas se sentaron en la mesa esperando por una respuesta.
—Jade y yo acabamos de llegar de hacer compras, cuando entramos todo estaba muy silencioso tanto que a Jade le resultó extraño pero ni dos minutos después Serena bajó las escaleras corriendo, desnuda y empapada de agua siendo seguida por Lauren con una toalla en mano.
Emma estaba tratando de no volverse a reír pero la imagen que su mente había creado era muy divertida.
—¿Luego? —Pregunto Lena.
—Lauren con una mirada le pidió a Jade que le ayudará, empezaron a correr detrás de Serena, supongo que en algún momento Serena salió al patio e hizo que Jade y Lauren cayeran en la piscina.
—¿La piscina no tenía la cubierta? —Pregunto Regina un poco preocupada.
Tori asintió. —Le dije a Lauren que no dejara que Serena jugara cerca de la piscina esta mañana pero supongo que se le olvido al estar corriendo detrás de Serena.
Regina y Emma subieron las escaleras en busca de las tres pelinegras mientras que Lexa, Clarke y Kara se dirigieron hacía la sala para ver una película.
Lena se quedó en la cocina haciéndole compañía a la morena cuando vio la flor roja en la mesa.
—¿Tu y Jade salieron en una cita? —Pregunto Lena con curiosidad.
—Algo así. —Dijo Tori antes de sentarse en la mesa junto a Lena. —Fuimos de compras porque Serena, Lauren y Jade quieren prepararle un pastel a Bella, se enojaron porque no les dije que hoy es el cumpleaños de Bella. Luego terminamos yendo a la cafetería que está cerca de la empresa y pasamos un buen rato charlando.
Antes de que Lena o Tori pudieran decir algo Lauren entró en la cocina. —Fuera de mi cocina. —Dijo la pelinegra.
—Es mi cocina en realidad. —Murmuro Tori pero cuando Lauren le dio una mirada asesina supo que esta le había escuchado y antes de que algo más pudiera pasar ella y Lena salieron de la cocina sin darse cuenta de la sonrisa socarrona de Lauren.
…..
—¿Tenías que gritar que era un demonio? —Pregunto Regina sentadose en la cama mientras Jade terminaba de cambiarse.
—Es un demonio. —Dijo Jade a regañadientes. —Por ella me caí a la piscina y luego tuvo el descaro de empujar a Lauren y reírse como loca.
Regina sonrió un poco ante eso provocando que Jade la viera con seriedad. —Tori les dijo que no jugaran cerca de la piscina.
—Se lo dijo a Lauren no a mi. Además, tu hija decidió que no quería bañarse y correr por toda la casa desnuda.
—Sabes que no le gusta bañarse, Emma peleaba con ella. En mi caso es más fácil, una simple mirada y ella se queda quieta.
—Lo siento. —Murmuró Jade sabiendo que Regina la escucharía. Regina volvió a sonreír antes de levantarse y abrazar a la pelinegra. Jade no pudo hacer más que devolver el abrazo y suspirar ante la calma que le había invadido.
—Vamos. —Dijo Regina. —Las demás están por llegar y por lo que vi ustedes tienen algo planeado
…
Lauren se movía de un lado a otro por toda la cocina, muchas se habian ofrecido a ayudar pero la pelinegra les había dicho que no porque ella tenía cada movimiento planeado. Jade sin pedir permiso entró en la cocina y empezó a ayudar a Lauren provocando que las demás las vieran con el ceño fruncido.
Camila y Tori observaron como las dos pelinegras se movían con tanta facilidad, como si supieran que era lo que otra iría a hacer sin siquiera decir una palabra. Ambas morenas estaban embelesadas al punto que no estaban poniendo atención a la conversación que las demás estaban llevando a cabo.
—Se les cae la baba. —Comentó Santana con una sonrisa socarrona en el rostro provocando que Camila y Tori se pasaran la mano por el rostro y se dieron cuenta que no tenía nada pero las demás se estaban muriendo de la risa.
—Callate, Satanás. —Murmuró Camila antes de volver a observar a su novia.
—Esta como si nunca la hubiera visto. —Dijo Wynnona. —Se la pasan todas las noches juntas, está más que claro que ha visto mucho más que nosotras.
