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LO OCULTO DEL CASTILLO

Bert se acomodaba como podía a pesar de que estaba bastante intranquilo sabiendo que dentro de un rato aquel presentador pusilanime vendría a robar la corona y no podía decirselo a nadie porque sino entonces nadie lo valoraría y habría entrado en aquel lugar para nada, los demas se enfadaran y tendría algún castigo decente.

Gill termino de hacer todas sus cosas, se limpio la cara mientras miraba al pequeño Bert que se encontraba en aquella cuna que le habían traído antes para que se quedara a dormir con ellos antes para tenerlo vigilado.

-¿Ocurre algo Bert? -le pregunto Gill.

-¿Como? -cuestiono sin entender el comentario.

-Es que como te veo así, pues... me resultaba un poco raro -aclaro.

-Ah. Es que siento un poco de miedo de pensar sobre lo que le ocurrira a Cali -comento dando a entender que era la misma preocupacíon que tenían todos.

-Si, yo también, pero es un miembro de nosotros, y si ella hace esto por el equipo, entonces tenemos que respetarlo -indago seriamente Gill con respecto al tema.

Comprendío Bert dando a entender que si le importaba mucho que estuviera apunto de meterse en una pelea donde seguramente no habría un retorno.

-¿Me consideras a mi uno del equipo? -pregunto queriendo tener esa idea.

Gill se quedo indeciso mirandolo con ojos fijos que se le salían de las cuencas.

-Bueno, has estado mucho tiempo con nosotros, y a pesar del mal trabajo que hiciste en la ciudadela de los ciclopes, todavía estas con nosotros, así que mas o menos eres uno de todo el equipo -opino sinceramente argumentando todos los hechos.

-De acuerdo -se conformo sonriendo placidamente.

-¿Porque preguntabas eso? -pregunto Gill cuestionando esa pregunta.

-Es que no se... ¿que pasaría si algo me ocurriera? -dio a entender.

Ahí entonces Gill no supo que contestar como para que lo entendiera, pero conociendolo bien asumio que si podía darse cuenta de lo que pretendía explicar.

-Pues te encontraríamos estes donde estes, jamas dejamos a los nuestros -admitio.

-¿Y entonces que paso con Tobinn? Lo dejamos tirado.

-Lo de Tobinn fue algo inesperado, nadie se entero de eso, y encima fue tu culpa, así que mas o menos ya es como esta muerto, ya no podemos hacer nada por él, tuvo lo que tuvo -aclaro dando a entender que eso era por otra cuestíon.

Comprendío Bert sabiendo que lo de rescatar o salvar no iba a ser una cosa perfecta, sobre todo cuando uno es el causante de todo, y lo que le paso a Tobinn fue cosa suya, algo de lo que tendría que arrepentirse el resto de su vida.

Gill asintio, estaba claro que a pesar de ser demasíado inocente, había visto lo suficiente como para hacerse una idea de como funcíonaban las cosas en el equipo.

De pronto Marbo empezo a hacer ruiditos inocentes, se fue a mirarlo y observo que se le había salido el chupete, se lo volvío a poner y se calmo antes de empezar a llorar.

-¿Crees que mi hermano podría ser un Skylander? -pregunto interesado.

-Bueno, eso es algo que se tiene antes que pensar, ningúno de nosotros fue elegido al azar, a veces el destino le toca escoger a cada uno por una razón -comento.

-¿Y cual crees que sería la razón para convertirme en uno?

-No lo se, a lo mejor sería algo por lo que no esta por llegar -opino sinceramente.

Se lo tomo como que era una de esas cosas que siempre podían durar mucho o poco, y si estaba destinado a algo de eso, tenía que buscarse su propia razón.

Gill finalizo con Marbo y se dirigio a apagar las lamparas, aflojo el interruptor de aire que consumía la vela del interior y entonces la lampara se apago del todo dejandolo todo oscurecido excepto viendose los rastros de luz de noche que se filtraban a traves de la ventana semicircular del fondo.

-Buenas noches Bert -se despidio con tono caríñoso.

-Buenas noches Gill -se despidio de la misma forma poniendo una mueca coqueta.

Sonrio agradecido de ver lo inocente que era, se dirigio a la cama y se tapo bajo las sabanas poniendose con la cara hacía el otro lado, contra la ventana. Ahí entonces Bert empezo a pensar acerca de lo que tenían planeado aquellos piratas, no podía permitir que se hicieran con la corona como botin, y a lo mejor se aprovechaban de otra cosa mas por descaro y capricho. Sabía bien que no podía fallarle a los otros, pero si lo decía entonces no estaría prometiendo nada, no es que quería faltarle las promesas a aquellos dichosos piratas, es que sino no estaría siendo un hombre sin prometerle nada a nadie, por eso mismo tenía que actuar solo.

