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VERDADES Y REFLEXIONES

Los demas Skylanders seguían con la remodelacíon del refugio para protegerlo de cualquier ataque troll que estuviese por pasar. Pero Spyro decidío seguir hacíendo eso de la calma que intentar trabajar con el grupo, necesitaba concentrarse para conseguir el maximo de su poder escondido en su interior, así lograría vencer a los trolls y a Kaos para que dejasen a Skylands en paz de una vez por todas.

Se sento encima del pedestal hegaxonal cruzando las piernas para ponerse en una posicion comoda y tradicional.

Mantuvo los ojos cerrados para no distraerse y quedandose con solamente su percepcíon y oído, con ello escuchaba la tranquilidad de que rondaba la sala y permitía que aquello de la calma le reconfortase su fuerza interior.

Estaba todo tan tranquilo que parecía empezar a ser un aburrimiento, pero era algo reconfortable estar ahí y escuchar la calma, una calma tan silenciosa que le dejaba en un estado nublado y apacible.

Respíro hondo y siguío reconfortandose con la calma, necesitaba concentracíon porque sino aquello de la calma no serviría para nada.

Estaba tan metido en sus pensamientos que parecía como si estuviese soñando, se le venían cosas a la cabeza, como el dia del septimo cumpleaños de el y de Sparx: Estaban los dos al lado de una mesa grande, arriba había una cuerda que sostenía unas cartulinas de colores vivos cortadas de forma triangular, al lado estaban todos sus amigos y familiares celebrando que festejaban sus cumpleaños. De pronto la madre, les llamo, todos se juntaron y entonces aparecío el padre sosteníendo una tarta blanca con una cubierta rosada en lo alto de la tarta, ambos se juntaron queríendo soplar las velas de la tarta, la madre se acerco y con una vela encendío las pequeñas velas que estaban encima de la tarta, después todos contaron hasta diez y luego ambos soplaron las velas, a partir de ese momento ambos tenían siete años, un año mas al que les hacía acercarse a ser grandes hombres, ambos se abrazaron entusiasmados por haber apagado las velas, pero entonces se fijaron que su amigo Turk casi se abalanzaba contra, todos protestaron y apartaron a la enorme libélula de la tarta.

Algo en Spyro se abrumo, se percato de una cosa que le hizo estremecerse.

Después de haber apagado las velas, todos se pusíeron a comerse la tarta, el y Sparx se empezaron a comer cada uno de los trozos de la tarta, se dieron un bocado y de pronto cuando se bajaron el trozo, se percataron de que Sparx tenía todo el labio con la cubierta rosada, aquello resulto tan gracioso porque le hacía parecer una mujer que se había pintado de mala manera los labios, todos se rieron a carcajadas y Sparx se puso tan exageradamente gracioso que se empezo a enfrentar con cada uno que bromease sobre el, el primero de todos fuese su hermano Spyro al cual le empezo a corretear por ambos lados, pero al final le agarro porque se fue volando y entonces le agarro de los cuernos y empezo a estrujarselos, todos se rieron de la forma en que se estaban comportando los dos, así eran los hermanos.

Aquella imagen en sus ojos fue tan fuerte que le desperto de su calma, pego un alarido tan fuerte que le dejo abrumado y casi ahogandose.

El silencio que había en la sala se fue como si nada.

Spyro se asusto tanto al ver aquel recuerdo que le dejo en un estado incomprensible, empezo a dificultarle las cosas por dentro, como si algo que estuviese dentro se le hubíese arrancado y ahora se sentía vacío. No entendío del todo a que se debía aquellas imagenes, pero supo deducir a que se debía, había estado tanto tiempo pensando que se sentía solo, que olvido las partes buenas que tuvo en el pasado, en aquel momento no estuvo tan solo, compartío grandes cosas con Sparx, los cumplea-ños, las acampadas, los viajes, hasta cuando estuvieron dispuestos a disculpar al mercado del cual lo habían inundado con sus fechorías. Empezo a verlo con claridad, se sentía tan debil debido a que se había pasado tanto tiempo buscando las malas cosas, en vez de buscar lo bueno que había tenido en su vida, ahora ya no era algo arrancado, era algo devuelto, porque aquello le hizo recobrarle el sentido a todas sus dudas, el problema no fue del todo Sparx, sino el, por no haber seguido adelante a pesar de verlo todo confuso y solitario.

-Lo siento -dijo Spyro lamentandose por haberle tenido tanta culpa a su hermano, ahora se lamentaba haberse comportado como antes.

De pronto oyo un extraño sonido sospechoso.

Alzo la cabeza asustandose de manera sorprendida al escuchar ese sonido, se había pasado tanto tiempo en calma, que ya le parecía algo anormal el ruido.

Se puso a cuatro patas y empezo a ir fijandose en los alrededores para buscar al responsable de hacer ese sonido tan sospechoso.

Empezo a sospechar entre los lados oscuros de la sala, penso que a lo mejor había algúna cosa ocultandose entre los alrededores, algo le observaba seguramente. Se quedo firme donde estaba buscando el punto sorpresivo del individuo. Algo lo observaba y seguramente no era para poder vigilarle y examinarle como un animal indefenso, tramaba algo ese individuo y venía a por el.

De pronto el ruido se hizo mas fuerte.

Fue tan fuerte que supo reconocer de donde venía, de afuera.

