Holas! Yo de nuevo por estos rumbos. Presionada por tantas cosas. Nuevamente contesto a sus reviews(que fueron muchos! GRACIAS!) en la última parte. Suspiro. Espero que aunque con todo y mis defectos sigan leyendo mis fics.
TT-TT estoy llorando de alegría por que me han deseado suerte en mis exámenes y en mi trabajo final...que alegría que se preocupen por mi...me fue bien en los exámenes y en el trabajo ni idea..jajajaja
Por cierto déjenme decirles que estoy indignada por lo visto la nueva pareja lenxtamao ù.ú no es que no...grrrr lo siento es ustedes saben q soy fan d lxp y ademas de hxt, 10..9...8...7...6...inhalando y exhalando recordando sus cursos de autocontrol...jajajaja no es cierto...jajajja bueno aquí esta el capítulo...
Disclaimer: ya me estoy cansando de esto...sólo tomados prestados...ya quisiera yo ganar dinero de esto...
Plática-o Narración
PensamientoTOT TOT TOT TOT TOT TOT TOT cambio de escena
recuerdos
"Tsuki no Hikari"
Por Eigna-fluff
"¿QUIEN ME HIZO ESTO!" Len gritó al día siguiente al verse al espejo.
"Soy un payasito..."
Capítulo 3: ...hay una reacción
La luz brilla suavemente a través
De puertas de gracia en ti y en mi
Engañando a nuestros corazones agitados
Una flama vacilante tan serena
Devora la noche para que pudiéramos ver
El miedo al que nos aferramos fuertemente
- Endless Dark, HIM
Len miró su reflejo en el espejo de su baño. Es que lo que veía era imposible, tenía que ser un sueño, definitivamente lo era. Al menos eso esperaba. Se pellizcó un brazo para que despertará y el "sueño" se fuera, pero todo siguió igual. Así era, era la vida en vivo y en directo. Ya que por fin aceptó que no era ningún sueño, se puso a pensar cómo era que había amanecido así. No le costó mucho trabajo pues de inmediato la imagen de una chica con cierta melena de color azul se le vino a la mente. Estaba tan enojado que salió disparado por la puerta ,en dirección al comedor donde estaría desayunando sin duda alguna. Se le olvidó lavarse la cara.
Corrió lo más rápido que podía por los pasillos esquivando muebles, adornos, servidumbre y demás. Por fin llegó a su destino pero no se detuvo, abrió las puertas de u golpe y entró corriendo. Se arrepintió de entrar corriendo pues al intentar frenar casi se estampa contra la mesa. Cuando recuperó el aliento, se enderezó y volteó a ver a Pilika con una mirada acusadora y la apuntó con el dedo. Estaba tan concentrado en la joven que no se dio cuenta que su familia lo veía de manera extraña.
"Len¿por qué tienes pintada la cara? Si tienes ese tipo de tendencia nos lo debiste de haber dicho desde un principio para no buscarte novia hijo" dijo Bo con mucha seriedad, pero en el fondo se estaba aguantando unas ganas enormes de reírse. Len siguió apuntando su dedo pero esta vez su cabeza se volvió para ver a su madre de manera sorprendida. Len estaba a punto de protestar, pero Jun lo interrumpió.
"Si hermanito, eres del otro lado de la banca o tienes un sueño frustrado de ser un payasito con un muy mal gusto" comentó Jun. Len miró desesperado de Jun a su madre y viceversa. Su mirada se volvió a posar en la causante de todo esto.
"¡Tú! tú fuiste la culpable de todo esto! Entraste a mi cuarto a pintarme esta atrocidad en mi cara!" dijo Len. Después de esto fue hasta entonces que Pilika lo vio y al no haber terminado de masticar su bocado, éste terminó en la cara de Len mezclándose junto con el maquillaje.
" JAJAJAJAJAJAJAJA, pues no se tal vez si, tal vez no...¿puedes probarlo?" replicó Pilika. Len la miró con odio a la vez que se quitaba los restos de pan que habían aterrizado en su hermoso rostro. Len se quedó callado pues no había manera de comprobarlo. Pilika metió la mano dentro de uno de los bolsillos de la falda que tenía puesta y sacó dos pequeños cuadrados de cartón. Len los miró con curiosidad¿qué sería eso...eran fotos?
"En cambio yo si tengo pruebas de que tienes un tipo de afición oculta para los demás y que además¡ tienes el autoestima bastante elevado!" dijo Pilika a la vez que le daba la vuelta a los cuadrados y revelaba que era un par de fotos instantáneas donde el protagonista era él. Donde aparecía no muy masculino que digamos. Len se abalanzó contra ella al tratar de quitarle las pruebas pero Pilika se levantó de la silla antes de que cayera sobre ella. Mientras Len trataba de ponerse de pie y retirar los pedazos de silla que habían quedado en su cabello Jun decidió dar un vistazo a las "pruebas".
"Vaya Len eres bastante fotogénico." Comentó mientras veía de nuevo el estado en que el rostro de su pequeño hermano se encontraba en ese momento. Para empezar tenía maquillaje en exceso en toda la cara, después tenía dos círculos marcados en sus mejillas por un rubor de un fuerte color, sus labios estaban delineados y pintados con lápiz labial color rojo pasión. Sus ojos tenían una sombra color azul igualmente demasiado cargado y además sus pestañas estaban enchinadas y con medio bote de rimel en ellas. Para terminar en la frente tenía escrito con lápiz labial rosa "Hola guapa". Ese era el estado en el que había dejado Pilika a Len.
Len por fin logró ponerse de pie y de nuevo se iba lanzar hacia Pilika, pero ésta corrió antes a toda velocidad hacia la puerta con las fotos todavía en mano. Éste salió detrás de ella casi inmediatamente.
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Después de haber corrido varias vueltas alrededor de la casa los muchachos parecían por fin empezar a agotarse. Pilika dio la vuelta en el pasillo que la llevaba su cuarto y puso todas las energías que le quedaban para llegar pronto a su habitación, cerrar la puerta con seguro y descansar un poco de evitar a Len. Pero Len estaba a pocos pasos detrás de ella y al darse cuenta de las intenciones de ella, él también corrió lo más rápido que pudo y logro meter el pie entre la puerta y el marco para evitar que Pilika lograra lo que se proponía. La peliazul intentó empujar la puerta con todas sus fuerzas pero él empujó también y pues en fuerzas él le ganó y logró entrar. Al no tener donde correr Pilika comenzó a retroceder hasta que chocó con el borde de la cama. Len sabía que no podría escapar, entonces esta vez al lanzarse contra ella si la atrapó y cayeron juntos a la cama. Pilika inmediatamente se introdujo las fotos a su blusa, trató de moverse, pero Len la tenía atrapada deteniendo sus piernas en medio con las de él y con sus manos tenía detenidos los brazos de la Ainu.
"Dame las fotos o sino no te voy a soltar" ordenó Len más enojado que antes al ver que se había metido la fotos en una zona prohibida.
"No, a ver si eres capaz de sacarlas de ahí" contestó Pilika sonriendo. Pilika sabía que no sería capaz de sacar las fotos o al menos eso esperaba, pues si no, iba a ser una situación bastante incómoda para ella con su mano allí dentro. Len la miró decidido, si eso era lo que tenía que hacer para obtenerlas eso haría, aunque estaba seguro que "junior" no saldría ileso. Tomó aire como si se fuera sumergir a un alberca y rápidamente metió su mano a la blusa de Pilika, pero al intentar sacar las fotos, su mano se atoró en unos de los botones. Los dos sintieron como se les subía rápidamente la sangre a la cara y casi explotan cuando escucharon la voz de Jun.
