Hola, buenas tardes, noches o días; según lo estén leyendo. Lo sé, me he tardado mucho en actualizar y es debido de que estoy bloqueada con esta historia, sé cómo terminarla, pero no encuentro las palabras para desarrollarla. Por lo que les pido paciencia.
También quiero decirles que ya está completo el fantic de Regresa a Mí, para que lo lean, espero que les guste. La pueden encontrar tanto en la plataforma de Fan Fiction y Wattpad. Así como mis demás historias. Estoy con el mismo nombre de usuario en ambas.
Sin más que decir, los dejo con la lectura. Perdón por las faltas de ortografía y palabras repetidas que pueda tener.
UN REGALO PARA CONAN
Shinichi estaba pensando quien enviaría un paquete a su alter-ego, sabía que ninguno de sus conocidos lo haría y mucho menos esa mujer, Gin no se enteró de que estaba vivo hasta que recupero su cuerpo, por lo tanto, no sabía que era Conan Edogawa. Entonces de quien o de donde se filtró la información.
Kaito observaba a Shinichi y por como estaba manejando sabía que algo paso y todo eso se debió a la llamada, quería preguntarle a su amigo, lo veía alterado. Y lo confirmo cuando el detective no se fijó que el semáforo había cambiado a rojo, por lo que Kaito tomo el volante para evitar un accidente.
-Demonios Kuroba por qué hiciste eso. No ves que tenía el paso.
-Estaba en alto Kudo, si no fuera por mí estaríamos muertos. Ahora dime que diablos te tiene tan alterado.
-Eso no te importa idiota.
-Pues déjame decirte que ahora es mi asunto, si casi muero por ello, pedazo de imbécil. Ambos chicos se veían alterados, en especial uno.
El detective, al ver lo que estaba haciendo, retoma su postura, respira profundo, pasa su mano por su cabello y decide hablar. - Mouri-San, me llamo diciéndome que alguien le mando un regalo a Conan.
Ante lo dicho por Shinichi, el mago se sorprendió con razón estaba alterado, quien más sabría su secreto, el mismo hizo una investigación y le dijo al detective que debían atar todos los calvos sueltos, parece que no fue así.
-Eso no puede ser, nosotros nos encargamos de... Dice Kaito
-Ya lo sé, de algún modo. Esa información salió a la luz, el problema es de donde. Dice Shinichi
- No quiero decir esto, sin embargo, es lo más factible. Tantei-Kun
Shinichi lo mira, pero no logra captar lo que está diciendo hasta que hay una posibilidad. -No, ella no sería capaz de decirlo.
-Cuando estás siendo torturado, puedes decir cualquier cosa para salvarte. Además, no la culparía.
-Demonios. Saca su celular y marca a Rei, uno, dos, tres tonos y no hay respuesta, Shinichi vuelve a llamar, se está desesperando, por lo que Kaito interviene.
-Manejaré yo, estás demasiado alterado y nos puedes matar. Iremos a la agencia, encárgate de llamar a Rei, nuevamente.
Kaito sale del auto, para ir del lado del piloto, Shinichi lo ve, con mala gana, sin embargo, el mago le extiende la mano, para que le dé las llaves e invitándolo a salir y sentarse al otro lado, por lo que a regañadientes, Shinichi accede, una vez Kaito se sienta, enciende el automóvil, pisa el acelerador, rápidamente el detective se pone el cinturón, en pocos segundos llegan a la agencia con un fresco mago y un despeinado detective, agradeciendo a todos los dioses por llegar vivo al lugar.
-Me acusas a mí de que, casi nos matamos, cuando tú eres un loco al volante.
El mago estaba por rebatir cuando Shinichi siente su celular vibrar, observa quien le llama y no duda en contestar, durante la llamada el detective le plantean a Rei, lo sucedido hasta el momento, por lo que este le pasa el celular a la historiadora, ambos saben que todavía no está en condiciones de ser interrogada, pero dadas las circunstancias no les queda de otra. Una vez termina de llamar se dirige a paso firme a la agencia. Kaito lo sigue, sin embargo, decide preguntar, pues, la curiosidad lo mata.
-Que te dijo Shiho, dijo algo, mientras estaba en cautiverio.
El detective toca y la puerta se abre, siendo recibido por su suegro. Observa el lugar, no ha cambiado nada desde que dejo ese lugar siendo Conan. -Shiho, no dijo nada, la mujer que la tenía, no hizo ningún cuestionamiento a mi persona.
Todas las teorías que el mago tenía se fueron al caño, entonces, quien es… Kogoro les da permiso a ambos muchachos, se sientan en la sala y en la mesa, se encuentra una gran caja, con un moño y una tarjeta con el remitente para Conan Edogawa.
-Espero, por tu bien mocoso, que no estés engañando a mi hija.
Shinichi lo observa, diciéndole, con la mirada que este asunto es serio. -Ya lo sé mocoso, pero el ambiente es muy tenso aquí. Ábrelo ya.
El detective se acerca a la caja y empieza a desenredar el listón, abriéndola, para sorpresa de los presentes, solamente hay peluches, dulces y un libro de misterio de Sherlock. Kaito intenta tomar un peluche, pero es detenido por Shinichi.
