Muchas gracias Arual17 por tus comentarios y seguir leyendo mi historia. Con respecto a la golpiza de Nakamori, me pareció bien que lo increpara quería que pusiera en su lugar a los padres de Kaito, me imagine yo diciéndole esas palabras, pues el inspector esta más que decidido en proteger a ambos, cambio su perspectiva desde que escucho su historia. ¿A QUIÉN SE HABRÁN LLEVADO? En este capítulo lo menciono.
Bienvenido Spade12 y te agradezco por tomarte el tiempo de leer mi historia, además me alegro que te gustara. Espero de que este capítulo sea de tu agrado.
Advertencia. En esta parte de la historia habrá palabras altisonantes, tortura leve, quizás intento de violación, muerte de un personaje además de cautiverio. Léanlo bajo su propio riesgo una vez dicho esto, los dejo con la lectura. Los diálogos que estén () y cursiva serán pensamientos.
SECUESTRO Y TORTURA
La ojiazul está despertando, se siente desorientada con dolor de cabeza, abre los ojos, pero no puede ver nada, quiere moverse, pero no puede, a lo lejos escucha voces, siente que se mueve, acaso está en un automóvil, la mujer que la secuestro se da cuenta de que está despierta y se acerca. -Será mejor que no hagas ningún movimiento, pronto llegaremos y te entregaré a mi jefe. La castaña se estremece, tiene miedo, a donde la están llevando, de pronto la furgoneta da una vuelta ocasionando que ella gire al lado izquierdo golpeándose con un objeto, el carro se ha detenido, no puede ver nada, tiene los ojos vendados probablemente para que no vea el camino, la toman de los brazos y la arrastran, por su puesto ella forcejea, sin embargo, siente como es cargada como un costal y después la tiran al suelo sin ningún tacto, haciendo que gima de dolor.
-Oh, que haces, esa no es forma de tratar a nuestra invitada de honor. Escucha pasos acercarse a ella. De pronto la venda que la cubría está siendo retirada, la luz le da de golpe por lo que ve borroso, el sujeto que se acercó a ella se retira un poco, ella parpadea un par de veces y cuando ya empieza a enfocar levanta la cabeza. Nunca imagino con volverse a encontrar a ese sujeto.
-Nos volvemos a encontrar, déjeme darle la bienvenida a la novia de Kaito Kid o debería de llamarte la portadora de Pandora. Aoko esta aterrada, mira por todos lados intentando encontrar una salida, no ve ninguna; sin embargo, se levanta como puede y empieza a correr, siendo observada por el sujeto, quien solo ríe. -No hay manera de escapar de aquí, no te preocupes, no nos quedaremos mucho tiempo, iremos a un lugar más cómodo y apartado en donde tendremos todo el tiempo del mundo. Shark voltea a ver Loxosceles. -Ve por ella, estarás a cargo de cuidarla que nadie se le acerque entendido, la mujer asiente.
Estaba por ir a su oficina cuando se detiene y sin voltear le dice. -Si te causa problemas puedes golpearla un poco sin lastimarla o sedarla, te lo dejo a tu criterio. Dicho esto sigue su camino. Lo último que ve Aoko es un puño yendo directamente a su rostro.
La chica está inconsciente y se la llevan, pero Loxosceles habla. -Señor tengo que decirle que no sé si traje a la chica correcta. Este comentario hace detener a Shark, indicándole que continué. -Había otra muchacha que era parecida a ella, quizás su gemela, pero como no pudimos capturarle, solo pude...
Shark se queda en silencio analizando la situación. -No te preocupes trajiste a la chica correcta, jamás olvidaría su rostro, da por zanjado el asunto, se voltea y una sonrisa burlona aparece en su rostro. -Tengo a tu chica Kid, que harás.
Mientras tanto en el suburbio de Asakusa donde se puede observar la torre Tokio Sky Tree, una furgoneta entra en una casa de dos pisos, la estacionan en el garaje y sacan al anciano quien aún está inconsciente y es llevado a una habitación que ha sido habilitada, lo colocan en la cama y lo esposan en la cabecera de la misma, la mujer entra y mira al hombre saliendo del cuarto y empieza con su otra parte del plan.