"Saben que no deberían de estar haciendo eso, se deben de esperar ala boda después de eso pueden hacer cualquier juego exótico que se les antoje" dijo Jun recargada en el marco de la puerta. Ella sabía porque Len tenía su mano dentro de la blusa de la joven, pero quería hacerlos sentir incómodos para su diversión. Los dos jóvenes se quedaron congelados sin saber que decir y se miraron uno al otro en busca de ayuda. Jun solo se rió y salió del cuarto. Sus corazones latían tan rápido del susto que les había sacado Jun, que tardaron un momento en calmarse y captar que la mano de Len seguía en zona restringida. Nuevamente Len se sonrojó y esta vez si pudo sacar su mano con todo y fotos. Miró las fotos y fue como volverse a ver en el espejo. Su sesión de fotos fue interrumpida por el sonido de una garganta aclarándose. Len miró a Pilika y supo que jamás podría procrear hijos.
"¿QUÉ TE CREES PEDAZO DE PERVERTIDO, METIENDO TU MANO Y ADEMÁS NO QUITANDOTE ENCIMA DE MI!" gritó Pilika mientras su rodilla le decía hola a "junior" y le daba un puñetazo en la cara lanzándolo al aire. Pilika se arrepintió un poco después de darse cuenta que su mano había quedado manchada de todo el menjurje que Len tenía en la cara. Len se levantó rápidamente del piso con las fotos en mano.
"¿QUÉ TE PASA? Tú fuiste la que me dijo que metiera mi mano allá dentro para sacar las fotos y además ni quien te quiera tocar. Primero beso a un perro de la calle que tocarte a ti por mi propia voluntad" replicó Len furioso, pero no intimidaba nada con todo ese maquillaje en su cara. Ahora si que Pilika había llegado a su límite, había estado dispuesta a darle las fotos a Len por las buenas, pero ahora no habría ningún modo de evitar que toda China se enterara que Len jugaba a las muñecas. Pilika se lanzó contra Len para quitarle las fotos pero Len le ganó y ahora fue él quien se metió las fotos en zona restringida. "Junior" era ahora el nuevo guardián de las fotos.
Nuevamente estaban los dos acostados, esta vez Pilika encima de Len pero permaneció inerte. Len pensó que ya se había muerto pues no se movía. Sacó una mano que había estado aplastada por el cuerpo de ella y con un dedo le picó la mejilla.
"¿Ya te moriste? Porque si así es no quiero que mi ropa huela a muerto al rato" preguntó "inocentemente". Pilika inmediatamente reaccionó y se levantó del piso.
"¡Claro que no bestia salida de la coladera, pero no estoy dispuesta a meter la mano ahí que luego me da sarna!" gritó Pilika indignada y decepcionada pues sabía que esta vez Len había ganado.
"Entonces¿me puedo quedar con ellas?" preguntó un Len triunfante. Pilika se sentía humillada ante la derrota.
"Si bestia, ya vete a lavar la cara que me da pena vivir con un travestí..."contestó Pilika mientras abría la puerta. Len se levantó del piso rápidamente al recordar que "eso" seguía en su bello rostro y salió del cuarto. Pilika cerró la puerta de un golpe inmediatamente después de que salió la bestia.
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La joven de cabellos verdosos vio todo lo acontecido escondida entre las sombras que aquel pasillo le ofrecía. Después de que Pilika azotó la puerta vio como su hermano cruzaba el pasillo dirigiéndose hacia su cuarto y además diciendo obscenidades por lo bajo. Tuvo que aguantar con todas sus fuerzas las ganas de explotar en carcajadas de lo gracioso que todo esto se le hacía. Después de que Len también entró a su cuarto y azotó la puerta al igual que Pilika, Jun se levantó con mucho cuidado del rincón en donde se encontraba escondida y comenzó su regreso hacia su habitación.
Al pasar por el pequeño camino de los muertos, como a ella le gustaba llamar el pasillo con todos los cuadros de los antepasados que jamás conoció, se detuvo por un momento para observar a cada uno de los muertos. Todos parecían tener la misma mirada fría y asesina que Len y su padre tenían la mayoría de las veces en sus respectivos rostros. Suspiró. Va a ser muy difícil juntar a esos dos. Iba a continuar con su trayecto cuando vio algo que se movía.
"Pai Long cuantas veces te he dicho que no te escondas así, un día de estos si te voy a confundir con un asesino y mi cuchillo va a acabar enterrado en tu garganta, y eso no lo queremos¿o si?"dijo Jun al reconocer al instante de quien era la figura que había visto.
"Lo siento señorita Jun, pero no sé si usted sabe que espiar es de mala educación, sin ofender por supuesto" contestó Pai Long diciendo la última parte con prisa por si ella se ofendía. (n/a: esperen un momento...si saben quien es pai long? Por que en la serie le pusieron lee bruce long...y no se llama asi...nada mas aclaraba por si las dudas...) Jun lo volteó a ver con una sonrisa en su cara ante el descubrimiento de su guardaespaldas.
"Pues la verdad es muy raro que lo haga pero debido a las circunstancias, es necesario que yo intervenga entre esos dos para que algo pase antes de que yo tenga canas y tenga que caminar con bastón" dijo Jun mientras levantaba su puño en frente de ella.
"¿En verdad cree que ellos dos puedan llegar a sentir algo?" preguntó Pai long un poco confundido.
"No lo creo, es que ya es un hecho. Yo sólo les voy a dar ese empujoncito que necesitan. (n/a: yo diría golpe)", contestó Jun mientras una sonrisa maliciosa se formaba en su rostro, "O no me digas que en estos dos días no has notado que él no la trata como alas demás. A ella si la habla y se le importa lo suficiente como para molestarla y pelear con ella. A las otras nada más les decía que se fueran y eso era todo, no les dirigía la palabra ni para insultarlas. La verdad es que yo creo que esto ya es un avance." dijo Jun. Pai Long se sorprendió al darse cuneta de que todo lo que ella decía era verdad, tal vez ella era la que...
"Bueno como sea, tengo que ir a la ciudad a comprar unas cuantas cosas para completar mi plan. Por avísale a mis padres a donde fui, regreso en unas horas" dijo Jun mientras comenzaba a caminar. Pai Long levantó su mirada que estaba dirigida al piso para ver la espalda de Jun que se alejaba poco a poco hasta que por fin reaccionó y corrió hasta ella.
"Pero señorita, usted sabe muy bien que a su padre no le gusta que salga sin algún guardia. Además yo soy su guardaespaldas personal¿por qué nunca me deja que cumpla mi deber?"dijo Pai Long, preocupado por el hecho de que saliera sola. Jun, que se había detenido, le sonrió a su guardia personal.
"Bueno si tanto te importa acompáñame" contestó Jun.
Jun siguió con su camino mientras Pai long la seguía unos cuantos pasos detrás, vigilando su seguridad hasta dentro de su propia casa. Ese era su deber, ver que estuviera bien. Después de todo eso era, su guardaespaldas, nada más. Una lágrima solitaria recorrió la mejilla de él.
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Los jefes de la familia Tao, En y Bo, se encontraban en la biblioteca sentados pensativamente. Cada uno estaba en un sillón diferente, uno frente al otro.
"Y bien¿qué es lo que planeas hacer?" preguntó Bo a su esposo.
"He diseñado un plan con Jun que va a hacer que esos dos se lleven mucho mejor" contestó En mientras tomaba un sorbo de su té verde.
"¿Plan¿Estás seguro de que funcionará, porque por lo visto esos dos son igual de tercos. Pero supongo que eso lo hace mejor" dijo Bo.
"Tú no te preocupes, Jun ya ha ido a comprar algunas cosas que necesitaremos. Mejor dime qué opinas hasta ahora de Pilika" dijo En Tao.