Corrío hacía la salida de la sala de reflexíon y entro de vuelta en la sala de entrenamiento, volvío al punto de partida y no había nada excepto los instrumentos de prueba que yacían en toda la sala, parecía estar todo en calma, pero escuchar dos veces el mismo, y que a cada momento se aumente su sonido, no sonaba nada bueno.

Parecía que todo se había arreglado pero no cambíaba el hecho de que algo estaba pasando y tenía que ver con el.

De pronto un sonido metalico le hizo reaccíonar precipitadamente.

Se giro a un lado pensando que lo iban a atacar, pero resulto que solamente eran los aros incendiarios que colgaban del techo, los había movido el viento hacíendo que tintinee golpenadose los unos a los otros.

No era nada hostil, pero aquello le hizo darse cuenta de que tenía antes que examinar los objetos que le rodeaban en vez de precipitarse a la ligera, se imagino que tenía una lanza o un cuchillo y una persona se le acercase y por culpa de un grito que le hizo hiciese que se girase y por accidente se lo clavase, sería algo lamentable si sucediese, por eso tenía que tener cuidado con lo que oía.

Aquella idea de la lanza le dio una idea, fue hasta el puesto de armas defensivas y agarro una de las lanza que servía para practicar el tiro al blanco, quería estar mas protegido por si acaso algo se le pasaba por delante y tenía que lanzarselo, camino por el centro de la sala pensando que a lo mejor aquel extraño individuo se estaba moviendo por algúna parte.

-Seas quien seas, sera mejor que te vayas por donde has venido, o te arrepentiras de haber ido contra mi -contesto Spyro dando un aviso para que al menos entendiese el individuo que sería algo pecaminoso enfrentarse a el.

En ese momento el ruido volvío, pero esta vez se oyo como de algo moviendose entre las paredes, como si diese golpes al caminar, pero aquello sonaba algo imposible, si es que acaso se trataba de una persona en particular.

Spyro dio una exclamacíon de nervios, no tenía ni idea de quien era el que le estaba amenazando y sobre donde estaba, alzo su lanza preparandose para atacar.

De pronto se oyo otro ruido, era como un sonido mecanico, como el de las maquinas de el entrenamiento, se giro y observo que hacía ese ruido, mas atras al fondo, se estaba abriendo otro compartimento, como el de la sala de calma.

La puerta se abrío del todo dando un gran estruendo mecanico.

Spyro se extraño al ver eso, no tenía ni idea de que hacía aquel compartimento, creyo que la sala de calma era la uníca sala secreta que había. Avanzo lentamente porque no se esperaba que aquello fuese una corazonada, se paro delante de la puerta abierta y observo todo un fondo oscuro y negro, no se veía ni un fondo mas atras, era como estar viendo una puerta que no lleva a ningúna parte.

Fruncío el ceño, de pronto se percato de que si Gill le había mostrado la sala de calma, entonces porque no le enseño aquella otra, a lo mejor estaba tramando algo como siempre, siempre tenía un plan con el y nunca daba detalles acerca de como era el asunto, siempre siendo un libro cerrado.

De pronto se oyo algo parecido a una risa perturbadora.

Alzo su lanza, aquello le dio un susto y se imagino que seguramente era cosa del individuo que lo andaba siguiendo por todo el lugar, aquella extraña sala oscura debía estar relacionada con el individuo, y esa risa tan perturbadora debía de ser la primera señal que daba, pero para ser una señal, levantaba mucho los nervios.

Observo el fondo, seguía sin verse nada, ni nada de movimiento.

-¿Quien esta ahí? -pregunto queriendo verificar la identidad del individuo.

Volvío a sonar la risa perturbadora.

-Seas quien seas, sera mejor que no te acerques, o sufriras mis llamaradas, y no te gustaran después -volvío a avisarle.

Se seguía oyendo la risa, pero cuanto mas lo hacía, ya sonaba a algo macabro, porque no era normal oír reirse a alguién de esa forma.

Spyro estaba perdiendo la paciencia, si seguía oyendo aún mas esa risa, entraría a atacar para hacer callar a ese individuo tan desquiciado.

-¿Porque te ries tanto? ¿Es que acaso me estas tomando el pelo? -quería al menos verificar porque le daba tanta risa a aquel individuo, por algúna razón se reía.

De pronto la risa dejo de seguir oyendose, parecía que sus avisos le habían hecho cambiar de opinion al individuo, bajo su lanza al notar que todo se puso en calma, sea quien fuese, parecía haberse ido.

Se giro apunto de irse cuando de pronto oyo algo diferente, no noto que era, pero sonaba a algo que se acercaba. Volvío a fijarse en el fondo negro, y noto que una extraña luz verde brillante se estaba formando dentro de la sala.

Spyro se extraño, aquello era algo nuevo comparado con las otras cosas.

La luz se iba agrandando, estaba claro que era una persona el que lo hacía, y se estaba acercando desde dentro de la sala oscurecida.

-¿Quien eres? ¿Eres acaso el individuo que me ha estado siguiendo todo este rato? ¿Acaso eres tu? -daba preguntas Spyro porque quería confirmar que era el individuo el que hacía esa luz tan brillante.

Ahora que estaba mas cerca el individuo, pudo notarse que se trataba de algo pequeño, como una persona de pequeño animal translucido. Aquello que veía no tenía logica, pensaba que debía de tratarse de algún juguete con funcíones de luz, pero se movía al igual que una persona, así que debía de tratarse de una criatura que nunca antes había visto en su vida.