-Ustedes, necesito que me traigan a esta perra, les estregá una foto. -Se llama Shiho Miyano, deben traérmela lo antes posible, pero deben tener cuidado, es amiga del detective del este Shinichi Kudo, no me importa lo que tengan que hacer, pero háganlo en silencio y que nadie se entere. Entendido si fallan ya saben lo que les espera.
Los dos hombres se estremecen, toman la foto y salen de la casa, mientras Krait, sonríe tétricamente pues se imagina todas las marcas que le dejara a Shiho, mientras espera a que llegue su otro entretenimiento, saca una llave de su saco se dirige a una puerta de metal la abre, tras esa puerta se encuentra instrumental de tortura, cadenas en la pared y una silla con grilletes, - es ahora de comenzar la diversión.
Una chica pelirroja va caminando hacia la cafetería de su novio, han pasado unas semanas desde que dejo de trabajar para el corporativo Kaizuko y ellos no la han buscado aún, se detiene para esperar el cambio del semáforo y de repente un carro se detiene frente a ella bajando de él, un sujeto quien va directo a ella, esto la sorprende, empieza a correr, pero siente que la agarran de la cintura, su novio le enseño unos movimientos para defenderse, dejando atontado a su atacante, nuevamente corre y grita, algunas personas les bloquean el paso, él que está en el auto hace una llamada diciendo que han encontrado a la chica, dando las indicaciones por donde escapo, mientras tanto Shiho sigue corriendo y se mete a un callejón escondiéndose detrás de un contenedor de basura, está temblando de miedo, saca su celular para marcarle a su novio, mientras busca el contacto y trata de controlarse piensa porque van tras ella, ¿Quiénes son esos hombres?, quizás se dieron cuenta de que tienen a Pandora, tan metida estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta de que le llegaron por la espalda, la agarran de los cabellos arrastrándola en el proceso, Shiho trata de zafarse, el hombre se voltea y le da una patada en el abdomen sacándole el aire, este se agacha y le sostiene el rostro para decir. -No sé que hiciste para enojar a nuestra jefa, pero tengo órdenes de llevarte con ella, ahora podemos hacerlo de manera civilizada o de la manera difícil cuál prefieres.
La pelirroja le escupe el sujeto se lleva su mano a su cara retirándose la saliva y este como respuesta. - Parece que será la segunda opción, a continuación le da patadas a Shiho una y otra vez cayendo inconsciente, el sujeto se da cuenta de que la muchacha ya no lucha por lo que la carga sobre sus hombres, afuera del callejón un coche negro los espera, dejando atrás el bolso y celular de la historiadora, la colocada en la cajuela, le amarran piernas y manos, le colocan cinta adhesiva en los labios y una venda en los ojos, su trabajo está hecho ahora tiene que llevar el paquete con su jefa por lo que se dirigen a la casa de seguridad, los hombres no se dieran cuenta de que hubo un testigo, que solo observaba como se llevaban a la mujer,
El auto se dirige al suburbio de Asakusa, el recorrido que hacen no es mucho y una vez que llegan, llevan a la chica hacia el interior. Pasan unos minutos desde que la dejaron allí, la pelirroja despierta en una habitación con poca iluminación, trata de recordar lo que le sucedió, pero el golpe en la cabeza no la deja pensar solo escucha a lo lejos un grito, trata de levantarse, sin embargo, es imposible pues ve con horror como sus piernas y manos están atadas con cinta adhesiva, escucha unos pasos acercándose, vuelve intentar levantarse siendo en vano, de repente los pasos se detienen y ve unas sombras deteniéndose en su puerta, por lo que rápidamente cierra los ojos nuevamente quedando estática, escucha que quitan algo, probablemente un candado o una cadena el sonido de la puerta abriéndose y con ello la voz nítida de sus captores los mismos que la secuestraron, quienes se acercan a ella y uno de ellos se agacha. -Sigue dormida, que hacemos la dejamos.
