Clark estaba raro. Es decir...no estaba como el otro día. Lo miro de reojo mientras estoy sentado en mi silla de la mesa redonda del salón de la justicia, ir de aquí para allá, esperando a los demás miembros para empezar la reunión. Hace varios días que descodifiqué los datos de los servidores de Lex. El problema era más grande del que pensábamos...no sé cómo no lo he visto venir antes.
-Clark deja de dar vueltas. -Le digo cansado, empezando a marearme de tanto verlo andar.
-Eh. -Parece salir de su mente, mirándome. -Oh...perdón. -Va a su silla, al lado de la mía y se sienta.
-¿Te pasa algo? -Alzo una ceja mirándolo.
-No. ¿Por qué? -Me mira de reojo, no quiere cruzar miradas conmigo. A veces es tan obvio…
-Bueno. Me extraña mucho tu actitud. Hace tres días te faltó morderme y hoy ni siquiera me miras. -Le digo mirándolo fijamente, con el codo apoyado en la mesa, fulminándolo.
Clark alza la vista, mirándome.
-Claro que te miro. No me pasa nada, Bruce. -Sonríe...puedo notar la mentira en la comisura de sus labios. Mira a un lado, un claro signo de mentira.
-Podemos hablarlo antes o después de que los demás vengan. Te dejo elegir. -Asiento lentamente, cruzándome de brazos.
Clark traga saliva, sonriendo más. Suelta una pequeña risa leve.
-Que no me pasa nada, Bruce. De verdad. -Se vuelve a reír.
-...Cuando quieras decírmelo, estaré aquí, esperándote. -Suspiro y desvío mi mirada, preparando los archivos para mostrárselos a los demás, tecleando en el ordenador en silencio.
-Pero Bruce… -Se muerde el labio, mirando al techo. Luego me vuelve a mirar. -Estoy bien...fue el otro día cuando estaba raro. Pero ya está todo solucionado. -
-Vale, cambiaré mi pregunta entonces. -Lo vuelvo a mirar. -¿Qué te ha hecho estar "bien" otra vez? -Pongo las comillas en bien, alzando los brazos y doblando los dedos de las comillas, dejando claro que no me lo creo.
-Pues...bueno, he comprendido que eres mi amigo y...estoy bien contigo. Te aprecio. -Se intenta explicar, haciendo demasiadas pausas.
-...¿Es eso lo que querías de mi el otro día? ¿Apreciarme? -Alzo una ceja, escéptico.
Él se sonroja y arruga la cara.
-El otro día fue un malentendido, Bruce...Olvídalo, por favor. -Me pide agachando la cabeza.
-Difícil...hiciste de aquella experiencia algo inolvidable. -No lo digo en el buen sentido, ni mucho menos. -¿Tú lo olvidarías si yo te hubiera hecho lo mismo a ti? -
A Clark se le escapa una risa lenta y divertida y su sonrojo vuelve.
-No, claro que no… -Niega con la cabeza imaginándoselo.
Me sonrojo levemente bajo la capucha y miro la pantalla.
-Pues eso. Que no se vuelva a repetir. -Finalizo, deslizando mis dedos por el teclado ágilmente.
-No no… -Niega con la cabeza. Está unos segundos callados y luego alza la vista hasta mis manos. -Bruce...¿el otro día…te hice daño? -Me pregunta con miedo en la voz.
-...No fue daño exactamente lo que me hiciste. -Aclaro, alzando una ceja. -¿Eso crees? ¿Crees que me hiciste daño? ¿Por eso ya no estás...así? -Lo miro de reojo, parando de escribir.
Clark me mira, callado por unos segundos.
-No...no lo se...por eso te pregunto. No quiero hacerte daño, Bruce. -Niega con la cabeza, frunciendo el ceño.
-Ya te dije que no me hiciste daño. Sé que no quieres hacerme daño...no es eso lo que hiciste. -Niego también, volviendo mi atención al teclado.
-Y...¿qué te hice? -Me pregunta inocente. Sé por sus ojos que de verdad no sabe lo que me hizo, llegado a este punto. Lo que verdaderamente me hizo sentir. Cómo me hizo sentir.
Lo miro deprisa, frunciendo el ceño. Cabreado porque no lo sepa todavía.
-¡Me pusiste…! -Pero me callo. Me callo en cuanto oigo cómo llegan los demás. Los miro y los saludo por encima, luego sigo tecleando en silencio.
Clark me mira con los ojos muy abiertos, ahora le urge mi respuesta y va a reventar si no la sabe ya.
-¿Qué ibas a decir? ¿Te puse cómo…? -Me susurra. Le doy una patada debajo de la mesa, fuerte, rápida; mandándolo callar. -¡Ay! -Se queja, frunciendo el ceño. No le ha dolido, solo lo he asustado.
Todos lo miran, sobresaltados.
-¿Estás bien, Clark? -Le pregunta Diana, apoyando una mano sobre su hombro.
-Eh...sí, sí. Tranquila… -Se ríe nervioso mirándola.
-Vaya susto nos has dado, tío. -Le dice Flash, sonriendo mientras se sientan en la mesa con nosotros.
-Hoy está muy raro, no le hagáis caso. -Les digo sin mirarlos. Noto la mirada de Clark sobre mí, frunciendo el ceño.
J'onn nos mira curioso, primero a uno y luego a otro. Luego achica los ojos y desvía la mirada. Más le vale que no esté leyéndonos las ondas cerebrales...mi cerebro no es un buen lugar para estar. Ni ahora ni nunca.
-Como os dije, ya he descifrado la información de Luthor. Y menos mal, en cuanto descubrió que habíamos recuperado la caja madre, borró todos los archivos comprometedores. -Les explico proyectando dichos archivos.
-¿Entonces qué? ¿Luthor vuelve a ser de los malos? -Pregunta Victor, alzando una ceja.
-No exactamente. -Contesto, buscando el archivo en cuestión.
-...Eso no puede ser, Batman. O se es bueno o se es malo. -Se encoge de hombros Barry.
Pulso el intro, proyectando la imagen de Amanda Waller y un informe donde se detalla qué, cómo y cuándo tenía que hacer Luthor para ella.
-Lex trabajaba para Waller. Waller pertenece al ejército...así que...no es del todo ilegal. -
-Discrepo en eso, Batman… -Opina Diana, frunciendo el ceño. -Waller es la mujer más cruel y sin corazón que he visto nunca. Y conozco a Ares. -Recalca, cruzándose de brazos.
-¿Y ahora qué? ¿Empezamos una guerra con Waller y su escuadrón? -Pregunta Superman.
-No. El escuadrón suicida hace meses que se disolvió, casi todos sus integrantes están presos en diferentes instituciones, Waller ya no tiene poder sobre ellos. -Clarifico yo, proyectando más informes que ratifican esto.
-Así que se ha buscado otro nuevo escuadrón… -Dice Diana, achicando los ojos mientras lee los archivos.
-Sí. Eso me temo. Sabemos otro miembro de ese nuevo escuadrón como tú dices, Diana… -Suspiro y proyecto una foto de Catwoman. -Selina Kyle. -Digo a mi pesar. -Se introdujo hace casi una semana en la mansión Wayne, no sabemos qué buscaba, pero seguro que algún aparato para abrir la caja madre que supondría, tendría yo en la batcueva. -
-Así fue como burlaron nuestros sistemas de seguridad...Si juntamos la tecnología de Luthor con las tácticas de sigilo de la Señorita Kyle… -Dice J'onn, uniendo hilos.
-Tenemos al ladrón perfecto. -Digo yo, asintiendo.
-Ahora solo nos falta saber para qué quería Waller la caja madre. -Dice Superman, meditándolo.
-A saber. La caja madre tiene infinidad de usos. Ni siquiera yo sé todos ellos. -Asiente Cyborg.
-Lo importante es que la caja es nuestra otra vez. Y ahora que sabemos que Waller va tras la caja, triplicaremos las medidas de seguridad. Mientras, trataremos de averiguar qué pretendía Waller. -Contesto a Cyborg.
-Sí, menos mal que recuperasteis la caja… -Suspira aliviado Barry. -Le diré a Hal que intente averiguar algo. Creo que esta semana se pasaba por este lado del sector. -Dice pensativo.
-Pregúntale, sí. Yo le diré a Batgirl si puede sacar algo de información de los servidores de Waller. Aunque nos llevará tiempo. -Digo asintiendo.
-Mientras Diana y yo podemos trabajar en multiplicar las defensas del salón de artilugios donde está la caja. -Dice J'onn, mirando a Diana, que le sonríe en señal de aprobación.
-Os ayudaré. He estado trabajando en un nuevo corta fuegos. -Les dice Cyborg animado.
-Bien. Pues si todos tenemos una tarea asignada, doy por concluida la reunión. Gracias por venir. -Informo, levantándome de mi silla.
Los demás me imitan y se van directos a sus tareas asignadas.