"A decir verdad me ha sorprendido bastante, es más de lo que yo esperaba. No hay duda de que ellos hicieron la decisión correcta. El simple hecho del cambio de actitud de Len fue lo que más anonadada me tiene, en mi vida hubiera pensado que él se dejaría desafiar por una chica..." comentó Bo.
"Pues sí...pero como decía mi abuelo nada imposible es imposible...en verdad no creía en eso, pero ahora creo que mi abuelo tenía razón..."dijo el señor Tao con algo de humor. Su esposa lo miró con un rostro que le recordaba que su abuelo no estaba muy bien de su mente.
"Bueno como sea, a pesar de todo va a ser muy difícil lograr nuestro objetivo. Espero que esto se acabe pronto pues me siento muy mal por mentirle a Jun" dijo Bo con un rostro serio. En suspiró.
"Sí lo sé, pero si supiera lo que vamos a hacer dudo mucho que estaría dispuesta ayudarnos...pero todo esto es nuestra culpa..."dijo En a la vez que miraba la mesa que estaba frente a él.
"Y lo que mas me duele es que la chica es agradable, pero debe arreglar lo que nosotros deshicimos...el corazón de Len.." dijo la esposa de En Tao.
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Dos días. Dos días y ya se habían peleado, insultado, golpeado, burlado y demás participios que indicaran agresión. Pilika se encontraba sentada son su espalda y cabeza recargada en la puerta que había cerrado hace unos minutos. Se había sentado ahí exhausta de tanta conmoción. No se había dado cuenta hasta que en ese momento se había puesto a reflexionar y la realidad era que estaba en problemas, y éstos eran grandes. Por haber estado discutiendo y planeando venganzas se le había olvidado para que había venido a Xho Zan, China en primer lugar. Se le había olvidado que tenía que casarse con Len Tao.
Pilika suspiró con frustración. Ella había venido muy dispuesta a llegar al que sería su nuevo hogar y conocer al que sería su esposo, que en su imaginación de niña tonta era educado y amable, y tal vez que algo surgiera entre los dos. La realidad era otra, ellos dos no se podían ver ni en pintura. Pero también algo de culpa tenía ella pues había continuado con la "guerra" que había entre los dos. Tal vez si alguno de los dos pidiera perdón, todo sería diferente. Pero claro que ella no sería la que lo haría, tenía que ser la rata bestia inmunda de dos patas peluda y greñuda. Ella jamás se humillaría haciendo eso, además él había sido el que había iniciado con todo esto.
Ella sólo quería una nueva familia, un nuevo hogar y cariño. Pero sobre todo, no quería regresar a Hokkaido, Japón. Pilika se levantó inmediatamente cuando sintió algo húmedo que recorría su mejilla. No era momento para eso, tendría que superar esto como fuera y si ser aunque fuera un poco amable con la bestia era la solución tal vez tendría que hacerlo. Por ahora tenía que relajarse un poco, así que decidió ir a practicar un poco con las tonfas.
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Tap. Tap. Tap. Len se encontraba sentado en la pequeña mesa que había en su cuarto y estaba estampando su frente contra la mesa sucesivamente. Después de varios minutos de estar en su actividad tan entretenida, comenzó a dolerle la cabeza y la frente por lo que se detuvo. Se quedó quieto pero con su frente todavía estampada en la mesa."¿Por qué?" "¿Por qué?" "¿Por qué?" se preguntaba una y otra vez pero no había respuesta a su pregunta.
¿Cómo era posible que una niña insolente como ella lo hubiera humillado tanto en tan poco tiempo? Y para empezar¿cómo no se había despertado cuando ella había estado demostrando sus pequeños dotes de artista en su cara¿qué acaso era tan débil que no lo había sentido? No...seguramente había sido el cansancio...sí eso era, estaba cansado. Cansado de qué, quien sabe pero eso era. Hasta el momento el marcador era Niña insolente:4 Len:2. Un marcador no muy equilibrado que digamos. Pero aquí la pregunta más importante era¿Por qué demonios se dejaba desafiar por esta niña? A ninguna de las demás las había dejado, y si acaso le hubieran hecho algo por el estilo, no hubieran salido vivas de la mansión Tao. Entonces¿por qué ella sí¿por qué ella lo hacía perder la cordura tan fácilmente¿por qué que se había sentido así cuando la hizo llorar?
Len se comenzó a frustrar pues no encontraba respuestas a sus preguntas. Tal vez la única respuesta que había a todo era que se estaba volviendo suave y debería de detenerlo. La última vez que se había sentido así había sido con...Genial había abierto cicatrices que creía haber refundido en lo más hondo de sus ser. Jamás lo volvería a hacer después de eso. Se había prometido no volverlo a hacer jamás. Jamás. Pero a todo esto, sentía que algo muy importante se le estaba olvidando. ¿Qué era, qué era?. Y fue cuando la respuesta lo golpeó duro en la cabeza. Había olvidado por qué estaba la niña viviendo en su casa. Se le había olvidado que por imposición de sus padres ahora era su nueva prometida. Bueno él había intentado alejarla por las buenas, pero ahora sí, no más consideraciones de su parte. Haría lo que fuera para que su preciosa libertad no le fuera arrebatada. Esta vez sí era personal. Sus padres, esos padres que le habían tocado, jamás lo dejarían de torturar. El dolor de cabeza que había cesado, volvió a formarse poco a poco, así que Len se puso de pie y tomó la espada que estaba en el piso. Iría a entrenar un poco para relajarse. Había olvidado por completo lo del pequeño acuerdo al que habían llegado la niña y él.
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Lejos. Siempre lejos. Nunca cerca. Pai Long la vigilaba desde unos metros atrás. Mientras ella iba de una tienda a otra comprando cosas y admirando las novedades que había, él mantenía su distancia pero siempre estando lo suficientemente por si algo pasaba o por si algún sujeto sospechoso se le acercaba. Nadie ignoraba que ella era Jun Tao, hija de En Tao, el dirigente de esa región. No le agradaba nada cuando ella venía a la ciudad pues muchos hombres se le acercaban interesados en su dinero y en el poder que podrían adquirir. Sabía perfectamente que ella se podía defender sola, pero le gustaba estar ahí para ahuyentarlos pues sin duda estos pretendientes sabían del guardaespaldas de la señorita Tao y sus habilidades. Jun creía que Pai Long simplemente se tomaba muy en serio su trabajo, jamás había sospechado sobre las razones que motivaban a Pai Long. Desde el primer momento en que la había conocido, algo en ella lo había cautivado y después con el tiempo eso creció a lo que sentía ahora.
La primera vez que la vio fue cuando lo asignaron como su guardaespaldas. Ella tenía catorce años y él diecisiete, una edad muy temprana, pero su familia siempre había servido a la dinastía Tao. La verdad es que cuando se enteró sobre su deber había protestado pues él no quería tener que cuidar a una niña, él quería grandes misiones al lado del amo En Tao. Pero cuando la conoció su opinión cambió por completo. Jun Tao había sido la primera persona en derrotar al magnífico Pai Long. Después de eso se habían hecho amigos, pero él nunca se acercó más de lo que debía. Sus amos jamás aprobarían lo que sentía por ella. Así que con los años ahuyentó a cuanto varón se le acercaba a Jun, pero tuvo que dejar a algunos pasar pues los padres de la joven comenzaron a preguntarse por que no tenía pretendientes.