-Dormida o no tenemos que llevarla, al menos yo no quiero hacer enojar a la jefa, acaso no ves como está tratando al pobre viejo, llevémoslas al cuarto especial. El sujeto fornido la carga, siendo seguido por su compañero el cual vuelve hablar. - Que habrá hecho esta chica linda, no parece que este en este negocio. Su compañero se detiene y voltea. - Nosotros no preguntamos ni cuestionamos, nuestro trabajo es cumplir órdenes y eso fue traer al viejo y a la mujer.
Continúan con la caminata, Shiho siente como se detienen y vuelve a escuchar que se abre una puerta, entrando a una habitación la cual huele a hierro o es sangre, lentamente la colocan sobre una silla, abre un poco los ojos procurando que no la vean, observa como es retirada la cinta y en su lugar son colocados unos grilletes. El sujeto quien la cargaba le da una orden a su compañero, para que se lleve al anciano, este obedece. Shiho mueve un poco los ojos y se sorprende al ver a la persona quien está atada en la pared, ya no puede sostener la fachada de estar dormida, se mueve bruscamente intenta liberarse, llamando al inconsciente anciano
- Jii, Jii, Jii-chan, me escuchas por favor, respóndame, Jii-chan. El pobre anciano hace un esfuerzo para levantar su cabeza para ver quien le llama, no obstante, su visión se ve obstaculizada por la sangre que está en uno de sus ojos, aun así hace un esfuerzo y ve a una joven con el pelo corto y pelirroja, la ha visto con el joven Kudo, se pregunta que hace aquí, acaso se dieron de cuenta que ellos tienen a Pandora.
Mueve sus labios, pero su voz no sale, no sabe cuanto tiempo lleva gritando del dolor, desde que lo trajeron lo han torturado sin cesar, aunque debe estar agradecido que lo dejan descansar unas horas antes de volver a golpearlo, escucha como es liberado de sus cadenas, para ser llevado a su habitación, intenta mantenerse de pie y trata de caminar hacia ella, pero sus piernas no le responden, haciendo que caiga para desmayarse después.
Shiho se mueve violentamente gritando su nombre, contemplando como se llevan aún inconsciente Jii ante sus ojos, todo esto lo observa su ahora carcelero, quien decide hablar. - Como es que conoces al viejo. La pelirroja no responde, el hombre se levanta al terminar de colocar los objetos y se levanta. No sin antes decir. - Sabía que estabas despierta, quería mostrarte lo que te pasara a ti o quizás algo peor, para que veas que soy un hombre de buena voluntad no lo mataremos, ni lo lastimaremos demasiado, lo que viste hoy fue porque intento huir y debía ser disciplinado, por lo que lo dejaremos descansar un poco.
Shiho escucha atentamente y decide hablar. - Porque nos han secuestrado, que hemos hecho para merecer esto, él no aguantara, déjenlo ir.
-No tengo por que responderte, pero te daré un consejo, es mejor que te preocupes por ti, lo que viste con el viejo es solo una caricia, espero que aguantes el trato de la jefa. Y sin más el sujeto sale cerrando la puerta con llave. Shiho intenta liberarse y lo único que consigue es lastimarse las muñecas, maldice su suerte, de pronto escucha un mecanismo proveniente de la silla colocándose en posición horizontal, dejándola con las piernas en el aire, se empieza a mover dejando a la pelirroja confundida pues no sabe que está sucediendo, se detiene como en un tipo base y sale un aro que aprisiona su cabeza para que no se mueva, haciendo mirar hacia el techo del cual sale un pequeño tuvo y de él, en ese momento observa como una pequeña gota de agua cae a su frente. Shiho únicamente rueda los ojos.
-Es en serio de verdad piensan que me van a asustar de esa manera, que patéticos son. Transcurren unas horas y la pelirroja ya empieza a desesperarse una tras otra esas gotas la están volviendo loca, además ya está empezando a sentir frío y dolor en su frente. Vuelve intentar zafarse pero es inútil. -Demonios.