Espero el momento adecuado como para que se durmiera el gillmen, espero una media hora y entonces todo se calmo en la habitacíon, no sabía si estaba dormido o no, pero tenía que darse prisa y llegar a tiempo a la sala real o sino el presentador Ravenook se robaría la corona. Al final no aguanto mas y decidio largarse de ahí sin esperar a que al menos hubiera una prueba de que Gill estaba dormido, pero si al final se despertaba y se encontraba con que no estaba, tendría que pagar ese error.

..

Afuera en el exterior el presentador Ravenook estaba montado en un carruaje transportado por bufalos blancos de gran anchura y muslos en las extremidades, los bufalos blancos eran los mejores que mejor servían para arrastrar carros o cualquier otro tipo de necesidad que hubiese.

Una vez que llegaron a la entrada, el guardia les paro, era un mabu de piel marronesca y con una mancha en forma de antifaz alrededor de la cara casi del mismo color que el de su piel pero con otro tono de marron claro en comparacíon.

-¿A que viene esta entrega? -pregunto queriendo analizar el transporte.

-Es la colecta de los donacíones del campeonato de hoy, parece que todavía se quedaron unos cuantos doblones -declaro Ravenook con tono formal.

Carraspeo extrañado, sospechaba que era algo imposible pero por si acaso decidio mirar, alzo la lampara y entonces se subío al carromato que había detras donde se encontraba un cajon de madera. Ravenook mantenía una mirada muy firme y estremecedora debido a que no sabría si aquello cuajaría o no.

Abrío la caja sacando la hebilla y entonces al subir la tapa observo un conjunto de pequeños doblones de plata esparcidos por el interior, los toco con la mano pasandoselos para ver si eran de verdad y según lo que notaba era plata pura.

-Esta bien, puede pasar -acordo confiadamente.

-De acuerdo, gracias -se conformo y entonces arreo a los bufalos para que avanzaran, el carruaje se metío en la entrada que era un muro semicircular con un hueco enrejado del cual había una verja metalica que salía de los bordes.

Fue avanzando tranquilamente sin llamar la atencíon, suspiro aliviado al pensar que no lo conseguiria, sabía bien que si fallaba con esto, entonces Reynabus lo castigaría de la forma que tenía prevista hacer, esta vez tenía que conseguirlo o sino sería su final definitivo para todo aquello que conocía y había vivido.

Una vez que llego al area de transporte que era un tunel bastante estrecho con unas paredes adosadas con unos huecos en el techo que era donde estaban puestas las lamparas solo que de una forma que parecía las marcas de una colmena en el interior, un par de guias aparecío siendo seguidos por otros mas que aparecíeron de repente.

-¿Que lleva ahí detras? -pregunto el primero que se le puso delante.

-Las ganancias de hoy, no se preocupe, el guardia de atras ya lo reviso -comento.

-¿Seguro? -pregunto cuestionando ese hecho.

-Así es señor -confirmo sucesivamente.

Carrraspeo cuestionando intrigado ese hecho, ahí entonces tuvo otra vez que esa desconfianza que le delataba a pensar que otra vez lo descubrirían, oyo un estruendo que venía de atras, y observo que uno de los guardias se había montado encima del carromato sin que se diera cuenta, abrío el cajon y entonces observo lo mismo que el otro guardia, lo examino sucesivamente y entonces dirigio la mirada al otro.

-Esta todo en orden, son doblones de plata -confirmo.

-De acuerdo, puede pasar -acepto sin rechistar.

-Gracias -agradecío suspirando de la agonía que tenía, arreo una vez pero entonces le detuvieron otra vez.

-Un momento -le freno el guardia.

-¿Que sucede? -pregunto con voz de querer sacarselo de encima.

-¿Quiere que le ayudemos a llevar esto? -pregunto dando a entender que lo querían ayudar a llevar el cajon a su destino seleccíonado.

Arremetío al acordarse de que eso era algo que se hacía constantemente, no podía dejar que aquellos marcharan al lugar de almacenamiento porque sino se darían cuenta de que había venido por otra cosa, tenía que buscar una excusa para impedirselo.

-No en realidad no, puede hacerlo yo solo -contesto con tono paciente.

-¿Seguro? -cuestiono con voz primordial.

-Si, de todas formas tenga que hacer unas cosas que se me han pedido también -añadio sucesivamente para que parecíera mas creible.

-Vale -dijo conforme pero teniendo sus dudas-. Espero de que pueda.

-Lo dudo mucho, gracias -agradecío ironicamente y entonces arreo marchando otra vez hacía la zona de almacenamiento.

Ambos guardias se quedaron estupefactos porque no sabían si era verdad o no que tenía aquellos doblones para dipositarlos ahí mismo, conocían al presentador ese y sabían bien que siempre tenía algo ironicamente planeado.

-¿Estas seguro de que es bueno dejarselo hacerlo él solo? -cuestiono otro guardia.