El individuo estuvo a tan solo unos metros de su posicíon, pudo notarse que era muy pequeño, no tenía piernas, andaba saltando, y tenía una cara parecida a la del tiki Double Trouble, solo que mas pequeña e infantil.

Spyro se quedo extrañado al ver a aquel extraño personaje, no tenía ni idea de donde había venido ni quien era, penso que a lo mejor debía de tratarse de un amigo de Double, pero parecía algo extraño que estuviese brillando de aquella manera, era como si estuviese viendo un fantasma.

Ambos se quedaron mirando sin actuar, solo examinandose.

Ahora que tenía a aquel pequeño tiki delante, no sabía que hacer, tenía aspecto de ser un bebe, así que a lo mejor debía de estar asustado y necesitaba a alguién.

-Hola -le saludo.

El tiki hizo un gemido rechinante, de pronto empezo a moversele todo el cuerpo como si tuviese nervios en su cuerpo, al cabo de unos segundos ya parecía que iba a estallar porque se movía a una velocidad incompensible.

Spyro se quedo con los ojos abiertos porque no podía creer lo que estaba viendo, no sabía si para aquel tiki era su forma de contestar o estaba a punto de estallar de la emocíon, pero de todas formas aquello sono peligroso para el.

Ahora no solo se movía histericamente sino que ademas hacía gemía como de ahogarse, parecía un animal gimiendo de dolor, en ese momento salto disparado como un muelle directo hacía Spyro, justo cuando se choco con su cara, el tiki estallo en mil destellos verdes que le nublaron la vista ante tanta luz.

Los destellos se fueron tal y como vinieron, Spyro alzo la vista observando que aquel tiki estallo como si fuese un petardo, no era normal, estaba hecho de algo que al chocar con algo estallaba en pedazos, fuese lo que fuese, daba algo de pena.

De pronto, mas al fondo de la sala oscurecida, se volvía a iluminar mas adelante y se noto que habían mas tikis de esos, aparecían y desaparecían mientras anda-ban por todas las partes de la sala.

Spyro supo comprender que aquello de los tikis sonaba a una especie de broma pesada, alguién generaba esos tikis y era el responsable de los otros ruidos. Agarro firmemente la lanza y marcho corriendo dentro de la sala.

Acabo metido en ningúna parte, todo el lugar estaba oscurecido pero pudo notar que había columnas que subían hasta el techo, no comprendía que era aquel lugar pero debía de estar por algúna razón, tal vez un escondite, un salón privado, pero según por lo veía no reconocía a que se debía particularmente.

De pronto volvíeron a oirse los pasos que hacían crujir las paredes. Se giro espontanemente hacía atras y observo un aura de luz verde alejandose tras una pared oculta, era un tiki escapando.

-¡Alto ahí! -le aviso y luego se puso a correr.

Lo siguío hasta aquel muro oculto en la oscuridad, giro hasta entrar en la esquina y de pronto observo al tiki de espaldas delante de una pared sin salida, parecía que aquel tiki estaba asustado, tal vez debío de ser el al perseguirle.

-Tranquilo pequeño tiki, no te voy a hacer daño -intento de hacerle convencer que no era una amenaza para el.

De pronto aquel tiki exploto al igual que el interior, dejando un rastro de destellos verdes que se desvanecíeron en el aire. Spyro se quedo confuso y extrañado al ver como estallo el tiki, ya no entendía que les pasaba y de donde salían acaso, algo estaba pasando y estaba relacionado con el, al entrar ahí estaba en peligro.

Entonces volvío a oírse la misma risa perversa de antes.

Salío corriendo de la esquina y volvío al centro de la sala, no había nada a los alrededores pero algo decía que no estaba seguro.

Camino lentamente para asegurarse de que no había nadie mas, si habían algún provocador por ahí tenía que estar escondido en el camino. Justo cuando avanzo cerca de un muro, unos ojos verdes y enormes se abríeron mirandole.

Oyo un grito y se giro para ver que había otro de los tikis, este se abalanzo sobre el y empezo a atacarle ferozmente, se protegío con la lanza mientras el tiki le daba mordiscos evitando que le hiciese uno, aquel era mas salvaje que los otros, era como si lo hubíese visto como comida y quisiera darle un bocado.

Spyro forzo como pudo al intentar librarse de aquel tiki, era muy fuerte y cuanto mas se movía, mas le dificultaba buscar una forma de librarse de el, entonces se le ocurrío utilizar sus habilidades contra el. Encendío sus alas de fuego y avanzo a toda velocidad hacía atras salíendo volando verticalmente, el tiki no se espero eso y cayo desmedido hacía atras cayendo de cabeza, en aquel momento estallo al igual que los otros, hacíendo una pequeña explosíon de destellos verdes.

-¿De que estan hechos estos seres? -se pregunto Spyro a si mismo porque ya no encontraba logíca algúna a la composicion de como estaban hechos los tikis.

De pronto oyo toda una serie de gritos.

Se giro y observo que en ambos lugares de la sala se notaban un grupo de luces verdes andando en diferentes seccíones, ahora si que no supo como enfrentarse a ellos teniendolos a todos separados, pero se fijo que había uno que giro hacía la derecha metiendose detras de un muro.