Excepto alguien que no tiene una tarea. Ando hacia el teletransportador, intentando esquivar su mirada de urgencia.
Me agarra de la mano antes de llegar. Cierro los ojos unos momentos y suspiro profundamente. Estúpido por mi parte pensar que sería más rápido que Superman. Luego pongo los ojos en blanco.
-Termina la frase...por favor. -
-No me acuerdo de cómo empezaba la frase. -Me encojo de hombros, girándome para mirarlo. Es cierto que no me acuerdo.
-Me has gritado que "te puse"…y luego te has callado. -Claro que se acuerda.
Ahogo un gruñido y arrugo la cara, incómodo.
-Me pusiste en un compromiso. -Le digo asintiendo, sin darle mucha importancia. Ya ni recuerdo lo que en verdad quería decir.
-Oh. -Clark me suelta después de escucharlo. -Entiendo...claro. ¿Qué otra cosa podía ser? -Pregunta para sí mismo, riéndose sonrojado, nervioso.
-Claro. -Vuelvo a asentir. -Adiós, Clark. -Me giro y me voy.
-A...adiós. -Se despide entre cortado.
Las reuniones con Lex siempre son aburridas. Pero dada la situación peliaguda en el que está y la poca información que tenemos de los detalles de ese pacto entre él y Waller, debo hacerlo. Además, me ha invitado a cenar y...no puedo decir que no después de que me ayudara a formar Arkham y esta funcionara tan bien.
Sonrío y levanto la copa con él.
-Un brindis, por el mejor pacto del universo entre dos hombres fuertes y poderosos. -Me dice, chocando su copa con la mía, brindando conmigo. Después bebe de su copa.
Bebo un sorbo de ella, dejándola en la mesa. Este vino está realmente bueno...Miro la botella para comprobar que es un tinto reserva de la bodega de Luthor.
-Es un muy buen vino. -Asiento, cortando el filete y metiéndomelo en la boca.
Luthor me sonríe complacido, abriendo su cigala con las manos.
-Oh, lo sé. Lo he sacado especialmente para ti. Para que te desintoxiques de Jack. Debes estar harto. -Arruga la cara al recordarlo.
-No te creas, se ha vuelto muy amable...Además, no lo puedo dejar en la calle. Es temporal hasta que encuentre una casa. -
-Me ha impresionado que no te lo trajeras contigo. -Comenta mirando alrededor.
El restaurante está casi vacío, lo ha reservado para nosotros.
-Bueno, íbamos a hablar de negocios, ¿no? -Pongo una de mis mejores sonrisas falsas. -Como has dicho...es cosa de hombres poderosos. Todavía no está preparado para...estos encuentros. -
-Bien dicho, Wayne. -Me sonríe, riéndose animado. -¿Sabes? Cuando llegué aquí no me caías bien...pero poco a poco me has ido gustando. Eres de fiar. Y parece que mantienes a raya a los bichos raros. -Yo arrugo la cara, confuso. -Oh, ya sabes. Súper fraude y el murciélago con su tropa de amigos. Los odio. -
-A mi mientras dejen a mi empresa y negocios en paz… -Me río levemente y Lex sonríe, dándome la razón.
El camarero nos trae el postre, una tarta de queso. Miro como coloca el plato frente a mí. Frunzo el ceño. Me siento...débil. Mareado. Raro.
-...¿No comes, Wayne? -Me pregunta Lex, metiéndose un trozo de tarta en la boca mientras me mira.
-...Sí. -Asiento, cogiendo la cuchara y metiéndome un trozo en la boca también. No quiero comer realmente...pero...no pasará nada si le hago caso.
-¿Te gusta la tarta a que sí? -Sonríe divertido.
Alzo los ojos hasta sus labios...está feliz.
Y yo...estoy mal. Estoy mareado...eso ya lo he dicho.
-Me gusta la tarta. -Asiento, tragándome el trozo de la boca y cogiendo otro.
Oh no...oh no no…
Estoy drogado.
Me han drogado. Luthor me ha drogado. No sé con qué, ni qué dosis tengo ahora mismo en el cuerpo, pero me ha bloqueado la voluntad propia y el razonamiento.
Debería seguir comiendo tarta...pienso metiéndome otro trozo.
¡No, Bruce! Deja de comer y piensa. Peleo conmigo mismo, frunciendo el ceño.
-Te gusta más la tarta de zanahoria. Pero al chef solo le quedaba de queso. Ahora te gusta más la tarta de queso. -Asiente mirándome. Él ya no come tarta.
-La tarta de queso es mi favorita… -Digo mirando mi plato, sonrío levemente.
¡Bruce reacciona! ¡Llama a la liga! ¡Pide ayuda antes de que sea demasiado tarde! Trago saliva, el terror empieza a apoderarse de mí.
¡No, no te pongas nervioso! ¡Tu presión arterial subirá y harás correr la droga más rápido!
Luthor se levanta y anda hasta ponerse de pie a mi lado. Me levanto despacio, sonriendo como puedo.
-Creo que es hora de irme...me ha gustado esto, gracias por invitarme. -Le digo cortésmente.
-Oh no, tú no te vas, Bruce. Siéntate. -Me ordena, frunciendo el ceño.
Debería quedarme, sí. Me siento y lo miro con los ojos entornados.
-Muy bien...así me gusta. Que me hagas caso. -
-Claro, te haré caso. Me gusta hacerte caso. -Asiento y sonrío débilmente.
¿Me gusta hacerle caso?...¿desde cuándo? Si hago caso a Lex...significará que confío en él.
Estoy bien. No hace falta que llame a la liga.
¡No Bruce, no!
-Lo sé. -Me dice apoyando las manos en mis hombros, dándome un pequeño masaje. -¿Sabes? Hacía mucho que deseaba tenerte así. Por fin podremos hablar sin máscaras por delante. -Me susurra en el oído, en un tono serio.
-Claro. -Asiento, totalmente de acuerdo.
Se prometió no hacerlo de nuevo. Se prometió dejar de espiar a Bruce...pero no podía. Era imposible.
Así que allá que fue. Después de que Lois se quedara dormida, salió por la ventana con el traje de Superman a buscarlo. Seguramente estaba con Jack en la piscina o...en la cama. O saliendo a cenar por ahí.
Sus cejas se alzaron impresionadas, sin embargo. No estaba con él. De hecho, estaba en Metrópolis. Muy alejado de Gotham. Alejado de él. Paró en seco en el aire, identificando lo que había alrededor de Bruce.
Luthor...Achicó los ojos. Bruce no le había dicho que iba a cenar con él. Aunque ya era tarde para seguir cenando. Debían estar hablando de algo de negocios...probablemente Bruce pensaba sacarle información usando su lado Wayne, reservando a Batman para luego.
Astuto como siempre. Sonrió y se dio la vuelta para irse a casa. Pero justo antes de iniciar el vuelo, sus oídos empezaron a concentrarse, y empezaron a oír la conversación que se estaba dando entre los dos.
-Sé que alguien ha hackeado mi red de información, Bruce...como sé que alguien me ha robado archivos...importantes. -Dijo Luthor.
-Oh, yo también sé eso, Luthor. -Respondió Bruce, sin apenas pensárselo.
...¿Qué estaba haciendo?
-¿Y también sabes que el hacker provenía de Gotham? -Preguntó Lex.
-Sí. Claro que lo sé. -Se encogió de hombros, como si fuera lo más obvio del mundo.
Bruce había perdido la cabeza.
Ese no era Bruce.
Frunció el ceño, entendiendo todo lo que pasaba. Salió volando como una bala hacia el restaurante y en apenas dos segundos, había acabado con todos los guardias y escoltas de Luthor. Entró en la sala como un toro, dispuesto a acabar con Lex.
Lex dio un salto, asustado y miró hacia atrás.
-¡Superman! -Le gritó, impresionado. -¡¿Qué haces aquí?! -Frunció el ceño, poniéndose delante de Bruce. -Es una reunión privada...¡largo! -Le exigió, haciéndole una seña con la mano para que se largara por donde había venido.
Pero Clark no tenía esa intención. Empezó a andar, a paso firme, frunciendo el ceño.
-¡Que te largues! -Le volvió a gritar. -¡No he cometido ningún delito! ¡Fuera! -
-Este hombre no está bien, Lex. -Le hizo saber, mirando a Bruce. Sus pupilas estaban dilatadas, y los miraba impasible, como esperando a que le dijeran lo que hacer.
-¿Cómo que no? -Alzó una ceja, mirando a Bruce. -¿A que estás bien? -
-Sí, estoy bien. -Respondió instantáneamente Bruce, sonriendo.
-No, no… -Se arrodilló, mirándolo. -Señor Wayne...le llevaré a casa. ¿Quiere irse a casa? -Le preguntó amablemente, arrugando la cara, muy preocupado.
-...Sí, me quiero ir a casa. -Volvió a sonreír. Parecía que estaba conforme con cualquier cosa.