-No lo se, pero si dice que puede, es que entonces se las arreglara él solo -objeto el guardia y lo dejo estar como otra cosa menos de la que preocuparse.

..

Bert había bajado por varios pisos hasta llegar al siguiente pasillo, miro de un lado a otro para ver si había moros en la costa pero no había nadie, avanzo sigilosamente sin provocar el mas minimo ruido para no alertar a los guardias, no había visto a ningúno desde entonces pero temía sus miedos de pensar que se encontraría con algúna patrulla rondando por ahí de forma imprevista.

Siguio al fondo y ahí entonces observo unas escaleras que conducían a un salón abierto, era una de las salas principales, observo mas abajo que había una criada discutiendo con otro de los camareros, se escondío en el borde de la columna que había al principio de la escalera por precaucíon.

Miro de reojo que estaban teniendo una conversacíon bastante seria cuando entonces ambos bajaron la cabeza como despidiendose, luego ambos se fueron por lugares separados. Aprovecho y marcho rodando por las escaleras como si se tratara Wrecking Ball, bajo del todo sintiendo un enorme mareo por haber hecho esa tontería pero le sirvío de mucho, era una suerte que fuera tan enano.

Marcho corriendo al lugar por donde se había ido la criada, giro y observo una puerta de madera tallada a mano con varias ilustracíones que casi parecían las mismas que se encontraban en la moqueta de las paredes de las habitacíones superiores, giro en la esquina y entonces se puso delante de la puerta, tenía que tener precaucíon porque no sabía donde había ido adonde había ido la criada, había desaparecido al cruzar por ahí lo que significaba que estaba metida dentro, abrío lentamente una parte de la puerta y observo que había algo de luz artificial, miro de reojo por el estrecho borde y no veía a nadie en absoluto, aprovecho y se metío dentro sin importar lo que hubiese.

Era la cocina principal, estaba todo lleno de estanterías con varios platos blancos de ceramica y cubiertos de metal y plata, había mas cuchillos de grandes anchuras que otra cosa, sobretodo los largos que eran unas terribles espadas que servían para lo de las barbacaos o los peces a la brasa. Siguio avanzando hasta ponerse delante de una hornalla donde debajo se encontraba un horno de fabricacíon mecanica y de ultima generacíon, arriba de la hornalla se encontraba una chimenea que iba directo hacía tan arriba que se salía del techo.

Siguio mirando por ambas partes hasta ponerse delante de la inmueble con cajones donde iban puestas todas las cacerolas y demas platos limpios, de pronto una puerta que había al fondo se abrío y rapídamente se escabullo debajo del inmueble, era la criada que se había metido en aquella habitacíon que supuestamente era el lavadero donde había cogido un trapo rosa.

Observo que no la hubiese descubierto pero entonces se dio cuenta de que se dirigia justo estaba él, rapídamente volvío a escabullirse metiendose debajo del inmueble que tenía un espacio tan grande por donde podía caber lo suficiente, se fue rodando hacía el otro lado y observo por los huecos que se puso delante de la lacena y de ahí empezo a vaciar los platos que habían tirados en el fregadero llevandolos a la lacena con cajon que había arriba, los apoyo en fila y de ahí dejo el trapo encima de un gancho que había en una esquina.

Se dirigio hacía la puerta de entrada, apago la lampara que había delante de la columna de la esquina y entonces todo se oscurecío por completo, luego se marcho oyendose un tiron de puerta que sacudío la cocina. Suspiro aliviado pero ahora quedaba el problema de como iba a hacer para llegar hasta abajo de todo, intento de arrastrarse para volver afuera pero entonces se fijo en algo que tenía debajo suyo, se arrastro unos metros mas atras y observo que había una pequeña reja metalica.

Tuvo una posible idea, salío de encima del inmueble y lo quito arrastrandolo al ver que tenía ruedas y quitarlo fue facil, observo que se trataba de una reja que iba directo a un especie de conducto de alcantarillado que había mas abajo, apenas se notaba el fondo pero se veía claramente algo de luz a lo lejos en aquel pasillo oscuro.

Sabía bien que aquello era lo uníco que le podía servir para llegar abajo de todo pero necesitaba buscar algo afilado como para poder quitar los tornillos de las puntas de la reja, miro por ambas partes y observo que había un pequeño cuchillo de plata tan fino como la cuchilla de una navaja dentro del inmueble, lo utilizo y lo metío dentro de uno de los agujeros, lo fue enroscando hasta levantarlo tranquilamente porque no podía cometer ningún error, funcíono uno, fue sacando los otros tres restantes y entonces los quito todos, quito la verja dejandola a un lado y observo que mas abajo se encontraba un pasillo estrecho como de tunel que conducía hacía algúna parte, pero estaba el problema de que era bastante alto y no veía ningúna escalera como para poder bajar. Se quedo pensando detenidamente hasta hacerse una posible idea.

