Nueva historia de DxD, esta vez es el turno de las maduritas de la franquicia, espero que la disfruten y se la gocen, suponiendo que sobrevivan a la hemorragia nasal que posible y en un futuro tengan.

Descargo de responsabilidad: High School DxD no me pertenece, es propiedad de Ichiei Ishibumi, yo solo creo esta historia para entretener.

- Todo va a estar bien - Persona hablando

" Esto no puede ser real" Pensamientos

"- Necesito que te encargues de esto -" recuerdo o fantasía.

MILF Cooking Club

Capítulo 4: Pechuga de pollo a las finas hierbas

No había pasado ni una semana desde que las chicas se fueran en su viaje y en esos días había estado ayudando mucho a su Onee-chan como a sus Okaa-san y también a Yasaka-san, ayudaba moviendo cajas, acompañándolas de compras, siendo su escucha, básicamente su mejor amigo, claro que con Grayfia no era difícil, llevaba siendo su mejor amigo mas de una decena, pero con las otras tres, no es que fuera difícil precisamente, mas bien era... incomodo.

No es que no quisiera pasar tiempo con ellas, las conocía desde hace años y habían estado ahí para el luego de lo de sus padres, siendo hermanas o madres que le brindaban cariño cuando se sentía triste, el problema es que tras conocerse tanto tiempo, había notado que ellas con el se comportaban, a falta de mejor palabra, diferentes, no en el mal sentido, mas bien mas vivaces y desinhibidas, no sabía porque pero tampoco es que le molestara, salvo cuando se trataba de sus novias, en cuyo caso solían ser quizás demasiado entrometidas en su relación y mas si se trataba de los pormenores físicos, cosa que lo sonrojaba a mas no poder por las ideas que le metían sobre cosas que podría hacer con sus chicas y en el caso de sus hijas, haciendo que se avergonzaran a mas no poder al ver la desfachatez y descaro con el que ya no solo le sugerían cosas sucias para que hiciera con ellas, también por lo mucho que se le acercaban cuando lo hacían.

Aun así, le gustaba pasar el tiempo con ellas, era divertido verlas comportarse tan juveniles, bueno actualmente ya no era tan divertido, al menos con Venelana, Yasaka y Shuri, y es que en esa ultima semana las había visto mas asertivas, se vestían mucho mas eróticas y sexys, se le pegaban mas e incluso cuando las acompañaba a hacer compras o algo por el estilo se abrazaban a su brazo de improvisto lo cual no estaría mal si no fuera por un detalle, podía sentir contra su brazo la cálida y suave sensación de sus pechos al enterrarse quizás demasiado su extremidad en sus carnes y no precisamente porque el así lo deseara, que tampoco es que le molestara, pero lo ponía nervioso, mas porque ellas parecían no importarles la comprometedora posición de su brazo y porque ademas dado que entre ellos hacía cierto grado de confianza al caminar así, hasta parecían amantes.

Como sea, esa semana había sido todo un caos para el y sus nervios y eso era lo que lo tenía actualmente en la situación en la que estaba, donde se encontraba en su cuarto, con sus piernas replegadas contra su pecho mientras las sujetaba con sus brazos y tenía una una expresión triste en su rostro, casi llorosa de hecho.

- Uuuhh... las extraño demasiado y ni siquiera ha pasado una semana - comento para si mismo mientras se lamentaba el no tener a sus novias cerca, eso era lo que pasaba cuando en casos como el, el afecto era tan grande hacia sus seres queridos, en este caso sus parejas, afecto correspondido en igual medida, tan acostumbrado a que todo lo hacían juntos que ahora que estaban separados no sabía como proceder.

Y el pasar tiempo con sus Okaa-san Venelana y Shuri no estaba ayudando, pues al estar con ellas y verlas sonreír a su lado, no podía evitar recordar a Rias y Akeno, así como no podía evitar pensar e imaginar un futuro donde los tres mucho mas maduros estaban juntos y sonreían en la misma forma en que lo hacían sus madres, de manera cálida y amorosa, eso no estaba haciendo fácil para él el llevar su ausencia, cosa que se prolongaría por otras siete semanas.

"Se que les prometí que me haría cargo de sus madres y Yasaka-san mientras no estaban y las ayudaría en lo que pudiera pero no creí que fuera a ser tan difícil", pensó resignado al hecho de que ellas les recordaran tanto a sus hijas dado el increíble parecido en cada caso, bendita fuera la genética, ademas de que no era tan ciego como para no notar que eran demasiado sexys, eso solo estaba haciendo mas difícil su trabajo, mas cuando se le pegaban tanto y no parecía importarles que sintiera sus carnes.

" - Me gustaría que la animes de vez en cuando, la saques a pasear o seas su confidente - " recordoó lo que le pidió Rias respecto a su madre y a lo que él se había comprometido.

" - Me gustaría estés al pendiente de ella estos días, la atiendas en todo lo que necesite, de verdad en absolutamente todo - " de igual manera recordó la petición de Akeno respecto a su Okaa-san y la que consideraba su Onee-chan, a lo cual el también se había comprometido y que ahora le estaba causando tantos problemas.

- ¡AAAHH! - grito totalmente contrariado mientras se sujetaba el rostro de sus mejillas aterrado por no saber como lidiar con la situación, - !se que lo prometí pero ellas son demasiado lindas!, ¡ademas soy un adolescente en su apogeo sexual, maldita sea! - termino descargando en sus gritos sus frustraciones porque si, ahí estaba el principal problema de todo el descaro con el que había lidiado en esa semana, no era tan tonto como ara no reconocer su belleza y no ayudaba a mantenerlo tranquilo el que en mas de una ocasión haya tenido la oportunidad de sentir su carne erótica, estaba por explotar.

De repente y mientras que el rodaba por su cama tratando de calmarse mientras liberaba la frustración en quejidos y ritos no noto la entrada de alguien en su habitación que se paro cerca de su cama con piernas firmes sobre el suelo y sus brazos en jarras sobre su cintura, al parecer molesta por el ruido.

- ¡Baja la voz, Ise-chan! - de repente hablo una mujer mientras el continuaba girando sobre su cama llamando su atención y girando su cabeza para verla pues estaba en ese momento de espaldas a ella y con los ojos llorosos por la frustración gracias a su anterior arrebato.

Ahí parada con un ceño entre adorable y enojado estaba su Onee-chan, Grayfia Lucifuge, aquella que se encargara de el todos estos años luego de su perdida, pelo plateado largo, suelto en la parte de enfrente y trenzado en la parte de la espalda, hermosos y cautivadores ojos de un exótico color carmesí y una figura despampanante de curvas generosas y perfectas.

Vestía con un suéter que se ajustaba a sus curvas de color purpura que estaba remarcando especialmente la zona del pecho y unos jeans azules que perfilaban muy bien sus piernas, estaba en la misma posición que usaba siempre que iba a regañarlo y esta vez no era diferente pues había estado gritando mucho para descargar su frustración y al parecer a ella eso no le gusto mucho que digamos.

- ¡No puedes seguir deprimido solo porque Rias-chan y Akeno-chan no están, eres un hombre, demuestra entereza! - continuo su regaño mientras su ceño se fruncía mas aunque en su caso parecía mas que estuviera haciendo un puchero mas que regañándolo pero así era ella y tras tantos años, él sabía reconocer la firmeza detrás de sus adorables gestos.

- Uhhh, Onee-chan - aun así, no pudo evitar el lamento que escapo de su boca luego del regaño de su principal figura materna durante mas de una década, haciéndola suspirar por su actitud.

De todos modos, necesito tu ayuda con algo por hoy, así que ¡vamos! - dijo dando la orden al final mientras le daba la espalda y empezaba a irse antes de que cediera a la ternura de su hermanito y empezara a mimarlo para calmarlo, solía ser así con el siempre, cada vez que lloraba lo abrazaba, le daba palmaditas en la cabeza y le decía palabras dulces, no podía evitarlo y por eso no se permitía estar mucho tiempo con el cuando el hacía esa carita de cachorro triste con la que la chantajeaba o terminaba cediendo fácilmente mientras lo consentía.

- ¿Are?, ¿que ayuda? - pregunto curioso pues o sabía que podría necesitar Grayfia en ese momento que requiriera de su ayuda, tan despistado estaba en ese momento que no recordaba que día era ese.

- Mooo, no me digas que ya lo olvidaste - la escucho esta vez si haciendo un puchero ante su aparente olvido de la fecha, - hoy es cuando se reúne mi club de cocina Ise-chan - le dijo eso con lagrimitas en su ojos mientras lo veía esta vez si, con un completo y adorable puchero en su rostro cosa que lo hizo reaccionar, avergonzado por la lindura de su Onee-chan y por olvidarse de que hoy tenían reunión las chicas del club que creara hace un tiempo la peliplata.

Disculpándose por pasarlo por alto y compensando a su Onee-chan con un beso en la mejilla como cada vez que metía la pata y tras escucharla ronronear, señal de que aceptaba sus disculpas, ambos bajaron hasta la entrada de la casa para recibir a las miembros del club de cocina.

Mientras iban bajando Grayfia tarareaba feliz, algo que le hacía sonreír, la quería mucho y procuraba su bienestar, le agradecía que lo cuidara todos estos años y en su corazón sentía que era su deber cuidar de ella. de hecho lo hacía dese hace muchos años atrás por lo que a veces era difícil saber quien era el mayor y quien el menor entre ellos, mas cuando a Grayfia le daban esos berrinches que la hacían ver tan adorable, aunque lo hicieran sentir incomodo.

Como fuera cuando llegaron a la planta baja el no estaba del todo asombrado ante la idea de que esas mujeres vinieran a su casa, no era la primera vez que lo hacían tampoco, le interesaba mas pensar en que clase de platillo prepararía ese día, el era muy goloso y pensar en las delicias que podrían estar por preparar le hacía babear, sin embargo no supo como reaccionar cuando las vio.

- ¡Hola, ya estamos aquí! - dijeron al unisono Venelana, Shuri y Yasaka nada mas vieron a Issei y Grayfia aparecer mientras sonreían amigables para agradecer la invitación mientras desbordaban esa aura madura de sus cuerpos.

- ¡Hey chicas! - saludo efusivamente Grayfia mientras sonreía y levantaba su mano para agitarla a modo de saludo a sus tres invitadas de ese día, - ¡pero, no se queden ahí!, ¡adelante, pasen! - las invito cuando los saludos terminaron para que no se quedaran esperando mas tiempo en la entrada de la casa.

Mientras tanto el castaño, bueno, digamos que estaba sorprendido y con la boca abierta, no por verlas ahí, como ya se menciono, no era la primera vez que las veía en su casa, no, el motivo por el que parecía que su mandíbula ahora estaba colgando mientras tenía sus ojos abiertos como platos era por la apariencia de las tres mujeres ante el.

Sabía que eran sexys, pero en este momento, sentía que esa palabra ya les quedaba corta y no era para menos considerando lo bien que se veían las tres mujeres en ese momento.

Venelana quien estaba en el centro usaba un conjunto color crema que acentuaba su piel bastante bien, consistía en una suerte de chaleco abotonado color crema bajo la cual alcanzaba a notar una camisa sin mangas de color carmesí y una falda igualmente de color crema que completaba el conjunto, no sería un problema si no fuera por unos cuantos detalles de su atuendo, el primero era que tanto esa especie de chaleco como la camisa sin magas bajo el mismo, tenían un agujero justo en la zona del pecho por lo cual alcanzaba a ver doblemente su escote, la primera parte en la zona del cuello aunque el escote era leve y el segundo escote lo veía a través del agujero en la zona del pecho en sus prendas superiores, luego el segundo problema estaba en su falda, mirando detalladamente era obvio que esa falda no llegaba a cubrir ni siquiera hasta medio muslo, de hecho mas parecía que apenas y alcanzaba a bajar poco mas allá de la zona de la entrepierna, tenía que ser un fastidio tratar de agacharse sin que en el proceso la falda se le subiera y dejara a la vista su trasero, pero sin duda el problema mas grande era que estaba seguro de que esa prenda era una o dos tallas mas pequeña de la que normalmente usaba esa castaña, así que podía notar muy bien sus grandes pechos y sus muslos se veían mas regordetes debido a la presión de la falda sobre ellos, de hecho le sorprendería si esa ropa le estaba permitiendo usar ropa interior debajo, cosa que dudaba porque no parecía notarse sobre la tela.

Al lado izquierdo de la castaña frente a el, estaba Yasaka, una hermosa rubia que aunque parecía tratar de vestir mas recatada igual presentaba sus problemas con su vestimenta, especialmente con su camisa color roja que se vería muy normal de no ser por el descarado y pronunciado escote que presentaba, el escote era demasiado amplio por lo cual podía ver buena arte de la zona superior de esos enormes pechos que se cargaba la mujer, incluyendo una marca personal en su seno izquierdo de un lunar que contrastaba con su blanca piel pero que a su vez la hacía mas atractiva, por suerte su falda color rosa llegaba hasta sus pantorrillas, así que no era del todo escandalosa, ademas de ser lo suficientemente holgada para permitirle máxima movilidad, sin embargo el que como Venelana, Yasaka parecía estar usando en su caso solo una camisa mas pequeña y escotada hacía que fuera difícil verla sin que la mirada se desviara a su prominente delantera, la mas grande de las cuatro mujeres ahí presentes de hecho.

Y al final pero no por ello menos importante estaba la mujer al lado derecho de Venelana, una pelinegra de aspecto muy juvenil y sonrisa encantadora que ataba su cabello en una cola de caballo alta igual a su hija pese a tener el cabello mas corto que ella, esa era Shuri quien vestía una camisa blanca sencilla de hecho la mas recatada de las tres ademas de unos pantalones negros hasta casi los tobillos, su atuendo aunque mas normal si que se notaba como con las demás ser un par de tallas mas pequeño por lo que su cuerpo se veía bastante resaltado, ademas del lindo collar de cinta negra con una hebilla dorada justo en el centro que abrazaba su cuello en ese momento dándole un aspecto juvenil pero muy juguetón.

No sabía en que pensaban esas mujeres para presentarse así en ese momento, pero tenía una cosa clara, ese día tenía que tener especial cuidado con ellas, no fuera a meterse en un problema por estar mirando lo que no debía en zonas donde tenía que posar la vista, aunque algo le decía que eso sería mas fácil decirlo que hacerlo.

- Ehhh, ¿así que hoy Ise-chan nos acompañara? - pregunto curiosa Venelana viéndolo directamente mientras que tras ella Yasaka solo sonreía alegre y vivaracha y Shuri solo daba una sutil sonrisa como expresando su aprobación a su incursión, siempre era lo mismo, se hacían las que no esperabas que el metiera sus narices cuando el era su por decirlo así, catador oficial.

- Si, le pedí que nos ayudara hoy también - dijo Grayfia sonriente mirándolo antes de con un ligero golpe de su codo hacerlo reaccionar para que saludara a las recién llegadas que seguían mirándolo curiosas.

- Ah, hola - saludo torpemente al no saber como procesar aun la forma de vestir que eligieron todas, pero al menos no quedaría como un baboso por no responder, aunque la forma en que las saludo tampoco es que lo ayudara mucho en ese proposito.

- Fu fu, vaya, cada día te pones mas guapo - de repente y para vergüenza suya la primera en acercarse le fue Venelana quien se inclino lo suficiente ante el para dirigirle la palabra, lo cual en el proceso le dejo ver mas de ese escote escondido, por no mencionar que ahora su trasero se veía enorme apretado en esa falda, solo daba gracias que Venelana pusiera las manos entre sus muslo y así tapara la entrepierna o de lo contrario estaba seguro de que vería mas de lo que debía.

"Venelana Bael" pensó Issei viendo a esa hermosa mujer, se parecía demasiado a Rias salvo por el cabello castaño y obviamente por esa aura madura, por lo demás eran idénticas, casi que daba miedo de hecho, "ella huele como una mujer de verdad" no pudo evitar pensar cuando a sus fosas nasales llego ese delicado pero femenino aroma que desprendía la castaña, era dulce pero atrayente, todo el encanto de una mujer madura básicamente.

- ¡Estas ayudando a tu Onee-chan... eres un chico tan bueno! - ahora era Yasaka quien hablaba con el, claro que en el proceso junto sus manos bajo sus pechos lo cual los realzo haciéndolos ver aun mas grandes de lo que ya eran y eso era decir mucho, cosa que lo estaba mortificando y haciendo sentir mal, después de todo, ella le estaba dando una sonrisa de admiración por ser tan diligente y ayudar a su Onee-chan y ahí estaba el viendo la enormidad de sus pechos.

"Yasaka Kitsuhime", la llamo en su mente mientras tragaba duro, carajo hasta pasar su saliva se le estaba tornando pesado ante la imagen frente a el, de verdad se sentía de lo peor con su vista peleando para no dejar de ver sus pechos, "¡en serio, sus pechos son enormes!", finalmente grito para sus adentros rendido cuando ya no pudo negar la verdad, cosa difícil cuando Yasaka los estaba realzando con sus brazos debajo de sus senos de manera tan inocente y eso era lo que lo hacía sentir mas como un criminal.

- ¡Vamos a contar contigo hoy Ise-chan, así que no nos defraudes! - la ultima en hablar fue Shuri quien lo veía tranquilamente mientras le daba una sonrisa algo discreta, mientras ponía toda su confianza en él, no era algo nuevo, siempre lo hacía y mas desde que empezó su relación con su hija, por lo cual asintió a sus palabras.