-¡No, no te quieres ir a casa, aún no he terminado contigo! -Gritó Lex, exasperado porque veía su plan fracasar poco a poco.
-Sí has terminado, Lex. -Sentenció Superman, juntando su cara con la de él. Lex retrocedió, tragando saliva. -Me voy a llevar al Señor Wayne...Y luego voy a avisar a la policía de esto. -Le avisó, amenazándolo.
-...Avisa a quien quieras. Me da igual. -Contestó mirándolo a los ojos.
-Señor Wayne, nos vamos. -Miró a Bruce.
-Vale. -Contestó este, levantándose. -Adiós, Lex...Me ha gustado la tarta. -Repitió, sonriendo, antes de que Clark lo cogiera en brazos.
Lex lo miró de reojo, luego resopló enfadado, sentándose en la silla.
-Imbéciles… -Fue lo último que dijo antes de que Superman se llevara a su chivato personal. No le había dado tiempo a que le confesara nada. Gritó exasperado cuando se vio solo.
-Bruce, ¿estás bien? -Le preguntó mientras volaban, en un tono calmado, mientras lo miraba con pena.
-Estoy muy bien, Clark. -Sonrió calmado, disfrutando de la brisa en la cara.
-...Lo dices porque estás drogado, ¿verdad? -Arrugó la cara. Bruce nunca pondría esa cara. No con él.
-Estoy drogado, sí. -Asintió, dándole la razón como a los tontos.
Clark suspiró cansado. Bruce apoyó su cabeza en el pecho de él, mirando de reojo la ciudad a sus pies. Superman se sonrojó levemente...Bruce nunca habría hecho esto en su sano juicio...pero se sentía como nunca que lo hiciera.
-¿Estás cómodo, Bruce? -Preguntó ilusionado por ver a su amigo tan feliz, aunque fuera sintético.
-Estoy muy cómodo contigo, Clark. -Bruce restregó la cabeza y la mejilla contra él.
Clark se sonrojó más cuando la nariz de Bruce rozó su cuello.
-Podría dormirme aquí… -Confesó Bruce, estando como en una nube, entre el colocón y la sensación de volar.
-¡No, no te duermas! -Gritó Clark asustado, por si acaso perdía el conocimiento. No sabía cuantos gramos tenía en el cuerpo.
-No me voy a dormir, Clark. No lo haré. -Contestó enseguida Bruce, ligeramente asustado, separando su cabeza del pecho de Clark.
-Vale...vuelve a...juntarte si quieres. -Dejó caer, sonriendo.
Bruce volvió a apoyar la cabeza, sin rechistar. Rezó internamente para que Bruce no recordara nada de todo esto, porque como lo hiciera lo mataría de verdad.
-...¿Te caigo bien, Bruce? -Le preguntó entonces.
-Sí. Me caes muy bien, Clark. -Bruce entornó los ojos, mirando la S del pecho de él. Apoyó una de sus manos en ella, delineándola con el dedo.
Superman arrugó la cara, sonrojado. Miró hacia abajo para ver lo que hacía su amigo.
-¿Te gusta mi S? -
-Sí...es bonita. Tiene muchas curvas...estoy mareado. -Confesó entonces, dejando caer la cabeza en el antebrazo de él. Entre abrió los ojos, mirando a Clark a la cara. Sonrió tranquilo.
Clark tragó saliva, mirándolo.
-¿Por qué me miras? -Le preguntó curioso.
-...Tú siempre me miras a mí… -Se encogió de hombros. -¿Por qué me miras tú a mí? -Frunció el ceño. -Deja de mirarme el culo si no me lo vas a tocar como es debido. -Soltó entonces, apoyando el dedo índice en la mejilla de él, clavándoselo un poco, haciendo que Clark se desestabilizase durante un momento y se sonrojara del todo.
-Bruce… -Le regañó levemente, aunque no tenía razones para hacerlo. -...Te miro porque me gusta mirarte...eres bello. -Confesó sin mirarlo. -Es un placer mirarte. -
Bruce sonrió divertido. Luego movió su dedo de la mejilla de él a su boca. Clark abrió los ojos sorprendido. Bruce empezó a delinearle el labio inferior con el pulgar, luego se lo introdujo poco a poco. Superman paró en seco, embobado con lo que estaba haciéndole su amigo. Recorrió su dedo con la lengua, chupándolo y succionándolo.
Bruce descompuso la cara en...placer. Le estaba gustando. Se sonrojó levemente, empujando más su dedo hacia esa cueva húmeda y caliente que era la boca de Clark.
-Ah… -Bruce suspiró, emitiendo un gemido contenido. Tragó saliva y miró a Clark a los ojos, sonriendo después. Volvió a gemir, arrugando la cara. -Clark… -Dijo su nombre, mordiéndose el labio.
Bruce estaba sudando, podía notarlo en su camisa, antes ligeramente holgada y ahora pegada a sus pectorales y musculatura por el sudor y la excitación. Clark abrió la boca sorprendido, soltando su dedo, maravillándose con la vista. Un hilo de saliva conectó el dedo de su amigo con su lengua un momento, luego se rompió.
-Bruce… -Lo llamó, arrugando la cara, excitado igual o más que el otro día. -Te necesito… -Le suplicó, susurrándole. Acercando la boca a su oído.
La única respuesta de su amigo fue un jadeo quejoso. Bruce se revolvió, pasando una mano por el cuello de Clark y enredando los dedos en su pelo, tirando levemente hacia atrás, separándolo de su oreja.
-Bruce… -Lo volvió a llamar, sujetándolo más posesivamente, juntándolo a él. Le mordió la oreja, lamiéndosela lentamente después.
-Clark… -Contestó en respuesta, con un escalofrío recorriéndole la espalda. Respiraba de forma pesada, tenía calor.
Se llevó una mano a los botones de la camisa y se desabrochó unos cuantos, o creía que se ahogaría. Bruce se quejó audiblemente, llevando su mano libre a sus pantalones, donde había un bulto notable.
Clark lo miró impresionado, sonrojado y nervioso. Le beso la frente mientras le susurró lo siguiente.
-¿Quieres alivio?… -Le preguntó suavemente.
Bruce asintió deprisa, con urgencia.
-Sí...lo necesito. -Esa fue su palabra. No quería, lo necesitaba.
-¿Qué necesitas, Bruce? -Le preguntó, besándole la sien, le encantaba oler su colonia. Olía a Bruce.
-Lo necesito… -Repitió, frotándose los pantalones con la mano, cada vez más desesperado. Casi berreaba por alcanzar ese alivio que necesitaba.
A Clark le estaba encantando esta vista. Bruce desesperado por la atención que requería. Totalmente indefenso, pidiendo ayuda. Y él cogiéndolo en brazos, acunándolo. Solo en sus brazos. Solo lo tenía a él ahora mismo.
Bruce echó la cabeza para atrás, berreando esta vez, revolviéndose más y más en los brazos de alguien que no le estaba dando lo que realmente quería. Clark volvió a morderle el lóbulo de la oreja, oyendo cómo Bruce jadeaba de nuevo y ahogaba varios gemidos.
-No sé lo que necesitas, Bruce… -Negó con la cabeza. Se martirizó mentalmente...estaba disfrutando cada momento de la tortura a la que estaba sentenciando a Bruce.
Bruce gimió ante la respuesta, acabó por desabrocharse todos los botones, casi haciéndolos saltar por tirarse de la camisa.
"Dilo, Bruce...Di que me necesitas", pensó para sí, casi más desesperado que Bruce.
-Lo necesito...A Jack. -Dijo al fin, cuando consiguió reunir un pensamiento propio en su mente.
Entonces, Bruce coló una de las manos por su propio pantalón. Si Clark no sabía lo que necesitaba, se lo daría él mismo. Clark abrió los ojos desorbitados, agarrando la muñeca de Bruce, parándolo inmediatamente. Bruce lo miró ferozmente, frunciendo el ceño.
-Déjame… -Exigió. Luego relajó el rostro, cansado. -Déjame… -Repitió mucho más suave.
-Sí...te...te dejaré. -Asintió deprisa.
El timbre sonó esa noche en la mansión Wayne. Era raro, Bruce casi nunca llamaba al timbre, por no decir nunca. Y solo podía ser él a esas horas. Al parecer la cena con Lex se había alargado demasiado...no había contestado ninguno de sus mensajes, sin embargo.
Jack abrió la puerta, con el pijama puesto y una mueca de resignación.
Esperaba encontrarse a Bruce. Ligeramente borracho, disculpándose, lo normal…
Lo que no esperaba, para nada, fue encontrárselo en ese estado. Daba las gracias de que el que había abierto la puerta fuera él y no Alfred.
Bruce estaba despeinado, demasiado. La camisa, desabotonada, le caía por un hombro...y estaba claro que esa cara de excitación y ese bulto en los pantalones no estaban ahí cuando le había dicho adiós esa tarde.
