El Copyright y la Marca Registrada del nombre y del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como todos los símbolos y elementos relacionados, son propiedad de Warner Bros., 2000


Tu chica perfecta
1. Todo por un programa de radio

Afuera llovía a cántaros, aún así el sol lanzaba sus últimos rayos anaranjados mientras se perdía tras los altos edificios del centro de la ciudad. El teléfono de la pensión comenzó a sonar y una de las chicas contestó.

"¿Sí, diga?"

"¿Estará Hermione Granger por ahí?"

"¿De parte de quién?"

"Ginny"

"Ok, Ginny, ya vuelvo"

Sonó la melodía de una popular canción muggle que ni por tiempo ni por interés Ginny había podido escuchar antes. Después de 10 segundos, oyó una voz de respuesta.

"¿Sí?"

"¡Ganó!"

"¿Quién ganó? Ginny, estoy ocupada, sabes?"

"No, Hermione, esto es importante y es ahora! Ron ganó el concurso de la radio, 'celebridades en ascenso'. Bueno, no precisamente Ron, porque yo me di el lujo de inscribirlo..."

"¿De qué estás hablando?"

Si era algo de Ron, le interesaba. Importase o no que no alcanzara a terminar la maqueta del hospital para mañana.

"¿Recuerdas que en la radio Sensacional Mágica, la 100.5 fm, organizaron un concurso hace unas semanas para elegir y entrevistar a alguna personalidad mágica que su carrera haya aumentado en popularidad durante el último trimestre?"

"Emmm... sí?"

"¿Y yo te dije que quizá Ron podría entrar en esa categoría porque su equipo de Quidditch había ganado las regionales tan sólo unos días antes del anuncio?"

"Ah... Ajá, sí, creo que sé de lo que hablas. Tú llamaste al programa de Wanda y..."

"Sí, lo inscribí. ¡Y ganó! Wanda lo acaba de decir al aire hace 9 minutos"

"¿Entonces?"

"Va a ser entrevistado la próxima semana"

"¡Eso es fantástico!"

"¡Claro que sí!. ¿Te imaginas cuánta gente va a escucharlo?"

"El programa de Wanda es el más escuchando entre los magos y brujas en el rango de edad 17-30 años. Lo leí en una investigación hecha hace poco"

"¡Perfecto! Lanzará la carrera de Ron al estrellato como una bengala. Pero hay pequeñísimo problemita..." Puso voz angustiosa.

"¿Cuál? Oh, espera... No..."

"No le dije a Ron. Él no lo sabe"

"¿Y qué esperas para decírselo?"

"¡QUÉ!. ¿De verdad quieres que yo se lo diga? La próxima vez que me vieras sería en los necrológicos del Profeta"

"¿Y qué vas a hacer entonces?"

"Qué vas a hacer tú"

"¿Cómo?"

"Hermione, tu eres su mejor amiga. Tienes más tacto que yo, y lo sabes"

"Oh, no, Ginny. Yo no se lo voy a decir"

"¡Por favor, Hermione! Hazlo por mí. ¡Hazlo por él!"

"Está bien, Ginny. Está bien. Yo se lo voy a decir..." dijo no muy convencida, mirando de reojo la sala de estudio de la pensión, donde todas sus compañeras hablaban animadamente sobre algún tema sin importancia.

"¡Gracias! Eres la mejor, te juro que apenas pueda te voy a recompensar de la mejor manera que se me ocurra"

"Eso espero. Adiós"

"¡Adiós!. ¡Y gracias otra vez!"