Camila volteo a ver a Wynnona con sorpresa antes de sonrojarse provocando nuevamente que todos en la sala se rieran. Wynnona apenas tuvo tiempo de esquivar una bola de masa, miró hacía la cocina y vio que Lauren tenía una ceja enarcada retandola a que volviera a decir algo sobre ella, Camila y su vida íntima.
—¡Lauren! —Se quejó Tori. —Las paredes se mancharan.
Jade se rio ante eso. —Hay un demonio de ocho años corriendo por todos lados siendo seguida por una bola de pelos y tres colubridae a cada momento, y a ti te preocupan las paredes.
Todas se pusieron a reír mientras que Tori solo rodaba los ojos. —Supongo que eso quiere decir que te estas voluntariando para pintar las paredes en unos cuantos meses
—Emma, Regina les hablan. —Dijo Jade antes de darse la vuelta y seguir con los suyo.
Las risas no se hicieron esperar, Emma y Regina solo dejaron salir un suspiro. Conversación volvió a ser el centro de atención en la sala mientras que Camila y Tori seguían en el mundo de observar a las pelinegras en la cocina.
Regina por su parte de dejaba de ver a Lauren y Jade en la cocina para luego dirigir su mirada donde Serena se encontraba jugando con Bella y las serpientes, quería asegurarse de que todas estuvieran bien, simplemente era un instinto que había adquirido desde que tuvo a Serena en sus brazos y ahora que tenía a Lauren y Jade no podía evitar preocuparse por ellas.
—'Gina puedes venir un momento. —Grito Lauren desde la cocina.
—Te voy a matar por esto, Srta. Swan. —Dijo Regina mirando a Emma con el ceño fruncido.
—¡Hey! —Se quejó Emma. —¡Es Swan-Mills!
Regina solo rodo los ojos antes de levantarse e ir a ver qué era lo que Lauren necesitaba.
—¿Que? —Pregunto Regina mirando todo lo que las pelinegras estaban haciendo en la cocina.
—¿No ayudas a preparar lasagna? —Pregunto Jade con una sonrisa inocente.
Regina enarco una ceja. —¿Qué recibiré a cambio de mostrarles mi receta secreta?
Lauren y Jade se miraron por unos minutos antes de dirigir su mirada hacia Regina. —Cuidaremos de Serena por una semana, tu y Emma podrán tener noches tranquilas. —Dijo Jade a regañadientes.
Lauren y Jade miraron a Regina moverse de un lado a otro dándoles a entender que estaba pensando. —Pero si le hablan a alguien de esta receta, nadie sabrá lo que les pasó. —Amenazó Regina provocando que Lauren y Jade asintieran con rapidez.
—Espera un momento. —Se quejó Jade. —No eres capaz de hacernos nada, somos tus hijas después de todo. —Susurro lo ultimo con una sonrisa socarrona.
Regina rodó los ojos. —Mejor ayuden antes de que me arrepienta.
Jade y Lauren rápidamente empezaron a ayudar a Regina en todo lo que la mujer mayor les pidiera, Camila, Tori y ahora Emma no dejaban de observar a las pelinegras moverse por toda la cocina.
—Dejen sus rarezas. —Dijo Trina tratando de hacer que Camila, Tori y Emma dejaran de ver hacía la cocina.
—¿Quieres hablar de eso? —Pregunto Tori con una ceja enarcada. Trina simplemente se quedó callada al entender lo que su hermana quería decir en esa pregunta, muchas enarcaron una ceja ante eso y se rieron por lo bajo. —Eso pensé. —agregó Tori con una sonrisa en son de victoria.
…..
—Así que. —Empezó a decir Lauren. —¿Cómo te fue con Tori?
Regina miró a Jade con curiosidad, pero simplemente se quedó callada para poder escuchar la conversación.
—Entretenido. —Respondió Jade. —Fuimos por un café después de hacer las compras, o más bien después de que ella hiciera las compras.
—¿Por qué? —Pregunto Regina mientras veía con curiosidad como Lauren sacaba unos brownies del horno.
—Fue a la joyería.
—Ni siquiera están saliendo y ya quieres proponerle matrimonio. —Se burló Lauren provocando que Jade rodara los ojos.