Sus recuerdos fueron interrumpidos cuando escuchó un ruido de algo caerse y después un "ouch" femenino. Por estar sumergido en sus pensamientos no había estado completamente concentrado y no vio que Jun había chocado contra un puesto de frutas en la calle y había tirado todo. Corrió hasta ella para asegurarse de que estaba bien. Un gran grupo de personas se había comenzado a formar alrededor de la zona del percance por lo que Pai Long tuvo que esquivar a bastante gene para llegar hasta ella. Lamentablemente comprobó que parte del "comercio" se había caído encima de Jun y su tobillo derecho estaba lastimado. La ayudó a levantarse y puso su brazo alrededor de su cuello para que se apoyara para poder caminar. Después de que Jun pagó sin mucha dificultad todos los daños ocasionados y pidió perdón, se dirigieron al carro para regresar a la mansión Tao.
"Pero a pesar de todo compré todo lo que necesitaba, ojojojojo" comentó Jun en el camino a casa, lo que causó que Pai Long se riera suavemente, pues por lo visto no le importaba mucho su accidente.
Tras muchas protestas por parte de Jun, Pai Long la llevó en brazos desde el auto hasta su habitación donde una mucama la ayudó a vendarse el tobillo. Jun se puso de pie ignorando por completo su tobillo, no haciendo caso a las protestas por parte de Pai Long, se dirigió a la zona donde vivían sus víctimas. Pai Long movió la cabeza con desapruebo. Ya se encargaría después de sus sentimientos. Y después de unos instantes siguió el camino por el que Jun había desaparecido.
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Abrieron las puertas de sus cuartos y la batalla #7 comenzó.
"¡TÚ!" exclamaron ambos al mismo tiempo. Len observó las manos de Pilika y vio que tenía sus tonfas, Pilika hizo lo mismo pero ella vio la espada de Len en sus manos. En ese instante adivinaron las intenciones que tenía cada uno. Corrieron hasta el centro del pasillo y se miraron desafiantemente.
"¿Acaso piensas ir a ya sabes dónde? Creí que después de lo ocurrido habíamos llegado a un acuerdo" dijo Pilika mientras ponía sus manos en su cintura y lo miraba con enojo. Len al recordar su "acuerdo" se vio humillado una vez más por lo que decidió poner fin a esta guerra inútil, cuyas batallas estaba perdiendo.
"Sí es cierto, pero te reto a una revancha. Se me hace algo muy estúpido que no pueda usar algo que desde un principio me pertenece" replicó Len regresándole la mirada furtiva.
"Vaya vaya querido Len, yo que pensaba que eras un hombre. Pero por lo que veo todavía no aceptas que yo te gané limpiamente. A mí lo que se me hace estúpido es que me pelees tanto por un simple espacio cuando tienes otros miles. Pero acepto tu reto, no me vendría mal otra victoria después de todo" dijo Pilika con una gran sonrisa en su rostro. Con el último comentario de Pilika, una vez más la tolerancia de Len llegó a su límite. Esa niña, otra vez desafiándome...¿acaso piensa que me puede volver a ganar?
"Pero claro si antes te sale la dama que llevas dentro y te arrepientes siempre puedo retractarme sobre esa revancha" continuó Pilika antes de que el joven Tao le pudiera responder. Lo último que salió de la boca de la pequeña Ainu fue la gota que derramó el último vaso que le quedaba a Len. Contuvo las ganas enormes que tenía de lanzarse contra ella y en vez recurrió al mal uso de las palabras.
"Hija de..." medio exclamó Len antes de que fuera interrumpido por una voz femenina. Len y Pilika voltearon hacia el otro pasillo donde dos figuras de vislumbraban.
"Vaya hermanito, creí que mis padres te habían educado mucho mejor. El usar ese tipo de palabras, qué ofensa" se escuchó la voz de Jun desde el pasillo. Conforme se acercaba, los dos jóvenes pudieron notar que Jun no caminaba bien. Cuando estuvo casi en frente de ellos fue cuando Len vio el vendaje que había alrededor de su pie derecho y como buen hermano se preocupó. Inmediatamente después llegó Pai Long.
"Hermana¿se puede saber qué le paso a tu pie?" preguntó Len preocupadamente. El pleito con Pilika ya completamente olvidado. Pilika también se preocupó por lo que se acercó a Jun para que se apoyara en su hombro. Jun le sonrió a los dos, había servido de algo que su pie estuviera lastimado.
"Bueno, fui a la ciudad a comprar unas cosas y por estar en las nubes choqué con un puesto de frutas y pues...éste se cayó encima de mi. Lo bueno fue que Pai Long estaba ahí para ayudarme" contestó Jun mirando a Pai Long con gratitud. Sin embargo Len no se tomó esta respuesta tan bien como se esperaba.
"Pai Long, se supone que te pagamos para que vigiles y protejas en todo momento a Jun, pero por lo visto no eres tan apto para ese trabajo como yo pensaba. Tendré que comentar eso con nuestro padre" comentó Len mientras le dirigía un mirada fulminante. Jun y Pilika miraron con desconcierto a Len y Pai Long no se atrevió a mirarlo a los ojos, porque sabía que él tenía razón. Había fallado. Sin embargo Pilika no iba a permitir que una injusticia se cometiera. Ayudó a Jun a que se apoyara en una de las paredes, después caminó en dirección a donde estaba Len y se detuvo justo en frente de él. Len la miró confundido, ella levantó su mano y después la impactó contra la mejilla de Len.
"¡Eres un desconsiderado e injusto¿Qué acaso no escuchaste lo que Jun dijo? Además estoy segura de que Pai Long ya se siente lo suficientemente culpable como para que tú lo empeores" gritó Pilika. Ella lo miró desafiante y él la miró sorprendido. Jun y Pai Long se miraron uno al otro y después a la pareja que tenían en frente. Len reaccionó unos momentos después y el enojo que había sido olvidado de pronto regresó. Avanzó un paso hacia donde estaba Pilika, dejándolos más cerca que antes. Pilika retrocedió un paso como precaución pues la mirada que Len le dirigió no daba mucha seguridad que digamos.
"¡AHORA SI QUE YA COLMASTE TODA LA PACIENCIA QUE TE ESTABA TENIENDO NIÑA¿QUIÉN TE CREES COMO PARA VENIR E INVOLUCRARTE EN ASUNTOS QUE NO TE INCUNBEN!" gritó Len tan fuerte que se escuchó lo que dijo por toda la casa. A pesar de que el joven heredero de la familia Tao dejó medio pulmón al expresar su opinión, Pilika ni siquiera parpadeó. Len quedó desconcertado pues él esperaba ver aunque fuera un poco de miedo en los ojos de la joven peliazulada, pero éste jamás apareció. Pilika sonrió.
"Señor Tao¿qué acaso no conoce la palabra autocontrol? No me creo nada, simplemente creo qué estás exagerando por algo que no tiene tanta importancia. Pero por lo visto el príncipe de los simios sin sentimientos no sabe nada sobre los errores humanos ya que él es perfecto" dijo Pilika como respuesta. Len parpadeó varias veces tratando de captar lo que la niña le había dicho. Jun decidió intervenir antes de que esto se convirtiera en otra batalla verbal de las muchas que había presenciado.
"Len ya déjalo ir. Fue un accidente provocado por mis descuidos. Además, yo no vine aquí a ser el arbitro entre ustedes dos. Vine a decirles que preparen las cosas necesarias para un pequeño viaje que vamos a tener. Los espero en el vestíbulo en 15 minutos, así que apúrense en empacar, y Len, necesito hablar contigo sobre algo muy importante después" dijo Jun mirando a Len con reproche. Pilika y Len miraron confundidos a Jun.
"¿Viaje?"preguntaron los dos al mismo tiempo. Al escuchar la voz del otro respectivamente, recordaron el pequeño debate que estaba sin concluir. Se miraron con enojo. Jun comenzó su retirada con la ayuda de Pai Long al ver que esto era un cuento del nunca acabar. Se detuvo un momento para ver quién ganaba en esta última batalla. Pilika había comenzado a caminar hacia su cuarto, pero se detuvo a la mitad de éste cuando Len la llamó.