"Shuri Himejima", mentiría si dijera que ella a veces no le daba miedo, no sabía porque, pero era su impresión, no en mal sentido, mas bien como que era de las que les gustaba las bromas pesadas, "su cuerpo es delgado pero con muchas curvas y su aspecto la hace ver tan joven" no era mentira, desde que la conocía, siempre vestía de forma juvenil y debido a lo mucho que se cuidaba y su gran parecido a su hija, no era raro que la confundieran con la hermana gemela de Akeno, coas que a Shuri le encantaba y a Akeno la hacía avergonzar.

- ¡Muy bien!, ¡vamos a comenzar!, ¡ la lección de hoy es sobre hornear! -entonces escucho el animado grito de su onee-chan al cual se unieron sus amigas antes de entrar y dirigirse a la cocina para empezar la reunión del día donde probarían nuevas recetas que mejorarían la calidad de su cocina, mientras que el castaño solo se quedaba ahí parado pensando.

"¿Qué rayos pasa con este grupo?" pensó al notar un hecho que hasta ahora había pasado por alto, suponía él que era debido a que las había visto toda la vida y por eso nunca se había percatado hasta ese día al verlas así, "todas son demasiado sexys", no había duda alguna, no le había dado la atención debida pero era un hecho indiscutible, todas ellas eran demasiado hermosas, exudaban belleza y erotismo por cada poro de su cuerpo.


Así inicio la lección donde todas estaban centradas en aprender a manipular la masa que preparaban, las cantidades y los materiales, todas concentradas en la cocina donde la principal maestra ese día era Grayfia que se notaba como se esforzaba en mostrar sus habilidades a sus amigas.

En la mesa central de la cocina estaba Grayfia, la cual en ese momento amasaba la masa con una técnica exquisita, cosa que maravillaba a sus amigas que solo veían fascinadas la técnica de la peliplata e incluso algunas tomaban nota sobre como preparar una adecuada masa para la receta que preparaban, por lo cual rodeaban a la mujer para no perderse ni un momento de la preparación.

Mientras tanto el castaño iba de aquí para allá moviendo todo tipo de cosas, desde instrumentos para la cocina hasta ingredientes, tazones, batidoras, harina, en fin, lo que las cuatro mujeres precisaran para continuar con la receta, cosa que lo tenía atareado y cansado por el esfuerzo que estaba haciendo para ayudar a las cuatro bellezas.

"Se suponía que estaría aquí para ayudar pero..." Issei pensaba mientras continuaba moviéndose con los implementos que necesitaban para la clase de esa ocasión, sin embargo solo vasto una mirada al mesón para que su pensamiento solo se acentuara, "¡esto es definitivamente algo demasiado intenso en muchas maneras!" termino gritando azorado en su mente ante la vista que tenía una vez más.

Y como culparlo si al mirar al mesón se encontraba con cuatro mujeres que por las posiciones en las que se encontraban, dejaban expuestos sus carnosos traseros a su vista, se veían tan carnosos, suaves e incitantes a apretarlos, que era difícil no ver en esa dirección y considerando que el se estaba empezando a sentir frustrado en el ámbito sexual las cosas solo se estaban poniendo peor por estar viendo tremendos culos de las cuatro mujeres.

"AL igual que Rias y Akeno, ellas no son como el resto de mis compañeras de clase... !están en una liga completamente diferente!" pensaba mientras no dejaba de verlas trabajar y el como sus cuerpos desprendían erotismo mientras lo hacían, como mientras Shuri amasaba copiando la técnica antes mostrada por Grayfia levantada los glúteos haciendo ver su trasero mas pronunciado, "sus atuendos solo están resaltando sus curvas... ¡son demasiado sexys!", no podía dejar de pensar en eso, ahora viendo como Yasaka mientras batía una crema pastelera de chocolate en un tazón presionaba el mismo contra sus senos, lo cual era un ataque cardíaco en si mismos, ese tazón presionado contra sus enormes globos solo los hacía ver mas grandes, no, de hecho, la escena de Yasaka era tan obscena por el hecho de que sus enormes pero esponjosos pechos parecían estarse devorando le tazón conforme ella batía su contenido.

Era difícil saber en que dirección mirar si para donde sea que dirigiera la vista, esos magníficos cuerpos estaban esperando para dar un espectáculo a su visión con sus deslumbrantes curvas y el lo sabía.

"Y pos si fuera poco su atractiva madurez sexual es..." aquello lo termino pensando mientras esta vez veía a Venelana quien tomaba su corta melena para hacerse un moño atrás antes de proceder a amasar esta vez y en el acto, al levantar sus brazos para atar atrás su cabello, todo lo que hizo fue lograr que sus grandes pechos rebotaran de una manera tan elegante y sutil que era incluso mas excitante que si los viera rebotando de manera obscena.

Pero claro, ver todo ese atractivo sexual tarde o temprano se vería reflejado en su cuerpo y sin ser consciente hasta ese momento, bajo el delantal que estaba usando mientras ayudaba en la cocina, - ¡AH! - ahora presentaba una fuerte y también dolorosa erección, que lo alarmo y mucho, lo último que necesitaba era que alguna de ellas le viera el paquete así, sería demasiado vergonzoso y también muy incomodo.

"Mierda, mas vale que me calme" se reprendió alarmado mientras se daba la vuelta para evitar que lo vieran en tan comprometedora situación, sin embargo cometió un error en su proceder, la exclamación que dio junto a su nerviosismo y el como estaba sonrojado le hicieron actuar rápido en darse la vuelta, por lo cual no se percato que de hecho si había llamado la atención de alguien, una castaña que primero lo vio curiosa al verlo tan agitado, antes de afilar la mirada y curvar discretamente los labios haciéndose una idea de lo que pasaba y claro esta, quería comprobar si sus suposiciones eran correctas.

Continuo diligentemente con su trabajo como el ayudante de cocina, pero considerando la erección que ahora se cargaba debía de ser mas cuidadoso no solo para que no la vieran, también para que no la sintieran, por lo cual procuraba pasar relativamente lejos de ellas, solo lo suficiente como para evitar que notaran aquello pero sin levantar sospechas sobre porque de su comportamiento.

Claro esta que en ocasiones era inevitable que debiera pasar mas cerca de lo que le gustaría, como el caso actual donde debía de pasar por un espacio algo reducido entre el mesón central y la barra de la cocina espacio donde se encontraba cierta castaña por lo cual debía perfilarse para pasar mientras movía algunas cosas, pero siempre teniendo presente el cuidado que debía tener cuando pasara.

- ¡Disculpen!, ¡estoy pasando! - dijo mientras cargaba algunas cosas y se disponía a pasar, quería aprovechar que en ese momento Venelana estaba distraída hablando con su Onee-chan sobre la técnica adecuada de amasado y eso le permitiría pasar sin mayores problemas.

Claro que era mas fácil decirlo que hacerlo, el espacio era reducido y ya que la castaña estaba un tanto inclinada hacia adelante, ahora tenía el trasero de fuera y mas cerca de lo que le gustaría de la zona de su entrepierna, por lo cual pasar por ahí sin que le sintiera el endurecido paquete entre sus piernas se convirtió en toda una odisea.

"No toques su culo, no toques su culo... eso es, con cuidadito, voy pasando" se repetía en su mente mientras que pasaba todo lo rápido que podía sin que ella sintiera nada, de hecho estaba sudando en ese momento por el esfuerzo y los nervios para que ella no notara nada, rogaba porque todo saliera bien, pero claro, su suerte jamas había sido tan buena cuando se trataba de evitar problemas.

Lo siguiente que supo es que justo cuando estaba a medio camino de atravesar sus carnosas nalgas, Venelana echo el trasero para atrás aun mas y por consiguiente, ahora estaba ahí con el pene erecto siendo aplastado por el carnoso culo de la madura mujer, de hecho y como si el destino se riera en su cara de su desgracia, su pene quedo alojado justo en la raja entre sus dos nalgas y la sensación aunque increíble y muy cálida, también lo puso frío, no sabía como iba a explicar esto.

"¿¡Qu-Qué!? ¿!por qué tan de repente Venelana-san retrocedió!?", estaba totalmente aterrado, no tenía ni idea de como justificar su erección que estaba seguro ya había sentido, de hecho no había ninguna explicación que pudiera darle que fuera creíble y no es que le estuviera ayudando el hecho de que por la posición en la que estaba Venelana ahora tuviera una parte de la espalda descubierta por lo cual estaba mas que seguro que eso que veía al borde de su falda era el inició de unas eróticas bragas de color carmesí que solo aumentaban la sangre que se estaba bombeando a su miembro, "¡estoy muerto!, ¡de seguro va a notar mi erección!", estaba tan frito en ese momento, su vida termino, Venelana lo acusaría de pervertido y luego convencería a Rias de terminar con el, tal vez estaba siendo dramático, pero de esta no iba a salir limpio, de eso estaba seguro.

Pero entonces y para sorpresa suya, Venelana no grito, no se giro ni hizo nada que pudiera delatarlo, por el contrario, empezó a amasar la mas sobre la mesa como si contra su culo no hubiera nada presionándose.

"¡Woah!, ¡esta empezando a moverse!", se dijo mentalmente ni bien la castaña empezó con su labor de amasado, que no habría sido un problema si en ese momento lo hubiera soltado pero noooo, una vez mas su suerte le demostraba que estaba lejos de ser de la buena cuando se trataba de situaciones problemáticas cuando Venelana decidió empezar a amasar mas que solo la masa entre sus manos si no también la polla entre sus nalgas.

Conforme amasaba la masa, en su región trasera ella movía su culo de arriba a abajo sobre su eje estimulándolo con esa simulación de bombeo y cuando no meneaba su trasero de esa forma, era solo porque lo estaba meneando esta vez de un lado al otro como si estuviera abofeteando a su miembro por ser un chico tan travieso y mientras tanto ella solo continuaba amasando la masa tratando de que quedara suave para la siguiente parte de la preparación.

- Así es como se amasa, ¿verdad Grayfia-chan? - pregunto Venelana refiriéndose a la masa entre sus manos aunque claro esta con una clara doble intención donde se refería también al trabajo entre sus nalgas, de hecho hasta lo estaba disfrutando, porque su mirada estaba mas interesada en tratar de mirar disimuladamente hacía atrás a donde tenía una cosa dura en medio de su trasero mas que en lo que tenía entre las manos y ese rostro sensual que colocaba la delataba, claro, si es que alguien le estuviera prestando la debida atención.

- Hum, ¡si, eso esta muy bien! - mientras tanto Grayfia inocente de lo que pasaba a sus espaldas y de hecho de las de Venelana, animaba a su amiga al ver lo bien que tenía dominada la técnica de amasado que le acababa de enseñar, de hecho estaba mirando concentrada y animada la masa para asegurarse que no se pasara de amasado lo cual le estaba dando demasiada libertad a Venelana de jugar con el chico que ya sudaba pero esta vez no por los nervios mientras gritaba en su mente de cuando acá lo que hacía Venelana con su trasero era parte de una técnica de amasado en la cocina.

- ¡Oh!, lo siento mucho, no me di cuenta que estabas ahí atrás - en cuanto se separo de el una vez termino de amasar, se atrevió a decirle luego de que prácticamente le restregó el culo por toda la polla, era obvio que mentía, se le notaba en la cara tan erótica que tenía en ese momento mientras lo miraba, bueno, miraba su entrepierna, pero en ese momento que era lo que miraba era lo de menos.

"¡Ella me esta mintiendo!, ¡mientes con todos los dientes!" se quejo en su mente, ni de chiste lo que le hizo podía haber sido hecho si no supiera que estaba atrás y aunque lo disfruto, no podía simplemente decirle nada o se delataría a el también y eso si que sería problemático, el lo sabía y ella también, por eso estaba jugando con el.

- Fufu, pero sabes, resulta que note algo realmente duro empujando contra mi culo... hmm, ¿me pregunto que podría ser? - aprovecho que el chico se giro para irse para acercarsele por la espalda antes de que se fuera y susurrarle con un detalle de fina coquetería aquello, era obvio para el que lo quería molestar y lo estaba logrando pues estaba nervioso y sonrojado, pero no le iba a dar el gusto, no señor.

- ¡Debiste habértelo imaginado, Venelana-san!, !ja ja ja! - no pudo evitar decirlo con mas fuerza de la debida ni que su risa sonara muy forzada pero al menos ninguna de las otras mujeres en el lugar se percataron al estar mas centradas en preparar el platillo completamente antes de meterlo al horno, aunque eso a el no le importaba, solo quería salir de ahí a la de ya antes de que pasara algo mas.

- ¿Ehhh?, supongo que me lo imagine entonces - la castaña dijo finalmente, al parecer ella también estaba dando el juego por terminado, cosa que agradeció porque estaba a nada de un colapso nervioso y si seguía a su lado era seguro que iba a tener uno en cualquier momento.


Una hora y media después la receta estaba lista y salía del horno, por lo cual ante todos los presentes se revelaba el producto de su esfuerzo y preparación, unos ricos conos de masa glaseada horneada con un interior de crema de chocolate derretido que cubría completamente las paredes internas y la parte superior del panecillo dándole un aspecto delicioso difícil de resistir para los amantes del dulce.

- ¡Están listos!, ¡Hum, tienen buena forma chicas! - dijo orgullosa Grayfia al ver el resultado final tan bueno, mejor de lo esperado y por ello felicito a sus compañeras de club y amigas en lo que esperaban que se enfriaran para poder probar el sabor de su creación.

Y una vez se enfriaron lo suficiente cada uno tomo uno de los postres preparados y empezó a comerlos con gusto, aunque en el caso del castaño, tratando de mantener la distancia de las demás, no quería pasar por otro momento con el de hace rato, no sabía si sobreviviría otro chistesito como ese sin que sus pantalones pagaran el precio.

- ¡Hmm! Están tan ricos - Shuri fue la primera en hablar mientras se deleitaba con el dulce sabor, y el rostro infantil que colocaba en ese momento mientras comía un trozo demostraba lo mucho que lo estaba disfrutando.

- ¡Son tan deliciosos!, ¡no me molestaría comer unos cuantos mas! - mientras tanto Yasaka estaba sonriendo embelesada mientras comía uno de los postres, casi parecía que empezaría a babear en cualquier momento ante la idea de comer mas de esas delicias azucaradas.

- ¡Les dije que eran fáciles de hacer! - respondió de repente Grayfia sonriente recordando cuando propuso esa receta previamente y como todas estaban emocionadas aunque preocupadas de que pudiera llegar a ser complicado el prepararlo, por lo que verlas ahora tan felices probando lo que prepararon le sacaba una sonrisa de satisfacción.

- Yasaka, cuando se trata de dulces siempre te los comes todos, ¿no es verdad? - de repente Venelana le reprocho lo golosa a su amiga rubia cuando la vio que ya estaba tomando otro panecillo relleno ansiosa por devorarselo, aunque claro, la rubia ni siquiera le estaba haciendo caso en ese momento.

Mientras atrás estaba Issei comiendo también algunos dulces, ya mas calmado pero igualmente ansioso y con una erección que parecía no quería desaparecer, al menos los dulces le servían de alivio, porque si, estaban realmente deliciosos y sería un completo tonto si no aprovechaba para comer tantos como pudiera ahora que estaban tibios.

Pasada otra hora donde las chica acompañaron los panecillos con un poco de té, decidieron salir, bueno, Shuri, Yasaka y Grayfia, Venelana hace un rato que se había ido pues nadie la había vuelto a ver.

- Ise-chan, vamos a salir de compras ahora - informo Grayfia mientras se retiraba el delantal con el que cocinó al tiempo que sus amigas ya la esperaban a las afueras de su hogar listas para una salida de chicas al centro comercial, ademas de buscar nuevas ideas para su próxima reunión de club.

- Está bien Grayfia-Nee - dijo desde la entrada el castaño mientras el también se retiraba el delantal y se preparaba ara despedir a su Onee-chan de cabello plateado que ya estaba en la puerta lista para irse, aunque antes le pidió el beso de despedida y al ver que estaba dudoso de dárselo solo basto con hacerle un puchero para hacerlo suspirar derrotado y luego acercarse para darle un beso en la mejilla, un ritual que tenían ambos cuando uno de los dos salía y eso basto para que volviera a sonreir.

- Muy bien, cuida la casa ¿de acuerdo? - le dijo ya saliendo para ir con sus amigas a pasear luego de su jornada de cocina y la de gustación del preparativo realizado.

- !Qué se diviertan! - grito el castaño mientras se despedía de ellas en la puerta levantando la mano para despedirlas a todas, gesto que fue correspondido por las tres féminas que se empezaban a marchar de la propiedad y en cuanto cerro la puerta solo pudo exclamar una cosa, - necesito masturbarme - lo dijo mientras veía como su erección simplemente no se iba desde su pequeño encuentro con la castaña, logro disimularlo hasta el ultimo momento con el delantal, pero ya no soportaba mas, le dolía y si no conseguía alivio iba a enloquecer.

- Ok, vamos... ¿are?, ¿donde esta Venelana? - mientras tanto ya en la calle las tres mujeres se encaminaban hacia el centro comercial, aunque Grayfia apenas notaba la ausencia de Venelana entre ellas, aunque fue rápidamente contestada su duda por Shuri quien al parecer sabía que había ocurrido con ella.

- Surgió algo urgente, así que se fue a casa temprano - dijo sin mas la pelinegra a su amiga que solo la veía sorprendida pues no noto a que hora salio la castaña ni tampoco sabía por cual razón se había ido antes.

