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EPOCA DE CAMBIOS
El troll prisionero se encontraba encarcelado en la jaula secundaria que había en sala de los calabozos, lo dejaron ahí con tal de que no se escapase, ya habían conseguido tener suficiente informacíon de el, pero aún seguía siendo un prisionero de guerra, le necesitaban para poder tratar todos los asuntos que los consternaban ahora.
Estaba acostado arrodillado contra la pared, se sentía angustiado y deprimido, creía que iba a permanecer así todo el tiempo, siendo el prisionero de esos guerreros que habían matado a varios de los suyos, igualmente, empezo a pensar que a lo mejor se lo merecían. Se había pasado toda su vida escuchando sobre crear una guerra, hasta el se dejo engañar por esos disparates, y ahora todo eso lo llevo hasta aqui, y ni siquiera tuvo que hacer nada por todo eso.
De pronto se oyo que alguién estaba abriendo la puerta, alguién mas venía y seguramente para hacerle conseguir informacíon sobre los planes de los trolls, no pudo ver quien era pero supuso que debía de tratarse del gillmen o del dragon.
-¿Quien es? -pregunto por curiosidad.
Entonces aparecío entrando la persona, no fue ningúno de los dos, resulto ser la elfa de piel verde que se ocultaba la media cara con un pañuelo.
-Vaya, si no iba a ser el gillmen o el dragon purpura, tenía que ser otro -exclamo sarcasticamente al ver de que se trataba de alguién nuevo.
Se dirigio la elfa hacía el, se veía que estaba llevando la bandeja con algo de beber y de comer, se junto delante de la celda, saco las llaves y la abrío, paso delante de la jaula dirigiendose al troll.
Teniendo miedo de lo que le podría hacer, se cubrío hacía atras pensando que le podría hacer algún daño para así poder sacarle informacíon.
-Tranquilo, no te hare daño -contesto la elfa poniendo en un tono pasivo, luego se acerco apoyando la bandeja que tenía una jarra de te frio y un plato con unos bollos de crema blancos-. Te he traído algo para comer.
-¿Porque? -pregunto amargadamente, sospecho demasíado de su vanidad.
-Porque te necesitamos con vida, y si no comes empeoraras -admitio la elfa levantando la jarra con el te.
Esbozo el troll una expresíon sarcastica de desprecío ante la cuestíon.
-Esta claro no, me necesitaís con vida para que os pueda deciros todo lo que se, no resulta obvio -exclamo incredulamente.
-Igualmente si estas vivo o no te necesitamos y nos vas a decir todo o sino no te perdonamos por tus crimenes, así que tu decide -indico expresamente la elfa.
El troll se puso indirecto, estaba claro que lo tenían todo preparado por si acaso, estaba claro que no lo iban a dejar morir o lo iban a castigar por las malas, esa era la regla que ellos tenían para todo, observo la jarra que traía entre las manos, sabía que pretendía hacersela beber, pero tampoco podía negarselo o sino tendrían que obligar por la fuerza, si es que acaso hacían eso.
Agarro bruscamente la jarra y bebío dando pequeños sorbos mientras mientras con ojos de furia a la elfa, no pretendía decirle nada. Termino de beber y se lo entrego a la elfa, ella puso una expresíon de conformidad al ver que acepto.
-¿Que quieres conseguir con esto? -pregunto queriendo saber que pretendía al darle placeres.
-Por ahora nada, eso es cosa de los otros, lo uníco que estoy hacíendo yo es tratarte para que al menos no intentes hacer algúna tonteria -confeso la elfa poniendose seria con el.
No dijo nada, solamente se le quedo mirando con indignacíon.
-Se que piensas que somos culpables de la muerte de tus amigos, pero tienes que entender que lo que hacían ellos no era lo correcto -se expreso Elfa.