Fue directo hacía el volando, atraveso la pared y aterrizo al girar observando que había uno de los tikis escapando sigilosamente para no llamar la atencíon, el tiki se dio cuenta de su presencia y se giro poníendo una mirada de terror.

-¿Quien te envia? -pregunto Spyro con tono de interrogacíon, quería ahora saber quien era el que producía a los tikis.

Inmediatamente el tiki salío corriendo dando saltos intentando huir.

Spyro no se dio por vencido con aquel, activo las llamaradas de su cuerpo y salío disparado como un cohete yendo a por el tiki. El pequeño tiki se dio cuenta de que venía el dragon hacía el, tenía que escapar lo mas rapído posible antes de que lo alcanzase, pero no podía dar mucha velocidad porque solo daba saltitos.

Avanzo a gran velocídad y atajo al tiki con sus garras, pero justo antes de que pudíese agarrarlo con las manos, el tiki estallo y el dio una voltereta de bruces mientras seguía volando, al girar se precipito contra el suelo quedandose con las patas cruzadas, se sintio toda la mitad del cuerpo dolorida con el impacto, se giro hacía atras y se dio cuenta de que el tiki había estallado como los demas.

-Rayos -dijo Spyro mosqueado.

Ya no entendía porque estaban sucediendo todas esas cosas, estaba claro que era una broma cruel porque si hubiese sido un ataque enemigo habría sido mas violento, pero no, lo atacaban un grupo de tikis explosivos que no dejaban de venir.

De pronto oyo la misma risa perversa, pero esta vez no se escuchaba una sola, había un grupo de risas que sonaban simultanemante.

Se levanto sintiendo que aquello iba a peor, penso en todas las cosas que había sucedido, primero se oyeron golpes, luego una risa perversa, se abre una sala secreta, lo ataca un tiki desconocido y que estalla en destellos, y ahora el conjunto de risas diabolicas que faltaba, la broma iba a seguir hasta ser mas peligroso todavía.

-¿Que es lo que quieres de mi? ¿Acaso te estas burlando de mi, porque al final lo has conseguido? -pregunto Spyro exigiendo saber porque le estaban hacíendo eso, ya no aguantaba mas tener que enfrentarse a semejante farsa.

Las risas seguían y el ambiente empezaba a sonar sombria, miro al techo y parecía que se le iba a caer encima, estaba tan oscuro que desde ese angulo no se notaba su longitud, volvío a alzar la vista delante y se dio cuenta de que todo el ambiente formaba parte de lo mismo, pero porque razón iba todo contra el, acaso era un castigo por no haber perdonado a Sparx, por haber condujido a los trolls aún sabíendo que no sabía si sucedería no, cualquier cosa podía ser pero ningúna daba respuesta.

-¿Porque me estas hacíendo todo esto? Solamente quiero ser el lider definitivo para este grupo, nada mas, no quiero que se me castigue por nada, solamente quiero aprender a superarlo todo, por favor, dejadme en paz -exigío queriendo que todo parase porque había llegado a la conclusíon de que todo era un castigo pero no se sabía porque, aún así, quería que lo perdonasen por tal cosa.

Estaba tan traumatizado por todo lo que había sucedido, que se sento con las piernas cruzadas y se tapo la cara con los brazos para que no se le viese que estaba llorando, ya no pudo mas de aguantar tanto desprecio, solamente quería ser fuerte, ser mejor de lo que había sido nunca, pero ahora todos estaban en su contra y aquello no le dejaba seguir ser el hombre que quería ser.

De pronto noto que una gran calma envolvío el alrededor, parecía que todo había vuelto a la normalidad, quien fuese el que lo castigaba, lo había perdonado.

Todo se quedo tranquilo hasta que alguién hablo en la sala.

-Has hecho bien Spyro -pronuncío el individuo su nombre.

Spyro se exaspero al oír eso, no entendío que fue eso, pero dio un susto en base a que había estado todo el rato solo en esa sala, levanto la vista y no habíe delante.

Entonces las luces se prendieron, había un grupo de factuovelas colgando de los techos, cada uno ilumino para de toda la sala, la oscuridad había desaparecido.

Spyro se quedo confundido, no pudo creer que aquella sala tuviese luz después del mal rato por el que paso, parecía un milagro pero todo tenía su logica, se levanto intentando seguir de donde provenía la voz que dijo su nombre, giro a un lado de la pared donde estaba metido, se quedo mirando delante para saber quien era el que le hablo, no había nadie, era como si lo hubíese imaginado.

-Aqui Spyro -le volvío hablar avisandole de donde estaba.

Se giro de manera imprudente hacía un lado y observo que dos de los Skylanders los tenía a unos metros, eran Gill y el tiki original Double Trouble.

-Gill, Double, ¿que haceís aqui? -no comprendío que hacían allí.

-Hemos estado entrenandote -comento Gill.

-¿Como que entrenandome? -pregunto y de pronto se quedo pensando, ahora comprendío todo, no se trataba de una broma, era una prueba.

-Si así es Spyro, era una prueba -afirmo Gill sabíendo en que pensaba.

No pude creerse que todo este tiempo resultase ser una prueba, y no le habían dicho nada, solamente le dejaron creerse que lo atacaban como un acto de castigo.

-¿Y me habeís hecho sufrir todo este tiempo? -pregunto queríendo entender como pudíeron ser tan crueles para hacerle eso.