-No deberías moverte de esa manera, lastimarás tu hermosa piel, querida. Esa voz la hace detener de su acción debido al grillete en su cabeza no puede ver a su interlocutor, pero sabe que es una mujer, pero de donde salió si esa puerta no se ha abierto. - Co… como en… entrantes, esa puerta no se ha abierto.
Se escucha unos tacones acercarse a ella, ve a una mujer rubia con unos hermosos ojos verdes la observan, sin embargo, esos ojos son fríos, no reflejan emoción alguna, la mujer se agacha acerca su nariz a su rostro, recorre cada centímetro deteniéndose en sus labios, la besa, Shiho abre desmesuradamente los ojos intenta detenerla, pero un dolor la detiene, esa mujer la ha mordido, lo sabe porque su boca sabe a hierro y ese es el sabor de la sangre.
-Vamos a divertirnos juntas pequeña zorra, hace un momento dijiste que esto no te asustaría, entonces pasemos a otro nivel, pero antes quiero que me respondas de donde conoces al Sr. Kōnosuke. La mujer coloca su mano en forma de garra en la mejilla, aplicando una fuerza suficiente que las uñas se le entierra, obviamente Shiho siente dolor, no obstante no le dará el gusto de gritar a esta loca.
-No sé de qué estás hablando, yo no conozco a esa persona. Las uñas que están en su mejilla empiezan a recorrerla provocándole un ardor, de pronto una cachetada se escucha. Es tan fuerte que su cabeza se mueve, lo que provoca que se lastime con el grillete.
-No quieras engañarme maldita puta, mi subordinado dijo que tú lo conocías, ahh ya entiendo es el amigo de tu querido abuelo, tal vez debería mandar a traerlo también y tener una linda reunión familiar, no lo crees.
-No te atrevas a tocarlo siquiera, maldita loca. Shiho le muestra una mirada gélida, aunque este con miedo. Krait solo se ríe, se aleja un momento, para acercarse a un panel de control, tocando un botón, he inmediatamente la silla se mueve dando un giro, poniéndola nuevamente sentada, los grilletes que la mantenían inmóvil se quitan, Shiho no lo piensa dos veces y corre hacia la puerta para escapar, pero esta no se mueve un centímetro, entonces voltea hacia su captor y esta le muestra las llaves, sabe que está provocándola. No tiene alternativa que pelear con ella.
Corre e intenta darle un golpe, la rubia la esquiva y le da un gran golpe en la espalda haciendo que Shiho caiga, Krait se pone encima de ella y la voltea en la cara con la palma de la mano una y otra vez, la pelirroja no puede esquivarlos, porque la tiene inmovilizada, ya no siente el peso extra, sin embargo, siente una mano en su cabeza y la arrastra, Krait la levanta con una facilidad sorprendente y la lleva a una pileta y sin previo aviso la sumerge, Shiho posa sus manos intentando evitar que la sumerja más, la mujer saca la cabeza y la pelirroja toma aire y nuevamente es sumergida, Shiho siente que le falta el aire y siente que está a punto de desmayarse, no obstante es arrojada al piso con mucha fuerza, gritando de dolor.
-Me encanta ese sonido, de nada sirve que te arrastres, te enseñaré a no meterte con mis cosas, puta, entonces arremete contra la pelirroja golpeando su cuerpo a puñetazos, luego con los pies, como ve que la chica no se mueve va por un palo que tenía previamente preparado y empieza a golpearla muy fuerte, Shiho solo aprieta sus manos, aguantara esto, tiene que no le volverá a darle el gusto de escucharla. Escucha de un objeto al caerse y el jadeo de la mujer, parece que ya se cansó. No obstante, esta se arrodilla, y le habla.
- Me imagino que te preguntaras por qué te hago esto, sin embargo, te mantendré en la oscuridad un poco más, mi ira contra ti es mucha, lleva una mano a su bata y saca un encendedor, Shiho muestra una cara de terror y mueve su cabeza de un lado para otro y sin ninguna advertencia lo coloca cerca de su pierna el olor a piel quemada le llega a su nariz y grita un grito tan fuerte que puede asustar al vecindario entero. Esta acción solamente excita a la mujer, quien retira el encendedor viendo como la piel de la chica está rojiza, vuelve a colocarlo en otro lugar repitiendo el proceso un total de cinco veces. Shiho ya no lo soporta y se desmaya.