-Lo correcto, dices que eso no es lo correcto, pero sabes lo que hace las demas especies como tu, nos tratan como si fueramos monstruos, que no sabemos hacer otra cosa mas que espantar a la gente por debajo de los puentes, pero eso se acabo, ahora somos una supremacía superior a la de cualquiera, y confrontaremos a cualquiera que nos siga discriminando para que todos se enteren de que somos iguales a pesar de nuestro aspeco fisico -reprimio el troll admitiendo su odio e inclinacíon a la patria de los trolls, hizo una expresíon de enfurruñamiento con los dientes.
Elfa pudo ver por donde iba, estaba claro que estaba metido con el mismo tema que tenían todos, no querían entenderlo y el tampoco quería comprenderlo, tratar con alguién así era una tarea facil.
-Mira, se que piensas que la gente le repugna a los trolls, que os tratan como si fueseís otra monstruosidad mas de Skylands. Pero miralo, dices que tu especie es igual, pero lo de anoche no fue algo propio de ningúna especie, habeís masacrado a un montón de gente en tal solo una noche, dices que quieres ser igual, pero en realidad te estas volviendo tan malo como las personas que te trataron mal, has aprendido de ellos y te encanta, te has convertido en tu propio enemigo -comento expresamente Elfa dandole entender la diferencía de entre lo que hacía su especie y como se comportaba la gente del resto de los paises de Skylands.
Aquello dejo perplejo al troll, no se había planteado algo así. Estaba claro que lo había comprendido, solo que entender algo así, era como si un bebe hubiese aprendi-do una nueva palabra.
Elfa se dio cuenta de su mirada, decidio terminar con el, apoyo el plato con los bollos en un extremo esperando a que se los comiese en algún momento, se levanto y se dirigio afuera en la celda. Se giro y miro con indignacíon al troll.
-Puede que parezca injusto para ti, pero para el resto del mundo, tu mismo eres lo injusto, y espero a que te des cuenta de eso -comento expresamente Elfa para que entendiese el asunto, luego cerro la puerta de la celda.
El troll con indignacíon observo como la elfa se iba sin decir nada, había terminado con el, se dirigio a la puerta de entrada y abrío la puerta, luego salío y cerro la puerta con llave.
En ese momento después de tanta reprimenda, al final acabo estallando, empezo a sollozar descontroladamente ya que se estaba dando cuenta de que estaba atrapado en un lio del que no podía escapar, ahí llego la cuestíon que no encontraba, se había pasado toda su vida escuchando sobre guerra, que al final se gano que lo despreciasen y lo tratasen de criminal, y todo por seguir el camino que todos ordenaban seguir, se froto las manos por toda la cara para quitarse las lagrimas, estaba tan deprimido por el tema que estaba pasando que todos aquellas ideas que tenía sobre la arre-pentido que estaba, habían salido.
Miro los bollos de crema que tenía al lado, sintio la tentacíon de comerselos, pero no quería debido a que no quería hacer caso a la elfa, en un acto de rabia, golpeo el plato y varios de los bollos cayeron al suelo y acabaron rodando por toda la jaula. Luego estallo en lagrimas y esta vez se puso a llorar descontroladamente debido a que se había fastidiado su propia vida y ahora tendría que vivir con el remordimiento de haber ayudado a unos cuantos de los suyos a matar gente porque cosas que no comprendía, se giro y miro a uno de los bollos, sentía todavía el apego de no querer comerselos, pero ahora a estas alturas ya todo eso le daba igual.
Se abalanzo desesperadamente sobre el suelo, agarro el bollo y empezo a comerselo como si no hubiese probado nada en dias, le gustaba el suave tacto de la crema, pero al menos le reconfortaba tener algo que disfrutar.
Elfa avanzaba por los pasillos de la mazmorra, a medida que andaba oía los gemidos y gritos que hacía el troll, ahora comprendío lo que había hecho y estaba sufriendo por tener que arrepentirse de sus accíones. Salío de la mazmorra y luego se dirigio al laboratorio que había a unos metros a lo lejos del sotano del palacio, giro a la izquierda y se dirigio a la puerta del laboratorio, abrío la puerta y paso dentro, una vez allí avanzo y se fijo que estaba Flameslinger examinando a uno de los otros, les estaba hacíendo la autopsia para saber que era lo que tenían los trolls para saber como era posible que hubiesen tenido esa destreza y esa fuerza que les había permitido enfrentarse a ellos durante la mayoría de la noche.