-Bru… -Fue a hablarle, pero Bruce se le tiró encima, tirándolo al suelo con el hombre sobre él. Lo empezó a besar salvajemente, sin ni siquiera decirle "hola". -Bruce… -Intentó hablar con él, pero cada vez que abría la boca, esta era invadida por la lengua de él. -¡Bruce! -Gritó indignado, sin verle explicación a toda esta situación.
Solo cuando este oyó su nombre, paró. Respiraba deprisa, demasiado deprisa. Tenía las pupilas muy dilatadas y la boca ligeramente abierta mientras lo miraba, paciente.
-...¿Qué te pasa? ¿Dónde está tu coche?… -Preguntó mirando hacia afuera. -¿Qué ha pasado con Luthor? -Arrugó la cara, nada tenía sentido.
-No me pasa nada...estoy feliz de verte. -Arrugó la cara, mordiéndose el labio, empezó a mover las caderas, restregándose contra él. -Me ha dado tarta...me gusta la tarta de Lex. -Asintió sonriendo. -Me gustas tú también… -Dijo entonces, besándole el cuello y mordiéndole de vez en cuando.
-¿Que te ha dado tar…? -Alzó una ceja. ¿Tarta era una nueva de llamar a las drogas? Porque Bruce estaba claramente perjudicado. Se sonrojo al oír eso último, tan sincero… -Oh, tú también me gustas...pero esto no es normal, Bruce...Cálmate. -Le pidió.
-¡No! -Le gritó, mirándolo. Jack dio un saltito, sorprendido. -Lo necesito… -Pidió arrugando la cara. -Lo necesito tanto… -Asintió, suplicante.
-¿El qué? -Jack alzó una ceja.
Bruce cogió la mano del que él sabía que solo podía necesitar. Aquel que podía complacerlo, y la apoyó en su entrepierna abultada. Jack se sonrojó más.
-Bien. -Dijo después. -Pues vamos a la habitación. Aquí no podemos. -Le explicó, había tratado antes con gente drogada. Salió de debajo de Bruce y se levantó. Le dio la mano y Bruce la cogió, levantándose.
-No, aquí no. Vamos a la habitación. -Asintió, siguiéndole sin rechistar.
Bruce se retorcía, gemía y jadeaba como un animal. Como nunca lo había hecho. Por su frente bajaban gotas de sudor y sus ojos estaban entornados.
Jack siguió subiendo y bajando la mano sobre el miembro de él, mirándolo fijamente. Tampoco se podía quejar de las vistas que tenía.
-Jack… -Empezó a decir su nombre, entre gemidos. Lo miró y entornó los ojos, arrugando la cara, acariciando el orgasmo.
-Hazlo, Bruce. -Le susurró al lado de su oído, observando cómo se movía su propia mano, tumbado al lado de Bruce. -Hazlo para mí...Tú puedes. -Le animó, besándolo después.
-Mh… -Bruce emitió un gruñido gutural, clavando las uñas en las sábanas. Se separó de la boca de Jack cuando el ansiado clímax llegó por fin y puso los ojos en blanco, gritando el nombre de su compañero. Varios disparos de la semilla de Bruce cubrieron las sábanas y el vientre de este, además de la mano de Jack.
Este le besó la frente y Bruce buscó sus labios, para besarle ansiosamente. Infinitamente agradecido. Había sido su mejor orgasmo hasta la fecha. Glorioso. No había más formas de describirlo.
-Te quiero… -Le dijo susurrando, mirándole a los ojos.
-Yo también te quiero, Bats… -Le contestó Jack, sonriéndole. -No sabes cuanto. -
Bruce sonrió débilmente, recuperándose de la montaña rusa de la que se acababa de bajar. Desvió la mirada y suspiró profundamente. Apoyó la cabeza en la almohada y, segundos después, Jack lo descubrió roncando.
Se había quedado dormido.
Abro los ojos de golpe, sentándome. El corazón me va a mil y respiro como un conejo asustado. Miro alrededor para identificar dónde estoy. No recuerdo nada...¿qué ha pasado?
...Estoy en casa. Arrugo la cara. No recuerdo haber conducido de vuelta. Miro a mi lado, no hay nadie...pero había. Por favor que haya dormido con Jack…
Intento hacer memoria de la noche anterior.
Lex me invitó a cenar...y cenamos. Su vino estaba muy rico...y su tarta. ¿Por qué solo me acuerdo de la tarta? Achico los ojos...el vino estaba adulterado. Me drogó. Pero...¿cómo he terminado aquí en casa? Estaba en Metrópolis. Espero no haber conducido, porque si no me acuerdo ni de lo que cenamos, no creo que estuviera como para coger el coche.
Arrugo la cara cuando un calambre de dolor llega hasta mi cabeza...y mi oreja. Me echo la mano a la oreja, pero la aparto en seguida...Tengo una herida. Cojo el móvil y lo uso de espejo para mirarme...esto son dientes. ¿Alguien me mordió? ¿Para qué me querría morder Lex?
A Jack no le gusta morderme...Miro el hueco vacío al otro lado de la cama, meditándolo. No, él no ha podido ser.
Resoplo, me va a estallar la cabeza. Tengo una resaca monumental entre el alcohol y las aparentes drogas. A saber cuánto me metió Luthor en el cuerpo. No sé qué querría sacar de mí drogándome, pero espero que no lo haya conseguido.
De pronto, la puerta se abre y Jack asoma la cabeza. Me sonríe cuando me ve despierto y pasa con una bandeja del desayuno.
-Buenos días, Bruce… -Me dice colocando la bandeja delante de mí.
Comida...lo último que quiero a estas horas. Arrugo la cara en desagrado y cojo las pastillas, tragándomelas sin agua ni nada.
-Hola...¿qué pasó ayer? -Le pregunto confundido.
Emite una pequeña risa, sentándose a mi lado. Empieza a darme un masaje en los hombros y me besa la mejilla. Ahora me acuerdo...Lex me dio un masaje y...luego...Frunzo el ceño, intentando acordarme.
-¿Qué no pasó ayer? -Me contesta con otra pregunta mientras me acaricia.
Lo miro confuso, sin decir nada.
-...No me acuerdo de nada. A partir de que el camarero trajera el postre… -Ladeo la cabeza, mirando a la nada, pensativo.
-Oh, no digas otra vez lo de la maldita tarta por favor. -Me gruñe, poniendo los ojos en blanco.
-La tarta estaba muy bien. -Asiento, sonriendo levemente.
-Lo dijiste ayer como cuatro veces. -Frunce el ceño, molesto. -...Pues mira, te haré un resumen. Viniste sobre las tres de la mañana, muy tarde a mi parecer. Pero eso no es lo que más me intriga. Lo que más me intriga es que te presentaste con la camisa a medio quitar, sudando a chorros y muy muuuy feliz… -Me dice sonriendo pícaro.
Me sonrojo levemente, arrugando la cara. ¿Por qué?
-¿Por qué? -Le pregunto mirándolo.
-Oh, no lo sé. Pero te me tiraste encima y casi me comes de verdad...nunca te había visto tan osado. No me malinterpretes me encantó. -Sonríe feliz, recordándolo. Luego deja de hacerlo. -Pero fue raro. Una cosa es que estuvieras drogado y otra que estuvieras...a tope. -Dice sonriéndome.
-...¿Mucho? -Hago la pregunta con miedo.
-Muchísimo. -Asiente despacio, besándome la mejilla. -Come algo. -
-No, tengo angustia...luego comeré. -Me acuerdo de mi oreja otra vez, porque me duele mucho. -...¿Me mordiste la oreja? -Le pregunto sonrojado.
-¿Eh? -Alza una ceja, giro la cabeza para que la vea y alza las cejas sorprendido. -No. Eso ya lo tendrías cuando viniste. Qué raro...parece que te ha sangrado y todo. Voy a por el kit para curártelo. -Asiente, levantándose para irse.
-No es nada… -Miento, pero no quiero que se vaya. Estoy un poco asustado con todo esto.
-...Voy a hablar del no elefante en la habitación. -Dice al fin Diana. -¿Dónde está Bruce? -Pregunta al resto del grupo. Sin sentarse en la mesa redonda de la sala principal de la Atalaya.
-La reunión era hace diez minutos...Batman no suele retrasarse tanto. -Contesta Barry mirando el reloj de la gran pantalla.
-Batman nunca se retrasa, punto. -Se ríe Víctor.
Superman arrugó la cara, preocupado.
Lo de ayer estuvo bien, estuvo malditamente genial. Algo que nunca olvidará...al contrario que Bruce, esperaba. De hecho, estuvo tan bien que, en cuanto llegó a casa de dejar a Bruce, despertó a Lois entre besos y tuvieron una de las mejores sesiones de sexo que él recuerda.
Pero hoy era hoy, todo eso había pasado, y ahora se tendría que enfrentar a las consecuencias.
-Superman. -Lo llamó J'onn, mirándolo. Este alzó la vista, sorprendido. -...Que si sabes algo de Batman. -Volvió a preguntar, frunciendo levemente el ceño.