- Eso es extraño ¿no es verdad? - dijo esta vez Yasaka mientras miraba preocupada a sus amigas de que algo le hubiera ocurrido a la castaña que la obligara a irse mas temprano de lo usual de la reunión de su club de cocina.

"Si, es extraño... solo espero que no haya sido nada serio" pensó para sus adentro la peliplata mientras continuaba caminando, aunque igual no evito mirar hacia atrás hacía donde estaba su casa, aunque no estaba segura de por qué lo hacía, pero se sentía preocupada, ya hablaría después con Venelana para saber si acaso había ocurrido algo con la empresa.

Mientras tanto en casa el castaño se movía presuroso por los pasillos del hogar ansioso de llegar a su cuarto, ahí tendría la suficiente privacidad para desfogarse, porque no aguantaba mas la calentura que traía encima y a falta de sus novias, su mano debería bastar, no era lo ideal y sabía que si ellas se enteraban que lo hizo lo castigarían pues se lo tenían prohibido pero luego de lo que paso con el culo de Venelana, ya no podía resistir.

- ¡Muy bien, todas se han ido! - exclamo el castaño para si mismo cuando estuvo seguro de que no quedaba nadie en casa aparte de el, eso lo tranquilizaba y al mismo tiempo le hacía tomar carrera para ir a su cuarto lo mas pronto posible.

En el camino pensó en Venelana y en lo que paso, era irreal, erótico, pero muy difícil de entender que fue la que la impulso a hacer aquello, simplemente no tenía lógica, mas allá de que ahora estaba caliente y era por culpa de esa mujer.

Venelana Bael, si, volvió a usar su nombre de soltera luego de su divorcio, una hermosa mujer de cabello castaño y unos intrigantes ojos color violeta, según le había contado Rias, comunes en su familia de origen, proveniente de Europa de una familia semi acomodada con una empresa emergente que crecía cada vez mas y mas y que adquirió una gran proyección cuando los Gremory entraron en juego proponiendo a su familia la unión de ambas compañías no solo a nivel comercial, también mediante un matrimonio.

Fue así como Venelana por el lado de los Bael y Zeoticus por parte de los Gremory acabaron contrayendo nupcias, pero al parecer ese matrimonio estaba condenado al fracaso pues poco después del nacimiento de Rias quien era su segundo hijo, empezaron a distanciarse, el trabajo y demás cosas los fueron separando, hasta que por lo que Rias le contó, resultaba que su padre había estado en una especie de aventura con otra mujer con la que luego de divorciarse de su madre huyo, poco sabía de su padre desde entonces, aunque al parecer se encargaba de una de las empresas europeas de su familia mientras Venelana hacía lo propio del lado de la suya, al menos así fue hasta que su hijo mayor Sirzechs alcanzo la edad suficiente para hacerse cargo de las riendas de la empresa en su lugar.

Siempre fue una mujer amable y eso lo sabía de primera mano tras conocerla tantos años, de hecho su novia le contó que estaba muy feliz cuando su hijo le presento un día a la mujer que amaba y no tardo mucho en abrirle los brazos y darle la bienvenida a su familia pidiéndole que la tratara como a una madre, cosa que sonrojo a su hijo pero que alegro a su novia de saber que era aprobada por tan distinguida mujer.

La tragedia la azoto cuando perdió a su hijo y a su no nato nieto pero eso era algo que el ya sabía y prefería no recordar, ninguno de hecho le gustaba hacerlo pues era un pasado muy doloroso, sin embargo en todo el tiempo que la conoció jamas la vio con un novio, de hecho ni siquiera con un amigo con derechos o una aventura de una noche, suponía el que porque al volver a asumir las riendas de la empresa no le quedaba tiempo para nada mas, porque si, tras el deceso de su hijo, ella debió volver a tomar el control de la seccional en japón para mantenerla a flote, la empresa era familiar y debía quedarse en la familia según ella, así que se hacía cargo de ella al menos hasta que Rias alcanzara la edad para asumir el control ella misma.

Según recordaba, Rias le dijo que pretendientes no le faltaban, de hecho era una mujer muy cortejada y que hombres guapos e importantes estaban detrás de sus afectos, así que le causaba curiosidad el porque al parecer ella no había vuelto a tener pareja hasta ahora, al menos sentía esa curiosidad hasta que Rias le contó la respuesta de su madre cuando ella misma le hizo una pregunta similar.

Al parecer Venelana podía ver detrás de esos cortejos, detrás de sus halagos y sus invitaciones, veía sus intenciones ocultas, para esos hombres solo era un trozo de carne para llevarse a la cama, una palanca para adquirir poder y riquezas o simplemente un trofeo para exhibir en pro de su ego masculino de poder presumir haber conquistado a tan refinada mujer y eso era algo que a ella no le interesaba, no quería a su lado un hombre que no la viera como una mujer sino como un trofeo, quería ser amada no usada y hasta la fecha no encontraba a alguien así, por lo cual estaba esperando encontrar a la pareja correcta.

Si lo pensaba bien, era algo muy digno lo que ella quería y era algo que a el también le atraía, estar al lado de alguien que pudiera amar y que lo amara, pero suponía que dada la posición de Venelana algo así era muy difícil de encontrar, él era un chico mas sencillo, el dinero no le interesaba, solo quería vivir feliz al lado de sus novias y poco mas, así que no llegaba a entender por lo que pasaba Venelana, aunque suponía que en ese pensamiento y deseo, influía mucho su matrimonio fallido con el padre de su novia.

Eso era lo otro, recordaba que la pelirroja le contó avergonzada una vez que según su padre, su madre era demasiado frígida, no le gustaba probar cosas nuevas y era muy aburrida, por eso la dejaba, porque el quería una relación mas emocionante y no estar atado a una mujer tan seria, cosa que no entendía, porque de todo el tiempo que llevaba conociendo a Venelana, pues, seria no es la palabra con la que la definiría, era muy vivaracha, bromista y atrevida, hasta coqueta se atrevería a decir y lo sabía de primera mano pues desde hace un par de años que ella solía portarse muy juguetona con él, jugandole bromas o gustando de avergonzarlo, mas desde que iniciara su relación con su hija.

Por eso no entendía porque le consideraba frígida ese hombre, porque por lo vivido hace unas horas y que era lo que lo tenía tan ansioso, era mas que evidente que era una mujer caliente y ese cuerpo que incitaba a los mas pecaminosos pensamientos no ayudaba a cambiar esa imagen, se iba a masturbar por lo que paso y aunque le avergonzaba, sabía muy bien que lo haría pensando en esa mujer, estaba a punto de serle infiel de pensamiento a sus novias, pero ya no se aguantaba, ver a esas mujeres usando ropa que resaltaba tanto sus curvas y luego de lo que paso con Venelana necesitaba descargar sus bolas, aunque aun ahora seguía preguntándose que rayos motivo ese comportamiento que ahora lo tenía tan caliente, porque si, quería hacer esto mientras el recuerdo de lo que paso estuviera fresco en su memoria y en su polla claro esta, aun así seguía confundido.

- Maldita sea Venelana... ¿en que demonios estabas pensando? - reprocho al aire de manera cansina y con los ojos cerrados el castaño una vez que llego a su cuarto y abrió la puerta para poder entrar, totalmente ignorante de la sorpresa con la que se iba a topar.

- ¿Are?, ¿acaso hice algo malo? - de repente una voz lo sorprendió y lo hizo abrir los ojos espantado pues reconocía perfectamente esa voz y como no espantarse si en su cuarto estaba la mismísima Venelana, cosa que no hubiera sido un problema de no ser por su atuendo o mas bien la falta de el, porque si, en ese momento la castaña estaba acostada de lado en su cama como si nada sosteniéndose sobre su codo izquierdo mientras su brazo derecho estaba bajo sus pechos, solo vistiendo esa camisa sin mangas carmesí con el agujero en la zona del pecho y sus eróticas bragas del mismo color, sin ningún problema ante el hecho de que el chico la estaba mirando confirmando una cosa, bajo esa camisa, la mujer no llevaba nada mas.

- ¿¡Qué carajos estas haciendo aquí!? - el castaño sobresaltado y sorprendido le respondió, olvidándose de cualquier protocolo o respeto, aunque dadas las circunstancias y el hecho de que ella estaba casi desnuda en su cuarto, usar honorifico en esta situación venía a ser mas bien intrascendente.

- Fufu, tengo un favor que pedirte, así que estaba esperándote Ise-chan - y luego estaba la tranquilidad de ella mientras le hablaba, lo peor era que ella lo decía como si nada estuviera mal en esa escena, tanto así que cerraba los ojos como si dijera que era obvio que lo esperaba a él y hacía el signo de victoria con su mano izquierda, como si estuviera disfrutando mucho de la situación mientras aun permanecía en su cama.

Y ahí estaba él, pensando que podría masturbarse a gusto para sacar toda esa frustración por lo ocurrido previamente, solo para encontrarse a la causante de todo este lío en su cuarto, acostada en su cama y semi desnuda, agradecía por lo último no hace falta decirlo, estaba teniendo una increible vista de ese maduro cuerpo, pero nada de eso estaba bien y ahora salía con que quiere pedirle un favor, no sabía que quería y mas importante, por qué debía de estar en esas fachas para pedírselo, algo no cuadraba ahí, pero espero a que ella hablara para saber que se traía entre manos.

- Dime Ise-chan... ¿quieres tener sexo conmigo? - de repente ella soltó, al menos eso creía que dijo, pero no podía ser cierto, ella no podía haber dicho algo así, ¿o si?, no, era imposible, pero, considerando lo que paso antes, como ella restregó su trasero sobre su endurecida polla, el que estuviera en su cuarto con paños íntimos básicamente, acostada en su cama y mas importante, los dos solos, no, no, ¡ella de verdad el estaba pidiendo eso! y no estaba seguro de como responder.

- ¡Qué estas dicien-espera un segundo, esa no es la cuestión aquí! - estaba alterado, moviendo sus manos en todas direcciones como tratando de detener al aire mismo mientras no sabía ni que decía y su rostro estaba hirviendo de la vergüenza y con justa razón, todo eso era ridículo, tenía que ser una brioma de su parte y si lo era, entonces era una de muy mal gusto e su parte.

- Aww, ¿entonces no lo harías conmigo? - ella estaba jugando sucio, ahora se quejaba como si estuviera ofendida al ser rechazada cuando el ofendido era el, esa mujer se metió a su cuarto sin permiso y le estaba proponiendo pues, eso, en serio, que estaba pasando en ese momento en su cuarto, es lo que mas quería saber.

- ¡Y-Yo n-no, eso no es lo que quise decir! - grito al final, a pesar de que no sabía que pasaba, aun así no iba a dejar que esa mujer tergiversara sus palabras para burlarse de el, bueno al menos ese era el plan, pero sinceramente se estaba quedando sin ideas de como salir de esta.

- Grayfia-chan me dijo sobre lo mucho que extrañas a Rias - empezó a hablar la castaña, esta vez mientras estaba sentada al borde de la cama y con un rostro serio, aunque aun igual de falta de ropa que antes, eso parecía que no iba a cambiar muy pronto, - también se que Rias te hizo prometer que me cuidarías y tu lo hace por una recompensa en especie, ¿verdad? - que supiera de la promesa que le hizo, no era raro, el había sido muy obvio desde el principio en sus cuidados para con ella, pero lo otro, no sabía de donde lo sacaba.

- ¡Eso no es cierto, por favor no confundas las cosas! - le grito totalmente abochornado, ya no solo por la apariencia de la mujer, también por el hecho de que lo estaba tachando de pervertido y eso lo estaba avergonzando, mas considerando lo que iba a hacer antes de que esta extraña charla empezara.

- Esa niña... siempre preocupándose por mi, pero sabes, existen otras maneras de conseguir sexo sin necesidad de comprometerte a tanto - esta vez lo dijo mientras se ponía de pie para acercarse a el un poco, mientras su semblante era entre melancólico y un tanto apenado, algo que no paso desapercibido por el y que lo hizo reaccionar rápido.

- Eso no es cierto, lo hago porque quiero, para mi Venelana es una mujer especial y a quien quiero mucho, así que si puedo ayudarla a que no pierda su hermosa sonrisa entonces no me importa que tenga que hacer - dijo con convicción sorprendiendo a la castaña ante su respuesta, antes de que su rostro se volviera algo pícaro y con una sonrisa traviesa que le estaba poniendo los vellos de punta.

- Y luego esperarías una recompensa de mi hija ¿verdad? - esta vez se lo dijo con su rostro cerca al suyo sonriente mientras con un dedo lo señalaba como acusándolo y aleccionandolo a decir la verdad al mismo tiempo poniéndolo nervioso.

- B-Bueno, si me quiere dar una... n-no me molestaría - acepto resignado, no es que esperara que ocurriera, pero no negaría que si le quisiera dar muchos mimos por ser tan diligente sería muy feliz de recibirlos.

- Ne Ise, ¿qué tan lejos has llegado con mi hija? - de repente la escucho preguntar, no entendía a que venía la pregunta y obviamente era demasiado vergonzoso para responderle, así que solo desvió la mirada avergonzado, no es que no hayan tenido sexo antes, pero aun les quedaban muchas cosas que experimentar juntos, claro que eso no se lo iba a decir a Venelana ni muerto.

- Conozco a mi hija y se que en ocasiones ella puede ser muy mojigata, mas de lo que desea ¿sabes? - eso lo sorprendió, al mismo tiempo que lo confundió, que tenía eso que ver con todo esto y que era eso de que estuviera llamando a su propia hija una mojigata como si le reprochara por eso, por el contrario ¿no debería de estar feliz de que quisiera hacer las cosas con calma?, - piensa las cosas demasiado y considera cada variable antes de hacerlo, pero conmigo... - esto no tenía sentido, parecía como si estuviera reprochando a su hija y desaprobando su forma de ser o algo así, cosa que le resultaba muy extraña.

Mientras la escuchaba hablar y trataba de procesar a donde quería llegar con todo aquello, veía a Venelana moverse de un lado a otro, mientras parecía molesta con la indecisión de su hija, no sabía ni que decir, al menos no que decir que no hiciera que ahora la cogiera contra él, porque sinceramente no quería ser regañado como si aun fuera un niño, menos por una mujer que estaba paseándose sin reparo por su habitación casi desnuda mientras le mantenía dura la polla en todo momento con sus sexy cuerpo.

- ¡Lo que trato de decir es que Rias tiene el mal habito de hacer del amor algo mas ceremonioso que otra cosa! - se espanto cuando la escucho decir eso prácticamente como un reclamo contra ella y contra él por permitírselo, ya no sabía ni que pensar, esto era literalmente demasiado absurdo para siquiera tratar de entenderlo.

- Por otro lado, no tendrías ninguna de esas preocupaciones conmigo - de repente y antes de que siquiera pudiera reaccionar, tenía a la mujer contra el una vez mas, pero esta vez ella se estaba asegurando de recostarse sobre el y abrazarlo de un brazo como en otras ocasiones para dejarle sentir esas enormes tetas que se cargaba, que percibiera su suavidad y vaya que las sentía en ese momento, - yo puedo recibir todo lo que desees lanzarme, Ise-chan, sin importar que tan sucio o travieso sea - lo ultimo lo dijo tan lascivamente que la polla le tembló emocionada ante tal ofrecimiento y lo estaba haciendo dudar sobre si aceptar o no.

Venelana se estaba paseando por todo su cuerpo sin separar mucho el de ella, lo estaba seduciendo, con cada caricia, con cada susurro, su cuerpo se ponía mas y mas caliente, era increíble todo el poder y atractivo sexual que tenía esa mujer, pero no podía ceder, no debía ceder, tan centrado estaba en eso que antes de darse cuenta ya tenía a Venelana a sus espaldas, presionando sus pechos contra el mientras lo abrazaba provocativa y su brazo izquierdo estaba extendido hacía abajo con su mano totalmente encima de su entrepierna agarrándola, sintiéndola y sonriendo por lo que estaba sintiendo.

- Conmigo puedes tener todo el sexo que quieras, ¡no tendrás necesidad de esconder esos perversos deseos, cariño! - le hablo desde la espalda, con esa voz tan seductora y cargada de deseo, todo mientras apretaba mas sus pechos contra su espalda y con su mano sobre su miembro empezaba a acariciarlo por sobre la tela de su pantalón.

- Ah.. pero... - mientras tanto el trataba de resistirse, resistir a esa diosa que incluso con el simple aroma de su cuerpo lo estaba mareando y haciendo cada vez mas difícil ceder, por no mencionar el que las caricias sobre su polla le hacían trabajoso el pensar con claridad en otra cosa que no fuera ella.

- Ademas... - al parecer Venelana veía que el aun trataba de negarse, así que decidió terminar los jugos y para ello, tomo la bragueta del pantalón del castaño y la bajo antes de buscar en su interior al duro y caliente residente que no tardo en liberar de su apretada prisión, - ¡AHA!, ¿lo puedes ver?, tu gorda y enorme polla esta mas que dispuesta a darme una oportunidad - mientras decía eso, acercaba su otra mano para tomar su miembro mientras la otra mantenía abierta la abertura de la bragueta, dejando libre y a plena vista de la mujer ese enorme, gordo, caliente y duro pedazo de carne masculina el cual tomo con su otra mano desde la base emocionada de ver lo mucho que aun quedaba libre por encima, haciendo que su coño hormigueara y que sus ojos tomaran en sus pupilas forma de corazón solo por sentirlo en su mano.