-Tío, présteme una pluma y una hoja. Kaito como el viejo detective lo observan y no entiende que está pasando, sin embargo, este último decide ir por lo que le pidió.
- Oye Tantei-kun, no es momento de que te pongas hacer un resumen del libro ahora. Tenemos que averiguar como supieron que eras el mocoso de lentes.
-Eso es precisamente lo que estoy haciendo. Y deja de llamarme mocoso de lentes, nunca me gusto ese apodo. Ladrón de pacotilla.
-Disculpa, pero ese es tu castigo por atormentarme con esos endemoniados balones, con los cuales casi me matas. E N A N O.
Shinichi le sale una benita y justo cuanto estaba por apretar el botón del cinturón, se escuchan dos golpes secos, ambos jóvenes se soban la cabeza.
-Porque hizo eso, dicen al unísono Shinichi y Kaito.
-Porque se compartan como unos críos, tú compórtate como un adulto, ya no tienes la apariencia de uno y en cuanto a ti déjalo trabajar. Y vete a sentar.
Kaito a regañadientes se va, sobándose su cabeza, ahora entiende a Shinichi cuando le decía que lo único malo de ser Conan eran los golpazos del tío, por su parte el detective pone toda su atención a una de las páginas del libro, se dio cuenta desde que lo tomo, que habían utilizado el método de cifrado Ottendorf, una vez termino procedió a leer el mensaje oculto.
""Buenas tardes, pequeño Conan Edogawa o debería decir detective Shinichi Kudo, se preguntará, por el contenido de la caja, le he enviado todo lo relacionado con el Corporativo Kaizuko, tanto lo legal, como lo ilegal, además le voy a decir el nombre del jefe, sin embargo, le dejaré a usted que le ponga rostro, este es mi manera de redimirme. También le dejo un video, que está relacionado con su otra identidad. Le daré un consejo, nunca deje que se le escape información, si quiere vencer al enemigo. Para acceder al contenido, pídale ayuda a su aliado Kaito Kid, pues ustedes son muy cercanos. Tanto que sabe su identidad, al igual que yo"".
Les deseo lo mejor. H. I.
Shinichi no puede creer lo que estaba leyendo, esta persona sabia todo sobre él, sin embargo, lo que más le sorprendió fue que supiera el secreto de Kaito, pero como demonios lo supo. Observa a su amigo, Kaito al sentirse observado voltea, encontrándose con la mirada del detective.
-Que sucede Shinichi.
-Kid, abre la caja, solo tú puedes hacerlo. Esto toma por sorpresa al mago, pues el detective nunca usa el nombre de su alter-ego, a menos que sea necesario. Se levanta para acercarse al mencionado.
-Porque quieres que lo abra yo Meitantei.
Shinichi le da la carta al mago y al terminar de leerla, se dirige inmediatamente a la caja, saca todo lo que está dentro a simple vista, no se ve nada fuera de lo normal, sin embargo, para el mago todo tiene un truco y esta no es la excepción por lo que detecta una tapa falsa, retirándola, para su sorpresa hay otra caja, pero no cualquiera es nada más ni nada menos que una "Himitsu-bako".
-Porque hay otra caja, además que es una caja muy extraña. Dice Kogoro
Shinichi y Kaito se observan, la persona que les envió este paquete, no se los dejara fácil, Kaito le da una pequeña clase de historia al antiguo Kogoro el durmiente.
- No es cualquier caja, se llama Hamitsu-bako o caja rompecabezas, creada a principios del siglo XIX en la región de Hakone, su creador fue Ryugoro Okawa, este tipo de artefacto solo puede abrirse a través de una serie de movimientos muy precisos, sin embargo, hay algunas que solo requiere pocas piezas para abrirla. Sola espero que no traiga una sorpresa como la Acero Tanuki.
Kaito saca cuidadosamente la segunda caja y se siente en la sala de la agencia, antes de hacer cualquier movimiento, la observa detenida mente. Por su parte Shinichi sabe que su amigo puede lograrlo, si fue capaz de abrir la caja fuerte de Samizu Kichiemon de la casa de viejo Suzuki, este reto será pan comido para él, ve como Kaito procede a abrir la caja, en ese momento su celular suena, desconcertando por completo a los presentes.
Shinichi se aleja para no interrumpir al mago, revisa el contacto y es Hattori. -Que sucede.
-Kudo, ya sabemos quien es el soplón, Hakuba logro poner un programa espía, sin embargo, tenemos un problema. Usarán a Nakamori como anzuelo o moneda de cambio.
-Ya veo, quieren que les entremos a Kid por Aoko, hay algún dato sobre el lugar donde se encuentra.
Kaito al escuchar el nombre de Aoko deja su labor para quitarle el celular a Shinichi. -Hattori, dime todo y no te guardes nada.
Shinichi intenta quitarle el móvil, sin embargo, sus intentos son inútiles, mientras tanto el moreno no sabe que decirle, siendo Hakuba quien lo salva de tal situación.