SoSoSoS

Ya había pasado una semana del día que Hermione había recibido esa llamada telefónica. No sabía cómo había convencido a Ron sin que este la asesinara en el acto. Sólo lo había esperado a la salida de un entrenamiento, le había invitado un café en una pastelería cercana y sin muchos rodeos, se lo preguntó. Él la había mirado perplejo unos segundos, pero pronto entrecerró los ojos y sonrió. Y había dicho sí. ¡Dijo que sí! Ella le recomendó enviar una lechuza a la radio para confirmar la hora de la entrevista y todo lo relacionado. Así se fueron hacia La Madriguera en un par de segundos, Ron envió a Pig con una misiva escrita al vuelo y cerca de una hora después recibieron la respuesta: en los estudios de la radio, tercer piso, locutorio 7, a las 4 de la tarde del viernes próximo. El sol ya se había puesto y Hermione tenía que darle los toques finales a un trabajo, así que volvió rápidamente a su pensión.

Ahora era ese viernes, pero apenas las 2 de la tarde. Hermione acababa de llegar del Instituto y almorzaba junto a dos de sus compañeras de la 'hermandad QA'.

"Hoy hay una fiesta en Niboro Hills, de esta chica... ¿cuál era su nombre?"

"¿La de Botánica? Keira... Kiara... algo así"

"¿Y tú Hermione, vas a ir?" le preguntó Reggie Pollini, una estudiante de Italia que vivía en la pensión con ellas.

"Puede que sí..."

"Va a haber cantidades inagotables de alcohol y... hombres!" terminó sonriendo Nikki Bentley, estudiante de primer año de Economagia.

Hermione sonrió tímidamente. Para lo que le interesaba estar con otro que no fuera Ron. Aunque fuera en una fiesta.

"Tienes que ir. Ya te estás pareciendo a esas chicas de Filosofía Medieval, que no van ni a la esquina si es más tarde que las 8"

Reggie rodó los ojos y Hermione miró el reloj.

"¿Qué estás esperando?"

"Nada importante" respondió, levantando la cabeza rápidamente y sonriendo.

"Bueno, en la tarde vamos a ir al Mall a comprar la lámpara esa para la cocina"

"¿A sí? Ya era hora" Hermione terminó su almuerzo con un vaso de jugo y se levantó. "Me voy al Instu a terminar algo"

"Tienes que llegar como a las 3.30 para que nos vayamos todas..."

"¡Ay! Es que... Lo siento, Nikki, no puedo. Hay cosas más importantes que hacer..."

"¿Qué puede ser tan importante?"

"Tengo que escuchar un programa de radio"

"Tienes que escuchar un programa de radio... ¡Esa excusa tan tonta te ofende, Hermione! Los especiales de radio los repiten siempre..."

"Además si quieres saber si ganaste un premio ellos te llaman, no?"

"Es que no es eso, no entienden" se explicó. "Van a entrevistar a Ron..." y terminando de decirlo se sonrojó un poco.

"¿Tu amigo jugador de Quidditch?" preguntó Reggie, riéndose.

"¿A qué hora?"

"A las 5"

"Vamos a las 3.30 o cerca, obviamente vamos a regresar antes..."

"Es que tampoco alcanzo a llegar. Tengo que entregar un ensayo. Lo siento chicas" Descolgó su chaqueta del perchero, se la puso, tomó sus cosas de sobre una mesa, su bolso y fue hacia la escalera.

"¡Veo que es inútil! Bueno, anda. Adiós" se despidió Nikki y siguió comiendo.

"Adiós. Escojan algo armónico"

"¡Adiós!"

SoSoSoS

Llegó la tarde y así Hermione ya estaba de regreso en el edificio. Dejó sus cosas en una de las estanterías y miró el reloj grande de la pared: eran las 4.40 y las chicas no habían llegado. Como lo había supuesto. Encendió el equipo de música, conectó al revés los cables y lo golpeó con la varita; era la única forma de escuchar las radios mágicas en un aparato muggle. Estaban dando comerciales. Se quitó la chaqueta, tomó unas hojas en blanco de la bandeja de la impresora y empezó un boceto de un texto para clases. 20 minutos después, puntualmente, el programa de Wanda empezaba.

"Hooola a todos nuestros auditores, esto es La Hora Vuela con Wanda Angel en la Sensacional Mágica 100.5 la radio del momento! Antes que cualquier cosa vamos a recordarles nuestros auspiciadores! El único sabor que desaparece sólo 20 horas después..."