Antes de poder decir algo, Venelana empezó a masturbarlo, era brutal su técnica, con tanta delicadez pero firmeza, alternando entre rápido y lento, molestando la punta o recorriendo el eje, se le estaba haciendo difícil siquiera respirar ante tan placentero asedio de su parte.

- Vamos, vamos a hacerlo, no hay razón por la que negarse - Venelana era un verdadero demonio, solo con su mano y esas insinuantes palabras estaba a punto de hacerlo ceder a sus deseos, le estaba haciendo que resistirse se volviera cada vez mas la peor de las opciones, era en toda regla el susurro del demonio y lo peor, quería ceder a eso, pero no debía hacerlo, era su suegra, la madre de Rias, no podía hacerlo, - sera una buena practica para tu siguiente vez con Rias - no sabía ni porque la mencionaba cuando esto se podía considerar como una madre robandole su novio a su hija.

Pero se hacía cada vez mas difícil resistirse a sus caricias y por si fuera poco, la dejo intrigado con eso que le dijo al final, no entendía que tenía que ver el hacerlo con Venelana respecto a su relación con Rias, pero antes de preguntarle, ella se le adelanto a responderle.

- Tienes que comenzar por aprender lo que se siente bien para ella, para eso puedes practicar conmigo, después de todo, Rias y yo somos mas parecidas de lo que crees, Ise - estaba anonadado, de verdad que ella era un demonio, estaba trastornando la imagen en su mente de Rias, alternando entre la apariencia de Rias y la de Venelana, creándole una duda en su mente.

¿de verdad eran tan parecidas?, ¿tenían acaso los mismos puntos dulces?, ¿de verdad podía aprender con Venenlana como satisfacer a su novia?, cada vez le costaba mas resistirse, no, mas bien estaba buscando un motivo para no ceder y la verdad sea dicha, no lo encontraba.

- Además, estoy segura que Rias te pidió que me hicieras feliz sin importar que, ¿verdad? - aquello último le hizo abrir grandemente los ojos mientras a su espalda una sonrisa de suficiencia se marcaba en el rostro de la castaña, sabiendo que con eso ya lo tenía en sus manos y no se equivocaba, pues en ese momento a la mente del chico llego un recuerdo mas del día en que se despidió de su novia e hizo aquella promesa.

" - te doy permiso de hacer lo que haga falta para que Okaa-san deje atrás sus penas -" sabía que no se refería a esto, estaba convencido de que no se refería a esto, pero en este momento ya no podía resistir mas y aunque sabía y estaba seguro de que estaba corrompiendo las palabras de su novia para su beneficio, ya no podía aguantar mas, no quería hacerlo, ademas, lo había prometido, ¿verdad? y el nunca fallaba a sus promesas.

- ¡Ve-Venelana! - grito de repente el castaño cediendo finalmente y por completo a sus deseos, antes de darse cuanta, ambos se encontraban en la cama pues en su arrebato, Issei tomo de los brazos a la mujer y la empujo con el de regreso a la cama hasta hacer tope con el borde de la misma y terminar acostados esta vez los dos en el lugar y un momento después el castaño levantarse solo lo suficiente como para ver a la mujer bajo el.

- Fufu, ¡parece que alguien finalmente esta de buen humor! - lo dijo sensual mientras se encontraba en la cama, con sus brazos uno tras su cabeza y el otro sirviendo de apoyó para su cabeza mientras lo veía sonrojada, ansiosa y sin hacer el mínimo amago de querer cubrirse un poco, de hecho quería que la viera bien, que viera su cuerpo y la deseara, bueno, mas de lo que ya era obvio que lo hacía.

- ¿Puedo... ¡Puedo hacer lo que quiera de verdad!? - preguntó, prácticamente grito el ansioso castaño, quería estar seguro de que ella no se estaba burlando de el, que no se arrepentiría después y que si lo hacía, lo hiciera en ese mismo momento, porque después, ya no podría detenerse aunque quisiera y estaba muy seguro de una cosa, no quería detenerse.

- Fufu, por supuesto, úsame como te plazca I-se-chan - le dijo a modo de confirmación con un tono coqueto e insinuante mientras lo veía sonrojada con una mirada cargada de deseo y seducción con la cual lo incitaba a que la tomara de una vez y sin contemplaciones, que eso era lo que quería y era de el de quien lo quería.

"E-Entonces... lo primero tiene que ser...", teniendo esa confirmación, teniendo su autorización para dejar salir todo el contenido de su corazón, ya no tenía caso contenerse y por eso procedió de inmediato.

- ¡HYAAN! -gimió de manera coqueta la castaña cuando un segundo despues el castaño tomara los bordes de su camisa y de un solo empujón la levantara por encima de sus pechos dejando al descubierto de la atenta mirada de su joven amante, esas enormes jarras que tenía, las cuales ni bien fueron liberadas de manera tan brusca rebotaron obscenamente para saludar al castaño al que solo lo vio tragar duro ante la vista de esas enormes tetas de pezones rosados tan insinuantes.

Eran enorme, se veían tan suaves y al mismo tiempo tan esponjosos, ahora sabía de donde Rias había sacado sus enormes pechos, una vez mas agradeció a la genética, pero no retrasaría mas lo inevitable, tenía hambre y sabía muy bien que era lo que le producía esa hambre y estaba listo para devorarlos, por lo cual rápidamente se agacho a la altura de los pechos de la castaña y se llevo uno de sus pezones de enormes areolas a la boca para empezar a chuparlo mientras al pecho libre lo manoseaba con su mano desde abajo para sentirlo todo, su forma, su peso, su calor, sacandole gemidos placenteros a la castaña.

- ¡Fufu! de verdad que amas los pechos, ¿verdad Ise? - le dijo divertida aunque sabiendo que no la escuchaba, era como si estuviera en un trance donde todo lo que quería era chupar sus pechos y ella complacida lo dejaría, por eso solo gemía mientras lo veía amorosa de sentir de nuevo el cálido toque de su persona elegida.

"¡Woah, son tan suaves... y tienen un olor tan agradable!", mientras tao el castaño estaba en su propio mundo, disfrutando de esas esponjosas delicias, en este momento, esos enormes pechos le resultaban incluso mas dulces y deliciosos que los bizcochos rellenos que se comió hace unas horas, no, no había punto de comparación, esto era mucho mejor, amaba esos pechos, cosa curiosa, Akeno alguna vez le dijo que el era un amante de los pechos grandes y considerando lo que estaba haciendo en ese momento, pues mentira no resultaba ser.

No tenía suficiente de esos pechos, chupaba el izquierdo mientras con sus dedos pellizcaba el derecho, luego lengüeteaba de forma obscena y descarada el pezón derecho mientras con su mano apretaba dulcemente el pecho izquierdo como si tratara de ordeñarla, alternaba entre uno y otro produciendole gran placer a la castaña que se percato de que al parecer, el chico si que había aprendido uno o dos trucos sobre como complacer a una mujer de las dos chicas que eran sus novias, pero aun tenía mucho que aprender y a ella no le molestaría enseñarle.

"Y ahora, algo que me muero por probar..." pensó mientras veía a Venelana que solo gemía de gusto, listo para su siguiente movimiento, después de todo, ella le dijo que podía hacer con ella a placer y el quería probarlo todo, no desaprovecharía la oportunidad que se le presentaba, por eso se apresuro a continuar aunque si que le costo dejar de chupar esos pechos, eran realmente deliciosos.

Como fuera, una vez que dejo de chupar los pechos de Venelana, cosa que la extraño, por no decir que le disgustó pues lo estaba disfrutando y mucho, lo vio hacerse a un lado y terminar de quitarle su camisa para dejarle el torso desnudo, bueno, mas desnudo, antes de tomarla de su brazo izquierdo y llevar el mismo tras la cabeza de ella dejándola curiosa, al menos hasta que lo vio meter su cabeza en el espacio que su brazo había dejado y proceder con lo que quería.

"La axila" fue todo lo que pensó mientras dejaba que sus pulmones se llenaran del embriagante aroma dulce que desprendía el área y sus papilas se saturaran con su sudoroso sabor cuando empezó a lamerla causando un morboso placer en la castaña, por no mencionar las ligeras pero agradables cosquillas que sentía cuando la lengua de su joven amante se paseaba por toda la depilada piel de esa zona.

- ¡Ara! ¿de verdad quieres lamerme ahí? - preguntó sorprendida ante su accionar que era tan obsceno, pero sin ninguna intención de detenerlo, ella también lo disfrutaba y mas importante, el castaño parecía ni escucharla totalmente metido en la tarea de saborear tan extraña zona con tanta dedicación, - mooo, ¡que chico tan travieso! - dijo mientras lo miraba embelesada, con una sonrisa timida y sonrojada, no solo por lo que le hacía a su axila, también por el abrazo que le daba, tan fuerte pero delicado, firme pero suave, era como si la estuviera reclamando para el, cosa que la hizo sentir conmovida, era la primera vez que se sentía así y quería disfrutarlo, por eso le dio acceso libre a que hiciera con su axila lo que gustara.

Y es que el chico estaba desatado, aquel chico era un amor normalmente, siempre atento y dulce, considerado que procuraba a los demás antes que a si mismo, pero al parecer por dentro llevaba a una bestia lujuriosa que solo esperaba el momento en que la dejaran salir, se pregunto si era igual con las chicas, porque en este momento, luego de que ella le diera vía libre para hacer con ella cuanto quisiera y como quisiera, ante ella solo quedaba un desvergonzado y pervertido chico dando rienda suelta a su lujuria, aunque, tampoco es que le molestara.

"Haaa, ¡es justo como me lo imagine... este olor es tan sexy!", por su parte el chico estaba centrado solo en disfrutar de ella, de ese morboso y obsceno momento, lamía de arriba a a abajo, chupaba en diferentes partes como queriendo dejarle un chupeton y besaba cada parte de la axila de la castaña sacandole gemidos y risitas a la mujer con su accionar, aunque no le importaba, solo quería seguir gozando de ese momento donde su razón y su moral, estaban felizmente ahogadas en un océano de lujuria, quería mas, mucho mas de ese sucio placer.

Cansado de solo eso y con su polla adolorida por la falta de atención a la que estaba sometida desde que empezaran, el chico decidió probar algo mas, algo que quería hacer ni bien vio esa parte de ella, por eso se separo un momento de ella para tomar la ultima prenda en el cuerpo de la castaña y con mimo irle retirando hasta que la tuvo completamente desnuda, lanzo lejos la prenda intima, no sin darle un respiro primero curioso de saber a que olía esa parte de ella, curiosamente las bragas cayeron junto con la camisa carmesí que le quitara previamente pero eso no lo noto ninguno de los dos y tampoco les interesaba, mientras que ella lo miraba seductora, creyendo que reclamaría esa parte de ella, pero lejos estaba de ser la intención del castaño.

En ese momento el chico la tomo de las caderas y la hizo ponerse de lado, luego se coloco detrás de ella y procedió con su plan, que no era otro que meter su pene entre esas carnosas piernas que tenía la castaña, mas concretamente entre sus muslos para después empezar a mover sus caderas, como si estuviera follandola, bueno, al menos follando sus muslos, porque si, desde que vio esos muslos esa mañana entallados en esa ridícula falda que traía y que ahora no sabía y no le importaba saber donde estaba, se preguntaba que se sentiría tener su polla rodeada por las carnes de esos deliciosos muslos y en ese momento vaya que lo estaba disfrutando, pero no era suficiente, aun quería seguir con lo que hacía antes, por eso mientras que con su polla follaba los apetecibles muslos de Venelana, regreso su cabeza a su axila para continuar lamiéndola.

- Ne Ise, ¿en serio estas haciéndolo con mis muslos? - no es que le molestara, de hecho saber que ese adorable castaño tenía un lado tan perverso la calentaba, pero si lo que quería era usar su polla, había mejores lugares para hacerlo que solo sus muslos, aunque claro, el chico estaba en trance así que solo continuo con lo que hacía, - ¿de verdad estas así de caliente? - e pregunto al ver que no le respondía, solo continuaba lamiéndola y frotándose entre sus muslos, el acto era tan obsceno, tan guarro, la estaba calentando a ella también.

- Venelana - atrás quedaron los honoríficos, no los necesitaban en este momento, ya estaban mas lejos de eso, por eso cuando la llamo, atendió a su llamado de inmediato y de forma inconsciente abrió sus piernas levantando uno de sus muslos y al hacerlo, la polla del castaño salto furiosa hacia atrás y sin contemplaciones o delicadeza abofeteo su coño con esa carne dura enviando un estremecimiento por su columna vertebral por lo placentero que se sintió.

- Hmmm, apuesto a que harías lo que fuera, cualquier cosa, con tal de meterlo en algún lugar - no necesitaba que le respondiera, su polla ya lo hacía por el, estaba dura, caliente, pulsante, quería entrar en ella eso era obvio, estaba listo, entregado a la lujuria, esa húmeda polla era la prueba.

- ¡SI!, ¡YA NO PUEDO AGUANTAR MAS! - grito desesperado el chico, ansioso de que le diera permiso de enterrarse en sus carnes, Dios, le estaba costando horrores a ella misma no ceder, se veía tan deliciosa esa verga, pero entones se le ocurrió una idea, una que sabía ambos disfrutarían.

- Entonces, ¿quieres intentar meterla en mi boca? - le pregunto seductora pero ansiosa, quería probar algo ella también y por eso no dudo en darle tal ofrecimiento al castaño que la veía sorprendido pero también ansioso.

- ¿Te refieres... a una felación? - el chico sabía de eso, no le sorprendía, aunque dudaba que fuera por obra de su hija, aun así, el chico no parecía disgustarle la idea, aunque claro esta, su idea era y a la vez no era una simple felación.

- ¡Podemos hacer eso... o mejor aun, la versión mas sucia y degenerada de eso! - le dijo esta vez dejándose ahogar por la lujuria ella, estaba emocionada de lo que estaba por pasar, por eso sonrió mordaz mientras lo decía, esto iba a ser increíble, de eso estaba segura.

Le pidió que se levantara, no porque fueran a terminar, estaban lejos de terminar, sino porque quería que se desnudara el también, a partir de este momento la ropa estaba prohibida, solo se permitía el contacto piel con piel, así ambos lo disfrutarían mas y mientras el se desnudaba ella tomo posición en la cama, esta vez perpendicularmente a ella.

Por eso cuando el castaño se termino de desnudar y se giro, se encontró con la castaña en una posición bastante particular, mientras se sujetaba la polla de la base listo para lo que fuera que siguiera.

- ¡Aquí! - lo llamo ansiosa y lista, deseosa de comenzar y al ver su rostro de asombro se sintió satisfecha, era obvio que no se esperaba algo así, por eso estaba seguro de que lo disfrutaría mas, bueno, no solo él, obviamente.

Delante de el, Venelana se encontraba acostada boca arriba y transversalmente en la cama, con su cabeza colgando del borde de la cama, totalmente desnuda mientras con sus manos apuntaba con sus dedos indice directo a su abierta boca la cual tenía la lengua de fuera pero que estaba pegada contra su mentón dándole un aspecto sucio que se complementaba con la mirada obscena que le dedicaba y el fuerte sonrojo que tenía, eso y que de fondo estaba el sucio cuerpo de la castaña, empezando por esos sucios y llenos pechos colgando hacia los lados dejando ver entre el valle que los separaba su vientre y mas allá esos carnosos muslos que antes el sintiera apretar su polla.

- ¡Mi agujero de puta ya esta listo! - lo decía mientra se aseguraba de mantener su boca abierta y señalada para que no olvidara el camino, ademas, lo decía todo lo sucio que podía para excitarlo aun mas, si es que eso era posible, - ¡Tu pene!, ¡mételo dentro de este travieso coño divorciado! - se sentía sucia y eso la excitaba, ese castaño la estaba enloqueciendo y por eso no dudaba en abrir la boca todo lo que podía para que viera su obsceno interior, sacado la lengua todo lo que pudiera para darle aun mas espacio a esa enorme tranca que pronto se metería en su cavidad oral.

El chico estaba ido, esa posición, ese aspecto, todo en ella era demasiado sucio, en este punto no se parecía en nada a la recatada de su hija, cosa que lo hacía preguntarse si es que acaso por dentro Rias era una cerda libidinosa como su madre y solo fingía que no le interesaban las cosas sucias, porque de ser así, el se aseguraría de sacar a la verdadera Rias a flote.

- Tomaras tu polla y la empujaras dentro de mi boca - mientras tanto Venelana continuaba hablando como si tratara de explicarle que era lo que esperaba de él en ese momento, - ¡Entonces, intentaras empujar tus caderas lo mas duro y profundo que puedas! - continuaba mientras mantenía todo lo abierta que podía su boca, era obvio a que se refirió antes la castaña, esto no era una felación como tal, era su versión mas desagradable, después de todo lo que ella le estaba pidiendo era que literalmente, le follara la boca.

"Woah, eso se ve muy travieso", mientras tanto aunque escuchaba a Venelana en sus indicaciones, no podía dejar de ver su boca abierta de par en par, la lengua de fuera, carajo, hasta podía ver dentro de ella su úvula, eso era tan sucio y travieso y el que la saliva goteara dentro de esa boca solo lo hacía mas obsceno, "no puedo creer que vaya a meterla ahí", fue su ultimo pensamiento mientras no podía evitar seguir viendo la boca de la mujer castaña, porque si, iba a meterla en su boca, nada en el mundo se lo impediría.