-Oh...ayer Bruce tuvo una reunión con Lex Luthor. No nos dijo nada. -Empezó a decir. No daría muchos detalles, de lo de después, solo lo necesario.
-¡¿Qué?! -Gritó Diana desorbitando los ojos.
-¿Por qué nunca nos dice nada? -Se preguntó Flash, tapándose la cara.
-Porque es Batman. -Se encogió de hombros Cyborg, sin darle importancia.
-...Buen punto. -Asintió Flash.
-El caso es que...Luthor lo drogó e intentó sonsacarle información. -Las reacciones no tardaron en llegar, entre indignadas y enfadadas. -Lo paré a tiempo, chicos...saqué de allí a Bruce y lo llevé a casa. -Sonrió con autosuficiencia, sonrojándose levemente.
J'onn lo miró fijamente, analizándolo. Achicó los ojos sin llegar a creérselo.
El resto suspiraron, aliviados.
-Supongo que estará en su casa descansado. Era muy tarde cuando lo dejé en casa, más o menos las tres de la mañana. -Asintió Superman, bajando la mirada.
-Menos mal… -Flash estiró los brazos sobre la mesa, resoplando. -Maldito Lex...¿qué quería? -
-Oí que le preguntaba sobre el robo de archivos. Sabía que se había ejecutado desde Gotham. Supongo que quería saber si Bruce estaba detrás de esto. -Se encogió de hombros Superman. -Pero no os preocupéis, de verdad, Bruce está en casa y está bien. A Luthor no le dio tiempo a saber nada. Llegué a tiempo. -Sonrió victorioso entonces.
-Gracias, Clark. -Le dijo Diana sonriéndole.
-Para eso estamos, Diana. -Contestó radiante.
-...¿Y cómo supiste que Batman estaba con Luthor anoche? -Cuestionó J'onn.
Superman arrugó la cara, tragando saliva.
-Eh...pasaba por allí y los oí. Bruce sonaba raro al hablar, así que decidí pasarme para segurarme. -
-Si mis cálculos son correctos...Llegaste a la mansión Wayne a las tres...por lo que tardaste media hora en ir de Metrópolis a Gotham...¿Qué hacías a las dos y media de la madrugada sobrevolando Metrópolis? -Volvió a preguntar. Batman no era el único detective.
Superman se maldijo a sí mismo. No había tardado media hora, había tardado el doble porque Bruce...empezó a hacer cosas raras, cosas que le volvieron loco por otra parte pero...eso lo retrasó un poco.
-El crimen nunca descansa, J'onn. -Asintió Clark.
Todos menos el propio J'onn, sonrieron dándole la razón, este lo miró escéptico, dudando de sus palabras.
-¿Para qué iba a mentir sobre eso, J'onn? Además, Clark no miente. -Le defendió Barry, negando con la cabeza.
-...La sesión queda pospuesta a mañana, esperemos que Batman se haya recuperado ya. -Dijo entonces J'onn, dando por concluida la reunión.
Superman suspiró, tapándose la cara después. Había estado cerca, muy cerca…
-¿Qué haces? Llevas aquí desde esta mañana… -Dice Jack curioso, mirando lo que hago.
-Unos análisis… -Le comento secamente. Dejando un trozo de escayola en una placa. Luego empiezo a teclear deprisa.
-Parecen dientes… -Alza las cejas impresionado.
-Son dientes. -Asiento y deslizo los dedos por la pantalla del súper ordenador, cotejando los resultados.
-¿De quién? ¿Y de dónde? -Pregunta confuso.
-De quién no lo sé...pero lo sabré. Estos dientes son los que me mordieron la oreja. He sacado un molde y lo he reproducido. Voy a ver si tengo esta dentadura en mi base de datos. Nunca se sabe… -Le doy al inicio del escáner y revelado y me cruzo de brazos, viendo cómo avanza la barra del porcentaje analizado.
-Wow… -Comenta impresionado. -Siempre me han molado esas dotes de detective. -Sonríe y se ríe entre dientes. -Y mentiría si dijera que no me pone un poco...cachondo. -Me susurra al oído.
Me sonrojo y arrugo la cara, desviando la mirada.
-Alguien me mordió la oreja. No voy a dejar que se vaya de rositas. -Gruño levemente. -Batman también hizo este tipo de cosas con Joker… -Le digo en voz baja.
-Ya...una pena que nunca pudiera ver cómo seguías las pistas que te dejaba. -Resopla medio enfadado. -¿Cuánto va a tardar esto? -Pregunta impaciente.
-Debería de estar para después de comer. Depende del grado de fidelidad de la muestra… -Digo acercando la cara al trozo de escayola con forma de dientes. -Por la profundidad diría que es un grado más que fiable. Y por la herida también. -Gruño.
-¿Y si es Luthor? -Pregunta frunciendo el ceño.
-¿Para qué me iba a morder Luthor? -Lo miro confuso.
-¿Para qué te iría a morder nadie? -Se encoge de hombros.
-En algunas culturas un mordisco se considera posesión, marcar el territorio de alguien, la presa...Tiene muchos significados. -
Oigo como Jack se empieza a reír a carcajadas. Lo miro alzando una ceja.
-Es que...es que me ha hecho gracia que alguien más se piense que no eres mío. -Se limpia una lágrima que se le ha escapado de la risa y niega con la cabeza. -Qué gente más tonta… -
-No soy tuyo…no soy de nadie. -Frunzo el ceño.
-Qué mono eres, Bruce. -Me dice sonriendo. Luego me da un beso casto y empieza a andar hacia la salida. -Alfred nos llamará pronto a comer, deberíamos ir subiendo. -
Miro cómo se va y niego con la cabeza, sonrojándome levemente.
Para mi sorpresa, el ordenador emite un pitido aprobatorio. El escáner ha tardado mucho menos de lo que esperaba...sabía que la muestra era buena, pero no tanto. Y si ha dado positivo es que tengo esos dientes registrados en la base de datos.
Le doy al enter y la imagen que aparece en la pantalla, junto a su historial, me deja con la boca abierta...era lo último que me esperaba.
"Kal-El. Clark Kent. Superman". Leo el nombre completo cuatro veces, asegurándome.
Me toco la oreja y arrugo la cara. No sé qué sentir...confusión, miedo, vergüenza...enfado. Ira.
Frunzo el ceño y pongo el ordenador en suspensión, le echo un último vistazo al molde de escayola mientras subo las escaleras y gruño fuertemente al salir de al cueva.
Esta noche iremos a cazar súper hombres.
Las once menos veinte. El sujeto vuelve de acabar con los últimos improvistos y emergencias de la noche en Metrópolis. Vuelve tranquilamente, hablando con su mujer por teléfono. Le dice que en cinco minutos estará en casa. Discrepo. Cuando lo tengo justo debajo de mí, salto, con el pie por delante, dispuesto a darle una patada que le saque la mandíbula, aunque sé que no voy a poder.
Cuando se da cuenta, es demasiado tarde. Mi bota se estrella contra su barbilla y cae, estrellándose contra la azotea de un edificio. Justo como planee. Yo voy detrás, cayendo sobre él. Antes de que pueda reaccionar, lo sujeto de las muñecas, apretándolas contra el suelo, con una rodilla a cada lado de él. Inmovilizándolo todo lo que puedo.
Me mira y traga saliva cuando se estabiliza, reconociéndome. Su cara se pone blanca, pálido como el papel. Empieza a tartamudear sin saber qué decir. No me esperaba. Está inmóvil, como un palo, no se mueve ni un ápice. No se atreve. Sabe que sé algo.
Gruño cerca de su cara, totalmente cabreado.
-Clark… -Digo su nombre al fin y siento como tiembla debajo de mí.
-...Bruce… -Me contesta, tragando saliva de nuevo. -Estás mejor… -Asiente, sonriendo con miedo.
-Oh, y tanto que lo estoy. Eres tú el que no va a estar tan bien. -Lo amenazo, asintiendo.
-¿Por qué?...¿qué te he hecho?… -Pregunta arrugando la cara.
-Mi oreja. He analizado tus dientes en ella. Me mordiste. Ayer. No te hagas el tonto, Clark. No me lo voy a tragar. -Le aviso, girando la cabeza levemente.
Clark se sonroja, como un tomate. Y ahí está...lo único que necesitaba para saber si era verdad. Mi ordenador nunca falla, pero era difícil de creer. Aunque conforme está últimamente...
-Puedo explicarlo… -Me intenta decir, asintiendo deprisa. Le suelto una mano para coger algo de mi bolsillo. Sabe lo que hay en ese bolsillo...kryptonita. -¡Puedo explicarlo, puedo explicarlo espera espera espera! -Empieza a decir más deprisa, muerto de miedo, gritándome desesperado. Siento como se revuelve debajo de mí. Vuelvo a sujetarle la muñeca. -...Estabas drogado y...te llevé a casa...pero. -Se calla, desviando la mirada.