"¡Oye! No he terminado contigo niña. ¡Ven para acá no huyas! " le gritó Len a Pilika desde su lugar. Pilika le dio una de sus sonrisas sarcásticas.
"Disculpa, pero yo no pertenezco al reinado de los simios sin sentimientos, así que no entiendo su idioma" contestó Pilika. Con esto el tic del ojo de Len regresó.
"Que infantil eres y luego te enojas porque te llamo niña. Mejor lo dejo así. Tu nivel intelectual es demasiado bajo como para que nos podamos comunicar" dijo Len mientras se daba media vuelta. Al igual que Pilika, comenzó a caminar hacia su habitación pero esta vez fue ella quien lo interrumpió.
"Por lo menos yo si soy del género femenino y no me disfrazo para parecerlo. Tal vez debería pedirte consejos para parecer mujer" replicó Pilika, recordándole a Len el pequeño incidente de las fotos. Len decidió no hacerle caso y siguió su camino. Pilika vio esto y decidió hacer lo mismo. Los dos abrieron las puertas de sus habitaciones y entraron, pero justo antes de cerrarlas Len le gritó a Pilika desde el otro lado del pasillo.
"¡ESTO NO SE HA ACABADO NIÑA¡NO SABES QUE ES TENER UNA GUERRA CONMIGO!" gritó Len con una gran sonrisa en su rostro. Pilika se rió y con una sonrisa le contestó.
"¡ENTONCES ENSÉÑAME QUE ES LO QUE TIENES QUE DAR CHICO SIMIO! NO TE TENGO MIEDO...¡ESPERA! NO SE SI RECUERDES PERO LA MAYORÍA LAS LLEVO YO GANADAS!" contestó Pilika ahora su sonrisa demostrando triunfo. Len sabía que ella tenía razón pues era en lo que había pensado antes.
"¡FUE PORQUE TE TUVE COMPASIÓN, PERO AHORA ESO YA QUEDÓ ATRÁS!" dijo Len en su defensa.
"¡SABES QUÉ, YA NO ME IMPORTA¡HAZ LO QUE QUIERAS!" contestó Pilika.
"¡COMO QUIERAS!" contestó Len.
Los dos azotaron sus respectivas puertas enfurecidos. Jun y Pai Long miraron de un lado al otro no comprendiendo nada con la rapidez que había pasado todo.
"Bueno, creo que esto ocurrió bastante bien" dijo Jun y después siguió su camino.
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"¡NUNCA!" gritaron los dos jóvenes al unísono a la vez que golpeaban unos hermosos ventanales que dejaban entrar los rayos del sol a la casa de campo. Cuatro pares de ojos miraron divertidos a los ojos celestes y dorados que los miraban a través de los ventanales. Así era, todo había sido una trampa y conspiración entre En, Bo y Jun. Len y Pilika habían caído en ella sin haber sospechado nunca nada. Los tres conspiradores estaban recargados en la limusina que los había transportado todos hasta ahí y simplemente veían las caras de desesperación de los jóvenes. Jun se acercó hasta la puerta para que las dos víctimas la pudieran escuchar.
"Lo siento hermanito pero a situaciones desesperadas, soluciones desesperadas. Tienen suficiente comida y cosas así como para sobrevivir una tercera guerra mundial, así que de eso no se pueden quejar. Regresamos por ustedes en 5 días, si hay algún problema que no sea éste, hay un teléfono en la cocina por el que pueden llamar. Bueno pequeños hasta luego" dijo Jun frente al ventanal en donde estaba Len, dijo adiós con su mano y corrió hasta la limusina que ya estaba encendida y preparada para llevarlos de regreso a la mansión Tao. Len bajó la mano que tenía recargada en el cristal y la llevó a uno de sus costados. La huella de su mano quedó marcada por unos segundos hasta que desapareció por completo. Suspiró. Derrotado se retiró de la puerta y sus ventanales y se dirigió a la sala de estar para sentarse en un sillón para pensar. La huella de su aliento tardó un poco más en desaparecer del ventanal. Pilika tenía sus dos manos recargadas en ventanal que se encontraba a la derecha de la puerta de madera. Tenía la vista fija en los árboles del bosque ubicado justo afuera de la casa. El vidrio se empañaba una y otra vez a la vez que su aliento salía para después volver a inhalar aire. Su estado era de completa sorpresa y aunque ella jamás lo admitiría, de miedo. Después de unos minutos reaccionó y comenzó a golpear la puerta con sus puños.
"¡JUN! Por favor, por favor no me dejes aquí con el cara de simio! Prometo hacer lo que tú quieras! Señor Tao!Señora Tao!" gritó mientras golpeaba la puerta y trataba una y otra vez de romper la chapa de la puerta. Len la miró divertido. Observó varios minutos los intentos inútiles de la niña para salir de la casa, hasta que sintió algo de compasión.
"Ya déjalo. Por más que la golpees, patees y grites, la puerta está completamente sellada. Sólo se puede abrir por afuera con un código de seguridad y antes de que preguntes, sí, es la única manera de salir de esta casa. ¿Qué no te preguntaste por qué no intenté yo tirar la puerta? Mejor abandona tu pequeña misión y trata de no molestar para que estos 5 días pasen lo más rápido posible" dijo Len mientras se levantaba e iba a la cocina que se encontraba justo al lado de la sala, los espacios divididos por una pequeña repisa de madera que servía como mesa. Pilika lo miró incrédula.
"¡No es cierto! Me estás diciendo eso sólo para asustarme. ¡JUUUUN!" exclamó Pilika mientras reanudaba su tarea de golpear la puerta. Len meneó la cabeza en resignación ante la necedad de la niña. Dejó el vaso en el que estaba tomando agua y se dirigió a donde estaba Pilika.
"Ya que no me haces caso, tendré que detenerte yo mismo. ¿Acaso crees que no sería yo el primero en salir de esta casa? Deja de hacer eso que te vas a lastimar y luego yo te voy a tener que cuidar. No soy niñero para andar vigilando mocosas malcriadas" dijo Len mientras se acercaba a Pilika que se había detenido para escuchar lo que Len decía. Cuando llegó frente a ella la tomó de la cintura, la levantó y la colocó encima de uno de sus hombros para cargarla como un costal de papas. Comenzó a caminar hacia lo que parecía una habitación pero se tuvo que detener porque Pilika lo estaba golpeando en la espalda y sus piernas estaban amenazando en hacer lo mismo pero con su hermoso rostro.
"¡Bájame pervertido, si quieres tocar a alguien contrátate a una prostituta!" gritó Pilika al borde de la histeria. Len soltó una carcajada.
"Por favor no me hagas reír, ni quien quiera tocar a una niña malcriada como tú. Prometo soltarte si ya dejas de golpear la puerta que me está dando dolor de cabeza. En serio te dije la verdad, puedo ser lo que tú quieras pero no un mentiroso" dijo Len ya un poco harto de toda la situación. Pilika pudo notar algo en la voz de él que por primera vez confió en él.
"Está bien" murmuró Pilika. Len la alcanzó a escuchar y sonrió maliciosamente ante la idea que se le acaba de ocurrir. Se acercó al sillón más grande y literalmente la arrojó ahí. Pilika que no había visto el sillón por culpa de la espalda de Len pensó que la había tirado al piso y su reacción fue gritar como alma que lleva el diablo. Len estaba tirado en el piso riéndose a más no poder, algo que no había hecho desde hace tiempo. Pilika se levantó rápidamente y lo pateó en la espalda.
"Eres un desconsiderado. ¡Pensé que mis días habían acabado! Ya me imaginaba yo con el cráneo roto en el piso!" exclamó Pilika con la respiración algo agitada. Len no pudo más que reír de nuevo ante esto. Ya que el pequeño ataque de Len iba para rato, Pilika decidió observar la casa.