Después de eso, empezó a moverse, percibió todo casi como si fuera en cámara lenta pues no podía creer lo que estaba a punto de hacer, pero no se iba a detener, lo deseaba tanto como ella si no es que mas, en ese momento era realmente muy difícil, saber quien de los dos estaba mas desatado en sus deseos.

- ¡Rápido!, ¡rápido! - mientras tanto Venelana no dejaba de apurarlo, ansiosa de ya tener esa polla en su boca, poder saborearla y saturar sus papilas gustativas con el varonil sabor que estaba segura desprendía, por eso ansiosa de acelerar el contacto, estiro primero el cuello y luego la lengua para alcanzar esa gorda polla, cosa que al no lograrlo entonces empezó a menear su lengua de arriba a abajo fuera de su boca como incitando a su objetivo de que acelerara el paso para que pudiera recibir los gustosos saludos de la húmeda sin hueso de la mujer.

Fue nada mas que la punta de su polla llegara a su boca para que de inmediato la mujer cerrara sus labios alrededor de la bulbosa y húmeda cabeza mientras su lengua aun de fuera solo lamía y jugaba con la punta, totalmente feliz de finalmente tenerlo ahí a su lado.

"¡UGH!, ella esta lamiendo toda la punta mientras la chupa tan duro" y no mentía, estaba chupandola, no, la estaba succionando desesperada y eso junto a las lamidas que le daba, le decían que la quería adentro de su garganta a la de ya, "si esto es solo con la punta, entonces con un empujón debería...", considero sus opciones y al ver cuanto placer le producía solo en la punta con sus labios y la lengua, tomo su resolución, quería sentirlo aun mas.

- ¡HNNBH! - de repente Venelana tenía enterrada hasta el fondo la polla de Issei sacando el aire de lo profundo de su garganta, hinchando sus mejillas con el mismo pero totalmente feliz y dichosa de tan morboso placer que estaba sintiendo y que solo iba a aumentar, eso lo tenía mas que claro, mas con el semental que parecía estar hecho el castaño en ese momento.

Lo siguiente que ocurrió fue que el castaño cegado por la lujuria y la dulce sensación que le daba sobre su polla la boca de Venelana, enloqueció completamente y como poseído empezó a empujar sus caderas contra la castaña, sin decoro ni delicadeza, casi como si lo que estuviera ahí no fuera una mujer, sino mas bien una muñeca sexual y el que lo succionara tan duro no estaba ayudando a que recuperara el control en un futuro próximo.

- ¡WOAHH!, ¡esto es increíble!, ¡es tan caliente y húmedo, simplemente no puedo dejar d moverme! - gritaba mientras ahora para poder ir incluso mas profundo dentro de la boca de la castaña asentó su peso sobre sus brazos en la cama y con ello empujo mas duro contra la boca de la mujer sintiendo que se le derretía el cerebro ante lo asombroso que era todo aquello.

"Aahh, ¡esto es tan bueno!, ¡ser tratada como un objeto sexual me excita tanto!" pensaba la castaña mientras mantenía los ojos cerrados, de hecho no se movía en lo mas mínimo, solo su lengua que acariciaba la longitud del castaño, en el pasado jamas le mostró a nadie este lado tan lascivo de ella, jamas encontró a alguien con quien quisiera explotar este lado tan sucio y fetichista de si misma, pero el castaño era diferente, el era especial, con el sentía que podía ser ella misma y dejar salir a esa mujer sucia que llevaba reprimiendo por mucho tiempo sin que la juzgara por ello y eso es lo que pensaba hacer.

- ¡Esta parte de siento por aquí, es la parte inferior!, ¡esto se siente increíble! - grito el castaño cuando sentía la garganta de la mujer, especialmente cuando empujaba y sobre la garganta de la castaña aparecía el bulto de su erección empujando sus paredes internas, era tan obsceno que simplemente no lo podía creer, - ¡cuando empujo mi polla, tu garganta se aprieta por completo alrededor y en consecuencia me exprime cada centímetro de la polla! - le costaba sacarla, bueno, retroceder, porque no quería sacarla, no aun, pero ella apretaba tan duro, como si no quisiera soltarlo que le era difícil contenerse.

- ¡OGHOOO! - mientras tanto la castaña solo era capas de dar gorjeos señal de lo atragantada que estaba con aquella polla clavada dentro de su garganta que no la follaba, la violaba para su extremo placer, pese al detalle que le costaba respirar de lo llena que estaba, pero no quería parar.

- ¡Esto se parece mas al sexo real que a una mamada, Venelana! - no mentía, tampoco es que fuera un experto, pero un acto tan sucio no podía ser llamado una felación o una mamada, esto era mas un acto de fornicación oral, muy parecido a si en realidad estuvieran teniendo sexo en este momento y no parecía que ninguno de los dos estuviera dispuesto a detenerse prontamente.

Venelana luchaba por respirar, pero ni por asomo soltaba la polla que martillaba lo profundo de su garganta, en su actual posición esa verga estaba llegando demasiado hondo dentro de su garganta, ensanchando su traquea y dándole su forma y amaba cada segundo de eso, por lo cual ya no resistiendolo mas, llevó sus manos hasta su coño y con desesperación empezó a masturbarse, metiendo ansiosa los dedos de sus dos manos dentro de su intimidad, necesitaba calmar su coño pronto o de verdad enloquecería.

"¡Tienes razón!" pensó de acuerdo con la consigna del castaño, esto era sexo guarro y sucio con su boca, no una felación, no una mamada, estaban profanando su boca y amaba cada segundo, "¡date prisa, déjame beber tu semen!", estaba ansiosa, desesperada, su estomago gruñía al no tener ese viscoso liquido ya dentro de si, quería que se corriera ya y por eso empezó a chupar aun mas duro, iba a beberse el semen de ese castaño aunque para eso tuviera que succionarlo directamente desde sus bolas cargadas, "¡correte dentro de ese coño que piensa que es una boca!", en este punto su cabeza era un lío, la falta de aire, la excitación y las ansias la tenían hecha un desastre y su rostro era prueba de ello.

En ese momento mientras succionaba con fuerza ansiosa de beber el semen del castaño, su rostro estaba hecho un desastre, las lagrimas que derramaba por tan rudo pero delicioso trato, habían corrido el rímel de sus pestañas haciendo de sus ojos un caos, la saliva salía de su boca con cada empuje dejando el contorno de sus labios totalmente empapados y de su nariz ya era inevitable que se salieran los mocos producto de la follada que le estaban dando a su boca y que le estaba impidiendo la entrada de aire a sus pulmones, en ese momento su rostro era la prueba de que era una mujer follada y bien follada o cuando menos su boca y estaba disfrutándolo mucho, aunque ya quería que el chico le dejara beber su semen de una buena vez.

- ¡Apuesto a que esto es bastante duro para ti! - se refería al trato brusco con el que la estaba follando, pero es que se sentía tan endemoniadamente bien que no podía parar, no, simplemente no quería parar, - ¡y aun así continuas chupándomela tan duro! - luego estaba ese detalle, que sin importar el que l estuviese tratando como a una simple one-hole, ella simplemente no dejaba de chupar mas y mas duro.

No importaba cuan rudo fuera, su boca solo chupaba como si no hubiera un mañana y las paredes internas de su garganta solo se apretaban mas y mas alrededor de su polla, se estaba enloqueciendo y ya no era capaz de resistir mas, ya no quería resistir mas, quería soltarlo todo dentro de esa obscena y estrecha garganta, pintarla de blanco y ya no podía aguantar mas.

- ¡Hng, carajo!, ¡ya no aguanto mas! - declaro cuando sintió sus bolas tensarse y su polla empezar a temblar descontrolada, - ¡Lo siento Venelana, me voy a correr! - finalmente estaba ahí, a las puertas de su clímax y ya no resistía mas, lo iba a soltar todo y lo iba a hacer dentro de su garganta, así que mejor que estuviera preparada para lo que venía.

Continuo follando su boca con desespero un poco mas hasta que sintió que el semen empezaba a subir por su polla y estaba a nada de salir, por lo cual empezó a hacer mas profundas sus estocadas, mientras que en el caso de Venelana, su rostro era un poema, desarreglado como estaba con el maquillaje, las babas y los mocos, todo describiendo lo ansiosa que estaba porque el chico finalmente se derramara en su boca y por ello apretó mas su garganta, succiono mas guro, masajeo mas esa polla con sus músculos bucales, quería que se corriera ya.

- ¡HNNOHOOOU! - mientra tanto la pobre no pudo mas que gemir lastimeramente ansiosa de que se corriera, mas cuando sintió como su polla se empezaba a hinchar, estaba por correrse y ella ya no veía el momento en que su boca se inundara con ese espeso y sucio liquido, "¡AAHN!, ¡aquí viene!", en su mente no podía mas que saltar de dicha, era el momento, el tan ansiado momento.

Dejo de masturbarse, en ese momento solo quería centrar su atención y sus sentidos en la inminente explosión que iba a ocurrir en su boca y sin embargo el castaño le dio una ultima sorpresa cuando llevo sus manos contra su garganta no para asfixiarla, no, solo fue para asirse a ella antes de con un poderoso envión que sintieron tanto ella como el cuando atravesó su garganta por completo finalmente dejarlo salir todo dentro de su castaña amante.

"¡Esta forzando su semen dentro de mi... esta empujando su polla lo mas profundo que puede dentro de mi garganta!" fue lo que pensó cuando sintió esa enorme polla yendo todo lo profundo que podía y que su propia boca le permitía para disparar luego todos esos chorros de pegajosos semen dentro de ella, mientras que el resto de ella solo convulsionaba ante el placer de ser alimentada con el blanco simiente, era casi como si se estuviera corriendo aunque no alcanzara el clímax, aun, "no dudo ni por un segundo en dispararlo hasta lo mas profundo dentro de mi, ni siquiera porque es nuestra primera vez", aquello no era un reclamo, mas bien era solo el asombro del macho que estaba hecho el castaño y el enorme placer que le estaba dando, pese a que apenas era solo una versión mas guarra de una garganta profunda.

Mientras tanto, el chico era como un grifo abierto o una manguera rota, simplemente no dejaba de correrse, sentía su consciencia desvanecerse con cada lechada que disparaba dentro de ella y eso solo lo hacía querer correrse aun mas dentro de ella, cosa que en ese momento no podría gustarle mas a la castaña que sentía la leche correr en su interior.

"¡Aaah, todo ese semen esta derramándose directo a mi estomago", pensó mientras sentía los chorros salir y salir de esa polla en lo profundo de su garganta y dada la posición de ella, bueno, realmente los estaba sintiendo ir a parar directo hasta lo mas profundo de su estomago, el castaño la estaba alimentando con su esperma justo en ese instante.

Cuando finalmente dejo de correrse, la liberó, sacó su dura polla desde lo profundo de la garganta de ella y con ello el aire entro a raudales dentro de la mujer que llenaba desesperada sus pulmones luego de tremenda follada que le acababan de dar a su garganta, temblaba totalmente deshecha pero complacida, no cerraba la boca, en ese momento no podía, estaba entumida del cuerpo entero tras lo que acababa de vivir, pero su rostro era prueba de lo mucho que lo disfruto, con el rímel corrido y deslizándose hacía su frente y los ojos acuosos, de hecho el panorama completo de su rostro era una obscena mezcla de sudor, lagrimas, mucosidad, saliva y semen que se difuminaban entre si por el desastre que era la mujer en ese momento, pero el castaño aun tenía la polla demasiado dura y eso que acababa de correrse.

La vio recomponerse y como pudo limpiar su rostro hasta retirar de su cara el rímel corrido, limpiado la mucosidad de su nariz y la saliva del contorno de sus labios, en cuanto al semen que se derramo cuando se la saco, solo lamió el mismo antes de meter la lengua y saborear el delicioso néctar, en ese momento solo un pensamiento corrió por su mente.

"Esta mujer... es demasiado erótica", no la podía describir de otra manera, no cuando literalmente acababa de violar su cara hasta correrse en su estomago y aun así de ella desbordaba esa aura sensual y sexy que le pedía aun mas, si ese era el encanto que solo una mujer madura podía mostrar, entonces le gustaba y le gustaba mucho.

Por su parte Venelana en cuanto estuvo limpia, al menos de su rostro pues el desastre entre sus piernas no se detendría hasta que probara a ese chico como era debido, lo vio, era tan lindo, un rostro perfilado, un cuerpo atlético, musculado pero sin exagerar y una polla de miedo que pese a acabarse de correr, aun se mantenía erguida y lista para mas, de hecho era obvio por como pulsaba ansiosa que quería mas y con ello solo podía llegar a una conclusión.

"Este chico... es un semental por naturaleza", solo eso podía pensar mientras lo veía sorprendida pero entusiasmada, era obvio que ese chico era a quien llevaba buscando desde hace mucho y lo sentía por su hija, pero no lo dejaría ir y ahora había llegado el momento del plato principal, la razón de que entrara en ese cuarto desde un principio y ya no lo retrasaría mas, aunque no es que se quejara luego del placer que le dio solo abusando de su boca y de su garganta también.

Antes de que el chico se diera cuenta la castaña lo tomo de la mano, lo arrastro a la cama y una vez en ella se le subió encima, esta vez de frente, cara a cara mientras que se sentaba sobre su polla la cual fue a parar contra su trasero pero pasando por entre los labios de su vagina, aun no estaba dentro, pero lo estaría muy pronto.

- ¡AAAHN!, ¡no puedo esperar mas! - grito una vez sentada arriba de el mientras le dedicaba una mirada suplicante, no, mas bien toda una expresion de suplica para que continuaran con lo que hacían y que le decía al castaño que esta vez lo que quería esta vez no era otra cosa sino que el chico le perforara el coño con su enorme polla, estaba lista, ansiosa, de hecho le ardía el coño de la necesidad de tenerlo dentro y por lo dura que la sentía golpear contra su trasero, sabía que el también, de hecho parecía que el calor y humedad de su coño al transmitirse a su polla solo se la estaba poniendo mas dura acentuando el pensamiento previo sobre el castaño.

No supo como reaccionar cuando la vio como se presionaba contra el mientras le dedicaba aquella mirada de suplica, eso y también que estaba algo desorientado en ese momento ya que podía sentir contra su pecho esos esponjosos globos de carne que la castaña llamaba senos y la suavidad y calidez de los mismos lo estaba emocionando demasiado, pero aun así la vio a los ojos para escuchar su pedido.

- ¡Rápido! ¡ya es momento de que me des tu polla y quiero que me des duro! - en ese momento ni siquiera supo como responder a su suplica, no es que se considerara habilidoso en el sexo, pero jamas pensó que tendría a una mujer rogándole que la tomara, menos que esa mujer fuera una despampanante madura y mucho menos que fuera la madre de su novia, definitivamente algo tenía que estar mal con el mundo, - ¡necesito que me cojas ahora mismo! - como negarse a su petición cuando lo miraba de esa manera tan adorable mientras le suplicaba, su lado mas dominante estaba henchido de orgullo de haber sometido a tan hermosa mujer.

El único problema es que al no recibir respuesta de su parte, la castaña pensó que tal vez estaba confundido sobre que debía hacer ahora, algo que le reprocho a su hija por ser tan recatada en momentos donde no debía serlo, pero ni de chiste iba a dejar las cosas así, si era necesario ella tomaría el control y le demostraría lo que era una verdadera mujer.

- No te preocupes, te guiare al inteiror de mi coñito, ¿de acuerdo? - al decirlo empezó a acariciar su polla desde la base, feliz de sentirla tan dura porque ya no aguantaba mas las ganas no quería perder tiempo en ponérsela dura de nuevo, "haaa... aquí voy de nuevo... esta vez voy a devorarla completa con mi otra boca" pensó ansiosa y lista para lo que seguía, ya no ´podía postergarlo mas, no quería postergarlo mas o se volvería loca.

Ni siquiera necesito tomar esa polla y guiarla, estaba tan dura y erguida que solo necesitaba ponerse arriba de ella y eso es justo lo que hizo, acostó lo suficiente al chico y vio como su polla dura se quedaba perpendicular a su cuerpo, como si ya supiera lo que seguiría y cooperara con ella, luego solo basto conque se sentara justo encima de el, abriendo los labios de su coño para que un segundo después entrara en contacto con la cabeza de la dura y caliente polla de su amante.

"Ya no resisto, quiero montar su polla", conforme la castaña bajaba sobre el eje solo se ponía mas ansiosa, llevaba buen rato sin tener una polla y esta le estaba ensanchando mas de lo que pensó las paredes de su vagina y estaba amando la sensación mas de lo que podía imaginar.

- ¡HNG!, ¡se siente tan caliente dentro! - declaro el castaño ni bien su polla empezó a entrar, por dentro la mujer estaba hecha un horno, tan caliente, tan húmeda, tan apretada, sentía que le estaba derritiendo el pene, se sentía demasiado bien.

Después de eso la mujer solo continuo bajando, gimiendo con cada centímetro de carne dura que entraba en su coño, manteniendo sus labios vaginales abiertos con su mano desde atrás de su carnoso culo, todo para dejar ver al chico como su hambriento coño se tragaba, no, se devoraba su verga y tal acto exhibicionista junto a la mirada fija del castaño sobre su golosa intimidad solo terminaron de romper la poca cordura que le quedaba, al carajo las sutilezas, la quería metida totalmente dentro de ella sin mas demoras.