—No estoy buscando un anillo. Pero bueno, hablamos un poco de nuestras películas favoritas y me entere que Vega no tiene una. Así que, tendré que cambiar eso.
—¿Qué es lo que buscas? —Pregunto Regina mientras Lauren le ayudaba a meter la lasaña al horno, mete otra bandeja más pequeña la cual era para Maggie y Jade.
Jade sonrió al ver que Regina no había olvidado sus alergias. —Un reloj.
Regina y Lauren fruncieron el ceño ante eso, no entendían porque la pelinegra estaba buscando un reloj.
—¿Necesitas ayuda? —Pregunto Lauren a pesar de que no entendía quería ayudar en lo que pudiera.
—Si sabes de joyerías que venden relojes antiguos sería de mucha ayuda.
Regina y Lauren asintieron.
Las conversaciones y risas seguian escuchandose por toda la casa, los rostros de felicidad en cada persona les hacían saber que estaban pasando un gran momento. Regina, Lauren y Jade se dirigieron a la sala para esperar a que la lasagna estuviera lista. Regina se sentó al lado de Emma, Lauren al lado de Camila mientras que Jade buscaba un lugar en el cual estar cómoda pero todo estaba ocupada, se encogió de hombros y se sentó en el regazo de Dinah provocando que la polinesia se asustara ante el peso.
Todos vieron a Jade con curiosidad mientras Normani enarcó una ceja. Jade solo le sonrió a la morena y se acomodo en el regazo de Dinah hasta estar satisfecha. Dinah pasó sus manos alrededor de la cintura de Jade mientras seguía su conversación con Sam, Carly y Quinn.
—¿Alguien va a explicar qué está pasando? —Pregunto Holly.
Todos pusieron su atención en Holly ante su pregunta. Andre, Robert y Ryder solo se encogieron de hombros y siguieron hablando con Doc y Dolls, ellos ya estaban acostumbrados a las raras acciones de Jade.
—No hay espacios. —Dijo Jade. —Dinah es buena para mantenerme cómoda ya que no se mueve tanto como Mani o Brittany, Ally y Rachel son enanas así que no son cómodas.
—¡Hey! —Se quejaron Ally y Rachel.
—Es la verdad. —Dijo Jade encogiéndose de hombros.
Lorik solo veía de un lado a otro entretenida al ver lo confundida que Holly estaba ante las acciones de Jade. Miró a su alrededor y vio que muchos aún no se acostumbraban a las espontáneas acciones de Jade y Lauren y sin duda eso era divertido. De la nada empezó a sentirse extraño y entendió que si no tenía una distracción empezará a entrar en pánico, no entendía que había desatado esa reacción en ella, pero antes de que pudiera hacer algo sintió como alguien le tocaba la mano y cuando miró al lado se encontró con Serena viéndola directamente.
—¿Qué pasa, pequeño demonio? —Pregunto Lorik provocando que Lauren y Jade se rieran mientras que Emma rodaba los ojos y Regina enarcaba una ceja.
—¿Podemos ver una película? —Le pregunto Serena ignorando el apodo que la mujer le había dado por culpa de Lauren y Jade.
Lorik enarco una ceja porque no esperaba que la pequeña le fuera a preguntar a ella. —Después de la cena podemos ver una si aun quieres. —Respondió Lorik. Serena pareció pensarlo y asintió antes de sentarse en el regazo de la mujer provocando que esta le diera una mirada de confusión a Emma y Regina, quienes solo se encogieron de hombros.
Lo único que podian pensar era que Serena había sentido que quizás la mujer estaba triste o estaba por entrar en pánico. Lorik de alguna manera le agradeció a la pequeña por distraerla, siempre sabía cuando estaba por tener un ataque de pánico a veces no sabía porque le daban otras veces era una escena la que los provocaba y entendió en ese momento que al estar con todas esas personas y ver a su hija sonreír, el miedo de siempre se había colado en su mente. El miedo de perder a su hija otra vez.
Serena se acercó al odio de Lorik para susurrarle. —¿Crees que mamá me deje ver La Maldicion de Hill House? Ya vi Van Helsing y se enojó un poco con Lyly y Cece pero después se quedó viendo con nosotras.