Agarro uno de los trapos que había y después marcho al lavadero que era una habitacíon pequeña donde se encontraba multiples objetos de limpieza como jabones antisepticos y algúnas escobas, eso era lo ultimo que necesitaba. Enrollo fuertemente los trapos a la punta de la escoba y entonces bajo de lleno pero al instante cuando justo casi tocaba el fondo, la escoba acabo enganchandose a los bordes afilados que habían en las ranueras sobresalientes del conducto.

Casi sentía que iba a morir pero no, al ver que apenas llegaba a toca fondo, aprovecho y se solto cayendo a unos pocos metros y aterrizo apenas bruscamente como para sentir un pequeño dolor en la palma de los pies debido a la fuerza del impacto.

-Ay -reprocho dolorido por el brusco aterrizaje.

Observo que el conductor era de dos tuneles y cada uno de ellos conducía hacía una parte distinta, pero solamente podía ir hacía una sola direccíon, escogío la que tenía a la izquierda y marcho corriendo por un conducto lleno de chorros de agua humeantes.

..

Ravenook siguio avanzando por aquel tunel que empezaba a desnivelar a cada paso que daba, recorrío todo el tunel hasta llegar a la parte de almacenamiento donde supuestamente tenía que dejar aquel botin falso que le habían dado apropositamente.

Dejo el carruaje a un lado y entonces aprovecho para mirar como eran las monedas porque supuestamente no le habrían dado un montón de doblones por nada.

Abrío la caja y paso la mano por todas las monedas para detectar si había algúna prueba que confirmase que eran falsas, agarro una y se la llevo a la boca mordiendola tan fuerte que acabo doblandola como si fuera de goma, esa era la prueba.

-Malditos seran -reprocho al ver que tenía razón.

Dejo el carruaje con los bisones blancos a un lado y se puso a mirar para saber si no había moros en la costa, el lugar parecía desolado y eso de que muy pocas ocasiones sucede que haya alguién trabajando a esa hora.

Uno de los bisones dio un gemido que llamo demasíado la atencíon.

-¡Silencio! -reprocho con tono susurrante.

Sabía bien que no podía dejar los bisones ahí porque les descubrírian y se acabaría todo, tenía que buscar una forma de distraerlos para que dejasen de soltar esos gemidos, entonces se acordo de una tecnica que les permitia dejarlos medio dormidos.

Se les acerco y empezo a acariciarles por debajo de la barbilla.

-Descansad bonitos, descansad en paz -fue acariciandoles uno por uno hasta que al final acabaron relajandose tanto que ni pudíeron soltar el mas minimo gemido, al final tenía razón en aquella tecnica.

Una vez hecho eso se marcho dispuesto a buscar la corona.

-Quedaos aqui -acordo sucesivamente y entonces se cubrío delante de uno de los huecos de las puertas enrejadas donde se encontraba el puesto de paquetes almacenados, luego marcho sigilosamente avanzando por el pasillo que llegaba hasta donde se podía ver, tenía que seguir todo recto y encontraría la sala real.

..

Bert se había metido en un extraño tunel del que no tenía ni idea de adonde llevaba, hacía un buen rato que iba caminando en circulos y ya no sabía si iba andando cerca de la sala real o no, tenía que llegar a tiempo antes de que Ravenook acabase llegando para robar la corona justo antes de impedirselo.

-¿Donde estara? -se pregunto a si mismo mientras iba mirando en ambas direccíones para saber cual era el siguiente camino a seguir.

Giro a la esquina y entro en una especie de sala de armas donde se encontraba todo tipo de maquinas como tanques oruga o torretas bipedas. No tenía ni idea de porque estaba eso pero iba ordenado de una forma que parecía estar expuesto como si se tratase de una coleccíon antigua, pero lo mas raro de todo era porque estaba guardado ahí sin razón algúna, penso que se trataba de un antiguo armamento que había quedado olvidado ahí y ya nadie lo reclamaba.

-¿Para que estara todo esto? -se cuestiono a si mismo.

En ese momento oyo un extraño sonido que sonaba a una voz aguda, miro de un lado queriendo saber de donde veía y observo que había un conducto tapado por una reja circular que daba lugar hacía otro lugar mucho mas abajo.

Se dirigio hacía ahí y observo que mas abajo había otro estrecho puente pero mucho mas bajo, en ese momento aparecío la persona que andaba buscando: Ravenook.

-Ahí estas -indico seriamente.

-Veamos, la sala real, estaba por ahí, o por alla -se cuestiono al no acordarse porque camino tenía que tomar para llegar a la sala real.

Habían dos tuneles, uno de ellos iba a la izquierda y el otro iba directo hacía una curva que doblaba hacía la derecha, pero había mucha diferencía.

-Maldita sea, cual era el camino -reprocho al no acordarse de cual era el camino correcto, empezo a avanzar mientras tartamudeaba buscando la logica a cual era el camino que correcto para seguir.