- ¡AHAAAAHN! - no pudo reprimir el grito desgarrador luego de que se clavo hasta el fondo el miembro del castaño, había sido tanto tiempo sin una polla y esta la estaba llenando como nadie, se iba a volver loca, no, ya se había vuelto loca, su cuerpo no resistía esa sobredosis de placer y por eso ni bien se enterró en él necesitó de sus dos manos para sostenerse sobre el vientre del chico o de lo contrario se desplomaría en el acto.

En este punto ya no pensaba permitir que nada la detuviera y en cuanto se recupero y mas importante, se acostumbro a su nuevo intruso empezó a moverse, primero en círculos sobre su pelvis y luego inició a verdadera diversión cuando se empezó a levantar, dejando tras de si, una enorme y dura barra de carne bañada en sus jugos lascivos.

- ¡YAAAN!, ¿y bien? que tal se siente un coño maduro - le preguntaba con lascivia en su voz mientras que ella miraba hacía abajo entre sus pechos justo al lugar donde estaban conectados, quería verlo, pero mas importante, quería que el lo viera, que viera como su coño se devoraba su polla, como babeaba sobre ella y por lo dura que se la sentía estaba teniendo el efecto deseado porque el castaño no perdía detalle.

- Se siente tan bien, es tan... - ni siquiera sabía como describirlo, era increíble, la sensación, la humedad, la suavidad, como cada pliegue dentro de ella sujetaba su polla y como apretaba su tronco tratando de impedir que saliera de ella, era simplemente magnifico, ben podría acabar haciéndose adicto a esa sensación.

- Fufu, acabas de probar a tu primera MILF... ¡felicidades Ise! - MILF, esa palabra sonaba tan bien y que saliera de la boca de una sonaba aun mejor, quiso decir algo, pero al parecer la castaña tenía otros planes pues en cuanto termino de decir aquello, se lanzó a sus labios de inmediato para besarlo con pasión y abandono.

Se besaron un rato, quería probarlo todo de ese chico y sus labios la estaban seduciendo desde hace mucho, el era demasiado lindo, al principio solo quería jugar, molestarlo un poco, pero ahora, quería ir hasta el final, por eso cuando se sintió satisfecha con los besos, se separo de el y con una sonrisa seductora lo empujo para que se acostara por completo en la cama y una vez ahí, empezó a montarlo como una yegua desbocada, aumentando la intensidad de sus sentones sobre el, se sentía demasiado bien.

- ¡Ahora solo déjamelo todo...¡ ¡a MI, AAHHNG! - quería el control, quería que el solo disfrutara de su maduro cuerpo, quería disfrutar de el y que el disfrutara de ella, por eso quería que le diera las riendas del acto.

Continuaron así por lo que le pareció una eternidad, no sabía cuanto tiempo llevaban en eso, pero sabía que era un rato, estaba cansada, sudada, pero muy feliz e incapaz de detenerse, no se detendría hasta que el se corriera dentro de ella, solo esperaba poder aguantar hasta entonces.

"¡AAH! su polla es tan... ¡OH DIOS!" no pudo ni terminar su pensamiento de lo bien que se sentía, tenía la lengua de fuera, jadeando como animal herido mientras esa joven polla le expandía las paredes del coño de una manera tan deliciosa, "¡parece que somos realmente compatibles!, ¡esta golpeando todos mis puntos débiles, uno detrás del otro!", para ese momento su mente estaba en blanco, solo podía sentir como su cuerpo y el de el encajaban a la perfección, como su coño abrazaba perfectamente su polla y como su polla golpeaba en cada ocasión que se empalaba sus puntos dulces, cosa que jamas le había pasado.

Sus ojos estaban hacía arriba, su boca abierta y jadeando mientras su lengua colgaba de fuera y la saliva caía una vez mas, estaba sudada por el esfuerzo y aun así no quería detenerse, era demasiado placentero como para siquiera pensar en detenerse, mas cuando sentía como la polla del que se supone que debería ser solo su yerno asediaba cual ariete con su polla la entrada de su útero, la estaba enloqueciendo rápidamente.

"Me va a hacer correr en cualquier momento", no era una duda, era una realidad, sentía su orgasmo construirse dentro de ella, pero no quería correrse antes que ese jovencito, no quería que el lo supiera, "pero aun es joven, tal vez no se de cuenta de eso", rogaba por dentro que no tuviera ya la suficiente experiencia como para detectar cuando se corriera, porque estaba por hacerlo, no sabía cuanto mas podría resistir.

- ¿Venelana?, ¿te encuentras bien? - de repente salió de su trance de placer cuando lo escucho preguntar aquello, solo entonces se percato de que el ritmo que llevaba hasta ahora había cambiado, era mas suave que antes y ella parecía ida en su propio mundo, uno plagado de placer por cierto, pero eso fue lo que le llamo la atención al parecer.

- ¿Eh?, ¡ah si!, ¡estoy b-bien! - volvió a acelerar el ritmo, no iba a permitir verse débil ante ese chico, podía ser lindo y la estaba complaciendo como nadie, pero tenía su orgullo como mujer, - pero ahora, ¡qué te parece si... AHA!, ¿¡qué te parece si intentas estar a-arri...!? ¡OHOOO! - intento proponer cambiar la posición, esperaba que al darle el control esta vez al chico, dejar que él marcara el ritmo, su inexperiencia le permitiera descansar, porque al paso que iban, era cuestión de tiempo para que se corriera y muy fuerte.

"¡N-No, me rehusó a aceptarlo! no hay forma de que yo me corra antes que este jovencito", su orgullo como mujer, especialmente como MILF le impedía aceptar que ese chico fuera así de bueno en la cama, que tuviera tal resistencia como para no correrse antes que ella, pero por la forma en que era incapaz de detener sus caderas, era difícil negar esa realidad.

Por suerte para ella, cambiaron posiciones, ahora con ella bajo el esperaba poder descansar, sin embargo pronto se dio cuenta de su error cuando un instante después de que el se colocara arriba de ella, le recordó lo que había ocurrido previamente cuando follo su boca, en otras palabras, lanzo fuertes y poderosas acometidas esta vez contra su coño y en consecuencia, la poca resistencia que le quedaba pronto fue subyugada, ya no podía contenerlo mas, ese chico solo estaba demostrando su habilidad en la cama mientras la rompía en el proceso.

- ¡AAAAHAAAHAAHN!, ¡ME ESTOY COOOORRRRIIIIIENDOOOUH! - no habrían pasado mas de cinco minutos desde que el castaño empezara a bombear su polla dentro de ella cuando la mujer fue incapaz de soportar mas el placer y termino teniendo un poderoso orgasmo y lo peor, el no le tenía piedad, mientras se corría, él continuaba follandola con la misma intensidad.

"¡Su maldita polla no esta jugando limpio!" pensó mientras continuaba corriéndose, ahogándose en ese placer, cosa que su rostro demostraba en ese momento con ese obsceno ahegao que hacía, los ojos hacía arriba totalmente en blanco, las cejas arqueadas hacia abajo, derramaba lagrimas de felicidad mientras se corría, su boca torcida en una sonrisa estúpida mientras su lengua colgaba y derramaba saliva incapaz de cerrar la boca, "¡DEJA DE GOLPEAR CONTRA MIS PUNTOS DÉBILES!", lanzo el grito en su mente pues pese a que se estaba corriendo el chico solo seguía bombeando dentro de ella con ese brío juvenil suyo, por lo cual en ese momento sus tetas estaban balanceándose de un lado al otro, rebotando arriba y abajo, de lado a lado, todo mientras sentía como su útero era masacrado por la polla del castaño, enviándola una y otra vez hasta los límites del placer y dejándola ahí todo el tiempo.

No importaba que, el chico simplemente no se detenía, era como si no tuviera control de su cuerpo, como si solo fuera un animal en celo guiado por su instinto reproductivo reclamando una hembra fértil que fecundar y para ello movía sus caderas adelante y atrás dentro de ella matándola de placer, porque si, por culpa del asedio al que se estaba viendo sometida en ese momento la mujer, había perdido la cuenta de cuantas veces ese apuesto castaño llevaba haciéndola correrse y por lo que sentía no se detendría hasta alcanzar su propia liberación, que esperaba fuera pronto o moriría de placer, de verdad moriría de seguir así.

"¿¡Cómo puedo resistir contra esto!?" se pregunto mentalmente mientra echaba la cabeza para atrás y chillaba como cerda ante un nuevo orgasmo producto de que el chico solo parecía aumentar la potencia con la que empujaba su polla en ella, "!se supone que soy la mas experimentada de los dos y aun así este chico me esta haciendo correr una y otra vez!" era innegable, ese chico era todo un semental y ella ya empezaba a creer que era medio masoquista, el por qué de ese pensamiento, era porque en ese momento estaba abriéndose el coño ella misma para que el castaño pudiera ir mas profundo matándola con sus envestidas y ella feliz y encantada se aseguraba de mantener su coño abierto para el.

- ¡Venelana!, ¡me voy a correr otra vez! - finalmente escucho esas dulces palabras, el chico finalmente se correría de nuevo, lo agradecía porque no sabía cuanto mas podría resistir, ya se había corrido en su boca y ahora, quería, no, se aseguraría que alimentara su boca de abajo también.

"¡AAHH! ¡finalmente, se esta corriendo!" jamas creyó que escuchar esas palabras le darían tanto alivio, pero luego de lo vivido eran como un bálsamo, aunque uno muy morboso pues sentía como esa polla empezaba a hincharse en lo profundo de su coño y ella tenía un destino y solo un destino para todo ese torrente de espeso y joven semen, por eso ante la inminente erupción que venía, cerro las piernas tras el chico en un candado que le asegurara que el no podría salirse y luego lo empujo contra ella con su piernas.

- ¡Entonces hazlo, mi Ise! - le ordeno, al tiempo que le daba permiso de hacerlo, todo con esa voz sensual y madura suya cosa que lo emociono, mas por la forma suave y traviesa con la que movió sus carnosos y seductores labios para mostrar su aprobación y deseo de que el se corriera, - ¡continua y bombea con fuerza todo tu semen dentro de mi! - le estaba pidiendo que se corriera dentro cosa que lo sorprendió, pero tan desbocado como estaba no podía importarle menos, de hecho la idea lo seducía y no es como si tuviese otra opción, después de todo el candado tras de él no lo dejaría salirse aunque quisiera y no quería salir aun de ese cálido y húmedo reducto.

Resulto... liberador a falta de mejor palabra, cuando luego de una poderosa estocada de parte del castaño que le permitió ir hasta lo profundo de la mujer, esta lo sintió correrse duro dentro de ella, liberando una ingente cantidad de leche de bebes en su matriz con tal fuerza y abundancia que era una sensación abrumadoramente cálida para ella, por no mencionar su primera inseminación en no recordaba cuanto tiempo y como no podía ser de otra forma, ella acabo acompañando al castaño con su propio orgasmo en ese momento.

- ¡AHAAAAAH! - se corrió con fuerza y como si quisiera maximizar aquella sensación, libero el candado hecho con sus piernas de detrás del chico, solo para con sus manos llevar sus piernas hasta su cabeza y luego sostenerse de los muslos, mientras sentía a su coño apretar para exprimir mas del blanco simiente de castaño que parecía no tener intenciones de dejar de correrse pronto.

La cantidad y la nueva estrechez de la castaña fue demasiado y pronto tanto sus jugos vaginales como el exceso de semen dentro de su coño empezó a filtrarse y escapar de su maltrecho pero satisfecho coño mientras ella solo continuaba gimiendo ante la placentera sensación de ese orgasmo sincronizado entre ambos que solo le demostraba que al parecer, ese chico era su pareja perfecta, no solo por lo dulce y atento que había sido esa semana, también por lo que acababan de hacer, lo sentía por Rias, pero si era necesario, se lo robaría.

Finalmente cuando el chico se dejo de correr, lentamente fue sacando su miembro del interior de la castaña que solo gemía mientras sentía a ese monumento a la virilidad retirarse de su interior y fue nada mas sacarla de ella para que el exceso de semen liberado en su interior se empezara a filtrar mientras ella solo dejaba caer sus piernas de lado acomodándose para descansar mejor luego de la faena.

- ¡Haaa... haaa!, espero que disfrutaras de tu primera experiencia con una MILF - estaba cansada pero muuuy satisfecha, ese chico supero sus expectativas, por no mencionar que la sorprendió lo mucho que se acababa de correr, mas considerando que era la segunda descarga del chico y aun así se había corrido a montones, prueba de ello era la cascada de semen que estaba saliendo de su coño mientra ella lo mantenía semi abierto al tirar de una de sus nalgas, era todo lo que podía hacer en este momento donde el cuerpo entero lo tenía como entumecido.

"Estuve muy cerca de convertirme en un autentico desastre" pensó mientras consideraba lo que acababa de pasar, se suponía que ella era la mayor ah, la mas experimentada y casi acaba rompiéndose por culpa de ese castaño y su poderosa polla, no podía dejar de pensar en aquello mientras sostenía su trasero y sentía como el semen se filtraba de su interior, su cuerpo aun estaba crispado y temblando tratando de recuperarse, si, en definitiva ese chico era peligroso.

Lo importante es que ya la cosa había terminado y aunque se había salido de control mas allá de lo previsto, aun así fue algo que disfruto y mucho, se sintió mujer de nuevo luego e mucho tiempo, por eso se giro para quedar boca abajo y poder descansar, porque si quería irse en ese momento entonces tendría que arrastrarse fuera de la cama, si, arrastrarse, porque las piernas aun no le estaban respondiendo como quería, de hecho, a duras penas si sentía fuerza en los brazos luego de todo lo que paso.

"¡Pero, me alegra de que por fin haya terminado!", la mujer ahora de espaldas al castaño solo podía sonreír, ya no por lo complacida que se sentía aun, mas bien por el alivio que sentía, no le mostraría ese rostro aliviado al castaño, se supone que entre los dos la experiencia la tenía ella, "Al menos aun puedo conservar mi dignidad como la experimentada entre los dos", si, tenía su orgullo que proteger, el único problema es que al darle la espalda al castaño, no noto un hecho importante, el chico aun estaba duro y con ganas de mas y esta vez, tenía un nuevo objetivo en mente, uno que ella misma le había sugerido al darle la espalda.

Antes de darse cuenta, tenía las manos del chico puestas en su trasero, ese obsceno y carnoso trasero que lo tentaba con sus curvas, quería sentir esa parte de su cuerpo, era algo que aun no hacía con Rias y se moría por hacer, aun mas que sentir a la pelirroja darle una felación completa y ya que Venelana le había dicho que podía hacer lo que quisiera con ella, que lo recibiría todo sin importar lo sucio que fuera, bien podía aprovechar la oportunidad.

- Etto... Ise-chan, qué... - entonces Venelana un tanto nerviosa se giro a verlo, mas porque en ese momento Issei le estaba abriendo las nalgas para verle directamente el ano, veía de manera fija, casi embelesada a ese ultimo agujero que le faltaba por probar y se estaba poniendo un tanto nerviosa, porque ya se hacía una idea de que podría estar pasando por la cabeza de su joven amante.

Entonces lo vio, vio como el chico tomaba su polla dura desde su base y luego la fue enfilando contra su ano, estaba demasiado cansada para resistirse y eso era un problema, no quería que se lo hiciera por ahí, la terminaría de romper si lo hacía, pero la cosa parecía ser inevitable cuando sintió la punta de su polla presionarse contra su ano para luego empezar a empujar y para horror suyo, su ano empezó a abrirse gustoso para recibirlo.

- ¿Qué estas hacien...? - no llego a completar la pregunta, porque ni bien el chico metió la bulbosa cabeza de su miembro en su culo, no tuvo reparo en de un empujón dejarse ir hasta el fondo de sus intestinos, - ¡UUUHF! - fue el chillido que profirió la castaña en cuanto se sintió empalada de nuevo, solo que esta vez, por su entrada trasera, con tal fuerza que sintió sus nalgas temblar ante el impacto mientras sus ojos se abrían enormemente y su boca quedaba como un circulo con la lengua de fuera producto de la sorpresiva intrusión.

El cuerpo le temblaba, no por el miedo y mucho menos por el dolor, porque dolor era lo ultimo que sentía en ese momento, era por lo sensible que tenía el cuerpo en ese momento, no resistiría un asedio a su puerta trasera en ese momento, por mucho que le agradara la idea era mejor no ceder en esto, al menos no si su intención era salir de ahí con su dignidad completa.

- C-Calmate Ise - pidió nerviosa, su razón estaba en juego y debía detenerlo ahora que había retrocedido, quizás podía convencerlo de no continuar con esto, - s-si quieres hacerlo de nuevo, a-aun tienes mi coñito - trato de convencerlo ofreciéndole un intercambio, su coño por su culo y esperaba que el trato le pareciera jugoso, aunque por lo que paso luego se dio cuenta de que el chico no estaba dispuesto a negociar.

Y es que ni bien ella hizo su ofrecimiento, el castaño le dio su respuesta, solo que no lo hizo de forma oral, no, prefirió un mensaje mas contundente el cual no fue otro que dejarse caer de nueva cuenta hasta el fondo de las entrañas de la castaña que solo sintió el delicioso placer de tener las paredes de su ano expandidas por el chico.

"N-No puede ser... ¿de verdad quiere tanto un anal?" no podía creer que el chico quisiera tanto destrozarle el culo y había un problema con eso, un muy muy serio problema con eso, nadie lo sabía y lo ultimo que necesitaba es que el castaño lo descubriera.