-Era parte de la prueba, teníamos que saber si eras capaz de resistirte a cualquier acto discriminatorio pero defendiendote con tal de respetar tu puesto -explíco Gill cual era el objetivo del plan.

Ahora comprendío Spyro en parte todo lo que había hecho y sucedido, todo formaba parte como de un insulto, pero no un insulto verbal, sino un acto violento contra el, y justo en el peor momento, contradijo todo lo que quería ser con tal de seguir siendo el que era.

-¿Y ha funcíonado? -ahora quiso verificar que había funcionado la prueba.

-Si, has defendido tu puesto a pesar de que todo estuviese en tu contra, vas aprendiendo rapído, mejor de lo que pensaba -confirmo Gill orgulloso de el.

-Ooga booga debería estar orgulloso ooga booga -felicitio Double.

Spyro se sintío algo satisfecho por eso, a pesar de que claro le habían montado una prueba que casi le mataba de un susto.

-Pues yo estoy mas orgulloso de hacer algo mucho mejor -exclamo Spyro.

-¿De que? -pregunto Gill sin comprender a que se refería.

-A sacarte las escamas de tu piel, maldito pescado -se puso tan furioso que fue directo a sacarse el odio con Gill mosqueado con la absurda prueba que le hizo.

Gill se dio cuenta de lo que pretendía Spyro, en aquel caso le hizo un gesto a Double para que hiciese lo que debía cuando se trataba de eso. Double extendío su vara y el orbe que había en la punta de pronto empezo a iluminarse.

Cuando Spyro se acerco para zurrar a Gill, Double creo un escudo de energia hacíendo que el dragon se precipitase contra el, el golpe fue tan fuerte que Spyro cayo desparramado hacía unos metros quedandose acostado boca arriba.

-Lamento que haya tenido que hacer Spyro, pero no podía dejar que lo hicieras -se disculpo Gill razonando con el.

-¿Entonces porque me has hecho esa prueba tan cruel? -pregunto replicando Spyro enfadado por las varias cosas que le hicíeron por su culpa.

-Puede que fuese cruel, pero lo había hecho para que entendieras que debes enfrentarte a tus miedos aún sabiendo que sigan incordiandote a pesar de estar en un buen lugar y con una buena gente -explíco Gill.

-¿Entonces porque no me dijiste que hiciese la prueba, en vez de estar hacíendo este lio que casi me mata del miedo? -pregunto ahora queriendo entender porque no lo hicieron desde el principio, en vez de hacerlo por sorpresa.

-Porque si hubieses aceptado hacer la prueba, habrías entendido que era una, y a lo mejor no habría sucedido lo que tenía que pasar.

-¿Y que tenía que pasar? -replico mientras se ponía de vuelta a cuatro patas.

-Que defendieras tu puesto, que protestaras porque quieres ser un general, que quieres cambiar a pesar de que hayan risas que se te burlen de ti y eso te lo impida, tienes que defenderte a toda costa de lo que te digan, porque sino, no tienes fortaleza, no tienes el orgullo que debe de tener todo general -abrevío Gill mientras se acercaba poniendo un tono serio y estricto.

-Ooga booga porque sino no serviríamos para el oficio y tendríamos que volver a lo de siempre, y eso nos ha costado mucho trabajo desde que viniste ooga booga -aclaro Double.

Comprendío Spyro la razón, pero no el motivo.

-¿Pero porque? -pregunto timidamente.

-Porque el otro dia vi que cuando yo y Stump nos peleabamos, tu te derrumbaste, te caiste en tus miedos y paranoias, y eso no puedo consentirlo mientras te este enntrenando, porque cosas como esas, son las que nos hacen fuertes, y si no puedes superarlas, entonces no eres apto para superar lo proximo -explíco Gill hacíendole comprender el error que tomo al no poder afrontar sus miedos.

Ahora comprendío Spyro todos los motivos que hacían falta para que pudiese enfrentarse a su miedo de no poder seguir a pesar de que le esten recriminando, se había pasado toda su vida ahogando sus penas en su cabeza, y por primera vez dio el grito que necesitaba, llego al limite y pudo sacarlo todo de una.

-Menos mal que he conseguido sacarte las castañas de tus escamas porque sino, no se que habría hecho después -comento sarcasticamente Gill.

Spyro dio una risa falsa, noto que aquello sono algo absurdo a pesar de como sonaba particularmente.

-Eres un maestro bastante rudimentario -comento Spyro expresamente.

-Y tu un aprendiz bastante inconformista -siguio Gill su ritmo sarcastico.

Ambos se miraron sonriendo, se dieron de lo extraño que eran ambos al intentar pensar en como podían hacer para ser mejores el uno del otro. De pronto Spyro se acordo de algo que olvido mencionar y sentía extrañez.

-Por cierto, ¿de donde han salido esos tikis explosivos? -ahora se dirigio a Double dedujiendo que aquellos tikis eran suyos-. ¿Los has creado tu?

-Ooga booga son una de las mejores armas que tengo ooga booga -Double extendío su vara hacía abajo y del orbe salío uno de los tikis resplandecientes.

-¿Pero como? -se quedo Spyro extrañado y confundido al ver eso, resulto ser que si los había creado, a partir del orbe que tiene puesto en su vara.

El tiki empezo a dar pequeños saltos mientras cantaba una pequeña cancíon en el idioma de los tikis, hizo toda una vuelta y estallo en destellos.