Al ver eso, Bert supo darse cuenta de que tenía que llegar hasta él antes de perderlo o sino acabaría en otro camino y no tendría ni idea de donde estaría la sala real antes de que el cogiera lo que supuestamente tenía de objetivo. Tenía que buscar la manera de quitar la verja para llegar hasta él pero como podía hacerlo. En ese momento se acordo de lo que hizo antes con la reja de la cocina, saco el mismo cuchillo de plata que se había llevado escondiendolo en su chaqueta, lo clavo encima de la ranura de uno de los tornillos que habían en los bordes y empezo a quitarlos uno por uno pero habían mas que antes y eso provocaba que perdiera mas tiempo, tenía que darse prisa o sino perdería de vista a Ravenook, todavía estaba distraído perdiendo el tiempo en buscar el tunel correcto.

Fue quitandolos uno a uno hasta que al final utilizo toda la fuerza que tenía como para sacar los clavos suficientes y con eso sacar la verja con los otros clavos incluidos ya que quedo floja al quitar demasíados. Lo saco y entonces bajo por ahí como si fuera un tobogan, le dio una gran sensacíon de entusiasmo al bajar por ahí.

Ravenook estaba en una expresíon pensativa debido a que no llegaba a ningún acuerdo, en ese momento sintio que algo bajaba y gritaba de jubilo, se giro y osbervo que algo tiro de la reja de uno de los conductos y entonces acabo cayendo un pequeño mabu que aterrizo forzosamente de culo.

-¿Pero que? -cuestiono extrañado.

Bert reclino la cabeza poniendose de pie pero tocandose el trasero por detras debido al fuerte golpe que se llevo, era como una bola humanoide.

-Que daño -se dijo todo dolorido mientras se quejaba del fuerte aterrizaje.

-Tu -reprimio Ravenook reconociendo al pequeño intruso.

-Hola Ravenook -le saludo indiscriminadamente.

-¿Como has hecho para meterte y seguirme hasta aqui? -recrimino.

-Ingeniandomelas, y creeme, no estoy dispuesto a quedarme de brazos cruzados mientras tu te apoderas de la corona real -acordo estrictamente Bert.

-¿Seguro? Pues haber si puedes cogerme -protesto y entonces hecho a correr a toda prisa dispuesto a darle carrerilla para hacerlo perder.

-Ey, espera tu aqui, tu y tus amigos piratas, no os saldreís con la vuestra -reprimio Bert echando a correr para perseguirlo, giro al tunel de la izquierda y de ahí ambos empezaron una contingente carrera de la que apenas podían seguir el ritmo del otro.

..

En otra parte del castillo, un enorme silencio se hacía en toda la noche, en lo alto de las columnas interiores, un grupo de guardias iban patrullando la zona mientras cada par giraba dando vuelta en circulos por la columna que rodeaba por completo la parte central del castillo. Uno de los guardias sintio algo raro, se giro pero se fijo que no había nada, era solamente su imaginacío, siguio hacíendo lo suyo cuando de pronto un gancho se incrusto en el borde sobresaliente de la columna.

Se asusto al oír eso, y observo el gancho que se encontraba ahí detenido sin nada que subiese, alzo la lanza por precaucíon a pensar que alguién se estaba infiltrando, se acerco lo suficiente como para mirar y entonces algo lo cogío y se lo llevo hacía el otro lado, apenas tuvo tiempo suficiente como para dar un grito de auxilio cuando entonces choco con el pavimento que se encontraba abajo.

Reynabus trepo por la cuerda a la que iba enganchada con el gancho y de ahí se tiro al otro lado de la columna seguido de otro par de hombres incluido su teniente Darber, mas ganchos iban incrustandose en los bordes y de ahí mucho mas miembros piratas iban subiendo, era todo un peloton dispuesto a cometer una operacíon rigurosa.

Asintio soltando unos salvajes gemidos.

-¿Ocurre algo señor? -pregunto Darber al ver como reaccíonaba.

-Si, que estamos dentro del castillo -declaro y entonces se rio malevolicamente.

..

Bert siguio persiguiendo a Ravenook por todo el tunel del cual parecía no terminar nunca incluido con las curvas que habían, era como si estuvieran en una ciudad subterranea porque aquello parecía tener de todo según lo que veían en cada momento, no sabían si se estaban metiendo en las mazmorras o no, pero estaba claro que aquel lugar era secreto, tan secreto como la sala donde se guardaba la corona real.

-Vuelve aqui -ordeno Bert obligandole por la fuerza.

-Dejame en paz mocoso -reprocho Ravenook mientras intentaba de despistarle.

Siguieron avanzando en una tremenda persecucíon que ya hasta resultaba ridicula debido a que tenía que escapar de un niño. Se harto y decidio acabar con él antes de que se complicasen las cosas, se escondío en una esquina y entonces cuando este se acerco sin darse cuenta, le agarro y lo estampo contra el suelo.