- ¡OUHN! - gimió ante la nueva y poderosa intrusión a su culo, sus ojos bizcos y mirando hacía arriba como perdidos en el espacio mientras con la boca solo hacía una 'o' señal de la sorpresa, la intrusión y el gemido que acababa de lanzar, si, había un problema con el anal para Venelana, un serio problema que Issei al parecer y sin saberlo, estaba mas que dispuesto a explotar.

"Soy súper sensible al anal", su mas grande secreto y mayor debilidad, empezó por pura curiosidad y pronto se percato de que podía acabar enviciándose a esa sensación, cuando estaba particularmente caliente se masturbaba por el culo y eso le daba orgasmos deliciosos, pero ahora, ahí estaba con el castaño metido en las entrañas mientras empezaba a bombear en su culo y la respuesta no se hizo esperar, rápidamente empezó a correrse y no terminaba de correrse una vez cuando ya sentía que se corría de nuevo y de nuevo, el la iba a matar, a este paso de verdad la iba a matar.

- ¿Venelana?, te has estado corriendo mucho, ¿no es cierto? - se maldijo, al parecer el chico se había percatado de su actual estado orgásmico y se lo estaba echando en cara, pero como ya se menciono, ella tenía su orgullo y eso era algo a lo que no iba a renunciar por mucho que en ese momento su culo estuviera apretando desesperado la polla de su amante debido a un nuevo orgasmo.

- ¡HN!, ¡NO, CLARO QUE NOOHO! - el echo de que bufara de placer en el ultimo instante no le ayudaba con su mentira, pero no quería ceder, se suponía que la experta en ese lugar era ella, no podía dejar que supiera que se estaba corriendo como una virgen mientras le perforaba el culo, "¡AAH!, ¡acabo de correrme ahora mismo!", aunque en su mente la cosa era diferente, no tenía reparo en admitir que estaba corriéndose con la verga del castaño metida ahí atrás.

- ¿En serio?, ¿no estas corriéndote incluso en este momento? - maldito fuera ese chico, el sabia perfectamente que se estaba corriendo, debía sentirlo en su polla y la forma en que la hacía chillar cada que se corría, pero eso no le bastaba, quería que ella lo admitiera y eso no iba a pasar, no iba a perder su dignidad ante ese mocoso y su increíble, dura, caliente, larga y gruesa polla a la que ya era adicta, no señor.

- Pero q-que... ¿¡qué estas diciendo?, ¡no me estoy corriendo en lo mas mínimo! ¡HOOHOOHG! - quería negarse, a cualquier acusación que le hiciera, pero se le hacía cada vez más difícil, ese chico se estaba empezando a poner sádico con ella, castigando su culo ante su falta de honestidad y ella lo estaba pagando con creces, su mente se estaba perdiendo, su cabeza ahora se estaba recostando en una almohada mientras lagrimas salían de sus ojos que estaban casi en blanco de lo volteados que los tenía y la saliva no dejaba de correr de su boca, se iba a romper, ese chico la iba a romper.

- Jooo, ya veo... bueno, entonces... - no le gusto como sonó eso, no lo veía, pero sentía su mordaz sonrisa cargada de sorba hacia ella al verla tan reducida, era obvio que mentía, pero era demasiado orgullosa para admitirlo, así que solo le quedaba una opción, una muy placentera opción, continuar follandola hasta que admitiera la verdad o que se rompiera, lo que ocurriera primero.

Fue su gran error, negarse a admitir lo que al parecer era obvio y el castaño no estaba dispuesto a permitir que lo engañara, quería el control absoluto de ella, por eso ya que ella quería jugar rudo, entonces él jugaría rudo y con eso en mente, empezó a bombear sin piedad en el culo de la mujer que solo empezó a chillar ni bien sintió como ahora el chico la sodomizaba de manera brutal y sin contemplación.

- ¡No hay problema si lo hago de esta manera!, ¿¡verdad!? - le pregunto mientras no dejaba de profanar su culo, lo hacía tan rudo, con tal fuerza en sus embestidas, que podía escuchar el lascivo sonido que producía el choque entre la pelvis de su amante y sus gordas nalgas, las podía sentir temblar como gelatina transmitiendo en ondas el impacto entre ambos cuerpos, era simplemente demasiado para ella.

- ¡AUUUUGHLUUUNGH! - su dignidad se había acabado, ya ni siquiera podía articular palabra bien, ese chico estaba reclamando su culo como suyo y ella estaba disfrutando mucho de eso, su culo era sensible, su mayor punto débil, jamas se lo había entregado a nadie y ahora ese castaño estaba robando su primera vez anal y por la forma tan sucia, casi animal en la que la reclamaba, ella no podía dejar de correrse.

El chico estaba como poseído, el coño de Venelana era increíble, pero su culo lo estaba enloqueciendo, era estrecho, suave y firme, por no mencionar que tan caliente, sabía que se estaba pasando con ella con esa forma de tomarla, pero es que no podía detenerse ni ser mas delicado, quería poseerla completamente y doblegarla, su ego masculino le gritaba que hiciera a esa mujer admitir lo mucho que estaba disfrutando de esto.

- ¡NOOOO!, ¡Deja de perforar mi culoooo!, ¡pog favosh! - grito Venelana sintiendo que iba a morir por tanto correrse, era demasiado para ella, tal vez haya jugado antes con su puerta trasera por si misma, pero eso distaba mucho de lo que sentía ahora que un hombre reclamaba su culo, no soportaría mucho mas si el no se detenía.

- ¿¡Y por qué debería hacerlo!?, ¿¡dime Vene-chan, por qué!? - lo estaba disfrutado demasiado, verla reducida ante el, en este momento su lado mas sádico tenía el control total y maldecía a Akeno por eso, ella fue quien despertó ese lado de él y ahora no podía detenerlo, no hasta que ella se rindiera.

- ¡PORQUE ME VOY A COOOORREEEER! - no tenía caso tratar de negarlo, al menos en ese momento, tal vez si decía que se iba a correr, el la dejara en paz, rogaba porque fuera suficiente, las lagrimas que se formaban en la comisura de sus ojos debido a la sobrecarga de placer eran prueba de que estaba al borde del colapso, - ¡PORQUE TU ENORME POLLA ME HARÁ CORRER POR EL CULO! - grito finalmente mientras sentía el orgasmo cada vez mas cerca mientras la enhiesta barra de carne caliente no dejaba de sodomizarla en ningún momento, haciéndola gemir de manera constante.

- Ehhhh - lo escucho decir burlón como si le sorprendiera que cediera, pero al mismo tiempo como si no fuera suficiente, - entonces también te corriste hace rato, ¿verdad?, ¡se honesta, di la verdad o de lo contrario seguiré para siempre! - finalmente pregunto, al tiempo que amenazo dulcemente a la mujer que solo podía sentir placer y horror ante tan cruel y placentera amenaza, continuar para siempre siendo tomada por el ano por su joven amante, aunque sonaba delicioso no creía tener la fuerza para resistir tal asedio.

A este punto ya que importaba, es mas, su seguridad dependía de que fuera honesta, ademas, si era con el, no podía ser tan malo admitir lo mucho que disfrutaba del anal, ¿verdad?, entonces, antes de que considerara los pros y los contras, el chico de repente paso sus brazos por debajo de sus muslos y de un solo envión la levanto para esta vez quedar suspendida en el aire, sujeta de los muslos y con las manos de su amante aseguradas detrás de su cabeza en una variante mucho mas obscena de una llave Nelson.

En esa posición donde ella estaba tan indefensa en que quedo la castaña el chico arremetió con violencia una vez mas contra su desprotegido y obsceno culo, tan duro, tan fuerte, tan profundo, que cualquier posibilidad de que la madura mujer fuera a negar algo, cualquier atisbo de resistencia que aun quedara en ella se acabo, el quería que lo admitiera y por Dios, iba a admitir las cosas como eran de una vez por todas.

- ¡SIIIII!, ¡ME CORRÍ!, ¡ME CORRÍ IGUAL QUE UNA PUTA! - sintió al admitir aquello como se le desgarraba la garganta al gritarlo con tanto ímpetu y descaro, bueno, claro que no era lo único que se estaba desgarrando, pero eso era tema aparte, - ¡TU JUVENIL POLLA ME HIZO CORRER MILES DE VECES! - grito una vez mas mientras su rostro era un rictus de placer, había perdido la cuenta ya de cuantas veces se había corrido y no le importaba, su cuerpo se sentía muy bien, sus pechos se presionaban entre sus muslos y entre ellos, haciéndolos ver aun mas grandes y a ella mas obscena, mas porque pese a que había admitido aquello, el castaño parecía no tener intenciones de detenerse o de reducir la intensidad con la que le perforaba el culo.

Lo mas curioso es que ahora que lo había admitido, su cuerpo parecía querer mas de ese trato, esto debido a que sentía como de repente su culo se sentía mas abierto, mas dispuesto a aceptar la enorme tranca del castaño, como la devoraba con mas anhelo y facilidad, como la dejaba alcanzar mas y mas profundo dentro de sus intestinos y obviamente, como continuaba haciéndola correr por el culo con tan rudo trato.

- ¡Me sigo corriendo incluso ahora!, ¡todo porque no puedo resistir mientras me coges por el culo! - mientra parecía que a este punto no le importaba decir la verdad y en el proceso hablar sucio como incitándolo, el chico no la dejaba en paz ni a ella ni a su culo, penetrándola fuerte y profundo, haciendo que se corriera de nuevo una y otra vez, en este punto estaba rota y sin posibilidad de repararse, aunque no parecía ser algo que ninguno de los dos quisiera.

- Así que realmente te encanta el anal, ¿eh? - pregunto al verla tan deshecha luego de correrse tanto desde que empezara a jugar con su culo, era increíble en mas de una forma, pues jamas pensó que alguien pudiera disfrutar tanto de ser sodomizada y eso que ya había experimentado ese tipo de sexo con una masoquista como Akeno, - ¡me asegurare de recordarlo! - le prometió a la mujer mientras continuaba perforándola, ahora que sabía lo mucho que lo disfrutaba, entonces le iba a dar justo lo que quería.

- ¡UUHN!, ¡NOOO!, ¡ahora sabes mi sucio secreto! - dijo desesperada y avergonzada, se suponía que eso era algo que nadie debería saber y ahora el castaño era plenamente consciente de tal hecho, - ¡sabes que soy débil en mi culo! - sus ojos estaban volteados una vez mas, las lagrimas corrían y la saliva caía de su boca abierta y su lengua de fuera, estaba avergonzada, sin duda alguna, pero el placer podía mas y una parte muy pequeña de ella que estaba ganando fuerza, le decía, mas bien le gritaba que el que ese chico conociera su sucio secreto era algo bueno, ahora el podía encargarse de satisfacerla.

Solo entonces y luego de que la castaña estuviera siendo cargada en esa obscena llave con el castaño clavándose en su culo un buen rato, el chico finalmente la bajo y para dejarla en la cama de nuevo, en la posición de perrito con el castaño aun en lo profundo de su ano y listo para continuar, al parecer no se detendría hasta correrse.

- Ahora, sigamos adelante - si, como se lo imaginaba, el chico no se detendría, dudaba que pudiera con la polla tan dura como se la sentía sin que enloqueciera luego por no poder correrse el también, - voy a hacer que te corras por tu culo un poco mas, ¿esta bien? - le pregunto, era la primera muestra de consideración que le tenía desde que empezaran, era su oportunidad de poder detenerlo, de finalmente poder descansar.

- ¡SHÍÍÍÍ! - pero ya estaba rota, en este punto soportar un poco mas no haría una diferencia, ademas aunque no estuviera dispuesta a admitirlo, aun quería un poco mas, si, estaba dominada por un deseo masoquista de seguir siendo sodomizada por su amante, solo esperaba poder resistirlo.

Ni bien recibió la confirmación de parte de Venelana el chico volvió a penetrar con fuerza el culo de la mujer, no podía hacerlo de otra forma, esa mujer era demasiado erótica y le incitaba a follarla, a violarla incuso, hacer de ella su deposito personal para descargar todas sus frustraciones acumuladas en esa semana, sonaba mal, pero como se menciono antes, en este momento el chico estaba totalmente doblegado ante su lado mas sádico y su presa era la mujer a la que le perforaba el culo una vez mas bajo él.

- ¡AHAAHAAAH! - Venelana grito luego de un rato desde que el castaño le volviera a sodomizar, ese chico era increíble, un follador nato y ella ya no podía contra el, tal vez nunca pudo y lo estaba disfrutando mucho, - ¡ME ESTOY CORRIENDO POR MI PUTO CULO! - ya no podía dejar de hablar sucio, como si ese interruptor que le permitía ser recatada se hubiese apagado hace rato, cosa normal si consideraba que en ese momento su mayor prioridad era no desmayarse mientras el chico la tomaba.

En algún momento perdió la fuerza que le quedaba en los brazos, ya ni siquiera podía sostenerse, por lo cual la parte superior de su torso ahora estaba aplastada contra la cama, amortiguado sobre las enormes tetas que tenía que solo se movían al son de las estocadas del chico, cosa que estaba enloqueciendola por el roce que le representaba sobre los pezones.

- ¡UGHU! ¡mi mente explota cada vez que empujas dentro! - no mentía, cada profunda penetración hacía que viera fuegos artificiales, su mente estaba hecha puré y el chico estaba lejos de detenerse aun, - ¡TU POLLA NACIÓ PARA COGERSE MI CULO! - su declaración aunque obscena sentía que era la verdad, jamas había disfrutado tanto como con el, sentía que su cuerpo ya no podía vivir sin el y eso que era su primera experiencia juntos, que el existía para ser suyo y ella de él, lo sentía por Rias, de verdad lo hacía, pero tendría que matarla para que ella renunciara al castaño, no le importaba compartir, quizás era mejor si lo hacía, porque sola dudaba sobrevivir con ese semental a sus espaldas.

El chico no se detenía, por el contrario, las palabras de su MILF amante solo lo alentaban a continuar, escucharla hablar tan sucio, tan guarro, ver ese rostro tan diferente al siempre elegante y recatado que conocía, quería ver aun mas, por eso no podía parar, menos ahora que sentía que estaba finalmente cerca de correrse, algo que ella también noto cuando sintió hincharse la polla del castaño.

- ¡AAHH!, ¡ME ESTOY CORRIENDO!, ME ESTOY... - no podía ablar mas, estaba por correrse y quería aguantarlo, al menos hasta que el castaño en su culo se corriera también, pero era tan difícil, su cuerpo entero lo deseaba tanto, sus ojos hacía arriba, las lagrimas saliendo, la boca abierta y la lengua de fuera con la baba cayendo, "¡TU JOVEN POLLA ESTA HACIENDO QUE ME CORRA POR MI CULO, TAN DUUUUUROOOO!" grito en su mente incapaz de contenerse mas, enloquecería si no se corría ya mismo.

- ¡UGH! - por suerte no debió espera mas, pues en ese momento al parecer el chico también había alcanzado el límite de su resistencia y estaba listo para correrse, por eso lo sintió enterrarse hasta el fondo de sus para ese momento revueltas entrañas.

Un segundo después, sintió como la polla del castaño se hincho completamente y luego empezó a escupir en su interior chorro tras chorro de caliente y espeso semen, que junto al hecho de que en el momento en que sintió sus intestinos pintarse de blanco esperma por primera vez en su vida le acompañaba su propio orgasmo le estaba derritiendo el cerebro por la sobredosis de éxtasis sexual que sentía en ese instante.

- ¡HNNAAAHAAH! - gimió completamente de gusto ante la sensación, jamas había tenido un enema y que el primero de su vida se lo hicieran con semen, era una sensación a la que podría hacerse adicta con gusto, mas si era con el castaño que increíblemente para ser su tercer orgasmo, se estaba corriendo aun como un caballo llenandole los intestinos a tope, cosa que la estaba haciendo enloquecer.

Era una ocasión de primeras veces para ella, su primer anal, su primer enema de semen e increíblemente, su primer squirt, porque si, en esta ocasión su orgasmo era por dos, se estaba corriendo con su culo mientras era inseminado y se estaba orinando de placer con su coño, era mas de lo que podía soportar, de continuar con esto, no quedaría nada de ella.

Por suerte el castaño parecía estar satisfecho con eso, pues en cuanto se termino de correr, finalmente la soltó y ella cayó de inmediato totalmente rendida en la cama, ni siquiera le importaba que bajo ella ahora hubiera una obscena mezcla de fluidos entre los jugos de su coño luego de su squirt y el semen del castaño que ahora se filtraba de su culo abierto.

El castaño también se desplomo a su lado y por acto reflejo en cuanto lo sintió acostado, se encontró a si misma usando el pecho del castaño de almohada mientras lo abrazaba mimosa y era acariciada en la espalda por las manos gentiles del castaño que parecía haber vuelto a ser ese chico tierno y dulce que conocía.

Se quedaron dormidos así juntitos luego de entregarse el uno a la otra a la pasión, al verlos así, bien podrían pasar por una pareja feliz que acababa de compartir un momento romántico entre si, claro, si no fuera por el sucio aroma a sexo que impregnaba la habitación, el depravado e infiel acto de adulterio que acababan de cometer y el hecho de que aun en este momento, la castaña tenía el culo abierto, pero por lo demás, bien podían pasar una feliz pareja.

Dos horas después se despertaron y por suerte aun no volvía la peliplata a casa, por lo cual la mujer luego de un baño, se vistió y se preparo para irse, no sin antes despedirse con un caliente y obsceno beso francés de Issei y un guiño de su ojo que lo dejo sonrojado, aunque también le causaba gracia el ver el caminar de Venelana quien aun sentía débiles las piernas y no las podía cerrar del todo debido a la follada a su coño y el maltrato a su culo, aunque a ella parecía no importarle.