-Sigue. -Le incito, frunciendo el ceño.
-...Pero empezaste a hacer cosas raras...y...y yo te estaba mirando porque te tenía en brazos, no podías conducir y… -Habla deprisa, sonrojado, no se atreve a mirarme.
-¿Qué cosas raras? -Él me mira, muerto de vergüenza.
-...Estabas muy cariñoso...me acariciaste y...decías cosas bonitas...Y...no sé cómo acabaste...excitado… -Su voz se hace cada vez más pequeñita.
Me sonrojo debajo de la capucha. ¿Cómo voy a hacer yo eso?
-Yo también lo hice al verte así...¡pero fue sin querer! -Me dice desesperado, apartando la mirada. -Luego...te mordí. No sé por qué lo hice, solo lo hice...y ya. -Se encoge de hombros.
-¿Y cómo acabé en casa? -Pregunto entre dientes. Todavía no me lo creo del todo.
-...La cosa se me fue de las manos...tú...estabas desenfrenado. -Me sonrojo por el término. -Te...metiste la mano en los pantalones y yo… -Echo mano al bolsillo de nuevo, temiéndome lo que va a decir. Me mira con urgencia, sudando. -¡Yo te llevé a casa!...No podía...no podía verte así...no estaba bien. -Arruga la cara, totalmente sonrojado. Avergonzado. Casi tanto como yo. -Te dejé en la puerta y...y cuando Jack abrió y te metiste a casa, donde sabía que estarías seguro...me fui. -Termina diciendo, mirándome de reojo.
Me quedo callado, meditando si lo que me dice puede ser cierto...Sigo sin acordarme de nada.
-...¿Y por qué me mordiste? -Le pregunto entre dientes, acercando mi cara a la de él.
Me mira a los ojos, su respiración se corta y se queda callado. Totalmente en silencio.
-Clark. -Lo llamo para que me responda, frunciendo el ceño.
-...No lo sé. Simplemente...lo hice. -Se encoge de hombros, tragando saliva.
Puedo verme reflejado en sus pupilas, yo también me tendría miedo.
-Ahora te debería morder yo a ti. -Le gruño, aflojando levemente mi agarre. Aunque sé que no le estoy haciendo daño.
Clark se sonroja, arrugando la cara. Pero no dice nada.
Gruño y desvío la mirada. Cuando me voy a levantar, Clark frunce el ceño y nos da la vuelta, poniéndome de espaldas al suelo, ahora es él quien me sujeta.
Con esto no contaba yo.
-Vale, ahora respóndeme tú a esto...¿Por qué me empezaste a acariciar y a hacerme todas esas cosas? -Me pregunta sonrojado.
-Yo qué sé. Estaba drogado. Ni siquiera me acuerdo de lo que hice, Clark. -Le contesto entre dientes.
-...Bueno yo sí me acuerdo, y diría que algunas cosas las hiciste por voluntad propia...El alcohol te dio rienda suelta para desbloquearte sentimentalmente. -Asiente, mirándome.
-No estoy de acuerdo con esa afirmación. -Le digo frunciendo el ceño.
-Yo sí. Cincuenta cincuenta, tu opinión contra la mía. -
-Si las hiciese por voluntad propia...¿no crees que te habría invitado a mi casa? -Alzo una ceja.
-...Tenías mucha urgencia, Bruce. Te faltó poco para...sacártela ahí mismo. -Me dice arrugando la cara, sonrojado.
-Que pena que no lo hiciera, ¿verdad? -Me sonrojo levemente, frunciendo el ceño más.
Clark se sonroja más, desviando la mirada.
-Yo no he dicho eso. -
-No, pero lo has pensado. -Le rebato, entre dientes. -Nada de lo que hice fue por voluntad propia...y si lo fuera, daría igual. Estaba drogado...no me acuerdo de nada. De nada. Ni siquiera sabía que eras tú quien me trajo a casa. Lo que hiciera o dejara de hacer, no cuenta. Porque no era yo. Yo no soy así. -Me encojo de hombros, negando con la cabeza.
-...A mi me parece que siempre has sido así. Pero Batman...empuja tus sentimientos e instintos más humanos. -Dice mirándome la capucha y el traje. -Sé que Bruce Wayne puede sentir cosas… -Me suelta una mano y apoya su dedo índice en mi pecho, en mi corazón. -Sé que en realidad te sujetas y...te retienes, Bruce. Se te veía feliz mientras volábamos...libre. -Asiente, sonriéndome. -Eso es lo que no sabes...antes de que te pusieras...así, estabas relajado, disfrutando de la brisa. Estabas contento. -Sonríe más recordándolo.
-...Bruce Wayne sabe exactamente lo que siente y cómo lo siente. No hace falta que se lo digas. -Digo a la defensiva, desviando la mirada. -Y ahora, sino te importa...me gustaría irme a mi casa. -Le digo mirándolo, serio.
Clark me mira también, arrugando la cara. Luego suspira y me suelta, separándose de mí. Me levanto y me quito el polvo de encima.
-Dile a Lois buenas noches de mi parte. -Le digo antes de disparar la batgarra e irme de allí.
Jack apoya la cabeza en mi hombro, riéndose levemente. Luego me besa la barbilla y la mejilla. Me acomodo en la bañera donde estamos, con el agua templada y le rodeo con los brazos por detrás, abrazándolo. Suspiro profundamente, cerrando los ojos.
-Hoy has venido pronto, Bats… -Me dice suavemente, besándome la sien.
-Batman ha terminado pronto lo que tenía que hacer. -Abro los ojos, frunciendo el ceño, acordándome de Clark.
-Ya veo...¿puedo saber de qué se trataba? -Pregunta curioso.
No suelo compartir información de mis casos con él...pero esto no se puede llamar del todo "caso". ¿Tiene derecho a saberlo?
-He ido a pedirle explicaciones al vampiro que casi me rebana la oreja. -Digo divertido, restándole importancia.
Le empiezo a besar el cuello, hoy estoy cariñoso. Oigo la risa de Jack, que hace eco en el baño. Ladea la cabeza para que pueda besarlo mejor.
-¿Y qué vampiro era ese? Ya le vale, morder a un murciélago… -Me dice siguiendo mi broma.
-Tú lo has dicho, uno muy estúpido como para morder a un murciélago. -Asiento y sigo mi reguero de besos por su clavícula y hombro.
-Bueno, estoy seguro de que le has dado su merecido a súper drácula. -Paro de besarlo cuando dice súper. De todos los adjetivos posibles, ha usado ese.
Me mira sonriendo, luego se vuelve a reír.
-Venga, Bruce, no soy tonto. -Niega con la cabeza, acariciándome la mejilla. -Viniste tú solo, sin el coche, a las tantas...apareciendo de la nada… -Relata poniendo los ojos en blanco. -Lex es raro, pero normalmente no muerde a sus clientes. -
-...¿No estás enfadado? -Le pregunto mientras sigo mirándolo asombrado por su deducción.
-Tal vez un poco...pero mira. -Alza las manos, abriendo los brazos.
-...¿Qué? -Contesto confuso.
-Que el que está entre tus piernas soy yo, no él. Y mientras eso sea así...da igual cuanto te muerda o te toque. -Dice divertido, cerca de mi boca, sabiéndose vencedor.
Me sonrojo notablemente, desviando la mirada. Aunque tiene razón. No estoy en la bañera con Clark, estoy en la bañera con él.
-Tienes razón… -Admito, apoyando mi barbilla en su hombro.
-Claro que la tengo. -Sonríe divertido. -Y ayer el que te hizo ese gran favor no fue él, fui yo. -Lo miro curioso sin mover mi cabeza. Otra cosa de la que no me acordaba. Me mira pícaramente. -Querías desfogarte y… -Levanta la mano, sacándola del agua. -Te ayudé a hacerlo. -
Me sonrojo y desvío la mirada. Dejo de abrazarlo con un brazo y muevo la mano hasta su cadera, bajando hasta agarrar lo que quería agarrar. Él da un saltito, sobresaltado. Se sonroja levemente y me mira.
-Tendré que devolverte el favor entonces… -Susurró en su oído.
-Oh...no me importaría. -Se acomoda y abre las piernas, poniendo cada pierna encima de las mías.
-Bien… -Le sonrío y empiezo a mover la mano. Su cara se descompone y sonríe, jadea en mi oído. -Te portaste muy bien conmigo anoche, por lo que me estás contando. -Le digo mientras muevo mi mano a buen ritmo.
-Ahá… -Él asiente deprisa, cerrando los ojos. -Tenías una cara...y cómo...cómo gritabas. -Sonríe recordándolo. -Creía que te ibas a desgarrar la garganta. -Dice empezando a gemir.
-Porque te quiero demasiado… -Le contesto sonrojado, besándole el cuello.
-Mh...No, era algo más...estabas desatado, Bruce. -Se le escapa un gemido agudo y su espalda se arquea, luego ronronea en mi oído, sonriendo.