-¿Sabes lo que les hacen los piratas a los niñatos como tu? -pregunto indirectamente como dandole un aviso para que supiera lo que sucedería ahora si seguía todavía.

-Pues no, ¿y sabes que?

-¿Que?

-Que no tienes ni idea como funcíonan los mabus -dijo y entonces le mordío en la mano tan fuerte que no tuvo mas opcíon que soltarlo mientras este se calmaba la herida de la mordida en la mano.

Luego se le tiro encima y entonces empezo a aporrearlo constantemente, Ravenook quiso sacarselo de encima pero apenas podía ver lo que sucedía ya que el niño estaba bastante desenfrenado, lo agarro y entonces lo tiro hacía adelante donde choco con una puerta metalica que resono en cuanto la toco con la punta de la nariz.

-Eso es lo que te pasa por enfrentarte a un pirata -reprocho excentricamente.

Bert gimio dolorido y alzo la cabeza observando lo que tenía delante, había chocado contra una puerta pero no una puerta normal, esta tenía algo raro que le llamo la atencíon, tenía puesto un simbolo de una estrella encima de otra de cuatro patas y la que estaba encima tenía las puntas verticales hacía arriba, el contorno de la puerta era de oro macizo y parecía estar completamente blindado.

-¿Que es esto? -se quedo extrañado.

-Oh dios mio, aqui esta -dijo Ravenook sorprendido y encantado de ver lo que veía, se acerco como atraído hacía aquella puerta que desplandecía una gran luz debido al oro que la cubría.

-¿Sabes lo que es? -pregunto Bert asumiendo que reconocío lo que era, ya no le importaba que fueran enemigos o no, ahora que estaban metidos en eso solamente les importaba descubrir de que se trataba aquella extraña puerta.

-Así es, es la puerta que daba lugar a la sala real -declaro Ravenook tocando la puerta sabíendo bien que detras de eso se encontraba la sala donde se hallaba todas las reliquias familiares del reino a lo largo de los años.

Se giro y observo que a la derecha se encontraba un hueco donde estaban colocadas unas especies de cadenas atadas a un hueco sobresaliente del suelo que parecía tener un sistema mecanizado con engranajes y ruedas dentudas.

-Y aqui esta al ascensor con el que se llega hasta aqui -concluyo al darse cuenta de que se había puesto en el lugar indicado.

-Esperas, ¿estas diciendo que había un ascensor? ¿Entonces porque no te has metido ahí? -cuestiono replicando Bert.

-Pues porque este ascensor esta en un lugar rodeado por varias lugares y solamente lo pueden utilizar aquellos que estan autorizados, y yo lamentablemente no estoy autorizado -aclaro reprochando debido a que no lo comprendía, refunfuño agobiado.

-Pues que lastima que hayas tenido que perder el tiempo de esta forma -indico ironicamente para llevarle la contra.

Ravenook tenia ganas de sacarselo de encima a patadas pero no tenía tiempo para eso, tenía que meterse ahí ya mismo, se puso delante de la puerta y entonces saco una llave dorada atada a un aro de hierro normal y corriente, se dirigio hacía el centro de la estrella luminiscente y de ahí empezo a meterla pero entonces Bert se dio cuenta de eso y se la cogío antes de que pudiera usarla.

-Niñato -le recrimino al habersela agarrado desprevenidamente.

Bert se aparto a un lado y entonces se dirigio hacía el hueco del ascensor donde estaban los bordes con los engranajes, si lo tiraba ahí entonces tendría que sacarlo y no le gustaría meter los dedos si es que acaso eso funcíonaba de verdad.

-¿Que te crees que estas hacíendo? -pregunto reprochandole.

-¿Para que es esta llave? -pregunto, la bajo dispuesta a tirarla.

Ahí entonces Ravenook no tuvo mas opcíon que contarle la verdad.

-Es una copia de la llave que permite solamente abrir esta puerta, Reynabus me la consedio porque sabía bien que yo era el uníco que podía llegar hasta aqui y abrirla, así que sera mejor que me la des o sino...

-La tirare -concluyo bajando la llave dispuesto a tirarla en serio.

Empezaba a ponerse nervioso, lo estaba poniendo terriblemente a prueba.

-¿Que quieres? -pregunto razonando con él para saber si llegaba a un acuerdo.

-Que me acompañes para que así pueda avisarle a los demas de lo que te estabas proponiendo hacer -declaro euforicamente.

-¿Y en serio crees que amenazandome vas a conseguir algo? -cuestiono.

-Pues...yo... no lo se, pero te vienes conmigo -se quedo sin ideas.

-¿En serio? Fijate, eres un pequeño hacíendose el heroe, no tienes ni idea de como cometer un plan de accíon, dices que quieres complacer a los otros, pero sabes que, nada de esto te ayudara a que te perdonen -explíco rotundamente.