Flame oyo algo que se acercaba, alzo la cabeza y sintio que se acercaba la persona a la que había mandado a ocuparse del troll prisionero.
-¿Como se encuentra el prisionero? -pregunto Flame suponiendo que volvío después de haber tratado con el.
-Al borde de la locura -contesto sarcasticamente Elfa acercandose al cadaver abierto del troll al que examinaba, tenía todo el abdomen abierto como si fuesen las paginas de un libro, mostrando los organos internos que había dentro, estaba todo lleno de sangre verde seca, había permanecido varias horas muerto.
Carraspeo Flame ante aquel comentario.
Elfa se fijo en el interior del cadaver, estaba todo tal y como lo tienen los trolls, pero había algo que no entendía, las paredes abdominales del cuerpo estaban como muy hinchadas, se notaba como un enrojecimiento alrededor de las marcas del hueso toraxico, eso era algo bastante raro.
-¿Has podido encontrar algo raro?, porque yo estoy viendo algo raro aqui mismo -pregunto Elfa queriendo saber si inspeccíono las paredes.
-¿Donde? -pregunto Flame dandose la vuelta.
-Aqui mismo, hay como un enrojecimiento alrededor de las marcas de los huesos del torax, toca por aqui -explíco Elfa y luego marco el lugar por el que tenía que tocar Flame.
Se quito los guantes embarrados de sangre, luego apoyo la punta del dedo indice en las marcas y empezo a ir frotando el dedo para hacerse una idea de lo que había, lo sentía todo como muy arrugado y aspero, como si estuviese desgastado.
-Esta como quemado -opino Flame.
-Así es, no entiendo como es posible que suceda esto, ¿que puede significar? -pregunto Elfa sin tener algún idea de como se podía producir un efecto así.
Ambos se quedaron pensando intentando de hallar algúna respuesta, una cosa estaba clara, aquellos trolls habían ingerido que se había esparcido por todo el cuerpo y les había producido un efecto devastado en las paredes musculares. De pronto a Fla-me se le ocurrío algo.
-Puede... -se quedo pensando Flame antes de contestar cualquier cosa.
-¿Puede que? -pregunto Elfa queriendo saber que se le ocurrío.
-Existe una posibilidad de que estos trolls hayan ingerido algo tan potente, que les haya producido un efecto de alta temperatura en la sangre, produciendo que parte de todo su cuerpo se quedase inflamado al estar tan expuestos, sea lo que hubiesen ingerido, no tuvieron mucho control sobre lo que hacían.
-¿Que puede ser? -pregunto.
Se queda de vuelta pensando.
-No lo se, tal vez pueda tratarse de algúna planta o algún tipo de sustancia que les produzca un efecto incandescente en el cuerpo pero que a la vez les potencie el cuerpo aumentandoles la fuerza sin fisica sin ni siquiera aumentar de peso, pero no puedo determinarlo con el cuerpo, si hubiese estado apenas vivo, a lo mejor habría podría obtenido algo -explíco deduciendo una posibilidad de cualquier podría haber sido lo que ingerieron, pero no se le ocurría mucho un planteamiento logico.
Carraspeo Elfa dandose cuenta de que a partir de ahí ya no tenían nada para saber como era posible que los trolls tuviesen tanta fuerza sin aparentar tener tantos musculos, de pronto se dio cuenta de un detalle.
-Oye por cierto, ¿donde esta Sargento? -pregunto Elfa dandose cuenta de que no estaba por ningúna parte la perforadora Arkeyan.
-Le pedi que analizara los organos internos para determinar si encontraba algo de la sustancia que ingerio este troll -mencíono Flame.