Era algo grande pero muy pequeña si la comparaba con la mansión Tao. Si veía todo desde la puerta de la entrada a la izquierda se encontraba un gran comedor con doce sillas y un mueble donde se podía ver una hermosa vajilla reluciendo. A la derecha estaba ya la antes mencionada sala de estar compuesta por tres sillones de diferentes tamaños y además una televisión de gran tamaño. Al lado de la sala estaba la cocina y al lado de ésta había una puerta que Pilika suponía era una habitación. Del lado del comedor había unas escaleras que iban hacia la parte superior de la casa. Debe de haber más habitaciones supongo yo. Por último vio una puerta entre las escaleras y la puerta de la habitación que no tenía ni idea que hubiera ahí. Pilika volvió a posar su mirada sobre la figura de Len en el piso y por lo visto todavía no se le pasaba su episodio. Volvió a observar la sala y fue cuando por primera vez notó que en la esquina había una chimenea y sobre ésta había un estante con fotos. Se acercó al estante y comenzó a observar las fotos una por una. Una era de En, Bo, Jun y Len con trajes tradicionales chinos. Los padres sentados en unas sillas elegantes y los hijos sentados detrás. Una foto familiar. La siguiente era una de una Jun como de unos siete años tomada de la mano con un Len de dos. Pilika sonrió cuando vio el osito que Len traía en su mano. Otra tenía a una Jun un poco menor que la actual y a Pai Long al lado de ella, los dos sonriendo. Así fue una tras otra, hasta que llegó a una que la sorprendió demasiado. Len al lado de una chica hermosa, de una tez blanca, ojos esmeralda y cabello rojizo. En la foto Len tenía a la chica tomada de la cintura atrayéndola hacia él. Los dos sonreían como si todo estuviera bien en el mundo y, algo que hizo que Pilika sintiera envidia, Len miraba a la chica con unos ojos suaves y llenos de ternura.
Pilika tomó la foto en sus manos para observarla mejor y cerciorarse de que no estaba imaginando cosas. El ataque de Len ya había cesado y éste se estaba poniendo de pie. Buscó con la mirada a Pilika y la vio de pie junto a la chimenea con un marco de foto en sus manos. Caminó hasta ella y se puso a su lado. Pilika notó su presencia y sin pensarlo decidió resolver sus dudas.
"Len¿quién es ella?" preguntó Pilika poniéndose de frente a él. Len la miró confundido y tomó la foto de sus manos. Vio su rostro sonriente y sin mirarla a "ella" ya sabía de quien hablaba Pilika. Tomó el marco con sus dos manos y golpeándolo con su pierna lo partió en dos. Pedazos de madera y cristal salieron volando. Pilika lo miró boquiabierta. Len sacó la foto de lo que quedaba de marco y la comenzó a partir en pedacitos. Luego se dirigió a Pilika que todavía no podía creer lo que estaba presenciando. Len tomó la mano de Pilika y puso todos los pedacitos en la palma de su mano.
"Ella es alguien que no merece estar junto alas fotos de mi familia y tampoco que ocupe mi tiempo hablando sobre ella. Toma esos pedazos y quémalos, tíralos a la basura, haz muñequitos vudú si quieres, pero haz que desaparezcan de mi vista. Ya está anocheciendo, voy a tomar un baño. Si buscas tus maletas están en la habitación de allá" dijo Len con algo en la voz que Pilika no pudo descifrar. Pilika no sabía ni que decir por lo que sólo asintió con la cabeza. Lo siguió con la mirada hasta que desapareció detrás de la puerta que estaba en medio de las escaleras y lastras puerta. Así que ese era el baño.
Pilika observó los pedazos de foto que estaban en su mano. Suspiró. Ahora si que se sentía mal, si alguien sabía de corazones rotos era ella. En ese momento deseaba no haber preguntado nada de eso, pero ahora una vieja cicatriz había sido abierta gracias a ella. Fue a la cocina y tiró los pedazos en el bote de basura que había ahí. Miró a su alrededor tratando de encontrar algo en que entretenerse. Fue entonces cuando su estómago hizo un sonido que indicaba que quería comida. Pilika decidió que era hora de la cena, así que prepararía algo. Antes hubiera dejado que Len se preparara algo de comer él mismo, pero ahora se sentía culpable y esperaba que con eso su conciencia se dejara de sentir así. Prepararía un rico arroz frito con carne de res. Y así comenzó a preparar sin saber el platillo preferido de Len.
Abrió y buscó en mil puertas y estantes, tratando de buscar todos los ingredientes. En el refrigerador encontró la carne. Ahora lo único que necesitaba era una sartén donde cocinar todo. ¿Dónde habría uno de esos? Pilika abrió la puerta de uno de los estantes que estaban sobre la estufa y ahí estaba su objetivo, pero estaba en la parte más alta y ella no medía dos metros como para alcanzarla aunque fuera de parada de puntas. Buscó algo en que subirse y encontró un pequeño banco que no se veía muy estable, pero serviría. Lo acercó y se subió en él. El banco sí aumentó su altura pero seguía sin alcanzarlo, esta vez se paró de puntas y logró tomar el mango del sartén pero fue cuando el banco se movió y Pilika perdió el equilibrio, cayó de espaldas y gritó con todas sus fuerzas. La sartén salió volando también, por lo que al caer al suelo hizo un escándalo. Pilika tenía cerrados los ojos tratando de contener las lágrimas que querían escaparse del dolor que sentía su espalda y su trasero.
Ante el grito y el ruido que se escuchó de afuera, Len salió corriendo del baño, con tan solo una toalla rodeando su cintura para abajo, tratando de averiguar que era lo que había pasado. Cuando vio a Pilika tirada en el suelo con los ojos cerrados y el banco tirado, supo lo que había pasado. A decir verdad su corazón saltó un poco al pensar que se había hecho una contusión en el cráneo y se encontraba en una profunda coma. Está bien, tal vez había exagerado un poco pero igual seguro algo le había pasado. Se acercó a ella y vio que no se movía para nada. A lo mejor su sueño se había hecho realidad y la niña se había muerto, pero seguro que eso no le gustaría nada a su madre ni a Jun. La movió un poco con el pie para ver si reaccionaba.
"Hey niña¿ya te moriste? Sabes, me estoy empezando a aburrir de preguntarte lo mismo" preguntó Len. Inclinó un poco su cabeza para ver si reaccionaba y una gota de agua que había en su cabello cayó hasta aterrizar en el ojo de Pilika. Pilika reaccionó inmediatamente poniéndose de pie.
"Claro que no, cara de simio. Ya quisieras que yo me muriera tan fácilmente. ¿Por qué vienes y me hechas agua?" dijo rápidamente Pilika antes de notar el atuendo de Len. "¡Eres un pervertido! Regresa al baño y ponte algo de ropa que no quiero ver tus partes privadas!" gritó mientras buscaba algo que arrojarle a Len. Len corrió hasta el baño y se metió.
"Después de que me preocupo por ti. Además dudo mucho que mis partes privadas te desilusionarían" gritó Len desde dentro del baño. Pilika tomó el banco en el que se había parado y lo arrojó a la puerta del baño. Unas carcajadas varoniles se escucharon desde el otro lado de la puerta y Pilika no pudo más que rendirse.
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Después de que Pilika preparó la cena y ella también tomó una ducha, los dos se sentaron a comer y por primera vez se mantuvieron en silencio. Por supuesto que Len no había aceptado así como así la comida que preparó Pilika. Había mirado el plato sospechosamente y lo había olido en busca de veneno o algo por el estilo.