Aquello tenía razón, era demasíado pequeño para entender lo que tenía que hacer, se había metido en un lugar hinospito sin ningún tipo de plan de como impedir todo eso, y encima ahora si les decía lo que había descubierto a los otros, de todas formas les regañaria por lo que había hecho.

-¿Que vas a hacer pequeño? -pregunto explicitamente.

Tenía que buscar una solucíon para impedir que se llevase la corona, pero el problema era de como podía impedirselo siendo un pequeño niño incapaz de golpear a un adulto, lo uníco que necesitaba era razonar con él como para que al menos cooperase y entendiese el mal de lo que estaba hacíendo.

-¿Sabes una cosa presentador? -le pregunto.

-¿Como? -se extraño al oír eso.

-Yo también era como tu antes, pensaba solamente en mi, cuando debería haberme preocupado por lo que pensaba de los demas, por mi culpa hice que perdíeran a un compañero que al final acabo cambiando de bando -le explíco toda su historía como para que al menos entendiera adonde quería ir a parar.

-¿De que especie era? ¿Con quien estaba conchabado? -pregunto interesado.

-Era un troll, conchabado con un general horrible -declaro.

-Oh vaya -comprendío estupefacto.

-Veras, entiendo lo que te ocurre, yo antes era incapaz de hacer algo por mi mismo, pero ahora, metido con los Skylanders, vamos a hacer algo que podría cambiar el curso de la historía, pero no podemos lograrlo si no lo hacemos juntos -razono.

-¿De que estas hablando? -cuestiono intentando de entender que era lo que estaba queriendo explicar.

-Hablo de que entiendo tu miedo, tu miedo a querer escapar de algo que temes horriblemente, les tienes miedo a ellos, a tu jefe -aclaro.

-Yo no les tengo miedo -reprocho negandolo.

-¿En serio? Porque yo antes vi como te trataban como a un cretino que no sabe hacer nada en absoluto -indico acordandose bien de lo que vio esa tarde.

Ravenook empezaba a ponerse nervioso de querer reconocer eso.

-Mira, entiendo que quieras hacer esto para poder escapar de ellos, pero eso no hara que impidas que te maten, lo acabaran hacíendo de todas formas.

-¿Y como quieres que escape entonces? -replico nerviosamente.

-Ayudanos a impedir que esos piratas sigan con la suya, y la uníca forma de hacerlo es que cooperes y te conviertas en una persona de provecho por una vez en tu vida.

-Soy un hombre de hecho y derecho, no necesito ser nada de provecho -se cruzo de brazos para reafirmar la clase de hombre que era.

-¿Y para que? Para convertirte en un ruin y avaricioso que solamente piensa en si mismo, es así como quieres vivir, como un cobarde -reprocho reconociendo la verdad.

-Mi uníco sueño era hacerme rico, hacíendo algo facil, pero ahora estoy metido en un lio porque nunca he intentado de avanzar en algo que supiera hacer bien -declaro reconociendo perfectamente que era un completo fracasado.

-Lo vez, hasta tu mismo te das cuenta de eso, vamos, ayudame a conseguir que esos piratas no se lleven la corona como trofeo -insistio y entonces se le acerco ofreciendole la mano-. Ayudanos a que te ayudemos a ser mejor persona.

Ravenook alzo la mirada y observo como le estaba tendiendo la mano, estaba claro que quería ayudarlo a liberarse de aquel sufrimiento que era estar compinchado con aquellos piratas que siempre le vivian torturando.

-¿Tu crees? -pregunto asumiendo.

-¿Que piensas tu? -contradijo expresamente.

Ahí entonces se dio cuenta de que no solamente lo estaba tratando como una persona que necesitaba salir de apuro, sino que lo trataba como que quería ser su amigo, alguién que había pasado por mucho y que necesitaba salir adelante. Empezo a extender su mano dispuesto a pactar su ayuda cuando entonces algo parecido a un estallido resono por todo el lugar de una forma sospechosa.

-¿Que es eso? -pregunto Bert extrañado.

-Una cosa mal -dijo reconociendo lo que era.

De pronto una parte del techo del tunel estallo hacíendo caer varias restos de arriba y una cuanta polvoreda de humo cubrío por completa la razón, ambos tosieron debido a la gran cantidad de humo que cayo, de pronto una enorme silueta cayo del agujero que se formo arriba, el polvo se fue y se mostro quien era aquel individuo.

-Lo hemos conseguido -exclamo Reynabus al ver que llegaron abajo de todo.

-Reynabus -dijo atemorizado Ravenook al ver que volvío su jefe.

De pronto un grupo de hombres empezo a caer agarrados a unas cuerdas que iban colgadas de una parte de arriba, varios mabus piratas iban cayendo y sacando sus espadas asegurando el lugar, luego por ultimo cayeron Darber y Armandius.