Salio de ahí, feliz y dichosa, satisfecha como nunca antes y con una sola cosa clara en su mente, no pensaba separarse del lado del castaño, aunque eso supusiera tener que quitárselo a su hija, aunque ya que el tenía una relación con dos chicas a la vez y ellas lo aceptaban, quizás una tercera no sería problema, aunque esa mujer fuera la madre de una de ellas.


- ¡Muy bien!, ¡hoy vamos a hacer pastel de queso chicas! - unos días después durante la reunión de su club, la castaña estaba particularmente activa en la cocina, yendo de aquí para allá atendiendo a las ordenes de Grayfia quien sería una vez mas quien liderará la sesión, aunque si le sorprendió ver el inusual ímpetu por aprender de la castaña en esta ocasión, - Por cierto, te veo con mucho mas interés en aprender nuevas recetas, Venelana - no pudo evitar hacer acotación a ese ímpetu que mostraba la castaña.

Y es que no solo era cosa de que Venelana se mostrara mas proactiva o receptiva en las lecciones, también era porque durante los días previos a su siguiente reunión, cosa que hace algún tiempo había pasado de ser semanal a mas de un día a la semana, la castaña había estado preguntando por cual sería la siguiente receta, proponiendo algunas ideas, se le veía bastante mas participativa de lo usual, ademas estaba ese brillo especial que tenía, se veía más hermosa de lo usual.

- ¿Tu crees? - pregunto como si no fuera la gran cosa la castaña, - bueno, es solo que, ¡creo que he desarrollado un enorme y profundo amor por las artes practicas! - lo dijo con una mano sobre su mejilla y un tono por demás meloso, casi enamoradizo mientras para ignorancia de las demás mujeres, por dentro el cuerpo de Venelana cimbraba de gusto, - hoy planeo trabajar duro y mucho en eso - lo ultimo lo dejó imperceptiblemente coqueta, eso con un único fin, dejarle claras sus intenciones al chico que pasaba tras ella en ese momento cargando algunos implementos para la receta del día.

Por su parte el chico ni bien la escucho decirlo y la manera en que lo dijo, se sonrojo furiosamente mientras su cuerpo se crispaba de inmediato y casi se atragantaba con su propia saliva, esa castaña estaba siendo demasiado directa, al menos así lo consideraba el, ademas de que le hizo recordar lo que hicieron ese día, sí, esa mujer era peligrosa, obscenamente peligrosa, su endurecida polla ante la perspectiva se lo decía.

- CONTINUARA -


Finalmente, inicia la locura de las MILF y como ven la primera en hacer su movimiento es Venelana, que es de armas tomar y decide mover ficha lo mas pronto posible, terminando todo como lo diría Homero Simpson, con resultados sexuales, espero que les haya gustado, tal vez un tanto guarro, bueno, muy guarro, especialmente por la parte del anal de Venelana, pero tengo dos motivos.

El primero es que inicialmente iba a hacer una historia mas como con Rias y Akeno, ya saben, mucho love y todo el cuento, pero luego me dije a mi mismo, que esta vez estamos hablando de una MILF, una mujer que de una u otra manera ya tiene carrera en el mundo del sexo y pues en base a eso, decidí que al final mejor plasmaría eso, una mujer madura que gusta mas del sexo cochino, algo así como una versión mas madura y desatada de Rias, por eso el comentario de Venelana sobre que ambas se parecen mas de lo que Issei cree, mas adelante se vera mejor esa parte, que como se vio en el capítulo, Venelana sabe mas de lo que parece sobre la vida, especialmente la sexual, de su hija con su novio que ahora también quiere que sea su novio o cuando menos un amigo con derechos, con muchos derechos.

El segundo motivo es que cuando escribía esto, recordé que un seguidor me había pedido mucho una escena anal con Rias y siempre se la había quedado a deber, entonces, considere este el momento perfecto para hacerlo, tal vez no fue con Rias, pero dado el enorme parecido entre madre e hija que hay entre esas dos, es como hacer de cuenta que es Rias pero con mas edad, básicamente con la versión MILF de Rias, amigo, si estas leyendo esto, ojala lo hayas disfrutado y ya en otra ocasión te cumpliré como es debido, con una buena y bien merecida enculada para la sexy pelirroja.

Ademas como un extra, me base un poco en la actitud de Venelana en el volumen 10 cuando regaña a Rias para que avance en su relación y no se estanque, claro esta aquí la regaña igual, pero en lugar de hacerlo con ella, prefiere tomar el asunto en sus manos y ya que Rias se esta portando muy mojigata, ella dejar que el castaño haga con ella todo lo que quiere hacerle a Rias y no puede, al menos de momento, espero haya quedado bien.

Ahora solo queda saber que les pareció, les gusto, no les gusto, me sobrepase o estuvo muy acorde a la temática de las MILF, déjenmelo saber en los comentarios que es lo que mas me anima para seguir trayendo contenido para ustedes.

¿Quién creen que tendrá su turno ahora? porque aun faltan tres maduritas que probar y muchas posibles situaciones que explotar, que empiecen las apuestas, cual es la MILF por la que quieren hacer sus porras.

Por cierto y ya para terminar, mientras escribía esto, se me vino un manga H que leí hace mucho tiempo, del autor Nico Pun Nise, para los que quieran saber el nombre del manga, es "El diario de Purimu", me decidí a leerlo de nueva cuenta y se me ocurrió adaptarlo pero con los personajes de DxD, obviamente el prota sería Issei y desarrollar la historia que se cuenta ahí con ellos, que les parece la idea, si les gustaría tal adaptación.

Ahora si, sin mas que decir, pasamos a los reviews y nos leemos en el próximo capítulo.

Reviews:

Depositaire

No es la mejor pero no te preocupes, basta para entender, pero si hablas ingles no tengo problema, no soy un letrado en el idioma pero me defiendo.

A veces es un buen cambio de ritmo salir del contexto sobrenatural, por eso esta idea. Esa relación se tenía que asentar, claro que manteniendo en lo posible la esencia original de los personajes y luego si ar pie para lo que sigue, que sera toda una locura, como ya te habrás dado cuenta con este capítulo. A partir de aquí las cosas se empiezan a enfocar en y solo en, estar bellas MILF y como irán interactuando con Issei.

Sinceramente no me convence lo de poner a Vali, no tengo nada contra el personaje, pero no pinta en lo mas mínimo en esta historia. Muy cierto, no comparte su harem, nunca lo ha hecho y nunca lo hará, es un dragón, bueno en el canon, y su especie en ese sentido es muy posesiva. Ademas, bien lo dijiste, seria algo muy NTR y no es la idea.

Me alegra que te este gustando hasta ahora y espero que hayas disfrutado el capítulo.

nice

Era necesario, al menos para mi, primero sentar las bases con las dos novias, especialmente porque como se vio en el primer capítulo, esas dos parecen estar mas inmiscuidas en esto de lo que parece, pero, eso se vera mas adelante.

Lastimosamente como te das cuenta, la primera resulto ser Venelana, aunque considerando todo lo que paso, dudo que haya quejas sobre el orden, ahora hay que ver, quien es la que sigue, por cierto, eso de ser un MILF Hunter, funcionaría si Issei fuera mas del tipo casanova y no lo es, aunque es una idea interesante, seduce a la MILF y la convence de que le entregue a sus amigas también MILF, hmmm, posibilidades.

Magd305TLC

Lo siento, pero resulto ser Venelana la primera en mover ficha en esto, XD.

El puto amo

Quise hacerlo en un principio, pero un descontrol completo se me habría hecho muy largo y bueno, no me quiero gastar todas las ideas de un solo golpe, mas porque me reservaba la locura anal para Venelana, por cierto, ¿qué tal me quedo?

Sorry, pero la primera resulto ser Venelana, espero no te decepcione el orden.

Unos one-shots para MILFS de Konoha de la era de Naruto y no la bazofia de Boruto, hmmm, interesante, incluso podría incluir ahí a la Hinata MILF del final de shippuden, que considero la verdadera Hinata canon, no el desastre en el que la convirtieron en la supuesta secuela.

Tsunade, me encanta, Kushina, sería interesante, Kurenai es una diosa, Yoshino, hmmm, tendría que pensarlo, Mei suena genial, Hinata como ya dije, usaría la versión MILF que le dan al final del manga de shippuden, Ino, hmmm, otra para considerar.

Por cierto, si los hiciera, sería para con Naruto, no con el emo vengador sin propósito, solo para dejar claro eso y si sigues mi historia de "Los secretos del Hokage" sabrás que planeo otra historia para Naruto.

Sobr lo que olvidaste en el otro mensaje, considerando que la gran mayoría lo que se dedica es a escribir memes entre linea y linea para tratar de esconder las babosadas que escriben pues que esperabas de sus lemons o las historias en general, sobretodo en plagiopad, Dios, me duelen los ojos cada que creo que encuentro una joya y resulta que es una babosada mal escrita.

Fernando Murillo

Ya veo, bueno, suele pasar, sobre las personalidades, obviamente trato de mantenerlas en gran medida, como con Venelana que fuera de lo cachonda que se puso con Issei era como en el canon, seria, elegante pero sexy y con un aura madura, ademas de que se molesta con Rias por ir tan lento en su relación con Issei, claro en este caso su relación sexual, aunque al final como que le saco mucho jugo a ese detalle, pero volviendo al tema es cierto, ellas le tienen un apego increíble a el, Rias y Akeno digamos que son las mas adictas, la vida sin su amado se les hace vacía, por algo Rias prácticamente dejo de importarle todo cuando supuestamente muere y a Akeno la tenían que mantener vigilada para que no hiciera alguna locura presa del dolor, todas sienten apego por el, algunas mas que otras, como Xenovia que saco fuerzas luego de que Issei aceptara casarse con ella, pero a mi parecer las mas dependientes de el son Rias y Akeno, por cierto, que sepas que Akeno es mi chica favorita de DxD, supera por muy poco a Rias.

Pues igual que muchos, te equivocaste viejo, Venelana fue su primera MILF y mira nada mas hasta donde fue a parar la cosa, la locura MILF ya inicio, ahora ¿quien ha de ser la segunda en caer? porque Venelana ya cayo, bueno, mas bien la rompió hasta el punto de no tener arreglo.

Tengo el final planeado, obviamente estoy considerando de unos buenos oyakodon, aunque oyakodon con embarazadas, hmmm, me tientas, me tientas, sobre lo de irse a vivir a la tierra natal de Rias para que se pueda casar con todas sin que se vea mal, podría ser, de esa manera sera esposo de todas y tendrá una enorme y muy suculenta familia feliz, ya veremos, aun falta mucho para llegar a eso.

Gracias, me alegra que te guste el capítulo y sobre el capitulo final de Temporada de celo, sería mas bien una especie de especial, muchos años después, quien sabe, tal vez sea mi regalo de Navidad para aquellos que quieren ver ese tema cerrado con una Grayfia finalmente al lado de Issei, cosa que no se porque pero entre mas lo pienso, considero que sera lo que pasara a futuro, muy a futuro en el canon, si, a veces tiendo a divagar y pienso en muchas cosas basado en hechos, así es como termine por llegar a la realización que la pareja de Superman con Lois Lane no cuaja ni a patadas, lo prefiero con Wonder Woman, pero eso ya son gustos personales al final, supongo.

Zeldris995

Bueno, pues tendrás que esperar un poco mas, pero no comas ansias, la locura MILF ya empezó, así que no tardara mucho para que sea el turno de Yasaka.

zeta12345

Me alegra que te gustara este arco introductorio, espero que la historia central te guste igual, aunque claro, sera toda una locura con tanta MILF suelta.

Ignacio365

Bueno, eso es un nuevo récord, generalmente yo me demoro un día en leer actualizaciones, máximo dos, pero es entendible, cuantas tareas no están dejando ahora que no tienes que salir de casa.

No te equivocas, finalmente inicia la locura MILF y abre con paso firme, ¿a poco no?, Desgraciadamente eres otro que falla en acertar sobre la primera MILF en caer, sobre lo de mas MILF, aun lo estoy pensando, inicialmente pensaba que fuera una historia corta y ya siento que se me va a hacer larga, así que por ahora esta solo en consideración, Milsa sería interesante, Ladys Sitri y Phoenix, en el caso de la primera como que esa falta de información visual lo hace un tanto difícil, pero tienes razón, con una hija como Serafall, la madre debe ser un bombón certificado y Lady Phoenix, bueno ahora ya sabemos como sera Ravel cuando termine de madurar, carajo cuanta suerte tiene Issei, en cuanto a Serafall, si, es madura, pero a mi parecer es mas una Onee-san que una MILF, pero como dije, la inclusión de mas MILFs aun esta bajo estudio.

Suerte con eso de leerte un nuevo capítulo, solo esperemos no te tardes otro mes, XD.

Gracias, me alegra que te este gustando la historia.

Sobre el siguiente capítulo, pues te felicito, no creí que fueras a tardar tan poco, así que ignora el comentario de mas arriba.

Bueno, se conocen desde hace mucho y es obvio que han "experimentado", sobre que caigan juntas, mmm, ya veremos, aunque ya lo dijiste tu, es mejor cada una por separado, ademas Yasaka no es la única que no tiene muchos lemon con Issei, Shuri tampoco es que presente tanta variedad con el castaño.

Simplemente no me pude negar, es mi waifu de DxD y fue imaginármela en ese suéter y prácticamente las ideas volaron, estaba inspirado y allá abajo, bueno, ya te imaginaras, XD.

Bueno, son chicos que están descubriendo sus gustos en la cama y luego esta Akeno que es una pervertida cuando esta con Issei, nada mas recuerda cuando entra en esa guerra de disfraces morbosos con Rias, que en el anime no le hicieron justicia o cuando va y manosea a Rias de forma tan ero, Akeno da para mucho, en cuanto a tu preocupación, no problemo, el componente sobrenatural da para otros trucos ero, pero aun si son humanos normales, lo ero y morboso va a ser una constante, así que pierde cuidado y si, un monstruo enjaulado sera liberado por estas MILF y pagaran el precio por eso.

Al parecer nadie fue capaz de adivinar quien sería la primera en caer, generalmente dicen que es Yasaka o Grayfia, pobre Shuri, ¿acaso no merece que le hagan el delicioso versión cochina?

Gracias, espero que estés disfrutando la obra hasta este punto.

Ps: En mi caso suelen aparecer algunos que al parecer son de habla hispana y comentan, pero mira que me gusta esa idea, traducir mis historias al ingles, también serían una buena practica para mejorar mi dominio del idioma, lo pensare con mucho cuidado, puedes estar seguro de eso.

El angel de la oscuridad

Bueno, si me has seguido sabes que me gusta plasmar todo cuando pinto la parte de la experiencia sexual, no solo el mete saca, también la expresividad de cada una de las chicas, sobre la bisexualidad de Akeno, como te habrás dado cuenta, ella se masturba mucho pensando en las mujeres de su vida, Rias, Venelana, Yasaka, se imagina chupándoles las tetas y demás, crees que no pensó en su madre también, así de pervertida como es, raro no sería, estar rodeada de tetas en un periodo de su vida donde los hombres o le interesaban, como que le afecto y eso que para cuando creció ya sentía algo por Issei, aunque aun no se diera cuenta, su bisexualidad sera algo de mucho provecho mas adelante, por cierto, espero disfrutaras de este capítulo lleno de perversión hacia una MILF tan recatada como Venelana.

Spectrvs

Como te trata la vida amigo.

Me alegra que te gustara como quedo la introducción de lo que se vendría luego. Eso lo trabaje desde el punto de vista de las personalidades originales de Rias y Akeno, Rias mas recatada y romántica, Akeno mas ansiosa de un momento de sexo puro y duro mientras su novio la corrompe, domina y reclama, por eso la enorme diferencia entre ambos actos.

Se me ocurrió mientras iba desarrollando el capítulo, una relación mas interesante creería yo y que la involucra de alguna manera con Akeno y que la encamina hacia lo que sigue supongo. ¿Yasaka?, pues ya ves como de loco se va a poner gracias a lo que paso con Venelana, ¿qué crees que puede esperarle a la rubia cuando sea su turno?

Sip, ellas salen de la ecuación ocho semanas para dar espació a que pase lo que tenga que pasar, aunque como viste, Akeno se le va a hacer una tortura todo ese tiempo sin Issei, pero es necesario para que Issei se convierta en todo un chef que sabe manejar carnes magra y maduradas. Sobre si es una cosa o la otra, luego de ver lo que paso en este capítulo, tu dime, ¿cual de los dos es?

Exacto, de alguna manera acaban teniendo esas ideas para que a relación siempre sea sorprendente y en este caso, con una pervertida como Akeno la pregunta sería, ¿qué tipo de porno vieron?, yo digo que el mas hardcore con un amo y una perrita sumisa.

Aaaa, algo como los clásicos de los anime ecchi donde siempre hay un capítulo u ova con las chicas en la playa y trajes de baño súper reveladores, creo que ya te entiendo, solo que en este caso, hablas de una fiesta en las aguas termales.

La idea es que experimenten el sexo como pareja, no hay necesidad de ser vulgar para que la relación sea excitante, es lo que trato de plasmar, por lo que me alegra que pienses que lo estoy logrando y por supuesto, intentare continuar así.

Recibo gustoso ese abrazo y te mando uno igual, junto a mis mejores deseo para ti y los tuyos.