"Si, bueno. Apúrate" se dijo a sí misma Hermione. Dejó sus cosas sobre la mesa. Se recostó cómodamente mirando el techo en el sofá grande y se dedicó a sólo escuchar.

"...y como les prometí la semana pasada, el invitado del día de hoy es un joven promesa del Quidditch nacional, guardián de los Squart Rangers, uno de los equipos regionales que está pegando fuerte esta temporada. ¡Bienvenido Ronald Weasley!. ¿Cómo estás?"

"Hola, Wanda. Bien, y tú?"

Hermione respiró profundo. Sí, era él. Y no se oía para nada nervioso, por suerte.

"Perfecto. La semana pasada, tu equipo le ganó por un inigualable puntaje de 790 a 30. ¿Podemos decir que esto es mérito tuyo?"

"Merito mío, no. Mérito de todo el equipo. Todos jugaron espectacular..."

Oh, Quidditch. 20 minutos hablando de Quidditch. Hermione sabía que al fin y al cabo ese era uno de los propósitos del programa, pero no podía evitar sonarle aburrido. Escuchó atentamente cada pregunta, cada respuesta, aunque muchas veces no le llegara más allá del tímpano.

"Estoy segura de que nuestros auditores están muy deseosos de saber más de ti, Ronald. Pero del Ronald fuera del juego. ¿Qué nos puedes contar de tu persona?"

"Bueno, Wanda. Dime que es exactamente lo que ellos quisieran saber, porque mi 'persona' es un concepto un poco amplio" Se oyó que Wanda reía.

Hermione alzó una ceja. ¡Era como si Ron fuera todo un experimentado en entrevistas por radio!

"¿Edad?"

"20"

"¡Eres muy joven! Estoy segura que muchos de nuestros auditores se preguntarán por qué elegiste el Quidditch como carrera"

"Porque me gusta, por supuesto. Costó un poco darme cuenta de que no era tan mal jugador como pensaba... y pues aquí me ves"

"¿Seguirás jugando siempre con los Rangers?"

"Siempre que mi equipo favorito, los Chudley Cannons, no me ofrezca un buen contrato" Se volvieron a oír risas.

"Pero sabes que eso es muy probable. Eres el jugador más destacado del último tiempo. No me equivocaría al decir que todos te aman, Ronald" Ron se rió más fuerte. "No, en serio. Y hablando de amor... Sí, yo sé que quieres hablar de esto" Se oyeron otra vez carcajadas, pero ésta vez más sutiles. "¿Tienes novia?"

"No"

"¿Novio tampoco?" Ron se reía otra vez.

"Soy hétero, pero no, Wanda. Estoy completamente disponible"

Hermione se reacomodó en el sofá, sonriendo. Se imaginaba a Ron un poco cohibido hablando del tema, como siempre se ponía cuando éste surgía en reuniones sociales. Se habría tomado medio litro de veritaserum antes de entrar al estudio, debía ser eso...

"Y te apuesto que muchas de nuestras auditoras que te han visto ser mueren por ti. No falta mucho para que te hagan un club de fans"

"No creo que eso suceda..."

"¿Ah no? Pues no estés tan seguro. Entonces... cómo es tu mujer ideal?"

"¿Mi mujer ideal?"

"Tu chica perfecta, Ron. No tienes novia, pero cómo te la imaginas. ¿Cómo debe ser?"

"Pues..." Se rió, ésta vez nervioso.

Hermione se sentó de improviso, atenta a cualquier cosa. ¿Por qué le preocupaba tanto? Porque esa pregunta sí que no la había oído nunca de la boca de Ron. No, eso tenía que escucharlo. Sin perderse ningún detalle. ¿Cómo se iba a quitar Ron la pregunta de encima?

"¡Ahora sí te puse en aprietos, Ronald!" Se oyeron muchas risas, como si hubiese más gente en el estudio. "Quizás... si sólo describes a una ex-novia, alguna niña que te guste... Te tiene que gustar alguien, a uno siempre le gusta alguien"

"Mmm, sí, vale..."

