CAMPO DE BATALLA
El fragor de la batalla, comenzaba a disminuir. En parte debido a las bajas sufridas por el bando enemigo, en parte a las condiciones del clima.
A mitad del combate una intensa lluvia los había azotado; aun así Roy continuó por algún tiempo usando sus guantes y alquimia; cuando el uso de esta se hizo imposible, recurrió a las armas de fuego, como la mayoría de sus soldados.
Faltó de practica de tales armas; habían hecho que tardara más de lo debido en cargar la munición en pleno campo. Y la lentitud en una guerra era signo de derrota.
Una fuerte detonación se escuchó a su derecha; acompañado del único aroma que era capaz de reconocer a un kilómetro de distancia. Giró su cuerpo en dirección del ruido y del aroma; solo para toparse con unos cabellos dorados, que se habían desbordado como una presa.
Antes de que pudiera decirle algo; la acérrima mujer ya se alejaba algunos metros de él. Verla ahí de pie entre el terror de la guerra; el frío de la noche, la lluvia y el lodo que se habían aferrado a su frágil cuerpo, le recordaban porque debía pelear y salir con vida.
Inexplicablemente frente a sus ojos; su cuerpo se desvaneció lentamente. Abriendo de par en par sus ojos, ante tal escena, corrió hacia ella; sosteniéndola en sus brazos al tiempo que buscaba con la vista al culpable.
Lo encontró cerca de donde el estaba. El hombre que estuvo a punto de dispararle y al que Riza creyó muerto, había detonado su última munición en ella.
Nunca creyó que fuera capaz de dispararle a un hombre con tanta convicción; pero el cuerpo que sostenía lo ameritaba.
Cuando no le quedó la menor duda de que el condenado estaba muerto; corrió hacia la enfermería. Dejando al frente a Havoc.
Aunque no lo quisiera aceptar; su alma había abandonado su cuerpo. Y al creerlo las lagrimas acudieron sin freno a él, confundiéndose con la lluvia.
-"Coronel Mustang, la Teniente Hawkeye, esta bien, la bala solo perforo su clavícula y su desmayo fue debido al cansancio" –las palabras del doctor, fuero para él, la victoria en esa guerra.
La encontró recostada en la cama; con el brazo enyesado. Nada había cambiado en ella, conservaba incluso en esas condiciones, su belleza, que en vano trataban de opacar, el lodo y algunos rastros de sangre. Tomó su mano entre las de él, y comenzó a murmurar algo para si mismol.
-"No llores, aun no estoy muerta" –habló con voz entrecortada, al sentir su calidez y algunas lagrimas que corrían por su mano.
-"Tan solo es la lluvia. Me da gusto que estés bien, y por favor nunca mas vuelvas a asustarme como hoy, ¡quieres!"
-"Procure ser mas rápido cargando el cartucho, en ese caso"
-"Tengo en mente algo mejor. Nunca mas, dejarte venir a este tipo de misiones que ponen en riesgo lo mas valioso para mí. Mi pequeña"
Sonrojada ante tales palabras; trato de inclinarse y besar los labios de su protector.
Dedicado en especial, a mi amiga de larga distancia ALCHEMIST-CAGALLI. Espero te haya gustado mi regalo de cumpleaños.
Y espero les guste a todas. Tal vez no es un final de maravilla, pero tenía que ser algo sutil. ahora que como soy un poco indecisa y en una parte pensé que quedaría mejor si Riza muriera, lo hice. Y aunque no me guste aceptarlo creo que quedo mejor.
Puedes leer ambas versiones y decidir cual es mejor, si me dejas un review, mas feliz estaré jeje. Por mi parte me quedo con este final, no me gusta ver sufrir a Roy.
TAO JUN SHINOMORI.