Lorik hizo un gesto que lo estaba pensando. —Creo que si podremos verla, pero esa es una serie, no una película.
—Vi un trailer, creo que Jade le llamo así, y parecía interesante.
—¿Es de terror?
Muchos habian dejado sus conversaciones de lado para ver como Serena y Lorik charlaban. Lauren y Jade habian notado la mirada perdida de Lorik, sonrieron al ver a Serena entretenerla. Tori se acercó a su madre y Serena, tuvo cuidado de no interrumpir la conversación simplemente quería estar cerca de Lorik.
—Horror, se supone que tiene fantasma. Entonces, ¿la podemos ver?
—Convence a los demás, si lo haces apagamos todas las luces y la veremos.
—¿Cómo hago eso? —Susurro Serena.
—Dile a Jade y Lauren que la serie tiene fantasma y ellas harán el trabajo por ti. —Susurro Lorik antes de que Serena saltara de su regazo y corriera y saltara sobre Lauren para susurrarle algo, volver a correr hacía Jade y saltar sobre esta provocando que Dinah se quejara por el peso adherido en su regazo.
—¡Bien! —Grito Lauren. —Después de la cena veremos La Maldición de Hill House y no quiero excusas.
—Trabajamos. —Dijo Lexa.
—Es fin de semana. —Replicó Lauren.
—Es Lunes. —Dijo Lena tratando de no reírse.
—Es fin de semana. —Volvió a decir Lauren enarcando una ceja.
Nadie dijo nada sabían que de una u otra forma Lauren terminaría ganando, Regina aviso que la cena estaba lista y cada persona empezó a ayudar a acomodar la sala para poder cenar. Todos empezaron a cenar con tranquilidad pero los comentarios sobre la lasaña no se hicieron esperar, Regina solo sonreía ante los cumplidos mientras que Emma se esforzaba en terminar su porción y poder tomar otra antes de que alguien más le ganara.
—Si Emma y tú se divorcian, estoy disponible. —Comentó Wynonna provocando que todos se rieran porque era exactamente lo que estaban pensando.
—Sigue sonando. —Dijo Emma dándole una mirada asesina a la mayor de los Earp.
—Porque siento que solo lo dices para que les diga mi receta. —Comentó Regina.
—No solo eso. —Murmuró Willa provocando que Wynonna asintiera ya que estaba cerca de ella.
Regina solo rodo los ojos ante eso, siguió disfrutando de la calmada atmósfera que se había hecho del lugar. Lorik por su parte estaba más tranquila, se sentía un poco más relajada pero sabía que tenía que tomar sus medicamentos lo más pronto posible antes de que tuviera un ataque de pánico frente a Serena.
Lauren y Jade se levantaron y empezaron a organizar todo para que todos estuvieran cómodos y pudieran ver la serie en paz total. Jade llamó la atención de todos haciéndoles saber que era un momento para darle a Bella su pastel de croquetas. Todos estaban sonriendo ante los gestos de la pelinegra y la enorme sonrisa de la morena al ver cómo estaban tratando a su bola de pelos.
Tori no podía evitar sentirse más atraída por Jade en ese momento, siempre que pensaba que tenía figurada a la pelinegra le salía con algo más sorprendente y el hecho de que siempre se preocupara por Bella le daba más puntos.
Tori no dudó en tomar fotos del momento, Bella por su parte estaba disfrutando el pastel ignorando todo lo que estaba pasando a su alrededor.
Todos estaban tomando asientos, en ese momento Jade aprovechó para sentarse al lado de Tori sabía que iba a disfrutar de ver a la morena asustada. Cada quien estaba con sus respectivas parejas y sonrió al ver que JT tomaba la mano de Perrie con fuerza y eso que ni siquiera habian puesto el primer episodio. Quiso reírse fuerte pero sabía que eso solo iba a retrasar el que vieran la serie. Miró a su alrededor y vio que Bella y Serena estaban junto a Lorik, sonrió un poco al ver que la pequeña demonio no iba a dejar a Lorik sola en lo que restaba de la noche.
Tori sabía que tenía que prepararse mentalmente para lo que sea que fueran a ver, podía ver a JT temblar un poco ante el simple hecho de que era una serie de horror. Eso no le daba buena espina, noto como Cat se acercaba más a Trina como si la fuera a proteger de todo.