"Mejor piénsalo para después de esta pequeña tanda de comerciales. ¡No cambien de sintonía, chicos! En breves minutos volvemos con La Hora Vuela"

¡Comerciales! Hermione se golpeó en la frente con la palma y se puso de pie. Fue a la cocina a buscar un vaso de jugo fresco de framaranja, el último invento de alguna de sus compañeras que estudiaba para nutricionista. Entre tanto, se oyeron voces desde la primera planta del edificio, luego pasos y las voces se hacían más claras, hasta que las dueñas de esas voces llegaron al piso. Nikki, Reggie, Antoinette y Rose; algunas de sus compañeras del pensionado cargadas de bolsas con logos del centro comercial más cercano.

"¡Hermione, de lo que te perdiste!"

"Vimos a unos chicos tan, tan guapos!"

"Y trajimos la lámpara perfecta, te va a encantar"

Cada una se fue a su habitación con sus respectivas bolsas menos Rose quien entró a la cocina con Hermione, dejó la bolsa sobre la mesa comedor y la abrió, revelando una caja que a su vez contenía una lámpara colgante de color verde oscuro, como todo el mobiliario de la cocina.

"¿Me ayudas a colgarla?"

"Sí, claro"

Hermione sostuvo la lámpara nueva, mientras Rose descolgaba la vieja con un conjuro. Pero en ese momento, se escuchó desde la radio:

"¡Estamos de vuelta con La Hora Vuela en Sensacional Mágica! Nuestro invitado del día, para quienes recién se incorporan a nuestra sintonía, es Ronald Weasley, jugador de..."

Dejó la lámpara sobre la mesa y corrió a pararse frente a la radio y subirle el volumen, como si esta fuera un televisor. Rose gritó algo como "¡Oye!" pero no la escuchó, sólo se prendió a los parlantes.

"...los asuntos personales de este fantástico guardián de Quidditch. Veamos Ronald, recuerdas la pregunta?"

"Perfectamente, Wanda"

"Pero para los recién 'colgados' a la radio, la repetiré una vez más. Ronald Weasley, podrías describirnos a tu chica perfecta?"

"Una pregunta bastante difícil pero intentaré contestarla de la mejor forma posible, Wanda..."

"¿Hermione, qué..." empezó Rose.

"¡Shht!" la silenció ésta.

"...tendría que tener las siguientes características..."

"¡Atentas, chicas!" anunció Wanda.

"Debe tener facciones perfectas, curvilínea, alta, de cabello brillante..."

"¿Qué?" exclamó Hermione.

"...sedoso, liso, independiente del color que debe por supuesto tener reflejos..."

"¿A la última moda, no?"

"...ojalá ojos claros, buen estado físico..."

"¿Estás bromeando, verdad?" le preguntó Hermione, incrédula, a la radio.

"...vestirse elegante, o por lo menos saber combinar bien los colores, ser sociable, no hostigosa, graciosa, bella..."

Era como si el mundo se hubiese congelado por un momento. Para Ronald Weasley, la chica perfecta era la mujer más superficial del mundo, todo lo contrario a la que ella podía aspirar. Su mano se levantó sola, sin que ella le diera la instrucción, y su dedo índice presionó el botón rojo de 'encendido' del equipo de música. No podía seguir escuchando más.

Continuará...


Wow, aquí estoy de vuelta con un R-Hr, me imagino que ya se preguntaban por qué no actualizaba. Este cap lo tenía listo hace un rato ya, en fin... Este fic cuenta con la regla del uno y medio, vale decir que voy a publicar un capítulo cada vez que tenga la mitad del siguiente listo, obviamente también dependiendo la cantidad de reviews que reciba, soy una persona exigente y lo saben xD. Así que ahí, donde dice submit review hacen clic en Go y puede que antes de lo que esperan vean el siguiente capítulo :)

Hagan que este fic me importe, porque voy a estar publicando dos a la vez xD