-Kuroba, te diré todo lo que sepa una vez que termine de localizar al receptor, mientras tanto concéntrate en lo que sea que estés haciendo.
-No te atrevas a colgarme Saguru, dime donde se encuentra Aoko, no sabes lo que he estado sintiendo, desde que se la llevaron, así que dime de una maldita vez en DONDE ESTÁ.
El silencio se esparce de ambos lados del móvil, todos están estresados y preocupados por Aoko, sin embargo, es más notable en Kaito quien ha empezado a investigar por su cuenta, de no ser porqué Shinichi le pone un alto todo lo que han investigado se vendría abajo. Para sorpresa de los jóvenes es Kogoro Mouri quien le quita el móvil.
-Te llamaremos luego. Cuelga y le entrega el aparato a su yerno. Kaito está molesto, le grita el porqué lo hizo, el antiguo policía no dice palabra, molestando más al mago, quien ya no puede contener su rabia, lanzándose al detective quien con un rápido movimiento lo somete. Shinichi quiere intervenir, pero Mouri le dice que no intervenga, Kaito intenta zafarse, no lo logra.
-Muchacho, no tienes que perder tu objetivo, sé muy bien por lo que estás pasando. Kaito lo mira, transmite rabia y culpa, por lo que Mouri decide continuar.
-Juraste que nunca dejarías que nada le pasara, que la protegerías, sin importar lo que te sucediera a ti. Y, sin embargo, todo tu plan se viene abajo cuando la capturan. Esa rabia que sientes te carcome, pero su mirada te dice que confía en ti.
Kaito deja de forcejear, esas palabras son para él o quizás. -Respóndeme mocoso dejaras que esa rabia te domine, defraudando a la persona que espera y confía en que la rescataras. O darás lo mejor de ti, eres el maldito ladrón Fantasma que hace milagros, acaso eran fanfarronerías lo que pregonabas.
Lentamente, va aflojando su agarre y Kaito se dirige a la caja, en unos pocos minutos la abre mostrando los documentos que se encuentran en ella, rápidamente Shinichi los agarra y los abre, efectivamente ahí se encuentran todos los movimientos financieros, así como un disco y fotografías, en donde se puede ver que el mago se quita el disfraz revelando su rostro. Mouri toma el disco para reproducirlo en la computadora, los jóvenes lo siguen y para sorpresa de ambos es el momento que le dan la píldora a Shinichi, ver como este se encoge y escuchar ese grito aterrador, les puso los pelos de punta.
- Realmente debió doler, verdad Meitantei.
-No sabes cuanto. Shinichi marca al inspector Megure para informarle de los documentos, para que preparara una orden de cateo a la corporación, no obstante. Kaito lo interrumpe.
-Shinichi que te parece hacer el cateo al mismo tiempo en que trasladen a Kid a las oficinas de la policía Metropolitana, ellos seguramente atacaran y si ellos quieren intercambiarme, seguramente llevarán a Aoko.
No le gusta mucho esa idea a Kudo, pero es la mejor carta que pueden usar, le comenta al inspector, lo que han planeado, a lo que Megure le responde que lo tendrán listo en unos días, el detective dice que eso es suficiente, le avisara a Saguru que filtre la información, también le informa de quien es el topo, dejando sorprendido a Megure y molesto. Esta decido acabarán con esa organización de una vez por todas. El inspector se despide, no sin antes decirles que los espera en la estación.
Es así como el plan comienza, mandándole el mensaje a Saguru, por otro lado, Aoko Nakamori será trasladada a otro lugar dejando esa cabaña en medio del bosque, cuanto estaba caminando, logra sentir levemente la presencia de Kaito por lo que detiene su caminar, acaso a venido ha rescatarla, sin embargo, no dura mucho ,pues, en un instante desaparece. Tan concentrada estaba que no escucha que le hablan, no es hasta que siente como la jalan que reacciona.
-Por qué te detienes camina. Le dice la mujer que la cuidaba.
-Disculpa. La mujer la mira y le dice que continué. -El camino que se ve por ahí lo siguen usando.
Loxoceles mira el lugar que la castaña le menciona. -Ese camino ha dejado de usarse hace mucho tiempo, hubo un derrumbe por lo que lo clausuraron. ¿Por qué preguntas?
- Creí que había alguien ahí.
-A menos que sea un fantasma lo que hayas sentido, por qué no hay manera que este alguien vivo.
-Loxoceles, que diablos estás haciendo, tráela arrastrando si es necesario. Shark mira a las mujeres, después de tener esa charla con la chica, la noche anterior y sorprenderse de que era nada más y nada menos que hija del inspector del caso de Kid, pensó que la suerte le sonreía, gracias a que le enviaron la foto de búsqueda de Aoko Nakamori y no dudara en utilizarla si con eso elimina a esa peste.
De pronto siente su móvil vibrar y no puede evitar sonreír, por fin podrá terminar con esa molestia llamada Kaito Kid. Todos suben a las camionetas y se alejan del lugar, solo una persona mira a la ventana, en concreto a ese camino donde sintió a Kaito.
Continuará...