Aumento el ritmo. Deslizo mi brazo libre allí abajo también, palpando sus testículos. Abre los ojos de pronto, mirándome sonrojado.
-Uh… -Dice arrugando la cara, entornando los ojos. Jadea y pone los ojos en blanco, sonriendo. -No pares… -Me pide, clavando las uñas en mis muslos, agarrándose a mi.
-No pienso parar… -Susurro divertido en su oído, mordiéndole el lóbulo de la oreja suavemente.
Sus gemidos se intensifican y puedo sentir cómo mueve las caderas fervientemente.
-Bruce...Bruce… -Empieza a llamarme, con la boca abierta mientras jadea.
-Jack… -Mi mano lo bombea deprisa, sin parar.
-Bruce… -Dice entre dientes.
Luego echa la cabeza para atrás, arqueando la espalda y elevando las caderas. Gime sonoramente una última vez y su cara se deforma, totalmente sonrojada. Me araña la pierna mientras se corre y me mira con los ojos vidriosos después. Respira despacio y sonríe débilmente.
-Me vas a matar un día de estos… -Me avisa divertido, girándose para mirarme.
Apoya las manos en mis mejillas, besándome intensamente después. Cuando nos separamos, resopla profundamente.
-Espero que no… -Le respondo, sonriendo.
Él se ríe y me abraza, agotado por el orgasmo.
-A esto lo llamo yo una buena forma de irse a dormir… -Comenta apoyando la cabeza en mi pecho.
Me sonrojo y niego con la cabeza. Lo giro y lo cojo en brazos. Me levanto y salgo de la bañera. Oigo cómo se queja indignado, mirándome enfadado.
-¡Oye!...Qué frío… -Tiembla ligeramente, pegándose a mí.
-No nos podemos dormir en la bañera, o nos moriremos de verdad… -Le contesto alzando una ceja.
-Qué exagerado eres… -Pone los ojos en blanco. -Aunque tienes razón, que luego me arrugo. -Asiente.
Lo siento en un taburete y cojo una toalla, lo cubro con ella como si fuera una capa y le froto el pelo, secándoselo. Cuando aparto la toalla de su cabeza y lo empiezo a secar, me mira curioso.
-¿No tienes frío? -Me pregunta encogido, está tiritando.
Algunas gotas caen de mi pelo y por mi cuerpo mientras me arrodillo para secarlo. Niego con la cabeza, sonriéndole.
-No. Cuando me preparé para ser Batman, entrené en el Himalaya, entre otros sitios...Allí medité debajo de cascadas y pelee a temperaturas extremas. Esto no es nada. -Le digo, levantándome cuando he terminado.
-Ya veo… -Me observa moverme por el baño. -Desde luego tuvo que ser duro… -
-Lo fue. Pero valió la pena. Ahora soy inmune a lo que la mayoría de humanos no. Así puedo proteger Gotham y a las personas que me importan. -Vuelvo con él y lo vuelvo a coger en brazos.
-Que bueno eres… -Me dice suavemente, siendo sincero. Me sonrojo. -Eh eh eh, que sigues mojado. -Me dice arrugando la cara cuando lo cojo otra vez.
-Tampoco estoy tan mojado...estoy húmedo. Dentro de poco me secaré solo. -Le hago saber, andando a la habitación, hacia la cama.
Hace un mohín, desviando la mirada. Lo siento en la cama con cuidado y voy al armario, buscando ropa interior. Jack se tumba en la cama boca abajo, moviendo las piernas animado mientras me mira...Me mira el culo para ser exactos. Me giro arrugando la cara y él me sonríe. Me sonrojo y vuelvo a mirar mi armario.
-Sí...agáchate hasta el último cajón… -Me dice canturreando, ladeando la cabeza.
En el último cajón están los calzoncillos...me sonrojo y me agacho, abriendo el cajón.
-Mh… -Lo oigo decir con una sonrisa en la caja. -Menudas vistas. -
Gruño levemente y cojo dos calzoncillos, me giro y le tiro uno a la cara.
-¡Cállate ya y vístete! -Le grito muerto de vergüenza. Me pongo mis calzoncillos y luego el pantalón del pijama.
Él se ríe y coge los calzoncillos, poniéndoselos después. Se tumba a mi lado cuando llego a la cama y me abraza.
-Era una broma, Bruce...Pero no me negarás que tu culo no es un paisaje digno de admirar. -Me dice en voz baja, para luego reírse otra vez.
Lo miro alzando una ceja, sonrojado. Arrugo la cara y suspiro. Él me besa la punta de la nariz, sonriendo. Se mete bajo las sábanas y se vuelve a juntar a mí.
-Buenas noches, cielito mío… -
-No me llames así… -Me sonrojo otra vez y lo abrazo con un brazo. -Buenas noches. -
Clark no estaba teniendo un buen día aquella mañana. Perry lo había llamado a su despacho dos veces, y las dos veces había sido para echarle la bronca. Primero porque estaba descuidando su labor y segundo porque no se había enterado del último cotilleo de Gotham. Al parecer, todos los periódicos menos el Daily Planet se habían enterado y lo habían publicado.
Salió del despacho y cerró la puerta, suspirando. Se colocó las gafas que para nada le hacían falta y volvió a su cubículo con el periódico en la mano. Lo observó y volvió a suspirar.
-Tiene que estar contento hoy… -Dijo una voz femenina por detrás, refiriéndose al protagonista de la noticia que ocupaba portada en toda la prensa. A uno de los protagonistas.
Clark giró la cabeza para mirar a Lois, que lo miraba divertida mientras daba un sorbo de café de la máquina.
-No lo sé, no he hablado con él. -
-Oh, lo sé, por eso no te has enterado de esto, supongo...Aunque no sabemos si es verdad todavía. No han verificado nada. -
-Nuestro periódico no se dedica a captar estas noticias...al menos, no en la portada. -Replicó frunciendo el ceño.
-¿Algo más que amigos?...Bruce Wayne y Jack Napier viven juntos desde que este salió del hospital, y es que este par de buenos amigos han convivido desde entonces. Wayne ha invitado a Napier a un par de cenas y se les ha visto juntos por el Gotham Park. -Recitó Jimmy Olsen, andando hacia Lois y Clark, con una sonrisa. -Así que el Señor Wayne es gay...quién lo diría. -Dijo riéndose. -Y yo que creía que no… -
-Pues yo me olía algo… -Contestó Lois sonriendo. Clark la miró de reojo. -Eso de salir con chicas, cada noche una...suele ser una fachada. -Asintió. -Luego podrías hablar con él, tú que te llevas mejor con él. Para ver si puede confirmarlo o no. -Miró a Clark.
-No te creas, últimamente está muy liado, con su amigo y eso. -Un tic recorrió su párpado inferior.
-Para los amigos siempre hay tiempo, Clark. Sobre todo porque si es mentira, hay que decirlo también. -
-Me da a mí que no es mentira, no. -Dijo Clark, arrugando la cara, ahogando un gruñido.
-¡Pues me parece muy valiente por su parte! Me gusta mucho esa pareja, pienso que combinan muy bien. -Asintió Olsen, sonriendo.
-A mi también me lo parece. -Se rió feliz la chica. -En fin, más vale que nos pongamos a redactar la noticia o cuando la publiquemos, todo el mundo la habrá leído de otros. -Se encogió de hombros mientras se alejaba para ir a su escritorio.
-¡A trabajar! -Gritó animado Olsen, siguiendo a Lois.
Clark miró el periódico, frunciendo el ceño. Arrancó la portada donde salían su amigo y Jack, la arrugó hasta que hizo una bola con ella y la tiró a su cubilete de basura. Se acercó a la mesa y se puso a teclear furioso.
-¡Salimos en el periódico, salimos en el periódico! -Oigo a Jack venir corriendo mientras grita.
Me giro y me siento en la tumbona en el jardín, poniéndome las gafas sobre la frente para verlo. Cuando llega hasta mí, me entrega el Gotham Gazzette. Y se pone a dar saltitos.
-¡Salimos en el periódico y no por algo malo! -Repite sin creérselo, muy ilusionado.
Lo cojo y empiezo a leerlo. Me sonrojo y miro alrededor...bien, aquí parece que no hay cámaras. Para eso instalé un perímetro de seguridad.
-Dicen que somos "algo más que amigos"… -Sonríe pícaramente mientras lo dice. -Y no solo en este, salimos en casi todos...Y en la tele. -Asiente deprisa.
-Bueno...razón no les falta. -Me encojo de hombros.
No me había replanteado decirle al mundo que era gay todavía pero...bueno, en algún momento había que hacerlo, mejor antes que después. Además, es la verdad, le pese a quien le pese. Sonrío al ver tan ilusionado a Jack, aunque a mí me da bastante igual.
-¡¿No es genial?! Somos famosos… -Se ríe como un niño pequeño y se sienta a mi lado, vuelve a mirar el periódico sin creérselo.