Krait ve con pesar que ya no puede seguir, por lo que decide retirarse del sitio por otra puerta alterna, poco después de irse, la puerta donde ingreso Shiho es abierta, el sujeto que la llevo se acerca. -Te lo dije. Procede a curarla, para la otra sección.
Mientras en otro sitio en una cabaña una joven de ojos zafiro tiene un sueño, está en un punto donde la vestimenta es rara, ve a un chico siendo maltratado por la gente, quiere acercarse, pero sus padres se lo impiden, es trasladada a otro paraje, ve al mismo chico con lo que parece ser una bolsa de piel de oveja, parece que el joven se está yendo, esto la pone triste, se acerca a él; sin embargo, el muchacho la ve mal, le dice que quiere, ella le regala una rosa azul, esto toma por sorpresa al muchacho, ya que esa flor significa amor eterno, el chico nuevamente la observa, no obstante no dice nada, por lo que decide marcharse, ella lo ve irse y en ningún momento voltea a tras, nuevamente cambia el escenario, sin embargo, se le muestra a su amado llorando en un lugar donde hace calor. Quiere correr hacia él, ayudarlo, pero no puede moverse en ese instante escucha una voz
-No puedes ir, este es un sitio donde todas las almas van, para ser juzgados después de su muerte. La chica se lleva las manos en su rostro y empieza a llorar.
-Dime pequeña, estás dispuesta a ayudarlo. Ella no pierde el tiempo y dice que sí.
-Escucha bien lo que te voy a decir, nacerás en una época donde las estrellas no se verán, tú y él se encontraran, sin embargo, no lo reconocerás pues un manto blanco lo envolverá, se le ha concedido una oportunidad, pero el daño que causo debe pagar. Estas palabras alertan a la muchacha por lo que decide interrumpir. -Espera, él va a volver a morir, yo no quiero eso.
-Eso no sucederá si tú tomas su pecado. -Que quieres decir. La voz le responde -Tu vida, debes tomar tu vida para limpiar el error que él cometió, no obstante, debes hacerlo al mismo tiempo que él destruya el objeto, debes estar delante de sus ojos. Y antes que la chica conteste es envuelta por una luz blanca.
La chica abre los ojos y se encuentra en un jardín lleno de flores a lo lejos se ve un templo, este paisaje es único y siente paz. -Veo que te gusta no es así. La muchacha voltea y frente a ella ve a una hermosa mujer de cabello castaño con risos, con un búho en sus hombros y eso es una armadura a su lado una serpiente se enreda en su lanza.
- Si me gusta, sin embargo, que hago aquí. La hermosa mujer solo sonríe, acercándose a ella. -Yo te traje aquí antes de que fuera demasiado tarde, además no queda mucho tiempo tienes que regresar hay otra forma de ayudarlo, se acerca a ella y le susurra a su oído. De repente la escena se vuelve borrosa y por ende no escucha lo que le dicen. Aoko despierta abruptamente pues le han echado agua fría, ve al causante de esa acción y se pone pálida, es el hombre que estaba en el museo, trata de retroceder, pero no puede. - Veo que has despertado es momento de tener una conversación Pandora.
- (Me acaba de llamar Pandora, que debo hacer ahora). Que quiere usted de mí y porque me llama así, ya le dije que no tengo nada que ver con ese ladrón. Así que le sugiero que me libere. Aoko está asustada, aun así no se amedrenta.
Shark la analiza demostró miedo hace un momento, pero debe reconocer que es valiente.- Tal como te recordaba ese día, pero las preguntas las hago yo, sin embargo, te daré dos opciones la primera tenemos una conversación civilizada o sacate la verdad por la fuerza.