-¿Pero no entiendo? ¿Porque explotan? -pregunto Spyro dirigiendose a Gill.

-Resulta que la magia porque la que estan hechos, es muy temporal, así que es cuestion de minutos que se desintreguen en una pequeño estallido automatico -explíco Gill la razón de porque los tikis de Double explotaban de esa forma.

-¿Y como los hace? -pregunto queriendo comprender los poderes de Double, no lo conocía de mucho y empezaba a sentir fascinacíon por sus poderes misticos.

-Bueno, veras -se puso Gill a explicar toda su historía : cuando Double vino hasta el mas lejano extremo de Skylands, lo primero que hizo fue buscar especies que le provocasen nuevos poderes y conjuros para poder enseñarselos en su tribu, una noche en una montaña, encontro ese orbe lleno pura magia, se lo llevo de ahí y cuando lo toco, parte de esa magia se unío a el, fue tan subita que le dejo desmayado en apenas unas horas. Después de despertarse se sintio como nuevo, mejorado, se fijo en el orbe y observo que había una especie de cambio en el, pero no sabía como, así que dijo una frase de conjuro que ningún tiki había usado, después de decirlo, del orbe surgío un diminuto tiki, una pequeña copia magica de el, se quedo un momento examinandolo, y de pronto estallo. No lo entendío Double hasta poder comprender los poderes del orbe, después de varios estudios en el orbe, consiguio comprender que aquella magia no era muy estable, y en cuanto se utilizaba para algo, se desvanecía, pero para Double que creaba sus copias, estallaban como una pompa de jabon.

Ahora comprendío Spyro como consiguio Double tener tanto poder como para poder crear esos pequeños tikis, pero había algo del tema que no cuadraba.

-¿Pero no entiendo? Veras, cuando me enfrente a varios de ellos, duraron mas de la cuenta, hasta uno se volvío salvaje conmigo -explíco Spyro queriendo entender porque todos tenían algo que les diferenciaba del resto si solo eran copias.

-Es que esa parte no la he contado -admitio Gill-: Después de haber descubierto un nuevo poder, Double estuvo intentando de controlar ese poder para saber hasta cuanto potencíal tenía, fue liberando copias y mas copias hasta que supo controlarlas y manejarlas a la perfeccíon, tardo varios meses hasta que por fin pudo controlar a su antojo a sus copias, tanto para manejarles un tiempo limite hasta su comportamiento y accíon de cada una -ahora explíco la razón de porque cada uno de los tikis tenía un comportamiento diferente.

-¿Quiere decir que ahora puede ponerles mas tiempo y agregarles un nueva emocíon a cada uno? -pregunto para saber si era tal como se expresaba.

-Exacto -afirmo Gill.

-Pues debe de ser muy dificil eso de controlarlos y manejarlos -opino Spyro.

-Ooga booga no tan dificil como aprender a volar ooga booga -comento Double refiriendose al caso que tenía Spyro con su problema de vuelo.

Spyro no supo si eso era una acusacíon severa o solo un comentario sarcastico, pero el verdadero problema era como es que lo sabía, o es que acaso se lo había dicho el uníco que lo conocía. Se giro mirando incredulamente a Gill.

-Si ibamos a hacer la prueba tenía que decirle todo aquello en que sabías -confeso Gill con tono avergonzado.

-Por dios, ¿pero que es lo que os inventais? -replico Spyro queriendo entender que era lo que hacían para cometer sandeces como esas.

-Pues muchas cosas que sirvan para aprender a luchar -exclamo Gill.

Aquello le hizo venir una risa a carcajadas a Double, se moría de risa.

-Tu mucha risa pero a ti te ha costado controlar esas copias bastante tiempo y a mi me ha costado volar en tan solo unos dias -replico ironicamente Spyro recriminandole hacíendole darse cuenta de que era no perfecto al igual que el.

Double se quedo con una expresíon de sorpresa y extrañez, se quedo pasmado al oír ese comentario, tanto que se lo quedo pensando.

Gill se rio a carcajadas a causa de ese comentario, fue tan gracioso a la vez de como se quedo Double al escucharlo.

-Por dios, ¿como puede que el ultimo dragon visto en tantos años sea tan gracioso? -se pregunto a si mismo Gill.

-Ooga booga no entiendo ooga booga -no comprendío Double que era lo que les hacía tanta gracia a los dos.

Aquello provoco que Spyro y Gill se riesen automaticamente, era tan gracioso debido a que no lo entendía el tiki, se habían dado cuenta de que Double se había quedado mas confundido de lo que parecía.

-No se entera -dijo Spyro riendose. Ambos se rieron mientras se apoyaban sus brazos en los hombros de cada uno.

Spyro noto que estaba empezando a caerle bien Gill después de todo, desde que se habían conocido habían tenido sus malos momentos, pero al final habían llegado a conocerse perfectamente, ahora lo comprendío porque se mostraba así, sabiendo que ocultaba una gran ira en el fondo, pero aún así por afuera se notaba que era una persona agradable. De pronto se giro a un lado y se fijo en la sala, resulto ser toda una sala vacía con solamente un grupo de muros apoyados en diferentes seccíones, era como si se tratase de un laberinto, pero sin mucho sentido al estar viendo que no estaban muy conectados, pero aún así sentía extrañez por esa sala.

-Ahora que veo esta sala, ¿que es? -pregunto Spyro queriendo saber la respuesta a partir de algúno de los dos.