-Ya éramos famosos, pero por diferentes motivos...Yo era el soltero de oro y un Don Juan, y tú eras un súper villano. -Asiento, encogiéndome de hombros.
-Pero ahora nosotros somos famosos, nosotros dos. -Asiente. -...Salgo muy guapo en la foto, ¿eh? -Dice sin una pizca de humildad, aunque razón no le falta.
La foto fue hecha en la gala benéfica de hace unas semanas. Tenemos los trajes del otro día y estábamos peinados y arreglados al detalle. Yo estoy mirando al frente, a las cámaras, señalando algo al fondo, le susurro algo al oído. Paso mi brazo por los hombros de Jack y este sonríe entre divertido y ligeramente avergonzado. A saber lo que nos estábamos diciendo.
-¿Qué te estaba diciendo? -Le pregunto mirándolo.
-Oh… -Se ríe al recordarlo. -Habías visto cámaras a lo lejos, así que me acercaste a ti y me susurraste que sonriera para que el mundo entero sonriera conmigo. Tenías razón, al parecer. -Asiente mirando la foto. -Luego me ofreciste un baile y bailamos… -
-Eso último no pasó. -Alzó la ceja, sonriendo.
-No, pero debería haber pasado. Bailo muy bien, Bruce. -Asiente, luego se ríe.
-...En la próxima gala, te sacaré a bailar. -Prometo, suspirando. -Aunque no bailo muy bien… -
-¿De verdad? -Pregunta ilusionado. -Seguro que sí...y sino, nos lo pasaremos bien también. -Sonríe divertido.
-Supongo que sí… -Me vuelvo a poner las gafas y cojo el vaso con agua con cubitos que tengo al lado, dándole un sorbo.
Alfred sale al jardín y nos sonríe.
-Señor, Regina ha llamado, pregunta si son ciertos los rumores...y que si puede organizar una junta urgente para esta tarde, con Jack como invitado. -Nos informa Alfred, tapando el micrófono del móvil que tiene en la mano.
Miro a Jack y este alza las cejas impresionado.
-...Por mí… -Dice sin esperárselo.
-Dile que sí, son ciertos. Y que claro, allí estaremos. -Asiento mirándolo.
Alfred sonríe y destapa el micrófono, metiéndose a casa mientras vuelve a hablar.
-Uh...voy a ir a tu empresa. Nunca he visto tu despacho. -Comenta divertido.
-Es un despacho, no hay nada interesante allí. -Me encojo de hombros, apoyando la espalda en el respaldo de la tumbona.
-Habrá que verlo…aunque estando tú, ya es interesante. -Me sonríe, apoyando una mano a cada lado e inclinándose hacia mí.
-Bueno, lo mismo puedo decir de ti… -Sonrío.
Jack se ríe levemente y me besa fugazmente. Luego me quita las gafas de sol y se las pone él. Se levanta y se aleja de mí deprisa.
-¡Eh! -Le digo, frunciendo el ceño. -¡Devuélvemelas! -Me levanto y sale corriendo, riéndose. Sonrío y niego con la cabeza antes de salir corriendo detrás de él.
Me siento en la silla de la punta de la mesa, presidiéndola. Jack se sienta a mi lado sonriendo emocionado. Mientras los demás de la junta van pasando y sentándose, se acerca a mí.
-Me encanta cuando te pones un traje… -Me susurra al oído, ronroneando después. -Esa corbata te queda muy bien...pero te quedaría mejor si estuviera en el suelo, y no llevaras camisa. -Me aclara.
Me sonrojo y lo miro de reojo, disimulando.
-Lo mismo digo...el chaleco te sienta que ni pintado. -Asiento. Carraspeo y me pongo recto, separándome de él.
Jack me imita, poniéndose serio. Está tan adorable cuando se pone serio…
Regina nos mira y arruga la cara, levemente incómoda.
-Bien...iremos al grano, Bruce. -Se levanta y mueve las manos. -Creo que hablo en nombre de todos cuando digo...que no vemos bien esta noticia. -Dice señalándonos.
Alzo una ceja...¿en serio me está diciendo lo que me está diciendo?
-¿Qué noticia? -
-A ver...no es por ser homófoba, claro que no, ni mucho menos...yo os respeto. Pero...los accionistas no sé cómo van a reaccionar. -Encoge la cara, no sabiendo cómo decirlo.
-...Los accionistas pueden meterse su opinión por donde no da el sol. -Suelto sin miramientos, cabreado.
Se oye un grito de asombro colectivo y todos me miran con la boca abierta, hasta Jack.
-Pero, Bruce...no te enfades. No te decimos que lo dejes, solo que...bueno, disimules. -Asiente sonriendo.
-No. Me podéis decir donde invierto mi dinero, cómo llevo mi empresa y cómo gestionarla...pero lo que no me diréis nunca es con quien debo o no estar. -Frunzo el ceño. -Siguiente punto. -
-Pero… -Regina quiere suavizarlo, no la dejo.
-Siguiente punto. -Repito más alto, con un tono autoritario y severo.
-Uf… -Oigo a Jack a mi lado, mordiéndose el labio. Lo miro de reojo...creo que le gusta que hable así.
Ahora mismo no puedo centrarme en eso. Fulmino a Regina con la mirada y esta baja la cabeza.
-Siguiente punto… -Dice con la voz temblorosa. -...Colaboración con la eminente empresa del Señor Napier...acciones conjuntas y ayuda colaborativa para presentarla en bolsa… -Traga saliva.
-¿Quién se está haciendo cargo? -Pregunto alzando una ceja.
-No...nosotros, Señor Wayne. -Contesta un hombre de la junta, sin mirarme a los ojos. -Mañana será presentada en bolsa y...la gestionaremos hasta que pueda independizarse. -Explica con miedo.
-Sí...hemos mantenido el espíritu inicial de los Napier...Una empresa por y para el desarrollo de Gotham, ahora mismo centrada en urbanismo y espacios sociales. -Regina asiente.
Miro a Jack, esperando su aprobación. Él me mira y luego agacha la cabeza, asintiendo deprisa.
-...Bien. Tenéis mi visto bueno. -Contesto entre dientes. -Quiero un informe con los primeros resultados de la salida a bolsa. Y otro de nuestra propia empresa, después de que el mundo se entere de que Bruce Wayne es gay. -Enfatizo en mi última frase, como si fuera el fin del mundo. -No un asesino en serie ni un terrorista...gay. -Repito, paseando mis ojos por los presentes. Nadie se atreve a mirarme a la cara. -La reunión ha terminado. -Me levanto y sin darle tiempo a nadie para pararme, salgo de la sala de juntas, asqueado.
Jack se levanta y me sigue deprisa hasta alcanzarme.
-Wow… -Me dice, tragando saliva.
Opto por no decir nada. Llegamos a mi despacho y cuando Jack entra, cierro de un portazo. Ando hasta mi escritorio y me siento, pensativo. Jack lo mira todo curioso, sin sonreír. Se acerca al ventanal que tengo detrás de mí, toda una pared de cristal y abre la boca impresionado.
-Vaya vistas… -Después de estar unos minutos observando, se gira y me mira. Anda hasta mí y se pone a mi lado. -...A veces me olvido del miedo que das enfadado… -Sonríe levemente.
-Tengo mis motivos. -Asiento, frunciendo el ceño.
-Claro, claro...qué duda cabe. -Asiente deprisa. -...Tu despacho es increíble. Casi tanto como su dueño. -Intenta animarme.
Lo miro y suspiro, empujo la silla para atrás y le agarro del brazo, tirando hacia mí para sentarlo en mis piernas.
-Perdón si te he asustado… -Me disculpo, acariciándole la rodilla.
-¿Asustarme?...Me has puesto como una moto… -Sonríe, acariciándome la mejilla. -Con este traje...y siendo el jefe de tanta gente...dando órdenes. -Apoya sus manos en las solapas de mi chaqueta del traje, tirando suavemente de ellas hacia él. -Mentiría si te dijera que no me he puesto un poco cachondo…Sino fuera porque sé que esa gente te lleva la empresa que nos da de comer, te habría empotrado contra esa mesa larga y grande de cristal. -
-¿Ah sí?...¿Delante de toda esa gente? -Alzo una ceja, sonrojado.
-Esa gente lo que necesita es un buen polvo...Tal vez hasta les viene bien para mirar y aprender un poco. -Sonríe divertido.
Me río levemente, luego asiento.
-Tal vez tengas razón, sí. -Lo beso intensamente. -Tengo que ponerme a trabajar un poco...Como dices, esta empresa no se va a llevar sola. -
Me mira y luego se queja, bajándose de mi regazo.
-Está bieen...Iré a por algo a la cafetería. -Me dice andando hacia la puerta.
-Bien. Tráeme algo. -Lo miro de reojo mientras enciendo el ordenador.
-Lo haré. -Abre la puerta y sale, cerrándola después.