Aoko se pone pálida no sabe de lo que es capas este sujeto, sin embargo, decide hablar. - Yo no sé la identidad de Kaito Kid y como dije no soy su novia, aún estoy molesta por ese comentario, ahora déjeme libre soy hija del inspector de la policía, yo no diré nada si me libera, si no aténganse a las consecuencias.
Se oye una risa que deja a la castaña descolocada, esto la enfada de sobre manera. -Acaso dije algo gracioso. Shark la mira y sin previo aviso le da un golpe a Aoko con la palma abierta, haciendo que la chica caiga de la cama, la castaña se lleva su mano a la cara la retira y ve con horror que hay sangre, levanta la mirada hacia el sujeto y no le gusta lo que ve. Se acerca a ella la agarra de la mano y la avienta muy lejos de la cama, Aoko gime de dolor y trata de levantarse, no obstante siente algo que la detiene voltea y ve el pie de Shark obstaculizando su huida.
-Me parece que tenemos que modificar esa actitud altanera tuya y no estoy de humor, no obstante te daré otra oportunidad de responder, dime que tipo de poder utilizaste para que te rodeara esa luz roja.
Entonces Aoko comprende lo que quiere saber, pero si le revela que conoce a una bruja Akako estará en peligro. -N... o, n...o, no sé lo que me estás hablando no recuerdo lo que paso ese día. Espera que este loco le crea. No obstante siente una presión en la espalda, se muerde el labio para no gritar.
-Umm, no te creo mocosa, estoy seguro de que tú eres la guardiana de Pandora, la pregunta es en donde la tienes escondida o, se agacha la voltea y empieza a pasar sus manos sobre su cuerpo y esto estremece a la chica. - Está dentro de ti, no estoy seguro si un objeto puede estar dentro de algo vivo, pero podríamos comprobar, no lo consideras así. Y Aoko ya no puede más, lágrimas empiezan a caer y ruega porque Kaito la encuentre rápido.
Shark toca su mejilla, limpiándolo. -Tan rápido te rendiste, no me dijiste que me harías pagar, todavía no es tiempo de llorar, tendremos mucho tiempo para conocernos mejor. La no novia de Kid. Se escucha que tocan la puerta, Shark da el permiso de entrar Loxosceles.
-Señor está todo listo, pero si me permite hablar. Shark se levanta y la voltea a ver, da una señal para que siga hablando. -Si esta chica es la portadora creo que sería contraproducente dañarla, si el jefe se entera se enfadara, por lo que si me permite que sea yo la que la interrogue. El silencio es abrumador, Shark pasa al lado de la mujer, para dirigirse a la puerta, sin embargo, se detiene. -De acuerdo, estarás a cargo, empezarás mañana, fue suficiente el día de hoy dale de comer y asegúrate que se lo acabe. Y con esto se retira dejando a las dos mujeres solas.
Aoko no sabe si agradecerle o temerle, pero por si las dudas no bajara la guardia, se quiere levantar, sin embargo, un dolor en su abdomen la hace desistir de su acción, produciendo un pequeño gemido. No pasa desapercibido por Loxosceles, quien saca una radio para pedir el maletín médico, poco después tocan entregándoselo, la mujer lo recibe y procede a curarle, sin decirle una palabra, termina y le entrega unas pastillas, Aoko se rehúsa a tomarla.
-Será mejor que te lo tomes te desinflamara los golpes, además tienes que dormir, estarás aquí un largo tiempo, tendrás que acostumbrarte; sin embargo, te diré que mientras esté cuidándote no te golpeara nadie no soy fan de la violencia física. Pero eso puede cambiar si no obtengo lo que el jefe quiere y pasarías a sus manos y creo que no te gustaría eso otra vez verdad, así que se una buena niña y coopera, quien sabe lo que pueda pasar, quizás un día despiertes sobre una plancha al lado de unas herramientas de tortura. Termina su labor de curarla dejando a la castaña asustada por lo que dijo, Loxosceles solo sonríe tranquilamente y sale de la habitación, dejando a una pobre chica hecha un ovillo.
Continuará...