—Crees que esto sea una buena idea. —Le susurro Tori a Jade viendo como la intro de la serie empezaba de manera escalofriante.
—Lo es. —Susurro Jade de regreso. —Todos están aquí, será divertido verlos gritar como locos y a Serena reirse.
Estaban tan concentrados en toda la trama de la serie que cuando de la nada salio un fantasma todos gritaron mientras que Serena, Lauren, Jade y Lorik se reían como locas y se emocionaban aún más por lo que iba a pasar.
Sin pensarlo Tori tomo la mano de Jade, la pelinegra no hizo nada para soltarla simplemente dejo que la morena entrelazara sus manos. En el siguiente susto Jade sintió como Tori apretaba su mano con un poco de fuerza y trataba de esconder su rostro de la televisión, Jade sonrió con ternura ante la reacción para luego volver su atención a la serie.
Tori miró a su alrededor, JT estaba escondiendo su rostro en el cuello de Perrie mientras que Cat había tomado el brazo de Trina y se abrazó a este como si su vida dependiera de ello. Miro como Lorik y Serena estaban tan concentradas que los movimientos de Bella no les afectaban en lo absoluto.
Después de seis capítulos Tori y Jade podían escuchar sollozos de un lado, comentarios de enojo por otro y pequeños gritos de horror. Si eran sinceras no esperaban que la serie fue tan emocional que hiciera llorar a muchos, se habian sorprendido al ver que Serena había aguantado tanto tiempo despierta pero Regina sabía que si no la ponían a dormir cuanto antes la pequeña tendrían un mal genio después.
Jade jalo la mano de Tori para que la siguiera, todos estaban buscando buscando sábanas y almohadas para dormir porque sabían que si seguían viendo la serie sin Serena probablemente se enojaría y nadie quería eso.
Jade pasó al lado de Lauren quien le dio una bolsa con brownies. Tori y Jade salieron al patio y se sentaron en el césped junto a la piscina. Jade sacó un brownie de la bolsa y se lo dio a la morena quien lo vio con curiosidad y desconfianza al mismo tiempo, recordando que Camila le había dicho que no comiera nada de lo que Jade y Lauren le dieran si lo sacaban de una bolsa.
—Solo comelo. —Murmuro Jade mordiendo el brownie que tenía en la mano. —Lauren y yo nos esforzamos en prepararlos, esperamos a que Serena se durmiera para comerlos.
—¿Que tienen? —Pregunto la morena antes de darle un pequeña mordida al brownie, se quedó quieta al sentir como alguien se acercaba a sus espaldas pero después solo sintió la cola de Bella golpeando su espalda mientras esta le daba toda su atención a Jade.
—Tú sabes lo que tiene. —Dijo Jade para luego acostarse en el césped y mirar el cielo, eran pocas las estrellas que se podían ver pero eso le ayudaba a sentirse en calma.
Tori se acostó al lado de Jade, ambas estaban en una atmósfera tranquila. Siguieron comiendo de los brownies hasta el punto que Tori empezó a sentir los efectos del cannabis lentamente. Tori miró a su lado y vio que Jade empezaba a reírse porque Bella se había subido sobre ella, se puso a reir un poco ante eso, si era sincera nunca se había sentido de esa manera.
Jade miró a Tori quien parecía sorprendida, confundida y divertida al mismo tiempo y entendió que era la primera vez que la morena.
—¿Cómo te sientes? —Pregunto Jade sin dejar de mirar a Tori.
La morena se giró un poco y miró a Jade directamente a los ojos. —Rara. —Murmuró la morena frunciendo el ceño y arrugando la nariz de una manera que Jade no pudo evitar reírse.
—¿Qué quieres hacer?
Tori dejó salir un suspiro ante eso. —Nada, solo quiero estar aquí contigo sin hacer nada.
—Me parece una buena idea. —Dijo Jade dejando salir un suspiro.
Ambas pasaron en sus propios mundos, cuando se veían no podían evitar sonreír. Todo parecía estar perfecto para ambas, no querian moverse aunque de una manera entendian que tenían que volver a la casa.
Al final, terminaron quedándose dormidas en el césped, abrazadas y en paz con Bella al lado de ella.