-Pues espero que venga ese taladro con ruedas, porque no quiero pasarme todo el dia rodeado de muertos -reprocho ironicamente Flame ya que se estaba dando cuenta de que hoy era un dia de muchos muertos, tenía los cadaveres de los habitantes, y por otro lado la de los trolls estos, hoy no era para estar viendo vivos.
En ese momento oyeron un repiqueteo mecanico que venía del otro lado, entonces aparecío saliendo Sargento de la habitacíon contigua que había al lado, traía consigo un tarro donde estaba metido uno de los organos que Flame había extraído antes del troll.
-Menos mal que has aparecido Sargento -dijo entusiasmado Elfa pero con un tono sarcastico ya que veía que la perforadora traía algo y seguramente con algúna respuesta para poder determinar que tenían los trolls.
-Así es, porque yo no me quedo todo el dia rodeado de muertos -exclamo Sargento refiriendose a la frase que dijo Elfa antes.
Reprocho quejandose Elfa ante aquel comentario contradictorio.
Se acerco la taladrora mostrando a Flame el tarro.
-¿Que has encontrado Sargento? -pregunto Flame al sentir que le estaba mostrando algo, se agacho y cogío el tarro.
-He estado analizando uno de los riñones del troll para intentar de buscar rastros de la sustancia que había ingerido, y al parecer encontro algo muy interesante -mencíono Sargento con tono erratico.
Elfa se acerco para verlo, veía el riñon del troll, era rojo carmesi y tenía casi el aspecto de una salchicha rostizada, pero lo mas extraño de todo es que habían unos extraños destellos dorados alrededor del riñon y que parecían salir de adentro.
-¿Que son estos trocitos dorados? -pregunto.
-Al parecer son los trozos que produce una planta conocida como la lipitus vorsatelis, una planta que solamente existe en Trollia, y que normalmente se utiliza para producir hormonales en las lindres trollianas, eso provocaba que ambos machos tengan ciertos declives hacía las hembras produciendo así, un estado de excitacíon potente, solo que esta vez los han mejorado para potenciar los musculos internos de los trolls, produciendo un estado insolvente de fuerza desmesurada -explíco Sargento dando a entender que era lo que habían ingerido los trolls.
Ambos carraspearon al entender que habían ingerido, pero aún les costaba entender como habían hecho para producir algo así.
-Con que esto es lo que ha permitido que los trolls tengan esa fuerza y esa agilidad, ahora lo entiendo -opino Flame.
-¿El que? -pregunto Elfa.
-Siempre he oído cosas acerca de que estaban creando sustancias para potenciar a los soldados y hacerlos mas fuertes en el campo de batalla, pero nunca he visto un progreso así, y me parece que este es el primero -comento Flame.
-Así que estan decidios a combatir así, estan tan desesperados por ganar que han envenando a sus propios soldados para convertirlos en armas. Se han vuelto todos locos -opino expresamente Elfa dando a entender el asunto en si.
-No solo los trolls estan locos -aclaro Flame.
-¿A que te refieres? -pregunto inquisitivamente.
-Anoche, cuando impacte aquella flecha que provoco que todo se incendiase, me di cuenta de que todos nosotros nos habíamos vuelto locos, habíamos cambiado, nos había cambiado el hecho de que nos afecte la lucha, de que estar tan pendiente de atacar a los trolls, nos hubiese puesto tan violentos como ellos. La noche nos ha cambiado a todos nosotros, y no solo por la frustacíon, sino por el hecho, de que ya no somos los mismos que antes, hemos cambiado, se estan viviendo cambios ahora mismo, esto no ha sido un suceso que podría haber pasado repentinamente, lo que paso anoche, fue el principio de una epoca de cambios -explíco Flame dando a entender el asunto que los consternaba a todos con la situacíon que estaban pasando-. Si queremos impedir que estos cambios nos transformen, tenemos que avisar a Eon de esto.