"Vamos no tiene nada de malo, sólo comételo. Si te llego a matar no va a ser con algo tan cobarde como veneno" comentó Pilika ante las sospechas de Len. Len la miró y luego miró de nuevo el plato.
"Deja tu el veneno, estoy seguro que con solo la comida es suficiente para matarme" dijo Len. Pilika se enojó, después de que había puesto su mayor esfuerzo.
"Ahora insultas mis dotes culinarios. Pues déjame decirte que yo era la mejor cocinera de mi pueblo" dijo Pilika triunfante. Len la miró de nuevo y tomó un bocado del platillo haciendo una mueca como si estuviera probando carne de rata. La verdad es que Pilika no decía mentiras como Len pudo comprobar después de que tragó la comida. Además de que era su platillo favorito, a la niña le salía mejor que a los cocineros de la mansión Tao. Tal vez después de todo, la niña no era tan mala después de todo. Len se comió todo el plato en 10 segundos, lo que sorprendió a Pilika y además la hizo sonreír. Len miró el plato vacío y luego a Pilika. Pilika sonrió.
"¿Quieres más? Hice más de dos porciones porque ya se que los hombres comen mucho. Son como barriles sin fondo. Siempre solía ser así cuando hacía de comer para mi hermano" comentó Pilika mientras Len la observaba. Len se avergonzó pues sabía que le había gustado mucho la comía y quería más, pero jamás lo admitiría.
"No, simplemente quería acabar con la tortura lo más rápido posible. Por favor no me hagas pasar por lo mismo dos veces" contestó Len con algo de resignación pues sabía que si quería más. Pilika sabía esto, así que se puso de pie y se dirigió a la cocina para tomar la sartén con el arroz.
"Vamos no seas orgulloso, ya sé que te encantó así que sólo cómetelo y ya no digas más estupideces para hacerme enojar" dijo Pilika mientras le servía otra gran cantidad de comida en el plato a Len.
Len la miró comer sin que ella se diera cuenta y sonrió por lo bajo. Tal vez ella no era tan insoportable como pensaba, tal vez podrían a llegar a caerse bien.
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"¿ UN CUARTO¿QUIERES DECIR UNO SOLO, UNA UNIDAD, UNO, UNO?" gritó Pilika tratando de cerciorar que había escuchado bien. Len la miró y asintió con la cabeza.
"Lamentablemente así es. No había querido decírtelo porque sabía que te pondrías así, pero no te preocupes puedes dormir en el sofá" contestó Len con una sonrisa maliciosa. Pilika lo miró sorprendida. ¿Acaso pretendía mandarla a dormir al sofá? Eso si que no. Corrió hasta la habitación y entró en ella cerrando al puerta inmediatamente tras ella. Len no supo que había pasado hasta que escuchó la puerta azotarse detrás de él. Cuando reaccionó ya era muy tarde, la niña ya se había adueñado del cuarto. Tocó al puerta varias veces.
"Vamos déjame entrar que tengo que sacar mis maletas. Te propongo un trato jugamos un piedra, papel o tijera y quien gane se queda con el cuarto" dijo Len tratando de convencer a Pilika de que abriera la puerta.
"No, seguro es para engañarme. Además se supone que tú eres el hombre. Un caballero le dejaría la habitación a la dama sin pensarlo dos veces" dijo Pilika desde el cuarto. Len se rió.
"Creo que has visto demasiadas películas románticas o simplemente me confundiste con alguien más. Vamos prometo seguir mi trato, ya si pierdo, habré perdido justamente" dijo Len, esta vez con más insistencia que la anterior. En seguida escuchó el sonido del seguro recorriéndose y la chapa de la puerta dando vuelta, y Pilika apareció en el umbral de la puerta.
"Está bien" dijo Pilika. Los dos pusieron sus manos en posición y comenzó el juego.
"Piedra, papel o tijera" dijeron los dos al mismo tiempo. Tijera y tijera. Empate.
"Piedra, papel o tijera" dijeron de nuevo. Piedra y piedra. Empate.
"Piedra, papel o tijera" dijeron un poco desesperados. Papel y papel. Empate.
"Piedra, papel o tijera" dijeron los dos al mismo tiempo. Papel de Pilika y piedra de Len. Pilika brincó de alegría y alivio.
"Te gané limpiamente. Ahora sí, ve a decir hola a tu amigo el sillón" dijo Pilika mientras daba pequeños saltitos y entraba a la habitación para tomar las maletas de Len y dárselas en su mano. Len las tomó y sin decir una palabra se retiró al baño para ponerse algo cómodo para dormir. Pilika lo siguió con la mirada y hasta llegó a sentir algo de lástima por el muchacho. Pero, ella había ganado y no habría manera de compartir esa cama. Bueno de hecho si la había, la cama era lo suficientemente grande como para que 5 personas durmieran cómodamente, pero igual no dormiría sola con él. Cerró la puerta decidiendo ponerse algo para dormir.
Cuando salió del cuarto para ir al baño a lavarse los dientes pudo ver que Len ya estaba acostado en el sillón con una almohada y cobertor. Sintió como sus mejillas se tornaron calientes cuando observó que sólo traía un pantalón de franela color azul oscuro y su pecho estaba completamente descubierto. Era cierto que no era la primera vez que lo veía así, pero realmente no lo había observado tan detenidamente como podía hacer ahora. Su piel tenía un bronceado perfecto y que decir de los músculos que ya sabía que tenía. Sin duda muchas chicas se hubieran arrodillado ante él para pedirle que salieran con ellas. Pero ella no, jamás se rebajaría a eso. Salió de sus pensamientos y entró al baño. Cuando salió de éste, las luces ya estaban apagadas y la única luz iluminando su camino era la que salía desde su cuarto. Entró a su cuarto, apagó la luz y se acostó a dormir en unos minutos ya estaba completamente dormida.
Pero alguien no lo estaba. El joven muchacho estaba bastante despierto.
Escuché cuando la niña cerró la puerta de la habitación y apagó la luz. No puedo dormir pues desde hace tiempo hay veces que sufro de insomnio. Aunque esté en la cama más cómoda del mundo hay veces que simplemente no puedo dormir. Una de esas veces es el día de hoy. Para dejar pasar el tiempo rápido y ver si acaso e quedaba dormido comencé a repasar todo lo que había pasado el día de hoy. Desde en la mañana fue un día bastante agitado. El descubrir que la niña había maquillado mi cara y además había tomado unas fotografías. Pero al final yo gané. Desde que llegó esa niña a la casa ya nada ha sido igual. ¿Pero, realmente me molesta esto? Es cierto que yo fui el que comenzó con las agresiones pero pudo haberse regresado a su casa. Pero no, se tenía que quedar y hacer que sienta cosas que pensaba haber olvidado. Luego tenía que ir y preparar mi comida favorita, y además hacerla muy bien. Debo reconocer, algo que hizo que la detestara un poco menos. Ahora que lo pienso desde que llegamos aquí no nos hemos peleado tanto como lo hacíamos en la casa. ¿Por qué será?. De pronto recordé el incidente de la fotografía de la sala. Seguro que mi madre olvidó tirarla ella misma cuando limpió. Pensé que jamás la volvería a ver aunque fuera en foto. Ella murió para mí hace mucho tiempo. La cabeza comenzó a dolerme bastante, eran punzadas que iban y venían. Lamentablemente no podía salir a tomar el aire fresco, estaba encerrado en esta jaula. Abrí los ojos y me puse de pie. Afuera todo ya estaba más oscuro. ¿Cuánto tiempo había pasado desde que me acosté? Miré mi reloj. Dos horas. Fui a la cocina y me serví leche en un vaso. Tal vez eso me ayudaría a dormir. De pronto un grito desgarrador se escuchó desde la habitación donde estaba la niña. Mi corazón ahora latía a mil por hora. Dejé el vaso y corrí en dirección de la habitación. Abrí la puerta y me sorprendió lo que vi. Mis ojos no podían creer lo que veían. Ella estaba...