-Es una sala de prueba de combate sigiloso -admitio Gill.

-¿Una sala de prueba de combate sigiloso? -no comprendío Spyro-. ¿No resulta demasíado largo para variar.

-Bueno, no es tan así como suena, mas bien la utilizamos para poder aprender a combatir en los lugares que no se ven, como cuando se esta en un lugar oscuro y el enemigo esta camuflado en el entorno y no lo ves, lo usamos para mejorar los sentidos de cada uno -explíco Gill que utilidad tenía la sala.

-¿Y yo lo he resuelto? -pregunto para saber si lo había superado.

-Así es, has perfeccíonado muy bien tus sentidos -felicito Gill.

Comprendío ahora Spyro la misteriosa sala, pero ahora quedaba el misterio de porque no le habían dicho nada.

-Pero ahora que lo pienso, ¿porque no me has dicho nada de esta sala?

Gill se mostro muy esceptico ante esa pregunta.

Spyro supo notar por esa mirada que si daba la respuesta sería algo retorico porque seguramente se trataba del mismo asunto.

-No me lo digas, ¿también constaba para la prueba? -pregunto sarcasticamente, ya deducia que se trataba por eso.

-Pues si -admitio Gill en un tono ironico.

-¡Ay! -refunfuño incredulamente Spyro mientras se giraba la cabeza y hacía un ruido con los labios-. ¿Pero que clase de heroes sois vosotros?

-Pues los unícos -exclamo Gill ironicamente.

De pronto Double empezo a reirse de una manera incoherente, ambos se le quedaron mirandole porque no sabían si era una blasfemia o era su forma de reirse, porque si lo era, sonaba extraño y exagerado por como sonaba.

-¿Crees que ha entendido eso? -pregunto Spyro para saber la opinion de Gill.

-Tal vez, si sabe de lo que hablamos -opino Gill dudando.

Siguieron oyendo las risas de Double hasta que oyeron una voz diferente que se agrandaba a medida que avanzaba por el lugar, era de una voz monotoma y pequeña, como la de una pequeña criatura, cada vez empezaron a notar de quien se trataba.

-Hola, ¿hay alguién? -pregunto el pequeño individuo que se encontraba afuera en la sala de entrenamiento.

Spyro supo reconocer de quien se trataba, era de Sparx.

-Es Sparx, debe de estar buscandome -dijo Spyro yendo directo a su posicion, habían pasado casi un dia y no le había dado mucho atencíon, se había quedado a ayudar a los demas Skylanders en su plan para defender el refugio.

Gill y Double le acompañaron también.

Sparx se quedo volteando su cabeza para mirar de cerca la sala, estaba llena de unas maquinas impresionantes, pero de cerca parecían instrumentos de carnicero, de las que se utilizan para trocear la carne de los animales de granja, era increible que Spyro hubiese sobrevivido a una de ellas, porque son terriblemente peligrosas. De pronto se fijo en un extraño y enorme hueco que había en un extremo, se quedo extrañado al mirar eso, en ningún momento había visto algúna puerta o algo parecido, sin duda debía de tratarse de algún pasadizo secreto o algo del mismo estilo.

De pronto se fijo en un individuo que andaba a cuatro patas y era purpura, era su hermano Spyro que estaba saliendo del hueco oscuro.

-Ey Sparx -llamo Spyro al momento que salío.

-Spyro, ¿que estas hacíendo ahí? -pregunto sorprendido.

-Pues resulta que me han montado otra nueva prueba -comento al momento que señalo a los dos Skylanders que estaban con el.

Sparx se quedo examinando a los dos Skylanders y al comentario que dijo Spyro, intento de buscar una explicacíon a lo que decía y entonces llego a la cuenta.

-Espera, le habeís metido en otra de vuestras pruebas -replico Sparx al darse cuenta de que otra vez le estaban entrenando de aquella forma tan cruel-. Porque como le hayaís vuelto a hacer lo mismo que le hicisteis antes, os las vaís a ver.

-Tranquilo Sparx -tranquilizo Spyro-. No ha sido tan grave como el de antes.

-¿Que no ha sido tan grave como antes? Haber. ¿Que le habeís hecho -pregunto Sparx poniendose estricto con ellos.

-No te preocupes pequeño insecto, el chico sabe apañearselas solo -le comento Gill para tranquilizarle.

-¿A que se esta refiriendo? -pregunto Sparx dirigiendose a su hermano para que le explicase que le había hecho dentro de aquella sala.

-Vamos Sparx, tranquilizate un momento vale, dejamelo a mi -pidio Spyro para que al menos se calmase un poco.

Sparx hizo caso, se quedo de brazos cruzados refunfuñando.

-Gill, Double, porque no vais a arriba y ayudaís a vuestros compañeros, vale, dejad que este asunto me encargue yo solo -pidio amablemente Spyro.

-De acuerdo Spyro, es tu familia, así que encargate de ella -acepto Gill sin mas dilacíon.

-Ooga booga trata de que no se desquicie ooga booga -le comento Double.

Dio Spyro una risa falsa ante ese comentario.

Los dos Skylanders se marcharon de la sala, fueron directos a las escaleras, abrieron la puerta y se marcharon hacía el piso de arriba.

Ahora que estaba todo en calma, Sparx podía ahora razonar con su hermano.