-Con que aqui es donde se guarda la corona -no se entero de como era la cosa.

-No idiota, la sala real esta detras -reprocho retractandole Darber.

-¿Y crees que no lo se? -recrimino enfurruñado al ver que lo trataba de ignorante.

-¿Que haceís vosotros aqui? No se suponía que yo era tenía que encargarme de llevarme la corona de aqui? -cuestiono Ravenook sin entender como es que se habían metido en el castillo.

-Así es querido Ravenook, pero por desgracia, nosotros teníamos otros planes -declaro Reynabus con tono egocentrico.

-¿Tu sabías esto? -cuestiono seriamente Bert ese hecho.

-¿Porque demonios estas con ese polizon Ravenook? -recrimino Darber.

-Pues... -tenía que pensar rapídamente en una excusa o sino le haría daño al pequeño y no le gustaría que se lo hicieran después de lo bien que se porto con él durante el ultimo rato-. Es mi prisionero-, le agarro.

-¿Que? -chillo sorprendido.

Sin darse cuenta le había quitado sigilosamente las llaves.

-Entonces sera mejor que se quede calladito mientras cogemos la corona y todo lo demas -acordo estrictamente Reynabus al no tener otra opcíon.

-Pero espera, ¿no lo vas a matar? -cuestiono Armandius.

-¿Para que? Hemos venido a apoderarnos del castillo, en cuanto lo hagamos acabaremos con todos aquellos que no nos han hecho caso o nos han tratado de escoria, ya es hora de enseñarle a este reino quienes son sus nuevos amos -aclaro dando a entender que ya no merecía la pena ya que se iban a apoderar de todo.

-¿Vas a apoderarte del castillo? -pregunto reprochando Bert, el otro le silencío.

-Así es, ese ha sido mi plan desde el principio -indico estrictamente.

-¿Y entonces porque me mandaste aqui si de todas formas ibas a meterte aqui volandolo por los aires? -cuestiono nerviosamente Ravenook ese hecho.

-Porque veras -fue explicando mientras empezaba a acercarse piadosamente hacía él-. Resulta que tu conoces la combinacíon de la caja acorazado que tiene vigilada la corona, tiene un codigo plateado en el extremo, y solamente tu conoces la combinacíon de como abrirla.

-¿Que combinacíon? -pregunto intentando de entender a que se refería.

-Es solamente algo que tu sabes -indico Darber al otro lado.

Ahí en ese momento se puso a pensar, tenía que ser algo que había oído a menudo, algo que importaba mucho para el rey, y solamente había una cosa en especial.

-El dia anual del rey, la fecha original -declaro.

-Pues por eso mismo te necesitabamos, porque solamente tu al mirar esa cerradura, te daras cuenta perfectamente de cual es la combinacíon -inquirio expresamente.

Ahora empezo a entender con moralidad, el era la clave para poder sacar la corona de la caja acorazada que impedía que alguién la sacase de ahí.

-¿Tienes la llave inepto? -pregunto reprochando Armandius.

-Si -afirmo enseñandosela a la cara.

-Bien, ahora abre la puerta -ordeno estrictamente.

Dirigio la mirada hacía la puerta dorada donde antes se había propuesto meter la llave, tenía que meterla ahí y entonces abrería sola, se acerco como para meterla en la cerradura pero entonces Bert le detuvo agarrandolo fuertemente.

-Lo siento, pero tengo que hacerlo -exclamo susurradamente.

Lo dejo a un lado sabiendo bien que no haría nada estupido y entonces marcho a abrirla, metío la cerradura y entonces se oyo un pequeño mecanismo que venía del interior, de pronto la puerta se corrío hacía el otro desvelando otra puerta contraria donde esta se abría formando un hexagono del cual las hojas se metían en unos bordes que habían en el interior del sistema de engranajes.

Se abrío del todo y ahí entonces lo que contenía en el interior, Reynabus fue el primero metiendose empujando a Ravenook hacía atras y entonces complacido al ver lo que había dentro. Era una enorme cupula que llegaba hasta donde podía ocupar casi la mitad del castillo, los techos estaban abovedas de forma curvada con varias retratos hechos en forma de mosaico, la sala estaba recubierta de varias parcelas en el suelo donde iban acompañados todo tipo de artilugios de oro en cada seccíon, en las paredes se encontraba un conjunto de cajones blindados con cerraduras extrafuertes que supuestamente debían de guardar cosas de valor.

-¿Y la corona? -pregunto Armandius al otro lado.

Entonces Reynabus alzo la vista observando un pilar coronado de color canela donde se encontraba apoyado encima una caja transparente de gran aleacíon, casi impenetrable e irrompible y dentro se encontraba una corona de aspecto clasico y llevaba en cada punta una esmeralda de varios colores vivos y originales.

-Ahí esta -señalo mostrando una mueca terrorifica.