Continuará...
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Wow! El tercer capítulo ... esto si es bueno...jajaja sinceramente me estoy divirtiendo mucho al escribir esta historia y además adivinen que! LES TENGO UNA SORPRESA!pero tendrán que esperar soy mala muuy mala...aburrido, divertido, carameloso, dramático? DEJENME SU OPINIÓN EN SU REVIEW!...espero que no hayan sentido que le puse mucha atención a lo de Jun y Pai Long, estoy haciendo un experimento, quiero que me digan que es lo que opinan sobre esto...por cierto pongan atención a todos los detalles que pasan o si no luego no van a saber que pasa...pronto vienen las vacaciones...terminé exámenes hace una semana y me fue super bien! y por fin entregue mi trabajo final...lo hice lo mejor que pude...ya será cuestión de la maestra que me pone...espero que me ponga una calificación alta...TTTT trabaje duro y además dejé de escribir mis fics... pero por fin por fin he acabado el año escolar! estoy feliz por bastantes cosas y espero que ustedes lo estén al menos un poco...son cosas tontas pero me alegro...respuestas a sus reviews...:
Ishizu Kaiba: perdón por no contestar a tu review en el capítulo pasado pero aquí está! Jajaja muchas gracias por tu buena suerte y si yo también espero tener los próximos capítulos pronto...bueno espero que sigas leyendo mi historia...
AYUMI: jajaja perdón por no contestar a tu review en el capítulo pasado...si ya sabía que eran 5 reviews...pero es que no tenía tiempo...aun asi sigue leyendo y ojalá te siga gustando...
Hitomi Kansaki Fanel: corre y la abraza TTTT ay no que linda eres me deseas suerte en mis exámenes y en mi trabajo bujuuuu, mis lectores me quieren... jajajaja SIIIII por favor déjame un review por capítulo! Es que me encantan...ya ves como a personas le gustan los dulces (espera esa soy yo) bueno como sea el punto es que me emociono cuando me llegan reviews...bueno espero que te siga agradando el fic...hago todo lo posible por escribir pronto...espera un momento, apenas estoy captando tu nick...TT-TT porque me tenias q recordar d escaflowne...dilandu!arriba HxV...q muera Allen...jijiji lo siento, es uno de los animes q mas me han gustado...folkeennn porq murió...
Son of twilight: ¬¬ voy a mandar a mis guarros a que te roben tu alcancía con menos un centavo eh? y sin alcancía there´s no dream for the gargo ojojojojoo ntc gracias por dejar review! Eres un amor...tan simpática...morirás un día de éstos...jajajaja ntc...la fluffy quiere ala gargo...ahi te veo por la skool...ahhh no espera ya no peye...ni modo ire a tu ksa a molestarte...ijijijijij
Girl-of-the nightsweaty: hola de nuevo! Gracias por dejar review otra vez…, por lo visto ya eres lectora de esta historia que bueno! eso me alegra...en serio me quedó divino? Ya sé jajaja ntc...mmhhh len y pilika cada vez se llevan mejor a poco no...la verdad es que no siempre vana estar así porque si no sería el cuento del nunca acabar...pero trato de hacer lo mas ameno posible cada capítulo..bueno hasta el próximo capítulo...
Pilika de Tao Asakura: te divierte? Jajaja me alegra...la verdad la verdad cuando planee esta historia no estaba en mis planes hacer escenas de risa..pero al escribirlo salió y resultó bien...gracias por tu apoyo! Me está yendo bien en mis exámenes y mi trabajo está en proceso de elaboración..espero que salga bien...sigue leyendo!
Ayumi: jajaja gracias..por supuesto que la seguiré!
juna-chan: oohh otra lectora constante... q bueno...eso de las ansias..un día de estos me va a provocar que me demanden y me hagan pagar cunetas de hospitales XD...gracias por tu apoyo! En los exámenes...bueno seguiré y espero que te siga gustando el fic..
KamiLa: O.O' jajaja se ve que te gustó como para estar dispuesta a molestar...jajajaja yo hago lo mismo cunado quiero algo..y casi siempre si sirve...bueno como sea gracias por dejar review...y que me apoyes a pesar de que me tardo tanto actualizando...
Aome: si por fin actualice...como siempre yo y mis tardaderas..lo siento hago todo lo que puedo por subirlo lo mas rápido posible...en serio lo checas diario? Eso si es un halago..el que alguien esté pendiente de mi historia TTTT...escribo bien? Muchos me dicen eso...pero necesito que me definan eso porque yo no sé que es "escribir bien"...bueno como sea gracias y sigue leyendo!
Lala girl: gracias! Escribo lo más rápido que puedo...jajaja shiiii me va a ir súper bien en las cosas de la escuela de tanta surte que me desean...bueno sigue leyendo y que te siga agradando..
Indhira Morillo: jajajaja que bueno que está saliendo cómo el fic..la verdad yo también me divierto inventando insultos y cosas así, espero y no bloquearme porque eso es horrible. Bueno sigue leyendo y lo de actualizar pronto...pues después de mayo lo haré pero por lo pronto no se puede lo siento...
Les: que divertido? Ya sé! Jajajaja lo siento estoy un poco loca..eso es lo que pasa se de tener tanto exámenes... Mmhh curiosidad..jajajaja lo sé lo estoy tratando de hacer lo mas interesente posible...sigue leyendo y dejando reviews!
Danikita-chan: gracias! Tu review fue una alegría para mi porque es muy raro recibir reviews después de que tu historia pasó de las 3 primeras páginas...porque da flojera ver las demás, yo hago eso...u.u''' bueno a tu review muchas gracias...me alegra la vida recibir reviews...pues eres una fan más entre muchas de LxP..y sigo sin entender porque no abundan los fics de LxP...si actualizo los más pronto posible...bueno espero que sigas leyendo...
Kero-chan: me da gusto que mis compatriotas lean mis fics! Jajajaja nada mas que yo soy de gdl...aunque toda mi familia nació en el d.f...bueno como sea muchas gracias por dejar review...espero que no tengas una crisis nerviosa porque como he dicho antes no tengo seguro médico y no me gusta asistir a funerales...me halaga que alguien se quede despierta leyendo mis fanfics...no pues este fic va para largo pues tengo planeada la historia para que dure unos cuantos capítulos así que no la vas a ver terminada en un buen rato, pero si con nuevos capítulos...espero que te siga gustando mi trabajo!
OIGAN! por favor por favor ayúdenme a salir de este horrible dilema en el que me encuentro...estoy haciendo un fic...al principio era yohxanna pero después a la estúpida de mi se me ocurrió leer un fic haoxanna y ahora no se que hacer! . diganme a quien prefieren? Y NO, NO HAGO TRIOS!
P.S. QUIERO QUE DEJEN MINIMO 37 REVIEWS! QUIERO MUCHOS MUCHOS REVIEWS! SI SON NUEVOS LECTORS (relamente hay algún chico leyendo esto? Oo) REGRESA AHORA MISMO A LSO OTROS CAPÍTULOS Y DEJA REVIEW POR CADA CAPÍTULO...OJOJOJOJOJO
P.S. 2 por cierto agradezco mucho que se tomen la molestia de dejar review en el fic de esta humilde servidora pero no me ayudan mucho para mejorarla si nada más ponen "síguela, ésta muy divertida..." por favor traten de opinar que les gustó y que no les gustó...por supuesto acepto dudas, sugerencias, ideas, y críticas CONSTRUCTIVAS...
P.S.3 q muera Allen Schezar...q viva dilly y folken..
Ja ne
...Eigna-fluff de V2