-Spyro, ¿que te han hecho?, por dios esto es una locura, vas a conseguir que ellos te maten, empiezo a pensar que no son heroes de verdad -divagaba Sparx nervioso porque tenía miedo de que le hubiese pasado algo a Spyro.

-No me han hecho nada, bueno excepto que el tiki mayor me ha atacado con sus tikis enanos explosivos -exclamo Spyro ironicamente.

-¡Que! -chillo histericamente Sparx.

-Tranquilo no ha sido para tanto -le comento para que se calmase de una vez.

Sparx estaba tan aterrado de pensar que le habían hecho algún mal, que se estaba aferrando a sus nervios provocando que se inquietase del agobio.

-Sabía que no era una buena idea que vinieses -comento Sparx dando la misma charla que habían tenido desde que habían llegado al refugio.

-No empecemos otra vez -replico Spyro harto de la misma disputa.

Es que no puedo parar, ¡vale! Ya me inquieta todo lo que esta pasando, estan ese grupo de criaturas fabricando semejante tipo de maquinas para defenderse de un enemigo que ni siquiera sabemos que va a venir, y estoy sin poder hacer nada, ya que no conozco a nadie y casi todo el mundo es muy caprichoso con los desconocidos, ¿que es lo que hago? -Sparx estaba tan agobiado porque las circunstancias que ocurrían que no paraba de recriminar todo lo malo que sucedía.

Spyro observaba como se estaba inquietando Sparx, sentía una preocupacíon hacía el de la que le ponía nervioso, se le ocurrío el decirle lo que había descubierto para que así entienda que no era tan culpable.

-Sparx -le llamo en un tono murmurante.

-¿Que pasa ahora? -pregunto Sparx en un tono sollozante.

-Hay algo que tengo que contarte -admitio Spyro.

Sparx observo por el tono de voz y la mirada palida de su hermano, que había algo que estaba ocultando y era grave, se acerco hacía el para saber de que se trataba.

-¿Que es? -pregunto en un tono palido.

-He estado en ese sala de ahí, reflexionando, he estado en calma un buen rato, y durante ese tiempo, he comprendido una cosa que nunca antes me había figurado -explíco Spyro de forma expresiva.

-¿El que? -ya no aguantaba Sparx tanto misterio, ¿que era lo que ocultaba?

-He visto varios errores de mi vida, y en ella he comprendido que no todo el tiempo era el que provocabas que mi vida fuese tan solitaria.

-¿A que te refieres?

-Siempre pense que tu eras el culpable de que yo no hubiese tenido una buena vida, pero ahora resulta que yo también he tenido parte de la culpa.

-¿Me estas diciendo, que el problema de que tu no hubieses tenido mas atencíon, fue por tu culpa? -pregunto Sparx para abreviarlo mejor.

-Así es -afirmo Spyro, pero no era exactamente así-. Bueno, en realidad es parte de los dos, tu no me hiciste caso, y yo no puse ningúna voluntad, así que ambos te-nemos la culpa de que no hubiese tenido mejor atencíon.

Sparx se quedo confundido, no podía creer que en realidad el no había tenido toda la culpa de que Spyro no hubiese tenido mejor atencíon de la que ya tuvo, y ahora que el admitía eso, no sabía como aclararlo todo.

-Y por eso te digo esto Sparx. Porque quiero disculparme contigo, por haberte culpado de mi soledad, disculparme por haberte reñido de la forma que hice -admitio Spyro queriendo hacer las paces.

-No tienes porque hacer las paces -replico Sparx.

-Si lo tengo que hacer, porque sino, no estaremos jamas en paz, necesito hacer esto, para poder perdonarte por los errores que he hecho, pero también quiero, que si nos disculpamos, quiero que zanjemos nuestras disputas, y que nos prometamos el uno al otro, que estaremos pendientes del uno y del otro, como hermanos unidos -acordo Spyro para que ambos se prometiesen que se cuidarían del uno y del otro, hasta en los momentos mas cruciales.

Spyro extendío su mano para que Sparx la estrechara, para que pactasen el acuerdo que acordaba. Sparx se lo quedo mirando, sabíendo que si se lo estrechaba, tendrían que estar pendientes en los asuntos mas cruciales y dificiles que les sucederían, para que así, puedan considerarse unos hermanos que se cuidan del uno y del otro.

Sparx agarro fuertemente la mano de Spyro, y se la estrecho.

Spyro sonrío alegrado, zanjaron el acuerdo.

-Te prometo Spyro, que estare pendiente de ti, si tu estas pendiente de mi -acordo Sparx siguiendo su mismo acuerdo.

-Siempre estoy pendiente de ti Sparx -exclamo Spyro sonriendo.

Justo cuando el momento no podía ser mas perfecto, de pronto hubo una sacudida que hizo temblar toda la sala, ambos se mantuvieron en la posicion que estaban.

-¿Que ha sido eso? -pregunto Sparx extrañado por ese suceso, de pronto hubo otra sacudida pero esta fue mas cercana.

-No lo se, ¿crees que nos atacaron? -pregunto Spyro para saber su opinion.

-Pues si es así, los Skylanders no han terminado de perfeccíonar las defensas -admitio Sparx histerico.

-¡Que! -chillo Spyro al darse cuenta de que si no habían terminado con las defensas, estaban en un serio peligro.

Fueron corriendo lo mas rapídamente hacía el exterior para saber que era lo que sucedía ahí arriba, este era el momento mas desesperante de todos.